Page 455 of 456
1 453 454 455 456

Entrevista a Rosa María Masson: La calidad educativa se ha secuestrado

16-05-2014/La Otra Mirada

En el marco de las entrevistas realizadas por Luis Bonilla (LB) en su programa “La otra Mirada” a propósito de la consulta internacional sobre la Calidad de la Educación realizada en Venezuela, durante el 2014, se presenta a continuación la reseña del encuentro con la maestra Rosa María Masson, pedagoga cubana, comparativista, investigadora de los fenómenos educativos y doctora en Ciencias Pedagógicas. Vicepresidenta de la sesión de Educación Comparada de la Asociación de Educación Comparada en Cuba y autora de varios artículos sobre «Tendencias de Políticas Educativas» en la región y sobre la Educación Comparada como ciencia, y autora principal del Libro “Educación Comparada. Teoría y Prácticas”.

L.B: Bienvenidos y bienvenidas, todos y todas, a este nuevo contacto internacional en el marco de la consulta por la calidad educativa. En esta oportunidad conversaremos con Rosa María Masson. Rosa es una pedagoga cubana, investigadora de los fenómenos educativos, comparativista que se ha dedicado a estudiar los últimos años el tema de las políticas educativas en la región y en el mundo. Bienvenida Rosa a este contacto internacional.

R.M.: ¡Muchas gracias! Gracias por la invitación!

L.B.: Rosa, comencemos con el tema concreto de la consulta ¿Qué es para ti el tema de la calidad educativa?

R.M.: Bueno, yo tengo cuatro miradas, por lo menos, sobre la calidad educativa. Hay una mirada que creo que es la que más me preocupa y me parece que ha sido el motivo por la cual tú estás haciendo esta consulta internacional, y es que la calidad se ha secuestrado Luis, es decir, la calidad está secuestrada por los organismos internacionales por un grupo de personas que hacen grandes foros internacionales, dicen, deciden, ponen los indicadores de que debe ser calidad y, nos han metido en ese lío a todos, es decir, todos estamos luchando por un ranking, buscando cómo acreditarnos, cómo tener una mejor universidad, cómo poder tener esa imagen de calidad que nos están dando todo el tiempo.Yo prácticamente lo único que hago es criticarla y tratar de encontrar cuales son los orígenes y porque estamos casi embelesados todos alrededor de ese criterio de calidad.

Hay otras aristas de la calidad o digamos otras miradas de la calidad que creo son muy poco tocadas y que a mi modo de ver serían la esencia de lo que estamos buscando hoy y que nos ayudará a encontrar un camino de cambio real, no de reformas sino real. Primero la concepción que tienen los maestros de calidad, no la que le explicamos en un postgrado o le damos a leer en un libro, sino las que ellos se forman en un aula y dicen. Por ejemplo: «Yo quiero con estos niños, con estos jóvenes o con estos adolescente lograr que aprendan a ser buenos seres humanos» En esta concepción de la calidad, apenas el maestro tiene conciencia de ella, pero definitivamente es la que va marcando su quehacer educativo todos los días. Ese es un tema que para mí falta mucho de investigar y sobre todo ponerla en la perspectiva del maestro, ¿Cuál es su modelo de calidad?, ¿Qué usted quiere enseñar ?, ¿Qué usted quiere educar?, ¿Para qué usted viene a este centro escolar, que va desde preescolar hasta la universidad? Esas preguntas el maestro las tiene que tener claras y, esas preguntas yo creo necesario podamos ponerla en perspectiva del maestro, esa es una.

La otra son los estudiantes. Yo no veo investigaciones, no he encontrado ninguna Luis, no quiere decir que no exista, investigaciones que le pregunten a los niños ¿Qué escuela tú quieres?, ¿A qué tú vas a la escuela?, ¿Por qué tú tienes que ir a la escuela todos los días? Pero que también lo pongan en perspectiva de un adolescente que se lo pregunten a un joven, que se lo pregunten a un universitario y más aún que se lo pregunte a las personas que abandonaron la escuela un día porque la escuela no le daba lo que estaban esperando. Eso hemos ido obviando y los estudiantes, los alumnos, las nuevas generaciones que en definitiva es lo que estamos formando, apenas los tenemos en cuenta dentro de nuestras investigaciones ¿Para qué es la escuela y qué ellos esperan de esa escuela?

Y la otra es la sociedad, siempre se dice como una regularidad, que estamos formando los hombres y mujeres del futuro, que estamos formando hombres ciudadanos que tienen que ver con su contexto con su país, pero ¿Qué espera el país de esa nueva generación?, ¿Esperan una generación calada, sumisa, que asuma, que diga que nuestro modelo es el mejor de todos, que el pasado es mejor que el presente, que el futuro es incierto?. Tengo la sensación que eso es lo que estamos esperando de nuestra juventud, y cuando la juventud se incomoda un poquito y sale a las calles como los chilenos, se pone a protestar un poquito, ya empezamos a decir que esos no son los muchachos que estamos formando o que esos no son los muchachos que queremos y lo que más podemos hacer es sacarlos rapidito de las escuelas para que dentro de los centros escolares no creen problemas. Por eso te digo, que este tema sobre la calidad educativa para mi es extremadamente imprescindible, no pensemos que vamos a cambiar nada, vamos a encontrar nuevas formas de hacer la educación, sino llegamos a la profundidad de lo que es el tema, repito, ¿Qué maestro?, ¿Qué concibe el maestro como perspectiva de calidad?, ¿Qué entiende un estudiante como perspectiva de calidad y, qué la sociedad como perspectiva de la calidad?

En estos días he trabajado en universidades privadas e increíblemente los profesores tiene las mismas inquietudes que los profesores de una universidad pública, las mismas inquietudes que pasan por no estar seguros de que lo que están enseñando, es lo que deben enseñar, por no estar seguros de cuál es el tema de valores que le estamos dando a los estudiantes, si estos son los sistemas de valores que van a funcionar en la sociedad y además tienen también en esa lógica, un aspecto que es el aspecto económico.

Por ejemplo, me llamaba mucho la atención que los padres llegan a la universidad y preguntan por las carreras más cortas, la que dure dos años y uno piensa, bueno el padre quiere una carrera universitaria corta que dure dos años  porque tiene que pagar menos y eso es una lectura muy simplista. Pienso que el padre pide una carrera de dos años porque sabe que la universidad solo te va a dar un título, pero no te va a dar, o no te está preparando para la vida porque esa preparación para la vida del muchacho la va a encontrar después en el mundo laboral, donde tenga que competir, buscar el espacio, ser creativo, tomar determinaciones que el currículo no se lo está dando. Por lo tanto ese padre busca un título, a mi modo de ver que sea más económico, que cueste menos y que el muchacho esté en condiciones de ponerlo en la sociedad. Y eso es preocupante, es decir, saber que las personas tienen tan poca fe de lo que se está enseñando en la escuela y en la universidad, creo que son pocos los padres que tienen niños en la edad escolar en los primeros años en el bachillerato, en la secundaria básica que cuando el niño sale de la escuela no busca apoyo en otras entidades o como se dice, unos repasadores, unas escuelitas o lo ponen en un grupo de arte, de música o lo pones en otros espacios y no es solo para tener el niño entretenido y no es solo porque tú que estás trabajando mucho, no tienes tiempo para atender al niño; es porque tu sientes de manera empírica, lo respiras y no sabes cómo decirlo en palabras, que tu niño, que tu joven o tu muchacho no está aprendiendo lo suficiente, lo que necesita para poder insertarse en la sociedad y, ser una persona de éxito y más que de éxito, que sea una persona satisfecha, que no llegue a la mañana a trabajar solo por dinero y porque hay que comer, es decir, que el trabajo sea un lugar en el que tú tienes buenos amigos, en donde tú puedes crear, en donde tú puedes tener buenas ideas, donde tú no vas a estar pendiente todo el tiempo, que si el jefe te va a echar un ojo, y la escuela no te está preparando para eso.

La escuela se está convirtiendo además, Luis, en un lugar peligroso, yo no entiendo cómo los niños son tan crueles, cómo logran tener esa violencia tan fuerte y antes uno lo veía en las películas americanas y pensábamos que estábamos lejos de tener esa violencia en la escuela. Desgraciadamente la violencia ha llegado también a otros espacios que no son los norteamericanos y llega de diferentes maneras, porque cuando el niño ya no quiere ir a la escuela porque lo que aprende no es atractivo, cuando el niño no quiere ir a la escuela porque además no tiene amigos en la escuela, tienen muchachos que se burlan de él, que son crueles, cuando la escuela es prácticamente un tiempo monótono, entonces para qué hacemos tantos foros internacionales para hablar de calidad.

En mi opinión es que los protagonistas esenciales de la calidad los estamos dejando afuera y hasta que no entremos en contacto con otras formas de ver la educación y con otras maneras de investigar, otras formas de conocer esos protagonistas e  indagar a esos protagonistas, seguimos haciendo grandes fiestas donde nos vestimos bonito para hablar de calidad, pero la vida sigue, la escuela sigue y nosotros los teóricos, los que nos creemos teóricos seguimos hablando de lo que quisiéramos nosotros que fuera la calidad.

L.B.: Rosa, tú no solo eres docente universitaria, no solo eres comparativista, no solo eres investigadora, también te has desempeñado como docente de aula eso también te da una mirada compleja de lo que es el fenómeno educativo y tu abordas en estos tres ámbitos, desarrollas uno que me parece de total interés en estos momentos, el tema del docente. La calidad fundamentada en el docente, es decir, el docente que se interroga ¿A qué se va a la escuela?, ¿Para qué es la escuela?, ¿Cómo lograr que el estudiante, el niño o la niña tengan un proyecto de vida y no solo de conocimiento formal? Eso implica repensar la formación docente intentando recuperar la centralidad de lo pedagógico, quizás no es el caso de Cuba, pero sí de muchos países de América Latina, pues, la pedagogía está de capa caída y, casi que la pedagogía está siendo cambiada por los expertos en currículo, los expertos en didáctica o ahora la moda: los expertos en la calidad de la educación, ¿Qué sugieres tú?, ese re-enfoque de la formación docente a partir de la recuperación de la centralidad pedagógica

R.M.: Mira, yo te voy a dar dos miradas de nuevo, es decir, veo las cosas de diferentes matices. Te voy a dar una mirada quizás social, el maestro es un profesional, el maestro tiene que creerse que es un profesional, no solo porque yo se lo diga o se lo diga otra persona, el maestro tienen que creerse que lo que está haciendo es una profesión, es una importante profesión, única profesión, porque es la única profesión que te permite entrar en la vida de otro. Es decir, uno va al médico cuando está enfermo y uno utiliza otros profesionales solo cuando lo necesitas un momentico, pero el maestro entre todos los días en la vida de otro y tiene la oportunidad como nadie de formar parte de la historia de otro, por lo tanto, hay que darle el valor de la profesión de los maestros.

Todos los que he conocido, son pocos los que sienten que son profesionales y hay un tema que escuché y hay que preguntar, que es el tema del salario y realmente creo que no estamos bien pagado en ninguna parte del mundo, quizás excepcionalmente en algunos lugares pero ¿Quién está bien pagado?, es decir, uno pregunta, ¿Qué profesional está bien pagado? No son solos los maestros  los que no tienen salarios dignos o salarios muy destacados y, desgraciadamente, el concepto de profesional en nuestras sociedades ha ido perdiendo crédito, los mejores que viven no son los profesionales. Nosotros los profesionales día a día tenemos que ganarnos el pan, por tanto el maestro se considera un profesional dentro de un mundo donde los profesionales no tienen, digamos el prestigio que podían tener hace veinte años.

Un segundo reto: las universidades pedagógicas o carreras pedagógicas tienen que ser un laboratorio de creatividad, no importa qué enseñas, si enseñas didáctica, currículo, qué cosa es calidad, tienes que saber enseñarlo de otra manera, porque en mis experiencias como maestra te puedo decir, que hay una manera de enseñar que no está escrita en ninguna parte, que es mi modo de actuación como maestra. Cuando yo estoy enseñando a otros a ser maestros, estoy enseñando a muchachos que quisiera que fueran maestros y eso es un contenido vivo, real que yo les estoy dando y que es un modelo, que al final trasmite conocimiento, valores y no está escrito en ningún proyecto curricular.

Yo creo que las universidades pedagógicas, tienen que ser dentro de todas las universidades los espacios que  forman maestros, los lugares donde los que estemos ahí dando clases tengamos la oportunidad de demostrarles a los que están aprendiendo, que hay mil formas de aprender, que no tienen que estar sentados en un aula, que se pueden salir a la calle, hacer investigaciones. Eso tiene que llegar de una manera precisa consciente a los espacios donde se están formando a los maestros para poder combinar las dos cosas, porque esa es la imagen social que debe ser un maestro profesionalmente y como tenemos que hacer de esa persona alguien creativo, que a su vez, enseñe a otros a ser creativos; que aprendan además a ser mejores seres humanos. A las universidades pedagógicas llegan los mismos muchachos que llegan a las otras universidades a veces con la imagen de que son los menos que saben, es decir, la carrera pedagógica puede ser quizás la última opción, pero yo he tenido experiencias maravillosas con estudiantes que han llegado a una facultad a una universidad pedagógica porque no tenían otra opción y nos hemos planteando que hay que primero ser los seres humanos ayudarlos a ser seres humanos, a entender lo que es leer, a entender porque hay que saludar porque hay que vestirse de otra manera, porque hay que tener otras expresiones y después le enseñas la pedagogía o le enseñas la matemática o le enseñas lo que ellos van a ser.

En una oportunidad tuve un grupo que no vivía en La Habana sino en la zona oriental y nunca habían visto el mar y los tuve que llevar al malecón de La Habana a que conocieran el mar, porque dentro de su experiencia como seres humanos nunca habían visto el mar y eso que Cuba es una isla. Entonces esa diversidad que me encuentro en el aula de un adolescente si trabajara en la enseñanza básica, es la diversidad que tengo de mis estudiantes como profesores, pero es más, Luis, es la diversidad que tengo con mis estudiantes cuando van a postgrado.

Cuba tuvo un proyecto maravilloso que fue una maestría masiva dirigida a maestros de escuelas, aquellos que en su proyecto profesional nunca pensaron en ser máster. Tuvo sus críticas, yo era Decana en ese momento de la Facultad de Pedagogía y el Rector nos dijo a todos: tenemos que ir a dar clases a la maestría masiva. Esa maestría consistía en la formación de los maestros de primaria y secundaria, se impartía a las cinco de la tarde después de las ocho horas de jornada laboral; era como una clase semi-presencial, le dábamos conferencia, bibliografías, conferencias grabadas y ellos se preparaban para el próximo encuentro.

Recuerdo que me fui a dar clases a un barrio de la periferia (nosotros no podemos decir un barrio marginal porque la marginalidad en Cuba tienen otras características, no porque tenga prejuicios sino porque tiene otras características), todas éramos mujeres, Luis, y todas negras, porque ellas vivían en un lugar donde predomina la clase negra y donde el oficio que las mujeres siempre hacen o la mayoría hacen, es ser maestra. Para ellas era un gran acontecimiento y a las dos horas de estar con aquellas mujeres empecé a descubrir que habían hecho libros de historia porque como ellas venían de bario donde había mucha violencia, donde los niños andaban en la calle casi todo el tiempo, donde se vivía de otra manera, ellas querían enseñarle como fue Camilo Cien Fuegos de niño, las maldades que pudo haber hecho Camilo Cien Fuego de niño, Ernesto “Che” Guevara, Maceo. En fin, sacaron todos los patriotas que estaban en el currículo oficial, Luis, y habían hecho un anecdotario, una investigación sin saberlo. Asimismo, me encontré otras que habían hecho libros de matemática, de problemas de matemática, entonces tú te imaginas que yo llegara con mi título de Doctora, con todos esos años, con toda aquel glamour de ser la Decana de la Facultad, encontrarme con aquellas señoras que trabajaban más que yo porque trabajaban hasta diez horas diarias, porque cuando tu llegas a una escuela a las cinco de la mañana y te vas a las seis y media de la tarde con un aula de veinte o veintiséis niños, eso si que es trabajo.

