Page 2 of 6
1 2 3 4 6

Las lecciones de Estonia, el país que revolucionó la escuela pública y se convirtió en el líder de Occidente en el ranking de educación

Estonia / 21 de octubre de 2018 / Autor: Edison Veiga / Fuente: BBC Mundo

Sólo por detrás de Singapur y Japón.

En la última edición del Programa Internacional de Evaluación de Estudiantes (más conocido por sus siglas, Pisa), una prueba trienal realizada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Estonia obtuvo el tercer puesto.

Eso significa que la pequeña república bañada por el mar Báltico tiene la mejor educación de Europa o, incluso, la mejor de Occidente.

La ministra de Educación e Investigación del país, Mailis Reps, le contó a BBC News Brasil que «el éxito de la educación en Estonia se basa en tres pilares»:

  • La educación es valorada por la sociedad
  • El acceso es universal y gratuito
  • Hay amplia autonomía (de profesores y escuelas)

«Los estonios realmente creen que la educación abre una amplia gama de posibilidades», subrayó la ministra.

En Estonia la educación es gratuita e inclusiva en todos los niveles, explicó Reps, lo que significa que todos tienen las mismas posibilidades de inserción.

«También ofrecemos acceso igualitario a varios servicios de apoyo, según las necesidades, como comidas gratuitas en la escuela, suministro de materiales didácticos, servicios de asesoramiento, además de subsidios en transporte y, a partir de la enseñanza secundaria, alojamiento».

La ministra de Educación e Investigación de Estonia, Mailis Reps.Derechos de autor de la imagenMINISTERIO DE EDUCACIÓN DE ESTONIA
Image captionLa ministra de Educación e Investigación de Estonia, Mailis Reps.

Amor por las letras e inversión

Durante siglos, el pueblo estonio fue dominado por otras naciones, principalmente Suecia y Rusia. El país obtuvo su autonomía apenas en 1917.

De 1940 a 1991 se convirtió en un Estado miembro de la Unión de las Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).

Por este motivo,Estonia es un joven país de solo 27 años. Pero hay algo que nunca cambió en la historia estonia: el aprecio de la población por las letras y la cultura.

Un ejemplo de ello son los registros históricos de hace 150 años que muestran que ya en esa época el índice de alfabetización de la población alcanzaba el 94%.

Cuando el país se modernizó e independizó, el gobierno decidió priorizar las inversiones en educación. Actualmente el Estado invierte el 6% de su Producto Interno Bruto (PIB) en la enseñanza.

En la práctica, significa que invierte unos US$7.400 por alumno al año en la enseñanza básica.

Si bien es una cifra alta comparada, por ejemplo, con lo que invierten los países latinoamericanos, contrastada con los otros países europeos no impresiona. La media de la Unión Europea (UE) —bloque que incluye a Estonia desde 2004—, es de unos US$10.800 por alumno al año.

Profesores valorados

Tal vez la respuesta a la eficiencia estonia, por lo tanto, esté en una mezcla de buenas inversiones y eficiencia en el uso de ese dinero. «Nos esforzamos por la excelencia en la educación porque creemos que cada persona debe tener la oportunidad de desarrollar y usar su mayor potencial», dijo la ministra.

Un profesor dando clases en Estonia.Derechos de autor de la imagenMINISTERIO DE EDUCACIÓN DE ESTONIA
Image captionEn Estonia los profesores tuvieron un incremento de ingresos del 80% en la última década. Hoy, el salario base de los docentes es de 1.150 euros (US$1330).

«La educación siempre ha sido una prioridad para las inversiones, ya sea los salarios de profesores, la red de escuelas o la infraestructura digital», resaltó Reps.

«El aumento salarial de los profesores estonios también se destaca a nivel internacional», señaló. En la última década, Estonia incrementó los ingresos docentes en un 80%.

Hoy el salario base de los docentes es de 1.150 euros (US$1330). «El año que viene el piso de la categoría será de 1.250 euros, y el promedio será de 1.500 euros», afirmó la ministra.

«Considerando el estándar general de vida, la educación es un área en el que se invierte un porcentaje considerable del presupuesto«.

«La clave está en el acuerdo con la sociedad. Todos deben entender la necesidad de la educación, solo así es posible obtener resultados», aseguró.

Autonomía y libertad en el aula

Las directrices de la enseñanza están en el currículo nacional. Pero cómo aplicarlas queda, en gran parte, a criterio de cada escuela.

«El currículo determina los resultados generales. La manera de alcanzarlos es elegida por los profesores», dice la ministra.

Además el currículo se actualiza constantemente.

Niños estonios en un aula.Derechos de autor de la imagenMINISTERIO DE EDUCACIÓN DE ESTONIA
Image captionLos docentes estonios son valorados por la sociedad, tienen buenos sueldos y autonomía para decidir cómo dar su clase.

«En Estonia, las escuelas y los profesores disfrutan de un alto grado de autonomía en la toma de decisiones en todos los aspectos del aprendizaje y la enseñanza», completa.

Esta descentralización se volvió norma tras la disolución de la Unión Soviética. Fue cuando el gobierno decidió dar libertad a las escuelas, exigiendo de ellas, por otro lado, la responsabilidad en cuanto a las directrices.

En general, las materias se enseñan de forma integrada, es decir, sin la división clásica entre las disciplinas. Las competencias más valoradas son «aprender a aprender», ética, emprendimiento y educación digital.

Todos los profesores deben tener maestrías en sus áreas de actuación.

Durante el período escolar los alumnos deben aprender idiomas y literatura estonios, primera y segunda lengua extranjera, matemáticas, biología, geografía, física, química, humanidades, historia, civismo, música, arte, artesanía, tecnología y educación física.

Pero también son comunes las clases de historia de las religiones, diseño y economía.

En el contraturno —período del día en que los alumnos no tienen clases— todas las escuelas ofrecen clases de deporte, música, artes y talleres de tecnologías.

Es cuando también se solucionan los problemas individuales de los alumnos con bajo rendimiento. En el sistema educativo estonio, buenos y malos alumnos no están separados en clases diferentes.

Alumnas estonias.Derechos de autor de la imagenMINISTERIO DE EDUCACIÓN DE ESTONIA
Image captionLos buenos y los malos alumnos no están separados en diferentes salas. Quienes tienen dificultades reciben asistencia después del horario de clase.

Pero aquellos con más dificultad reciben ayuda, fuera del horario de las clases, de profesores particulares, psicólogos y psicopedagogos, según la necesidad.

Éxito

Los buenos resultados se ven no solo en el lugar obtenido en el ranking Pisa, sino también analizando los índices de alumnos en el nivel más bajo de aprendizaje.

Solo el 8% de los jóvenes estonios de 15 años —la edad de los evaluados por Pisa— están en el nivel más bajo (por ejemplo, tienen dificultades para relacionar entre sí diferentes partes de un mismo texto).

La media de los países de la UE en esta categoría es del 15%.

«Claro que nos sentimos orgullosos de nuestras conquistas, de nuestra evaluación en Pisa», comentó Reps. «Pero el objetivo es la educación y no la puntuación en pruebas«.

