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Cambios e innovaciones claves en la Educación Técnica y Formación Profesional

Por: Rafael Lucio Gil

Cunde cada día más el convencimiento, de que la Educación Técnica y Formación Profesional (ETFP) es clave para construir el futuro de desarrollo humano del país. Desarrollo centrado en las personas, que no sacrifique sus derechos.

El Programa “Aprendo y Emprendo” financiado por Usaid, a través de la creación de su Red Nacional para la Educación Técnica y la Formación Profesional (ETFP), Renet, viene aportando a la modificación de la cultura nacional instalada que no valora esta prioridad.
Numerosas Conferencias Mundiales de la UNESCO han proclamado la importancia de la ETFP.

Ya en 1989, la 12va Conferencia confirmaba el énfasis y relevancia de la misma para el desarrollo social. La V Confitea, realizada en Hamburgo en 1997 y la VI Confitea realizada en el 2009, confirmaban su importancia, la necesidad de prestigiarla, superar la separación entre teoría y práctica, y vincularla estrechamente al trabajo.

Esta modalidad de educación-formación, en el marco de la globalización,  requiere realizar cambios relevantes, para responder a los grandes avances del mundo moderno, de las empresas, de los entornos laborales, de la tecnología, de la economía y de la sociedad misma.

Algunas de los principales atributos de la ETFP que requiere Nicaragua, con base en acuerdos mundiales y demandas del contexto, son los siguientes: Se trata de una educación y formación que debe ser cada vez más flexible, abierta y centrada en las necesidades del estudiantado; enfocada en desarrollar conocimientos, capacidades, habilidades y valores; orientada al mundo laboral y a la vida, Que sea fuente de provecho para cada persona, la sociedad y la economía del país. Una formación dirigida a desarrollar en la persona capacidad para gestionar conocimientos y aprendizajes por su cuenta; fortalecer dinámicas articuladas entre entidades públicas, privadas, empresas, comunidades y organismos no gubernamentales; con énfasis en una base cultural firme, formación inicial sólida, y que prepare para aprender a aprender y  a emprender. Una formación que proporcione información, desarrolle conocimientos, competencias, capacidades empresariales y, que ante todo,  forme la personalidad y en valores.

En las últimas décadas, los enfoques de la ETFP han evolucionado significativamente. En América Latina se perciben varias tendencias. Su razón fundamental son las nuevas demandas planteadas a la ETFP. Por ello, desde el nuevo referencial que preside estos profundos cambios, se habla más de una educación  para todos y continua, más que una educación en etapas; y ello, como condición indispensable para que la ETFP tenga fruto. Este nuevo direccionamiento está ocasionando la desadaptación de la ETFP tradicional del país con respecto a las dinámicas laborales aceleradas. Por ello, se reclama la convergencia sistemática y dinámica entre la demanda laboral y la ETFP. A esta dinámica rápida contribuyen, el desarrollo y la innovación tecnológica, lo que está provocando una auténtica revolución en la organización  laboral y la gestión del talento humano, derivando nuevos perfiles de ETFP.

Otra tendencia relevante es la “humanización” de la ETFP, con su énfasis antropológico centrado en la persona, con perspectiva incluyente, y una educación capaz de transitar de la escuela al trabajo, con una formación más centrada en el trabajo. Ello desafía los currículos, la pedagogía y didácticas específicas de enseñanza, con un rol docente muy diferente al actual. Se trata de lograr un desarrollo permanente de capacidades de la persona en procesos continuos. Un aditivo estratégico e innovador es la demanda de una formación con amplia base cultural, aptitudes básicas y capacidades cognitivas personales y sociales. Un currículo que demanda profundos cambios en los contenidos y prácticas, con una pedagogía y didácticas específicas capaces de movilizar las capacidades para sumir la formación. Incorporando nuevas tecnologías de enseñanza, para lo cual el país merece superar la amplia brecha digital existente.

Ello reclama una nueva institucionalidad y Proyectos Pedagógicos Institucionales, con  sostenidas y efectiva articulación con la empresa, Gobierno, comunidades, academia y organismos de la sociedad civil. Y todo ello, asistido por cambios profundos en la administración burocrática, nuevas leyes de apoyo, un presupuesto nacional que posibilite la ETFP como derecho, una gestión innovadora y pasarelas que posibiliten transitar hacia la educación superior.