Ellas me enseñaron lo que yo nunca pensé encontrarme y cuando empecé a hable de Vygotsky y sus zonas de desarrollo próximo, “¡qué zonas de desarrollo por Dios!”. Ellas habían aprendido mucho más de lo que yo podía darle en concepto, entonces hice aquello como un gran juego y les dije: “Ustedes me dan sus experiencias y yo de pedagoga le voy a poner los nombre que dice la Ciencias que tienen esas acciones que ustedes hacen cotidianamente”. Ese fue un semestre maravilloso. Fui a su escuela, defendieron sus trabajos de Maestría y fueron mujeres felices, se sintieron reconocidas en la escuela, eso es lo que yo aspiro cuando te hablo de calidad: Encontrar esos espacios donde la calidad habla de resultados reales y donde los niños que están percibiendo de esas maestras lo mejor que ellas pueden darles, tengan en la escuela una experiencia de vida que en la escuela quizás no se la están dando no se la está dando la sociedad, pero que sepan que hay un lugar bueno donde la gente son lindas y que se puede vivir mejor. Si logramos eso, creo que estamos hablando de calidad.

Hay una película Cubana llamada: “Conducta”, que se ha discutido mucho en La Habana con los maestros, el relato dice que: Carmela, la maestra de conducta no le importaba más que ese par de muchachitos ,que estaban en desventaja, tuvieran una experiencia feliz en la escuela y los defendía como se defiende a alguien que se quiere mucho. Ella no podía ser la buena de todos, pero era la maestra que había que respetar y conocía el alma de esos niños (ese el tipo de personalidad, Luis, que creo hay que saber explicarnos y hay que hacernos sentir).

Técnicamente yo solo criticaría que no creo que sea la mejor a la hora de hablar de la calidad, a mí me dejas para lo otro, para los maestros, para lo vivencial que por ahí va mi teoría. El maestro tiene que tener experiencias lindas cuando aprende a ser maestro, tiene que sentir que ser maestro es importante y es en las universidades pedagógicas donde hay que ponerles eso, lo vivencial. Con esto no es que este negando la pedagogía ni la didáctica, son extremadamente importante, para saber el objetivo, como organizar el contenido, qué métodos aplicar. Eso hay que saberlo, eso es ciencia, eso no es empírico, pero el arte de educar hay que ponerlo en la perspectiva del aprendizaje.

L.B.: Rosa tu hablaste de otra mirada que tiene que ver con los jóvenes, con los estudiantes, con los que van al aula. Ahora bien, unos de los objetivos de nuestro sistema educativo, casi como un identificador es que procura la construcción de ciudadanía y ésta significa también: la repolitización de los jóvenes, es decir, no de participación pero si de pensamiento político, sin embargo, hay un sector amplio de la juventud que se sigue alejado de la política como proceso de transformación planteando, que la escuela no logra cumplir con esa meta. A mí me llama la atención un grupo incluso cubano llamado “Buena Fe”, que en una de sus canciones (que son muy escuchadas aquí en Venezuela) habla de “Cuídate de la política que así como te sube te deja con el cuerpo afuera”, es decir, que implica un cuestionamiento a una forma de hacer política, hay también hay una tarea pendiente de nuestro sistema educativo de cara a los jóvenes ¿cómo resolver ese cuello de botella Rosa?

R.M.: Escuchándolos Luis, sin tenerles miedo y estar sin prejuicios; ¿Por qué yo tengo que esperar que los jóvenes piensen igual que yo?, ¿Por qué yo tengo que esperar que se vistan, que se peinen, que hagan la poesía la música igual que yo? Nosotros fuimos una generación privilegiada, Luis, nuestros padres de la generación que nos precedía nos regalaron sueños, nos decían que había que luchar por los sueños. Hay quien les costó la vida luchar por los sueños, pero era una época de romanticismo de lucha de que el mundo era posible, los hippies se criticaban pero salía a la calle a luchar por una educación mejor, por una vida mejor. A veces miro a los jóvenes y me digo ¿Qué mundo les estoy dando como herencia? Corrupción, políticos que no se comprometen, políticas que se vuelven viejas y al final no escuchan, te dicen que hay dialogo pero no hay dialogo. ¿Qué mundo les estoy regalando? No les estoy regalando ni un sueño, les estoy diciendo que hay que seguir identificándose por algo que ni se sabe lo que es.

Entonces, cuando los veo ajenos, tan distantes de nuestra generación, de nuestro proyecto creo que es porque no hemos sabido establecer las autopistas y cuando el joven o los jóvenes se acercan a nosotros tenemos una mala magia de ponerlos a nuestra semejanza, es decir, el muchacho que ayer era rebelde y estaba en la calle o estaba en la universidad luchando por derechos ya logramos que se acerquen a nosotros como adultos que tenemos responsabilidad y lo empezamos a domesticar para mal, con frases como: “Cállate la boca”, “ya tú no tienes que estar hablando tanto”, “ya tu representas otro poder”, el resultado es que el muchacho en seis meses ya es semejanza de lo que no quiso ser y de lo que estaba luchando en la calle.

Mira la Revuelta de Chile para mí fue una gran enseñanza ,tú te imaginas que sean los muchachos los que le digan a los padres que estaban dormidos, que se habían dejado comer por el neoliberalismo y que nadie protestaba por eso y la explicación que se daba técnicamente por lo menos la que más me llegaba a mí era que ellos luchaban porque sus padres tuvieron más oportunidades de educarse que ellos, es decir, ellos iban a tener menos posibilidades de educarse que lo que tuvieron los padres, formarse profesionalmente y que uno queda endeudado de por vida para hacerse profesionales. Pero luchaban más que por eso, Luis, lo hacían porque querían en un proyecto de país donde soñar tiene que ser parte de ese proyecto; donde no es solo llenarse de dinero, de equipos electrodomésticos y de cosas, hay que soñar y tenemos que ayudar a los jóvenes de que esos sueños se canalicen por buenos caminos, que no se marginalicen con drogas, que la violencia no sea la expresión, pero hay que olvidarse de la edad que tenemos que es muy difícil.

Siempre digo que la que se pone vieja en el aula soy yo, siempre tengo estudiantes de veinte años en el aula y hace treinta años que tengo estudiantes de veinte años en el aula, es decir, me han pasado treinta años por encima a mí, para olvidarse de las malas experiencias, hay que saber escuchar y hay que encontrar los mecanismos para llegar a ello. Los jóvenes están pidiendo a gritos que los ayudemos, Luis, no el mundo que creemos tú y yo que es el perfecto, el magnífico, que para nada es perfecto ni magnifico. Es su mundo, el de hoy, el que van a tener mañana porque ellos son el futuro de mañana y los maestros debemos tener de esa ciencia-ficción que tanto te gusta a ti; tenemos el deber de soñar qué va ser dentro de cinco años estos países, tu país, el mío de nuestra región, ¿Qué va a ser? Y modelárselas y decirles miren ustedes van a tener la oportunidad que no tuve yo, luchen por este modelo que no es ganar dinero, que no es drogarse, que no es buscar la vía más fácil para hacerse millonario, sino es soñar una tierra más linda, más solidaria, yo creo que a lo mejor no es nada técnico amigo, es decir, te estoy hablando de muy poca técnica, pero te estoy hablando de algo que siento, a veces lo veo en mis hijos y digo: “Ustedes son Peter Pan, viven eternamente jóvenes, quiere ser eternamente jóvenes, más que jóvenes adolescentes”. Y cuando lo comento con otros educadores me dicen: “¡Ay!, mis estudiantes son iguales, no quieren crecer”.

Es un signo de que en la sociedad que le estamos brindando es mejor quedarse chiquitico, es mejor quedarse como Ernesto en la casa en una escuelita linda donde está protegido, entonces eso lo tiene que llevar a una reflexión seria, importante donde tu y yo estemos en el público y que sean los jóvenes los que estén en el panel hablando, pensando, diciendo ¿Qué pasa con la tecnología?, ¿Qué pasa con su problema?, ¿Cómo es la sexualidad?, ¿Qué experiencias de sensualidad tienen? En fin todas esas cosas que tu y yo sabemos que les preocupa, pero que no es lo que yo creo que ellos ven, sino por como ellos creen, ven y viven esas experiencias, amigo, esa es una asignatura que tenemos que estudiar .

L.B.: Rosa, si tuvieras que hacer una recomendación a los sistemas educativos de la región. Tres recomendaciones fundamentales para avanzar en una educación inclusiva de calidad, ¿Cuáles serían esas tres prioridades, Rosa?

R.M.: Primero que somos diversos en todos los sentidos y la escuela tiene que aprender de esa diversidad, esa es la primera recomendación. Hay que estudiar más acerca de la diversidad que va desde todo, es decir, mi historia de vida me hizo diferente a ti, aunque fuéramos hermanos, eso es importante. Segundo todos podemos aprender, todos somos buenas personas, lo que va pasando de malo es porque nos van pasando cosas en el camino, pero siempre hay que mantener ese espíritu de que lo que tengo adelante es una buena persona que puedo formar que va a aprender de otras maneras quizás pero va a aprender. Tercero, la escuela tiene que saber atender la diversidad en todas las manifestaciones y entender que todos los que llegamos a la escuela o los que estamos en la escuela, somos personas que se nos puede educar desde nuestra diversidad y trabajar por un optimismo, por algo que es positivo y que si puede ser y tratar, de que lo negativo de este mundo vaya bajando el rating, vaya bajando el perfil. Si no la pregunta hasta uno mismo se la hace ¿para qué me estoy sacrificando tanto?, ¿para qué estudio tanto? Si al final uno lo hace que ya tiene edad que sabe que quiere y tiene una personalidad constituida, digamos que a un muchacho tú le estas dando desde la mañana puras malas noticias, malos ejemplos, bueno ellos dirán yo me voy por el camino más fácil yo no me voy a complicar mucho más, así sería la escuela que yo recomendaría y que dirigiría además.

L.B.: Rosa para ir cerrando este primer contacto internacional en el marco de la consulta de la calidad educativa me gustaría que le dijeras un mensaje a los maestros, a las maestras, a los profesores, a las profesoras venezolanas que están discutiendo en sus aulas en sus centros educativos el tema de la transformación educativa con calidad.

R.M.: El primer mensaje, Luis Bonilla, es que tienen el privilegio que creo que pocos maestros tienen y así lo tienen que ver, yo no te lo había dicho antes apenas hemos conversado desde hace mucho tiempo. Tu siempre andas muy a prisa y no me haces mucho caso, pero creo que Venezuela está haciendo algo inédito, poner en boca de los maestros, en boca de muchas personas, en boca del país, qué quieren, qué clase de educación quieren, qué proyecto de educación quieren; por eso los maestros venezolanos tiene que tener eso como conciencia que lo que está pasando en su país es inédito. La revolución es inédita, todas las revoluciones son inéditas, pero bueno a veces por ser cotidiano uno cree que no es inédito, eso es la primera cosa que yo creo que tiene que llegarle al maestro. Tienen una oportunidad de discutir política que pocas personas tienen como profesionales en este mundo.

Segundo, lo que está recogiendo ese sentir hay que saberlo canalizar porque si no se queda en una gran frustración y lo otro seria, recoger y canalizar no es para los maestros seria para los que van hacer política o van a continuar haciendo política, me estas pidiendo un mensaje para el maestro. Primero que esa es la oportunidad que tienen que saber aprovechar, y segundo que no lo vean desde el otro, sino a través de su propia experiencia, como yo en mi espacio escolar, en mi escuela que puede quedar en un cerro que puede ser en Táchira o puede ser ahí en Parque Central. Como yo desde ese espacio hago mío una concepción de calidad y hago mía un proyecto de calidad con el proyecto que tengo adelante que además cada maestro sabe que cada año ese proyecto debe ajustarse para los nuevos estudiantes que vienen llegando, eso necesita, Luis Bonilla, quizás escuchar todas esas entrevistas que tu estas dando para que vean cómo se ve la calidad desde una mirada de un banco desde una mirada más humanista y que vayan encontrando también esos referentes. Que digan: bueno la mía es puramente cognitiva, me interesa solo que aprendan a leer y escribir, no me interesa nada más y si eres consecuente con eso, yo te aplaudo, si eres consecuente desde la mañana a la tarde, si a ti lo único que a ti te interesa es ir a la escuela a que los muchachos aprendan a leer a escribir y las matemáticas y la tecnología , yo te lo aplaudo, pero tienes que ser consecuente con tu propio proyecto, si tu proyecto es que los muchachos conozcan la naturaleza, que tengan una actitud consiente con todo esto del medio ambiente, está bien si eres congruente con tu proyecto y haces tu proyecto de calidad.

Si ustedes logran que los maestros venezolanos vean esto como una gran oportunidad de hacer política y que esa gran oportunidad se puede concretar en un proyecto político del aula con lo que se crea en mi aula, yo debo convertir esa calidad en real,.

En México estos días han sido increíbles, yo nunca había venido a México, nunca había tenido la oportunidad de trabajar en una Universidad privada. Aquí he encontrado cosas como las mismas que encontré en Venezuela, las mismas preocupaciones, los mismos deseos de aprender, las mismas que encuentro en Cuba, las misma que encuentro en Nicaragua y vale la pena amigo, vale la pena seguí indagando, estudiando y luchando por un mundo mejor, porque definitivamente nosotros somos del equipo de los optimistas .

L.B.: Gracias a Rosa María Masson, pedagoga Cubana quien se encuentra en estos días trabajando en México, por su opinión por habernos expresado su punto de vista, respecto a la calidad educativa en esta consulta internacional por la transformación de nuestro sistema educativo, Gracias Rosa.

R.M.: Muchas gracias a ti, nos vemos.

Comparte este contenido:

Fernando Buen Abad: «No se educa, sino se educa en clave de lucha»

16-05-2014/La Otra Mirada

Continuando con las entrevistas realizadas por Luis Bonilla (LB) en su programa «La otra Mirada» a propósito de la consulta internacional sobre la Calidad de la Educación realizada en Venezuela, durante el 2014, a continuación la reseña del encuentro con Fernando Buen Abad (FB), filósofo, intelectual mexicano  y Coordinador y Académico de la Universidad de la Filosofía.

LB: Bienvenidas y Bienvenidos todas y todos a este nuevo contacto internacional en el marco de la consulta por la calidad educativa. En esta oportunidad conversaremos desde Buenos Aires, Argentina con Fernando Buen Abad Domínguez. Fernando es filósofo, intelectual y escritor de izquierda, militante marxista en numerosos movimientos, instituciones culturales y literarias. Nació en México, en el DF, en el diciembre de1956. Entre otras responsabilidades es coordinador de la universidad de la filosofía y ahora comparte sus actividades entre México, Buenos Aires y Ecuador también. Bienvenido, Fernando a este contacto internacional en el marco de la consulta pr la calidad educativa.