Los candidatos a directores de escuelas son entrevistados por un consejo formado por padres, profesores y representantes del gobierno municipal. A la hora de contratar a un profesor, la responsabilidad le corresponde al director de la escuela.

¿Sirve para otros países?

Replicar un modelo de un país a otro, en opinión de la ministra estonia, no es algo tan factible.

«Cada país es diferente y no existe una receta o un modelo secreto que pueda ser usado solo copiando todo», señaló.

Un aula en Finlandia.
Image captionEstonia comparte sus prácticas educativas con Finlandia, otro país que es elogiado por sus niveles educativos.

Las salvedades son obvias: discrepancias en el tamaño de la población, problemas históricos aún no resueltos o incluso diferencias culturales.

«El modelo de Estonia fue formulado considerando a un país pequeño», destacó Reps.

Sin embargo, la funcionaria reconoció la importancia de formar alianzas entre naciones. En el caso de Estonia, con la igualmente exitosa Finlandia, que actualmente ocupa el quinto lugar en el ranking Pisa.

«Finlandia es nuestro principal socio cuando tratamos de mejorar nuestras prácticas educativas, siempre hay algo que aprender de los vecinos», subrayó.

«En cuanto a la formulación de políticas públicas en el campo de la educación estamos siempre abiertos a cambios y la innovación, pero al mismo tiempo valoramos y preservamos enfoques tradicionales que han funcionado bien», dijo la ministra.

«El futuro seguramente seguirá trayendo nuevos desafíos, principalmente con el desarrollo de nuevas tecnologías. Creemos que necesitamos aprender unos con otros y enfrentar los desafíos juntos», concluyó.

Fuente de la Noticia:

https://www.bbc.com/mundo/noticias-45845704

ove/mahv

Comparte este contenido:

Estonia: El país que revolucionó la escuela pública y se convirtió en el líder de Occidente en el ranking de educación

Europa/Estonia/18 Octubre 2018/Fuente: Semana

La pequeña república báltica es un gigante en términos de rendimiento en la prueba internacional de educación Pisa, donde obtuvo el mejor resultado de Europa. Te contamos cómo lo logró.

Sólo por detrás de Singapur y Japón.

En la última edición del Programa Internacional de Evaluación de Estudiantes (más conocido por sus siglas, Pisa), una prueba trienal realizada por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), Estonia obtuvo el tercer puesto.

Eso significa que la pequeña república bañada por el mar Bálticotiene la mejor educación de Europa o, incluso, la mejor de Occidente.

La ministra de Educación e Investigación del país, Mailis Reps, le contó a BBC News Brasil que «el éxito de la educación en Estonia se basa en tres pilares»:

  • La educación es valorada por la sociedad
  • El acceso es universal y gratuito
  • Hay amplia autonomía (de profesores y escuelas)

«Los estonios realmente creen que la educación abre una amplia gama de posibilidades», subrayó la ministra.

En Estonia la educación es gratuita e inclusiva en todos los niveles, explicó Reps, lo que significa que todos tienen las mismas posibilidades de inserción.

«También ofrecemos acceso igualitario a varios servicios de apoyo, según las necesidades, como comidas gratuitas en la escuela, suministro de materiales didácticos, servicios de asesoramiento, además de subsidios en transporte y, a partir de la enseñanza secundaria, alojamiento».

Amor por las letras e inversión

Durante siglos, el pueblo estonio fue dominado por otras naciones, principalmente Suecia y Rusia. El país obtuvo su autonomía apenas en 1917.

De 1940 a 1991 se convirtió en un Estado miembro de la Unión de las Repúblicas Socialistas Soviéticas (URSS).

Por este motivo, Estonia es un joven país de solo 27 años. Pero hay algo que nunca cambió en la historia estonia: el aprecio de la población por las letras y la cultura.

Un ejemplo de ello son los registros históricos de hace 150 años que muestran que ya en esa época el índice de alfabetización de la población alcanzaba el 94%.

Cuando el país se modernizó e independizó, el gobierno decidió priorizar las inversiones en educación. Actualmente el Estado invierte el 6% de su Producto Interno Bruto (PIB) en la enseñanza.

En la práctica, significa que invierte unos US$7.400 por alumno al año en la enseñanza básica.

Si bien es una cifra alta comparada, por ejemplo, con lo que invierten los países latinoamericanos, contrastada con los otros países europeos no impresiona. La media de la Unión Europea (UE) —bloque que incluye a Estonia desde 2004—, es de unos US$10.800 por alumno al año.

Profesores valorados

Tal vez la respuesta a la eficiencia estonia, por lo tanto, esté en una mezcla de buenas inversiones y eficiencia en el uso de ese dinero. «Nos esforzamos por la excelencia en la educación porque creemos que cada persona debe tener la oportunidad de desarrollar y usar su mayor potencial», dijo la ministra.

«La educación siempre ha sido una prioridad para las inversiones, ya sea los salarios de profesores, la red de escuelas o la infraestructura digital», resaltó Reps.

«El aumento salarial de los profesores estonios también se destaca a nivel internacional», señaló. En la última década, Estonia incrementó los ingresos docentes en un 80%.

Hoy el salario base de los docentes es de 1.150 euros (US$1330). «El año que viene el piso de la categoría será de 1.250 euros, y el promedio será de 1.500 euros», afirmó la ministra.

«Considerando el estándar general de vida, la educación es un área en el que se invierte un porcentaje considerable del presupuesto«.

«La clave está en el acuerdo con la sociedad. Todos deben entender la necesidad de la educación, solo así es posible obtener resultados», aseguró.

Autonomía y libertad en el aula

Las directrices de la enseñanza están en el currículo nacional. Pero cómo aplicarlas queda, en gran parte, a criterio de cada escuela.

«El currículo determina los resultados generales. La manera de alcanzarlos es elegida por los profesores», dice la ministra.

Además el currículo se actualiza constantemente.

«En Estonia, las escuelas y los profesores disfrutan de un alto grado de autonomía en la toma de decisiones en todos los aspectos del aprendizaje y la enseñanza», completa.

Esta descentralización se volvió norma tras la disolución de la Unión Soviética. Fue cuando el gobierno decidió dar libertad a las escuelas, exigiendo de ellas, por otro lado, la responsabilidad en cuanto a las directrices.

En general, las materias se enseñan de forma integrada, es decir, sin la división clásica entre las disciplinas. Las competencias más valoradas son «aprender a aprender», ética, emprendimiento y educación digital.

Todos los profesores deben tener maestrías en sus áreas de actuación.

Durante el período escolar los alumnos deben aprender idiomas y literatura estonios, primera y segunda lengua extranjera, matemáticas, biología, geografía, física, química, humanidades, historia, civismo, música, arte, artesanía, tecnología y educación física.

Pero también son comunes las clases de historia de las religiones, diseño y economía.

En el contraturno —período del día en que los alumnos no tienen clases— todas las escuelas ofrecen clases de deporte, música, artes y talleres de tecnologías.

Es cuando también se solucionan los problemas individuales de los alumnos con bajo rendimiento. En el sistema educativo estonio, buenos y malos alumnos no están separados en clases diferentes.

