La Conferencia Internacional del Trabajo ha adoptado un Llamamiento Mundial a la Acción en el que se esbozan medidas para crear una recuperación de la pandemia centrada en las personas y evitar que las economías y las sociedades queden marcadas a largo plazo.
GINEBRA (OIT Noticias) – Los delegados de 181 países que representan a los gobiernos, trabajadores y empleadores en la Conferencia Internacional del Trabajo (CIT) han adoptado por unanimidad un Llamamiento Mundial a la Acción para una recuperación de la COVID-19 centrada en las personas, que dé prioridad a la creación de empleos decentes para todos y aborde las desigualdades causadas por la crisis.
El Llamamiento Mundial a la Acción para una recuperación centrada en las personas esboza un programa exhaustivo. Compromete a los países a garantizar que su recuperación económica y social de la crisis sea «totalmente inclusiva, sostenible y resiliente».
El acuerdo incluye dos conjuntos de acciones acordadas. El primero abarca las medidas que deben adoptar los gobiernos nacionales y sus «interlocutores sociales» empresariales y sindicales, para lograr una recuperación rica en empleo que refuerce sustancialmente las protecciones sociales y de los trabajadores y apoye a las empresas sostenibles.
Un segundo conjunto de acciones abarca la cooperación internacional y el papel de las instituciones multilaterales, incluida la OIT, con el objetivo de aumentar el nivel y la coherencia de su apoyo a las estrategias nacionales de recuperación de la pandemia «centradas en las personas».
Hace un llamamiento a la OIT -con su mandato de justicia social y trabajo decente- para que desempeñe un papel de liderazgo y utilice todos los medios para respaldar el diseño y la aplicación de estrategias de recuperación que no dejen a nadie atrás, incluso reforzando la cooperación con otras instituciones del sistema multilateral.
El Llamamiento a la Acción se basa en la Declaración del Centenario de la OIT para el Futuro del Trabajo , adoptada en la CIT de 2019. El Llamamiento ofrece una vía para acelerar la aplicación práctica de la Declaración mediante la mejora de las políticas y las inversiones que apoyan una recuperación de base amplia y plenamente inclusiva. También hace un llamamiento a la acción urgente y coordinada en áreas relacionadas, incluyendo la cooperación y la solidaridad internacionales para garantizar un acceso global e igualitario a las vacunas, los tratamientos y las medidas preventivas.
El Director General de la OIT, Guy Ryder, acogió con satisfacción el acuerdo: «La creación de una recuperación que sea inclusiva, sostenible y resiliente debe convertirse en una de las principales prioridades de las políticas públicas. Esta resolución ofrece un camino claro y completo que permitirá a los países convertir en acciones concretas la aspiración moral y política de no dejar a nadie atrás».
Y añadió: «La eficacia y la resiliencia de la recuperación de la COVID-19 dependerán en gran medida de su amplitud y de su carácter socialmente inclusivo. A menos que abordemos específicamente las desigualdades que se han agudizado durante esta crisis, existe un riesgo muy real de que las consecuencias económicas y sociales causen cicatrices a largo plazo, en particular para los grupos desproporcionadamente afectados, como los jóvenes y las mujeres, y las pequeñas empresas y microempresas que proporcionan la mayor parte del empleo mundial.»
En una sesión especial de la CIT, antes de adoptar el Llamamiento a la Acción, los delegados participaron en la primera jornada de la Cumbre sobre el Mundo del Trabajo, de dos días de duración: Acción global para una respuesta a la COVID-19 centrada en las personas. En la Cumbre se debatieron los efectos de la pandemia en los mercados laborales, y las estrategias de recuperación que promueven la justicia social y el trabajo decente.
En la Cumbre también se escucharon mensajes de vídeo de los principales líderes mundiales , como el Papa Francisco, el Presidente de Corea del Sur, Moon Jae-in, el Primer Ministro de Portugal, António Costa, y el Presidente de Estados Unidos, Joe Biden.
CT-MESR de 16 de junio de 2021: informe y declaraciones FERC CGT – LPR: reclasificación de CE y Ch., Misión CDI
Informe sintético:
El Comité Técnico del Ministerio de Educación Superior e Investigaciones (CT-MESR) se reunió en video el 16 de junio de 2021. Tenía tres puntos en la agenda relacionados con la LPR:
dictamen sobre dos proyectos de decreto de reclasificación de personal investigador y docente:
Voto (por los 2 textos): 8 a favor (SNPTES, CFDT, UNSA), 0 en contra, 7 abstenciones (CGT, FSU, FO, SUD).
un punto de información sin voto sobre “misión CDI”. La FERC CGT presentó un dictamen que concluyó con: » El CT-MESR se opone al establecimiento de la» misión científica CDI «y pide a las instituciones y organizaciones que no la pongan en marcha. «
Voto de opinión: 15 a favor (SNPTES, CGT, CFDT, FSU, UNSA, FO, SUD): unanimidad .