Debe ocupar lugar central la incorporación de los sectores tradicionalmente excluidos y empobrecidos, y la perspectiva de equidad de género. Esto no será posible, sin una concertación educativa nacional inclusiva, y un consorcio con medios de comunicación para transformar la cultura de desvalorización de la ETFP existente en la sociedad.

Fuente: http://www.elnuevodiario.com.ni/opinion/412703-cambios-e-innovaciones-claves-educacion-tecnica-fo/

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El odio

Por: Alí Ramón Rojas Olaya

El odio es un sentimiento de oscura repulsión. Es el caldo de cultivo de la ira. La muerte del Libertador de Cuba, Fidel Castro, ha desatado entre quienes lo odian una vomitiva sarta de descalificativos.

Explicaba el escritor suizo Hermann Hesse (1877-1962) que “cuando odiamos a alguien, odiamos en su imagen algo que está dentro de nosotros”. Para el dramaturgo estadounidense Tennessee Williams (1911-1983), “el odio es un sentimiento que solo puede existir en ausencia de toda inteligencia”. El filósofo y psicólogo argentino José Ingenieros (1877-1925) argumentaba que “el hombre que ha perdido la aptitud de borrar sus odios está viejo, irreparablemente”. El novelista francés Víctor Hugo (1802-1885) señalaba que “cuanto más pequeño es el corazón, más odio alberga”. El escritor irlandés George Bernard Shaw (1856-1950), por su parte, exponía que “el odio es la venganza de un cobarde intimidado”.

Los sentimientos negativos: el rencor, la ira, el odio, la venganza, el resentimiento, la hostilidad, la intriga, la cizaña y los celos son enfermedades del alma. Quienes se alegraron por las muertes de Chávez y Fidel, además de tener un nivel espiritual muy bajo, tienen enferma la conciencia. La xenofobia, la misoginia, la homofobia, el apartheid, el machismo, el sexismo, el racismo y la aporofobia, odio a los pobres, son síntomas de este mal. Quien odia excreta en las redes sociales todas sus miserias. Baila, ríe, y celebra la muerte. Si tiene poder tortura, invade, extermina, desacredita, explota, usa la ciencia sin conciencia. Nerón, Calígula, Atila, Hitler, Roosevelt, Kissinger, Pinochet, Thatcher, Reagan, Bush, son algunos ejemplos.

La manifestación de odio por la muerte de los dos mandatarios latinoamericanos tiene un antecedente que nos toca el alma. De Bolívar, la prensa enemiga decía que tenía un chancro en el ano y su muerte fue “celebrada” y difundida así: “¡Bolívar, el genio del mal, la tea de la discordia, el opresor de su patria, ya dejó de existir! La oligarquía venezolana propuso un decreto para: 1) quitarle a ese “hijo espurio” los títulos y quemarlos y 2) considerar el 17 de diciembre de 1830 día infausto porque Bolívar murió de muerte natural cuando debió haber sido fusilado o ahorcado.

Hay dos vías: amar u odiar, socialismo o barbarie. Por eso Simón Rodríguez (1769-1854) nos recordaba que vinimos al mundo a “entreayudarnos, no a entredestruirnos”.

Fuente: http://www.ultimasnoticias.com.ve/noticias/opinion/ali-rojas-olaya-odio/

Imagen: https://www.taringa.net/post/arte/18296745/Fidel-Castro—Pintura-Digital.html

 

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La Fundación del Trabajo y la equidad de género

Por: Oscar Lasso Altamiranda

En el ámbito laboral panameño deben existir las competencias para un adecuado diálogo social y la negociación colectiva, actualmente son evidentes los múltiples condicionamientos, restricciones y desafíos. A largo plazo, Panamá será modelo de la adecuada relación laboral con los elementos que lleven armonía, productividad y competitividad compartida.

Las condiciones de la sostenibilidad del diálogo laboral nacional son aspectos que deben desarrollarse en primera instancia con el respeto mutuo entre la dirigencia empresarial y laboral con los sectores representativos del Estado.

El reconocimiento de la legitimidad, principios y objetivos de las organizaciones empresariales y sindicales y de que estas forman parte de la institucionalidad democrática del país. Reproducimos algunos comentarios de la Licda. Elsa Guanti de Rodríguez, copresidenta del sector empresarial de la Fundación del Trabajo.

Promueve el Fomento de la Equidad de Género

La mujer panameña enfrenta ingentes desafíos para lograr un pleno reconocimiento de los derechos consagrados en la normativa nacional e internacional.