Pero aquellos con más dificultad reciben ayuda, fuera del horario de las clases, de profesores particulares, psicólogos y psicopedagogos, según la necesidad.

Éxito

Los buenos resultados se ven no solo en el lugar obtenido en el ranking Pisa, sino también analizando los índices de alumnos en el nivel más bajo de aprendizaje.

Solo el 8% de los jóvenes estonios de 15 años —la edad de los evaluados por Pisa— están en el nivel más bajo (por ejemplo, tienen dificultades para relacionar entre sí diferentes partes de un mismo texto).

La media de los países de la UE en esta categoría es del 15%.

«Claro que nos sentimos orgullosos de nuestras conquistas, de nuestra evaluación en Pisa», comentó Reps. «Pero el objetivo es la educación y no la puntuación en pruebas«.

Los candidatos a directores de escuelas son entrevistados por un consejo formado por padres, profesores y representantes del gobierno municipal. A la hora de contratar a un profesor, la responsabilidad le corresponde al director de la escuela.

¿Sirve para otros países?

Replicar un modelo de un país a otro, en opinión de la ministra estonia, no es algo tan factible.

«Cada país es diferente y no existe una receta o un modelo secreto que pueda ser usado solo copiando todo», señaló.

Las salvedades son obvias: discrepancias en el tamaño de la población, problemas históricos aún no resueltos o incluso diferencias culturales.

«El modelo de Estonia fue formulado considerando a un país pequeño», destacó Reps.

Sin embargo, la funcionaria reconoció la importancia de formar alianzas entre naciones. En el caso de Estonia, con la igualmente exitosa Finlandia, que actualmente ocupa el quinto lugar en el ranking Pisa.

«Finlandia es nuestro principal socio cuando tratamos de mejorar nuestras prácticas educativas, siempre hay algo que aprender de los vecinos», subrayó.

«En cuanto a la formulación de políticas públicas en el campo de la educación estamos siempre abiertos a cambios y la innovación, pero al mismo tiempo valoramos y preservamos enfoques tradicionales que han funcionado bien», dijo la ministra.

«El futuro seguramente seguirá trayendo nuevos desafíos, principalmente con el desarrollo de nuevas tecnologías. Creemos que necesitamos aprender unos con otros y enfrentar los desafíos juntos», concluyó.

Fuente: https://www.semana.com/educacion/articulo/las-lecciones-de-estonia-el-pais-que-revoluciono-la-escuela-publica-y-se-convirtio-en-el-lider-de-occidente-en-el-ranking-de-educacion/587004

Comparte este contenido:

Libro Gigantes de la educación: Lo que no dicen los ‘rankings’ educativos

Redacción: El País

El libro ‘Gigantes de la Educación’ recorre el mundo en busca de las historias personales de maestros y escuelas que no se reflejan en los exámenes ni en los informes

Una maestra que daba clases a escondidas a las niñas en Kabul, durante el período talibán. El profesor de una hagwon (academia extraescolar) surcoreana al que los padres exigen más deberes. Robótica en Estonia. Los estudiantes que acabaron con las escuelas segregadas en Estados Unidos. Poesía con el móvil en el Bronx. Violines en Caracas. Boxeo en Río de Janeiro. Monopatines en Adís Abeba. Herramientas diversas para sacar a los niños de la calle. Y del sofá. Sus historias no aparecen en ningún ranking educativo.

El libro Gigantes de la educación. Lo que no dicen los rankings (Fundación Telefónica, 2017) nació con el objetivo de poner rostro, nombre y contexto a las cifras sobre educación internacional. Recoge reportajes y entrevistas sobre educación en el terreno a profesores, padres, alumnos, académicos y políticos, en contextos tan distintos como: Cuba, Corea del Sur, Hong Kong, Singapur, Afganistán, Venezuela, Brasil, EE UU, Estonia o Etiopía, junto a entrevistas a distancia o en España a expertos de otros sistemas enfoques de enseñanza como el de Ontario en Canadá, Reggio Emilia en Italia y la aclamada Finlandia. El prólogo lo escribe el educador británico Richard Gerver, que bajo el título Al final, todo trata de personas, lanza un mensaje a los fanáticos de las evaluaciones: “Los cerdos no engordan por pesarlos”. Estos son algunos de esos rostros, nombres y contextos… que hay detrás de las cifras.

Gigantes asiáticos: la herencia del Examen Civil

Siguiendo la pista de las evaluaciones internacionales, uno de los primeros viajes de Gigantes de la Educación fue a tres gigantes asiáticos: Corea del Sur, Hong Kong y Singapur. Desde que se publicara el primer Informe PISA (el Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes de la OCDE que desde 2000 evalúa trienalmente a los estudiantes de 15 años en Matemáticas, Ciencias y Lectura) gobiernos y medios miran al ranking como a la clasificación de la Liga de Fútbol. Y en la quiniela, los asiáticos ganan por goleada. Siete de los diez mejores sistemas de las últimas evaluaciones PISA (2012 y 2015) fueron asiáticos. Singapur (1º), Japón (2º), Taiwán (4º), Macao (6º), Vietnam (8º), Hong Kong (9) y las cuatro provincias que participaron de China —Pekín, Shanghái, Jiangsu, Guangdong— (10º), junto a Estonia (3º), Finlandia (5º) y Canadá (7º). Es más, dice la OCDE que los estudiantes más desfavorecidos de Macao y Vietnám superaran a los estudiantes más favorecidos de 20 países (PISA 2015).

Más allá de los resultados, en los sistemas de Asia Oriental los retos son comunes: los niños estudian demasiadas horas, el sistema es demasiado rígido y muy enfocado a un examen. Las virtudes también se asemejan: la importancia de la educación y el respeto por los profesores. Para el profesor Kaim-ming Cheng, de la Universidad de Educación de Hong Kong, más allá de estereotipos que simplifican los resultados asiáticos, existe una base cultural en las que denomina “las sociedades de los palillos”, que son las sociedades que comparten dos ingredientes: comen con palillos y durante siglos se enfrentaron al Examen Civil: Corea, Japón, China continental, Taiwán, Hong Kong, Macao y Vietnam.

El Examen Civil fue una especie de oposición a funcionario imperial, a la que cualquier varón, sin importar su origen podría presentarse y arraigada en estos países por más de 1.300 años. Aprobar el examen significaba sacar a toda la familia de la pobreza, lo que hizo calar a fondo la meritocracia pero también asentó la idea de que examen y educación eran la misma cosa.

Asia olvidada: las luchadoras de Kabul

Si la educación de Afganistán se reduce a unas cifras, se puede concluir que un 60% de las niñas de Afganistán está fuera del colegio, según datos de 2018 de Unicef. Si los números se sustituyen por personas, la educación en Afganistán es la historia de la profesora Sahila, de las parlamentarias Farida Hamidi y Fawzia Koffi, de las universitarias Mursal, Sadaf, Nagina, Lina y Manizha o de las boxeadoras Sadaf, Shabnam, Farzana y Fátima y el resto de integrantes del equipo de boxeo femenino de Afganistán.