A) Explicación de la votación de la FERC CGT sobre los proyectos de decretos de reclasificación de profesorado e investigadores
El propósito de estos proyectos de decreto es alinear y mejorar las condiciones de reclasificación de profesores-investigadores (CE) e investigadores (Ch). Estos organismos (MCF y CR) se beneficiarán de ahora en adelante:
un año de bonificación de antigüedad para la preparación de la tesis (nuevo para CE),
la consideración por 3 años de tesis CIFRE (nuevo para Chs),
la posibilidad de acumular reclasificaciones (nuevo para Ch)
y la reanudación total de posdoctorados después de la tesis (MCF: posdoctorados públicos y privados sin límite de tiempo; CR: posdoctorados públicos tomados al 100% – y posible extensión para posdoctorados privados si el ministerio así lo decide).
El biselado está previsto para MCF y CR recién contratados: teniendo en cuenta la nueva normativa con límite (los servicios realizados por el colega entre su contratación y la publicación del decreto cuentan por un máximo de 1 año).
La FERC CGT valora positivamente estos avances para los nuevos MCF y CR. Sin embargo, no olvida que se introducen en el marco de la LPR, que precaria la financiación de la investigación y ataca los estatutos del personal.
También señala que esta medida contribuye a aplastar la red de profesores-investigadores e investigadores (porque elimina efectivamente los primeros pasos, sin agregar pasos en la parte superior de las grillas): la carrera de EC y Ch comienza un poco menos bajo, pero se bloquea más rápidamente. Además, solo afecta al personal que está a punto de ingresar o que acaba de ingresar a una carrera, dejando fuera a la gran mayoría de los colegas en el cargo.
Finalmente, señala que esta medida acompaña a la eliminación de la contratación desde el inicio de la tesis (cada vez más postdoctorados antes de la esperanza de establecerse algún día).
Exigimos la contratación lo más cercana posible a la tesis por lo tanto la apertura masiva de puestos, la mejora de las escalas y por supuesto el aumento del punto índice para compensar la pérdida de poder adquisitivo (-18% desde el año 2000) . Estas medidas de reclasificación vinculadas a la LPR están muy alejadas de estas demandas.
Por todo ello, la FERC CGT se abstendrá de estos proyectos de decreto.
Voto (proyecto de decreto de reclasificación de personal investigador y docente): 8 a favor (SNPTES, CFDT, UNSA), 0 en contra, 7 abstenciones (CGT, FSU, FO, SUD).
B) Declaración de la FERC CGT sobre la «misión CDI»
El Decreto relativo al “contrato indefinido previsto en el artículo L. 431-6 del código de investigación”, denominado “contrato indefinido de cesión”, se nos presenta hoy a título informativo.
Esta nueva “oportunidad” de contratación en un establecimiento público de investigación y educación superior cuestiona profundamente las contrataciones permanentes tanto en el sector público (condición de funcionario) como en el sector privado (CDI). De hecho, la ausencia de un plazo para el contrato de trabajo indefinido cuestiona por completo la noción misma de empleo indefinido.
El “contrato indefinido de cesión” en el sector privado se basa en la limitación del contrato de duración determinada a 18 meses. La duración real de las asignaciones por contrato indefinido debe ser ciertamente inferior a 6 años en los sectores que las utilizan habitualmente, como la construcción. Los elementos estadísticos habrían sido útiles para el debate: en realidad no existe una situación similar de contratación en «contrato indefinido de misión» comparable entre el público y el privado.
En el servicio público, el contrato de duración determinada ya es muy largo con un máximo de 6 años, y además, el «contrato de duración determinada por proyecto» fue introducido por la ley de transformación del servicio público. Esto ya está ampliamente abierto a contrataciones con contratos de duración determinada vinculados al cumplimiento de una misión.
Añadiendo un «CDI de misión científica», que de hecho se confunde por su duración con un trabajo fijo, se cuestiona directamente la noción de CDI en el sector privado y la condición de funcionario en el público. Se trata, por tanto, de un cuestionamiento del CDI como apoyo al empleo fijo en el Código de Trabajo (para todos los empleados del sector privado).
Esta misión CDI también tiene como objetivo establecer la contratación a largo plazo con recursos propios a través de convocatorias de proyectos. Esta medida confirma la transición de la contratación a la condición de funcionario público a la contratación precaria de por vida en la investigación. El personal de educación superior e investigación podrá pasar de «misión científica CDI» a «misión científica CDI» siempre que las instituciones consideren que necesitan sus servicios.
La «misión CDI» finaliza cuando finaliza la misión. El motivo del final de la misión puede ser «tema de investigación abandonado». Además, la salida (fallecimiento, traslado, jubilación, etc.) del líder del proyecto o la finalización de la financiación del proyecto se convierten en motivos de rescisión del contrato … Por tales condiciones de rescisión del contrato (vagas y cuestionables) , este contrato no puede ser considerado como un CDI, es un contrato a término determinado por la duración de la cesión.
Finalmente, cuando el contrato finaliza debido a un proyecto terminado, la persona no recibe ninguna compensación relacionada con la terminación de un CDI, como se hace en derecho privado al final de un CDI de cesión realizado. Esto es incluso lo que hace posible llamar a este tipo de contrato CDI y no CDD en derecho privado. En el «CDI de misión científica», esta medida de compensación está excluida: el artículo 1 dice «el interesado se beneficia de las asignaciones diarias previstas en el código de seguridad social que son pagadas por la caja primaria de seguridad social. ¡Es por tanto un régimen general de rescisión de contrato del tipo DDC!
