Page 2166 of 3041
1 2.164 2.165 2.166 2.167 2.168 3.041

¿Cómo educar ante un mañana incierto? 6 preguntas clave.

Por: Liliana Arroyo. El Diario de la Educación. 10/12/2016

Es ya urgente una reflexión sobre las instituciones educativas con la que, al menos, respondamos a dos preguntas: ¿Para qué sirven? ¿Cómo deben ser?

Algunos expertos afirman que estamos entrando en la cuarta revolución industrial y una de las claves es la transformación profunda a nivel económico y, en consecuencia, social. La tecnología posibilita y acelera la disrupción de sectores enteros, modelos de negocio, perfiles profesionales e, incluso, las formas de trabajo se reinventan. Las escuelas que hoy conocemos son hijas de la Ilustración y la Revolución Industrial. La primera revolución requería trabajadores obedientes, especializados, mecánicos, con jornadas que comenzaban y acababan con un timbre. Desde entonces difícilmente se pone en duda la conexión entre el crecimiento económico de una sociedad y el diseño de su sistema educativo.

Si eso es así, la reflexión es urgente. Estamos en los albores de la cuarta revolución y seguimos con sistemas educativos nostálgicos del siglo XX, en algunos casos aún a contrapié de la revolución digital (la tercera). En este contexto se necesita un replanteamiento de las instituciones educativas comenzando por preguntarnos de una vez para qué sirven y cómo deben ser.

Un informe del World Economic Forum presentado en Davos a principios de este año calculaba que el 65% de estudiantes que están cursando primaria hoy trabajarán en perfiles laborales que todavía no existen. Aquella pregunta de “qué quieres ser de mayor” se vuelve más complicada porque no se trata de elegir un camino entre los posibles y descartar los otros. Implica orientarse hacia un camino que hoy existe y quizá mañana se haya transformado tanto que no tenga nada que ver con los sueños infantiles y adolescentes. O incluso andar hacia una dirección en la que deberán poner los ladrillos antes de dar el siguiente paso. Las mismas previsiones indican que en los próximos años millones de puestos de trabajo ya no requerirán la intervención humana, especialmente aquellos con tareas rutinarias y predecibles, fácilmente mecanizables.

Hay determinados sectores y posiciones que ya han llegado, como las de analistas de datos. Cada vez serán más necesarios puesto que avanzamos hacia un mundo donde la toma decisiones se basará en la gran cantidad de información que generamos día a día, esos rastros voluntarios e involuntarios capturados por la digitalización creciente.

En lugar de aterrorizarnos, anticipémonos. Preparemos la transición para que no suponga una nueva brecha, una nueva división social entre sustituibles y sustituidos. Pensemos cómo aprovechar las oportunidades que eso puede acarrear: que las máquinas se queden con tareas arduas y rutinarias nos permite plantearnos nuevas oportunidades profesionales. Y es algo que podemos hacer mientras rediseñamos los sistemas y las comunidades educativas.

Pero también hay que tener en cuenta cuáles serán las condiciones del mercado de trabajo: flexibilización de horarios, crecimiento del teletrabajo, aumento del emprendimiento y, en definitiva, lo que se bautiza como ‘gig economy’: empleos menos estables, más orientados a tareas concretas -quizá esporádicas- acompañados de flexitrabajo y altos niveles de creatividad y adaptación.

1. ¿Ciencias o letras?

La separación habitual entre ramas de conocimiento pierde el sentido en un mundo cada vez más interconectado y fluido. Las “letras”, o más bien las humanidades en sentido amplio, deberían estar presentes siempre, especialmente el conocimiento y la dimensión ética. Además de las capacidades técnicas, que cada vez llegan a horizontes más increíbles, harán falta debates éticos sobre la responsabilidad, la necesidad y la conveniencia de esos cambios. En esta línea, trabajar por proyectos, en grupos y fomentando el uso de conocimientos transversales e interdisciplinares, parece que cobra mucho más sentido que la rígida división por asignaturas.

2. ¿Educación analógica o digital?

Las capacidades y habilidades que se entrenan en analógico o en digital son razonablemente distintas, pero probablemente el aprendizaje combinando aspectos digitales y ejercicios lejos de las pantallas es el más deseable. La alfabetización digital debería incluir códigos de programación, de la misma forma que enseñamos a leer y escribir. Es más, para enseñar a programar ni tan siquiera hace falta un ordenador, hay métodos infalibles de lápiz y papel, porque lo importante no es la herramienta, sino el pensamiento.

3. ¿Contenidos o criterios?