Todavía persisten brechas de equidad en las oportunidades de empleo e ingresos, así como prácticas del mercado laboral que tienden a excluirlas de las posiciones de dirección en las diversas organizaciones y enfrentan estigmas de distinta índole por el solo hecho de ser mujer.

Ante esta realidad el Comité de Género de la Funtrab está implementando un conjunto de actividades en materia de información, actualización y sensibilización sobre los derechos laborales de las mujeres, los hombres y la familia, con una perspectiva de equidad de género.

Durante los tres últimos años se han realizado 15 FORO’s y eventos (en Panamá, Panamá Oeste, Chiriquí, Bocas del Toro y cuatro comarcas) con la participación de directores de recursos humanos de empresas, autoridades nacionales y locales, así como de trabajadoras y trabajadores en general, y el Sector Empresarial. En estos eventos se han abordado los desafíos de las ‘Relaciones Sociales entre los Hombres y Mujeres en el Sector Productivo’, con el fin de corregir problemas y rescatar Buenas Prácticas. El Comité de Género seguirá operando como correa de transmisión de iniciativas para el Fomento de la Equidad de Género en el mundo del trabajo.

Propuestas de acciones inmediatas derivadas de los FORO’s:

A) Fortalecer la creación de centros parvularios (en una alianza público – privada que incluya empresas, sindicatos, municipios, juntas comunales, etc.).

B) Que el Sector Productivo desarrolle iniciativas y promueva la incorporación de nuevos objetivos y beneficios en las convenciones colectivas, respetando los derechos y las conquistas adquiridas en la convención.

C) Promover el contenido de los Convenios Internacionales de la OIT, 87 Libertad Sindical, 98 Libertad Sindical y Negociación Colectiva; 141, 151 sobre Relaciones de trabajo en el Sector Público; y 154 sobre Promoción de la Negociación colectiva.

D) La problemática de las personas con capacidades diferentes y su integración al mercado laboral.

E) Promover la estabilidad de los servidores públicos.

F) Divulgar las afectaciones del fenómeno de Femicidios en el Sector Productivo, recomendar al Mitradel que se incorpore a la Red del Ministerio de Salud, para fortalecer el tema Salud Ocupacional, Mental y Física de los trabajadores.

G) Promover un Diálogo permanente en el Sector de la Construcción, entre Suntracs, Capac, Mitradel; y otras instituciones como el Mop, Miviot, Dirección de Aseo, Meduca, Bomberos y los Municipios, con el fin de analizar, buscar alternativas que vayan en una sola dirección, en beneficio de los trabajadores y promover el cumplimiento del Plan de Seguridad.

En la actualidad, se está impulsando un proyecto de Centros Comunitarios de Orientación y Desarrollo Infantil (Cecodi), conjuntamente con la Universidad Especializada de las Américas (Udelas). Constituye una iniciativa que busca dar respuestas a las necesidades de la mujer trabajadora que no accede a servicios de atención a infantes, lo cual limita y condiciona su participación laboral.

Se busca una Alianza con Sumarse, para el fortalecimiento de los valores en la familia, a través de acuerdos y actividades diversas.

Fuente: http://laestrella.com.pa/opinion/columnistas/fundacion-trabajo-equidad-genero/23974856

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Innovación en la administración horizontal para la educación

Por: Rosalía Nalleli Pérez Estrada

Interesante propuesta que hace  Gary Hamel en su libro The Future of Management, en el que sugiere eliminar las jerarquías y aplicar una administración horizontal, con gente comprometida, soñadora, innovadora, que tiene contacto con el producto, que sabe lo que el cliente espera y que desea cumplir sus metas.

En su propuesta ejemplifica cómo la gente hace su trabajo por el placer de hacerlo, poniéndose metas para sí mismo, sin tener que obedecer ciegamente un proceso que le elimina la creatividad, el deseo de avanzar y de dar resultados; en un tipo de motivación interna de hacer lo que más le gusta; donde el motor que lo mueve es el deseo de lograr sus objetivos sin descuidar la calidad de sus resultados. En su ejemplo de administración, él menciona que, al desconectarse del producto, se perdió también la conexión emocional de lo que se entrega y se pasó a un menor sentido de responsabilidad por la calidad, del producto y por la eficacia. Y, en un intento de lanzarme al vacío ante la crítica de los conservadores de la educación, me atrevo a decir que su propuesta podría equipararse a lo que sucede en la enseñanza, cuando son mínimo 6 docentes los que trabajan en educación básica con un mismo alumno,  y que en un año escolar se preocupan por él, pero al siguiente lo olvidan por buscar el avance de los nuevos alumnos, en donde la responsabilidad de todos lleva a resultados de nadie…entregando un producto final  con ciertas competencias, pero con muchas otras faltantes, ya que  cada quien imprime su enseñanza, dependiendo de su visión del mundo, convirtiendo a sus alumnos en piezas de un sistema educativo que llevan a la no conformidad.