¡Esta falta de consideración de la indemnización por rescisión demuestra hasta qué punto se usurpa particularmente el «yo» de «indeterminado» en CDI! Una vez más, los desarmadores del derecho en el Servicio Público se distinguen por su declive decreciente en comparación con el derecho privado. El Estado, brazo armado del gobierno en el lugar, es un pésimo empleador, que no sabe qué inventar para torcer la ley a tonterías. Y la dirección del ministerio, aquí presente, realiza su trabajo con la mayor celeridad, pero también con un ferviente apoyo a la ideología política de estos textos.
La ausencia de votación sobre este decreto que aquí se presenta al CT-MESR no reduce en modo alguno nuestro enfado ante la ignominia legislativa que está implementando a través de la LPR, de la cual este decreto es un mal ejemplo.
Opinión de la FERC CGT sobre la «misión CDI» presentada al CT-MESR el 16 de junio de 2021:
“La Ley de Programación de la Investigación (LPR) ha creado la“ misión científica CDI ”. Estos «CDI de misión científica» se supone que están dedicados a misiones de más de 6 años, terminan con la «realización de las misiones» y pueden «romperse cuando el proyecto o la operación […] no se puede llevar a cabo». La salida (fallecimiento, traslado, jubilación, etc.) del líder del proyecto o la finalización de la financiación del proyecto se convierten en motivos de rescisión del contrato, entre otros. Esta nueva herramienta permite instalar la precariedad en un contrato vinculado a la duración previsible de un proyecto. También es un ataque sin precedentes a la obligación legítima de desempeñar funciones permanentes de los funcionarios públicos (cf. art. 3 de la ley Le Pors 83-634). Finalmente, tal «misión científica CDI», que de hecho reemplaza, por su duración de más de 6 años, un trabajo fijo, cuestiona la noción de CDI. Se trata, por tanto, de un cuestionamiento del CDI como apoyo al empleo permanente en el Código de Trabajo para todos los empleados del sector privado.
El CT-MESR se pronuncia en contra del establecimiento de «CDI de misión científica» y pide a los establecimientos y organizaciones que no los creen. «
Voto de opinión: 15 a favor (SNPTES, CGT, CFDT, FSU, UNSA, FO, SUD): unanimidad .
Durante su visita a ABC explicó que en la pandemia ha escuchado muchas veces que «saldremos mejores de esta», pero, en su opinión, no basta con decirlo, «hay que reflexionar y pensar qué ha sucedido, qué herramientas teníamos, cuáles necesitamos y si debemos hacer un cambio o no, porque todo lo que queremos ser empieza en la educación. Durante este periodo de tiempo —recordó— se ha preguntado a muchos expertos en medicina, antropología, microbiología… sobre todo lo qué hay que cambiar, pero ¿y en educación? Si nos conformamos con que los alumnos sepan mantener la distancia de seguridad y ponerse el gel, mal vamos. Habremos perdido una gran oportunidad».
«Hay que repensar la educación»
No duda al asegurar que «la sociedad que queremos está en la escuelas que tenemos. Si pretendemos que la gente sepa dialogar tenemos que educar a los alumnos en el diálogo, hay que fomentar que hablen entre ellos, se escuchen. Al escuchar se aprende de los demás». Sin embargo, uno de los mayores impedimentos para progresar es que «en la sociedad siempre existe el curioso hecho de que queremos educar como fuimos educados y es muy difícil que el cambio se produzca. Hay que repensar la educación para saber qué herramientas necesitamos».
Finalmente, César Bona destaca la importancia de una buena relación entre la familia y la escuela: «no hay nada más emocionante para un estudiante que ver que sus padres y sus profesores van en la misma línea».
El Gobierno chino intenta poner orden en el salvaje sector de la educación en línea, que solo en 2020 movió en aquel país casi 33.000 millones de euros.
Es difícil tomar el transporte público en Pekín sin encontrarte con un anuncio de algún servicio de educación en línea. Esperas el autobus en una parada con tres marquesinas con anuncios de tres ‘apps’ diferentes’ y cuando llega, su carrocería está cubierta de anuncios de otra plataforma más. En el país se ha desatado la euforia por este sector, que movió, solo en 2020, 32.700 millones de euros. El 42,4% de ese negocio corresponde a soluciones orientados a menores de 18 años. Debido a factores educativos, tecnológicos y culturales, China se ha convertido en el gran laboratorio para la educación ‘online’, un experimento que Occidente podría seguir bien de cerca.
En menos de dos semanas comienza el ‘gaokao‘ de 2021, el examen chino de acceso a la universidad, al cual se han apuntado 795.000 personas. Cuando se sienten a hacerlo, los examinados ya habrán pasado un mínimo de 12 años en un sistema en el que una diferencia de unas décimas en la nota supone ser superado por cientos o miles de personas. El ‘zhongkao‘, una suerte de ‘reválida’ que abre las puertas del bachillerato, es menos conocido, pero también muy competitivo. En Shenzhen, menos del 50% de los que realizaron esta prueba en 2019 lograron superarla.
Estas pruebas son solo dos de las puntas de icerberg de un sistema educativo extremadamente competitivo, Algo que empuja a los padres a no escatimar en gastos en formación extra para los menores y darles una ventaja, por pequeña que sea. El banco HSBC realizó un estudio en el que participaron 8.400 padres de 15 países y regiones sobre los gastos de las familias en la educación de los hijos. De los seis territorios donde los padres más gastan en este (Hong Kong, Emiratos Árabes Unidos, Singapur, Estados Unidos, Taiwán y China), cuatro son de cultura asiática.