Chicas estudiantes en Kabul (Afganistán).
Chicas estudiantes en Kabul (Afganistán).

Cuando en 2001, los talibán llegaron al poder, la hija de la profesora Sahila tendría que haber empezado el colegio. La enseñanza quedó prohibida a las mujeres a partir de los ocho años y ella decidió dar clases a escondidas a su hija y a las niñas de otros vecinos: “Si me hubieran descubierto, me habrían matado”. La parlamentaria Farida Hamidi también fue amenazada cuando abrió la primera escuela para niñas de Nimruz, tras el período talibán. La lucha de Sadaf, Shabnam, Farzana y Fátima es literal: a puñetazos.

“El Sistema” de Venezuela: La belleza como derecho

El maestro venezolano José Antonio Abreu creía en el arte como derecho universal. Estaba convencido de que la belleza transformaba el alma de un niño para convertirlo en uno más feliz, más completo y por tanto, mejor ciudadano. Defendía que era posible vencer a la pobreza material con riqueza espiritual y que, por eso, cuando entregabas a un niño de un entorno marginal un instrumento, le estabas dando un arma para salir de la pobreza. Con ese propósito, en 1975, Abreu creó el Sistema Nacional de Orquestas y Coros Juveniles e Infantiles de Venezuela, una red de orquestas infantiles y juveniles por todo el país.

Chicos participantes en 'El Sistema' en Venezuela.
Chicos participantes en ‘El Sistema’ en Venezuela.

En Los Chorros, uno de los núcleos del Sistema en Caracas, hay niños y adolescentes afanados a sus violines y contrabajos, que de repente, cuando interpretan la Sinfonía número 8 de Beethoven, son algo grande, son artistas. “El Sistema se ocupa de sacar a los niños de la calle cuando no están en la escuela y les enseña unas habilidades, como la disciplina, la tolerancia o la comprensión que muchos, desgraciadamente, no aprenden en casa”, explica el directo del Núcleo de Los Chorros, Lennar Acosta. Lo sabe porque él fue uno de esos niños. Habla sin rodeos: “Si no me hubiera dedicado a la música, estaría muerto”.

EE UU: Los estudiantes que acabaron con las escuelas segregadas

En un pueblo de Virginia, tan remoto como su nombre, Farmville (granja), unos niños cambiaron la historia de su país, Estados Unidos, aunque no aparezcan en los libros de texto. En 2014, se celebró el 60º aniversario del fin de la doctrina ‘separados pero iguales’, una política aprobada en 1896 por el Tribunal Supremo de EEUU, que sostenía que mientras las instalaciones separadas para blancos y negros fueran iguales, la segregación no violaba la Ley. Gigantes de la Educación visitó a los antiguos estudiantes del colegio para niños negros en el que se fraguó una huelga estudiantil que puso fin a esa ley. El 70% de los demandantes del llamado caso “Brown contra Topeka”, que acabó con las aulas segregadas, procedían de ese colegio.

Antiguos estudiantes de Farmville, Virginia (EE UU).
Antiguos estudiantes de Farmville, Virginia (EE UU).

La entrevista tiene lugar en la escuela en la que ocurrió todo, hoy convertida en un modesto museo. Los antiguos estudiantes son septuagenarios. Dicen que nunca pensaron en hacer historia; eran niños, solo querían una escuela mejor. “Yo tenía 10 años, así que realmente no pensaba en las consecuencias. Creo que lo único que me daba miedo era que mis abuelos me regañaran por faltar a clase”, recuerda Joy Speakes, una de las alumnas que participó en las protestas. Explica que su colegio estaba pensado para 180 niños y eran 450, “así que el condado construyó tres gallineros para meternos. Cuando llovía, el agua se colaba por el techo y teníamos que sostener el paraguas durante toda la clase para no mojarnos, nada que ver con el colegio para niños blancos, a solo unas manzanas, con cafetería y gimnasio”.

Aquellos niños, con el apoyo de sus padres y luego de la organización de Derechos Civiles NAACP fueron a juicio y ganaron. El 17 de mayo de 1954, el Tribunal Supremo declaró que las instalaciones educativas separadas eran “inherentemente desiguales”. Pero en Virginia, la batalla duró más. Como el gobierno de Virginia no estaba dispuesto a que niños blancos y negros estudiaran juntos, cuando se publicó la sentencia, cerraron las escuelas públicas durante cinco años. Muchos afroamericanos de esa edad no pudieron volver a estudiar. Mickie Garrington, de 65 años, fue una de las estudiantes afectadas por el cierre: “Cuando me lo dijeron mis padres me sentí muy mal (…). La decisión no tenía sentido para una niña de 10 años”. “No puedes ir al colegio porque la gente blanca cree que no mereces ir a clase con ellos, eso para una niña no tiene sentido”.

Brasil: Cantos de sirena en la favela

“Yo soy vulnerable al canto de sirenas”, resolvió la alumna, de 14 años, tajante y se produjo un silencio incómodo. Era su interpretación tras leer La Odisea de Homero, durante una tertulia literaria que se celebró en una escuela situada en una de las comunidades más violentas de Rio de Janeiro, la Pavuna.

Eloisa Mesquita, la gerente del Ginásio experimental carioca, una red de innovación pedagógica que integra a 28 escuelas de Río de Janeiro, recuerda la anécdota para exponer el alcance de las tertulias literarias dentro de las llamadas comunidades de aprendizaje, a las que se han unido. A través de las tertulias literarias pretenden hacer partícipes de las escuela a toda la comunidad. Participan: profesores, familias, alumnos, vecinos y voluntarios. También en Río, en otra comunidad, Lecimar y Antonio “Gibi” utilizan el boxeo para sacar a los adolescentes del sofá.

Estudiantes brasileños.
Estudiantes brasileños.

Gigantes de la Educación visitó Brasil en 2014, en un momento de descontento popular en el que las calles se llenaban de manifestantes al grito de “¡Brasil despertó!”. Luiz Cláudio Costa, presidente del Instituto Nacional de Estudios e Investigaciones Educativas (INEP), asegura en entrevista que: “Si miras los datos de la última década verás que Brasil no estaba dormido”. Menciona los programas como la Bolsa familia y Brasil sin miseria con los que más de 36 millones de personas superaron la pobreza extrema en los últimos años; los cinco millones de jóvenes que se matricularon en la escuela entre 1991 y 2012, y cerca de tres millones en la educación superior.

Estonia: robots y ruido

Sentada en el suelo del aula, rodeada por pequeños robots, la profesora Birgy Lorenz, explica que, desde hace tres años, en los colegios de Estonia se trabajan los temas de manera transversal porque la vida “no se basa en asignaturas”. En Estonia, un país donde se vota a las elecciones desde el smarthphone, se crean empresas en cuestión de minutos y un par de clics y hasta se donan órganos por Internet, en los últimos años, la tecnología también dio el salto al ámbito educativo. Dos iniciativas sobresalen en esta área, una es la denominada “e-School”, una plataforma que se puso en marcha en 2002 y que pone en contacto a padres, profesores y alumnos; la segunda es la enseñanza de programación, que Estonia imparte en sus colegios, desde 2012, a partir de los siete años.