FB: Hola, Buenos días, Luis. Te agradezco la invitación por la oportunidad de conversar siempre con los hermanos venezolanos y por este proyecto que es siempre un preocupación y una  tarea que siempre parece inconclusa, afortunadamente la de transformar la educación, transformarla, así que es una alegría y un honor para mí participar.
.
LB: Fernando, te has dedicado los últimos años a trabajar el tema de la comunicación. Si te correspondería hacer un diagnóstico del comportamiento de los medios de comunicación en la región, ¿Cuál sería ese diagnóstico?
.
FB: En primer lugar, tendría que decir, para hacerlo muy breve, que han dejado de ser eso: «medios para la comunicación», que se han convertido es armas de guerra ideológica, en herramientas para mentir, herramientas para desfalcar la voluntad de los pueblos, e incluso, herramientas para fabricar golpes de estados como hemos visto en lo que va en el siglo 21. Los ejemplos son suficientes como para enderezar la idea de que ya no podemos seguir discutiendo el papel de esos medios de comunicación como solo un problema de distribución de herramientas, de tecnologías para la educación, ni solo como un problema de libertad de expresión como suele decirse, ni tampoco como un problema, como suele decirse, de multiplicaciones de voces. Hoy el problema también, además de todo eso, es un problema de seguridad nacional y regional, y creo que ese es el estatus que hay que estudiar hoy las máquinas de guerra ideológicas que el capitalismo financia.

Por otro lado ha habido y ha nacido, en América Latina particularmente, una gran corriente de comunicación emancipadora. Hay un fantasma como decía el viejo Mark, un fantasma que recorre los medios de comunicación, y ese fantasma es el fantasma de la emancipación y creo que hemos ido descubriendo capítulos extraordinarios de movimientos alternativos y comunitarios que demuestran nuevos usos de las herramientas de la comunicación, principalmente en la educación y que me parece un objeto de estudios fascinante, si queremos incorporar esas herramientas como herramientas de independencia, de pensamiento, como herramientas de emancipación intelectual y sobre todo como herramientas para crear la nueva comunicación que hace falta en América Latina.

LB: Fernando, si tuviéramos que caracterizar al imperialismo hoy, tendríamos que estudiar la dimensión de como concentra el capital, es decir como acumula hoy en día, el dinero, por decirlo en términos sencillos. Por otra parte todo el complejo industrial militar y por otro el complejo cultural, por el cual crea una hegemonía y, una forma de ver el mundo. Las grandes corporaciones televisivas, World Disney, la industria del entretenimiento forman parte de esa otra dominación de cual no se suele hablar mucho. Suele hablarse mucho de la económica y de la militar pero la cultural siempre pasa muy por debajo. Sin embargo un niño hoy pasa tres o cuatro horas frente al televisor, joven. Un muchacho además pasa el promedio de comunicación con un teléfono celular entre 50 minutos, 1 hora con 10 minutos del día. O sea, el tema cultura es un tema de amplio estudio. ¿Cuál es tu valoración de hacia dónde apuntan en este momento esa industria cultural en la perspectiva de dominación global?
.
FB: Efectivamente, creo que la ideología de la clase dominante es un objeto de estudio que por cierto se nos ha quedado, me parece en general, un poco al costado. No hemos sabido cómo ponerlo como un objeto de estudio y del combate con frente de lucha, como deberíamos. No hemos seguido el consejo del comandante Fidel Castro, a propósito de las batallas de las ideas y saber desarrollar esa batalla en todos sus ámbitos, especialmente el ámbito más difícil, que es el ámbito de la vida cotidiana. La ideología de la clase dominante se nos ha metido a todos en la vida diaria y la tenemos inoculada en nuestras conductas diarias, en nuestro anti valores con los que convivimos a cada minuto.

La ideología de la clase dominante nos ha enseñado a repetirle el discurso del patrón, creyendo que es el nuestro. La ideología de la clase dominante es un objeto de estudio muy complejo y es, repito, un frente de batalla que creo que no ha sido suficientemente calificado, y tampoco hemos desarrollado todas la herramientas que deberíamos para poseer, por ejemplo, una gran semiótica emancipadora hoy, que nos permitiera desmontar todos los discursos minuciosamente, ser capaces de desactivar todos los misiles ideológicos que nos disparan a todas las horas, por todos los medios que uno pueda imaginarse, no exclusivamente por la televisión, ni exclusivamente por la radio.

Uno ve en las conductas de algunas personas, en los ejemplos de la publicidad, en los parámetros y patrones de estilos, de gustos, de modas, de placeres, del rol de la mujer como se presenta bajo el capitalismo, del rol de los niños como han sido estereotipado y esquematizados como objetos de nuestra falacias e incluso de manera acrítica de todos los malos ejemplos, e incluso de todas nuestras irresponsabilidades. Y esta parte me preocupa mucho porque la estructura mediática del capitalismo, alguna vez lo dijo Salvador Dali, “el capitalismo tiene la cualidad de odiar a los niños”, y si eso lo tomamos en serio y lo analizamos, tendríamos pruebas más que contundentes para ver semejante monstruosidad en la vida diaria. Y no solamente porque estamos mirando hoy crímenes como el que se comente contra el pueblo palestino, no solamente porque estemos viendo la desgracia que se ha producido en Ucrania por la terquedad imperial, no solamente porque ya hemos visto esta cadena infernal de ataques contra nuestros pueblos,en todo el planeta, sino porque la vida diaria disfrazado de entretenimiento, disfrazado de placer domestico incluso, a veces también disfrazado de premio al buen comportamiento, el discurso y el mensaje mediático que se entrega a los niños y al que se los expone, sin hacer ninguna alto en alguna reflexión crítica. Entonces, tratando de atender a tu pregunta, yo creo que efectivamente tenemos una ofensiva permanente, si tenemos una problemática con la carga ideológica que estamos todos los días dirigiendo de manera generalmente acrítica y, que además, específicamente con los niños tenemos episodios de altísima irresponsabilidad por lo que cometemos de manera acrítica, por lo que pasa a nuestras narices y no nos damos cuenta. Pero también, tenemos por el otro lado la responsabilidad histórica de comenzar a hacer algo pronto.
.
LB: Precisamente desde la perspectiva de la comunicación, ¿Qué tendrían que cambiar los sistemas educativos de la región? Sobre todo los países progresistas para alcanzar eso que llamamos de manera genérica una calidad de la educación para el buen vivir.
.
FB: Yo creo que una de las cosas que si es urgente hacer, y que si podemos hacer, entre lo que queremos y lo que podemos, es recuperar el lugar que ocupó históricamente en la educación el desarrollo de los talentos críticos, el desarrollo de las capacidades críticas. Eso por lo menos en México desapareció de los objetivos generales de la educación. Eso desapareció en algunos países, incluso como en Perú. Acabo de estar en un congreso de estudiantes allá, y casi con el rostro atónito los estudiantes escuchaban que este fue uno de los grandes objetivos que en algún momento tuvo la educación pública en América Latina. Esa fue una de sus mejores tradiciones históricas. Creo que se ha perdido de vista la transcendencia del desarrollo de pensamiento crítico que incluyen muchas cosas: incluye la capacidad de ordenar la realidad, de saber que va primero que va después, que es urgente que es importante, que no lo es. Pero también, incluye la capacidad de defendernos, es decir, de defendernos frente al ataque ideológico, de los intereses hegemónicos que pretenden esclavizarnos. Hoy tenemos paradigmas fuertes en materia de desarrollo social como el concepto de independencia, que es un concepto que debe transversalizar a absolutamente todo el campo de la educación, y sin embargo parece que no. Parece que son proclives,en algunos espacio académicos, más bien a cancelar la independencia y cancelar la capacidad crítica a cambio de actitudes religiosas u oscurantista frente el conocimiento, de modo que creo que en esa ruta una de las tareas centrales desarrollar estrategias táctiles, estrategias para devolvernos a todo el privilegio y el derecho al desarrollo del pensamiento crítico, frente a los medios de comunicación con más urgencia que antes.

Yo creo que ya vivimos la etapa del debate que se suponía que prohibiendo que vieran los mensajes íbamos a lograr grandes cosas y no logramos más que afianzar el discurso que justamente algún día quisimos prohibir, y más de una tesis por allí, circuló como progresista incluso. Hoy creo que lo inteligente es aprender a mirar críticamente cada uno de los dispositivos con que el discurso de la clase dominante se desliza a través de sus programas de televisión, en particular, los programas para niños. En este sentido habría que hacer un buen inventario de cuáles son los dispositivos con que ellos cuentan para esa ofensiva televisiva, pero también cómo se deslizan en los libros de textos, pero también como se deslizan a través de la radio y también cómo se comportan a través de los llamado “juegos digitales”, que tienen una variedad de nombres en ingles todos estos, y que son un objeto de adicción muy graves, en jóvenes, en niños y en personas mayores. Entonces, este discurso que se disfraza en juego, es un discurso que tiene por entretenimiento el oficio de asesinar personas en el juego, e incluso con un grado de violencia que más bien sería un trabajo psicológico profundo para saber cómo es que se gana vida, por ejemplo, a partir de matar a otros en juegos digitales, en juego como “el player station”.

Necesitamos hacer un inventario muy concreto, un inventario preciso, como objetos específicos de análisis para desarrollar estos medios instructivos dinámicos, instructivos adaptables, cómodos, entendibles e inteligibles para poder trabajar críticamente sobre esos mensajes. Hoy en América Latina tenemos a la intemperie nuestro profesores de las escuela primarias que no saben qué hacer para  armar a sus estudiantes con algunas líneas criticas de eso que consumen todos los días. Y tenemos paradigmas, digamos durísimo.

Yo he trabajado a nivel de semiótica, por ejemplo del chavo del ocho, porque el chavo del ocho para México, es un personaje muy doloroso, es un personaje que tiene una carga de significados que no se ve en otros países pero que los tiene, Por ejemplo, ha sido un programa que a pesar de todas las contradicciones que contienen, ha transitado de manera exitosa, de manera impune y muy premiadora en todo el continente. De modo que, creo que al contrapelo de la misma idea de prohibir lo que tenemos que hacer es al contrario, desarrollar talleres de información a nivel de semiótica para docentes, escuelas primarias.

Que tendríamos que estar haciendo talleres de trabajo con padres de familias, viendo en conjunto, socializando la mirada. Es fundamental que es espacio de análisis crítico se vuelva colectivo y creo que algunas experiencias que hemos podido tener alguna vez interpretada, mirando allí la plaza del bombillo por ejemplo, entre todos un programa de televisión y hablando sobre eso y discutiendo, así se puede amasar un entrenamiento en talleres metodológico para la crítica del mensaje, pero lo mismo pudiera decirte, leyendo en conjunto la prensa.
.
LB: Si se pide a la educación que sea crítica pero en la parte formación de docentes hay una gran carencia de esa formación en profundidad para poder analizar televisión, literatura, comic, video juegos. Entonces, por supuesto, quizá el énfasis tendría que ser en la formación de los docentes. Tu que has trabajo en todo el continente el tema de la educación. ¿Contamos con centros de investigación, líneas de investigación potentes que puedan acompañar a ese cambio en la formación docente?

FB: Si hay, pero son insuficientes. El desafío es tan enorme  que con los tres o cuatro espacios que hay, no es suficiente. Bueno por ejemplo, están ustedes en el Centro Internacional Miranda, un músculo de pensamiento de desarrollo teórico, pero estoy seguro que ustedes deben sentir también la impotencia que muchos otros tendrán respecto al tamaño del problema con las pocas fuerzas que se quieren. Entonces, a mi entender, los gobiernos progresistas, los gobiernos democráticos, los gobiernos que tienen preocupación verdadera por la educación inteligente de sus pueblos, no pueden retrasar más la formación de formadores y la necesidad de crear grandes e importantes núcleos de cuadros dispuestos a desarrollar el pensamiento crítico. No nos alcanza con Enrique Dussel y sus grandes aportes a esta escuela, no nos alcanza Badellard y los grandes aportes que alguna generaciones hizo por allá en los años 70 y que siguen haciendo, no nos ha alcanzado pues la buena voluntad ni las buenas intenciones. Creo que es necesario sistematizar, por lo menos los grandes importantes cuadernos teóricos y cuadernos teóricos-prácticos que nos están haciendo tanta falta.

Ojala pudiéramos tener, incluso para la perspectiva general del problema comunicacional, un método de acción critica en el campo de la educación por supuesto, que también tienen que ser método de acción crítica produciendo porque hay una doble bisagra que es fundamental de entender: no alcanza solo con el desmontaje del discurso o con desarticular los misiles ideológicos que nos imponen. También es importante apropiarnos de las herramientas para producir los ejercicios de nueva comunicación que estamos necesitando. Entonces, un profesor que sea capaz de desarrollar pensamiento crítico con los alumnos haciendo ejercicios, también podría empezar a desarrollar ejercicios de comunicación propios en los que se pusiese en orden crítico las necesidades, las propuestas, las luchas que se están llevando a cabo aula por aula, profesor por profesor, escuela por escuela, que son realmente los sujetos de lo nuevo que estamos buscando como la emergencia de esa nueva comunicación.

Lamentablemente, en eso al respecto y en esa dimensión pensada continentalmente pues no, nos vemos a la intemperie más de una vez tratando de pelear contra unos monstruos indomables. No obstante, eso no quiere decir que no seamos capaces de diseñar al menos el marco de trabajo que si se necesita y al respecto los que permitirían hacer real semejante ejercicio de formación de pensamiento crítico ante los medios de comunicación, ya de inmediato nos proponen o se exigen un caudal teórico que seamos capaces de proponer sobre la base de nuestra propia experiencia. También alguna vez no hemos equivocado pensando que si nos traemos algunos autores que ya han trabajo en esto como en Dinamarca o por ejemplo en China, con esto nos va ir bien. Que bueno que podemos ver otros modelos, pero las características del territorio nuestro, de América Latina en particular, posee tal conjunto de peculiaridades que me parece que los análisis ienen que fundarse en esas particularidades y en las casuísticas nuestras para poder enfocarlas. Entonces a ese respecto, pues seguimos extrañando la biblioteca del pensamiento latinoamericano en materia de comunicación revolucionaria, de comunicación emancipadora. No hemos logrado consolidar semejante herramienta teórica que sería obligatoria si pensásemos en multiplicaciones de talleres de formación para docentes en esta especifica materia.

Ahora no hay que esperar a que esto ocurra, podríamos de a poco empezar a trabajar en eso, pero también a ese respecto se requiere orientar financiamientos, se requieres una buena e importante convocatoria para que tengamos puesta la mirada de estudiantes, de postgrados, de doctorados que se ocupen de estos temas porque, por cierto hay que decirlo y por tristeza, que a nivel de los grados y los postgrados tampoco este es un tema eje que hoy esté llamando la atención de mucha gente y creo que con una buena convocatoria, e incluso con becas e investigación, e incluso premiando el pensamiento crítico como ha venido haciendo Venezuela, como el gran premio libertador del pensamiento crítico, pero no solo a las obras cumbres a los grandes e importantes autores, sino también a los proyectos de investigación en marcha en campo especifico de estos temas que son tan cruciales para América Latina.

