Por: Fran Navarro
Historiador y experto en documentación
La editorial Pinolia publica el libro ‘Filosofía medieval’. Un grupo de especialistas coordinados por Rodrigo Menchón repasa el conflicto entre fe y razón de los pensadores de la época.
La Edad Media sigue soportando una concepción errónea en la cultura popular. El cine y las novelas continúan mostrándola como una época atrasada y oscura, un mero parón en el desarrollo de la humanidad que solo vuelve a recuperar los niveles del mundo clásico en época moderna. Nada más lejos de la realidad, y para desmontar esta visión no hay más que acercarse a obras de divulgación como la que aquí presentamos. La Edad Media contó con pensadores tan importantes que sus reflexiones configuraron la manera de entender la vida con conceptos que han sobrevivido hasta tiempos recientes en el mundo occidental. De hecho, no solo hubo pensadores, sino que contamos con obras medievales firmadas por mujeres. Y es que, a pesar de los límites impuestos a las mujeres en la Edad Media, también hubo pensadoras.
Hildegarda de Bingen recibe una inspiración divina en una miniatura del Codex of Liber Scivias. Wikimedia
Y, a pesar de todo, mujeres intelectuales en la Edad Media
Rodrigo Menchón ha coordinado una obra esencial para conocer la historia y el pensamiento filosófico medieval en Occidente en la que, además de los conceptos clave y los protagonistas más importantes, se han tratado puntos de vista inusuales e incluso inéditos. Uno de los casos más curiosos es el capítulo dedicado a las mujeres (y filósofas) de la Edad Media. Sandra Ferrer, especialista en la divulgación de la historia de la mujer, es la autora que nos descubre uno de los rincones más oscuros dentro del ámbito que nos ocupa en la obra. Según la autora:
“La Edad Media esconde una brillante tradición filosófica femenina protagonizada principalmente por mujeres religiosas que hicieron de la mística una manera de expresar sus pensamientos”.
Durante el medievo, la filosofía tenía una relación muy cercana a la teología, cuestiones que eran asunto de religiosos y eruditos, pero estaban vetadas a las mujeres, consideradas por entonces incapaces de razonar. Al menos en lo que a la corriente filosófica más extendida se refería, la escolástica, pero las mujeres se insertaron en un movimiento distinto: la mística, “una filosofía del alma abierta”.
Las universidades prohibían la entrada a las mujeres, pero muchas de ellas tuvieron acceso a bibliotecas, bien por una privilegiada posición en la nobleza, bien por una vida en clausura en monasterios y conventos con oportunidades de adquirir conocimiento y tiempo para reflexionar. Algunas de ellas, con las limitaciones de la época y aun negada toda oportunidad de reconocimiento, lograron ser aceptadas:
“Así pues, amparados en el consuelo de la «simplicidad» y la «sensibilidad» femenina, teólogos y eruditos aceptaron a estas mujeres que en realidad eran figuras sabias, de profundo intelecto y conocimiento”.
Filósofas medievales
Sandra Ferrer nos presenta la historia de cuatro pensadoras destacadas de la Edad Media. Hildegarda de Bingen (1098-1179) se ganó el derecho a formar parte de la breve lista de Doctoras de la Iglesia. Ingresó en un convento obligada por su padre, la historia de muchas mujeres de la época, en cambio, ella jugó bien sus cartas.
“Escribió sobre ciencia, compuso piezas musicales, definió una lengua propia, asesoró a emperadores y papas, iluminó sus manuscritos y dejó una amplia producción mística”.
En sus obras, mostró una fuerza femenina desconocida en la teología de la época, argumentado incluso que “el amor de Dios era un amor maternal, un amor que da vida”.
Eloísa del Paráclito (1101-1164) mantuvo una relación epistolar con Pedro Abelardo en la que profundizaron en cuestiones teológicas y morales. Gertrudis de Hackeborn (1232-1292) fue la abadesa que hizo del convento alemán de Helfta uno de los centros culturales y místicos más destacados de su tiempo desde el que varias mujeres dejaron constancia de su sabiduría.
Y, desde luego, no todas salieron ilesas de sus ocupaciones intelectuales. Margarita Porete (1250-1310) fue quemada en la hoguera por su obra El espejo de las almas simples, donde habló de libertad para elevar el alma a Dios.
‘Filosofía medieval’, coordinado por Rodrigo Menchón
La editorial Pinolia publica Filosofía Medieval, “un compendio actual del pensamiento occidental desde los orígenes del cristianismo hasta Guillermo de Ockham”. Una obra necesaria que corta con la idea de que la Edad Media se limitó a absorber el bagaje intelectual de la Antigüedad y ponerlo al servicio de los tres grandes monoteísmos, sino que fue más allá y entre sus páginas se pretende “mostrar toda la riqueza de esta época -la más larga de las cuatro en las que se suele dividir la historia de la filosofía (antigua, medieval, moderna y contemporánea)- planteado como un estudio minucioso tanto a nivel filosófico como histórico”.
Libro Filosofía Medieval
Filosofía Medieval
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Sobre Rodrigo Menchón
Licenciado en Filosofía por la UNED, profesor de Bachillerato en el IES Gregorio Marañón de Madrid. Ha coordinado esta obra, así como los dos números para la revista Muy Historia de las ediciones coleccionistas Muy Sophia, donde se tratan la filosofía antigua y medieval. Es autor de artículos y ensayos de filosofía contemporánea como «Seamos realistas, pidamos lo imposible. Sobre la obra de Slavoj Žižek, publicado en Tiempo devorado: revista de historia actual, «La filosofía del siglo XXI», en Muy Interesante y «El retorno de lo reprimido de la metafísica», en Realismo especulativo: un taller de un día.
Fuente: https://www.muyinteresante.es/historia/61594.html