Esta no conformidad se aprecia cada vez más cuando se reprueba un examen de certificación, una prueba estandarizada, se es rechazado en un empleo o se es incapaz de convivir en paz con la sociedad en la que vivimos, pero se convive con mayor facilidad con la violencia, el robo, el atropello a los derechos humanos y a la seguridad social. ¿De qué manera se regresa el producto?

Es cierto que el  proceso que se sigue no es malo, lo malo es el seguimiento que se le da en cada subproceso. En la empresa  el producto final se puede medir en parámetros de calidad y se  ha buscado romper paradigmas: los gerentes han dejado de ser los únicos que  representaban a la organización y los empleados han dejado de ser simplemente un contingente de recursos necesarios, dándoles un papel más inclusivo y de unión de talentos. Para esto, Hamel cuestiona en su libro porqué se ha llegado a creer que la libertad y la disciplina se excluyen, ejemplificando con la analogía del software y la computadora, que no funcionan hasta que alguien los hace funcionar. Habla también de los empleados indiferentes, con innovación  mutilada en  organizaciones poco flexibles, que les truncan el don de aplicar sus talentos en una prisión que rompe libertades y al verse impedidos dejan también de responsabilizarse.

Dice (p. 188) que “una manera de romper los grillos del pasado es desterrando las decisiones que se marcaron atrás y que los empleados necesitan de los gerentes en gran medida por la misma razón que los chicos de 13 años necesitan de sus padres: son incapaces de manejarse así mismos”. En otras palabras, se les ha roto la libertad de tomar decisiones, de poner sus propios parámetros de calidad, pensando que requieren de vigilancia para poder producir.

En la educación, si al docente se le minimiza en sus resultados, se le imponen jefes de materia, supervisores, auxiliares de supervisores, jefes de sector secretarios y los secretarios de los secretarios, probablemente  se les coarta la libertad de responder por sí mismos por sus frutos y parte de la baja calidad quizás tenga relación con la rebeldía del adolescente cuando el papá lo obliga a hacer algo que no quiere, se enoja con el papá y logra bajas calificaciones.

Entonces ¿Qué pasaría si se les permitiera un poco más de libertad por enfrentar sus consecuencias, evitando la represión del seguimiento a sus procesos, a sus documentos o a sus horarios? ¿Qué pasaría si por niveles se nombrara a un responsable único, para llevar de la mano a un grupo de alumnos durante todo el nivel y después exigirle en sus resultados, sin que tuviese que compartir la responsabilidad de muchos, y esto sirviera para evaluarlo realmente, en el rubro de los resultados? ¿Qué pasaría si se les reconocieran más sus logros, se ensalzara más su imagen y se le diera más realce a su labor, dejando de hablar tanto de sus errores, para cambiar los parámetros de aciertos?. Si esto sonara a algo descabellado, pensemos en aquellos docentes que durante las cruzadas con Vasconcelos trabajaban arduamente y con pasión, buscando objetivos comunes, sin tener que lidiar con todos los aspectos que actualmente nos ocupan.

Urge el cambio de ver al docente como el causante directo de la educación del país, para respetarle más en su labor diaria, sabiendo que es una parte del todo y quitarle parte de la gran carga, dándole un rol especifico, en este mundo donde  la tarea es de todos pero la responsabilidad es de nadie.

Gary Hamel, (2008) The Future of Management. ISBN: 9789584508393

Fuente: http://www.educacionfutura.org/vozdelprofe-innovacion-en-la-administracion-horizontal-para-la-educacion/

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La universidad pública: Una respuesta para la coyuntura

Por: Humberto Muñoz García

La teoría de la dependencia, elaborada por Cardoso y Falleto, nos ubicaba como un país dependiente, periférico, en el sistema mundo. Después de muchos años, desde la entrada de México al GATT y con el Tlcan, nuestros lazos de dependencia se amarraron con más fuerza, particularmente con Estados Unidos, país con el que comerciamos la mayor parte de nuestras mercancías.