LB: Fernando, uno de los grandes debates de educación es sobre si tiene una dimensión política o no. Por supuesto los marxistas, lo revolucionarios tenemos claro que la educación es política, sin embargo, contradictoriamente a nivel mundial quienes promueven que la educación no es política se organizan en gremios sindicales. La internacional de la educación tiene, por ejemplo, más de 400 federaciones en el mundo. La propia democracia cristiana está organizada internacionalmente y los marxistas o la izquierda radical tiene temor de definirse que es una izquierda con temor de definirse que es una izquierda pedagógica. No habla de una izquierda pedagógica, no construye una instancia de organización internacional. Tú eres militante también de una corriente internacional, de la corriente marxista internacional. ¿Qué crees que está pasando en las últimas décadas para que los educadores, los pedagogos de la izquierda no nos planteamos el desafío de construir una herramienta organizativa internacional que pueda enfrentar teórica y biológicamente los aparatos de la derecha?
.
LB: Bueno, una larga cadena de descuidos y de debilidades. No hemos hecho ni siquiera la autocrítica suficiente al respecto como para señalarnos con toda claridad. No solamente todo eso que correctamente dices en lo que no hemos atinado en llegar con puntualidad a nuestro tiempo, ni hemos cumplido con el gran proyecto de la unidad que es el proyecto. Marx escribía, la última palabra del manifiesto con que se dirigió a los trabajadores del mundo, la última palabra es una palabra chiquitica que dice “unidos”, y eso todavía no hemos logrado satisfacerlo como deberíamos. Ahora, es a la vez un trabajo de autocrítica científica, porque no basta la autocrítica puramente confesional o puramente de confesionario donde uno se da golpes de pecho; tampoco hemos logrado tener el programa científico que nos permita avanzar en esta línea. Entre otras razones creo que es por nuestras debilidades: por un lado políticas y por otro lado económicas también, y por otro lado metodológicas. Todo el mundo en el discurso es capaz de decir e introducir las ideas más perfectamente rimadas, los cuatro lógicos más perfectamente ensamblados, si pero no nos alcanza con eso, en la lucha cotidiana, están ahí los barrios, están allí las exigencias y nuestra incapacidad de estar a tiempo con los tiempos, que nos viene exigiendo cosas.

Discutíamos hace unos cuatro días en las universidades de Argentina, en la UBA que hay de nuevo en materia de comunicación ahora y yo les decía que hay de nuevo si tuviéramos que sintetizar lo nuevo en los meses recientes y esto que estoy planteándote lo nuevo entre otras cosas es que, por ejemplo, se ha convertido en un narco-espectáculo la inmensa mayoría de los bienes culturales de la televisión burguesa. Hay que estar muy alerta y muy a tiempo con lo que está pasando en Estados Unidos, a propósito del espectáculo con el narco convertido en entretenimiento para jóvenes, para niños y para adultos. La serie de televisión más premiada en este momento, la que más dinero ha reunido, la que más éxito capitalista ha tenido en fechas recientes, es la historia de un profesor de química que se vuelve narcotraficante. Ahora circula por las pantallas de televisión de toda América Latina historias como la de narcotraficantes colombianos o mexicanos. Una de esas novelas tuvo 6 temporadas, que es escandaloso solamente de imaginar la repercusión y la formación de valores, como dice el presidente Maduro, de lo antivalores que va sembrando este modelo de comunicación en todos los rincones de nuestra vida diaria.

Entonces, ya escuchamos a los niños jugar a narcos en algunos patios de escuelas, ya escuchamos en algunos barrios que los niños empiezan a ver que el narco es como una salida de futuro. Ya en México tenemos ese problema: ya hay narco canciones, hay narco iglesias, narco misas, narco fiestas. Es decir, es un problemas severísimo que transita todo el continente y ahora mismo el secretario general de UNASUR tuvo una reunión en la que se discutía sobre cómo nos estamos preparando antes esta ofensiva del narcotráfico en todo el continente. No es solamente una ofensiva a balazos y de sangre, como tu muy bien decías, es una ofensiva ideológica que también parece que se nos pasa desapercibido, porque pasa a través de esa zona invisible que es la zona del entretenimiento, de la diversión cotidiana, domestica, etc. De modo que, a ese respecto Luis lo que nuestra auto-critica tendría que ser: 1)Qué herramientas somos capaces de desarrollar desde el marco teórico, por ejemplo marxista que tiene mucho por trabajar por fuera de esos viejo dogmas acartonados y por toda esa concepción mecanicista y torpe que se hizo de Marx. Hay en realidad en la propuesta de Marx un método por desarrollar. Acabo de leer una frase del presidente Chávez que alguna vez con un libro en la mano de Marx, que decía que este era el método que nos permitía pensar en el futuro, pero había que convertir eso en herramientas concretas de trabajo, para demostrar el potencial científico de semejante método. En eso venimos muy atrasados y hace falta actualizarse.

Por otro lado, creo también que hemos subestimado algunos frentes de trabajos. El campo del arte porque yo por ejemplo he sido muy subestimado por la izquierda, en muchos momentos en América Latina y creo que es un espacio que no podemos nosotros abandonar de ninguna forma. Aquí hay que comprometerse con ese problema crucial de la expresión y de la liberación de los graduales expresivos de los seres humanos. Y también nos ha pasado con las herramientas de la comunicación, que me pareces han sido vistas como un tema bastante de soslayo, como de segundo plano, y me parece que también nos hemos equivocado en eso, en tanto que los resultados, cuanto queremos como incide esas herramientas de llamadas de comunicación, incide  brutalmente sobre las poblaciones indefensas, por cierto.

El caso de Venezuela, es un caso digamos único, paradigmático, en el que se está produciendo una gran movida de medios alternativos y comunitarios. No es el caso en América Latina,ni del todo el continente.  Hay una ley que tiene que actualizarse hoy por hoy en Venezuela, pero también es un ley pionera en materia de la comunicación que atiende cosas tan delicadas como el manejo del volumen entre los programas de televisión y los comerciales, que es una trampa psicológica que hace mucho tiempo se amasa por los laboratorios de guerras psicológicos que han sabido jugar hasta con esos detalles que parecen menores, con los que han sabido producir modelos de ofensiva. Hay venimos lentos. Y también por cierto no hemos logrados hacer la vanguardia que indique hacia donde hay que salir. Esa es otra de las grandes tareas que tendríamos que tendríamos que cumplir, pero necesitamos los laboratorios de investigación científica bien armados, bien fundados, bien dirigidos obligados a crear productos concretos de herramientas de combate en esta enorme batalla de las ideas.
.
LB: Fernando, desde tu perspectiva si tuvieras que definir que es la calidad de la educación, ¿Qué sería para ti calidad de la educación?
.
FB: Yo creo que una parte de la calidad, en principios es ética, para mí es un problema desde el principio de convencernos de que el profesor trabaja para que el alumno lo supere. Que el profesor tiene como objetivo primordial que el alumno sea mejor que él y a su vez convencer a ese alumno que cuando el forme a otro, lo haga convencido de que aquellos otros tienen que superarlo. Esa dialéctica de la superación humana para mí es un valor de máxima y creo que tiene que determinar el concepto de la calidad.  Tiene también otra arista que para mi entender es la del método correcto, que permite trabajar en condiciones correctas y eso tiene que ver con que calidad no es repetir modelos desarrollados por otros países aunque tengan mucho éxito.Calidad tiene que ver con resolver problemas concretos presentes en nuestras realidades completas y que nos permitan avanzar los problemas para poderlos resolver también. En general en la educación nos han enseñado a repetir aquello que también Marx criticó en la filosofía, que la educación sirva para contemplar el mundo, para conocerlo, pero nunca para transformarlo y yo creo que calidad es justamente eso: es educarnos para transformar el mundo. Además de conocerlo, además de contemplarlo,  y estudiarlo y escudriñarlo, además de todo eso: transformarlo. Ahora transformarlo hacia dónde, y esto también tendría que ser a otro gran problema de la calidad, hacia seres humanos que no aceptan de ninguna manera dividirse en clases sociales. A mí me parece que esa es una de las grandes premisas de la calidad educativa, donde para la química, para la matemática y para cualquier disciplina, el proyecto central sea que los seres humanos jamás acepten vivir en sociedades divididas, separadas y mucho menos sometida. A mi entender esas son condiciones, digamos de máximas, condiciones filosóficas específicas para esto.

Después el rigor del conocimiento amplio y plural. A mi entender un profesor en cualquiera de los niveles que estemos hablando está obligado a tener un pensamiento amplio, plural, abierto y está obligado a conocer cuántas cosas se les presente pero a conocer críticamente. Y ahí pongo todo el énfasis de la calidad, en el sentido que si tendrían que descansar todos estos conceptos sobre un eje concreto.diría justamente sobre el pensamiento crítico. Si no hay manera de hacer una educación de calidad si no se tiene un pensamiento crítico muy dinámico que por supuesto incluya la autocrítica.

LB: Fernando, para ir cerrando este contacto internacional, nos gustaría que les dirigieras un mensaje a los maestros, a las maestras, a los profesores y a las profesoras, venezolanas y venezolanos que en sus aulas, en sus centros educativos, con las comunidades, con sus estudiantes están discutiendo el tema de la calidad educativa como una oportunidad para seguir avanzando en la transformación de los sistemas educativos.
.
FB: Bueno, el mensaje que yo puedo enviar, es un mensaje a mis pares, a mis colegas porfesores. Yo soy uno también, uno entre tantísimos que en este continente todavía abrazamos y acariciamos la certeza que un campo de lucha muy importante es el campo de educación y que ese tejido de relaciones humanas que se teje permanentemente entre profesores y estudiantes, es un campo promisorio para que este mundo mejore. Yo soy de los que de verdad cree que el trabajo de la docencia, es un trabajo de méritos absolutamente humanísticos y que debemos evitar a toda costa que la educación sea secuestrada para convertirla en mercancía.

Si yo pudiera hacer llegar un saludos y un abrazo fraternal a todos estos colegas, compañeros y profesores, diría que hay que hay que reafirmarse en los principales e importantes enseñanza de la educación que es un conocimiento de todos, que es un aprendizaje permanente de todos y que no se educa, sino se educa en clave de lucha. Yo creo que lo que tenemos como paradigma hoy importante todos que desarrollar es la comprensión de que educarnos es una lucha, de que aprender es una lucha, de que estamos librando una batalla social contra la ignorancia, contra el sometimiento de la conciencia ,de que estamos haciendo todo lo posible por formarnos para conformar una gran fuerza cada vez mejor organizada, una gran fuerza mundial continental, Latinoamericana, de la patria grande, una gran fuerza que tenga entre otras importantes cualidades el desarrollo de la conciencia y la defensa del derecho legítimo, absoluto, histórico y además revolucionario de ser cada día más cultos para ser más libres.
.
LB: Conversamos hoy con Fernando Buen Adab Domínguez, rector y fundador de la Universidad de la Filosofía sobre el tema de la calidad, en el marco de la consulta nacional e internacional que estamos realizando. Gracias Fernando por tu opinión, por tus comentarios en esta entrevista.
.
FB: No Luis, te agradezco a ti y te mando un abrazo siempre. Sé que el trabajo de ustedes del Centro Internacional Miranda es un trabajo crucial de todos los días. Sé que lo que se está haciendo en Venezuela en materia de educación ha merecido muchos esfuerzos. Hay muchos tropiezos, hay muchas cosas todavía por avanzar, pero cuenten siempre con que mi abrazo solidario y mi amor, yo estoy muy enamorado de Venezuela y tú lo sabes bien. Así que toda vez que sea posible cuente conmigo.

Para ver y oir la entrevista:

Producción de la Otra Mirada: Luis Bonilla Molina

Equipo de producción y post producción digital: Dilanci May Sierra

Transcripción de la entrevista: Liliana de Luzon

Edición: Marianicer Figueroa

Comparte este contenido:

Eduardo Piñate: «La Educación es un pilar central del proceso de generación de la nueva ciudadanía»

Entrevista a Eduardo Piñate (Venezuela)

12 Enero 2016/ La otra Mirada

Continuando con las entrevistas realizadas por Luis Bonilla (LB) en la segunda temporada del  programa «La otra Mirada», a continuación la reseña del encuentro con Eduardo Piñate (EP) , educador venezolano. ¡Bienvenido Eduardo a esta cita con el movimiento pedagógico venezolano y mundial!

Quienes entendemos el proceso Bolivariano como una sumatoria de dinámicas convergentes a través de la historia de resistencia nacional en la República Bolivariana de Venezuela contra la lógica de dominación –potenciada a partir del inicio del modelo de alianza cívico-militar en la década de los cincuenta del siglo veinte- valoramos de manera especial el trabajo que cada militante y cuadro ha realizado a través del tiempo.

Comenzamos a saber de Eduardo Piñate en la década de los ochenta –aunque él ya tenía tiempo militando en la causa revolucionaria- en el marco del activismo de la Liga Socialista, el periódico Basirruque y los Encuentros Nacionales de Educadores. Luego, al calor del proceso Bolivariano coincidimos en múltiples escenarios y tres rasgos le han caracterizado siempre: la irreductible convicción en el futuro socialista de la humanidad, la tolerancia con las ideas y enfoques distintos al que él sostiene y la humildad y don de gente en el trato. Su militancia política y pedagógica le llevó a ser unos de los motores de organización del Sindicato Nacional Fuerza Unitaria Magisterial (SINAFUM), del cual fue su primer Presidente, tarea que combinó con un papel destacado en la construcción del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y que dejaría para trabajar como parlamentario de la bancada de esta organización política.

Eduardo Piñate es de los contados cuadros políticos que responde en tiempo real los mensajes de texto, las llamadas telefónicas o los correos electrónicos. Cuando le solicitamos la entrevista no dudó en acceder y de inmediato pudimos ponernos de acuerdo sobre la hora y lugar para conversar de la coyuntura política y su mirada sobre la prospectiva educativa. Llegó puntual a la cita y de los libros que le obsequiamos los que más le llamaron su atención fueron los números de COMUNA: pensamiento crítico en revolución, dedicados al nuevo modelo productivo bajo control obrero-comunitario y el referido a la experiencia socialista en Guayana, lo cual ratifica su especial interés por los temas sindical y de construcción del poder popular. Horas después de realizada la entrevista nos enteramos, a través de los medios de comunicación, que el Presidente Nicolás Maduro lo designó como Secretario Permanente de la Presidencia del Partido Socialista Único de Venezuela (PSUV).

EDUARDO PIÑATE: Muchas gracias Luis.

LUIS BONILLA–MOLINA: Eduardo el 6 de diciembre de 2015 ocurrió un hecho electoral significativo en el proceso bolivariano, es la segunda oportunidad en la cual el cuadro de resultados electorales le resulta adverso a lo que genéricamente se ha denominado como el Chavismo. Me gustaría saber, ¿Cuál es tú valoración de las causas que generaron éstos resultados el 6 de diciembre de 2015?

EDUARDO PIÑATE: Como tú lo has dicho, el 6 de diciembre de 2015 nosotros recibimos nuestra segunda derrota electoral de 20 procesos eleccionarios en los cuales hemos participado. Uno siempre tiene que decir esta cifra, porque no creo que haya país en el mundo que durante 17 años haya realizado 20 elecciones. Y esto solamente hablando de los poderes públicos, porque en el seno de la sociedad venezolana existen múltiples elecciones de consejos comunales, comunas, organizaciones estudiantiles, sindicales, etc. Este es un proyecto revolucionario con una profundidad democrática, casi que sin parangón en la historia y menos aún en la historia Republicana de nuestro país.

Primero, efectivamente nosotros sufrimos una derrota electoral muy importante, yo la califiqué y la sigo calificando como una contundente derrota para las fuerzas del Gran Polo Patriótico de la Revolución Bolivariana y que, para la derecha representa una victoria importante de una magnitud que no se esperaba. Ellos mismos quedaron sorprendidos de la cantidad de diputados y diputadas que le otorgaron esos resultados electorales.

Ahora, ¿Qué pasó? Desde mi punto de vista existen múltiples causas. En primer lugar, debo decir, que nosotros venimos arrastrando de la IV República, un conjunto de temas estructurales que aún no hemos logrado resolver. No hemos podido superar a estas alturas el modelo rentista petrolero y establecer una economía productiva en el país con carácter socialista, como lo ha venido planteando el presidente Nicolás Maduro y en su momento el Comandante Hugo Chávez. Nosotros estamos reivindicando profundamente ese concepto de Economía Productiva Socialista, que implica relaciones de producción de cooperación, de solidaridad, no de explotación, pero a decir verdad nosotros tenemos que ser autocríticos, ya que hemos avanzamos muy poco en el establecimiento de una economía productiva socialista en el país.