Hasta ahora la definición de los cursos escolares se basa en la dosificación de contenidos, más o menos estandarizados y clasificados por edades. Pero en la era de la información, estando cualquier idea a pocos clics de distancia y en forma de texto, video o multimedia, dedicar el tiempo a almacenar conocimientos parece anacrónico. Y por ende, los sistemas de evaluación. Si bien la memoria y la cultura general son importantes, quizá es momento de acompañarles para que sepan dónde buscar y cómo relacionar ideas según la información hallada. Es decir, en un mundo en el que lo complejo no es acceder a la información, sino justamente no terminar ‘infoxicado’, es relevante educarles para que tenga criterio. Eso implica que sepan encontrar información, priorizarla y desarrollar mecanismos para distinguir entre fuentes fiables y opiniones sesgadas. Junto a ello, aprender a dar un paso atrás, tener la visión de conjunto y reflexionar probablemente sea de lo más urgente.

4. ¿Profesionalizar o capacitar?

Si los límites entre profesiones cada vez serán más fluidas y los nichos de mercado cada vez más transversales, organizar la educación con arreglo a profesiones determinadas seguramente funcionará para un porcentaje limitado de estudiantes. La educación debe capacitarlos, al menos en parte, para relacionarse, trabajar, madurar y desarrollar sus vidas en entornos cambiantes y líquidos. Es importante que las escuelas sean laboratorios donde explorar sus capacidades, dotarles de espacio para la autoexploración y el autoconocimiento, que descubran sus pasiones, que se prueben y que se reten: que se acostumbren a encontrar y traspasar los límites de su zona de confort será primordial.

Habilidades como la imaginación, la adaptabilidad, la creatividad y a su vez la gestión del tiempo y la priorización de tareas son aspectos que seguro van a necesitar tanto en su vida profesional como en la personal.

5. Aprendizaje: ¿etapa o proceso?

Estamos empezando a aceptar que la educación y la formación no sólo se hacen al inicio de la vida, sino que el reciclaje y el aprendizaje continuo son ingredientes necesarios, especialmente en aquellos sectores profesionales en cambio constante. El aprendizaje es un proceso y la curiosidad es el motor que lo estimula. Las escuelas deberían ser ese lugar donde el gusto por aprender vehicula la adquisición de conocimientos y habilidades. Imaginémoslo como uno de los espacios donde se debe implantar la simiente de vivir con los ojos abiertos y de cuestionar por qué ocurre tal cosa o cómo funciona tal otra.

6. ¿Quién tiene la llave del cambio?

Todos. Tú también. Lo maravilloso y lo complejo de la educación es que es una responsabilidad colectiva. El cambio no puede residir en el sistema educativo únicamente, ni en las políticas públicas. Y me atrevo a decir que es injusto que recaiga en los centros o los profesores, esos héroes de cada día. Si bien ellos están en primera línea, no deberían ser el epicentro ni los protagonistas, sino más bien los embajadores, junto con las familias. Y el resto de la comunidad educativa. Estamos hablando de un cambio sistémico que requiere la implicación, la voluntad y la complicidad de todos.

Porque la educación no es aquello que ocurre en las aulas de 9 a 5, de lunes a viernes entre septiembre y junio. La educación es también el inicio del sueño del mañana, las trayectorias de los que se gradúan pronto, la historia por escribir de los países y los derechos de los habitantes presentes y futuros del planeta.

Fuente: http://eldiariodelaeducacion.com/blog/2016/11/29/como-educar-ante-un-manana-incierto-6-preguntas-clave/

Fotografía: flickr

Comparte este contenido:

Paraguay: Docentes nativos son diplomados en educación intercultural

América del Sur/Paraguay/09 Diciembre 2016/Fuente: Paraguay 

Veintinueve docentes nativos de más de 10 pueblos culminaron un diplomado en educación intercultural. Es la primera vez en Paraguay que indígenas acceden a esta especialización.

El curso duró dos años y abarcó los temas de antropología, interculturalidad, lingüistica y diversidad, con el fin de profundizar la formación de docentes y líderes nativos, rescatando, valorizando y compartiendo su sabiduría y conocimiento de diferentes culturas.

Según un comunicado de Unicef Paraguay, en el país existen 475 escuelas y 45 colegios en comunidades indígenas, de acuerdo a los datos estadísticos del año 2012 de la Dirección General de Educación Escolar Indígena del MEC.

Las instituciones cuentan con 25.000 estudiantes, por ende, se crea herramientas para que los niños y adolescentes indígenas puedan acceder a una educación de calidad y pertinente a sus contextos.

Esta capacitación contó con el apoyo del Centro de Estudios Antropológicos de la Universidad Católica, Coordinación Nacional de Pastoral Indígena, Conferencia Episcopal Italiana y el Fondo de la Naciones Unidas para la Infancia (Unicef).

