España/26 de Junio de 2017/La Información
El Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) realizó este jueves un llamamiento para “remover conciencias” en España, siguiendo el ejemplo de Portugal, en lo que se refiere a la implantación de un único modelo de educación inclusiva para el alumnado con discapacidad.Así lo manifestó el presidente del Cermi, Luis Cayo Pérez Bueno, durante la conferencia ‘La educación inclusiva en Portugal. Un caso de éxito’, impartida por la secretaria de Estado para la Inclusión de las Personas con Discapacidad del Ministerio de Trabajo, Solidaridad y Seguridad Social de la República Portuguesa, Ana Sofía Antunes.
El acto se celebró en la sede de Fundación ONCE y contó con la participación, además, de Ana Peláez, vicepresidenta del Foro Europeo de la Discapacidad (EDF); Pilar Villarino, directora ejecutiva del Cermi Estatal, y Ana Sofía Carvalosa, consejera de la Embajada portuguesa en España.El presidente del Cermi celebró que en Portugal, pese al modelo implantado, “no se sientan complacidos por los resultados y que estén pensando en mejorar, diagnosticando previamente los déficits. Hay ambición de mejora casi rozando la perfección”. Ana Peláez, por su parte, puso en valor el “compromiso” de la secretaria de Estado portuguesa, “con el que nos ha venido demostrando cómo entendía ella la política social”, y apuntó que la ONCE y su Fundación están al servicio de Portugal para seguir colaborando en el futuro.
Asimismo, Peláez explicó que durante sus ocho años de trabajo en Naciones Unidas “no se dudó en considerar el ejemplo de Portugal para ofrecer una guía a otros muchos Estados que no llegaban a ese nivel de compromiso”.En esta línea, la consejera de la Embajada de Portugal en España declaró que “una de las características que puede diferenciar a Portugal de muchos países es que tenemos una Secretaría de Estado específica sobre discapacidad”.Mientras, la directora ejecutiva del Cermi, además de trasladar las condolencias del movimiento de la discapacidad español por las víctimas del incendio que ha tenido lugar en el país vecino, señaló que el sistema de educación inclusiva en Portugal “supone, para nosotros, un buen modelo exportable para la defensa de los derechos fundamentales de las personas con discapacidad”. MODELO PORTUGUÉS.
En el transcurso de su ponencia, la secretaria de Estado de Inclusión del Ejecutivo portugués enumeró las claves del modelo implantado en su país, apuntando que “la preocupación por la inclusión de las personas con discapacidad en los centros de enseñanza ordinarios no es para nosotros algo nuevo, sino que ha sido un asunto asumido durante las últimas décadas en el seno de los diferentes gobiernos. Hemos querido recorrer un camino con pasos pequeños pero seguros”.En todo caso, Ana Sofía Antunes explicó que hasta 1974, para las instituciones la educación en general y la de las personas con discapacidad “no era ni mucho menos una prioridad”, sino que fue a partir de la instauración de la democracia cuando empezó a abordarse.
Así, recordó que la primera ley que afrontaba la necesidad de escolarizar a todos los menores con discapacidad e ir trasladándolos a la educación ordinaria se aprobó en 1977, “aunque seguía centrada en un modelo médico, basado en el etiquetado del alumnado, haciendo diferenciación entre los que eran escolarizables y los que no».Las dos leyes posteriores fueron la de 1991, “avanzada para su época pero con muchas carencias”, y la de 2008, que fue precedida de la creación de un grupo de trabajo con profesionales de diferentes ámbitos que pusieron las bases para el texto legal que vio la luz tres años después.Según detalló, en la segunda mitad de los 90 todavía había un 20% del alumnado con discapacidad que estaba escolarizado en colegios segregados, proporción que en 2009 era del 2%. En la actualidad, estimó que el dato ronda el 1,2%. “Se trata, en general, de casos con menores que tienen graves problemas de salud. Si bien no renunciamos a seguir reduciendo esta cifra, la prioridad es seguir mejorando la calidad de la atención que reciben los alumnos con discapacidad que ya son escolarizados en las escuelas ordinarias”, agregó Ana Sofía Antunes.
Agrupar recursos y personal para atender a personas con diferentes discapacidades en algunos centros educativos de cada zona geográfica para que haya cerca de cada familia un colegio adecuado; reclutar profesores expertos en diferentes discapacidades; ir derivando alumnos con adaptación curricular al conjunto de asignaturas que siguen el resto de sus compañeros, o haber reconvertido al personal y los recursos existentes en los centros segregados que se han cerrado para que sigan siendo útiles en los colegios e institutos ordinarios son algunas de las características del sistema educativo portugués enumeradas por Antunes durante su discurso.
Por último, hizo hincapié en los puntos que quedan por mejorar, como el hecho de que en ocasiones haya alumnos que permanecen más tiempo del necesario en las unidades de currículos alternativos, o que si bien se puede hablar de verdadera inclusión de alumnos con discapacidad sensorial o física, “tengo dudas” al hacerlo de quienes tienen discapacidad intelectual y del desarrollo.“Portugal tiene una escuela inclusiva para muchos e integradora para algunos, por lo que es un modelo bueno que presenta lagunas”, enfatizó Antunes, al tiempo que explicó que actualmente se está trabajando en una nueva ley de educación inclusiva que corrija los errores del modelo de 2008.
Fuente: http://www.lainformacion.com/educacion/escuelas/DISCAPACIDAD-CONCIENCIAS-PORTUGAL-INCLUSION-EDUCATIVA_0_1037898115.html