Page 316 of 454
1 314 315 316 317 318 454

Entrevista: Calidad educativa, su mayor prioridad

Francisco Díaz

El Mañana

El doctor Pablo Arenaz es nacido en Reno, Nevada, tiene un doctorado en genética, llegó como educador a la universidad de TAMIU en 2008 y acaba de ser seleccionado como presidente de esa importante universidad. En entrevista habla de su educación, sus prioridades y los planes que tiene para elevar la calidad de la educación en esta institución.

1.- ¿Dónde nació y dónde fue educado?

Nací en Reno, Nevada, y crecí en Las Vegas. Recibí mi doctorado en Genética y Biología Celular de Washington State University y mi maestría científica en Biología de University of Nevada at Reno (UNR, por sus siglas en inglés). Recibí mi licenciatura en Educación de la UNR. Dirigí investigación postdoctoral en la Facultad de Medicina de la Temple University, Fels Research Institute.

En lo que respecta a mi experiencia en investigación, tres acontecimientos importantes sobresalen: primero, la publicación de mi primer artículo; en segundo lugar, la publicación de un artículo en Actas de la Academia Nacional de Ciencias; y tercero, y probablemente el más significativo, el papel que he jugado en la clonación del gen apurínico/ endonucleasaapyridimínico (AP endonuclease) del hámster chino. La endonucleasa AP es una proteína primaria implicada en la reparación de ciertos tipos de daño a la molécula de la ADN.

2.- ¿Por qué eligió la carrera de educador universitario?

Las confluencias que hoy en día aumentan más que nunca entre la ciencia y los negocios me asombran y me comprometo personalmente a motivar a los estudiantes de todas las edades para que amplíen su experiencia en las áreas de STEM (Ciencia, Tecnología, Ingeniería y Matemáticas, por sus siglas en inglés) y participen en oportunidades de investigación sin importar el camino que hayan elegido tomar en su educación superior.

3.- ¿En qué lugares ha estado durante su carrera profesional?

Antes de integrarme a TAMIU, serví como vicerrector de estudios de postgrado y decano de la escuela de postgrado en The University of Texas at El Paso (UTEP, por sus siglas en inglés).

Mis puestos académicos han incluido el haber servido como profesor asistente, asociado y titular de Biología. Otros puestos que desempeñé en UTEP incluyeron los de vicerrector, vicerrector asociado de Asuntos Académicos y decano asociado de las Facultades de Ciencia e Ingeniería. Mis asignaciones especiales en UTEP incluyeron ser el director del Programa de Apoyo a la Investigación Biomédica de Minorías, la Alianza para la Participación de las Minorías y el Centro de Investigación Biomédica Fronteriza.

4.- ¿Cuándo se integró a TAMIU y qué clases enseñó?

Me integré a TAMIU en 2008 como vicerrector y vicerrector de Asuntos Académicos. Así también, soy profesor de Biología en TAMIU.

5.- ¿Cuál es su opinión sobre la comunidad de Laredo?

Laredo es una comunidad vibrante que irradia dinamismo, cultura, amistad y cooperación entre los dos Laredos. Mi esposa Norma y nuestros hijos Cristina, Rebekah y Pablo III nos sentimos bienvenidos y en casa aquí.

6.- ¿Cómo se siente al recibir la oportunidad de servir como presidente de TAMIU?

Me siento privilegiado al recibir la confianza del Consejo de Regentes y del rector del Texas A& M University System, John Sharpy. Me siento ansioso por poder laborar hacia el avance y el desarrollo de TAMIU. TAMIU es una joya multifacética y no puedo esperar poder aumentar aún más su brillantez, amplificar su entorno e incrementar su valor a múltiples mercados.

7.- ¿Cuáles son sus prioridades como presidente de TAMIU?

TAMIU es rica en diversidad con estudiantes y profesores provenientes de aquí y más de 40 países del mundo. Espero con interés poder formar alianzas con líderes de la comunidad para avanzar este foro diverso de aprendizaje. Además, la universidad se ha convertido en un centro regional y hogar tanto para las artes como para la excelencia académica y el crecimiento del liderazgo. Con esto en mente, planeo llevar a TAMIU a convertirse en una Universidad Destinataria, es decir, un lugar con programas esenciales que hacen de TAMIU el destino de los futuros más brillantes.

TAMIU busca oportunidades que nos permitan colaborar para atender necesidades comunitarias, regionales y nacionales comunes. Como tal, seguiré buscando de manera activa asociaciones que nos puedan impulsar, proporcionando oportunidades amplias para todos.

Por último, pero no menos importante, TAMIU cumple su misión diariamente con talentosos miembros de la facultad quienes dirigen a nuestros estudiantes a través del aprendizaje, la investigación y el servicio. Laboraré para impulsar a los miembros de la facultad para que así, puedan compartir plenamente su visión extraordinaria.

8.- ¿Cuáles son los desafíos en una universidad donde muchos estudiantes necesitan ayuda financiera?

TAMIU sigue siendo una de las universidades más accesibles de la nación. Hemos recibido varios reconocimientos nacionales por nuestro bajo costo y el alto valor de nuestros títulos. Además, un estudio que analiza el papel que juegan las universidades en la movilidad ha hallado que TAMIU ocupa el tercer lugar en el país entre las universidades con la tasa más alta de movilidad de ingresos. Los hallazgos fueron publicados en The New York Times. Esto va a la esencia misma de lo que TAMIU es… transformamos vidas e impactamos a las familias todos los días. Las vidas de nuestros graduados se mejoran considerablemente y las comunidades, estados, regiones y países en los que viven se mejoran cuantificablemente.

9.- ¿Qué planes tiene en términos de nuevos programas para los estudiantes?

1. Planeas a corto plazo – Finalización de un nuevo Edificio Académico / Laboratorio que nos proporcione espacio adicional con aulas y laboratorio; Agregar un nuevo programa interdisciplinario en ingeniería con enfoque en la ingeniería del petróleo y la informática y formar lazos más estrechos con Laredo Community College.

2. Planes a mediano plazo – Agregar nuevos títulos de doctorado en Justicia Penal, Humanidades y Educación; Aumentar la matriculación expandiendo nuestras huellas más allá del Sur de Texas; Ampliar el ofrecimiento de ingeniería y ciencias de la salud; Aumentar fondos externos y continuar desarrollando el componente «internacional» o global de la universidad.

3. Planes a largo plazo – Transformar a TAMIU de una institución de maestría a una institución de doctorado; Incrementar la investigación / actividad académica; Desarrollar a TAMIU a convertirse en una Universidad Destinataria a donde los estudiantes vienen de toda la nación porque tenemos programas reconocidos entre los mejores del país.

10.- ¿Un mensaje final para la comunidad de Laredo?

Espero con mucho interés poder trabajar con nuestra comunidad para que TAMIU pueda continuar proporcionando una educación de calidad mundial a nuestros estudiantes y producir investigación, así como servicios que mejorarán las vidas de los residentes del Sur de Texas y más allá.

Fuente de la Entrevista:

http://elmanana.com.mx/noticia/132254/Calidad-educativa-su-mayor-prioridad.html

Comparte este contenido:

Entrevista a Michael Apple: Los niños prefieren jugar AngryBirds, que leer

Chile/10 abril 2017/Fuente: webdelmaestrocmf

El filósofo Michael W. Apple (1942) es un especialista en educación, y un experto en la teoría curricular y la investigación, la enseñanza fundamental, y el desarrollo de las escuelas democráticas. Es particularmente un estudioso crítico de la teoría de Paulo Freire. Actualmente es profesor en la Universidad de Wisconsin-Madison (USA).