Los amarres con Norteamérica han llegado a ser de corte estructural en la economía, tal que el crecimiento de México depende en buena medida de lo que pase en el vecino país. Los términos de intercambio consisten, todavía, en que nosotros producimos materias primas y ellos nos venden productos elaborados (el caso del petróleo y la gasolina). Importamos alimentos procesados, tecnología, conocimiento,  hemos cedido  territorio y puesto mano de obra barata en disponibilidad para empresas como las automotrices, y mineras que vienen de Canadá.

En México se hacen buenos negocios, con los bancos (integrados al sistema financiero mundial), con las maquilas, y hay como invertir desde el extranjero en infraestructura turística, explotada al máximo para que rinda frutos a corto plazo. Ofrecemos servicios a bajo costo para quien tiene dólares y enviamos a muchos jóvenes, hombres y mujeres, a Estados Unidos para que trabajen en el sector terciario haciendo tareas que sus ciudadanos no quieren desempeñar.
Con el libre mercado han venido grandes empresas, que han establecido parques industriales, acompañadas por otras empresas que producen insumos para el producto final. Vienen por los bajos salarios. Son cadenas productivas difíciles de desmontar. Culturalmente, hemos sido invadidos, por ejemplo, con el cine, la televisión y la moda, tres aspectos que crean subjetividades afines a la dependencia. Y, por último, pero no menos importante, producimos y vendemos drogas, compramos armas.

En todo el proceso de desarrollo hacia fuera, las instituciones sociales se han debilitado, ha crecido la pobreza y, prácticamente, se ha extinguido la movilidad social, al tiempo que la riqueza se ha concentrado. Pero, ahí no se agota el modelo, porque éste ha podido funcionar gracias a la asociación y acuerdos de los grupos dominantes en ambos lados de la frontera y gracias a la falta de alianzas y fuerza de las clases subordinadas que sostienen la estructura de poder con su voto.

En una observación de largo plazo, hemos estado sometidos a crisis recurrentes;  la de ahora se puede poner peor, si se toman medidas como las que ha anunciado el próximo presidente norteamericano. Ante una perspectiva diferente de las relaciones de México y Estados Unidos, tenemos la desventaja de una economía que no jala y una clase política que se ha debilitado mucho, en lo que va de este siglo. Ha manejado el Estado a favor de los intereses de las elites dominantes de aquí y de allá, ha endeudado a la nación, recortado los presupuestos, eliminado conquistas sociales, y facilitado que parte de los excedentes salgan hacia fuera, incluido el capital cultural que perdemos con la fuga de cerebros.

En este contexto se ubican las universidades y universitarios de México. Lo que sigue para la universidad en este  modelo de desarrollo, también se presenta difícil, porque la investigación requiere de inversiones fuertes, para hacer ciencia básica y transferir conocimiento aplicable, que se conecte  con los sectores más dinámicos de la economía ligados al mercado interno, para generar bienestar y nuevas expectativas para los jóvenes. Nuestra universidad pública puede desarrollar una capacidad científica al servicio de las necesidades sociales. De ella salen conocimientos para progresar.

Al  mismo tiempo, con todo el cuidado que requiere la academia, habría que impulsar la presencia de las ciencias sociales y las humanidades en los medios de comunicación. La universidad necesita reforzar sus nexos  con la sociedad y ser un centro de reflexión y pensamiento autónomo al servicio de los intereses nacionales. Usar  las ciencias sociales y las humanidades para tener conocimientos al día de cómo evoluciona la crisis del sistema mundial y cómo nos ubicamos en él. Además, para auxiliarnos en la construcción de una nueva ética social que nos haga sentir dignos.

Ante crecientes dificultades y amenazas contra nuestra sociedad, la universidad puede crear, con sus académicos,  agrupaciones de investigadores, equipos multidisciplinarios de trabajo temporales, integrados a organizaciones flexibles,  programa o seminario,  cuya misión sea analizar de forma sistemática, en plazos cortos, las causas y efectos de los problemas y procesos locales, nacionales y globales. Los resultados que se obtengan brindarán orientaciones estratégicas que auxilien a la toma de decisiones en materia de políticas públicas. Y ésta es solo una forma de cómo la universidad puede contribuir a que el país salga adelante de esta coyuntura.

La idea es que la universidad pública concentre esfuerzos para responder a la extrema dependencia de la sociedad,  de manera efectiva, ante los cambios políticos que están a la puerta. Contribuir a que la sociedad adquiera una imagen positiva de sí misma para que siga un nuevo rumbo.

