Page 221 of 571
1 219 220 221 222 223 571

3 usos que deberías saber sobre los canales Backchannel en la educación

Chile / 13 de marzo de 2019 / Autor: Redacción / Fuente: Universia

Comparte este contenido:

Libro: Educación Prenatal y Pedagogía Prenatal: Nuevas perspectivas para la investigación, la enseñanza y la formación (PDF)

Iberoamérica / 13 de marzo de 2019 / Coordinadores: Agustín de la Herrán Gascón, Manuel Hurtado Fernández y Pablo García Sempere / Fuente: ANEP

Este verano ha nacido un magníficoproyecto internacional en el terreno de la Educación Prenatal y la Pedagogía Prenatal en forma de este precioso libro de 447 páginas, con Agustín de la Herrán GascónManuel Hurtado Fernández y Pablo José García Sempere a cargo de la coordinación.
Educación Prenatal y Pedagogía Prenatal: Nuevas perspectivas para la investigación, la enseñanza y la formación es una nutrida compilación de trabajos de diversa índole todos directamente relacionados con la Educación y especialmente la Pedagogía que vienen a promover la reflexión y eldebate en torno a la importancia del periodo prenatal como condicionante fundamental en la vida de cada ser humano.
Publicado por la Editorial REDIPE (Red Iberoamericana de Pedagogía) gracias al apoyo de su director Julio Arboleda, va a ser una herramienta indispensable para favorecer e impulsar la Educación Prenatal y la emergente Pedagogía Prenatal por todo el mundo, junto a otras propuestas y acciones como por ejemplo la creación de la Colección Internacional de Educación prenatal y Pedagogía prenatal de la cual este libro representa el tomo 1, la incorporación en todos los simposios que organice REDIPE de la línea temática Educación prenatal y Pedagogía prenatal y la realización de cursos de formación especializados.
Para ayudar a compartir el libro con el máximo de personas y eliminar las barreras técnicas y legales que dificultan su acceso, se ha publicado bajo licencia creative commons (Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0) y se puede descargar en pdf gratuitamente en el siguiente enlace:https://www.rediberoamericanadepedagogia.com/pdf/Libro-educacion-prenatal-y-pedagogia-prenatal.pdf.
Personalmente me colma de alegría presentaros en el blog La Vida Intrauterinaeste prometedor proyecto colectivo ya que tuve el gran honor de ser invitada a poder participar en él con el artículo titulado Apuntes para la formación de un educador sensible a su biografía prenatal (págs. 333-362)*. Escrito y entregado a coordinación entre enero y febrero del 2017, sentí la motivación de exponersobre la necesidad de favorecer el despertar de cada profesional de la educación a su propia vida prenatal para poder educar desde la autenticidad y ofrecer un acompañamiento integral.
Agradezco enormemente desde aquí a los coordinadores AgustínManuel Pablopor su estupenda labor y por brindarme esta maravillosa oportunidad. Y con especial cariño mi gratitud a María Jesús Blázquez por insuflarme tantos ánimos ante ese reto a contrarreloj justo en un momento personal delicado. También agradecer a la Editorial REDIPE por creer en estos temas, apostar firmemente por este proyecto y ayudarlo a ver la luz.
Adjunto el índice de mi artículo y seguidamente el listado completo de capítulos y su autoría. ¡Que los disfrutéis!
ÍNDICE del artículo: Apuntes para la formación de un educador sensible a su biografía prenatal, de Lídia Estany Estany (p. 333-362)

Resumen

1. Introducción

2. El ser humano integral
2.1. La biografía de cada persona empieza con su concepción
2.2. Guardamos memoria de nuestro primer día de vida
2.3. El ser humano es un proceso en el tiempo
2.4. El modelo integral del desarrollo temprano
2.5. Ambiente ¿armónico o violento?: crecer versus protegerse
2.6. La necesidad de comprender el dolor del bebé prenatal

3. Shock y trauma prenatal y perinatal
3.1. El periodo crítico de la organogénesis
3.2. Shock y trauma en la preconcepción y concepción
3.3. Shock y trauma en la anidación y durante la gestación
3.4. Shock y trauma en el nacimiento y alrededores
3.5. ¿Se basa el actual modelo de desarrollo infantil en niños sanos
o en niños traumatizados?

4. Ejemplos de huellas antes de nacer
4.1. No a la vida
4.2. Sí a la vida condicionado
4.3. Sí a la vida con obstáculos

5. Ejemplos de huellas durante y alrededor del nacimiento

6. Necesidades básicas del bebé prenatal y perinatal

7. Autoconocimiento
7.1. El poder del amor
7.2. Terapia
7.3. La naturaleza del embarazo y el parto como modelo
7.4. Formación
7.5. La dimensión espiritual

8. Conclusiones

9. Referencias

Relación de todos los artículos que componen el libro y su autoría:

1- Oportunidad y continuidad de la educación prenatalCarmen de Andrés ViloriaPilar Gútiez Cuevas(25-53)

2- Una mirada interdisciplinar para la educación prenatal: centros de atención primaria, escuelas infantiles y familiasMaría Pilar Rodrigo Moriche
(57-77)

3- Cuándo empieza la educación prenatalEleanor Madruga Luzes(79-99)

4- Nuevos fundamentos biológicos para la práctica de la educación prenatal;María Jesús Blázquez y Agustín de la Herrán Gascón (101-130)

5- Pedagogía prenatal: estudio comparativo desde la visión de padres e hijos;
María Cinta Aguaded Gómez y Mª Auxiliadora Pascual Polonio (133-154)