Compartimos, con fines únicamente educativos – pastorales la entrevista que sostuvo con Paula Molina del Portal “Qué Pasa” de Chile; y aunque se refiere en particular a la educación chilena (en buena parte del diálogo), consideramos muy interesante conocer su opinión también sobre los salarios y la evaluación docente, Singapur, Inglaterra y la excesiva preparación para las pruebas, que han hecho a los niños restar importancia a la lectura.

“Hemos conseguido que los niños odien leer”

El estadounidense Michael Apple, uno de los filósofos de la educación más importantes del mundo, advierte sobre los modelos educativos que está mirando Chile en su reforma, y sobre el peligro de los test. “Uno no es un número”, sentencia.

“Me preocupa Chile”, dice Michael Apple.

Se trata de uno de los principales filósofos de la educación en el mundo. Académico estadounidense, profesor de la Universidad de Wisconsin-Madison, Apple es uno de los principales teóricos de la pedagogía crítica de Paulo Freire, y la suya es una mirada inquisitiva sobre la educación en su país y en el mundo, similar a la que plantea Noam Chomsky en política.
El profesor recibe a Qué Pasa en la capital chilena, hasta donde viajó para ser investido como Doctor Honoris Causa de la Universidad de Santiago.

—¿Qué le preocupa de Chile?

—Chile ha liderado un tipo particular de reforma durante las últimas décadas, basada en los vouchers, la privatización, la profesionalización de los profesores, la selección de los alumnos. Bachelet está tratando de moderar y cambiar esas reformas. Es un paquete, pero algunos de sus elementos me preocupan. Uno de ellos es el de los vouchers. Está ampliamente probado que los vouchers no reducen la desigualdad y que, en el mejor de los casos, la mantienen. En Estados Unidos han tenido efectos muy perversos.

—¿Qué otro aspecto le inquieta?

—Lo que se llama la profesionalización de los profesores. Daré un ejemplo estadounidense, ya que Chile ha tomado mucho de allá, desde los Chicago Boys hasta su armamento. Allí Obama, a quien respeto, propuso que el salario de los profesores dependiera en parte de los resultados de las pruebas a los estudiantes.

Pero ya sabemos, ampliamente, que si miro dónde vives y en qué trabajan tus padres, voy a ser capaz de predecir, con una pequeña variación estadística, cómo te va a ir en cualquier prueba que te tome. Aún así, el sistema hace que a los profesores sólo les preocupen las pruebas, y a los niños sólo se los prepare para contestarlas. Los profesores son menos profesionales, menos autónomos y la mayoría de los niños recibe una educación poco robusta, donde no se les enseña ciencia, ni arte, no leen nada importante, porque sólo los evaluamos según sus habilidades básicas en lectura y matemáticas. Miro a Chile con los ojos de muchos países, respeto las luchas por la democracia que aquí se han dado, pero me preocupa que en la reforma se incorporen ideas que vienen de EE.UU. o Inglaterra, cuando allá están en el debate.

—¿Hacia dónde miraría usted, en cambio?

—Si Chile va a mirar a otros países, tiene que saber qué está pasando en ellos. En Inglaterra se está planteando convertir los colegios en “academias”, que dependan a nivel local, que compitan entre ellas en un sistema muy similar al que se impuso en Chile. Eso reduce el presupuesto público para educación, y favorece a los colegios privados y a las familias que pueden pagarlos. Sabemos que los barrios determinarán los resultados de los colegios. Sabemos que los colegios seleccionan a los alumnos, aunque el Estado lo prohíba. La idea del sistema es que los padres eligen, pero eso no pasa en ningún lugar del mundo. Los colegios eligen a los niños y a los padres.

—Descartamos Inglaterra entonces…

—Y claro, hay una nación que, se supone, valdría la pena mirar: Finlandia. He pasado mucho tiempo en Finlandia, y me parecería perfecto seguir su ejemplo, si Chile o Estados Unidos, que también ama a Finlandia, como casi todos los países, hicieran lo que ellos hacen: doblar o triplicar el sueldo de los profesores, pagar sus estudios de posgrado, permitir sindicatos poderosos. Y necesitaríamos además un sistema de seguridad social muy fuerte, para que la diferencia entre ricos y pobres sea pequeña. En Chile es enorme, igual que en Estados Unidos, donde además va en aumento. En Finlandia, si un padre queda sin trabajo, su hijo recibirá ropa de calidad, para que nadie sea marginado porque no tiene qué ponerse. Si quiero seguir el camino de un país, no sólo miraría su educación, sino todo lo demás.

—¿Miraría a otros países con buenos resultados?

—Primero, insistiría: los buenos alumnos y los buenos profesores no se miden en las pruebas. Yo nací muy pobre. Fui la primera generación de mi familia que terminó la educación secundaria. Y aquí estoy, soy un profesor. Así que yo sé que, a veces, las escuelas pueden compensar la pobreza. Pero también sé que la mayor parte del tiempo no pueden, a menos que la educación se vincule a otras reformas sociales.

—¿Qué piensa del caso de Singapur?

En el caso de Singapur hay escuelas de élite, donde los alumnos reciben una educación creativa, interesante, orientada a formar doctores, políticos, abogados. El resto de la población es educado para responder las pruebas. Y luego tienes un enorme grupo de inmigrantes provenientes de China, India, Filipinas a cuyos hijos, simplemente, no se les toma la prueba. Shanghái es aun más interesante. Yo hice clases en Shanghái, que es una ciudad impresionante. Imagina una ciudad donde todos los edificios son como el que ustedes tienen en Santiago (la torre del Costanera Center). Se ve muy rico. Pero en China unos 300 millones de personas han migrado del campo a la ciudad. Y China desarrolló un sistema de pases de residencia para moverse de un lado hacia otro. Con los trabajadores hace vista ciega, porque necesita mano de obra, pero que no les permite traer a sus hijos a la ciudad. Los niños entran igual, pero quedan sin acceso a la educación. Los educan de forma ilegal, en fábricas viejas, en garajes sin calefacción. O los incorporan a programas de “educación especial”, pero en ningún caso rinden las pruebas. Sólo los niños que tienen permiso de residencia van a las escuelas públicas y dan las pruebas. Mi punto es que las mediciones pueden ser muy engañosas. Chile debe entender que si toma una idea de Singapur, o de cómo se enseña matemáticas en Shanghái, tiene que preguntarse cuánto sabe de esa sociedad.

—¿Cuál es la alternativa a las pruebas estandarizadas para medir la educación?

—Tenemos que encontrar formas distintas de evaluación. En Maine, Estados Unidos, sólo el 25% de la evaluación de niños y profesores se basa en sus resultados en las pruebas. El resto es observación, participación, se contempla el portafolio de los estudiantes, su desempeño en arte, poesía, su capacidad para escribir ensayos. Son evaluaciones que toman tiempo y trabajo. Pero los profesores sienten que se les trata como a profesionales, y no sienten que tienen una prueba sobre su cabeza cada día.

—¿No hay nada que podamos aprender de los resultados de las pruebas?

—Parte de la realidad se puede evaluar a través de números. En educación, los números son los test. Pero si usted le pide a alguien que evalúe su día, esa persona no le dará un número, le va a contar una historia. Uno no es un número, uno tiene un relato mucho más rico. No me opongo a la evidencia, pero los profesores y la comunidad deben debatir qué evidencia necesitan. Por qué resultados van a juzgar a los profesores. La educación no debería tratarse sólo de pruebas, debería dar a los niños las habilidades para reflexionar sobre su vida, para pensar en su futuro y el de su nación. Si no, la educación sería una fábrica. Es en el colegio donde aprendemos a cooperar, a compartir, a ser solidarios.

—¿Qué pasa con los alumnos frente a las pruebas?