El hijo de 13 años de Shi Junbo, profesor que vive en la septentrional provincia de Heilongjiang, lleva usando este tipo de apps y plataformas desde que tenía menos de 6 años. Shi cree que «pese a que todos los padres del mundo brindan apoyo a la educación de sus hijos, en Asia oriental, China incluida, se hace un gran hincapié».
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«Los chinos creen en el dicho ‘el conocimiento puede cambiar el destino'», explica Shi a Teknautas, citando la frase recurrente en chino popularizada entre otros por el magnate hongkonés Li Ka-shing. Para Shi, una de las ventajas más obvias de estos servicios es «la posibilidad de que su hijo pueda estudiar a cualquier hora y en cualquier lugar». En efecto, ahorrarse el trayecto a la academia o centro de estudios, considerando las distancias en las ciudades chinas, es un factor atractivo para los padres.
A través estas aplicaciones, su hijo aprendió a reconocer caracteres chinos y matemáticas durante años. En la actualidad, usa dos aplicaciones de forma habitual: una para estudiar inglés y otra para aprender programación informática. Hace unos años, los padres habrían recurrido a clases particulares, academias o escuelas extracurriculares, pero éstos están siendo sustituidos por aplicaciones móviles educativas.
Por supuesto, la pandemia aceleró esta fiebre que ya existía. En 2020, las rondas de financiación de empresas del sector educativo reunieron 14.700 millones de euros. El 89% de la inversión fue absorbido por empresas de educación en línea.
A finales de 2020, estas aplicaciones ya tenían 200 millones de usuarios menores mensualmente, según un informe de FastData. Las hay pensadas para todas las asignaturas. VipKid, que ofrece videoclases de inglés con profesores de Norteamérica, fue una de las pioneras en el año 2013. Conecta a más de 70.000 profesores en Norteamérica con niños y adolescentes chinos. Es la aplicación elegida por Shi Junbo para su hijo y por cuyos serviciospaga unos 8.000 yuanes (1.027€) al año. Así, puede dotar a su hijo de «un entorno lingüístico en inglés auténtico«. Varias aplicaciones como 51Talk siguieron los pasos de VipKid, pero contratando a profesores filipinos y de otros países en desarrollo para abaratar costes.
Algunas ‘apps’ buscan a los docentes de inglés en países en vías de desarrollo para abaratar costes
Si lo que necesita el alumno es mejorar en cualquier otra asignatura, muchos padres recurren a Yuanfudao, empresa respaldada por Tencent que ofrece videotutorías en línea con profesores de varias materias, cursos y otros productos. A finales de 2020, contaba según sus datos con más de 3,7 millones de usuarios de pago y es uno de los mayores unicornios educativos del mundo. Los padres que no tienen tiempo para ayudar a sus hijos con los deberes o cuyo nivel educativo los impide hacerlo pueden acudir a Zuoyebang, aplicación especializada en resolver los problemas y preguntas de los deberes.
Su tecnología permite a los alumnos tomar la foto de, por ejemplo, un problema de matemáticas en sus deberes. La imagen es analizada por el software, el cual halla el razonamiento subyacente y ayuda al usuario a encontrar la respuesta correcta. Este uso de la tecnología artificial por parte de Zuoyebang convenció a grandes inversores como Alibaba y el Vision Fund del grupo japonés Softbank.
Apps para ‘extraescolares’
Algunos padres quieren que sus hijos desarrollen otras aptitudes aparte de las que forman el núcleo del plan de estudios. Desean estimular la creatividad de los hijos y otras habilidades que creen que serán útiles en el mercado laboral del futuro o simplemente quieren que los hijos disfruten y cultiven una afición.
La oferta también es abrumadora: para aprender a tocar el piano pueden hay aplicaciones como Kuaipeilian, VIPSing para clases de canto, Meishubao para aprender a dibujar, Huohuasiwei para desarrollar su razonamiento lógico… Las opciones son especialmente abundantes en campos como el de la programación, con numerosas aplicaciones como Hetao o Code Planet queriendo enseñar a programar a niños de incluso 6 años. De todas formas, no son mutuamente excluyentes. El 58% de los niños y adolescentes que usan estos servicios tienen más de una aplicación de este tipo instalada en sus dispositivos, según el informe de FastData.
Becky Wang, que trabaja en el sector de la educación en línea, tiene otra explicación para el desarrollo de esta industria en China: «no tiene que ver con la cultura china, se debe principalmente al desarrollo de un fuerte sector tecnológico nacional». Dicho sector invierte mucho dinero en tecnologías que serán clave en el futuro como la inteligencia artificial. Según Becky, «el rápido desarrollo de la IA en China permitirá definir un nuevo modelo de aprendizaje. El registro y análisis completo de los datos de aprendizaje de cada alumno y la extracción de conclusiones científicas personalizadas son servicios educativos de los cuales la mayoría de los alumnos todavía no pueden disfrutar», explica a Teknautas. La fuerte demanda de estos servicios no ha pasado desapercibida para Alibaba, Tencent, Baidu…
Todas, mediante sus inversiones, productos propios o aportes tecnológicos, quieren parte del pastel. Bytedance, la empresa dueña de TikTok, ha creado una lámpara inteligente especialmente diseñada para la educación en línea. Aparte de proporcionar luz, trae cámaras, pantallas, vídeo y sonido e incluso corrección de la postura. Vende unas 10 millones de unidades al mes a un precio de más de 120 dólares, nada barato en un país como China.