Al lado de esto, desde el momento que se conoció la enfermedad del comandante Chávez y con mayor radicalidad, desde el momento de su desaparición física, el imperialismo con todas las fuerzas que tienen, lanzó una ofensiva brutal contra la revolución bolivariana y contra el pueblo venezolano en todos los planos. Yo hablo de una guerra total que desató el imperialismo contra la Revolución Bolivariana, que implicó guerra económica, psicológica, mediática, cultural e ideológica, operaciones militares, terrorismo y asesinato selectivo de dirigentes. Todo esto combinado tuvo una suerte de barco insignia para la lucha principal, que es la guerra económica.
La guerra económica se desplegó teniendo múltiples manifestaciones: por un lado, el ataque de la moneda apoyada en la fortaleza de la burguesía, en el manejo financiero, en las alianzas importantes internacionales, que les permitió montar una estructura de dólar paralelo que impactó negativamente los precios y que fue un factor fundamental de la elevación de los precios en el país y todavía es un factor relevante en ese terreno.

Por otro lado, toda la ofensiva que se lanzó en materia de precios, con la especulación, el acaparamiento, el contrabando de extracción por el cual al final se tuvieron que cerrar parcialmente las fronteras del país, decretar ese estado de excepción en municipios fronterizos pertenecientes a 3 o 4 estados de Venezuela, para tratar de detener la hemorragia de productos hacia países vecinos. Pese que la derecha dice que aquí no hay producción, resulta que estábamos manteniendo tres economías. La economía familiar-normal, que producto del desabastecimiento aparentemente consumía más; ejemplo de ello: aunque la gente necesitara dos kilos de harina precocida compraban ocho como previsión ante el fantasma del desabastecimiento. Es decir, había una sobre carga de la demanda, pero también hay que decirlo, ello evidencia que tenemos mayor capacidad de compra por todas las medidas extensivas del salario que ha venido tomando el gobierno, desde el Comandante Chávez hasta ahora.

Luego la economía delictiva por la vía del bachaqueo, por la elevación de los precios, por el establecimientos de canales de distribución de los productos al margen de la legalidad que afecta alimentos, medicamentos, lo cual implica un aumento de los precios sin ninguna justificación. Es decir, en el inicio de la cadena de comercialización se tiene un producto a un determinado precio -regulado o no por el Estado- y cuando sale de allí lo encuentras al triple y en el mercado normal no lo consigues; entonces, te ves obligado a comprarlo en el otro. Además, tenemos entre unos 10 a 15 millones de habitantes más allá de la frontera entre Colombia y Venezuela quienes por la vía del contrabando de extracción, viven de los productos venezolanos produciendo desabastecimiento y encarecimiento de los productos en el territorio nacional. Entonces, esa ofensiva por supuesto afectó profundamente el bolsillo, el ingreso de los asalariados, trabajadores, trabajadoras y el ingreso familiar en su conjunto.

En el marco de la campaña electoral, en el año 2015, como resultado de la guerra económica la situación se intensificó, llegando a niveles de locura. Esto al final estuvo vinculado a acciones terroristas, a alianzas de paramilitarismo con sectores del hampa organizada quienes golpearon a distintos sectores populares.

Frente a eso, ¿Qué pasó? Nuestra repuesta no fue lo suficientemente contundente y asertiva para detener los efectos de eso. Nosotros hicimos política, mientras ellos hacían guerra. Por eso siempre se decía, la derecha no hizo campaña electoral. Y es verdad, ellos nunca hicieron campaña electoral. Ellos decían, la campaña la hacemos en las colas y así lo hicieron.

Efectivamente la burguesía es quien eleva los precios, porque éstos no se incrementan solos. Utilizaban los efectos del aumento de precios, del desabastecimiento, del acaparamiento para decir que la política del gobierno, que el modelo socialista -que no se ha terminado de instaurar pues apenas estamos dando los primeros pasos- había fracasado, cuando en realidad lo que en este momento estamos viviendo es el fracaso del modelo rentista petrolero. Por allí están las causas fundamentales de la derrota electoral.
Yo soy militante del PSUV y nosotros en los primeros meses de 2014 vimos que se desató toda la violencia focalizada urbana que lanzó la derecha, que Leopoldo López lo llamaba La Salida. Fueron 6 meses de locura foquista de derecha en la calle; en medio de eso, nosotros como partido desarrollamos una labor de movilización, de debate, de discusión, que nos llevó todo el 2014 y 2015. Yo dudo que antes de ese período haya existido tanto nivel de movilización de la vanguardia y del PSUV en Venezuela.
Eso implicó todo el debate del 3er congreso que se realizó en Julio del 2014, todo el debate de la política de formación, el congreso de la juventud del partido. En ese periodo realizamos diferentes congresos: de los indígenas, de la clase obrera, campesinos y pescadores. Terminamos el año 2014 renovando las estructuras de base del partido, de manera democrática con elecciones directas de las Unidades de Batalla Bolívar–Chávez (UBCh), de los Círculos de Lucha Populares (CLP) y arrancamos el año 2015 renovando la Dirección General del partido con una convocatoria extraordinaria del congreso que eligió la nueva dirección. Todo el año 2015 hubo un nivel de movilización muy importante del partido y de otras fuerzas.

Sin embargo, esa movilización, no se correspondía con la guerra que nos estaban haciendo en términos políticos, no se correspondía con el nivel de agudización de la contradicción. Terminamos haciendo una organización y una campaña electoral reformista y el partido no logró superar lo que planteó Chávez en el año 2010, lo que él denunció en el documento que se llama las Líneas Estratégicas de Acción Política, no logró pasar del Partido Maquinaria – Electoral, al Partido – Movimiento. Eso es un hecho, aunque con todos los avances que hemos dado, no estamos en la misma situación del 2010, ni en la misma situación del 2012 sino en una nueva realidad. Ese es uno de los grandes desafíos que tenemos por delante como partido los cuales menciones ampliamente en mi libro el cual se llama “Del PSUV y su Relación con los Movimientos de Masas”.

LUIS BONILLA–MOLINA: Partiendo de tú análisis Eduardo, cuando uno quiere hacer una revisión de una coyuntura determinada es obligatorio revisar lo actuado. El peso de una guerra económica tiene una incidencia fundamental en la reflexión que tú haces, pero cuáles son los errores fundamentales desde el punto de vista del discurso y la acción que cometió el Chavismo, por decirlo de una manera global. Por ejemplo, en algunos sitios había malestar cuando se dijo que “la gente gozaba las colas” o cuando se hablaba que los precios eran de un determinado nivel y en la realidad eran otros. Ese tipo de cosas irritó a los sectores populares y también tenemos que reconocer que discursivamente se cometieron un conjunto de errores que si no se reconocen, difícilmente se van a poder encarar en lo inmediato.

EDUARDO PIÑATE: Dentro de esa caracterización general que yo te acabo de hacer, se derivan algunas cosas, hay un problema que tiene que ver con una suerte de separación progresiva y de burocratización de la dirección del partido y del gobierno. Yo creo que eso nos afectó de manera importante; creo que ese es uno de nuestros grandes temas a rectificar en este momento. A veces ocurren procesos de elitización en algunos sectores de la organización, por decirlo de alguna forma y por supuesto en esas condiciones, es difícil interpretar lo que está pensando el pueblo. Muchos de nosotros sabíamos de esa situación que estaba pasando el pueblo. De hecho, cuando uno se reúne con las bases del partido o con la gente de los consejos comunales, con los comités de salud o con los comité de tierra rurales, es decir, cuando uno va al barrio, la comunidad o la fábrica, allí los trabajadores, la gente de la comunidad sienten y viven los problemas y además lo denuncian.

Nosotros hicimos una campaña electoral, hicimos política para una situación normal. Yo lo decía, esta campaña electoral hubiese sido muy buena para otro momento, para el año 2006, incluso para el año 2012, cuando ganó el Comandante Hugo Chávez, pero la campaña que hicimos para estas elecciones pasadas, no se correspondía con la situación presente. Eso trajo determinado errores, en el discurso y en el contenido. Hay una cosa paradójica, que pasó aquí y pasó en Argentina, la derecha más recalcitrante, fascista inclusive, termina venciendo en nuestro caso a una revolución con la consigna del cambio, cuando una revolución es cambio permanente. ¿Qué quiere decir eso? que el pueblo nos percibió a nosotros como conservadores y acaso no será verdad que en alguna medida fuimos conservadores. Entonces, nosotros tenemos que radicalizar la revolución y esto pasa por una radicalización del discurso e implica una práctica política amarrada, abrochada con nuestro pueblo y por su lucha, es decir, colocarnos al frente de sus luchas.

Recién en estos días mencioné, a propósitos de los acontecimientos de la asamblea nacional, que a nosotros de toda la vida marxistas, -en mi caso marxistas- leninistas, bolivarianos y chavistas desde que tenía 14 años y empecé a leer y hacer mis primeros pininos en esto- nos dijeron que nosotros debíamos agudizar la contradicción para poder avanzar. Resulta que ahorita quien está agudizando la contradicción es la ultra derecha, con una postura absolutamente subversiva. ¿Qué pasa? que nosotros entonces llegamos a un momento de cierto conservadurismo en la acción política.

Y esto ocurría a pesar de que estábamos haciendo mil cosas, ¿Cómo nos percibió el pueblo? Entregamos la vivienda 1 millón, ¿Qué gobierno en el mundo ha entregado 1 millón de vivienda en 3 años?, construidas, hechas y entregadas al pueblo, no era el mercado inmobiliario, capitalista burgués, ¿Qué gobierno en el planeta ha logrado reducir la pobreza en un período de 17 años, bajándola de casi un 80% a 19% y, la pobreza extrema que en el año 98, estaba en 20 a 21% y hoy está en 4,4%? Además de ello, los niveles de inclusión en materia de educación, de matrícula escolar, salud, como hemos abatido el desempleo, la garantía de la calidad del empleo.
Hemos hecho mil cosas en materia de inclusión social, pero eso y aquí está el error fundamental desde mi modo de ver y que nos corresponde a nosotros como partido asumirlo, es que eso no estuvo acompañado de un crecimiento de la conciencia. Como señala Luis Britto García en su genial artículo: “Socialismo sin ideología es piñata a la que se le rinde culto hasta que duren los caramelos”. Es decir, que pasó este año, una guerra económica brutal, un cerco o un bloqueo financiero internacional, una caída también brutal de los precios del petróleo que redujo los ingresos del país, pero muy, pero muy importante eso no estuvo acompañado de un crecimiento de la conciencia. Hemos incluido, hemos elevado los niveles la calidad de vida de millones de venezolanas y venezolanos, pero eso no se ha correspondido con un crecimiento de la conciencia que permitiera resistir los embates de la guerra económica. No evitamos que amplios sectores de la población no cayeran en el chantaje de la guerra económica, que no fuesen desmoralizados por la guerra económica. Sin embargo esto hay que matizarlo siempre, ya que la derecha tuvo una importante victoria, ahora, una victoria táctica, que si nosotros hacemos lo que tenemos que hacer, nosotros podemos convertir esa derrota táctica en una victoria estratégica, un relanzamiento de la revolución.

LUIS BONILLA–MOLINA: La pregunta para una respuesta breve. Las colas siguen. Desde tu perspectiva ¿Cómo hacer que la gente entienda que las colas son parte de una guerra económica y que no se siga profundizando ese alejamiento del partido con las bases populares que tú alertas?

EDUARDO PIÑATE: Hay un elemento allí que debemos aprovechar. Parte de la campaña electoral de la derecha se concentró en crear la expectativa que ellos iban acabar con las colas, eso fue parte del discurso demagógico que ellos usaron, pues entonces vamos a desenmascararlos. En primer lugar, eso pasa porque nosotros vayamos allí, donde está el pueblo de verdad. No podemos seguir haciendo políticas desde los medios de comunicación, desde los espacios institucionales, desde las alcaldías, las gobernaciones, los consejos municipales, debemos ir allí donde está el pueblo, tenemos que hacer jornadas de explicación de la verdad, de las raíces profundas de las colas.

Nosotros tuvimos una experiencia significativa en La Pastora a mediados del año pasado. Había una cola en un supermercado de una conocida cadena comercial, por el sector de Los Robles y esa noche nosotros estábamos en una asamblea del partido. Había una cola grande, la gente estaba alterada y casi saqueaban el negocio. Te estoy hablando de las 10 pm y decidimos salir de la reunión e irnos a la cola. Nos fuimos con unos fiscales de la Superintendencia de Precios Justos que teníamos allí en el partido y unos inspectores. Fuimos como 20 personas y en la cola había como 200 personas; nos metimos en la fila y empezamos a discutir, a conversar con la gente. La primera cosa que pasó, fue que como 20 agitadores de derecha que habían estado allí se fueron, se salieron inmediatamente y, luego ordenamos la cosa explicando lo que ocurría. A partir de ese momento se empezó a dar otra relación en toda esa zona, porque a partir de esa experiencia, de esa noche, nosotros logramos en ese espacio -territorialmente te estoy hablando de aproximadamente 5 manzanas donde hay varios comercios- lograr hacer un trabajo importante y esa fue una buena experiencia, pero muy local, muy pequeña, que deberíamos multiplicarla.

Nosotros tenemos que ir hacia allá, dar debate allí explicando las cosas, no se trata de pura consignas, se trata de explicar el tema. Incluso dar información sobre un elemento que tiene que ver con organización para enfrentar y para empezar a profundizar en todo ese tema en la organización popular asociado con el tema del abastecimiento, en función de que los alimentos lleguen, se puedan adquirir los bienes, que los medicamentos lleguen a donde tienen que estar.

LUIS BONILLA–MOLINA: Eduardo, ¿Los resultados del 6 de diciembre potencian la idea socialista? ¿Hay que seguir profundizando para radicalizar o es necesario parar y hacer consideración con los sectores que obtuvieron mayoría en la asamblea? ¿Cuál es tu perspectiva?

EDUARDO PIÑATE: yo estoy absolutamente en desacuerdo con todas las tesis que han venido planteando la necesidad de una negociación con la derecha del país. Y lo estoy por varias razones. Aquí lo que está planteado frente a la derrota, es un proceso de profundización y radicalización de la revolución, en varios aspectos: en lo económico, en la construcción de la institucionalidad revolucionaria, en la lucha política, en la movilización de las masas, en la organización popular y en la construcción del Poder Popular.

Yo creo que aquí está descartado cualquier pacto, porque ese pacto nos conduciría a una situación de retroceso importante. Todo el año pasado, incluso antes -Chávez lo hizo en distintas oportunidades- nos sentamos con los empresarios. El propio presidente Nicolás Maduro desarrolló distintas conversaciones de acuerdo con sectores empresariales, sectores políticos de la derecha y la respuesta siempre fue, en la generalidad de los casos o en buena parte de ellos, una violación de los acuerdos tanto en el terreno productivo y un exacerbación de la conspiración y de toda la estrategia del golpe suave que se ha venido desarrollando.

Cuánto dinero se ha venido acordando con estos sectores empresariales y se le ha venido dando, de los dólares preferenciales, ¿Cuántos han sido destinados para lo que ha sido el acuerdo y para la producción de bienes y servicios? ¿Cuántos han sido destinados para la especulación y para la conspiración? En Venezuela hay fracciones de la burguesía productiva, que quieren producir en un país, pero que también está afectada por el gran capital monopolista que está golpeando duramente, incluso a estos sectores productivos, que no han conspirado, pero que hay que escogerlos con una lupa, como con un bisturí, con este sí y con este no.