—Incluso en los colegios donde les va bien, cuando les preguntan a los niños si les gusta leer, responden cosas como “no, lo odio”. El foco en los test genera una disposición negativa hacia el aprendizaje. Eso es lo que llamamos el “currículo oculto”. Los colegios harán cualquier cosa para mejorar su resultado en las pruebas, porque ellos y los profesores dependen de esos resultados y se ha convencido a los padres de que eso es lo único que importa. Pasa en Chile, Estados Unidos, Francia, Alemania. Lo que hemos conseguido es que los niños odian leer. Y luego nos preguntamos por qué, cuando tratamos de conversar con ellos, prefieren jugar Angry Birds. Porque les han dicho que leer no es algo valioso para ellos, que sólo vale para tomar una prueba.

—¿Cuánto hay de política en la educación?

—La educación siempre es política. Yo uso el concepto de “conocimiento legítimo u oficial”. De cientos y miles de cosas posibles, sólo elegimos algunas para enseñar a los niños. Esa elección es un acto político.

Fuente:http://webdelmaestrocmf.com/portal/michael-apple-los-ninos-prefieren-jugar-angry-birds-leer/

Comparte este contenido:

Entrevista: “La resistencia de la escuela es la ignorancia de cómo abordar y acompañar esta niñez”

Entrevista a: Gabriela Mansilla

Así lo manifestó Gabriela Mansilla, mamá de la primera nena trans del mundo. En diálogo con Contexto habló sobre la importancia de una escuela con perspectiva de género, de los desafíos que las niñas y niños trans y sus familias, y de la situación de los derechos de la comunidad LGBTI.

Gabriela Mansilla es la mamá de Luana, la primera nena trans del mundo en tener un DNI que reconoce su identidad autopercibida, gracias a la Ley de Identidad de Género 26743, sancionada en 2012. Esta madre es quien hoy encabeza la campaña “Por una infancia trans, sin discriminación ni violencia”, la cual ahora se ve potenciada con la creación de la Asociación Civil Infancias Libres. Desde este espacio, proponen que los niños y las niñas crezcan en libertad y en un marco de igualdad.

En el marco de la presentación del documental “Visibles. Por más infancia trans sin violencia ni discriminación”, Trabajo Integral Final de los ahora Licenciados en Comunicación Social Emilia Storani Estévez y Santiago Duque de Arce, material que también va a ser parte de la campaña, Contexto dialogó con Gabriela Mansilla en la Facultad de Periodismo y Comunicación Social

¿Que valor tiene este documental?

Primero el documental es informativo; quien no conoce termina de verlo y entendiendo la situación (tiene datos de la ley, de que es la identidad de género). Es muy valioso en la información que carga. Tiene además mucha sensibilidad porque le da la voz a los protagonistas que son las personas trans y no está cargado opinólogos. Siempre hablan todos menos las personas involucradas con su ser. “Visibles..” les dio voz y eso tiene mucha emoción.

Vos hiciste visibles las luchas de Luana y la tuya, ¿por qué tomaste esta decisión y en qué punto crees que esto ayudó a otros también a encarar sus luchas?

Ese es el punto. Si yo llegue a no saber qué hacer con mi hija es porque este tema estaba oculto. Necesitábamos esto, ser visibles; hacer visible la situación particular de una niña que podía ser la de cualquier niño o cualquier niña. La visibilidad hace que los que tengan que hacerse cargo de tu situación lo hagan.

De lo que no se ve no se habla, de lo que no se ve, todos miramos para otro lado. Entonces si vos estás haciéndote visible, te mostrás, decís ‘acá estoy’..¿Qué es lo que van a hacer los que son responsables para que yo tenga garantizado mis derechos?

Ser visibles levantó las situaciones que estaban pasando otras familias, que miren la tele y que digan ‘eso es lo que te esta pasando a vos que sos mi hijo’. Se empezaron a comunicar conmigo, a escribirme por las redes sociales. No esconderse abarca una gran valentía para poder enfrentar todo lo que eso conlleva.

En el marco de la campaña “Por una infancia trans, sin discriminación ni violencia”, conformaron la Asociación Civil Infancias Libres, ¿cuáles son las inquietudes en los que se encuentran las familias que se acercan a ustedes?

Primero informarse porque necesitan saber qué le está pasando a su niño o niña porque la información no la encuentran: ni en profesionales, ni en la escuela, ni en ningún lado.
Armamos la Asociación Civil por la demanda; yo puedo contener a una mamá e informarla, puedo contener a dos, a tres…

Una vez que se informan se liberan de los prejuicios; como si se volvieran a reeducar, sirve de herramienta para los niños y las niñas. Estamos transformando todo, esto es una revolución que cada vez está teniendo más gente y está teniendo más fuerza y cada vez se va a ir siendo visible para que la gente directamente ponga Infancia Libres y nos encuentren y podamos interceder en las escuelas, en los medios de salud, podamos conocer a esas familias y lo más importante: que los niños y las niñas tengan un punto de encuentro entre ellos.

Porque Luana es la única nena trans en su escuela, las otras chicas también y la sociedad pesa mucho; es muy feo sentirse solo y acá son todas iguales. Ante, lo diferente que se sienten en otros espacios acá son todas iguales y eso le da la fuerza al colectivo.

¿Cómo notas que se comporta la comunidad educativa con esta temática?

Lo que yo noto de la escuela es el miedo de meter la pata, es el miedo de no saber qué hacer. Está la aceptación, pero también está la ley que te lo impone. Lo aceptás porque estás convencido o porque la ley te lo dice.

Está el miedo a no saber qué hacer. Ellos están acostumbrados en la escuela que esté todo diagramado, no dan ni siquiera un tema que no esté en la currícula. Está tan estructurada la escuela que vos lo sacás de ese contexto y se preguntan qué hacer, a qué baño van, cuando es simple porque está ingresando un alumno más. Todo el bagaje de dudas se lo estás poniendo vos a esa criatura. La resistencia de la escuela hoy es la ignorancia de cómo abordar y acompañar esta niñez.

Además de la educación, ¿qué otros desafíos encontrás hoy por hoy para los niños trans?

La salud. Todo el sistema como está establecido va por el DNI y si vos le decis que la nombren como ‘fulanita’, porque no es ‘menganito’, te exigen ese dni; cuando a sólo pedido de la persona de debe respetar en toda institución pública o privada. Lo que falta es conocimiento de la ley. Falta el trato digno. Que un médico te pregunte cómo atenderlos.

Se piensan que tienen enfermedades extraordinarias o extraterrestres: si tiene una angina es la misma angina para nena con vagina que para una con pene. No es tan difícil.
Sí la pubertad o la adolescencia donde ya empiezan a desarrollarse el cuerpo de otra manera. Ahí faltan endocrinólogos, faltan urologos y ginecólogos infantojuveniles que aborden esta temática; falta más información sobre lo que puede pasar con los frenos puberales y con la hormonación que se le da a los adolescentes. No hay una estadística de qué pasa con esos niños, niñas adolescentes a cuatro o cinco años de bloqueadores o de hormonas.

¿Cómo ves el panorama hoy de los derechos la comunidad LGBTI?

Pésimo. Hay un desmantelamiento de lo que hemos ganado en derechos humanos. No puede ser que se haya luchado por tanto y que hoy esté todo yendo para atrás. Estamos hablando de seres humanos. Los derechos humanos no le importan a nadie y tiene que ver con un gobierno que se comprometa; y no hay un compromiso (…) Estas políticas públicas de las que nos fuimos acostumbrando, que podíamos ir ganando, hoy no las tenemos. Es una preocupación tremenda. No se cómo se puede modificar. Quien te discrimina antes podía llegar a entender o a escucharte, hoy se duplica la discriminación. Esta política de gobierno trae eso (…) Esto se potencia en la comunidad LGBTI. Antes se podía pelear de otra manera. A mi particularmente me entristece mucho.