Recelo del gobierno
Al igual que en el caso de otros sectores que han experimentado un rápido crecimiento en China como la comida a domicilio, las bicicletas compartidas o los préstamos en línea, la educación en línea se ha desarrollado más rápido que la regulación. «El sector no está suficientemente estandarizado. Hay muchos actores irresponsables que no tienen el desarrollo de los estudiantes como prioridad principal», explica Becky. Durante una reunión de la Conferencia Consultiva Política en marzo, el presidente Xi Jinping se refirió al sector educativo extraescolar tanto fuera de línea como en línea como «un problema social» y la Asamblea Popular Nacional lo calificó de «caótico». Uno de los principales problemas es la certificación académica de los profesores, lo que ha conducido a redadas a empresas educativas tanto en línea como físicas para comprobar si los docentes tienen la debida titulación.
Otra causa de preocupación es la propia salud de los estudiantes. Según la Comisión Nacional de Salud, el 53,6% de los niños y adolescentes chino eran miopes en 2018, lo que sitúa a China como uno de los países con mayor prevalencia de este problema. El uso excesivo de pantallas no ayuda y, en el caso chino y de Asia oriental en general, algunos expertos apuntan al excesivo tiempo que pasan en espacios cerrados, frecuentemente estudiando, como una de las principales causas. A las autoridades les preocupan las consecuencias físicas y psicológicas de una presión académica excesiva. Según un informe de 2018 a cargo del instituto de investigación no gubernamental 21st Century Education, la presión académica es la principal causa del 26% de los suicidios entre jóvenes en edad escolar, sólo por detrás de los conflictos familiares.
Para contrarrestarlo, pese a que los detalles varían por regiones, se ha establecido que ningún curso extraescolar, presencial u ‘online’, puede terminar más tarde de las 20.30 y tienen prohibido dejar deberes, práctica que queda reservada sólo a la educación obligatoria. Según la normativa de Pekín, para evitar que los padres hagan un gran desembolso de una vez y minimizar daños de posibles estafas, un pago sólo podrá cubrir un máximo de tres meses de servicio. Se limitan así las ofertas de «pague X por un año de clases». Becky Wang asegura que las regulaciones «beneficiarán a las empresas de mayor calidad», que serán las que tengan más probabilidades de sobrevivir.
Multas, publicidad falsa y ofertas ‘fake’
También existen dudas acerca del modelo de negocio de algunas de estas aplicaciones. A veces, dependen de anuncios cuyo contenido no es vigilado y pueden llegar a mostrar pornografía o contenido no apto para menores para cuadrar sus cuentas. Es habitual también que su sistema de precios y sus estándares educativos no sean completamente transparentes. Este mes, las ya mencionadas Yuanfudao y Zuoyebang han recibido la mayor multa posible (388.000 dólares cada una) por publicidad falsa y descuentos engañosos. Zuoyebang aseguraba en sus anuncios que colaboraba con Naciones Unidas, lo cual era mentira. El hecho de que dos de las empresas más potentes del sector tengan este comportamiento siembra la sospecha de qué no harán las empresas más pequeñas.
Sin embargo, el sector puede usar a su favor su potencial para resolver uno de los temas políticos más delicados en China: la desigualdad educativa. En chino, los que no dominan las matemáticas suelen decir en broma: «era el profesor de gimnasia quien nos enseñaba matemáticas«. Normalmente no se llega a tales extremos, pero en muchas áreas rurales los profesores ciertamente tienen que enseñar varias materias y arreglárselas ante la falta de recursos.
Al preguntar a Shi Junbo, que se encuentra a más de 1.000 kilómetros de Pekín, por qué empezó a contratar servicios de educación en línea para su hijo, la primera razón que da a Teknautas es reveladora: «nos permite tener acceso a la mejor educación del país. En nuestra provincia, no hay oportunidad de acceder a algunos contenidos de calidad en clases presenciales». Becky está de acuerdo: «uno de los objetivos de la educación en línea es reducir la carga de los profesores en áreas remotas». Al preguntarle sobre la excesiva presión educativa, Becky es tajante: «la presión viene de la familia, la sociedad y de uno mismo, una aplicación es tan sólo una herramienta, como un libro. Nadie diría que la producción de libros ejerce una presión excesiva sobre los alumnos». El debate está servido.
China dijo que han quedado atrás los días en que las decisiones globales eran dictadas por un pequeño grupo de países.
China respondió este lunes a una declaración de la cumbre del Grupo de los Siete (G7), la cual el domingo último, bajo la presión de Estados Unidos, criticaron supuestas prácticas anticompetitivas de Beijing y presuntas violaciones de los derechos humanos en la región de Xinjiang.
En este sentido, el Gobierno de China rechazó intromisiones del G7 en sus asuntos internos y aseguró que la época en que un pequeño grupo de naciones decidía sobre los asuntos globales ya terminó
La cumbre del G7, tuvo lugar este fin de semana en Reino Unido, y en la misma, los líderes del grupo abogaron por «contrarrestar y competir» con el gigante asiático en desafíos que van desde «salvaguardar» la democracia hasta la carrera tecnológica.