6- Reflexiones en torno a una didáctica de la edad prenatalMaría Luisa García RodríguezAna María Pinto LlorenteMarcos Cabezas González y Sonia Casillas Martín (155-185)

7- Educación prenatal, adolescentes y sistema educativo: una educación en valores desde las raícesCarmen Carballo Basadre (187-214)

8- Educación prenatal y enfermedades raras. Estudio de un caso: el síndrome WeaverSilvia Moratalla IsasiCristina Sánchez Romero (215-243)

9- Maternidad y educación prenatalConcepción Sánchez Blanco (245-272)

10- Educación prenatal y lactancia materna: apoyar a las madres en los inconvenientes y dificultades de sus lactanciasMª Dolores Pérez Bravo yAmparo Moreno Hernández (273-302)

11- Arteterapia para la maternidad. Aportaciones del arte a la educación prenatal y parentalLucía Hervás Hermida (303-331)

12- Apuntes para la formación de un educador sensible a su biografía prenatal; Lídia Estany Estany (333-362)

13- Formación en educación prenatal para profesionales de la saludLavinia Mihaela Nanu (363-396)

14- Acompañamiento pedagógico durante la etapa prenatal, nacimiento y postnatal desde la figura de la «doula»: una revisión de la investigación;Bianca Fiorella Serrano Manzano y Agnese Bosisio (397-430)

15- Educación perinatal con sanitarios de un servicio de neonatologíaEvelyn Cano Giménez (431-445)

———

NOTAS (*) 
Un guiño cósmico que mi capítulo empiece sincrónicamente en la página 333…, ya que la trinidad inherente a la concepción humana es un concepto capital a considerar especialmente en la prevención del shock y trauma (ver Familia es 3 yAdivina Adivinanza)

Links para la descarga:
http://anepeducacionprenatal.org/wp-content/uploads/2018/08/Libro-educacion-prenatal-y-pedagogia-prenatal.pdf
ó
https://redipe.org/pdf/Libro-educacion-prenatal-y-pedagogia-prenatal.pdf
Fuente de la Reseña:
https://lavidaintrauterina.blogspot.com/2018/09/el-libro-educacion-prenatal-y-pedagogia.html
ove/mahv
Comparte este contenido:

Libro: La calidad educativa, un eslabón del mercantilismo y la explotación (PDF)

México / 12 de marzo de 2019 / Autores: José de Jesús Valdovinos Capistrán, Eleticia Rincón Velazco, Carmen Tapia Salgado y Perla Yvette Estrada González / Fuente: Centro Rius

 

Esta es una producción editorial del Centro Internacional de Pensamiento Crítico «Eduardo del Río, Rius».

Éste libro forma parte de la política de acceso libre que promueve el CINPECER.

 

Link para la descarga:

EDUCATIVA ESLABON (1)

 

Comparte este contenido:

Libro: Inclusión del análisis de género en la ciencia (PDF)

Autoras o Coordinadoras: Norma Blazquez Graf y Ana Celia Chapa Romero (coordinadoras)

Año: 2018

Colecciones Alternativas

Páginas: 188 pp

País: México

ISBN: 978-607-30-1234-8

Sinopsis: Los estudios de ciencia y género han cuestionado y demostrado ausencias, silencios y distorsiones en el conocimiento que surge de evidencias basadas sólo en una porción de la población humana, mostrando que es errónea la equivalencia humano-masculino como supuesto básico del conocimiento científico. La inclusión del análisis de sexo y género en la ciencia, permite desarrollar una idea del mundo que toma en cuenta a las mujeres y al hacerlo corrige las distorsiones, sesgos y explicaciones erróneas que se elaboran en los diversos campos del conocimiento. Se cuestiona lo aceptado ampliamente y se desarrollan alternativas correctivas mediante un gran repertorio de herramientas de análisis y técnicas de investigación que señalan y corrigen representaciones inadecuadas, argumentos fallidos, prejuicios, distorsiones y desinformación en conceptos, teorías y métodos de investigación. Los textos que constituyen este libro, son resultado del trabajo desarrollado dentro de los grupos de investigación de la Red Mexicana de Ciencia, Tecnología y Género. Se trata de una selección de investigaciones realizadas en el país, en las que se muestran los efectos positivos de la inclusión del análisis de género en diversas áreas de la ciencia y la tecnología, como la salud, la educación, las matemáticas, las tecnologías reproductivas y de comunicación, la sustentabilidad, el agua y la seguridad alimentaria

Descargar aquí: http://computo.ceiich.unam.mx/webceiich/docs/libro/inclusion.pdf

Comparte este contenido:

Colombia: Nace AbacKo, inmersión virtual para educar

Por: .elnuevosiglo.com.

Panela camina sobre un mapa virtual de Colombia. A medida que pasa por las diferentes regiones, escucha la música característica de cada una y los sonidos propios de los ecosistemas locales. Cuando llega a Cali, se despliega la aplicación “Pandebonus”, que facilita entender la multiplicación a través de las proporciones. Más al norte, en Buenaventura, la espera el “Politrén”, que pone a su disposición juegos de polinomios.

Junto a otras tres Apps, estas herramientas integran “Colombianautas”, la plataforma digital creada por AbacKo como uno de los accesos a sus productos y servicios. Así lo explica Óscar Checa Cerón, director de la spin-off y profesor de la U.N. Sede Palmira: “nuestra apuesta es por mejorar la calidad de la educación a través de herramientas digitales de inmersión que aporten dinámicas de pedagogía complementarias. Para ello contamos con el apoyo de docentes, estudiantes e integrantes de la comunidad educativa”.