Fuente: http://campusmilenio.mx/index.php?option=com_k2&view=item&id=5286:la-universidad-publica-una-respuesta-para-la-coyuntura&Itemid=140

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Tres buenas razones para dejar de dar tanta importancia a los exámenes PISA

Por: Hector G. Barnés

Después de haber sido durante unos cuantos años el espejo en el que todo sistema educativo nacional deseaba reflejarse y, a poder ser, salir favorecido, PISA ha pasado a ser objeto de críticas de muy diferente índole. No es de extrañar: cuando algo tan complejo como la educación se reduce a un par de cifras y unos cuantos titulares alarmistas, muchos empiezan a temer que quizá estemos dando demasiada autoridad a una evaluación que cumple con creces los mínimos exigibles, pero que dista mucho de ser perfecta.

Es lo que ocurre, por ejemplo, con Leslie Rutkowski y David Rutkoswki, dos profesores de la Universidad de Olso que han dedicado un buen puñado de ‘papers’ académicos a matizar la utilidad real de PISA. El último de ellos es ‘A Call for a More Measured Approach to Reporting and Interpreting PISA Results’, y ha sido publicado en ‘Educational Researcher’. Se trata de un compendio de algunas de sus principales objeciones, en el que los autores recuerdan que “la información proporcionada por PISA es aceptablemente precisa y fiable, pero no es perfecta”, al mismo tiempo que piden que los resultados sean tomados con moderación.

Los autores proponen ejemplos de esta locura que rodea los exámenes PISA. Es el caso de los resultados obtenidos en el año 2000 por Alemania, que provocaron un ‘shock’ que “condujo a gigantescas y rápidas reformas educativas”, algo que también ocurrió cuando otros países como Japón o Dinamarca obtuvieron malos resultados. Como recordaba una previa investigación, “cada vez que una nueva oleada de PISA llega, o aparece un análisis adicional, los gobiernos temen los resultados, los periódicos llenan columna tras columna, y el público demanda respuestas a los fallos en el sistema escolar de cada país”.

Lo que produce una obsesión malsana por los ‘rankings’, que terminan transformándose en una “carrera de caballos” educativa que “identifica a los ganadores y a los perdedores, con los ganadores situados en el foco internacional y los perdedores bajo un microscopio imaginario”. Es lo que ocurrió, por ejemplo con Finlandia, que pasó de ser “el objeto de una ola de turismo de académicos y políticos que querían descubrir los ingredientes que la llevaron al éxito educativo” a ser superada, de repente, por Shanghái, lo que provocó que los propios finlandeses empezasen a considerar que “su sistema educativo se había derrumbado”.

“PISA no está libre de errores”, concluyen los autores. “La posición prominente de PISA y las críticas que se han realizado hacen que sea aún más importante, por lo tanto, utilizar cuidadosamente los datos, que depende de un entendimiento claro de las limitaciones inherentes al estudio”. Por ello, más allá de sus reservas sociológicas, los autores analizan tres de las grandes debilidades estadísticas de esta evaluación que determina el futuro de las políticas educativas de cada nación.

La primera reserva que manifiestan los autores tiene que ver con las tasas de exclusión en los exámenes, es decir, con el porcentaje de alumnos cuyos resultados no son cuantificados. Como señalan, aunque por lo general la muestra es representativa, “los estudiantes con discapacidades intelectuales o funcionales severas, con habilidades lingüísticas insuficientes o los colegios donde estudian son candidatos para la exclusión”. Algo aceptable, siempre y cuando el porcentaje se encuentre por debajo del 5%. Sin embargo, los Rutkowski desvelan que hay ocho países donde este porcentaje es mayor, entre ellos, Luxemburgo, con un 8,4%, lo que puede causar “distorsiones mayores de lo que cabría esperar”. A lo que hay que añadir un importante problema: la información sobre estos datos se publicó en diciembre de 2014, aunque los resultados ya se conocían desde un año antes.

Más allá de esta objeción, los autores recuerdan que aunque PISA puede ser representativo de la población escolar de un país, no lo es de la población total de 15 años; es decir, aquellos que no están escolarizados no aparecen reflejados en los resultados. Es lo que ocurre en países como Costa Rica, donde solo un 50% de la población lo está, o con Albania y Vietnam, con un 55 y un 56% respectivamente. Pero también ocurre con Shanghái, el país que mejores resultados obtiene, pero donde menos del 80% de los niños de 15 años fueron reflejados en los datos de PISA.