¿Qué planes tienen desde Infancias Libres?

Queremos dar encuadres sobre perspectiva de género y diversidad sexual a los profesionales y capacitaciones para quienes necesiten como a alumnos de universidad, acompañamiento a las familias y a los niños y a las niñas. Desde la Asociación planteamos la idea de “amarse el cuerpo”, porque uno es más allá del cuerpo. Entonces es que queremos que estas infancias sean libres hasta la mayoría de edad, libertad en todos los aspectos.

Me encantaría llegar al Ministerio de Educación y modificar la Ley de Educación Sexual Integral para que en las escuelas ya se aprenda y cuando muestren una lámina no sigan reproduciendo estos cuerpos binarios que, por lo menos mi niña y los niños que estoy conociendo no entran; la escuela tiene que romper con esto.

Cuán importante sería que cuando empiecen los niños en la salita de tres no dividan las filas, los rincones de juegos, que se hable de una inclusión, que los cuentos no sean del príncipe que viene a buscar a la princesa… Los niños tiene que vivir en un mundo donde se tienen que dar cuenta de que los niños y niñas entiendan que somos todos iguales.
Para eso hay que romper mucho. Yo no voy a dejar la pelea, yo creo que me voy a morir intentándolo; voy a morir intentando que esta revolución llegue a un buen fin.

Fuente: http://www.diariocontexto.com.ar/2017/04/08/la-resistencia-de-la-escuela-es-la-ignorancia-de-como-abordar-y-acompanar-esta-ninez/

Comparte este contenido:

Entrevista: “Aprender a ser, aprender a vivir juntos, aprender a conocer y aprender a hacer son los cuatro grandes objetivos de la educación”

Educación y cambio ecosocial. Entrevista a Rafael Díaz-Salazar (I)

“Aprender a ser, aprender a vivir juntos, aprender a conocer y aprender a hacer son los cuatro grandes objetivos de la educación”

Salvador López Arnal

Nuestro entrevistado es profesor de Sociología y Relaciones Internacionales en la Facultad de Ciencias Políticas de la Universidad Complutense. Realizó con Francisco Fernández Buey su tesis doctoral sobre Antonio Gramsci. Ha publicado libros sobre la persistencia de la clase obrera, los trabajadores precarios, el pensamiento político de Gramsci, la izquierda y el cristianismo, los movimientos sociales altermundistas, la laicidad, las desigualdades internacionales. En los últimos años está investigando sobre ciudadanía democrática y educación.

Salvador López Arnal: Mi felicitación más sincera por tu nuevo libro Educación y cambio ecosocial. Está lleno de sugerencias, excelentes argumentaciones y sentimientos admirables. ¿Qué está para ti la educación?

Rafael Díaz-Salazar: La enseñanza y el autoaprendizaje de una vida con sentido, lo que requiere una formación de todas las dimensiones de la personalidad: mente, sentimientos, deseos, comportamientos. La educación socrática que propugno ha de llevar al descubrimiento de nuestra identidad personal y de nuestra misión social en el mundo. Aprender a ser, aprender a vivir juntos, aprender a conocer y aprender a hacer son los cuatro grandes objetivos de la educación.  

SLA: ¿No te gusta el término enseñanza? ¿Por qué hablas de transformar los centros de enseñanza en centros de educación?

RDS: Me opongo a la reducción de la educación a instrucción escolar sobre unos contenidos distribuidos en asignaturas. Educar es mucho más que enseñar Matemáticas, Historia, Lengua etc. No basta con innovar la didáctica, pues lo fundamental es cambiar los contenidos curriculares y relacionarlos con el desarrollo psicológico y con los problemas sociales. La denominada ‘excelencia educativa’ puede estar al servicio de la reproducción de la sociedad capitalista o de la transformación ecosocial.

Hoy existen tres tipos de centros escolares en las escuelas públicas, concertadas y privadas: neoliberales, humanistas liberales y ecosociales. Defiendo una transición a un modelo de centros escolares en los que la ecología crítica configure toda la acción educativa.  

SLA: Cuando hablas de renovación educativa, ¿no exiges demasiado al profesorado? ¿Cómo pueden realizar tareas complementarias con la cantidad de trabajo que ya tienen asignado?

RDS: Estoy en contra de delegar en el profesorado toda la acción educativa que requiere múltiples actores. Ahora bien, esta profesión requiere un alto compromiso moral y social y una vocación especial. Hay dos formas de planteársela: como trabajador de la enseñanza que cumple con el desarrollo del currículo asignado o como educador que conoce los problemas sociales y es activista en los movimientos sociales. La creación de una ciudadanía ecosocial depende en gran medida del tipo de profesorado que tengamos. Las escuelas están hoy organizadas para impedir que las profesoras y profesores puedan ser creativos y críticos, pero los cambios en las instituciones siempre se hacen a contracorriente. En España existe un profesorado alternativo. Recomiendo el blog Escuelas en Red y la lectura de Cuadernos de Pedagogía para conocer sus prácticas y contagiarse con ellas.  

SLA: ¿Por qué crees que es tan importante la familia en la formación de la concepción del mundo de nuestros jóvenes?

RDS: Lo dicen los propios jóvenes en las encuestas. La familia es el principal actor en la socialización de las personas. La mayoría de ellas subcontratan su responsabilidad educativa en los centros escolares y en las actividades extraescolares. Así no hay forma de educar. Uno de los objetivos de mi libro es ayudar a las familias a elaborar un proyecto educativo y estimular la alianza cooperativa con las escuelas y con algo que para mí es muy importante: la incorporación a movimientos educativos infantiles y juveniles.  

SLA: ¿Qué autores en el ámbito de la pedagogía son tus principales referentes?

RDS: Paulo Freire, Lorenzo Milani y Célestin Freinet. Para este libro ha sido Jorge Riechmann el autor en quien más me he inspirado. He intentado incorporar a la educación su pensamiento ético y ecológico.  

SLA: Cuando propugnas un cambio ecosocial, ¿de qué tipo de cambio estás hablando?

RDS: De la superación del modo de producción capitalista que se sustenta en la explotación de la naturaleza, la opresión laboral y el consumismo. Tenemos que transitar a una economía de los bienes comunes y a una regulación ecológica de todas las actividades humanas.

SLA: ¿La educación es condición necesaria para el cambio ecosocial?

RDS: La educación es la actividad que puede hacer posible la creación de una ciudadanía ecologista. Ella tiene que ayudar a abrir los ojos para conocer la destrucción medioambiental y la explotación laboral que hacen posible el modo de vida de amplios sectores de la población de los países del Norte. Por eso es tan urgente la construcción de un currículo escolar todo él imbuido de ecología. También ha de socializar en una cultura de la autocontención, de la frugalidad, de los cuidados. No podemos aspirar a una sociedad verde sin formar personas que practiquen cotidianamente virtudes ecológicas.  

SLA: El subtítulo tampoco tiene desperdicio: “Del yo interior al activismo ciudadano”. Entiendo lo de activismo ciudadano pero no tengo tan claro lo del yo interior. ¿A qué te estás refiriendo?.

RDS: La prioridad en educación es ayudar a la autoconstrucción de la personalidad que tiene múltiples dimensiones. Una de ellas es el mundo de la interioridad que desgraciadamente es poco transitado y en muchas ocasiones es un erial porque nunca se cultiva. El viaje al centro de la tierra personal, retomando el título de la obra de Julio Verne, es fundamental para la formación de personas con buenos fundamentos y con capacidad de desarrollar una vida intensa y creativa. También para prevenir muchos riesgos y desorientaciones que impiden crecer en humanidad. En el fondo de la violencia y de las dificultades para la convivencia en los centros escolares está el inmenso déficit de educación del yo interior.