En términos políticos yo creo que no hay posibilidad de pacto y no hay posibilidad de pacto por una cosa, la derecha que llegó a la asamblea nacional está teledirigida, tiene un plan y lo ha venido diciendo y cumpliendo. ¿Cuál es su plan?, sacar a Nicolás Maduro de la Presidencia de la República en término de 6 meses. Ahora, ¿Cuál es la vía?, tienen varias, está la vía constitucional, que es el referéndum revocatorio, pero además ellos están explorando otras vías, no creo que esa sea la única. Cuando la mayoría de ésta asamblea desconoce, desacata un dictamen del Tribunal Supremo de Justicia y juramenta 3 diputados que tienen una medida cautelar que les impide ser juramentados, se pone al margen de la Constitución y de la ley. No lo hace por casualidad, eso lo hacen porque es un plan donde pretenden agudizar la contradicción para generar violencia en el país, una salida violenta, es lo que están perfilando en el país.

Alguien me decía ayer, pero si no tienen militares, como pueden dar un golpe militar; eso es verdad. Sin embargo, ellos han venido desarrollando no de ahora, desde hace rato, una fuerza paramilitar de relativa importancia, yo no sé qué dimensiones tienen, porque yo no soy de esos que llaman de inteligencia, pero quienes andamos en la calle y hacemos trabajos con el pueblo, la sentimos. Por supuesto, es un plan que no tiene nada que ver con el diálogo con el gobierno. Ellos lo que le están planteando al gobierno, es arrodíllate y si no te arrodillas en 6 meses te saco. Es un plan de golpe continuado, que es una estrategia que vienen desarrollando en los último 5 años, por lo menos del 2010 para acá y ahora han llegado a un nivel de desarrollo tal, que la salida, su salida, pareciera ser la violencia.

Además, hay una situación de dualidad de poder. En Venezuela el planteamiento leninista de dualidad de poder, se presentó de una manera sui generis como son las cosas en la revolución Bolivariana. Lo decía Luis Bilbao en estos días en un artículo que escribió: está un poder del Estado en mano de la contra revolución y el resto de los poderes en mano de la revolución, esa situación y tal como está la derecha agudizando la contradicción no se podrá sostener de manera indefinida.

LUIS BONILLA–MOLINA: Disculpa que te interrumpa Eduardo, Escarrá planteó la posibilidad de una especie de consenso desde lo militar, un consenso orientado o con activa participación de oficiales de alto rango para resolver ese conflicto de poderes ¿Qué piensas al respecto?

EDUARDO PIÑATE: Yo no creo que aquí pase eso. En muchos de estos casos en el mundo han surgido los militares como con una suerte de árbitro, pero el caso de Venezuela nuestro árbitro es el Consejo Nacional Electoral, en términos institucionales y el pueblo venezolano en términos reales.

Aquí nadie puede olvidarse, que es otra gran fortaleza, que ellos tienen el control de un poder del Estado, nosotros tenemos el Ejecutivo y los tres poderes restantes están apegados a la Constitución. Además 43% de los inscritos en el registro electoral permanente, que votaron el 6 de diciembre de 2016, más de 5 millones de venezolano votaron a favor de la revolución, por la continuidad de la revolución. Es un porcentaje importante que expresa ese sector que no cayó en el chantaje, que no se desmoralizó, que no cambió la patria por un rollo de papel sanitario, o por un kilo de harina precocida, que no cambiaron la independencia y la soberanía por ningún espejito de cambio. Esa es una fuerza importante, que está presente y comienza a movilizarse, como ya la vimos el 5 de enero, la vamos a ver el martes, la vamos a ver cuándo el presidente vaya a presentar su informe anual a la Asamblea Nacional, vamos a ver esa fuerza en la calle. De hecho la estamos viendo en todas partes ante la afrenta del Presidente adeco de la Asamblea Nacional a la memoria del Libertador Simón Bolívar y a la memoria del Comandante Supremo Hugo Chávez. Entonces, yo no creo, ni que los militares sean el árbitro, ni que ellos tengan ganas de arbitrar.

Las declaraciones que he visto del alto mando militar, del Ministro de la defensa y los comandantes del CEO (Comando Estratégico Operacional) han sido en otro sentido, afirmando el sentido democrático, el sentido pacífico del proceso y de la democracia bolivariana y en todo caso, el que genere la violencia va a encontrase con un pueblo armado y no armando.

LUIS BONILLA–MOLINA: Desde tu perspectiva, la derecha al agudizar las contradicciones procura generar un clima de violencia, en el cual las instituciones del estado se mantienen firmes incluyendo las Fuerzas Armadas. Entonces, ¿Ellos procurarían una intervención militar extranjera?

EDUARDO PIÑATE: Desde mi perspectiva, ese es un objetivo que ellos se han planteado y han venido buscando por distintas vías para justificarlo. Tienen tiempo en eso, incluso desde los años donde el comandante Hugo Chávez estaba físicamente al frente de la revolución. Sobre todo cuando esta revolución obtuvo aquellas victorias estratégicas del período 2002 – 2004 en adelante, con todo lo que de ella se derivó, incluyendo el carácter antiimperialista y socialista de la revolución bolivariana.

La intervención extranjera, es una posibilidad, nunca cerrada, lo que pasa es que nosotros hemos desarrollado una política de paz y de no caer en las provocaciones de ellos y de impedir lo que Chávez llamó, el desenfreno revolucionario. Esto hace que podamos contar con niveles de estabilidad y paz importantes, que han impedido en términos políticos, la intervención extranjera, amén de una amplia alianza en el mundo con gobiernos de todos los signos ideológicos, desde monarquías, hasta gobiernos marxistas- leninistas en el mundo que construyen una mirada multipolar.

Una intervención militar extranjera en Venezuela por norteamericanos u otras fuerzas de ocupación disfrazadas, tendría un costo político alto y metería a la región en una dinámica de violencia de la cual pudiéramos saber cuándo comenzamos, más no cuando terminamos; entonces ese camino tiene un costo muy grande. Aunque debo decir, que yo no tengo ninguna duda respecto a que los halcones de Washington y esa ultra derecha que gobierna en los Estados Unidos y en general los grandes monopolios mundiales, los grandes conglomerados transnacionales, están detrás de una salida de ese tipo, pero ello tendría un costo muy alto. Además, en nuestro continente si bien es cierto que ellos han obtenidos algunos éxitos electorales, la correlación de fuerzas comenzó a cambiar cuando Chávez llegó al gobierno y sigue favoreciendo las tendencias o las corrientes de la emancipación, de la liberación, del socialismo, de la independencia y de la soberanía. Yo creo que aquí el gran decisor va a ser el pueblo venezolano. La disputa nuestra en este momento está en resolver la contradicción en términos pacíficos, manteniendo la paz, el carácter democrático, protagónico y participativo, basado en el Poder Popular y con el pueblo. Si nos imponen la violencia, bueno como decía Chávez, esta es una revolución pacífica, pero no desarmada.

LUIS BONILLA–MOLINA: Eduardo, los jóvenes que votan hoy y que pueden ser convocados en los próximos meses, en los próximos comicios electorales a una consulta, tenían entre un año y algo así como 12 años cuando comenzó el proceso revolucionario, tu definiste que el socialismo sigue siendo la alternativa para desarrollar a Venezuela. ¿Qué le platearías tú a esa población joven para que apoyen a la idea socialista ante una eventual consulta electoral en los próximos tiempos?

EDUARDO PIÑATE: Lo primero que hay que decir y tenemos que tener conciencia de eso, si bien es cierto que nosotros tenemos un desarrollo importante en la fuerza de la revolución en la juventud venezolana, también es verdad que por lo menos en términos electorales en la medida que ha ido creciendo el padrón electoral, por el tema del crecimiento vegetativo, parte de la Juventud la han venido capitalizando ellos y eso implica que nuestro trabajo con la juventud ha tenido ineficiencias y tenemos que mejorarlo.

Ahora bien, ¿Qué le decimos a la juventud en este momento?, nosotros tenemos que plantearles la esperanza y el futuro. La única posibilidad que la juventud venezolana tenga los niveles de participación y de reivindicación de sus intereses históricos como juventud, la única garantía que tenga estabilidad en el futuro, es que aquí haya revolución socialista, no es por la vía de un retorno del neoliberalismo. Aquí en Venezuela un retroceso, una restauración del viejo régimen, no sería la restauración de viejo régimen puntofijista democrático participativo, esto tendría un carácter fascista. Pinochet sería un niño de pecho. La única forma que esa juventud tenga vida y tenga futuro, es con revolución y eso nosotros tenemos que evidenciarlo.

Efectivamente, esa juventud que iría a una consulta que ahorita tiene 18 años, tenía un año y los que tienen catorce o quince años, no habían nacido; esa gente nosotros tenemos que echarle el cuento y presentárselo. Por suerte, hoy en términos tecnológicos existen un millón de maneras de hacerlo, sólo tenemos que hacerlo y allí entra el tema del discurso y lo simbólico, lo atractivo, para esa juventud. En este sentido el marketing burgués, es experto, pero nosotros tenemos que crear una manera revolucionaria de hacer llegar ese mensaje a la juventud. Hay experiencias significativas que se hacen en una buena parte en el país. Personalmente conozco unas experiencia, locales y concretas aquí en Caracas en ese terreno y seguramente hay muchísimas más en otras partes, desde campesinos rap hasta múltiples planes.

LUIS BONILLA–MOLINA: Eduardo, entrando al tema educativo sin abandonar por ello el terreno político, cinco de las siete investigaciones más importantes en el mundo en el año 2015 estaban referidas al estudio del cerebro, es decir, cómo conocemos el cerebro, cómo se puede manejar, cómo se puede manipular, como objeto de estudio. Ello evidencia una tendencia de la investigación con fines de mercado por ganar la última frontera, la frontera del pensamiento. Nosotros tendríamos que ganar a esa juventud planteándole un desafío de futuro, tu hablabas muy bien, que hay que recordarle la memoria histórica, lo que es y lo que puede ser el neoliberalismo, pero también es importante plantearle cuál es el futuro, un futuro solidario, distinto, que sea muy humano desde sus propios referentes y significantes. Hay que construir también una política comunicacional que esté relacionada -como muy bien tú lo decías- con los rituales e imaginarios de los jóvenes de hoy.

Pero en materia educativa, quisiera conocer tu opinión acerca de un debate que se hace y que tiene que ver con la valoración académica desde el campo de la revolución. La marginación que se hizo a buena parte de la población respecto a su ingreso y permanencia en el sistema escolar durante décadas, afectó a los más pobres y humildes, que constituye a su vez un importante sector poblacional del campo revolucionario. La vieja académica, salvo honrosas y contadas excepciones, trabajaba para la legitimación del status quo de la dominación ello generó un discurso anti académico por parte de los sectores populares y revolucionarios. Ello se justificaba en el discurso del 99, en el año 2000, pero 17 años después de haber triunfado la revolución, con la matrícula universitaria que supera el 80%, con una población estudiantil de casi 12 millones entre todos los niveles, donde casi la mitad de la población está en aula, pareciera un sinsentido el discurso contra la academia. Otra cosa son los cuestionamientos al academicismo aislado de las necesidades y expectativas de la gente y centrado en logros para alimentar egos. Muchos plantean que es urgente una reivindicación del orgullo por estudiar, por ser profesional, porque la revolución como un todo ha construido en la práctica un modo de ver y construir en positivo lo académico, sin embargo esta realidad a veces no se corresponde con el discurso político, que niega lo académico, que le otorga el status de lógica burguesa. Algunos críticos de esta situación señalan que ello causa un efecto nocivo en algunos sectores de los jóvenes que sienten que su estudio no es reconocido. ¿Compartes esa opinión o tú crees que se debe seguir trabajando el discurso contra la academia?

EDUARDO PIÑATE: No, yo creo que debemos trabajar más bien el discurso de la pertinencia de lo académico con la realidad concreta. Nosotros en la izquierda, buena parte de la izquierda en los años 70, 80 y 90, somos tributarios e hijos del mayo francés y de toda la lucha de la reforma o de la renovación universitaria, la lucha de Córdoba, etc.

Fueron discursos contra aquella academia que no estaba en consonancia con los avances, con la posibilidad emancipatoria de la humanidad en el período posterior a la segunda guerra mundial. Eso lanzó a la juventud en todas partes del mundo, en este continente, desde las luchas estudiantiles, hasta la guerrilla, desde formas de luchas armadas hasta resistencias anti opresión de carácter pacífico. Nosotros somos tributarios de eso y venimos de allí, venimos de esa experiencia, aunque parte de esa experiencia no la vivimos directamente, porque por ejemplo cuando Caldera allanó la universidad, yo tenía 13 años y estaba en segundo año de bachillerato. En lo personal participé en esas manifestaciones como estudiante del Liceo Manuel Palacios Fajardo del 23 de enero, donde después di clase durante 20 años.

Ese discurso se correspondía con ese tema, es decir con las diversas formas de exclusión, pero efectivamente que lo que ha hecho la revolución bolivariana, es incorporar a toda aquella población excluida del sistema escolar. Yo creo que esa fue una de las grandes virtudes que tuvo Chávez, cuando planteaba los fines del Estado -así está plasmado en la Constitución- donde la Educación y el Trabajo son las herramientas e instrumentos para el logro de los fines del Estado.

Entonces, la educación, es un pilar central del proceso de generación de la nueva ciudadanía, de la nueva conciencia, de la nueva cultura, de la cultura revolucionaria, bolivariana, etc. Allí Chávez y la Constitución de 1999 le dieron un papel a la Escuela en sentido amplio reivindicando efectivamente lo académico. Chávez fue un hombre que respetaba mucho la academia, un hombre que venía de la fuerza armada, que reivindicaba mucho la academia, estudió, hizo postgrado en universidades, etc. Tenía un gran respeto por eso, sin absolutizarlo.

Nosotros tenemos ahora que esa academia, la escuela en general, tenga correspondencia con la realidad, tanto del punto de vista de lo que tenemos, en la realidad de hoy, como en perspectiva de la construcción de una sociedad más justa. Nuestro sistema educativo tiene que apuntar hacia allá, todo el tema de calidad, del currículo, de los programas, de todo el debate que se ha venido desarrollando en Venezuela en todo estos tiempos. Yo me acuerdo y es importante rescatar los contenidos de los Encuentros Nacionales de Educación, donde yo participé; en buena parte de ellos los debates que se dieron en las pedagogías reivindicaban el aprendizaje socialmente comprometido. Estas dinámicas están presentes en los congresos de pedagogías que se vienen desarrollando desde el año 90, allá en Cuba, en todas esas dinámicas, donde tú has estado más involucrado que yo, para solo citar algunas experiencias donde se cruzan compromiso social y academia.

Yo creo que debemos apuntar hacia allá, hacia la pertinencia de lo académico, no se trata de negar la academia en este momento. Ahora, hay academias de academias. El academicismo es otra cosa. Nosotros tenemos que buscar la manera de darle coherencia a lo que tenemos.

Nosotros tenemos una suerte de rebeliones educativas en algunos espacios, las llamadas universidades autónomas, por ejemplo, que con todo el aporte que han dado en materia de investigación, en materia científica, etc., pretenden quedarse estancados y no ver que tenemos otra realidad. Están haciendo como hizo Ramos Allup, que llega a la asamblea y prácticamente le quita la octava estrella al hemiciclo y monta el viejo escudo de la República, que ya fue superado. Es decir, es el retorno hasta en lo simbólico, sacó a Chávez, sacó a Bolívar, en fin, él quiere hacer su Republiquita allá adentro. Algunas de esas universidades son como eso y eso por supuesto tanto las tres cosas que dice que hace la universidad, que es docencia- investigación – extensión, están profundamente rezagadas en general, por supuesto que hay excepciones, con relación a lo que tenemos hoy y con lo que estamos haciendo.

