19 Noviembre 2016/UNESCO
La educación desempeña una función importante en la preparación de las sociedades para afrontar el cambio climático y alcanzar un futuro más respetuoso del medio ambiente. Ese fue el mensaje de una jornada temática celebrada en el marco de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático COP22, que tuvo lugar en Marrakech (Marruecos), del 8 al 15 de noviembre de 2016.
La UNESCO, con la colaboración de asociados nacionales e internacionales, celebró diversos eventos paralelos y mesas redondas durante la jornada del 14 de noviembre, en la que se prestó especial atención a la función de la educación en la aplicación del Acuerdo de París y, en particular, en los compromisos nacionales específicos (NDC, por sus siglas en inglés) de cada país.
La jornada comenzó con un panel de debate de alto nivel, presidido por Su Alteza Real la Princiesa Lalla Hasnaa de Marruecos, en el cual la Directora General de la UNESCO, la Sra. Irina Bokova, insistió en que “la educación es la clave para un futuro más ecológico”. La educación, señaló, desempeña una función decisiva en la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) y en la puesta en práctica de los acuerdos mundiales relativos al cambio climático. Conjuntamente con la Sra. Patricia Espinosa, Secretaria Ejecutiva de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), la Sra. Bokova instó a los países a que redoblen la acción en lo tocante a la Educación para el Desarrollo Sostenible (EDS) y apliquen el artículo 12 del Acuerdo de París, relativo a la educación.
Por la tarde tuvo lugar una mesa redonda coauspiciada por la Internacional de la Educación, que llevó por título “La sostenibilidad empieza con los docentes” y en la que expertos y profesionales debatieron sobre cómo los educadores pueden incorporar la enseñanza y el aprendizaje relativos al cambio climático en contextos pedagógicos formales y no formales. La Sra. Julia Heiss, jefa del equipo de EDS en la UNESCO, afirmó: “Los docentes tienen una responsabilidad considerable en cuanto a fomentar las competencias de sus alumnos, pero también en lo tocante a cambiar sus mentalidades y estilos de vida para que adquieran otros más sostenibles. Por consiguiente, los docentes necesitan apoyo, contratación, formación y motivación adecuadas, para adquirir la confianza que les permita impartir clases sobre la sostenibilidad”.
Tres docentes afiliados a la Red del Plan de Escuelas Asociadas de la UNESCO (RedPEA) en África expusieron los proyectos relativos al clima que han desarrollado en sus centros de estudio. El Sr. Akissi Alhious Honoré Yapo, profesor del Liceo Sainte Marie de Cocody en Côte d’Ivoire, explicó cómo sus estudiantes reciclaban los desechos para fabricar abono, que luego usaban para fertilizar un bosque en el que habían aprendido a cultivar plantas medicinales y comestibles, para su consumo y también para vender en la comunidad. El Sr. Yapo dijo: “Se trata de una inversión a largo plazo. Los adultos de la comunidad aprenden de los estudiantes, pero lo que es aún más importante: cuando los alumnos funden sus propias familias, dentro de unos diez años, la sostenibilidad ya formará parte de la vida cotidiana de toda la familia”.
Los conocimientos tradicionales desempeñan una función esencial
En un panel de debate titulado “No dejar a nadie rezagado en la educación relativa al cambio climático”, que se celebró bajo los auspicios de la Alianza de las Naciones Unidas para la Educación, Formación y Sensibilización del Público sobre el Cambio Climático, en la que participa la UNESCO, la atención se centró en la función y las iniciativas de los grupos vulnerables en materia de cambio climático. Expertos y representantes de organizaciones de pueblos indígenas, refugiados, discapacitados, jóvenes y mujeres, pusieron de relieve la importancia de velar por que los derechos, las necesidades y las contribuciones de los diversos estudiantes se tomen en cuenta al concebir y promover la educación relativa al cambio climático. Por ejemplo, los conocimientos tradicionales de los pueblos indígenas pueden desempeñar una función importante en la atenuación y adaptación al cambio climático. El Sr. Angus Mackay del Instituto de las Naciones Unidas para Formación Profesional e Investigaciones (UNITAR) hizo hincapié en que “no sólo tenemos que llegar a quienes están más lejos, sino que también tenemos que prestar atención a sus mensajes, su sabiduría y sus conocimientos en materia de cambio climático”.
La UNESCO auspició una serie de debates breves sobre la EDS en un área de exposición en la que se trataron temas tales como la educación relativa a los recursos hídricos, las economías y competencias respetuosas del medio ambiente, y la ampliación de la EDS. Los docentes afiliados a la RedPEA debatieron sobre la manera de movilizar a los estudiantes para las actividades sobre el cambio climático.
Además, la UNESCO presentó dos nuevas publicaciones: PLANET: Education for environmental sustainability and greengrowth del equipo encargado del Informe de Seguimiento de la Educación en el Mundo (GEM), en la que se analiza de qué manera la educación capacita al individuo para afrontar los peligros derivados del cambio climático y reducir su vulnerabilidad ante ellos; y Action for Climate Empowerment: Guidelines for accelerating solutions through education, training and public awareness, una guía para los responsables de la formulación de políticas, elaborada conjuntamente con la CMNUCC.
Por último, la Sra. Bokova presentó el Proyecto UNESCO Green Citizens, que pone de relieve los proyectos notables de EDS del mundo entero mediante una exposición de fotografía. Esta exposición itinerante se exhibirá en el Aeropuerto Menara de Marrakech hasta finales de noviembre y luego emprenderá una gira por otros aeropuertos del país, que concluirá en marzo de 2017.
Fuente: http://www.unesco.org/new/es/education/resources/online-materials/single-view/news/un_climate_summit_says_education_primes_societies_for_global/