Un vocero de la legación asiática en Reino Unido subrayó que todos los Estados son iguales, independientemente de que sean grandes, pequeños, pobres o ricos, por lo que «los asuntos mundiales deben tratarse mediante la consulta de todos los países».
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, dedicó un amplio esfuerzo diplomático a lograr una oposición más sólida contra China, un país al que ya contempla como competidor por la hegemonía mundial, pese a la postura más moderada de socios como Alemania, Italia y la propia Unión Europea.
Un portavoz de la embajada china dijo que la posición del G7 contiene declaraciones «tergiversadas», por lo cual instaron «a Estados Unidos, y otros miembros del grupo a respetar los hechos, entender la situación, dejar de calumniar a China, dejar de intervenir en sus asuntos internos de para contribuir al desarrollo de la cooperación internacional, no a la creación artificial de confrontaciones», declaró.
En su opinión, las declaraciones sobre la situación en las citadas regiones [estrecho de Taiwán, Hong Kong y Xinjiang] muestran «las intenciones siniestras de varios países, entre ellos Estados Unidos» y expresó su protesta al respecto.
Cabe recordar que China en repetidas ocasiones desmintió las acusaciones de violaciones de los derechos humanos en las mencionadas regiones.
La legación china en Reino Unido también afirmó que «los orígenes de la pandemia [de Covid-19] no se deben politizar», en respuesta a la petición del grupo de poner en marcha una investigación completa y exhaustiva para dar con los orígenes de la Covid.
El primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, aseguró que los siete países del grupo le darán esa cantidad de inoculaciones al proyecto COVAX, liderado por la ONU, hasta finales del año 2022 para distribuirlas en los países en desarrollo. Otras de las conclusiones de la cumbre están relacionadas con el cambio climático y con las relaciones de Occidente con China.
ANUNCIOS
Este domingo 13 de junio terminó la reunión del G7, la primera que los líderes de esas naciones han tenido de manera presencial desde que empezó la pandemia del Covid-19. Los países del grupo son Alemania, Italia, Francia, Estados Unidos, Canadá, Japón y Reino Unido. Y según Johnson, todos ellos se comprometieron a enviar mil millones de vacunas contra el Covid-19 al mecanismo de COVAX.
“Me complace anunciar que este fin de semana los líderes se comprometieron con mil millones de dosis, un gran paso hacia la vacunación del mundo”, indicó el primer ministro británico. Johnson no precisó cómo aportarán esas vacunas y solo indicó que esto podría ser «directamente o mediante financiación del COVAX».
En ese sentido, el presidente francés, Emmanuel Macron, afirmó que su país duplicará la cantidad de vacunas que tenía pensado enviar a países en desarrollo hasta llegar a las 60 millones de dosis a finales de 2021.
Por su parte, el presidente Joe Biden aclaró que Estados Unidos aportará 200 millones de vacunas este año y otras 300 millones para mitad de 2022.
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Pero el mandatario fue más tajante cuando le preguntaron sobre la liberación de las patentes de la vacuna contra el Covid-19. Este es un debate que está en el panorama mundial pues la liberación de los derechos de propiedad intelectual le permitiría a los laboratorios de otros países que no tienen tantas vacunas recrearlas y producirlas con mayor rapidez. Sin embargo, Johnson dijo que no considera viable liberar las patentes pues el compromiso que ya tienen algunos fabricantes como AstraZeneca es venderlas a costo, sin obtener ganancias.
Otra de las diferencias que se evidenciaron en las ruedas de prensa que dieron los mandatarios de manera individual fue sobre el origen del Covid-19. Johnson, por ejemplo, habló de una enfermedad zoonótica, reforzando la hipótesis de que surgió por un virus transmitido de un animal hacia un humano. Sin embargo, el primer ministro indicó que todavía no tenían mucha información para probar cómo surgió este coronavirus.
En cambio, el presidente Biden enfatizó en que todavía la inteligencia estadounidense no tiene certeza de si la enfermedad “fue o no consecuencia de lo que ocurrió en un mercado, con un murciélago” o si surgió por “un experimento que salió mal en un laboratorio”.
Además, señaló que China “debe empezar a actuar con transparencia”, en referencia a que los expertos de la OMS que indagaron sobre el origen del Covid-19 no tuvieron acceso total a los laboratorios chinos y a la información disponible.
Los periodistas cuestionaron a Johnson por la responsabilidad que tienen las potencias en la lenta distribución de vacunas en muchos de países, principalmente en desarrollo. “Creo que estamos produciendo vacunas lo más rápido que podemos, pero podemos hacer más”, respondió el primer ministro.
El grupo de las siete naciones precisó que para terminar con la pandemia es necesario que el 60% de la población mundial esté vacunada para finales del 2022.
El G7 acuerda un marco para prevenir futuras pandemias
Johnson indicó que los países “deben” trabajar juntos para evitar la “devastación” y, en esa medida, es que el G7 se trazó un acuerdo para prevenir pandemias futuras. El mandatario habló de implementar un “radar global” que “esté dispuesto a descubrir enfermedades antes de que se diseminen”.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, explicó que el sistema todavía está en construcción, pero que la idea es que exista un marco que permita prevenir una pandemia «antes de que se salga de control».