En otro terreno, nosotros tenemos que revisar la educación que estamos impartiendo en función de ver dónde también tenemos algunas deficiencias, que nos permita insertarnos en la realidad concreta.

LUIS BONILLA–MOLINA: Eduardo, estamos en tiempo de las tres R al cuadrado, tú eres un militante comprometido, un pedagogo de toda la vida, si te pidiéramos tres ideas respecto a cosas que hay que mejorar en el sistema educativo, ¿Cuáles serían?

EDUARDO PIÑATE: En primer lugar, resolver el tema de la formación docente, creo que es fundamental que ataquemos el tema de la formación docente, aquí seguimos formando maestros y profesores en los institutos pedagógicos, en las universidades con los mismos viejos esquemas del pasado, allí la revolución creo que no ha llegado.

En segundo lugar, diría, avancemos en el tema de la pertinencia de los programas, pertinencia en el sentido de la realidad de un país y una región, en términos Latinoamericanos y Caribeños, que está en un proceso de transformación profunda, rápida, revolucionaria en general, que implica más allá que garantizar todo el tema del desarrollo científico, tecnológico, la fuerza de trabajo en función de todo eso. Garantizar la ciudadanía con la cultura política de la participación y el protagonismo, es decir, nosotros estamos haciendo una revolución socialista, debemos formar socialistas.

Un tercer aspecto tiene que ver con una debilidad que tenemos en este momento, por la insuficiencia de docentes especializados (química, física, matemática, biología, etc.) en el país.

Un cuarto elemento, que aún no hemos resuelto, es la articulación entre todo el sistema educativo. No es correcto que la educación universitaria ande por una parte y la educación básica y media por otra. Ese es un viejo problema, no lo creamos ahora, eso viene de toda la vida y tiene que ver con un tema central que es la planificación. Necesitamos un plan de la formación en Venezuela para los próximos 20 años.

LUIS BONILLA–MOLINA: Para finalizar Eduardo, tú en los últimos años te has dedicado al partido y al trabajo de diputado, hoy estás más concentrado en el partido, si te piden volver a tus raíces pedagógicas y trabajar en el campo del ejecutivo en materia de educación, ¿Estaría dispuesto a dar tu aporte en esa área?

EDUARDO PIÑATE: Si, yo soy un soldado – en términos de disciplina revolucionaria- no tengo ningún inconveniente. Yo estuve vinculado al sistema educativo hasta el año 2008 desde la perspectiva del movimiento sindical cuando era el presidente del Sindicato Nacional Fuerza Unitaria Magisterial (SINAFUM). A partir del 2008 cuando salgo del sindicato me incorporé a todo el trabajo de construcción del poder popular en la Alcaldía con Jorge Rodríguez, donde me tocó impulsar el proceso de la construcción de consejo comunales, las comunas, como Director de Promoción del Poder Popular en ese momento.

En el 2010 fui electo diputado y a partir de ese momento he estado en distintas tareas, como diputado, pero fundamentalmente -tú lo has dicho en el partido- vinculado a la construcción del poder popular, esa arista del tema nunca lo he dejado, y eso tiene un elemento pedagógico concreto bien importante. En el partido estoy dedicado a la tarea principal de formación, yo soy parte de la Comisión Nacional de Formación de la Vicepresidencia de Formación del Partido, nunca he estado desvinculado al hecho pedagógico, pero efectivamente si me proponen volver al ejecutivo en materia educativa, no hay ningún problema, yo voy.

LUIS BONILLA–MOLINA: Muchas gracias Eduardo.

EDUARDO PIÑATE: Gracias a ti Luis.

A continuación el video de la entrevista

Producción de la Otra Mirada: Luis Bonilla Molina
Equipo de producción y post producción digital: Dilanci May Sierra
Transcripción de esta entrevista: María Magdalena Saurraute.
Edición y corrección de estilo de esta entrevista: Luis Bonilla-Molina, María Magdalena Saurraute, y Marianicer Figueroa.

Comparte este contenido:

El vuelo inesperado del Maestro militante Luis Bigott

Hoy nos sorprendió con su vuelo, más aun cuando con su entusiasmo de maestro militante, nos había ofrecido acompañarnos ayer en un encuentro para conversar sobre los sueños y entre muchos de ellos, para conversar sobre Otras Voces en Educación. Pero no solo porque no pudo llegar a ese encuentro nos sorprende su partida, sino porque aun con la salud alertando el estado de su cuerpo físico, su alma y su corazón hacían que pies y manos llegaran a donde se había comprometido, como así lo hizo el año pasado cuando con gripe y fiebre encima, nos regaló su presencia en el Ier Congreso de Educación Comparada que realizamos en Maturín a mediados del mes de marzo.

Así era la militancia de Luis Bigott, a prueba de fuego, de su cuerpo y de sus malestares físicos, pero también a prueba de los males que en el ámbito académico colonial y político moderno, suelen adherirse viralmente a la razón y la emoción como forma de aplacar la conciencia crítica y los saberes y haceres por todo lo bueno y lo justo para todos y para todas

El tamaño de su firme compromiso con la pedagogía crítica, la educación popular, la emancipación del pensamiento y la transformación de la educación universitaria nuestramericana, lo demostró en su extensa trayectoria docente y como investigador, siendo Profesor de la Universidad Central de Venezuela y de la Universidad del Zulia, Director de la Escuela de Educación de la Universidad de los Andes, profesor invitado de Universidades extranjeras como la Complutense de Madrid, San Marcos de Lima, la Universidad de Santo Domingo, la Autónoma de Bogotá y la Universidad de Buenos Aires,  trayectoria que culminó como Vicerrector Académico de la Universidad Bolivariana de Venezuela, espacios en los que siempre demostró congruente y abiertamente su compromiso con la formación de hombres y mujeres que contribuyesen en la transformación de la realidad nacional y latinoamericana.

Pero el andar en las escuelas, en las universidades y entre los pupitres no fue suficiente, por eso nos dejó diversas publicaciones entre las que destacan “Temas de Historia de la educación Venezolana”, “Redes Socio-Culturales (Investigación y Participación Comunitaria)», «¿Qué es un educador intercultural?», «Investigación alternativa y educación popular en América Latina»;  y “Pedagogía de la Descolonización”, entre otros textos que sin duda alguna han influenciado y seguirán influenciando el campo de la educación, al regalarnos insistentemente en ellos, ideas y planteamientos sobre una educación igualitaria, inclusiva y promotora de un pensamiento y una praxis transformadora de la realidad.

Pero tampoco su labor como escritor le fue suficiente, por ello en su trayectoria de vida fue un activo defensor y promotor de la cultura latinoamericana y caribeña y en especial la de los pueblos originarios del sur, teniendo como importantes logros haber sido el Fundador y Primer Director de la Dirección Nacional de Artesanías del Consejo Nacional de Cultura (CONAC),  Presidente de la Fundación de Etnomusicologia y Folklore, Asesor de la Comisión Ministerial de Cultura de Haití y de los Ministerios de Educación y Cultura de Nicaragua, así como Fundador del Instituto Pedagógico Latinoamericano y Caribeño de la República de Cuba.

Pero tampoco eso le fue suficiente, el  maestro Luis vio necesario dar el salto de la academia a la política; y su interés por la integración latinoamericana le llevó a desempeñar importantes cargos en la gestión pública gubernamental como Diputado al Parlamento Andino, presidiendo desde ese espacio la Comisión de Política Exterior, la Comisión de Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología y la Comisión de Movimientos Sociales del Parlamento Andino.

Pero tampoco su andar en la política le fue suficiente, porque hoy tras su partida inesperada, quizás sin saberlo, nos deja un inmenso compromiso por la siembra y el riego de sus ideas sobre la educación como espacio emancipador para transformar realidades y tejer redes con las cuales echar andar  sociedades más justas e igualitarias.

Por eso, desde este lado, nunca serán suficientes las palabras de agradecimiento y de honra para el maestro Bigott. Toca entonces, como herederos y herederas  de lo que en vida regó desde que lo parió un gran caño del  Río Orínoco, asumir la tarea dada, tarea amorosa que nos deja como inigualable maestro revolucionario, investigador militante y agitador de todo lo bueno para la patria grande.

Comparte este contenido:

Entrevista Daniel Libreros: «Necesitamos un diálogo intergeneracional muy fuerte»

Entrevista a Daniel Libreros

16-05-2014/La Otra Mirada

Continuando con las entrevistas realizadas por Luis Bonilla (LB) en su programa «La otra Mirada» a propósito de la consulta internacional sobre la Calidad de la Educación realizada en Venezuela, durante el 2014, a continuación la reseña del encuentro con Daniel Libreros (DL), Académico de la Universidad Nacional de Colombia, además de un estudioso de las transformaciones de los sistemas educativos de la región y, de su país: Colombia. ¡Bienvenido Daniel a esta cita con el movimiento pedagógico venezolano!

daniel_librerosD.L. Gracias Luis por la invitación.

L.B. Para comenzar, queremos formularte un conjunto de preguntas en la orientación de conocer tu opinión sobre temas asociados a la consulta sobre la calidad de la educación. La primera de las interrogantes está referida al tema de la calidad, este es un tema sensible para la población de nuestros países. Nuestros sistemas educativos han sido profundamente golpeados en las últimas décadas por las políticas neoliberales. Los organismos internacionales, especialmente el Banco de Interamericano de Desarrollo y el Banco Mundial, han resemantizado lo que eran nuestras consignas, incluido el tema de la Calidad Educativa, esto lo han hecho para darle viabilidad a buena parte de la contra-reformas que afectan o golpean hoy a la educación como un derecho humano fundamental. Daniel: ¿Cuál es el estado del arte del debate la Calidad Educativa hoy en Colombia?

D.L. Mira, Colombia tiene una de las reformas institucionales educativas más avanzadas desde el punto de vista del neoliberalismo y, acá todo el concepto de calidad ya ha sido, reglamentado, normatizado e integrado en lo que puede conocerse como política pública desde una mirada neoliberal, que es básicamente asociarlo a eficiencia, a competitividad, a competencia, bajo el criterio de Banco Mundial, en la que las competencias son básicamente para formar para el trabajo, y que en nuestras regiones ese trabajo se trata de un trabajo precario, un trabajo asociado al atraso de la economía y al atraso de la población. Luego, creo que esa resemantización del término de la calidad obliga que desde la resistencia, lo utilicemos de una manera diferente y lo coloquemos en la defensa de la educación pública.

L.B. Daniel, sin embargo, se requiere un conjunto de cambios profundos en áreas como la formación docente. En esta materia ¿Cuál es tu opinión?, ¿Cuáles son los cambios fundamentales que no solo en tu país, no solo en Venezuela, sino en la región, se deben emprender en materia de formación docente?

D.L. Lo primero tiene que ver con el tema presupuestario, acá en Colombia hay un ajuste fiscal muy fuerte que pasa por el sector educativo y que hace que, a pesar que las necesidades de la población en materia educativa son cada vez mayores, porque cada vez más niños y niñas están accediendo al servicio educativo y cada vez más jóvenes están necesitando educación superior, a pesar de ello, las plantas de docentes se mantienen o se recortan, lo cual hace que los docentes tengan que enfrentar coberturas cada vez más grandes, con más estudiantes, lo que a su vez incide también en recortar el tiempo de preparación de clase. Ahí hay un punto que obliga, como lo ha dicho incluso recientemente UNESCO, a mejorar los presupuestos educativos, pero por otro lado creo que también tenemos la tarea de sacar la educación que es el centro neoliberal de un criterio absolutamente instrumental y competitivo, y recuperar la educación como historia, como pedagogía, como mirada global de la sociedad, como algo integrado no solo al tema del trabajo, sino una interpretación holística, cultural, amplia, creo que también es un debate de la resistencia.

L.B. Evidentemente, cuando hablamos de calidad de la educación, es obligatorio referirnos a la necesidad de repensar el diálogo intergeneracional. Hoy, la revolución científico, tecnológica y del conocimiento están tan aceleradas que podemos hablar de cambios y de ciclos de transformación en períodos de cada cuatro o seis años. Esto tiene profundas repercusiones en la docencia y por supuesto en diálogo intergeneracional. En ese sentido: ¿Cuál es tu opinión, cuáles son los desafíos de los docentes para permitir un reencuentro de generaciones, de los chamos, de los jóvenes, de los adolescentes de hoy que estudian en las escuelas y los docentes que fueron formados hace quince o veinte años con otros modos de pensar la educación?

D.L. Creo que efectivamente necesitamos un diálogo intergeneracional muy fuerte; creo que efectivamente necesitamos un docente que esté adecuándose permanentemente a los cambios científicos, a las modificaciones, a las nuevas formas de lenguaje, e incluso a las nuevas formas de interpretación de los jóvenes, sobre todo de signos, de símbolos culturales y de la forma como interpretan su realidad. Ello no significa que se quede exclusivamente en lo meramente técnico instrumental, acá por ejemplo, el neoliberalismo, los discursos neoliberales usan ese argumento pero para terminar diciendo que simplemente los docentes tiene que convertirse en unos mejores procesadores de información, y que utilicen mejor la tecnología, lo virtual, un lenguaje, fundamentalmente el inglés, y creo que eso es simplemente instrumental, eso no consulta la preocupación que tú me estas preguntando, es decir una mirada interpretadora que coloque al docente en las transformaciones sociales y científicas que se están produciendo en estos momentos.

L.B. A partir de un conjunto de videos de un profesor colombiano, cuyo nombre prefiero omitir en este momento, el Banco Interamericano de Desarrollo se viene planteando la necesidad, para ellos, o la posibilidad de invertir la pirámide de la enseñanza. Esta concepción del Banco Interamericano de Desarrollo consiste en aprovechar el uso de las nuevas tecnologías que están haciendo los jóvenes y los niños y las niñas para que aprendan en sus casas con el acompañamiento de los padres y que la escuela se convierta en el espacio donde se evalúa, eso implica un profundo cambio del rol del docente, cuidado sino el riesgo de la desaparición de la profesión docente, ¿Cuál es tu opinión al respecto?

D.L. Estoy totalmente en contra de ese concepto de la educación instrumental, e incluso, acá en el servicio nacional de aprendizaje que es donde se hace la formación técnica laboral,  ya se hacen cursos hasta por celular, lo cual significa una caricatura de una interpretación que pasa por la idea de que informar ya es educar y, abandona por completo la importancia de la pedagogía, la importancia del intercambio humano, de lo que va construyendo el docente en su ejercicio, de la interpretación del mundo y de la sociedad que solo se puede dar en el intercambio grupal y en las experiencias que se hacen personal y socialmente con los estudiantes.

Creo que ahí hay una política del Banco Mundial que lo que persigue es reducir el número de docentes bajo el argumento de que tan solo con la información, con la imagen, con el computador, con el internet, ya es suficiente en el mundo contemporáneo y que la pedagogía debe pasar a un plano secundario o ser relegada a un tercer plano. Esto también está asociado a un concepto de reducir los tiempos de formación en la escuela, entre menos tengamos tiempo de formación en la escuela, pues necesitamos menos docentes, eso justifica el recorte presupuestal, el recorte fiscal y deja la pedagogía de lado, es algo así como asimilar el tiempo empresarial al tiempo docente, lo cual no se articula con las necesidades de la educación ni de la pedagogía.