Unicef aseguró que el mayor desafío es el limitado acceso de docentes a las capacitaciones y la nula oferta educativa de nivel superior con énfasis en enseñanza intercultural, según el portal}

Fuente: http://www.paraguay.com/nacionales/docentes-nativos-son-diplomados-en-educacion-intercultural-155425

Comparte este contenido:

Prueba Pisa: ¿Cuáles son los países que tienen la mejor educacion del mundo? ¿Cómo se ubica en America Latina

Por: Alejandra Martins. BBC. 10/12/2016

Singapur domina al resto del mundo en educación, según una de las pruebas internacionales más prestigiosas.

Los nuevos resultados del Programa para la Evaluación Internacional de los Alumnos, PISA por sus siglas en inglés, fueron divulgados este martes.

Cerca de 540 mil estudiantes de 15 años en 72 países participaron en los tests que realiza cada tres años la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico, OCDE.

Y en las tres disciplinas evaluadas, ciencia, matemáticas y lectura, Singapur está a la cabeza.

En ciencia, los países que se ubican tras Singapur son Japón, Estonia, Taiwán y Finlandia.

Estudiantes de secundaria de Singapur

Los adolescentes de Singapur obtuvieron los mejores puntajes en ciencia, lectura y matemáticas.

En matemáticas le siguen Hong Kong, Macao, Taiwán y Japón. (China no participa con todas sus regiones sino algunas localidades como Hong Kong y Macao). Y en lectura, luego de Singapur se encuentran Hong Kong, Macao, Taiwán y Japón.

En cuanto a América Latina, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires se ubicó en el lugar 38 en ciencia.

Un analista de la OCDE explicó que no pueden divulgarse datos sobre Argentina en general debido a que la lista de colegios presentada no permite conclusiones estadísticas robustas. La excepción fue la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

A nivel de país, Chile es el primero de la región, en el lugar 44, seguido de Uruguay (47), Costa Rica (55), Colombia (57), México (58), Brasil (63), Perú (64), República Dominicana (70).

En matemáticas, Ciudad Autónoma de Buenos Aires se ubicó en el puesto 42, pero a nivel de país los resultados fueron los siguientes:Chile (48), Uruguay (51), México (56), Costa Rica (59), Colombia (61), Perú (62), Brasil (65), República Dominicana (70).

Y el ránking de la región en lectura fue: Ciudad Autónoma de Buenos Aires (38) y a nivel de países Chile (42), Uruguay (46), Costa Rica (51), Colombia (54), México (55), Brasil (59), Perú (63), República Dominicana (66).

Perú y Colombia

Los ránkings y recomendaciones divulgados en 2016 evalúan los tests que los estudiantes realizaron en 2015.

CIENCIA

  • 1 Singapur
  • 2 Japón
  • 3 Estonia
  • 4 Taiwán
  • 5 Finlandia

El énfasis en esta edición de las pruebas fue en ciencias.

En Singapur se constató que uno de cada cuatro estudiantes tuvo un desempeño al más alto nivel. El promedio para los países de la OCDE es de uno en 10.

Y de los 72 países evaluados, sólo 12 mejoraron en ciencia, incluyendo algunos de alto desempeño como Singapur y Macao, y otros de bajo desempeño como Perú y Colombia.

Ambos países latinoamericanos también mejoraron sus resultados en matemáticasrespecto a las pruebas de 2012.

México y Brasil

En el caso de México, sus estudiantes están por debajo del promedio de la OCDE, con resultados similares a los de Colombia y Costa Rica.

Los adolescentes mexicanos obtuvieron en las pruebas de ciencia cerca de 70 puntos menos que sus pares de España y entre 20 y 60 puntos menos que los adolescentes de Chile y Uruguay.

Estudiantes de secundaria en un salón de clase

En América Latina, la mejor ubicación en las tres disciplinas fue para la Provincia Autónoma de Buenos Aires. No se divulgaron datos para toda Argentina porque pocos colegios participaron y eso no permitió obtener “datos estadísticos robustos”.

Brasil se ubicó por debajo de la mayoría de las naciones sudamericanas participantes.

El informe PISA destaca que otros países en la región, incluyendo Colombia, México y Uruguay, gastan menos por estudiante que Brasil, pero logran un mejor desempeño en ciencia.

A nivel global, “una década de descubrimientos científicos no se ha traducido en avances significativos en la educación de ciencia en los colegios”, concluyó el secretario general de la OCDE, el excanciller mexicano Ángel Gurría.

Hombres y mujeres

Las pruebas también destacan la brecha de género, que sigue siendo marcada en ciencia.

Las diferencias entre chicos y chicas en ciencia son menores que en matemáticas, pero entre los estudiantes con mejores resultados, la mayoría son hombres en 33 países.

LECTURA

  • 1 Singapur
  • 2 Hong Kong
  • 3 Canadá
  • 4 Finlandia
  • 5 Irlanda

Finlandia es la única nación en la que las mujeres tienen mayores probabilidades de ser mejores estudiantes en ciencia que los hombres.