Considero que este yo está constituido por ocho dimensiones: el conocimiento de sí, la búsqueda del sentido de la vida, la constitución de una moral personal basada en la práctica de virtudes, el amor a la belleza y al arte, la capacidad de contemplar, la meditación laica, la exploración de la experiencia religiosa y el descubrimiento del vínculo personal con el sufrimiento social.

La autoconstrucción del yo interior requiere el aprendizaje del conocimiento psicológico personal, la educación de las emociones y los sentimientos, la instauración de programas de filosofía para niños (3-18), la formación de la conciencia moral, el refuerzo de la educación artística, ejercicios de meditación, silencio y concentración, la educación de la conciencia ecosocial y política a través de la iniciación al activismo desde la infancia.

Este programa educativo es imprescindible para llegar a ser humanos. Requiere cambios sustanciales en las escuelas y en las familias y, especialmente, la extensión de movimientos educativos infantiles y juveniles. Afirmar que lo que planteo es utópico o quimérico es aceptar de antemano que es inevitable la reproducción del tipo de persona que está causando la crisis ecológica y social que atravesamos.  

SLA: ¿Planteas algo así como un viaje del Yo al Nosotros, como diría un antiguo profesor mío, Ramón Valls?

RDS: Propugno un vínculo entre el yo interior y el yo político. Esto es lo que permite tener una vida equilibrada y un activismo enraizado en algo mucho más potente que una ideología. Tenemos que ayudar mediante la educación a que el dolor del mundo y de la naturaleza devastada penetre en la interioridad de los seres humanos, en ese ámbito profundo de las emociones, de los sentimientos, de los deseos, de las pasiones, de los objetivos vitales. Y, además, hemos de aspirar a que el activismo contra el sufrimiento social esté enraizado en un proyecto personal de felicidad.

Sé que en el contexto español lo que te voy a decir suena fatal. Me da lo mismo y en el libro creo que lo fundamento bien acudiendo a personalidades revolucionarias. La mejor forma de actuar contra la indiferencia ante el sufrimiento social y la catástrofe ecológica es la educación del amor social y político. Esta indiferencia y la pérdida de sensibilidad ante el dolor social y ecológico constituyen el cemento del consenso pasivo que hace posible la reproducción del desorden existente.

Para esta acción hay que acudir a las sabidurías y enraizar la educación en ellas. ¡Demasiado para la modernidad líquida en la que nos encontramos!. Pero, amigo, nuestro dilema es contribuir a la transición a otra civilización o volvernos ciegos y cínicos. Abrirnos a las sabidurías ecológicas presentes en tradiciones, culturas morales, religiones y filosofías es un requisito para hacer viable una educación al servicio del cambio ecosocial.

Los neoliberales llevan décadas disputando la hegemonía en la educación y, por ahora, han ganado la batalla por la falta de ambición y de orientación de los que nos oponemos a ellos. Lo repito de nuevo: identificar renovación educativa con innovación didáctica es una gran trampa. Claro que tenemos que innovar radicalmente las formas de enseñar y de aprender, pero lo decisivo se juega en otro campo: qué se enseña, qué se aprende, para qué y al servicio de quiénes.

Considero que la iniciación al activismo ecosocial es un objetivo educativo imprescindible. Este activismo se aprende mediante prácticas ecosociales que se pueden realizar desde la infancia en los centros escolares, en las familias, en los pueblos y ciudades. Se empieza, por ejemplo, con prácticas ecológicas muy concretas que los niños y niñas pueden realizar y que sirven para implicar a las escuelas y a las familias en esa dinámica.

SLA: Las TIC, ¿no quedan un poco orilladas en tus propuestas? Nos gusten o no están aquí y han venido para quedarse.

RDS: Ya hay bastantes personas que afirman que el cambio educativo consiste en aumentar las competencias tecnológicas. Prefiero destacar las dimensiones negativas que tienen sin olvidar sus contribuciones. También alerto de un culto inconsciente a la tecnología y a la ciencia, como si estas fueran neutrales y todas sus contribuciones constituyeran avances para todos los seres humanos. Nuestras TIC se basan en la explotación de recursos naturales que está destruyendo África central y la nueva revolución de la robótica condenará a más personas al desempleo. La investigación científica y tecnológica responde a intereses económicos, empodera a unos y empobrece a otros.

En este mundo del enjambre digital prefiero centrarme en proponer una pedagogía del silencio, de la desconexión y del rescate de las sabidurías. El uso intensivo de las TIC está creando una alienación muy fuerte. Como muestra Jon Illescas en La dictadura del videoclip, existe una industria digital para consumo juvenil que no es otra cosa que suministro de toneladas de opio capitalista. Un sector de padres y madres de mi generación luchamos contra el uso excesivo de televisión. Ahora toca la lucha contra un estilo de vida que está casi permanentemente applicado y entontecido en las redes digitales. Ante tanta obesidad audiovisual, propugno la práctica frecuente del ayuno digital.  

SLA: Se recoge la propuesta. Las cuatro citas iniciales marcan mucho el contenido de tu libro. Vamos a comentarlas. La primera es de Octavio Paz. “Toda educación entraña una imagen del mundo y reclama un programa de vida”. Una educación justa, ¿qué imagen o imágenes del mundo conlleva? ¿Qué programas de vida reclama?

RDS: Una imagen ecológica del mundo y un programa de vida basado en la triple reconciliación: la del hombre consigo mismo, con los demás y con la naturaleza. La educación tiene que ser contracultural. La competitividad para abrirse paso en la selva social y triunfar profesionalmente a toda costa está destruyendo la finalidad de la educación. Sólo si disponemos de una visión del mundo basada en esta triple reconciliación podremos rebelarnos contra lo intolerable y aprender a construirnos como seres humanos y no como actores pasivos en el neoesclavismo que se va imponiendo.

SLA. Te pregunto a continuación por la segunda.

RDS. Cuando quieras.  

Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=224299&titular=%93aprender-a-ser-aprender-a-vivir-juntos-aprender-a-conocer-y-aprender-a-hacer-son-

Comparte este contenido:

Entrevista a Maxine Molyneux: “Con el movimiento de derechos humanos muchas feministas pudieron impulsar cambios”

09 Abril 2017/Fuente: pagina12/Autor:Mariana Carbajal

Molyneux vivió su adolescencia en Argentina y es una estudiosa de los movimientos feministas en América latina. Recuerda el periódico anarquista del siglo XIX La Voz de la Mujer y el papel que jugó Evita.

Piensa que el acceso al aborto es uno de los derechos fundamentales para las mujeres y le sorprende que en la Argentina, donde vivió durante su adolescencia, y siempre volvió, sea todavía una demanda, casi una utopía. Maxine Molyneux se hizo feminista, como muchas mujeres de su generación, por el descontento absoluto que sentía frente al mandato social que pesaba sobre ella. Eran fines de los sesenta. Su padre, un ingeniero aeronáutico que estableció la ruta de la British Airways en el Cono Sur, se oponía a que fuera a la universidad. Por ser mujer. Pero ella, se rebeló. Hoy es una reconocida socióloga feminista, profesora catedrática de la University College London, donde estableció y dirigió hasta hace tres años el Instituto de las Américas. Los movimientos de mujeres en Latinoamérica son uno de sus temas de investigación. Con esa lupa, mira, con entusiasmo, expresiones como las de Ni Una Menos y campañas contra la violencia machista y la misoginia como la “Million Women Rise”, que nació en Londres, o la Marcha de las Putas, que surgió en Canadá, distintas manifestaciones de protesta contra la cultura machista y los ajustes económicos. “Las nuevas generaciones de jóvenes están viendo que lo logros para las mujeres no son tan impresionantes como esperábamos” y “están diciendo basta”, dice Molyneux, en una entrevista con PáginaI12, recién llegada a Buenos Aires.