Birgy Lorenz, con sus robots.
Birgy Lorenz, con sus robots.

Lorenz fue Premio Microsoft en 2009, premio al profesor más innovador de Europa en 2010 y profesora del año de Estonia, en 2011. Dice que enseñar robótica a niños también cambia la forma de dar clase: “Antes se creía que una buena educación era con todos sentados en silencio y cuando enseñas por primera vez robótica, los niños hacen mucho ruido y es que el aprendizaje hace ruido ¡y es un buen ruido!”.

La primera rampa de monopatín de Etiopía

El primer día que Izzy se deslizó con un monopatín por la empinada cuesta del barrio Shiromeda, en Adís Abeba (Etiopía), una multitud de críos le persiguió boquiabierta, entre risitas. Aquel artilugio trotaba divertido, entre motocicletas, asnos y niños con uniforme que salían de clase, en las montañas Ontoto.

Izzy (en el centro), en Adís Abeba.
Izzy (en el centro), en Adís Abeba.

“Donde crecí no hay nada que inspire a la juventud, uso el patín como herramienta para empoderarlos”, asegura el artista que ha creado con ese fin el proyecto Megabiskate, Love in action para ayudar a los niños del barrio, la mayoría involucrados en la venta ambulante. Planeta Futuro publicó la entrevistaíntegra con este cantante de reggae que explica su particular fórmula del éxito: “Cree en alguien y esa persona será capaz de hacer cualquier cosa”.

Fuente: https://elpais.com/elpais/2018/07/18/planeta_futuro/1531902520_544390.html

Comparte este contenido:

Estonia, el primer país 100 por ciento digital

Por Martina Rua

La Internet es un derecho, las escuelas enseñan robótica y cuenta con residentes de todo el mundo.

En el centro histórico de Tallin, la capital de Estonia, que alberga a un tercio de la población del país (400.000 de 1,3 millones) es fácil sentirse en el Medioevo, con castillos y calles adoquinadas. Son las mismas calles en las que hace 15 años nació Skype, la compañía que revolucionó las comunicaciones, que fue adquirida por Microsoft por 8.500 millones de dólares y que sigue inspirando a los emprendedores estonios.

Hoy, el 70 por ciento del PIB se nutre del sector servicios, y aquellos relacionados con las tecnologías de la información y la comunicación (TIC) son los que más aportaron al crecimiento de la riqueza nacional en el 2016. Estonia se presenta ante el mundo como el primer país 100 por ciento digital, un camino que empezó en 1991.

La independencia estonia de la Unión Soviética tiene solo 27 años. El país se encontraba debilitado: una infraestructura caduca, la inflación altísima y una nueva democracia con instituciones por crearse fueron el escenario para que la idea de un Estado digital se hiciera bandera de esta reconstrucción.

“Cuando Estonia recuperó su independencia éramos un país pobre. La pregunta que teníamos frente a nosotros era cómo nos sobreponíamos al legado de la ocupación soviética. Nuestra respuesta fue construir un Estado democrático, moderno y eficiente. La idea de futuro fue aprovechar el potencial innovador de las TIC, pero nadie sabía hace 25 años qué tan importante sería internet en la organización del Estado y la sociedad. Me enorgullece ser la presidente del único Estado con una sociedad digital”, dice Kersti Kaljulaid, jefa del Ejecutivo, en una entrevista exclusiva vía e-mail.

Según ella, gracias a esta impronta digital, Estonia logró un balance entre seguridad y libertad, que dota a los ciudadanos de una red de servicios digitales basada en una identidad online segura. De hecho, la apuesta por la innovación digital fue por supervivencia más que por convicción. La administración y la burocracia tradicional eran demasiado caras y lentas como opción para un país que veía su PIB estancado y que necesitaba una estructura más eficiente y ágil.

Kaljulaid remarca que en el gobierno digital el fin no es la tecnología, sino usarla como herramienta para un cambio en la manera de gobernar que conduzca a un Estado más transparente, centrado en el ciudadano y menos corrupto. Las interacciones con el Estado casi no requieren burocracia. “Para los ciudadanos ser el centro del sistema no solo significa buena calidad de servicios públicos. También significa tener voz en lo que respecta a lo que esperan de sus representantes”, describe.

La mandataria explica el camino hacia este presente: “La elección que hicimos a favor de la tecnología no fue fácil. La decisión de invertir los escasos recursos de un Estado recientemente restaurado no consistió en reparar baches en carreteras o edificios escolares desmoronados, sino en equipar esos edificios con computadores y conexión a internet. En retrospectiva, el programa le dio a toda la sociedad estonia el impulso para dar un salto digital”.

En el 2002, tras una capacitación masiva, se entregó a los ciudadanos un documento de identidad con chip, con el que acceden a todos los sistemas del Estado las 24 horas del día: exactamente, a 1.789 trámites en línea, que equivalen al 99 por ciento de las diligencias oficiales que existen en el país báltico.

Solo los divorcios, matrimonios y algunas operaciones inmobiliarias precisan la presencia física. Con una conexión a internet, los estonios sacan turno en el hospital, pagan una multa, registran empresas, conversan con los maestros de sus hijos, renuevan su cédula de conducir. Votan. Opinan sobre los temas que se tratan en el Congreso, compran y venden, y registran una empresa en tres horas.

Los despachos estatales no usan papel desde el año 2000 y todas las firmas son digitales. ¿Cómo es la interacción de un ciudadano con un servicio estatal digitalizado? Por ejemplo, desde el 2015, en varios hospitales públicos la priorización de las urgencias corre sobre un sistema digital. Cuando el paciente ingresa, se escanea su documento con chip y se accede a su historia médica encriptada, como también a los datos de sus familiares y médico de cabecera.

Los ciudadanos son los únicos propietarios de sus datos. Es decir, si alguien perteneciente a un organismo del Estado accede a ellos queda registrado con una marca imborrable en el sistema, que cuenta con tecnología blockchain. Si esta intromisión se prueba injustificada, el ciudadano puede presentar una denuncia, ya que esto representa un delito.

Aquí se habla de e-gobierno y e-Estado: la tecnología está completamente entrelazada con la vida cotidiana. Hay e-escuela, e-salud, e-voto, incluso e-policía. De hecho, en Estonia ya nacen como e-ciudadanos. Los datos de un recién nacido se ingresan en el Registro de Población, que lo dota de una identidad digital, cuya integridad está garantizada por el Estado.

En educación, enseñar habilidades digitales está naturalizado. Se estudia programación desde primer grado, luego ciberseguridad y robótica. Hay talleres de drones y realidad virtual y aumentada. Otros pilares son el arte, los deportes y la autodisciplina. No hay timbres en los recreos, los alumnos saben cuándo es hora de retornar al aula.

Ejemplo para seguir

Sobre las posibilidades de reproducir el modelo, la presidenta Kaljulaid advierte que un Estado digital no puede ser importado. “Cada nación debe construir su impronta. Después de todo, un Estado es también una tradición, y las nuevas tecnologías deben contemplar eso y no reemplazarlo. Podemos ayudar transfiriendo conocimiento y experiencia en cómo construir un sistema de e-gobierno”, explica Kaljulaid, la primera mujer y la persona más joven en ejercer la presidencia.