La spin-off (iniciativa empresarial originada en una universidad para comercializar los resultados de sus investigaciones) cuenta con tres componentes dentro de su portafolio: la plataforma “Colombianautas”, los servicios de consultoría y el diseño creativo de experiencias de formación, del cual se originan las aplicaciones y los cinco objetos virtuales de funcionamiento lineal.

“Partimos de metodologías de educación que encontramos escalables a nivel físico, digital, en realidad virtual y en realidad aumentada”, explica el profesor Checa. Como insumos cuentan con los estudios realizados por el grupo de investigación Celab, los trabajos de grado de la Maestría en Enseñanza de las Ciencias Exactas y Naturales de la U.N. Sede Palmira, y los aportes de la Dirección Nacional de Investigación Académica.

A partir de ahí se han identificado necesidades específicas de aprendizaje como la multiplicación, los polinomios y los fraccionarios, que han venido perfilando los contenidos.

Transmitiendo conocimientos

Las necesidades de acción de AbacKo también se proyectan alrededor de la transferencia de conocimientos y protocolos desde las empresas hacia sus empleados, y en la socialización de información de interés de las organizaciones hacia las comunidades en el territorio colombiano.

“Somos un equipo interdisciplinar capaz de adelantar todos los eslabones en la elaboración de estas herramientas virtuales. A través del desarrollo gráfico, la gamificación (traslado de la dinámica de los juegos al contexto educativo) y la narrativa podemos hacer más asequible la información”, asegura el profesor Daniel Reyes Leguizamón, de Diseño Industrial de la U.N. Sede Palmira.

En cuanto al componente de consultorías, se trabaja en la socialización de metodologías para crear dinámicas que faciliten los aprendizajes dentro y fuera del aula de clases. A manera de piloto, entre septiembre y noviembre de 2018 los investigadores de AbacKo realizaron un proceso de capacitación en el municipio de Corinto, Cauca, con 42 profesores de colegios de la región.

El objetivo de estas jornadas es apoyar a los docentes, ayudarlos a llegar a ideas sobre prácticas de pedagogía y asesorarlos para convertir esas propuestas en potenciales productos.

“No se trata de salir a vender aplicaciones o softwares. Buscamos que las herramientas educativas se utilicen sin costo alguno, especialmente en aquellas regiones apartadas de los centros económicos del país”, explica Johana Ramírez, de la empresa Tecnnova, quien acompaña el proceso. Según dice, los ingresos para la iniciativa empresarial provendrán de patrocinadores como fundaciones, empresas e instituciones educativas.

En un primer impulso, el equipo de AbacKo consiguió ser uno de los ganadores de la convocatoria Spin-off TIC, abierta por el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (MinTIC) a partir de los fundamentos para la creación de spin-offsde la ley 1838 de 2017. “Como resultado de la convocatoria, el 70 % de esta primera etapa de AbacKo es financiada por el Gobierno, y el 30 % restante lo aporta la Universidad, que además participa con el espacio de trabajo, la infraestructura y los investigadores”, precisa el profesor Neil Guerrero, de la U.N. Sede Manizales, quien también integra el equipo del proyecto.

Así mismo, el MinTIC realiza un acompañamiento al desarrollo de políticas para la constitución y operación de las spin-off en la Universidad, a la estructuración del modelo de negocio, a la formulación de la identidad corporativa, a la gestión comercial y al apoyo jurídico.

“El proyecto cuenta con la sostenibilidad que le garantiza la Universidad. Este 2019 continuará en proceso de incubación y luego avanzaremos para obtener la personería jurídica. Nos proyectamos a generar recursos económicos para la Universidad y para la reinversión en AbacKo”, sostiene el director Checa.

Fuente de la reseña: https://www.elnuevosiglo.com.co/articulos/02-2019-nace-abacko-inmersion-virtual-al-servicio-de-educacion

Comparte este contenido:

Los peligros de nacer niña en distintas partes del mundo

África/Fuente: National Geographic

Violaciones, mutilación genital, represión, embarazo precoz… El estremecedor relato de nacer niña en muchas partes del planeta

 MG 1143. Mutilación genital

1 / 11

Mutilación genital

Una niña es sometida a una mutilación genital durante una ceremonia colectiva celebrada en un colegio de Bandung, Indonesia, en 2006. Según Unicef, al menos 200 millones de niñas y mujeres de unos 30 países –entre ellas alrededor de la mitad de las indonesias menores de 12 años– han sufrido la mutilación genital. La práctica sigue realizándose, y no siempre con las condiciones higiénicas adecuadas.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160808 18886. Sobrevivir a un ataque con ácido

2 / 11

Sobrevivir a un ataque con ácido

Ritu Saini, de 21 años de edad (en primer plano), y Rupa, de 23, disfrutan de las lluvias del monzón en lo alto de un tejado de Agra, en la India. Ambas chicas sobrevivieron a ataques con ácido. Cientos de mujeres y niñas son rociadas con ácido en este país. Ritu, anteriormente jugadora de volleyball, fue atacada por su primo. Después de diversas reconstrucciones quirúrgicas perdió su ojo izquierdo. Rupa fue agredida a los 15 años. La asociación Stop Acid Attacks aboga por el desarrollo de políticas destinadas a las supervivientes estos ataques.