Tiene una agenda bien cargada. Hoy dará a las 18 la conferencia “Historia, logros y desafíos en el Cono Sur: diálogos feministas entre generaciones”, en el Centro Cultural Paco Urondo de la Facultad de Filosofía y Letras, de la UBA. La actividad es libre y gratuita pero requiere inscripción previa a: conferenciamolyneux@gmail.com

América latina, sostiene, se distingue por la importancia y variedad de sus feminismos y por las reformas legales que, después de los años 80, impulsaron una mayor igualdad de género. Sin embargo, todavía hay muchas áreas de política pública donde no se observan avances y algunas donde se han producido retrocesos. Estas últimas –apunta– se han convertido en el foco del activismo de nuevas generaciones de feministas. ¿Cuán diferentes son las luchas, tácticas y desafíos que enfrenta la actual ‘ola’ de activismos feministas frente a las de décadas pasadas? Ese será uno de los ejes de su exposición, en la que además, lanzará un nuevo proyecto de investigación colaborativo sobre los feminismos en Argentina, Uruguay y Chile. Cuenta que le hicieron en Londres entrevistas para la revista The Economist, el diario The Telegraph, y programas de TV, sobre el fenómeno de Ni Una Menos en Argentina y las masivas movilizaciones que se dieron en el país y en la región.

–¿Cómo está viendo esa presencia masiva de mujeres en las calles?

–No sé si se puede hablar de cuarta ola o si de hecho son olas. Hay que pensar cómo periodizar estos distintos momentos. Ese trabajo hay que hacerlo y es una de las preguntas centrales de la investigación que estamos comenzando. Dicho eso, si creo que hay un momento nuevo. Una renovación. En Reino Unido hemos vivido un período de declive del activismo feminista hasta los últimos años, una especie de compromiso de aceptación del presente, la gente aceptaba y no protestaba. Feministas como yo estábamos bastante deprimidas con esa aceptación. Sentir que hubo algunos avances importantes en derechos humanos pero por otro lado, la misoginia empeoró, es más abierta, explícita. Pero ahora ya no se está aceptando. Lo vemos con expresiones como las de Ni Una Menos y campañas contra la violencia machista y la misoginia como la “Million Women Rise”, la Marcha de las Putas, distintas manifestaciones de protesta contra la cultura machista y los ajustes económicos. Y esto sucede porque hay una renovación, nuevas generaciones de jóvenes que están viendo que los logros no son tan impresionantes como esperábamos. Se están presentando nuevos actores en estas luchas. Hay un momento distinto sin dudas. Es difícil explicar por qué surge un movimiento social en determinado momento pero se pueden dar bastantes razones: con las condiciones económicas de los últimos 30 años la gente no ha experimentado progresos, y hay un sentimiento de desencanto con los mecanismos representativos, son muchas cosas que convergen en este escenario. Y las jóvenes están diciendo basta, especialmente con las oportunidades restringidas que tienen en el mercado laboral, la distribución del trabajo doméstico y el cuidado, que sigue siendo tan desigual y recae mayoritariamente sobre las mujeres, por ejemplo, después de la maternidad les cuesta reinsertarse laboralmente en los mismos niveles que estaban antes, hay muchas situaciones de discriminación que todavía persisten, algunas más obvias y otras más sutiles.

–¿En qué medida se diferencian la actual ola de activismos feministas frente a las de décadas pasadas?

–Lo más obvio es el uso del “social media”, el uso de internet y medios sociales, como herramienta novedosa de activismo, que da inmediatez y facilita la comunicación, la capacidad de coordinar acciones, la trans nacionalización de los protestas. Los movimientos ya no dependen de los medios de comunicación hegemónicos para difundir sus propias acciones. Eso es muy distinto. No sabemos si esa herramienta sola alcanza para generar la cohesión, los lazos de solidaridad, que requieren ciertos actores colectivos para consolidarse como movimiento y tener resultados a largo término. Hay algunos que argumentan que ese activismo que se llama “clickismo” lleva a acciones más individuales y fragmentadas. Y que en tiempos anteriores había más cohesión, más lazos de solidaridad. Yo no estoy tan convencida con esa visión. Cuando hay mucho escepticismo y crítica hacia los partidos políticos –no estoy hablando de Argentina en particular, sino en general– hay gente que sostiene que los movimientos deben reemplazar a los partidos políticos. Si los partidos políticos están faltando a su deber de representar se ve que la gente busca otros caminos para influir políticamente. En la historia del feminismo, por su diversidad, se ve que hay distintas maneras de hacer activismo. Yo pienso que hay que luchar en cualquier espacio, pero hay que tener una visión estratégica en función de los resultados que se buscan. Es una pregunta complicada. En realidad, se necesitan tanto movilizaciones en las calle como el trabajo para realizar los cambios que se reclaman.

–¿Cómo analiza el triunfo del Brexit? ¿Qué impacto podría tener sobre las mujeres en particular?

–El Brexit dividió a la población del Reino Unido 48 por ciento contra 52 por ciento. Fue una apuesta arriesgada del Partido Conservador, que no esperaba el resultado y no se había preparado para ello. Los Brexiteers mintieron consistentemente a lo largo de la campaña sobre los efectos positivos de salir de la Unión Europea, mientras jugaban la carta de la inmigración. Estamos siendo sacados del mercado inmediato más grande y pagaremos un alto precio por tener acceso a determinados mercados de exportación, por lo que vamos a estar en peores condiciones que ahora, las consecuencias financieras negativas serán muy serias según calculan autoridades financieras independientes. En estas circunstancias de recesión económica continuada, los recortes a los sectores del gasto público donde se concentran los empleos de las mujeres –la educación, la salud–, auspician un panorama sombrío para la población femenina.

–Las dos mujeres que llegaron al puesto de primer ministro en Gran Bretaña provienen del partido conservador. ¿Hay razones para pensar por qué se consolidaron esos liderazgos femeninos en la derecha y no en espacios políticos más progresistas?

–Esto tristemente puede ser leído como un fracaso del Partido Laborista para hacer más en función de promover a mujeres en posiciones de liderazgo. Todavía es un club de varones y se ha convertido aún más en eso bajo el liderazgo de Corbyn.

–Uno de sus primeros trabajos de investigación fue sobre el anarquismo feminista en Argentina de fines del siglo XIX y principios del XX. En los archivos del Instituto de Historia Social en Amsterdam, encontró una joya que la deslumbró: la colección de ejemplares del periódico anarquista La Voz de la Mujer.  Dijo que “Descubrir esos archivos fue un momento hermoso”. ¿Por qué le interesaba el tema?

–Por la precocidad de ese periódico La Voz de la Mujer que fue tan radical en 1896 en Argentina. Las editoras hablaban de la sexualidad, de la opresión que vivían por su condición de mujeres, de la necesidad de promover la igualdad entre hombres y mujeres. Me interesó cómo Argentina con su extenso movimiento anarquista, tenía esa corriente feminista adentro. Fue algo raro en el continente en ese momento. Y más similar a lo que estaba pasando en partes de Europa, sobre todo España. Me interesaba la comparación y las condiciones que llevaron a tener ese tipo de influencia en el discurso político argentino de esa época. Ver que la palabra feminista se usaba en esa época. No solo en ese periódico feminista, sino que hubo debates, bastante anti feminista también de algunos hombres anarquistas.