Otro elemento clave evaluado por PISA es la inequidad en los sistemas educativos.

El estudio destaca que Canadá, Dinamarca, Estonia, Hong Kong y Macao lograron buenos resultados en estudiantes de diferentes niveles económicos.

Pero en general, los estudiantes pobres tiene tres veces más probabilidad de tener un mal desempeño que los estudiantes de familias con mejor posición económica.

“Pensar como un científico”

“Las pruebas no sólo miden si un estudiante puede reproducir conocimiento, sino si puede extrapolar a partir de lo que ha aprendido y aplicar su conocimiento en situaciones poco familiares, dentro y fuera de la escuela”, dice el informe PISA.

MATEMÁTICAS
  • 1 Singapur
  • 2 Hong Kong
  • 3 Macao
  • 4 Taiwán
  • 5 Japón

Y esto requiere la habilidad de “explicar fenómenos científicos, de interpretar datos y diseñar experimentos”.

“Este enfoque refleja que las economías modernas recompensan a los individuos no por lo que saben, sino por lo que pueden hacer con lo que saben” según la OCDE.

“Esta enseñanza les permitirá aprender a “pensar como un científico”, una habilidad que se ha vuelto esencial en el siglo XXI, aún si no eligen más adelante una carrera relacionada con la ciencia”.

Críticas a PISA

En 2014, prestigiosos académicos de Estados Unidos y Europa dirigieron una carta a Andreas Schleicher, director de educación de la OCDE y coordinador de PISA, criticando el enfoque de las pruebas.

“PISA evalúa habilidades importantes para un trabajo, pero educar es enseñar habilidades para la vida. Hay otros aspectos más difíciles de medir con un test como las habilidades artísticas o la educación física”.

La carta también afirma que PISA acaba creando en los países una obsesión con tests de rendimiento y consoluciones de corto plazo que puedan reflejarse en las próximas pruebas.

¿Qué responde Schleicher?

“Miremos los resultados de PISA para América Latina”, señaló.

Una chica adolescente frente a una pizarra

Finlandia es la única nación en la que las mujeres tienen mayores probabilidades de ser mejores estudiantes en ciencias que los hombres.

“Ya en las pruebas anteriores divulgadas hace tres años se mostró que la mitad de los estudiantes en muchos países de la región no sabían leer o escribir apropiadamente, no tenían los fundamentos más elementales en matemáticas. Esto significa que no tendrán ninguna chance en la vida”.

“No decimos que ciencias, matemática y lectura sean lo único, pero son fundamentos importantes. Si vienes de una familia pobre y tu única oportunidad en la vida es tu educación, y si no te dan esos fundamentos básicos nada te salvará”.

Para Schleicher, estos adolescentes que no reciben los fundamentos básicos están siendo abandonados y condenados a la marginalización. “Entrarán al mercado de trabajo sin estar equipados con las herramientas que necesitan”.

Si vienes de una familia pobre y tu única oportunidad en la vida es tu educación, si no te dan fundamentos básicos en ciencia, matemáticas y lectura nada te salvará

Andreas Schleicher

“En el pasado las economías de América Latina fueron generosas, podías encontrar un trabajo sin grandes habilidades. Esto es mucho, mucho más difícil hoy en día”, agregó el funcionario de la OCDE.

“El mundo está cambiando rápido y mi mayor preocupación es que las exigencias a los jóvenes están cambiando mucho más rápido que la calidad de la educación”.

Explora AQUÍ el mapa interactivo para saber más sobre los países participantes

 

Fuente: http://www.bbc.com/mundo/noticias-38211248

Fotografía: lanacion

Comparte este contenido:

Educación política y ciudadana

Por: Jesús Montero Tirado

La educación escolar y la educación superior, incluyendo universidades, son muy lentas en sus cambios. Es relativamente fácil descubrir cuáles son los defectos que hay que corregir y qué cambiar en los procesos realizados, cuyos resultados se recogen después de varios años, porque en educación los resultados no son inmediatos. Pero es difícil decidir qué es lo que hay que cambiar y cómo hacerlo. Los niños, adolescentes y jóvenes no son ratones de laboratorio para andar experimentando con ellos a ver si sale bien cada intento diferente. Por otra parte, los procesos educativos son complejos y capacitarse para poner en marcha nuevos procesos es tanto más difícil cuanto los educadores profesionales tienen menos recurso, con sueldos mínimos, con los que no pueden estar actualizándose permanentemente por cuenta propia.

La constatación de estos hechos no se puede eludir si queremos ser realistas, pero no nos justifica para dejar las cosas como están y no asumir la responsabilidad de la progresiva inadecuación de la educación que se ofrece y la que se necesita. Esto es cada día más acuciante y si lo es en términos generales con respecto a todo lo que se enseña y se hace para educar y capacitar para la vida, con mayor razón lo es cuando se trata en nuestro país de la educación política y ciudadana.