 MG 1143. Mutilación genital

1 / 11

Mutilación genital

Una niña es sometida a una mutilación genital durante una ceremonia colectiva celebrada en un colegio de Bandung, Indonesia, en 2006. Según Unicef, al menos 200 millones de niñas y mujeres de unos 30 países –entre ellas alrededor de la mitad de las indonesias menores de 12 años– han sufrido la mutilación genital. La práctica sigue realizándose, y no siempre con las condiciones higiénicas adecuadas.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160808 18886. Sobrevivir a un ataque con ácido

2 / 11

Sobrevivir a un ataque con ácido

Ritu Saini, de 21 años de edad (en primer plano), y Rupa, de 23, disfrutan de las lluvias del monzón en lo alto de un tejado de Agra, en la India. Ambas chicas sobrevivieron a ataques con ácido. Cientos de mujeres y niñas son rociadas con ácido en este país. Ritu, anteriormente jugadora de volleyball, fue atacada por su primo. Después de diversas reconstrucciones quirúrgicas perdió su ojo izquierdo. Rupa fue agredida a los 15 años. La asociación Stop Acid Attacks aboga por el desarrollo de políticas destinadas a las supervivientes estos ataques.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160519 00645. Una ceremonia alternativa

3 / 11

Una ceremonia alternativa

Niñas de la aldea sierraleonesa de Masanga toman parte en ceremonias Bondo alternativas en las que se inician como mujeres adultas sin someterse a la mutilación genital. Más de 600 niñas han participado en ellas desde 2010.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160808 11470. Vivir entre la basura

4 / 11

Vivir entre la basura

El vertedero de Ghazipur, un basurero de casi 30 hectáreas en Delhi, es el lugar que recorre Zarina, de siete años, en busca de objetos que revender. Al igual que esta niña de la India, otras muchas en todo el mundo viven en la pobreza y apenas tienen acceso a la educación.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160519 02561. Ritual de preparación para el matrimonio

5 / 11

Ritual de preparación para el matrimonio

Elizabeth, de 19 años, y Rebecca, de 13, bailan en un ritual Bondo en la ciudad sierraleonesa de Kabala. Según los ancianos esta ceremonia, que regula el paso de la niñez a la madurez y que tradicionalmente incluye el corte o la extirpación de los genitales externos, vincula a las chicas a su comunidad y las prepara para el matrimonio. También pretende restringir la sexualidad femenina, y causa daños físicos y psicológicos. En Sierra Leona la mayoría de las mujeres han sufrido la mutilación genital.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160519 03479. El riesgo de la falta de escolarización

6 / 11

El riesgo de la falta de escolarización

Una adolescente se toma un descanso en su venta ambulante de baratijas en Mange Bureh, sentándose a orillas de un río en el que las chicas lavan y los chicos pescan. Las niñas no escolarizadas que trabajan en las calles de Sierra Leona para contribuir a la economía familiar corren especial riesgo en un país donde los delitos contra ellas suelen quedar impunes.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160519 00846. Educación gratuita

7 / 11

Educación gratuita

Al participar en una ceremonia Bondo alternativa que no incluye la mutilación genital femenina, estas niñas de Masanga reciben educación gratuita garantizada por Masanga Assistance Education, una organización suiza sin ánimo de lucro. En la ceremonia participa una mujer que encarna el diablo del Bondo, una alta autoridad de esta sociedad secreta.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160519 04914. Camino a clase

8 / 11

 

Camino a clase

Un grupo de chicas vestidas de uniforme se dirigen a clase en una escuela metodista de Freetown, en Sierra Leona.

Foto: Stephanie Sinclair

 MG 1143. Mutilación genital

1 / 11

Mutilación genital

Una niña es sometida a una mutilación genital durante una ceremonia colectiva celebrada en un colegio de Bandung, Indonesia, en 2006. Según Unicef, al menos 200 millones de niñas y mujeres de unos 30 países –entre ellas alrededor de la mitad de las indonesias menores de 12 años– han sufrido la mutilación genital. La práctica sigue realizándose, y no siempre con las condiciones higiénicas adecuadas.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160808 18886. Sobrevivir a un ataque con ácido

2 / 11

Sobrevivir a un ataque con ácido

Ritu Saini, de 21 años de edad (en primer plano), y Rupa, de 23, disfrutan de las lluvias del monzón en lo alto de un tejado de Agra, en la India. Ambas chicas sobrevivieron a ataques con ácido. Cientos de mujeres y niñas son rociadas con ácido en este país. Ritu, anteriormente jugadora de volleyball, fue atacada por su primo. Después de diversas reconstrucciones quirúrgicas perdió su ojo izquierdo. Rupa fue agredida a los 15 años. La asociación Stop Acid Attacks aboga por el desarrollo de políticas destinadas a las supervivientes estos ataques.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160519 00645. Una ceremonia alternativa

3 / 11

Una ceremonia alternativa

Niñas de la aldea sierraleonesa de Masanga toman parte en ceremonias Bondo alternativas en las que se inician como mujeres adultas sin someterse a la mutilación genital. Más de 600 niñas han participado en ellas desde 2010.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160808 11470. Vivir entre la basura

4 / 11

Vivir entre la basura

El vertedero de Ghazipur, un basurero de casi 30 hectáreas en Delhi, es el lugar que recorre Zarina, de siete años, en busca de objetos que revender. Al igual que esta niña de la India, otras muchas en todo el mundo viven en la pobreza y apenas tienen acceso a la educación.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160519 02561. Ritual de preparación para el matrimonio