¿Puede un niño español, uno chino y uno estadounidense tener exactamente las mismas capacidades para las mismas materias? Esa es una de las grandes dificultades a la que los exámenes PISA deben hacer frente: a una gran variedad sociocultural que debe ser filtrada en las mismas cinco materias, para lo que utilizan un modelo Rasch de teoría de respuesta al ítem. “Dadas las especificaciones del modelo de Rasch, se asume que los ítems del examen son igual de difíciles para todas las poblaciones bajo consideración”, explican los autores. Una asunción, recuerdan, que previas investigaciones han demostrado que es falsa. Por lo tanto, recuerdan, dichas diferencias pueden ser pequeñas, “pero estadísticamente significativas”.

Hay, claro está, herramientas utilizadas por PISA para intentar minimizar estas diferencias: en concreto, una muestra de múltiple matriz (“multiple matrix sampling”), así como un modelo de imputación cuyo objetivo es tener en cuenta todos los datos disponibles de los estudiantes para generar una distribución en la cual cada alumno sea analizado en razón de un gran número de variables que pueden influir en su rendimiento, y que pueden llegar a las 400 en algunos sistemas educativos.

Es decir, más allá de las complejidades del género, los niños marcan la casilla de niño y las niñas la de niña, algo sencillo”, explican los investigadores. “Con preguntas más complejas, sin embargo, las investigaciones sobre las evaluaciones internacionales como PISA han mostrado que hay discrepancias entre lo que reportan los padres y los estudiantes sobre sus posesiones inmobiliarias y estas son mayores en los sistemas educativos menos desarrollados económicamente”. Faltan muchos más datos de lo que cabría esperar, como por ejemplo el 12% de las respuestas de cuál es el idioma que más se habla en casa. “Cuando la información de fondo de los estudiantes se pierde, las diferencias en los logros entre subgrupos se estiman incorrectamente”.

Tendencias de medición

Uno de los puntos más complejos de explicar, y que hace referencia al carácter de análisis de tendencias que tiene PISA. Ello quiere decir que las diversas oleadas tienen como objetivo, ante todo, reflejar el avance o el retroceso de un país, por lo que se comparan los resultados obtenidos en diversas pruebas. Sin embargo, estos resultados también sufren ciertas inconsistencias, señalan los autores, especialmente a la hora de crear enlaces entre distintas oleadas, sobre todo debido a que cada examen tiene un peso diferente en cada oleada.

Por ejemplo, en 2009 tuvo un mayor peso la lectura. “Conectar diversos exámenes a lo largo del tiempo es más complicado debido a la distinción entre dominios mayores y menores y a que algunos dominios de contenido no tenían marcos completamente desarrollados hasta que fueron incluidos como un dominio mayor”, señalan los investigadores. Es, por ejemplo, lo que ocurrió en el año 2006 con la Ciencia, cuando fue por primera vez la materia más importante.tegr

Como en otros aspectos, señalan los investigadores, una lectura cuidadosa de los resultados de PISA nos permite descubrir que ellos mismos son los primeros en señalar dichas inconsistencias, probablemente menores teniendo en cuenta el tamaño de las evaluaciones, pero que suelen pasarse por alto. De ahí que hagan tres recomendaciones a la OCDE a la hora de desarrollar esta clase de exámenes: en primer lugar, “la publicación clara de las advertencias”, es decir, que no se encuentren “enterradas entre una miríada de otros detalles e información”. En segundo lugar, “ser consistentes en documentar y reportar solo aquellos análisis metodológicamente sensatos”. Y en último lugar, pero no menos importante, “que se publique la documentación técnica sobre un ciclo de exámenes con la misma velocidad con la que se publican los resultados”.

Fuente: http://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2016-12-07/tres-razones-dejar-dar-importancia-examen-pisa_1205610/

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Infancias pisoteadas

Sonia Sierra

En los últimos días, varias las noticias protagonizadas por menores han saltado a los medios y, desgraciadamente, todas ella son atroces. Tenemos, por ejemplo, el caso del profesor que presuntamente ha abusado de sus alumnos entre 11 y 13 años en Villanueva del Pardillo (Madrid). La justicia española se puso inmediatamente en marcha, el hombre de 33 años fue apartado de sus funciones, y ahora mismo está en prisión, mientras que el centro ha puesto a disposición de los alumnos atención psicológica. Aun así, es más que posible que tengan que arrastrar de por vida las secuelas de esos abusos en un lugar en el que se supone que deberían estar protegidos, como es la institución escolar. ¿Nadie vio nada? ¿Ningún profesor notó un cambio extraño en sus alumnos? De momento, el director también ha sido destituido.