Lo que tradicionalmente se ha podido ofrecer para educar política y ciudadanamente, ahora no nos sirve, es insuficiente y se evidencia que es ineficaz. La mayoría de los escenarios y muchos de los actores del teatro político están cada día más corrompidos. Esa corrupción creciente ha contaminado a no pocos actores de la sociedad civil miembros de la ciudadanía. Las instituciones y organismos creados para limpiar la corrupción, sancionando a los corruptos, también están contaminadas de corrupción. Está claro que educar y capacitar para vivir en una sociedad con políticos, instituciones, organismos y ciudadanos altamente corrompidos no es lo mismo que educar en política y ciudadanía en una sociedad sana. La percepción del nivel de patología ética de nuestro país por parte de instancias internacionales es firme: Transparency International nos sigue clasificando entre los países más corruptos del mundo.

Otra variable que obliga a revisar y actualizar nuestra educación política y ciudadana es la globalización. Queramos o no, las fronteras nacionalistas son “líquidas”, por no decir inexistentes para muchos flujos de interacción e interinfluencia internacional. El acelerado movimiento financiero no necesita pasaporte ni hay aduana que lo frene. La comunicación digital en ningún país pide permiso para penetrar, ya somos ciudadanos del mundo, que es nuestra aldea global.

El dinero electrónico, los bancos online, las bibliotecas, museos, librerías, teatros, operas, danzas, ballet, comercios, cursos, carreras, universidades, juegos electrónicos, espectáculos, conciertos, librerías, asesoramientos, informativos, revistas de todo género y especialidad desde las que ofrecen páginas populares hasta las que entregan papers de la más alta investigación, la comunicación irrestricta en redes y sin redes con ciudadanos de todo el mundo…han generado la sociedad virtual. Formar ciudadanía para esa sociedad y enseñar a participar políticamente en ella y para ella es totalmente distinto que la formación política y ciudadana tradicional.

De educar para vivir en democracias nacionales tenemos que aprender a dar el salto a la democracia mundial. Alain Touraine dice que los elementos fundamentales de la democracia son tres: 1) Representatividad de los gobernantes; 2) Limitación del poder de los gobernantes; 3) Sentido y responsabilidad de la ciudadanía. Y a estos tres elementos corresponden tres dimensiones: 1) Dimensión social; 2) Dimensión moral; 3) Dimensión cívica. (A.Touraine, 1994, 49-80).

Actualmente, la democracia mundial pasa por las democracias nacionales, pero la progresiva integración e interacción de las naciones exige ya otra formación política y ciudadana. Tanto más urgente esta educación cuanto más violentos enemigos de la verdadera democracia brotan en nuestro país. Las ideologías extremas de derechas e izquierdas, las luchas de clases, la corrupción corrosiva con criminalidad y delincuencia amparadas en ella que roban al pueblo su dinero, libertad y paz, las guerrillas terroristas que secuestran, extorsionan, amenazan y chantajean con sus crímenes e impuestos populares extorsivos, los fundamentalismos presuntamente religiosos, las mafias narcopolíticas y narcotraficantes tienen que ser erradicados. La educación debe aportar su fundamental colaboración.

Fuente:http://www.abc.com.py/edicion-impresa/opinion/educacion-politica-y-ciudadana-1543935.html

Comparte este contenido:

«Las pruebas PISA son el concurso de belleza de la pedagogía» Entrevista a Pablo Gentili

América del Sur/10 Diciembre 2016/Autor: Sputnik/Fuente: Sputniknews

El resultado de las pruebas PISA (Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes) se refleja en un ranking de quién hizo «mejor» y «peor» las cosas, como un concurso de belleza de la pedagogía, dijo a Sputnik el secretario ejecutivo del Consejo Latinoamericano de Ciencias Sociales (CLACSO), Pablo Gentili.

«El PISA construye un mecanismo artificial, lo impone y nadie lo cuestiona, y luego compara, porque en realidad es un complejo mecanismo de evaluación, pero al final hace un ranking, es como un concurso de belleza de la pedagogía para ver quién salió primero y quién salió último», dijo Gentili.

El 6 de diciembre se difundieron los últimos resultados de las pruebas PISA, un sistema estandarizado para evaluar los conocimientos de estudiantes de 15 años aplicado por la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico) y se reactualizaron las polémicas.

Entre los 72 países participantes se encuentran nueve latinoamericanos: Brasil, Chile, Costa Rica, Colombia, República Dominicana, México, Perú, Uruguay y Puerto Rico.

Varios investigadores llevan años cuestionando los procedimientos y varios de los fundamentos que dieron origen a estas pruebas.