5 / 11

Ritual de preparación para el matrimonio

Elizabeth, de 19 años, y Rebecca, de 13, bailan en un ritual Bondo en la ciudad sierraleonesa de Kabala. Según los ancianos esta ceremonia, que regula el paso de la niñez a la madurez y que tradicionalmente incluye el corte o la extirpación de los genitales externos, vincula a las chicas a su comunidad y las prepara para el matrimonio. También pretende restringir la sexualidad femenina, y causa daños físicos y psicológicos. En Sierra Leona la mayoría de las mujeres han sufrido la mutilación genital.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160519 03479. El riesgo de la falta de escolarización

6 / 11

El riesgo de la falta de escolarización

Una adolescente se toma un descanso en su venta ambulante de baratijas en Mange Bureh, sentándose a orillas de un río en el que las chicas lavan y los chicos pescan. Las niñas no escolarizadas que trabajan en las calles de Sierra Leona para contribuir a la economía familiar corren especial riesgo en un país donde los delitos contra ellas suelen quedar impunes.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160519 00846. Educación gratuita

7 / 11

Educación gratuita

Al participar en una ceremonia Bondo alternativa que no incluye la mutilación genital femenina, estas niñas de Masanga reciben educación gratuita garantizada por Masanga Assistance Education, una organización suiza sin ánimo de lucro. En la ceremonia participa una mujer que encarna el diablo del Bondo, una alta autoridad de esta sociedad secreta.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160519 04914. Camino a clase

8 / 11

Camino a clase

Un grupo de chicas vestidas de uniforme se dirigen a clase en una escuela metodista de Freetown, en Sierra Leona.

 

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160808 12191. Expuestas a la violencia sexual

9 / 11

Expuestas a la violencia sexual

Aarti, de nueve años, se expone a la violencia sexual cuando vende flores en una calle de Delhi mojada por la lluvia. Pese a los riesgos que corren, millones de niños de todo el mundo trabajan para llevar dinero a casa en vez de ir al colegio.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160708 09118. Matrimonios concertados

10 / 11

Matrimonios concertados

Los matrimonios concertados son habituales en Sierra Leona. Baby Seibureh, de 17 años, y Claude Seibureh, de 48, vecinos de Freetown, se casaron en plena crisis del ébola. Cuando nació su hijo Joseph, a la madre hubo que hacerle una cesárea.

Foto: Stephanie Sinclair

MM8490 160808 16569. Lucha contra la trata sexual

11 / 11

Lucha contra la trata sexual

Rinki Kumari (en primer término) y Arti Kumari comparten un momento distendido en su habitación durante un receso de las clases que reciben en la escuela pública a la que asisten, la Kasturba Gandhi Balika Vidyalaya de Forbesganj, en la India. Un centenar de niñas de los pueblos cercanos estudian en este centro gestionado por Apne Aaap, una entidad benéfica cuya misión es poner fin a la trata sexual.

Foto: Stepnanie Sinclair

Los peligros de nacer niña en distintas partes del mundo

Sierra Leona es uno de los peores lugares del mundo para ser niña. En este país del África occidental, habitado por unos seis millones de personas, desgarrado por una cruenta guerra civil que duró más de una década y devastado por el Ébolael simple hecho de nacer niña se traduce en una vida de barreras y tradiciones que a menudo dan más valor a su cuerpo que a su mente.

La mayoría de las mujeres de Sierra Leona –el 90% según Unicef– han sido sometidas a la mutilación genital, una práctica que las inicia en la vida adulta y supuestamente las hace más deseables para el matrimonio, pero que también es un método de represión sexual profundamente arraigado en su cultura.

Casi la mitad de las chicas se casan antes de los 18 años, y muchas se quedan embarazadas mucho más jóvenes, a menudo en su segundo o tercer ciclo menstrual. Muchas son víctimas de la violencia sexual; las violaciones suelen quedar impunes. En 2013 más del 25% de las sierraleonesas de entre 15 y 19 años estaban embarazadas o ya eran madres, lo que supone una de las tasas de gestación más elevadas del mundo para esa franja de edad.

10 inventos creados por mujeres

Y demasiadas mueren en el parto: es el porcentaje más alto del mundo, según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud y otras entidades internacionales. La mutilación genital femenina puede elevar el riesgo de sufrir complicaciones obstétricas.

«Si vas a las provincias te encuentras con chicas de 13 años, de 15 años, ya casadas y con sus bebés en brazos», dice Annie Mafinda, comadrona del Rainbo Center, que ayuda a víctimas de la violencia sexual en Freetown, la capital de Sierra Leona. Muchas de las pacientes atendidas en este centro tienen entre 12 y 15 años.

La mayoría de las mujeres de Sierra Leona –el 90% según Unicef– han sido sometidas a la mutilación genital

Cuando conocí a Sarah en Freetown, una ciudad que se levanta sobre una península montañosa junto a un puerto rutilante, tenía 14 años y estaba embarazada de seis meses, aunque parecía varios años más joven. Hablaba en un susurro, era bajita y menuda, llevaba las uñas de los pies pintadas de rojo y el pelo bien recogido bajo un pañuelo de color melocotón. Me contó que la había violado un muchacho, vecino de su familia, que se marchó de la ciudad tras la supuesta agresión.

Cuando su madre se enteró de que estaba embarazada, la echó de casa. Ahora Sarah (cuyo apellido nos reservamos) vive con la madre del chico que según ella la forzó. La madre del supuesto violador fue la única que se prestó a acogerla; en Sierra Leona las mujeres suelen vivir con la familia del esposo.

Niñas convertidas en esposas

NIÑAS CONVERTIDAS EN ESPOSAS

Sarah tiene que cocinar, limpiar la casa y hacer la colada. Me contó que la madre del chico le pega cuando, de puro agotamiento, no cumple con sus tareas. Con tantas trabas, ¿cómo puede una chica como Sarah sobrevivir y salir adelante en Sierra Leona?