La posibilidad de una “libertad geográfica” es otro concepto singular. Libertad para que sus ciudadanos operen con el Estado y las empresas desde donde quieran y cuando quieran; y que cualquier ciudadano del mundo pueda ser “ciudadano digital” de Estonia.

La idea surgió en el 2014, con el objetivo de ser una sociedad sin fronteras y permitir a cualquier persona ser residente virtual del país más digital del mundo. Aunque ya han expedido 30.000 identidades digitales, están lejos de los 10 millones que esperan para el 2025.

El documento, que emite el Estado estonio y cuesta 100 euros, es un instrumento creado para gestionar un negocio internacional de forma sencilla sin necesidad de pisar Estonia. No es un pasaporte, pero sirve para hacer negocios con menos trabas. Los solicitantes proceden mayormente de Europa, pero también hay muchos latinoamericanos.

“Nuestro objetivo fue que nuestro tamaño y ubicación no sean limitantes. Buscamos que el tiempo que le dedican las empresas y los ciudadanos a comunicarse con las instituciones del Gobierno sea solo el necesario”, comenta Viljar Lubi, viceministro de Desarrollo Económico.

En este país, el 88 por ciento de las personas navega por internet a diario y el 87 por ciento de la población entre los 16 y los 74 años se conecta al portal gubernamental. Que un país confíe el 100 por ciento de su funcionamiento y la información de sus ciudadanos a sistemas digitales supone riesgos ante ataques informáticos que pueda recibir. Por eso, uno de los puestos de mayor relevancia es el de Siim Sikkut, jefe de Información y Tecnología (CIO) de Estonia. Para él, los gobiernos deben tomar en serio los riesgos que surgen con cada innovación, pero no convertirlos en barreras.

Aquí, toda la información está protegida por una red descentralizada muy difícil de hackear y fácilmente verificable, así como por una arquitectura descentralizada para las comunicaciones llamada X-road, que evita que se realicen robos masivos de datos.

Además de ser el primer país digital, Estonia se jacta de ser la nación con más experiencia en ciberseguridad, y esto también se explica como una innovación por necesidad. En el 2007, el país recibió un ciberataque casi letal, presuntamente perpetrado por Rusia por desacuerdos políticos –aunque nunca reconocido–, que lo dejó por fuera de buena parte del mundo digital. De un día para el otro los estonios no tuvieron acceso a los principales diarios, trámites, universidades ni bancos. Se con formó entonces un comité plagado de ingenieros y científicos que logró sacar al país del apagón digital.

A raíz de ese incidente, al año siguiente se inauguró en Tallin el Centro de Excelencia de Cooperación en Ciberdefensa de la Otán. Desde el 2017, Estonia cuenta además con una “copia de seguridad” en Luxenburgo, algo así como un país digital clonado a donde recurrir en caso de ataque.

Fuente del artículo: http://www.eltiempo.com/tecnosfera/novedades-tecnologia/cual-es-el-pais-mas-digital-del-mundo-249084

 

Comparte este contenido:

Mejor que Finlandia: el increíble milagro educativo de Estonia

Hace menos de tres décadas, apenas tenían un sistema de teléfonos fijos. Ahora son el país más innovador del mundo. ¿Qué ha pasado con Estonia durante los últimos años?

Europa/Estonia /elconfidencial.com/HÉCTOR G. BARNÉS

En 1991, Estonia recuperó su independencia, tras pasar más de 50 años bajo el control soviético. Fue uno de los satélites rusos a los que peor les fue durante la Guerra Fría. Mientras que antes de la Segunda Guerra Mundial podían presumir de un nivel de vida y de una renta per cápita muy similar a la de sus vecinos finlandeses, a comienzos de los años 90, la situación era casi límite. En esas décadas, las minorías alemanas y suecas fueron expulsadas, 80.000 estonios emigraron y otros 60.000 fueron deportados. Estonia fue rusificada: medio millón de rusoparlantes fueron trasladados al país báltico para ayudar en la militarización de la región, considerada como “zona fronteriza”.

Un cuarto de siglo después de que Estonia recobrase su independencia, se ha convertido en uno de los países que la OCDE suele utilizar como ejemplo positivo a propósito de los exámenes PISA, tanto por su excelencia como por su equidad. Incluso superó a Finlandia en las pruebas de 2012, que cayó desde el puesto dos al número doce, mientras que Estonia se quedó en el once, mejorando sus marcas previas. No solo eso, sino que como han puesto de manifiesto repetidamente medios de comunicación como ‘The Economist‘ o ‘Mic‘, se ha convertido en una especie de Silicon Valley europeo. Este pequeño país de apenas 1.300.000 habitantes (un poco menos que la población de Barcelona) se ha convertido en el lugar donde más start-ups hay por habitante.

Es uno de los países donde menos influye el entorno socioeconómico de los estudiantes en su rendimiento

No cabe duda de que gran parte de su éxito en innovación se debe a que, cuando no hay nada hecho, se puede hacer cualquier cosa: es más fácil montar un sistema educativo desde prácticamente cero que cargar con el peso de la historia en cada reforma. Por eso resulta de vital importancia la llevada a cabo en 1996, como señalaba un artículopublicado por la televisión pública estonia. Fue ese año cuando se desarrolló el currículo nacional actualmente vigente, y que según Imbi Henno, del Ministerio de Educación estonio, fue “la base de nuestro éxito educativo”.

¿Qué promulgaba dicho currículo? Ante todo, la igualdad entre los estudiantes, probablemente el punto fuerte del sistema educativo estonio, a diferencia de lo que ocurre en otros países como Alemania, que por lo general obtienen muy buenos resultados académicos en las pruebas PISA pero que adolecen de graves carencias respecto a la equidad educativa. Ese es, curiosamente, uno de los grandes defectos que se suelen achacar al sistema estonio. Como señala una ponenciarealizada por Henno, Estonia tiene pocos estudiantes del más alto nivel comparado con otros países europeos de gran rendimiento. No se puede tener todo; Estonia es uno de los países donde menos influye el entorno sociocultural de los alumnos en su rendimiento.

El país de los números

En el análisis del éxito de su país, Henno pone el énfasis en otros factores. Más allá del desarrollo del currículo nacional, “la formación de los profesores se ha reorientado centrándose en prácticas más innovadoras y con un enfoque más centrado en el estudiante”. Y aquí llega lo importante: no solo Estonia tiene el nivel más bajo de malos estudiantes en matemáticas y ciencia sino que, además, ha puesto especial hincapié en mejorar el VET (“vocational education and training”), es decir, la educación que tiene como objetivo formar profesionales, y que abarca carreras como contabilidad, medicina, enfermería, arquitectura o abogacía. Pero, sobre todo, las diferentes ingenierías.