«La OCDE parte de un principio equivocado, de que hay una forma de pensar el desarrollo y el mundo, que es universal, de Shanghái hasta República Dominicana, todos los jóvenes con 15 años tienen que saber un conjunto de cosas que son fundamentales para sobrevivir y progresar en la vida», arguyó Gentili.

El fundamento se basa en lo que piensan «un conjunto de burócratas» de una organización dedicada a la economía mundial «de los países más poderosos del mundo» y que se impuso como la visión dominante «a partir de la cual es posible pensar y presentar los objetivos de la educación», criticó Gentili, profesor de la Universidad del Estado de Río de Janeiro.

«Esto no es nada menos que una evaluación de los sistemas educativos nacionales a la luz de estos principios y estas competencias que nunca se ponen en duda y que establece un horizonte, un modelo educativo colonial, dominante y para nada universal ni científico», añadió el especialista en ciencias de la educación.

Para Gentili, a pesar de que las pruebas PISA son «un verdadero desastre», se imponen por la fuerza que ejerce la organización poderosa que las realiza en los medios de comunicación.

«A muchos medios les resulta fantástico porque simplifica algo que es muy complejo presentando un ranking, (lo cual) es patético», criticó.

Calidad de la educación

Hablar de educación en la región requiere tener en cuenta que los países tienen experiencias educativas diferentes, según Gentili.

En Argentina o Brasil «el problema de la igualdad es central, porque vivimos en la región más desigual del planeta», afirmó.

«Calidad es inversión en América Latina, inversión pública, trabajo decente de los docentes; en cada región hay una lógica para pensar la calidad y no creo que PISA refleje esto para nada», añadió el politólogo.

Gentili expresó asimismo preocupación por el desprestigio al que es sometida la escuela pública por gobiernos conservadores de América Latina.

«Cada vez que tienen que exponer algo que funciona mal en nuestros países lo explican atribuyéndoselo a la educación y a los docentes (lo cual) ha alejado a muchísima gente de la escuela pública», señaló.

En el caso de Chile, que presenta el mejor desarrollo educativo de América Latina en las pruebas PISA, se trata de un «excelente promedio» resultado de una «profunda desigualdad, hay escuelas de élite que tienen muy buenos resultados, pero hay un montón que tienen pésimos resultados», observó.

En la evaluación divulgada el martes participaron alrededor de 540.000 estudiantes de 15 años de 72 países.

La prueba de dos horas de duración evalúa los conocimientos y habilidades en ciencia, matemáticas, lectura, solución colaborativa de problemas y alfabetización financiera.

Fuente:  https://mundo.sputniknews.com/mundo/201612081065425883-pisa-america-latina-educacion/

Comparte este contenido:

Perú: Ministerio de Educación inicia mesa de trabajo para financiamiento de universidad pública

América del Sur/Perú/10 Diciembre 2016/Fuente: Andina

El Ministerio de Educación (Minedu), la Asociación de Universidades Públicas del Perú (ANUPP) y la Federación Nacional de Docentes Universitarios del Perú (FENDUP) instalaron la Mesa de Trabajo para el Financiamiento de la Universidad Pública.

En la cita, presidida por el ministro de Educación, Jaime Saavedra Chanduví, participaron, por el Minedu, el viceministro de Gestión Pedagógica, Jorge Arrunátegui Gadea, y la directora general de Educación Superior Universitaria, Verónica Zapata Gotelli.
La ANUPP estuvo representada por su presidente, Jorge Alva Hurtado, rector de la Universidad Nacional de Ingeniería, y Enrique Flores Mariazza, rector de la Universidad Nacional Agraria La Molina.
Por la FENDUP lo hicieron su presidente, Atilio Mendigure Sarmiento, y el presidente del Comité de Lucha, Jaime Juárez Angulo.
En la reunión se expuso la propuesta de financiamiento para el año 2017 por parte del Minedu, la cual consiste en una transferencia de hasta S/ 296 millones para el pliego de universidades públicas.
Este monto incluye transferencias para conceptos como: inversión en infraestructura y equipamiento; licenciamiento institucional, fortalecimiento de las capacidades, y financiamiento de nuevas plazas docentes, entre otros.
Asimismo, se confirmó que, producto de una reprogramación prioritaria presupuestal del sector educación, en el 2017 se contará con 86 millones de soles para iniciar un proceso de mejora remunerativa de los docentes universitarios.
Adicionalmente, hubo consenso desde las partes para plantear propuestas de modificación de la Ley Universitaria referidas a la edad máxima de docencia y hacer explícitos los beneficios de luto y sepelio y bonificaciones por 25 y 30 años de servicio, que sí eran reconocidas en la derogada Ley 23733, anterior a Ley Universitaria.
En las siguientes reuniones de la Mesa de Trabajo se elaborará una ruta viable para la mejora gradual de los sueldos de los docentes universitarios y el fortalecimiento de la universidad pública, así como potenciales modificaciones adicionales a la Ley 30220.
De esta manera, el Minedu, la ANUPP y la FENDUP confirman su compromiso de trabajo conjunto con el fin de promover una política de educación superior que promueva la mejora de la calidad en el marco de la Ley Universitaria.
Fuente: http://www.andina.com.pe/agencia/noticia-ministerio-educacion-inicia-mesa-trabajo-para-financiamiento-universidad-publica-643947.aspx
Comparte este contenido:

¿Sólo eficiencia? Educación Superior e Investigación

Por: Marianne González Le Saux

Más del 80% de la investigación realizada en Chile se ejecuta bajo el alero de las universidades. En estos días en que se discute elpresupuesto para educación superior así como el de investigación, ciencia y tecnología, desde la Comisión Desafíos del Conocimiento de Revolución Democrática creemos necesario reflexionar sobre cómo se articulan estos aspectos, ya que la relación entre ambos se suele desdibujar al discutirse separadamente su financiamiento.

Patricio Basso trató esta relación de manera clara y propositiva en una columna en El Mostrador. En ella llama a desacoplar el financiamiento de la docencia del de investigación, pues deben evitarse la existencia de “subsidios cruzados” entre ambas actividades. Asimismo, propone separar el financiamiento estatal para la investigación dividiendo a las universidades en tres tipos: grandes universidades “de investigación” con financiamiento basal, universidades con áreas específicas de investigación con financiamiento a mediano plazo, y financiamiento concursable para investigadores individuales en el resto de las instituciones. Esta propuesta nos merece las siguientes observaciones.

La razón por la cual Basso busca realizar la distinción entre docencia e investigación es muy atendible: se trata de evitar que las familias de los estudiantes sean quienes financien la investigación. En efecto, como lo ha mostrado el mismo Basso, en Chile el aporte de las familias al financiamiento de la educación superior en comparación con el aporte estatal es elevadísimo (las familias contribuyen en Chile a financiar la educación superior en un 54,8%, versus un 45,8% en EE.UU., y un 21,7% el promedio de la OECD).

Sin embargo, la existencia de estos “subsidios cruzados” entre investigación y docencia parecen ser inevitables: el mismo Basso lo reconoce cuando afirma que los investigadores también debieran realizar docencia; que “parte del equipamiento e infraestructura que se requiere para la investigación […] sirve para la docencia”, y en consecuencia, que las instituciones que reciban fondos para la investigación debieran rebajar sus aranceles por concepto de docencia. Estos “subsidios cruzados” –que Basso parece leer en términos puramente económicos— traducen una realidad más profunda: muestran que la relación entre docencia universitaria e investigación es más que la de dos actividades que ocurren, de manera casual, en un mismo edificio. Por el contrario, es precisamente la existencia de una intensa conexión entre estos dos ámbitos lo que otorga calidad a una universidad.

Por ejemplo, hoy en día la “mejor calidad” de una universidad como la PUC o la Universidad de Chile no está dada por la excelente formación en docencia y pedagogía universitaria que reciben sus profesores, la cual es todavía casi inexistente en nuestro país. La calidad ocurre a pesar de las escasas herramientas pedagógicas de sus académicos, y está dada porque muchos de ellos también son investigadores, y pueden transmitir a sus estudiantes conocimiento especializado, acceso a publicaciones, materiales, laboratorios, y redes académicas que solamente se producen por el hecho de realizar investigación. Los “subsidios cruzados” entre educación e investigación no son “un problema”: son un aspecto crucial del quehacer universitario. Ahora bien, ¿quiere decir esto que la buena investigación garantiza la buena calidad de la docencia universitaria? Claramente no, pero la favorece. Y en cualquier caso, concordamos en esto con Basso: no debieran ser las familias de los estudiantes quienes se hagan cargo de dichos costos.

El sistema de financiamiento “tripartito” propuesto por Basso es problemático en la medida en que, si bien aboga por fondos basales, en su aplicación implicaría replicar la lógica de “el ganador gana todo” que ha sido la base, hasta hoy en día, de todo el sistema de financiamiento de la investigación en Chile.

Otro de los puntos planteados por Basso hace hincapié en la esencia de la Universidad: de acuerdo a Basso, no todas las instituciones de educación superior debieran ser “universidades de investigación,” definidas de acuerdo a la Carnegie Foundation como aquellas que entregan formación de nivel doctoral y poseen los más elevados índices en investigación. Para Basso “pretender […] que todas las universidades realicen investigación es no sólo absurdo sino que financieramente infactible”, y “si se aplicara [a Chile] la proporción de universidades de investigación de los Estados Unidos significaría tener solo 11 universidades de investigación”.