En un país pobre regido por un Gobierno que no parece demasiado interesado en proteger a las niñas, lo más sensato que estas pueden hacer es intentar escapar del entorno en el que han nacido. En un universo lleno de amenazas, la escuela puede ser su único refugio.

Estudiar es complicado porque cuesta dinero, pero al mismo tiempo constituye un rayo de esperanza. Sacarse la secundaria puede traducirse en una mayor libertad económica y en la oportunidad de tomar las riendas de su propia vida, quizás abriéndoles las puertas de la universidad o de un empleo cualificado. Sin embargo, se calcula que entre 2008 y 2012 solo una de cada tres chicas cursaron estudios se­cundarios; en este sentido el embarazo supone una de las barreras más importantes. No en vano el ministro de Educación de Sierra Leona ha vedado la entrada en los centros escolares de las jóvenes gestantes.

Se calcula que entre 2008 y 2012 solo una de cada tres chicas cursaron estudios se­cundarios

El objetivo de esta política, formalizada por el Gobierno en 2015, es impedir que influyan en sus compañeras y protegerlas de las burlas. La prohibición de que las chicas embarazadas acudan a la escuela «es un ejemplo de moralismo anticuado e irreflexivo que lanza un mensaje equivocado –declara la escritora Aminatta Forna, quien en 2003 fundó una pequeña escuela rural en Sierra Leona–. Hablamos de jóvenes vulne­rables, que en este país son objeto de continuas depredaciones».

Elizabeth Dainkeh fue coordinadora de un centro educativo de Freetown para jóvenes en edad escolar que estuvieran en estado de gestación o que ya fuesen madres, financiado por Unicef y el Ministerio de Educación sierraleonés, y otras instituciones.

Marginación tras el embarazo

«Cuando te quedas embarazada, te marginan», me dice. Estamos en el fondo de un aula sofocante en la que chicas con los cabellos trenzados y tocados de vivos colores, algunas con bebés en el regazo, se abanican con los libros de texto mientras escuchan a la maestra con atención.

«Yo creí que les daría vergüenza volver al colegio, pero no, están encantadas», dice con orgullo. La propia Dainkeh se quedó embarazada a los 17 años, y su padre la echó de casa. La hija que tuvo murió de desnutrición antes de cumplir un año de vida. Ahora, a sus 35 años, Dainkeh aconseja a sus alumnas que perseveren: que se olviden de los años que han estado desescolarizadas y sigan adelante.

Mary Kposowa, exdirectora de uno de esos centros femeninos, explica que algunas de sus antiguas alumnas se habían topado con dificultades al querer matricularse de nuevo en escuelas ordinarias después de dar a luz.

Para complicar aún más las cosas, en agosto de 2016 los centros para chicas embarazadas cerraron sus puertas; Unicef declara que se abrieron como un «puente» alternativo a la educación cuando la crisis del ébola tuvo cerradas escuelas de todo el país du­­rante nueve meses. En aquellos centros había matriculadas unas 14.000 jóvenes embarazadas o puérperas, lo que hace temer a Dainkeh que actualmente haya en el país «un gran número de chicas marginadas del sistema educativo».

Los sierraleoneses suelen decir que el trauma de su país tiene su origen en la guerra civil que enfrentó a grupos rebeldes y al Gobierno. Desde 1991 y durante más de 10 años, miles de niñas y mujeres fueron violadas. Decenas de miles de personas fueron asesinadas. Y más de dos millones se vieron desplazadas.Más recientemente ha sido el virus del Ébola el que ha hecho estragos en el país, cobrándose unas 4.000 vidas en menos de dos años. La epidemia afectó a muchas familias, y dejó huérfanas a un gran número de niñas que tuvieron que hacerse cargo de sus hermanos sin estar aún preparadas para ello.

Kumaris, las diosas vivientes de Nepal

LAS DIOSAS VIVIENTES DE NEPAL

El país ha ido evolucionando a trompicones hacia la democracia, pero la opresión de las niñas y las mujeres no ceja. «En este país no importa la vida, ni el cuerpo, ni el alma de las mujeres jóvenes –afirma Fatou Wurie, nacida en Sierra Leona, criada en el extranjero y que regresó a su país natal, a Freetown, donde trabaja en pro de los derechos de las mujeres–. Hasta la última política que implantamos excluye la voz de las jóvenes sierraleonesas».

A pesar de que he pasado largas temporadas en diversos lugares de África occidental, la primera vez que pisé Sierra Leona me quedé profundamente impactada. He estado en Nigeria, Ghana, Senegal y Costa de Marfil, pero Sierra Leona me pareció diferente: menos acogedora, menos exuberante, más suspicaz y recelosa. Sin embargo, también descubrí que incluso en este país tan turbulento hay jóvenes que encuentran la manera de sobreponerse por encima de todo.

Regina Mosetay está en la biblioteca de su colegio de Freetown mientras sus compañeras de clase almuerzan entre risas en el patio. Se ha preparado los exámenes finales todo cuanto ha podido. Madre a los 17 años, Regina no puede estudiar como antes porque tiene que cuidar de su hija, Aminata, pero saca tiempo para los libros entre tomas y mudas. Tiene los ojos almendrados y un rostro ovalado que ladea cuando reflexiona sobre algo. Creció en un barrio obrero de calles estrechas y abarrotadas de peatones, tiendas de ropa y de electrónica, y puestos de comida. Su madre la crió a ella, a su hermano y a su hermana en una casa donde también vivían su abuela, primos, un tío y más familiares; en total, 11 personas.

