Cuba/07 de Noviembre de 2016/Prensa Latina
El evento, que se desarrolló en Cuba del 1 al 4 de noviembre, tuvo su actividad principal la víspera en la Plaza Ignacio Agramante de la Universidad de La Habana, desde donde representantes de la sociedad civil cubana denunciaron la instauración de los gobiernos de derecha en la región con el apoyo de Washington.
También expresaron su solidaridad con los pueblos latinoamericanos en sus luchas contra la discriminación, el feminicidio, los tratados de libre comercio, el empuje de las tasnacionales, la criminalización de las protestas populares y el asesinato de líderes comunitarios.
En dicha cita, Jennifer Bello, presidenta de la Federación de Estudiantes Universitarios(FEU), afirmó que América toda protagoniza un nuevo llamado contra las formas en que se expresa la injerencia imperial en el continente.
La también integrante del Consejo de Estado advirtió que el auge de la derecha debilita cualquier proyecto de nación que lleve como bandera el humanismo, la inclusión, la paz, la soberanía y la equidad.
En tanto, los pobladores de la localidad de Caimanera, limítrofe con la ilegal base naval que Estados Unidos mantiene en el oriente de Cuba, protagonizaron protestas antineoliberales.
Estudiantes y Miembros del Comité de Solidaridad y Lucha por la Democracia y Contra el Neoliberalismo exigieron la devolución del territorio cubano que ocupa desde 1903 el enclave militar norteamericano, convertido desde a inicios de este siglo en un centro de detención y tortura.
La Jornada en Cuba se replicó en medios alternativos como en la página web seguimosenlucha.wordpress.com; la red social Facebook, Jornada Continental por la Democracia y Contra el Neoliberalismo; y en Twitter con los usuarios @seguimos_lucha y @MariaSilvita_95 y los hashtag #jornadacontinental, #cubaesnuestra y #seguimosenlucha, de acuerdo con los organizadores.
Su precedente fue el encuentro hemisférico de La Habana en noviembre de 2015 que se desarrolló para celebrar los 10 años de la derrota del ALCA en la Cumbre de los Pueblos de Mar del Plata, Argentina.
Allí se definieron como ejes la lucha contra el libre comercio y las trasnacionales, por la profundización de los procesos democráticos, la defensa de las soberanías y la integración desde los pueblos.