–¿Qué puntos en común encuentra con los feminismos en Chile, Uruguay y Argentina?

–Esa es la investigación que estamos armando. Esas respuestas las podré dar cuando terminemos. Los tres países con sus distintas formas de estado, cultura políticas y formas de organización del feminismo, son un terreno fructífero para hacerse las siguientes preguntas: ¿pueden los feminismos de los tres países periodizarse de la misma manera o no? ¿Cuáles son las diferencias en cómo se relacionan las feministas con el Estado, y con qué resultados? Es notable que en el caso de Argentina un país de medianos ingresos que, sin embargo, no pudo consolidar una institucionalidad de género a largo plazo, y sus logros en términos de igualdad de género son menos significativos que por ejemplo Uruguay. Lo que se puede ver es que los tres países empezaron con movimientos feministas en el siglo XIX. Es interesante ver con qué Estados dialogan, es fascinante ver como feminismos de varios tipos evolucionaron con distintos aliados, con qué efectos y qué tipo de relaciones se dan entre Estados y sociedades. Es muy interesante la Argentina con su periodo de peronismo clásico, hay muy interesantes discusiones sobre el legado de Evita y qué tipo de intervención hizo en relación a los derechos de las mujeres, cuando ella no era feminista, y tenía una idea tradicional y conservadora de la mujer, pero, sin embargo, impulsó algunas de las demandas del feminismo, como el voto femenino, que antes habían promovido las socialistas, y derechos sociales, hizo cosas importantes para la clase trabajadora. Aunque es una figura controversial. Los tres países vivieron la tragedia de las dictaduras militares, y a través del movimiento de derechos humanos muchas feministas pudieron impulsar cambios, con logros importantes.

–La agenda de las últimas décadas del movimiento de mujeres estuvo muy anclada en la Argentina en la problemática de la violencia de género y la demanda por los derechos sexuales y reproductivos, y particularmente la despenalización del aborto. Pero el tema del aborto no se ha logrado discutir todavía en el Congreso. ¿Cómo hay que mirar esa imposibilidad?

–Es uno de los derechos fundamentales la posibilidad de controlar el cuerpo de las mujeres. Porque históricamente no tener ese derecho ha generado que muchas mujeres recurran a abortos inseguros con altas tasas de mortalidad y morbilidad de mujeres por gestación. Por eso es una cuestión de vida o muerte. No es secundario. Quienes se oponen son las fuerzas conservadoras que han ganado fuerza en el debate. Es un proceso internacional que excede a la Argentina. En América latina, sobre todo en América Central, tienen las leyes más restrictivas de acceso al aborto y esa situación es aún más grave teniendo en cuenta la crisis del Zica.

–Frente a las movilizaciones de mujeres que se han dado en la Argentina, hay hombres que se preguntan qué lugar deben ocupar ellos…

–Los hombres deben ser solidarios con las mujeres en todos los espacios. Si quieren marchar, a mí no me molesta. Pero me entristece el poco interés que tienen, en general, sobre las temáticas de género, la historia del feminismo, nuestras luchas.

–¿Por qué todavía es visto el feminismo como lo contrario del machismo, como un extremismo, en lugar de ser entendido como un movimiento que apunta a lograr la igualdad de oportunidades entre varones y mujeres?

–Hay un prejuicio cultural alimentado por quienes se oponen al feminismo, y se ocupan de denigrarlo. Quizás esto tiene que ver con el proceso de que el feminismo pasa a ser parte del sentido común y de la cultura pública, aparece en la TV, en las revistas, etc. En muchas reuniones surge ese cuestionamiento y yo respondo, cada vez que me lo dicen: si dirían lo mismo en un debate sobre racismo. No me dirían lo mismo. Entonces es un prejuicio hacia las reivindicaciones de las mujeres. Sin embargo, un fenómeno nuevo es que estamos viendo en Inglaterra gente famosa que se declara feminista, incluso, ciertos hombres, y eso es muy interesante. Espero que esto no sea un momento pasajero, sino un signo de un cambio cultural duradero.

Fuente de la entrevista:  https://www.pagina12.com.ar/28109-con-el-movimiento-de-derechos-humanos-muchas-feministas-pudi

Fuente de la imagen: https://images.pagina12.com.ar/styles/focal400x300/public/2017-03/na17fo01_23.jpg?itok=RxicoFd

Comparte este contenido:

Entrevista a Roberto Trochez: “La alfabetización es buena, siempre y cuando tenga logística adecuada”

09 de Abril 2017/Fuente: http://tiempo.hn/Autor:Luis Destephen

Roberto Trochez, el vicepresidente del Colegio Profesional Superación Magisterial de Honduras (Colprosumah), manifestó que están de acuerdo con la Alfabetización como Trabajo Social siempre y cuando se brinden las condiciones necesarias.

Expresó, que aparte de los materiales y transporte, el gobierno tiene el deber de proporcionar seguridad para los alfabetizadores. Asimismo, Apoyar a los padres, a los beneficiados del centro y brindar un desayuno digno.

Lo anterior, explicó Trochez que cuando hay algo financiero de por medio, la gente se aprovechaba, y pedían que les pagaran el día.

Para Trochez, la calidad en la educación pública es la prioridad para el Colprosumah según expresado por el dirigente magisterial.

“SI nosotros le damos calidad a los niños y niñas de este país, estaremos fortaleciendo a la patria” Añadió. Acotó, que existen dos prioridades en el país para ellos como Colegio Magisterial, una de ellos es la educación y el otro el sueldo.

“La prioridad, es la calidad de la educación pública, nosotros creemos que lo más importante que no es el salario del profesor. Creemos que lo más importante además del salario, es que los niños reciban calidad de educación en el país”.

Participación de todos en el programa.

Para Roberto Trochez, todos los hondureños se deben de involucrar directamente en este trabajo de alfabetización. Ya que, los que más saben deben de apoyar a los que menos saben.

“Ese debe ser una realidad nuestra, cuando un hondureño necesite de alguien que sabe más debemos apoyar.” Sugirió.

Finalmente, sobre el tema, Trochez, invitó a que las organizaciones magisteriales deben ser los primeros en unirse. Lo anterior, debe existir un acercamiento real entre magisterio y el gobierno. De la misma forma, el hondureño en general debe acercarse ya portar un poco de sus conocimientos.

Acercamiento con ministra Rutilia Calderón.

Trochez, expresó que aún no habido acercamiento con Rutilia Calderón, pero  les gustaría tener un acercamiento. Agregó, que “el dialogo es la mejor forma para resolver los conflictos, en ningún país del mundo se resuelven los conflictos confrontando”.

El primer tópico que propondrían al darse el acercamiento, es la calidad de educación, y nuevos métodos para mejoramiento de la misma. El tema de la la alfabetización, optimización del mismo.

Fuente de la entrevista: http://tiempo.hn/roberto-trochez-alfabetizacion/

Fuente de la imagen: http://pullzone-tiempo.editorialhondura.netdna-cdn.com/wp-content/uploads/2017/04/ROBERTO-TROCHEZ1.j

 

Comparte este contenido:

Entrevista: La educación debe garantizar capacidades ciudadanas para asumir la construcción de la paz como una responsabilidad

Centroamérica/El Salvador, 8 de abril de 2017, Fuente: OREI/CLADE

El Ministro de Educación de El Salvador, Carlos Canjura, comenta la iniciativa que planea inserir la temática de la educación para la paz en la política educativa de este país

A principios del 2017, el Ministerio de Educación de El Salvador ha instituido el “Foro Cultura de Paz”, un espacio de reflexión y discusión sobre esta temática entre académicas/os, docentes y sociedad civil con miras a inserirla en el currículo nacional y en su política educativa. En esta entrevista al OREI, el Ministro de Educación, Carlos Canjura, comenta el contexto de esta iniciativa y plantea el rol de la educación en la promoción de la paz. “Hay que concebir la educación como una instancia, entre otras, que debe hacer lo suyo para construir paz social y capacidades de cultura de paz en la población asumiendo la complejidad del fenómeno de la violencia. La educación tiene la tarea de encarar a largo plazo la construcción de bases que permitan asegurar la profundización de una paz duradera, más que resolver en lo inmediato la situación”, afirma.