Estonia fue el país pionero a la hora de proporcionar a sus estudiantes un ordenador con conexión a internet. Fue en 1998, apenas dos años antes de que el gobierno declarase el acceso a internet como un derecho. En muchos casos, como ocurrió con el registro de la propiedad, se saltaron décadas de papeleo y máquina de escribir, y pasaron de no tener uno a montarlo de manera digital. Como explicaba a ‘Mic’ Toomas Hendrik Ilves, presidente desde 2006 criado en Nueva Jersey y estudiante de programación desde adolescente, esta fue una de sus iniciativas más polémicas. “Me insultaron durante muchos años, pero pensaba que entre el 3 y el 5% de los niños que tienen ordenador –aunque sea un niño pobre del campo– sentirá la curiosidad innata de mirar en sus tripas”.

En apenas unos años empezaron a surgir compañías como Skype, que fue objeto de una venta millonaria a eBay en 2005, o Kazaa, el primo olvidado de Napster. Es uno de los contados países que enseña a sus niños código y, además, sus ciudadanos pueden hacer la declaración de la renta ‘online’ desde hace años. También votar, un sistema que se implantó en el año 2005. El sector tecnológico representa alrededor del15% de su producto interior bruto. Como explicaba Ilves en ‘TheEconomist‘, la educación ha jugado un papel importante en todo ello, gracias a programas de iniciativa público-privada como ProgeTiiger, cuyo objetivo es que los niños de cinco años aprendan a programar: “En los años 80 todos los niños en el instituto querían ser estrellas de rock, ahora todos quieren ser emprendedores”.

Cada investigación publicada sobre Ecología o Ciencias de la Naturaleza recibe un 40% de citas más que el resto de ‘papers’ de fuera

Como señalaba en ‘Study in Estonia‘ el profesor de psicología experimental de la Universidad de Tartu Jüri Allik, el criterio estonio a la hora de elegir qué proyectos financiar ha sido también clave en el éxito del ámbito académico. “Cada investigación estonia publicada en Medio Ambiente/Ecología y en Ciencias de la Naturaleza recibe un 40% de citas más que el resto de ‘papers’ de esos campos”, recuerda. Además, el impacto de las investigaciones en ciencias computacionales se ha incrementado en más de un 200%. Gran parte de este éxito internacional se debe a que estos trabajos deben redactarse en inglés.

¿Con o sin Estado?

Hay, no obstante, un factor que diferencia enormemente a Estonia en la manera en que el emprendimiento y la educación privada se relacionan con el sector público. Mientras que la mayor parte de bases tecnológicas, como la de Silicon Valley, abogan por una vía en la que el Estado se limite a no molestar, el estonio ha jugado un importante papel a la hora de promocionar el sector. Como recuerda en ‘Mic’ el CEO de Teleport, Sten Tamkivi, “donde Estonia lo ha hecho mucho mejor que en otros países es en que la política y la tecnología no están en extremos opuestos”, señalaba. “Hay el deseo de resolver problemas y de acercarse a estos de una manera tecnológica”.

Ave Laurmgson, mánager de proyecto de la Fundación Tiger Leap, con dos alumnos de una escuela en Tallín. (Reuters/Ints Kalnins)
Ave Laurmgson, mánager de proyecto de la Fundación Tiger Leap, con dos alumnos de una escuela en Tallín. (Reuters/Ints Kalnins)

Como reconoce Henno, hay pocos países donde la integración entre mundo educativo y sociedad sea tan completa. En su informe, señala que los profesores tienen una alta cualificación en todos los niveles de la escuela y gozan de una gran independencia en cuanto a los contenidos a impartir y su metodología. Además, añade un factor importante: toda la educación obligatoria es gratuita. Por su parte, tal y como señala una investigación publicada en ‘Journal of Studies in International Education’, la internacionalización de la universidad se ha convertido en un factor importante del éxito estonio, especialmente en la apertura al resto de países de la Unión Europea.

“El proceso de internacionalización incluye la implementación gradual de nuevos valores en la sociedad”, señala el estudio. “Siendo un miembro de la antigua Unión Soviética, Estonia funcionó durante décadas como un país homogéneo y cerrado. Las iniciativas en internacionalización empezaron a acabar con esos estándares. Las universidades empezaron a promocionar valores que incluían la multiculturalidad, la tolerancia y la aceptación de diferencias”. De hecho, Estonia fue uno de los primeros países en firmar la Declaración de Bolonia, como un gesto que les permitía acercarse a la Unión Europea (y su suculento programa Erasmus) y alejarse de la influencia rusa, que tan funesta resultó durante décadas.

Desde los tiempos de la Unión Soviética hemos obtenido una gran competencia tecnológica y un montón de ingenieros

Un último factor que resume bien la fórmula del éxito estonio: al contrario de lo que señala el discurso oficial en otros países occidentales, donde la única salida posible para el talento es el emprendimiento en el sector privado, gran parte del talento báltico desea trabajar en el sector público. Como señala en un artículo publicado en ‘DiginomicaAnna Piperal, directora de Enterprise Estonia, el hecho de que el 99% de los servicios del gobierno estén disponibles en la red provoca que el funcionario tecnológico sea una importante, y bien remunerada, figura.

“Desde los tiempos de la Unión Soviética hemos obtenido una gran competencia tecnológica y un montón de ingenieros”, explicaba. “Así que nuestro gobierno empezó a empujar aún más y construyó un marco legal totalmente nuevo que apoya las tecnologías de la información y el intercambio de datos. No es que quisiéramos innovar, es que no nos quedaba otra”. Una moraleja y una pregunta: por un lado, que es posible desarrollar el sector tecnológico con la colaboración del Estado; por otra, ¿es posible trasladar los hallazgos de Estonia a países más grandes y sociedades más complejas?

Fuente: https://www.elconfidencial.com/alma-corazon-vida/2016-06-28/estonia-sistema-educativo-exito_1224263/

Comparte este contenido:

Eesti: Täna algav tasemetöö annab võimaluse esmakordselt mõõta õpilaste digioskusi

Eesti / 18. märts 2018 / Autor: Kirjalikult / Teabeallikas: Haridus- ja teadusminister

Täna alustatakse koolides digipädevuste tasemetööde pilootprojektiga, milles osaleb rohkem kui 1400 põhikooli ja gümnaasiumi lõpuklasside õpilast.

Haridus- ja teadusminister Mailis Reps tõdes, et digi on leidnud kindla koha meie elus. „Me puutume sellega kokku igapäevaselt nii tööl kui ka vabal ajal. Meie laste elu erineb meie lapsepõlvest väga palju ning sageli on nad digilahenduste kasutamisel meist juba ette jõudnud,“ sõnas Reps. „Tasemetöö abil saame teada, millised on meie õpilaste digioskused tegelikult ning vajadusel leiame lahendusi, kuidas täiendavalt toetada nende arendamist. Oleme seadnud eesmärgi, et meie lapsed peavad suutma kodanikuna ka infoühiskonnas edukalt toime tulla ning omaksid tööturul konkurentsivõimelisi IT-oskusi.“

Digipädevus on üks üldpädevustest, mille omandamist ja arendamist toetatakse nii õppeaineteüleselt üldhariduses kui ka huvitegevuses. Kui varasemalt on IT-oskuste puhul peetud ennekõike silmas arvutioskust, siis alates 2014. aastast on riiklikus õppekavas digipädevus kui IT-baasoskus oluliselt laiemalt määratletud. Selles nähakse viit osaoskuste valdkonda: internetis informatsiooni otsimine ja allikakriitilisus; turvalisus nii tervise, isikuandmete kui ka keskkonna kontekstis; erineva sisu loomise oskus (näiteks foto, video, tekst) koos autoriõiguse temaatikaga; suhtlemisoskus digitaalsetes keskkondades (sealhulgas netikett); probleemi lahendamise oskus nii riistvara toimimisega kui ka õige seadme või rakenduse valikuga seonduvalt. Osaoskuste oluline valdkond on turvalisus, mille puhul on vajalik käsitleda küberkiusamise ja digijalajälje temaatikat. Ka koolis on digiseadmete kui õppevahendite kasutamine aina igapäevasem ning eeldab teatud oskuste olemasolu.

