31 de mayo de 2016/Eduardo Archanco/Entrevista
La educación en los colegios siempre ha querido adoptar las nuevas tecnologías con mayor o menor entusiasmo. Ahora nos parecerá absurdo, pero en los años 20 del siglo pasado y con la popularización de la radio, comenzaron a surgir clases que se retransmitían por radio a los estudiantes que quisieran escucharlas. Posteriormente vinieron los retroproyectores, llamados a revolucionar las clases de nuevo diez años después.
Los auriculares y los vídeos llegaron en la década de los 50, seguidos de la calculadora y la fotocopiadora unas décadas más adelante. Todas estas tecnologías estaban llamadas a cambiar la educación para siempre. Algunas lo consiguieron. Otras no. Las que triunfaron no lo hicieron por el simple hecho de aparecer en escena sino que trajeron consigo un cambio cultural que afectó a todos los involucrados: estudiantes, profesorado, colegios, administraciones, padres y gobiernos.
Con la aparición de la informática y dispositivos como el iPad, la historia se ha repetido. Algunos colegios han comprado dispositivos como el tablet de Apple pensando que eran el futuro, sin saber muy bien por qué ni en qué podían ayudarles ni para qué podían servir. Otros implantaron esta herramienta con éxito. Hoy tenemos la oportunidad de charlar con una persona que forma parte de este último grupo.
Entrevista a Fraser Speirs, responsable de Informática y IT
Fraser Speirs es un reconocido experto en la implantación de sistemas informáticos en escuelas. Es el responsable de Informática y IT de la Cedars School of Excellence en Greenock, Escocia. En ella, lideró el despliegue del primer programa mundial de iPad 1:1 (un iPad por cada estudiante).
Este programa es todo un éxito, ¿puedes contarnos cómo se fraguó el proyecto?
Estábamos buscando un dispositivo que pudiera reducir la presión en nuestra infraestructura tecnológica, que se componía de sobremesas y portátiles en un ratio de 1:4 (es decir, 1 ordenador por cada 4 niños). Estuvimos evaluando varios dispositivos a lo largo de los años 2008-2010 incluyendo iPods (¡en serio!), netbooks y el iPod Touch antes de elegir el iPad finalmente.
Sustituir los libros de texto suena como una buena idea para mejorar la educación. ¿Es tan fácil como darles un iPad a los estudiantes y los profesores? ¿Cuáles fueron los desafíos del despliegue en tu escuela?
No hay una receta mágica. Un cambio de esta envergadura es un problema de cambio cultural, no un problema tecnológico. No hay una manera sencilla de «mejorar la educación», especialmente en un mundo donde nadie parece estar seguro de lo que quieren del sistema educativo.
Supongo que os enfrentasteis a algún tipo de rechazo por parte de los profesores, dado que cambiar sus herramientas y métodos de enseñanza puede llegar a ser difícil para algunas personas. ¿Cómo reaccionaron los profesores al principio? ¿Qué hicisteis para resolver sus preocupaciones?
Bueno, la verdad es que ya habíamos resuelto la parte difícil con anterioridad. Los profesores querían acceso a los ordenadores en sus aulas, pero no teníamos suficientes. Lo que en nuestro caso parece un éxito repentino, fue en realidad el resultado de un esfuerzo de 10 años para construir la cultura primero y entonces, traer un dispositivo como el iPad.
Todos hemos visto los típicos vídeos de niños pequeños utilizando un iPad con soltura. ¿Vuestro programa tuvo algún tipo de rechazo por su parte?
Ningún niño nos ha pedido que le retiráramos el iPad.
Sustituir los libros de texto y adaptarlos a un iPad no es suficiente. Es como darle una caña de pescar a alguien que nunca ha ido de pesca antes. ¿Necesitasteis algún tipo de cambio cultural para tener éxito? ¿Algún tipo de formación para estudiantes y profesores?
Pocos sistemas educativos están tan enfocados en el libro de texto como el estadounidense, de modo que la pregunta de «sustituir libros por iPad» no es un problema global. Tiene que haber formación, por supuesto. Es importante centrarse en la gestión de las clases y la propia competencia técnica del profesor así como su experiencia.
Es demasiado frecuente que los profesores argumenten que «no se trata de la tecnología» para decir que no necesitan aprenderla. Opino lo contrario. Si de verdad quieres que en tu escuela «no se trate de la tecnología», será mejor que seas un absoluto experto en esa tecnología.
Estoy seguro de que has escuchado lo que sucedió con el despliegue de iPad en las escuelas de Maine en EEUU, donde los han sustituido por Mac. ¿Por qué crees que ha sucedido esto? ¿Fue culpa del dispositivo, el software, la falta de un teclado físico y un ratón? ¿O era otra cosa totalmente diferente?
Es muy difícil decirlo. Todo lo que sabemos es el resultado de una encuesta que probablemente se realizó después de que la crisis ya se hubiera desarrollado y un par de citas de profesores descontentos.
La cosa es que bien podría ser un problema con el iPad. El iPad es lo que es, pero la pregunta importante es: ¿cómo es posible que los profesores y la administración se sorprendieran por las capacidades del iPad después de que los hubieran comprado? No es como si hiciera falta hacer una investigación sobre el iPad más allá de comprar unos cuantos y probándolos.
Todo lo que puedo decir es que los resultados han sido diferentes en otros lugares. Mis estudiantes no opinan que procesar textos sea «imposible» en el iPad.
¿Cómo de importante es la cultura y la formación adecuada tanto al profesorado y los estudiantes para que este tipo de despliegues tengan éxito?
La cultura lo es todo y no puedes imbuirla en los profesores con formación. La formación es importante, sí, pero todo lo que sabemos sobre la mejora de la escuela comienza y termina con el liderazgo. No importa que sea un nuevo esquema de aprendizaje de la lectura, un nuevo equipo de deportes o el despliegue del iPad. Si ahí no está el liderazgo de la escuela, no se producirá el cambio.
¿Qué recomendarías a las escuelas que están considerando adoptar el iPad?
Que hablen conmigo antes.
¿Cuál es tu opinión sobre los perfiles múltiples en iOS 9.3 para educación?
El iPad compartido en iOS 9.3 es una clara reacción al éxito de los Chromebooks en las escuelas de EEUU durante los últimos dos años. Mucha gente que escucha mi historia se marchan creyendo que el «iPad» en la «historia del iPad 1:1» es la parte más importante. Pero se equivocan. La más importante es el «1:1» [en referencia a 1 iPad por cada estudiante].
El iPad es un gran dispositivo, pero si tuviera que elegir entre un iPad compartido y un Chromebook 1:1, hubiera elegido el Chromebook en un instante.
Última pregunta. Si pudieras pedirle a Apple una única mejora a iOS, ¿cuál sería?
La habilidad de retransmitir mi pantalla del iPad a todos los iPad de la clase. Como administrador de una escuela, les pediría que el hardware fuera más barato. Como administrador de sistemas de IT, les pediría la posibilidad de poner un tope al brillo de la pantalla del iPad. ¡A los niños les encantan las pantallas brillantes y con eso acaban con la batería!
Fuente: http://www.applesfera.com/ipad/el-ipad-en-la-educacion-es-un-cambio-cultural-no-un-problema-tecnologico-entrevista-a-fraser-speirs
Imagen: http://i.blogs.es/a5c072/6660141777_c1a3ab7041_o/2560_3000.jpg