Parte de ese acuerdo incluye fortalecer las capacidades de la Organización Mundial de la Salud (OMS). La intención es que los inspectores de este organismo tengan “poderes similares” a los que tienen los auditores del Organismo Internacional de Energía Atómica (IAEA, por sus siglas en inglés). “Debemos asegurarnos de que los inspectores de la OMS puedan ir a una zona a determinar de manera independiente qué está sucediendo. Tenemos la esperanza de que en el futuro, mucha de esta oscuridad sea disipada”, precisó Johnson.
Según el primer ministro, esto contribuiría a que la OMS pueda investigar qué está sucediendo con las enfermedades a lo largo del mundo para poder tomar medidas y así prevenir una futura pandemia.
Además, el comunicado del G7 señala que la intención es aumentar la capacidad de los laboratorios del mundo, mejorar los sistemas de alerta temprana y recortar el ciclo del desarrollo de vacunas, tratamientos y pruebas para que este pase de 300 a 100 días.
El G7 se compromete a aportar 100.000 millones de dólares para las finanzas verdes
Como ya es costumbre en estas reuniones, el cambio climático también estuvo en el centro de la discusión del G7. Los países hablaron concretamente de su compromiso frente a las finanzas verdes.
Los siete países se comprometieron a movilizar 100.000 millones de dólares estadounidenses por año de aquí al 2025 para ayudar a que los países en desarrollo reduzcan las emisiones de carbono y ejecuten acciones concretas frente al calentamiento global.
Pero una promesa igual se hizo en 2009, cuando los países miembros de Naciones Unidas acordaron contribuir juntos 100.000 millones de dólares cada año hasta 2020 para los países más pobres, muchos de los cuales están lidiando con el aumento de los mares, las tormentas y las sequías empeoradas por el cambio climático. Pero dicho objetivo no se cumplió.
La preocupación ahora es que el nuevo compromiso no detalla cómo las naciones lograrán ese monto, por lo que grupos climáticos criticaron ese punto. Además, aseguraron que los países ricos deberían ser más ambiciosos al momento de aportar a los países en desarrollo.
Otro de los puntos es que, más allá de las finanzas verdes, los países del G7 tienen un compromiso directo con el cambio climático pues tan solo esas siete naciones son responsables del 20% de las emisiones globales de carbono. “En este país comenzó la revolución industrial y es responsable de buena parte del carbono que hay en la atmósfera”, señaló Boris Johnson.
A pesar de ello, no hubo ningún compromiso puntual por parte del grupo. En el comunicado conjunto, solo se comprometieron a “acelerar los esfuerzos para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y mantener el umbral de calentamiento global de 1,5°C”, sin precisar qué acciones tomarían para lograr esa meta que se fija el Acuerdo de París.
Cada país ya había dicho anteriormente que aumentarían sus promesas frente a dicho pacto para 2030 y, en la cumbre del G7, solo enfatizaron en eso sin prometer nada nuevo.
Al respecto, la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, dijo que los líderes del G7 habían acordado eliminar gradualmente el carbón. Pero en el comunicado no precisaron acciones puntuales para lograrlo. “Nos hemos comprometido a ampliar rápidamente las tecnologías y las políticas que aceleren aún más la transición de la capacidad ininterrumpida de carbón, en consonancia con nuestras Contribuciones determinadas a nivel nacional (del Acuerdo de París) y nuestro compromiso de neutralidad de carbono”.
Catherine Pettengell, directora de Climate Action Network, un grupo que reúne varias organizaciones de defensa ambiental, le dijo a Reuters que era alentador que los líderes reconocieran la importancia del cambio climático, pero sus palabras debían estar respaldadas por acciones específicas para recortar los subsidios para el desarrollo de combustibles fósiles y poner fin a la inversión en proyectos como nuevos campos de petróleo y gas, así como en las finanzas climáticas.
Las potencias occidentales le apuestan a la infraestructura para competir con la nueva ruta de la seda de China
El G7 quiere contrarrestar el avance económico que China ha logrado a través de su estrategia ‘The Belt and Road Initiative’. Este proyecto, conocido popularmente como la nueva ruta de la seda, le ha servido al gigante asiático para ganar poder económico en todo el mundo con préstamos y proyectos de infraestructura.
Por eso, el grupo de las siete naciones propuso un nuevo plan de infraestructura global que todavía está en construcción, pero del que ya se sabe que la meta es reducir una brecha de infraestructura de 40 billones de dólares en los países en desarrollo de aquí hasta el año 2035. Ese plan se llama ‘Build Back Better World’ (B3W).
Más allá de la apuesta económica, Occidente quiere ganar terreno perdido en la geopolítica. De hecho, este domingo Biden aseguró que el plan de infraestructura es una “alternativa democrática” a la nueva ruta de la seda.
“Creemos que una manera más ágil de ayudar a las necesidades de países alrededor del mundo es un mecanismo de financiación transparente y basado en valores como la lucha contra el cambio climático, la salud, la tecnología digital, la equidad de género. Todo esto representa los valores que nuestras democracias representan y no la falta autocrática de valores”, expresó el presidente estadounidense.
Y agregó que esto no es una “competencia con China sino con los gobiernos autócratas alrededor del mundo”.