L.B. Entiendo por tu intervención que estas planteando la necesidad de recuperar la centralidad pedagógica, y allí coincidimos plenamente. Una de las tareas que han desarrollado los organismos internacionales, nuevamente, especialmente el Banco Mundial y el Banco Interamericano de Desarrollo es romper el criterio de totalidad del fenómeno pedagógico y concentrarnos en el estudio de modas. Pasamos de una moda del didactismo a la moda de la planeación escolar, luego, la moda de las evaluaciones y finalmente las diferentes modas del currículo: currículo por objetivos, currículo por contenidos, currículo globalizado, currículo por competencias. Todas estas iniciativas han logrado romper la unidad de la pedagogía como posibilidad científica de abordar el encuentro pedagógico. Desde tu universidad y desde tú propio ejercicio de docencia ¿Cómo ves la posibilidad de recuperar la centralidad pedagógica en cualquier proceso que trabaje la calidad educativa?
D.L. Primero, estoy de acuerdo en tu interpretación totalmente. En, segundo, creo que hay que crear nuevamente movimientos pedagógicos, movimientos de defensa de la pedagogía en su sentido integral, holístico, es decir, recuperar la historia de la pedagogía, recuperar las disciplinas asociadas a la pedagogía que te pueden dar una interpretación integral de la sociedad, sociología, filosofía, epistemología, es muy importante recuperar todas esas disciplinas y formar un docente que tenga esa visión, porque lo otro es condenarlo simplemente a ser una agente instrumental repetitivo y acrítico, y el docente no puede perder el espíritu crítico. Eso que quede bien.

Esta situación en el caso de Colombia, es absolutamente claro con el tema de los tratados de libre comercio, porque para que haya inversión extranjera en el marco de los tratados de libres comercios en el sector educativo pues ya tienen programados los softwares y lo único que hacen las transnacionales de la educación, los inversionistas, es repetir un software donde obviamente desaparece cualquier huella crítica o cualquier huella interpretativa diferente a lo que le interesa instrumentalmente en el negocio educativo: agregar como si fuera conocimiento cuando realmente, simplemente, son compromisos instrumentales en el marco de una política ya definida que impide, vuelvo a insistir en ello, la crítica del proceso.

L.B. Daniel, para finalizar este primer encuentro te voy a pedir que envíes un mensaje a los docentes venezolanos, a los maestros, las maestras, a los profesores, que de manera muy emotiva, muy comprometida, están participando hoy en la consulta por la Calidad Educativa que en Venezuela se realiza.

D.L. Bueno, un saludo a los docentes venezolanos, a todo lo que de alguna manera expresa el sistema educativo venezolano. Acá en Colombia y en la región en general estamos muy esperanzados en las evoluciones de lo que ocurre en Venezuela. Sabemos el barco enorme de dificultades que actualmente están viviendo, acá hay una ofensiva mediática de la derecha y de sectores del bipartidismo abiertamente en contra del proceso bolivariano, todos sabemos lo que significa el unidismo no solo en Colombia, sino para toda la región, luego, la forma como resistan los educadores, la forma como Venezuela logre salir de este impase que le han colocado a nivel internacional y la oposición interna es muy importante para nosotros, abriga muchas esperanzas, da la posibilidad de que la región entre en un camino de esperanza, y por consiguiente acá desde Colombia les damos un gran abrazo, un abrazo fraterno y a la espera de que podamos seguir unificando esfuerzos cada vez de manera más fuerte.

L.B. Gracias Daniel por este primer encuentro, por darnos a conocer de manera franca tu opinión sobre la transformación educativa, sobre los desafíos que tienen nuestros sistemas educativos en la región para garantizar la educación como un derecho humano fundamental que incluya a todos con la educación de calidad.

D.L. Gracias Lucho y abrazos a todos por allá.

L.B. Gracias Daniel.

Para ver y oir la entrevista:

Producción de la Otra Mirada: Luis Bonilla Molina

Equipo de producción y post producción digital: Dilanci May Sierra

Transcripción de la entrevista: Rose Hernández y Jesús Conteras

Edición: Rose Hernández y Jesús Conteras

Comparte este contenido:

Entrevista a Hans-Adam II De Liechtenstein: Un estado proveedor de servicios y comunidades con derecho a la secesión

hans-adamii-e1353951210584Liechtenstein / Febrero 2016/ Autor y Fuente: Revista RS, Julio 2015

El Estado tiene que reinventarse; no debe preocuparse en lo que el
ciudadano puede hacer por él, sino en lo que aquel puede hacer por el
ciudadano: es uno de los planteamientos de S.A.S. el Príncipe Hans-Adam II
de Liechtenstein en su propuesta sobre el Estado del futuro.

¿Cuál es el rol del Estado en un mundo globalizado?

El modelo tradicional de Estado-nación, el cual ha asumido incontables
tareas, enfrenta uno de sus más enormes retos en el mundo globalizado. El
Estado tiene básicamente que reinventarse; ya no debería preocuparse en lo
que el ciudadano puede hacer por él, sino en lo que aquel puede hacer por
el ciudadano mejor que cualquier otra organización, ya sea una empresa
privada, una comunidad local u otro ente global o regional. Tendrá que
convertirse en un proveedor de servicios (a modo de una compañía de
servicios), que esté en pacífica competencia con otros Estados y
organizaciones.

¿Cómo será el Estado del futuro?

Tan solo podemos especular cómo se verá el Estado del futuro. Un
Estado-proveedor de servicios, que le sirva a las personas, tiene que ser,
en mi opinión, democrático, y tendrá varias tareas, como la política
exterior, la cual permanecería. Otra es el imperio de la ley (la más
importante obligación del Estado, y tal vez las más desafiante), sin la
cual los criminales regirían y el Estado colapsaría tarde o temprano.

La tercera tarea es la educación. En un mundo globalizado, con una fuerte
competencia, no es posible ni poner en marcha una compañía ni un Estado con
personas analfabetas. Por lo tanto, un sistema educativo, de primera clase,
al alcance de toda la población, es esencial. Dicho esto, no es la tarea
del Estado manejar el sistema educativo desde preescolar hasta la
universidad, lo cual podría delegar al sector privado o a las comunidades
locales. Asimismo, debería financiar a los padres de los niños o a los
estudiantes a través de un sistema de vales, para que así puedan escoger
cuáles colegios o universidades son las mejores para ellos. Sin embargo,
todavía sería labor del Estado supervisar los colegios y universidades
donde esos bonos pueden ser canjeados.

En un mundo pacífico, donde los Estados se han convertido en compañías de
servicio, que sirven a las personas, ya no habrá necesidad de un
presupuesto de defensa.

Y el que ofrece un mal servicio, debido a impuestos elevados, perderá sus
clientes, en caso de que se haya introducido el derecho a la
autodeterminación en un nivel comunitario. En Liechtenstein, por ejemplo,
cada una de nuestras once comunidades o pueblos tiene el derecho a dejar su
principado, si una mayoría de votantes en la comunidad lo decide así. Por
tanto, el principado está obligado a ofrecer un buen servicio a un precio
razonable y asequible, de otro modo las comunidades podrían unirse a otro
Estado o volverse independientes.

Por otro lado, si la tarea del Estado es reducida a la política exterior,
al imperio de la ley y al financiamiento del sistema educativo, requerirá
menos ingresos. Todas las demás tareas serían delegadas ya sea al sector
privado o a las comunidades locales. Estas deberían tener la autoridad de
elevar sus impuestos directos, ya sea a los individuos, las compañías,
bienes raíces, etc., ya que ellos tendrán responsabilidad sobre asuntos
como el servicio social o el transporte local. El Estado se financiaría a
sí mismo a través de los impuestos indirectos, como el Impuesto al Valor
Agregado o impuestos de importación y debería apuntar a producir un
excedente para que este pueda ser distribuido a las comunidades locales, de
acuerdo con el número de sus habitantes.

¿De qué manera puede el mundo llegar a ese Estado?

Creo que será un proceso muy largo, un proceso que durará varias
generaciones. Veremos guerras civiles, cuando un Estado colapse, y guerras
de agresión, cuando un Estado crezca. Yo simplemente tuve la capacidad de
introducir la autodeterminación para nuestras once comunidades a través de
la democracia directa. En democracias indirectas o representativas los
poderosos intereses políticos y financieros están en contra de la
descentralización política, la democracia directa y el derecho a la
autodeterminación a nivel local.

En una democracia, el primer paso es introducir la democracia directa en
un Estado, a nivel local y de manera integral, como lo es el caso de Suiza
y Liechtenstein. El siguiente paso es instaurar el derecho a la
autodeterminación a nivel local, como hemos hecho en Liechtenstein. Solo
entonces será posible convertir al Estado en un proveedor de servicio o una
compañía de servicios, como se mencionó anteriormente, que sirva a la gente
y no que la gente le sirva a él.

Cuando escribí mi libro El Estado en el tercer milenio, tenía también en
mente aquellos Estados democráticos como EEUU o algunos europeos, que han
intervenido militarmente una y otra vez, en los últimos 200 años, en
supuestos Estados fallidos en todo el mundo, con el fin de establecer
Estados democráticos, junto con el imperio de la ley y una economía de
mercado. Probablemente alrededor del 90% de esas intervenciones fueron un
fracaso. Se llevaron a cabo intentos fútiles para instaurar democracias,
impuestas desde arriba, con poca consideración por el imperio de la ley, un
sistema educativo integral e impuestos eficientes.

Si se mira la evolución de los Estados en los diferentes continentes, es
posible darse cuenta de que es un enorme reto erigir un Estado democrático
moderno, con el imperio de la ley y una economía que pueda competir de
manera exitosa en los mercados mundiales. Según mi experiencia, se ha
realizado poca investigación en esta área, razón por la cual intenté con mi
libro al menos comenzar la discusión.

¿Cómo debería ser la relación entre el Estado y el sector privado para
construir un mundo más equitativo?

Es el Estado el que tiene la responsabilidad de construir un mundo más
equitativo, estableciendo las reglas dentro de las cuales el sector privado
puede actuar. El primero tiene que asegurarse de que esas reglas sean
seguidas y cumplidas, con ayuda, cuando sea necesario, de la policía, la
fiscalía y las cortes; sin embargo, debe asegurarse también de que ni el
Gobierno, la legislación, la policía, la fiscalía ni las cortes sean
corruptos. Una administración del Estado, pequeña y transparente, en
diferentes niveles, junto con leyes simples, que sean fácilmente
comprensibles, es de mucha ayuda en este aspecto.

Por otro lado, si la responsabilidad sobre los servicios sociales es
delegada a las comunidades locales, se desarrollarían amplias áreas de
actividades para el sector privado. De hecho, hoy notamos que este lleva a
cabo muchas iniciativas sociales, ya sea desde las compañías o desde los
individuos. Colegios, universidades, hospitales, museos, servicios de
seguridad social, etc., pueden ser financiados por el sector privado y
funcionar de manera eficiente. Las comunidades locales con autoridad sobre
los impuestos directos pueden apoyar estas acciones por medio de la
deducción de impuestos.

El sector privado solo puede contribuir a construir un mundo más equitativo
si el Estado tiene la voluntad de darle al sector privado un rol en esa
tarea. La mayoría de las personas piensa que el papel del Estado ha sido
buscar la equidad del mundo, cuando a lo largo de los siglos ha sido en
realidad el mayor obstáculo en los esfuerzos de alcanzar esa meta.

¿Cuál es rol del sector privado en el Estado del futuro?

Si el Estado del futuro se concentra en su tarea principal, el papel del
sector privado mejorará enormemente.

El principio global de que no es posible reducir la pobreza y la inequidad
sin un compromiso poderoso con el imperio de la ley y con la lucha contra
la corrupción aplica en cualquier parte del mundo, independientemente del
nivel de los estados o del PIB.

El imperio de la ley y la reducción de la corrupción infunden una sensación
de justicia en la sociedad, la cual a su vez provee un poderoso estimulante
e incentivo a los ciudadanos, que al mismo tiempo se esfuerzan por
controlar y mejorar su bienestar financiero.

Un sistema educativo bien administrado, que otorgue educación de alta
calidad a todos los ciudadanos es una condición necesaria, del mismo modo
que un Estado comprometido con el imperio de la ley otorga un justo y
equitativo acceso a la prosperidad.

Con respecto a la política económica, nuestra experiencia en Liechtenstein
ha demostrado que impuestos bajos, así como leyes tributarias simples y
fácilmente ejecutables, atraen inversiones, mientras que los impuestos
elevados y las leyes tributarias complejas frenan las inversiones.

Comentario: Esta entrevista es publicada por los Austroanarquistas por
lo interesante que les resulta que un gobernante hereditario de un
territorio pequeño -quien además no vive de los contribuyentes sino de sus
empresas particulares-  postule él mismo dos importantes ideas: gobiernos en competencia por
usuarios y derecho a la secesión comunitaria, con clara afinidad a la
sociedad de ley privada que se plantean los anarquista bajo la concepción
de que el Estado tiende a vender tras la búsqueda de la equidad y hace todo
lo contrario, este movimiento plantea que los gobernantes no son otra cosa
que empresarios monopolistas que se aprovechan de las personas haciendo
creer que los intereses superiores son la patria

La experiencia de el Príncipe Hans-Adam II, como soberano del Principado
de Liechtenstein, lo ha llevado a reflexionar sobre la condición actual del
Estado y a proponer un nuevo modelo, el cual recoge en su libro *Estado en
el tercer milenio, publicado en el 2009. Allí plantea las características que debe tener el
Estado del futuro y cómo llegar a él. En entrevista con la Revista RS, S.A.S. explica estos
principios, y de qué manera se relacionan con la educación y el sector
privado.

Fuente de la Noticia: http://austroanarquistas.com/?p=8373

Fuente de la Foto: http://austroanarquistas.com/?p=8373

Editora: Elisabel Rubiano, Centro Internacional Miranda (Venezuela)
Doctora en Ciencias Sociales. Mención: Estudios Culturales. Magister en
Educación. Mención: Lectura y escritura. Estudios de maestría en Literatura
Venezolana. Licenciada en Educación Especial. Mención: Dificultades de
Aprendizaje. Fue docente y gerente del Ministerio del Poder Popular para la
Educación. Es Profesora titular de la Facultad Ciencias de la Educación.
Departamento de Pedagogía Infantil y Diversidad. Profesora de maestría y
doctorado.

 

Comparte este contenido:

Entrevista: Alberto Croce – La calidad de la Educación

A comienzos de este año 2014 el Presidente de Venezuela, Nicolás Maduro convocó a un debate nacional sobre la Calidad de la Educación. Este es el debate más importante que se haya realizado sobre la educación venezolana en los últimos veinte años. Por ello, con el auspicio del equipo nacional de la Consulta por la Calidad Educativa que coordina la Viceministra Soraya El Achkar, Aporrea TV, la Sociedad Venezolana de Educación Comparada, el Centro Internacional Miranda, La Otra Mirada y el Centro Nacional de Investigaciones Educativas, el profesor Luis Bonilla Molina ha iniciado un conjunto de entrevistas a 100 de los más destacados académicos, investigadores y luchadores sociales que en todo el planeta defienden la educación como un derecho humano fundamental.

Voces, conciencias y opiniones desde todos los lugares del mundo nos dan a conocer su opinión sobre la CALIDAD DE LA EDUCACIÓN. Estas entrevistas se publicarán con una periodicidad diaria en la perspectiva de alimentar los debates que los maestros, maestras, profesores y autoridades de los Ministerios de Educación desarrollan sobre este particular. (más…)

Comparte este contenido:
Page 455 of 456
1 453 454 455 456