La premisa que subyace al argumento de Basso es sin embargo que el sistema de educación superior chileno debiera homologarse y aspirar a replicar la clasificación y los estándares del sistema de educación superior de EE.UU. Esto es igual de absurdo, pues la estructura de la educación superior en Chile es profundamente distinta a la de Estados Unidos. Sin embargo, Basso, de manera automática asume que ese es el modelo que debemos adoptar. Una cosa es la experiencia comparada, siempre enriquecedora, y otra muy distinta es el imperialismo de los estándares internacionales.

La cuestión de si en Chile debemos o no definir universidad como una institución donde se realiza investigación o bien si pueden existir universidades meramente docentes, es algo que debemos resolver en nuestros propios términos, y de acuerdo a nuestras propias necesidades. Si bien, como lo afirma Basso, no todas las universidades debieran ser “universidades de investigación”, esto es, donde la investigación es una actividad predominante, es difícil pensar en “universidades sin investigación”, esto es, desprovistas de una orientación a generar nuevos conocimientos y a evaluar críticamente la realidad que las rodea, pues esto es lo que va a garantizar un aspecto central de la famosa “calidad” de la educación superior. Lo mismo, por cierto, puede decirse de los CFT e IP: si bien en éstos no debiera exigirse la realización de investigación, al menos se debiera requerir como un aspecto central la innovación. En efecto, la formación técnica y profesional debe ir encaminada no solo a replicar conocimientos existentes, sino a desarrollar en sus egresados la capacidad de aplicarlos de manera novedosa y creativa.

El último y más sustantivo aspecto de la columna de Basso es su propuesta de dividir el financiamiento estatal para la investigación en las universidades en tres niveles: A) un fondo basal permanente para las “universidades de investigación”, es decir, para aquellas que ya realizan investigación a gran nivel de forma sistemática B) un fondo de financiamiento por convenio a cinco años para investigación en áreas específicas para universidades “con importante producción previa demostrable” en dichas áreas, y C) un fondo de financiamiento concursable para investigadores individuales estilo Fondecyt, que podría llegar a todas las universidades. Esta clasificación y por ende estos fondos serían independientes del carácter estatal o privado de la universidad. Además, se crearía un fondo para el mejoramiento de la docencia en universidades estatales, especialmente aquellas que no alcancen la categoría “A” o “B”.

Esta propuesta es inteligente y perfectamente razonable si lo único que se persigue es mejorar la “eficiencia” de los fondos destinados a investigación, pues busca precisamente concentrar fondos de investigación basales o de mediano plazo en universidades que ya tienen la capacidad demostrada de llevarla a cabo. El problema es que meramente contribuiría a reforzar las desigualdades regionales y socioeconómicas del sistema de educación superior: se haría más fuertes a las universidades que ya lo son, y más marginales a las que hoy en día no cuentan con los recursos para iniciar o fortalecer programas incipientes de investigación. Más aún, si bien es atendible que se considere un fondo específico para mejorar la docencia en universidades estatales, ¿qué hay entonces de intentar fomentar la investigación en universidades estatales, especialmente las de regiones?

Esta propuesta, por tanto, solamente tendería a cimentar un sistema de educación superior segregado, y en el que nuevamente, el financiamiento público se otorga sin distinción a instituciones privadas y públicas. Esto no contribuye a resolver el problema que el mismo Basso se ha encargado de denunciar con tanta fuerza: la preeminencia del modelo neoliberal de mercado en la educación superior.

En conclusión: el sistema de financiamiento “tripartito” propuesto por Basso es problemático en la medida en que, si bien aboga por fondos basales, en su aplicación implicaría replicar la lógica de “el ganador gana todo” que ha sido la base, hasta hoy en día, de todo el sistema de financiamiento de la investigación en Chile. Puede, por cierto, premiarse a las instituciones que han “hecho las cosas bien” pues malgastar el potencial que han alcanzado sería ridículo. Asimismo, las universidades privadas que no cumplan con estándares mínimos en investigación debieran convertirse en CFT o IP o bien considerarse su cierre. Finalmente, el Estado debe establecer mecanismos para mejorar la investigación en las universidades estatales que hoy en día demuestran falencias en la materia. No se trata de convertirlas en el MIT, pero sí de que estas cuenten con una suficiente masa crítica de investigadores que permitan dotarlas de lo que entendemos por “calidad” universitaria: la posibilidad de criticar el medio en el que se vive y buscar modificarlo mediante la generación de nuevos conocimientos: nada más y nada menos que el alma de la investigación.

Fuente: http://www.elmostrador.cl/noticias/opinion/2016/12/08/solo-eficiencia-educacion-superior-e-investigacion/

Comparte este contenido:
Page 2166 of 3041
1 2.164 2.165 2.166 2.167 2.168 3.041