Pese a la postura de Estados Unidos, el lenguaje del comunicado frente a China fue más diplomático. El G7 aseguró que le pedirá a China que “respete los derechos humanos y las libertades fundamentales, especialmente en relación con Xinjiang y aquellos derechos, libertades y alto grado de autonomía para Hong Kong consagrados en la Declaración Conjunta Sino-Británica y la Ley Fundamental”.
Roces entre el líder británico y el mandatario francés en el cierre de la cumbre
El presidente francés, Macron, lanzó un afilo dardo al británico Johnson cuando aseguró que había problemas con los controles fronterizos territoriales al firmar el protocolo sobre Irlanda del Norte, sugiriendo que la región británica no era parte de Reino Unido. «No hay que enviar a la Unión Europea las incoherencias que conocemos desde el principio. Todo el mundo se tiene que calmar», dijo Macron.
Con un tono más sutil para evitar escalar las tensiones, el primer ministro británico restó importancia a las palabras de Macron, pero insistió en que «proteger la integridad territorial» de Reino Unido era trabajo de su Gobierno y que haría lo que fuera necesario para garantizar tal integridad.
El pasado sábado, Johnson amenazó con retirar el protocolo especial para Irlanda del Norte de los Acuerdos del Brexit, que facilitarían el comercio con la única frontera terrestre entre la Unión Europea y Reino Unido.
Los comentarios del francés al respecto de la pertenencia de Irlanda del Norte a Reino Unido molestaron a Dominic Raab, secretario de Relaciones Exteriores británico, quien declaró que las palabras de Macron fueron «ofensivas».
En la era del cambio digital, democrático, social y político, la comunicación se ha convertido en un medio esencial para expresar ideas y desarrollar iniciativas revolucionarias, capaces de crear comunidades más fuertes, mejor informadas y más comprometidas que nunca. El surgimiento del periodismo ético se ha vuelto fundamental para las salas de prensa y es el pilar de las noticias periodísticas que favorecen el desarrollo de la sociedad.
Al comenzar estos cambios, la cuestión del género se vuelve inseparable del tema del progreso y del periodismo ético.
Abordar la violencia de género significa plantear un tema que le concierne a toda la humanidad. Reflexionar acerca de representaciones sesgadas, estereotipos, prejuicios y violencia contra las mujeres y las niñas significa involucrarse en el cambio para que, finalmente, los medios de comunicación cubran esta violencia de forma tal que refleje plenamente las preocupaciones de nuestras sociedades. Indudablemente, este es un objetivo ambicioso para un manual, pero dada la magnitud de este flagelo, se vuelve fundamental cubrir temas relacionados con la violencia de género, a fin de ayudar a los medios de comunicación a que comprendan mejor la escala y la consecuencia de ejercer esta violencia directamente sobre las personas implicadas: niñas, niños, mujeres, comunidad LGBTIi, mujeres periodistas, entre otras.
La violencia ejercida contra las mujeres y las niñas no conoce fronteras geográficas. Si bien el riesgo de padecer violencia es mayor para las mujeres pobres o marginadas, la violencia de género no es una característica específica de ninguna cultura, religión o clase social en particular. Más aún, esta violencia no siempre expresa la dominación masculina. En algunos casos, es ejercida por mujeres. La violencia de género tiene varias formas: agresión sexual, los llamados delitos por cuestiones de “honor”, infanticidio femenino, mutilación genital femenina (MGF), acoso sexual, matrimonios forzados o precoces, trata de personas, violencia en épocas de conflicto, entre otras.
Al ensamblar este manual, el análisis de los artículos periodísticos seleccionados y los informes de televisión y radio revelaron la necesidad imperiosa de ayudar a los medios de comunicación a mejorar la cobertura de temas tan cruciales e injustos como los hechos de violencia contra las mujeres y las niñas. A fin de brindar ejemplos concretos y estudios de casos, los temas cubiertos debieron ser cuidadosamente seleccionados. Este manual no pretende brindar un análisis exhaustivo y completo sobre el tema de la violencia, pero tiene el propósito de ayudar a los profesionales de la radio, la televisión, la prensa y las redes sociales a determinar qué canales de investigación e información serían relevantes y éticos. Por lo tanto, brinda recomendaciones y ejemplos de buenas prácticas a los profesionales que trabajan en los medios de comunicación y a todos aquellos que ya están involucrados en la ética periodística, a fin de ayudarlos a hacer las elecciones correctas en la cobertura mediática de los temas importantes de la Agenda del Desarrollo Sostenible para 2030.
En cuanto a alcanzar el Objetivo 5 del Desarrollo Sostenible (ODS), acerca de la igualdad de género, se ha logrado progresar. Sin embargo, las mujeres y las niñas continúan sufriendo hechos de discriminación y violencia, mientras que la cobertura mediática del tema no refleja la realidad ni la magnitud de este flagelo. Los medios de comunicación pueden crear las condiciones correctas para neutralizar esta violencia y combatirla a través de los artículos periodísticos y de adoptar un compromiso ciudadano. Por lo tanto, la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) desea publicar este manual para brindar a periodistas y a profesionales de los medios de comunicación las explicaciones, definiciones, datos estadísticos y, sobre todo, los recursos y los consejos necesarios para que, de ahora en más, estos temas sean considerados y tratados como violaciones a los derechos humanos.
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