También en nuestro país, en este caso en Rubí (Barcelona), una mujer de 32 años que se dedicaba a captar y trasladar mujeres de Europa y Marruecos a Siria e Irak para unirse al grupo terrorista Estado Islámico, mostraba su compromiso con la organización haciéndole repetir a su hijo de 3 años barbaridades como «degüello al policía y voy». A una edad en la que el universo de un niño deberían de ser los juegos y el descubrimiento del mundo, esa madre lo convierte en objeto de sacrificio de esa orgía del odio que es el yihadismo.

El Estado Islámico nos sorprende cada día con alguna de sus muestras de crueldad absoluta, ya sea degollando cristianos o destruyendo restos arqueológicos de los albores de la civilización. Ahora han difundido un vídeo en el que un niño, junto a un adulto, conduce a un prisionero por el campo. El adulto suelta una alocución contra los judíos, y el crío dispara al joven enfundado en un mono naranja en la frente. Es un niño con una cara preciosa, de rasgos infantiles y redondeados. Sin embargo, su gesto es frío, concentrado como está en no errar el tiro con esa arma en sus manos. Esa arma no es una ligera pistola de plástico de vaquero o del espacio, sino de un metal pesado. Cuando el hombre cae, vuelve a dispararle y celebra su muerte como cualquier niño de su edad celebraría haber metido un gol.

Otro de los muchos horrores de este grupo terrorista es secuestrar y violar mujeres y niñas de los que ellos consideran enemigos, como por ejemplo, la etnia kurda yazidí. La violación de mujeres es un arma de guerra, se utiliza para atacar y humillar a los hombres, ya que se ve a las féminas como una posesión masculina. Además, si tras las violaciones se quedan embarazadas, es una manera atávica de dejar su semilla de odio diseminada entre los enemigos.
No se trata, pues, de ninguna novedad y si esta vez ha saltado a la prensa es porque estas pobres crías, al ser devuelta a sus hogares, se han suicidado en masa. Horror sobre el horror, y el mundo sigue girando sin que apenas levantemos la vista de nuestras ocupaciones habituales.

También forma parte de la normalidad en Yemen que las niñas se casen con adultos: casi una de cuatro menores de 15 años son dadas en matrimonio. En 2009 se aprobó una ley en ese país para que la edad mínima se elevara a los 17 años, pero fue revocada por los legisladores conservadores por considerarla una ley anti-islam. No sé qué opinará Alá de que una niña de 8 años muriera en la noche de bodas por lesiones sexuales; quizá le tenga reservado un lugar de honor en el paraíso. Yo, como soy más terrena, hubiera deseado para ella un mejor destino en esta vida, y que alguien hubiera velado por su bienestar.

Todos estos casos tienen en común infancias truncadas y tienen que ver con esa extendida idea de que los niños (y aun más las niñas) no son personas individuales con sus derechos sino meros objetos fácilmente manipulables. Los seres humanos, a diferencia de otras especies animales, necesitamos un amplio periodo de crianza, por lo que un bebé no puede sobrevivir sin cuidados. Por este motivo, cuando una persona decide traer otra al mundo, tiene la obligación de alimentarla y protegerla y, si esto no es posible, debería ser el Estado quien se hiciera cargo. En la preciosa novela El lector hay una reflexión muy interesante: el padre del protagonista le dice a su hijo que la Filosofía nunca se ha encargado de los niños. Claro que existe la Declaración de los Derechos del Niño (1959) y la Convención sobre los Derechos del Niño (1989) y está bien que así sea, pero es obvio que en la práctica, son papel mojado.

Urge un cambio de mentalidad que no se quede en los tópicos de la pureza y la inocencia de los niños y asumir que, al igual que los adultos, los niños deben de considerarse ciudadanos a los que se les debe garantizar sus derechos individuales, su protección y su acceso a la educación. Y, sobre todo, no ceder ni un milímetro ante la barbarie y no permitir que ideas como el respeto a las tradiciones o al ámbito de lo privado sirvan para seguir pisoteando infancias.

Fuente del articulo: http://www.huffingtonpost.es/sonia-sierra/infancias-pisoteadas_b_6884318.html

Fuente de la imagen:http://i.huffpost.com/gen/2729308/images/n-INFANCIASPISOTEADAS-large570.jpg

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