Haridusteadlased ja tööandjad peavad aina tähtsamaks üldpädevuste kujundamist. Digipädevus on aga selline üldpädevus, mille arendamine õpilases ei ole vaid kooli vastutus. Lapsed kasutavad seadmeid ja seiklevad virtuaalmaailmas ennekõike vabal ajal, mistõttu on ka lapsevanematel suur roll neid selles õigele teele suunata.

Digipädevuste tasemetöö viiakse sel aastal 1400 õpilase seas läbi esimest korda piloottestina sihtasutus Innove poolt. Tasemetöid ei hinnata, nende eesmärgiks on saada tagasisidet, mille põhjal on võimalik riigil ja koolidel paremini planeerida õppetöö läbiviimist ja hinnata pädevuste omandamist. Koolid saavad ülevaate ka õpilaste igapäevastest digioskustest. Tulemused selguvad tänavu mais.

Hariduse Infotehnoloogia Sihtasutus on välja töötanud digipädevuste mudeli, millest koolid saavad lähtuda digioskuste õpetamisel ja arendamisel. Lisaks on enamus Eesti põhikoole läbi viinud digipädevuste arendamisel enesehindamise ning koostanud plaani edasiseks.

Uudiste allikas:

https://www.hm.ee/et/uudised/tana-algav-tasemetoo-annab-voimaluse-esmakordselt-moota-opilaste-digioskusi

Comparte este contenido:

Las desigualdades en la educación europea, menos horas de clase

Por: Carmen García

La educación puede definirse como el proceso multidireccional mediante el que se transmiten conocimientos, costumbres y valores, no sólo mediante la palabra, sino que también está presenta en cualquier acto de nuestro día a día.

La Red europea de información sobre educación Eurydiceactualiza cada curso sus datos y cifras teniendo en cuenta otras publicaciones sobre los sistemas educativos europeos. En uno de sus estudios se analiza la enseñanza obligatoria en los distintos países, desde la duración, y las edades en las que se comienza y en las que se finaliza hasta otros aspectos de gran relevancia. La Clasificación Internacional Normalizada de Educación de la UNESCO representa una clasificación de referencia que permite ordenar los programas educativos y sus certificaciones por niveles de educación y campos de estudio. Según CINE, la educación primaria comienza a los 6 años en la mayoría de los países, exceptuando Bulgaria, Estonia, Croacia, Letonia, Lituania, Polonia, Finlandia y Suecia, que se inicia a los 7. Los países donde más corta es la educación primaria (4 años) son Alemania, Austria y Turquía.

En cuanto a la distinción entre la educación primaria y la secundaria, la mayoría de los países establece una clara diferenciación, sin embargo, regiones como Polonia, Eslovenia, Eslovaquia, Finlandia o Suecia, poseen un sistema único y común para todos los alumnos a lo largo de la enseñanza obligatoria. En general la educación secundaria suele finalizar a los 18 o 19 años, pero Alemania, por ejemplo, ofrece hasta cinco posibilidades para cursarla y comienza a los 10 años.

Fuente: Eurodyce Datos y Cifras

Los estudios de grado tienen una duración media de 3 años, a pesar de que puede ampliarse hasta 4 en países como Grecia, Irlanda, España o República Checa, o incluso puede alcanzar hasta los 6 años en Italia, Hungría y Estonia.

La educación obligatoria a tiempo completo se refiere a un periodo en el que todos los estudiantes deben cursar una formación en el período que indica. Este tiempo está regulado por la ley y está determinado por la edad de los estudiantes. Normalmente este tipo de educación comienza a los 6 años, a pesar de que hay países donde se adelanta a los 5 e incluso a los 4. Las excepciones más destacas en este campo son Hungría (3 años), Estonia y Suecia (7 años). En general dura entre 9 y 10 años. En Bélgica, Alemania, Luxemburgo, Portugal y Reino Unido (Irlanda del Norte) dura 12 años y 13 en algunas regiones como Hungría u Holanda.

Fuente: Eurodyce Datos y Cifras

En cuando a la educación obligatoria a tiempo parcial, quiere decir que desde que se finaliza el periodo de formación obligatoria a tiempo completo, existe un requisito formal que exige que todos los jóvenes participen en la educación a tiempo parcial.

La Clasificación Internacional Normalizada de la Educación (CINE) es un instrumento encargado de recabar información y datos estadísticos sobre educación a nivel internacional. Está formada por dos clasificaciones, por una parte las áreas de estudio y por otro los niveles educativos. La última versión de CINE establece ocho niveles diferentes de educación. Dependiendo del nivel y del tipo de enseñanza, es necesario establecer un sistema jerárquico de clasificación. Los programas que pertenecen a la Educación infantil favorecen el desarrollo cognitivo, físico, social y emocional de los niños. Los que pertenecen a la educación primaria, proporcionan a los alumnos las habilidades básicas en lectura, escritura y matemáticas. La edad para poder acceder a este nivel está entre los 5 y los 7 años. La educación secundaria inferior está diseñada para seguir construyendo sobre la base del sistema anterior y los niños acceden al nivel CINE 2 entre los 10 y los 13 años. En la educación secundaria superior el objetivo está en proporcionar las habilidades necesarias para el empleo. La educación postsecundaria no superior ofrece experiencias de aprendizaje sobre la base de la educación secundaria, preparando así para acceder al mercado de trabajo y a la educación superior. La del ciclo corto suele estar diseñada para ofrecer a los estudiantes conocimientos, destrezas y competencias profesionales y para poder acceder se exige haber superado los programas anteriores.

Fuente: Eurodyce Datos y Cifras

Una vez superados estos niveles, se accede al Grado o equivalente, donde los programas suelen estar diseñados para proporcionar a los estudiantes conocimientos, destrezas y competencias que conducen a una titulación superior de primer nivel o equivalente. Para poder acceder a este sistema se exige haber completado el nivel CINE 3 o 4. Para finalizar, estaría el Nivel de Máster, donde proporcionan todo lo necesario para una titulación de segundo nivel o equivalente.

Fuente: http://www.eleconomista.es/ecoaula/noticias/8964167/02/18/Como-se-encuentra-la-estructura-de-los-sistemas-educativos-europeos.html

Comparte este contenido:
Page 2 of 6
1 2 3 4 6