El ébola empezó a propagarse por Freetown y el Gobierno cerró los colegios para contener la epidemia

La echaron del colegio por estar embarazada, una experiencia «dolorosa de verdad», dice. Le encantaba estudiar; su asignatura preferida era lengua (es muy habladora). Nunca pensó que acabaría formando parte del colectivo de adolescentes embarazadas de Sierra Leona, pero en 2014 el ébola empezó a propagarse por Freetown y el Gobierno cerró los colegios para contener la epidemia.

Entonces, en 2015, fue cuando se quedó embarazada de su novio, Alhassan, que en ese momento estaba terminando sus estudios universitarios. «Durante el ébola muchas chicas se quedaron embarazadas –cuenta Regina–. Como no había clase, teníamos mucho tiempo libre». «Sentí que estaba decepcionando a todo el mundo. Tenía vergüenza –confiesa–. Algunas compañeras decían que éramos un mal ejemplo». Esa primavera se quedó encerrada en casa sin nada que hacer ni nadie con quien hablar mientras sus amigas estaban en el colegio. Al cabo de unos meses, una tía le habló de los nuevos centros que daban a las embarazadas o madres en edad escolar la oportunidad de no quedarse atrás en los estudios para que pudiesen retomarlos más adelante.

Regina quiso apuntarse al momento, y habló de esos centros a todas las chicas que conocía que estuvieran en estado o acabaran de parir. Casi todo lo que le enseñaban ya lo sabía, pero disfrutaba estando de nuevo en un aula, sentada en un pupitre de madera con los libros y la libreta abiertos, leyendo, atendiendo, pensando. Llevaba un bebé dentro, sí, pero seguía teniendo cerebro, y eso era fundamental para ella.

«No quiero que mi hija pase por lo mismo que yo. Quiero que tenga un futuro mejor»

«Era feliz solo con estar allí, y no en casa sin hacer nada», me cuenta Regina. Estudió en aquel centro tres meses; fue una de las 180 chicas que pasaron una temporada más o menos larga en el año inaugural del programa. Regresó a la escuela pública un mes después de dar a luz a Aminata en diciembre de 2015. Desde que ha vuelto, Regina aconseja a todas sus amigas que tengan cuidado con los chicos si no quieren que les pase lo mismo que a ella.

Ya no está desescolarizada. «No quiero que mi hija pase por lo mismo que yo. Quiero que tenga un futuro mejor», dice. Vive con su novio, ya graduado en ciencias empresariales, y con la madre y la abuela de este, que ayudan en el cuidado de Aminata. Confía en poder formar una familia con él y sabe que terminar los estudios es crucial. Quiere trabajar en alguna organización de ayuda a la infancia, para que los niños –y sobre todo las niñas– tengan una vida mejor. «Cuando termine los estudios podré cuidar de mi familia; cuidaré de mí misma», asegura.

Salmatu Fofanah vive en una ladera de Mountain Cut, un barrio muy poblado de Freetown. Tiene 17 años, es tímida, esbelta y muy gua­pa, y ya está acostumbrada a cuidar de sí misma. Tanto su madre como su padrastro contrajeron el virus del Ébola hace dos años. Él enfermó tras asistir a un funeral en 2014. (Su padre biológico había muerto de malaria en 2011).

La madre de Salmatu, enfermera de profesión, cuidó a su marido en casa. No tenían ni idea de que había una epidemia de ébola. Cuando el enfermo empeoró, intentó llevarlo al hospital, pero se le murió en el coche. Ella cayó enferma unos días después y falleció en casa un mes más tarde. Entonces Salmatu empezó a encontrarse mal. Le dolía la cabeza y tenía fiebre. Lo mismo les pasó a su tía, su tío, su hermana mayor, su hermano, su abuelo y varios primos. «Todos teníamos miedo», me cuenta Salmatu. Ingresaron en un centro de tratamiento. Solamente sobrevivieron ella y tres primos. Todos los demás murieron. A principios de diciembre de 2014 llegó a Mountain Cut, tambaleante por las náuseas y la pena, para vivir con otros tíos y primos en una amplia casa.
Cada vez que se sentía enferma, le entraba el pánico. En marzo regresó al colegio, temiendo que sus amigas le dieran de lado por haber tenido ébola, pero se llevó una grata sorpresa. «No me marginaron en absoluto», explica. Cada vez que se acuerda de cómo era todo antes de la epidemia de ébola, sus amigas intentan animarla. Salmatu entra en Facebook y WhatsApp para buscar chistes, solo para volver a reír, y cuanto más duerme, mejor se siente.

Ébola: a la caza del asesino
Fotografías

Asiste a un grupo de ayuda psicológica donde puede hablar de sus problemas. «Me gusta contar lo que me preocupa; me quito un peso de encima», dice. Cuando me entrevisté con ella, su mayor preocupación eran los exámenes finales. «Tienes que pasar página y concentrarte en el futuro. Debes ser feliz con lo que tienes». La asignatura favorita de Salmatu es historia; le gusta conocer lo que ha ocurrido en su país y aspira a ser periodista. Sale con un chico que acaba de terminar el instituto, pero no le permite que la presione para hacer nada que no desee. Quiere seguir cantando y yendo a la playa con sus amigas. A veces ir a clase le da una pereza infinita. («Me encanta dormir, es mi hobby», me confiesa con una sonrisa. Cuando de pequeña cogía una rabieta, su madre la ponía a dormir y se le pasaba). Pero entonces recuerda las metas que se ha marcado. Su madre murió por su familia. ¿Cómo no va ella a terminar los estudios y llevar una vida de la que su madre se habría enorgullecido?