¿Podría presentarnos el contexto en que se ha impulsado la constitución de este foro para debatir la inserción de la cultura de paz en el currículo en El Salvador? ¿De qué trata esta iniciativa y quien integra este foro?

El “Foro Cultura de Paz” surge a partir de la necesidad de repensar lo andado por el sistema educativo y el país en materia de cultura de paz. Se trata de hacer un balance de estos 25 años transcurridos tras la firma de la paz, en el marco de la declaratoria de la Asamblea Legislativa de 2017 como año de la promoción de la cultura de paz, y de la solicitud del Presidente de la República de incorporar en el currículo nacional la cultura de paz.

Para fortalecer el sistema educativo a este respecto es sustancial plantearse la superación del autoritarismo histórico, en especial las tendencias que más nos afectan, entre estas, sin duda, la violencia, que tiene diversas expresiones en la sociedad y en la escuela.

Nuestro sistema educativo debe desarrollar un método, en el que a todo nivel gocemos de prácticas políticas y culturales ejemplares. Nuestro sistema educativo debe formar un carácter íntegro en el estudiantado, que comience por darle seguridad en lo que sabe y puede hacer. Estudiantes con conocimientos endebles serán profesionales inseguros y proclives a la corrupción y fácil presa del autoritarismo. La cultura de paz es una necesidad del sistema educativo y partimos de varias ideas fundamentales: el valor que damos al conocimiento; el reconocimiento a nuestros centros de educación superior; el aprecio por la escuela como centro de paz, que forja la convivencia en paz, así como un núcleo dinámico de la comunidad y espacio de integración de la familia en el proceso educativo.

En el centro del enfoque se encuentran: el reconocimiento de nuestras diferencias, el respeto a la dignidad de las personas, la convicción sobre nuestras capacidades para solucionar los conflictos sin violencia y el compromiso con la democracia. Creemos firmemente que una educación de calidad es la mejor contribución que podemos hacer al desarrollo de una cultura de paz.

¿Cómo el Ministerio de Educación planea estimular que este nuevo plan de estudio sea incorporado por las escuelas? ¿En el tema de la formación docente, cuáles son los desafíos para promover este diálogo sobre la no violencia y el cambio de las prácticas pedagógicas?

La estrategia del MINED avanza en tres direcciones. En primer lugar, el proceso de reflexión y de compromisos generados a través del Foro en la comunidad educativa y la sociedad civil. En segundo lugar, el desarrollo e implementación de la asignatura “Moral, urbanidad y cívica”. La asignatura tiene como eje temático la cultura de paz, con lo cual se busca desarrollar prácticas y dotar de instrumentos a los niños, niñas y jóvenes para resolver creativa y pacíficamente los conflictos que se les presentan.

En los últimos años hemos venido insistiendo en que uno de los nudos gordianos está en la calidad de nuestros docentes. Con ellos hay que encarar en primera instancia las formas tradicionales de enseñanza basadas en la reproducción de contenidos y en la ausencia de una profunda especialización disciplinar en tanto punto de partida de una constante reflexión pedagógica y metodológica centrada en el aprendizaje de capacidades ciudadanas y productivas. Formar cultura de paz implica docentes capaces de hacerlo, y esto no es tarea sólo de los docentes de una asignatura, sino de toda la planta nacional.

En un primer momento, la formación docente a este respecto iniciará con maestros y maestras de estudios sociales, pues ellos/as impartirán la nueva asignatura. No obstante, posteriormente, se pretende formar a toda la planta a este respecto. En esta línea se está trabajando con la Universidad de Chile, que nos hará transferencia tecnológica y de experiencias para montar una plataforma en línea que nos permita llegar a todos y todas los/as docentes.

Los datos sobre violencia indican que el problema está muy presente en la vida cotidiana de las y los adolescentes en América Latina y el Caribe y, en particular, en algunos países de Centroamérica. ¿De qué manera el Ministerio de Educación considera que la inserción de la paz en el currículo puede beneficiar los/as estudiantes de su país e impactar su trayectoria escolar?

Nosotros partimos de una concepción compleja de violencia, donde está claro que esta se manifiesta en diferentes formas y esferas de la sociedad. Hay una tendencia histórica nacional de la violencia como el modo privilegiado de gestionar conflictos políticos, sociales, familiares, etc. Asimismo, hay una serie de causas estructurales. De allí que hay que concebir la educación como una instancia, entre otras, que debe hacer lo suyo para construir paz social y capacidades de cultura de paz en la población asumiendo la complejidad del fenómeno de la violencia. La educación tiene la tarea de encarar a largo plazo la construcción de bases que permitan asegurar la profundización de una paz duradera, más que resolver en lo inmediato la situación.

El sistema educativo debe garantizar que la gestión escolar en general, así como la gestión pedagógica, coadyuven a la formación de capacidades ciudadanas, para que el/la estudiante tenga las herramientas, los conocimientos, las habilidades y las prácticas que le permitan asumir la construcción de paz como una responsabilidad. Los ambientes escolares son también un asunto clave, pues para formar ciudadanía es necesario un ambiente adecuado, donde el respeto, la tolerancia y la valoración de las diferencias nos impulsen a buscar creativamente formas y mecanismos de entendimiento productivo.

Por otra parte es fundamental señalar que la educación seguirá teniendo un papel central en la superación de desigualdades, las cuales son causa estructural de violencia. No obstante, los resultados no pueden esperarse en lo inmediato, sino como producto de procesos sostenibles.

Las y los estudiantes de distintos países de América Latina y el Caribe están planteando más espacios de participación dentro y fuera de las escuelas. ¿Cómo usted ve esa demanda por participación y por el reconocimiento de las culturas juveniles en los espacios escolares y su relación con la promoción de la cultura de paz?

Consideramos que el desarrollo de capacidades ciudadanas debe permitirnos construir ciudadanas y ciudadanos capaces de desenvolverse en diferentes esferas de la vida pública y privada. La formación de ciudadanía política hoy debe incluir además de la nación al mundo, además del ámbito electoral a la sociedad civil, así como la escuela y los nuevos escenarios públicos abiertos por el Internet. Asimismo es importante imaginar que la escuela y la comunidad son esas primeras instancias donde los/as jóvenes tienen sus primeras experiencias políticas o ciudadanas en un sentido amplio, por lo que dinamizar creativamente estos escenarios es clave para que estas primeras experiencias sean la base de posteriores participaciones responsables. Para esto necesitamos reinventar la escuela, acercarnos a la comunidad y formar a nuestros/as directores/as escolares, así como a los/as docentes, para que sean agentes de formación ciudadana.

Los espacios escolares deben afinarse y aprovecharse al máximo para que propicien un encuentro horizontal de expectativas, proyecciones e ideas entre la niñez y la juventud. El dialogo intergeneracional es clave. Necesitamos docentes que, desde su generación, dialoguen, intercambien y formen a una nueva generación ávida de desenvolverse públicamente.

Fuente de la entrevista: https://orei.campanaderechoeducacion.org/post_politicas/la-educacion-debe-garantizar-capacidades-ciudadanas-

Comparte este contenido:
Page 316 of 454
1 314 315 316 317 318 454