Kadiatu Kamara, a quien todos llaman KK, nació en un pueblo costero llamado Bureh, a orillas del Atlántico. Es un torbellino de fuerza y energía, con un racimo de estrellas tatuadas en el cuello. Ha vivido aquí toda su vida; sus padres la criaron –junto con cuatro hermanos y una hermana– en esta compacta comunidad. Se ganaban la vida vendiendo carbón que recogían en la zona. Cuando su padre falleció siendo ella muy joven, las cosas se pusieron difíciles. Su madre, Baby, se vio muy apurada –como todavía se ve hoy– para ganar lo suficiente, y solo pudo permitirse costear los estudios de dos de sus hijos: KK y un hermano mayor.

KK tiene 19 años, es la benjamina de la familia y siempre ha tendido a buscar aquellos entornos en los que siente que encaja. Vive con su madre y otros familiares, así que anhela un espacio propio. Hace cuatro años se fundó en la playa un club de surf al que asistían muchos chicos de su pueblo, y a ella le apeteció ver cómo era. Solo había visto surfistas en las revistas que se dejaban en la playa los turistas extranjeros. Para KK el mar es un bálsamo. Cuando se mete en el agua, se siente más libre, más serena. «Cuando surfeo, es como si estuviese en otro país», dice. Al principio ni siquiera sabía nadar bien. Un día se le soltó la cuerda del tobillo y las olas se llevaron la tabla. Un compañero tuvo que ir a rescatarla porque se ahogaba.

KK es una de las pocas surferas de Sierra Leona. Conoce chicas que se quedaron en estado y dejaron los estudios o que acabaron con hombres que les doblan la edad, pero siempre ha sabido que no quiere eso para ella. Cuando en el colegio las advirtieron contra las relaciones sexuales prematuras, ella tomó nota. El surf la ayudó a no perder el norte.

«A algunas chicas sus madres no pueden pa­garles el colegio, así que van con los chicos para que ellos les den el dinero»

«A algunas chicas sus madres no pueden pa­garles el colegio, así que van con los chicos para que ellos les den el dinero, explica KK. A veces les cobran el favor en especias y las abandonan cuando se quedan embarazadas, por lo que las chicas acaban en la calle. A su madre jamás le ha sobrado el dinero, pero como KK es hábil y trabajadora, está ganando su propio dinero y nunca ha tenido que recurrir a ningún chico. Trabaja en la cocina del chiringuito de la playa y a veces vende galletas a los bañistas. Se levanta a las seis o siete de la mañana, surfea un poco si hay buenas olas y luego se va a clase. Está en el colegio toda la tarde hasta la noche, y cuando vuelve a casa estudia y hace la cena. KK ayuda a su madre dándole parte de lo que gana.

Un sábado por la tarde del pasado mes de julio la vi estirarse en la arena tórrida de Bureh Beach. Luego se levantó de un salto y se lanzó, intrépida, con la tabla de surf contra una ola espumosa en las aguas turquesas. Remó con los brazos, flotando boca abajo, aguardando con paciencia a que llegase otra ola alta. Los chicos se empeñaban en cabalgar olas flojas y se caían todo el rato. Un mu­chacho flaco se persignó antes de zambullirse. KK lanzó un grito de júbilo cuando la descabalgó una ola frustrada.

KK quiere fabricar sus propias tablas. Su meta es abrir una tienda para venderlas y tener una escuela de surf. «Quiero enseñar a otras chicas», me dice. Entre tanto, surfea varios días a la semana, sobre todo durante la estación lluviosa, cuando las olas llegan a alcanzar los dos metros de altura. KK está perfeccionando su técnica. Cree que si mejora lo bastante, podrá dedicarse profesionalmente a este deporte.

Le gustaría estudiar medicina o contabilidad, pero no sabe si tendrá suficiente nivel para entrar en la universidad. A veces los profesores no les enseñan nada, y ella tiene problemas con la lectura.

«Si me dedico al surf, a lo mejor algún día viene alguien al club, me ve y me escoge [para patrocinarme] –me dijo, llena de esperanza–. Y así podré mantener siempre a mi familia».

Fuente: https://www.nationalgeographic.com.es/mundo-ng/grandes-reportajes/los-peligros-nacer-nina-distintas-partes-del-mundo_11111/11

Comparte este contenido:

Libro: Política de sexos (PDF)

Autora:  Sylviane Agacinski

Fecha de la edición: 1998

ISBN: 84-306-0321-2

Sinopsis: En 1996 un grupo de mujeres francesas firmaron un manifiesto a favor de la paridad, de la igualdad de representación en la Asamblea Nacional. Sylviane Agacinski, filósofa, feminista y militante socialista, apuesta por la paridad en política y por una nueva postura filosófica. En su teoría pone en duda la jerarquía de los sexos y el predominio de los valores masculinos, a la vez que critica el feminismo más radical. Esta toma de posición política defiende, en definitiva, el carácter mixto de la humanidad y propugna el entendimiento, dentro del reconocimiento de las diferencias, entre ambos sexos.

Descargar aquí: https://mega.nz/#!XvQhEQTB!kqfaIBPzAiFBkA7cy8zpkyt4O_QwQ1rIgFyo-rteF1M

Comparte este contenido:
Page 221 of 571
1 219 220 221 222 223 571