Page 15 of 471
1 13 14 15 16 17 471

Covid-19 evidenció las desigualdades de la Educación en Costa Rica

Centroamérica/Costa Rica/23 Julio 2020/prensa-latina.cu

Las investigadoras del Estado de la Educación Isabel Román y Valeria Lentini afirman hoy que la pandemia de la Covid-19 evidenció aún más las desigualdades entre estudiantes de diferentes regiones de Costa Rica.
En un análisis de los datos del Estado de la Educación, Román y Lentini sostienen que el sistema educativo costarricense siempre ha dejado al desnudo algunas de las desigualdades existentes, principalmente entre la enseñanza pública y privada, pero -añaden- las diferencias también son notorias al comparar centros de una misma provincia.

Antes de la pandemia varios estudios realizados por el Estado de la Educación señalaban que la falta de acceso a recursos tecnológicos y docentes calificados figuraban entre los principales factores asociados a los bajos rendimientos que mostraban los estudiantes que vivían fuera de la Gran Área Metropolitana (GAM).

La GAM abarca los principales centros urbanos de las provincias San José, Cartago, Heredia y Alajuela, donde reside el 60 por ciento de los poco más de cinco millones de habitantes de esta nación centroamericana.

Román y Lentini basan sus conclusiones en cifras oficiales, como las del Ministerio de Educación Pública (MEP), las cuales reflejan que del millón 200 mil estudiantes matriculados en el curso lectivo 2020 y que desde marzo están en las casas por la Covid-19, al menos 500 mil de ellos tienen una mala o nula conectividad a internet.

Además, la Encuesta Nacional de Hogares de 2019 refiere que el 67 por ciento de estudiantes de la Región Central -una de las seis en que se divide socio-económicamente este país- tenía conexión a internet desde el hogar; un 29 por ciento solo tenía acceso a través del celular y un tres por ciento carecía de conexión.

En este mismo parámetro, las regiones Huetar Caribe, Huetar Norte o la Brunca -fueras de la GAM- la conexión a internet desde el hogar rondaba apenas un 40 por ciento, la mitad lo hacía solo por celular y cerca de un 10 por ciento carecía de acceso a la red de redes.

Para las investigadoras, estas brechas en el acceso a los recursos tecnológicos reflejan las desigualdades territoriales históricas del país, asociadas al bajo desarrollo relativo y socio-económico que ha caracterizado a las regiones de la periferia y en el contexto actual, profundizan las diferencias en el de acceso a la educación.

De ahí que, aseveran, sin un acceso universal a la buena conectividad, la profundización de las desigualdades territoriales y educativas son inevitables.

No obstante reiterar que la pandemia ha dejado en evidencia problemas que veníamos arrastrando, las investigadoras consideran que también genera oportunidades inéditas para resolverlos.

‘Hoy más que nunca queda claro que una buena conectividad es un derecho fundamental de todas las personas. Para lograrlo se requiere actuar rápido y con visión estratégica’, concluyen.

Fuente: https://www.prensa-latina.cu/index.php?o=rn&id=383680&SEO=covid-19-evidencio-las-desigualdades-de-la-educacion-en-costa-rica
Comparte este contenido:

Cuba festeja Día de los Niños con la garantía de sus derechos

Centroamérica/Cuba/19 Julio 2020/prensa-latina.cu

Cuba festeja hoy el Día de los Niños con la garantía de sus derechos, en especial el acceso universal y gratuito a los servicios de salud y la educación.
Las celebraciones no tendrán en esta ocasión la masividad de años anteriores, debido a las limitaciones que impone la Covid-19, aunque la isla mantiene controlada la epidemia y ha dedicado especial cuidado a la atención de los infantes.

En ese sentido, el presidente Miguel Díaz-Canel, al referirse el pasado jueves ante el Consejo de Ministros a los logros del país en el enfrentamiento al nuevo coronavirus, destacó que ‘consuela y anima’ que no haya fallecido ningún niño por la enfermedad.

En materia de salud, la isla se encuentra en la posición 35 entre las naciones con la tasa de mortalidad infantil más baja del mundo, con cinco por cada mil nacidos vivos.

Ello se suma a una tasa de supervivencia, en los primeros cinco años de vida, por encima del 99 por ciento, sostenida durante los últimos 20 años, según estadísticas del Ministerio de Salud Pública.

El Programa Nacional de Inmunización garantiza, además, una cobertura de vacunación de casi el 100 por ciento, incluidas vacunas contra 13 enfermedades, entre las que figuran seis que permanecen erradicadas.

En el ámbito de la educación, el pasado mes de junio la Unesco reconoció el liderazgo de la nación caribeña, por la calidad de la enseñanza, la inclusión y en particular por integrar al 99,5 por ciento de los niños menores de seis años al sistema educacional.

La mayor de las Antillas es signataria de la Convención sobre los Derechos del Niño y su Constitución protege a este sector poblacional, para el cual establece el interés superior de los menores en las decisiones y actos que les conciernan.

La Carta Magna igualmente los resguarda contra todo tipo de violencia.

El mandatario cubano, a propósito del Día Internacional de la Infancia, el primero de junio, sostuvo que el Gobierno de la nación caribeña continuará defendiendo los derechos de los niños frente a cualquier circunstancia.

A pesar del bloqueo estadounidense, recrudecido y multiplicado con nuevas medidas, nada ha quebrado la voluntad de acero del país de proteger los derechos humanos y en particular los de los infantes, afirmaron en igual fecha miembros del Parlamento.

Cuba celebra el Día de los niños el tercer domingo de julio, fecha en la cual habitualmente se desarrollan numerosas actividades en todo el territorio nacional.

Fuente: https://www.prensa-latina.cu/index.php?o=rn&id=382814&SEO=cuba-festeja-dia-de-los-ninos-con-la-garantia-de-sus-derechos
Comparte este contenido:

Bolivia: Marcha del magisterio Boliviano

CII-OVE
Miles de maestros y maestras recorrieron la ciudad de la Paz Bolivia, en respaldo a los compañeros en huelga de hambre, quienes ya inician su cuarto de día sin consumir alimentos
A continuación reproducimos el comunicado del magisterio nuestro americano y mundial en apoyo a los y las maestras Bolivianos

EL MAGISTERIO MUNDIAL EN SOLIDARIDAD CON LOS/LAS MAESTROS(AS) BOLIVIANOS EN HUELGA DE HAMBRE CONTRA EL GOBIERNO NEOLIBERAL QUE AMENAZA LA EDUCACIÓN PÚBLICA

En estos momentos maestras y maestros de Bolivia, afiliados a la Confederación de Trabajadores de Educación Urbana de Bolivia han sido forzados a tomar la decisión de ir a una medida extrema de huelga de hambre para denunciar al gobierno que quiere privatizar la educación, atentar contra las históricas conquistas del magisterio, a la par que se ha mostrado insensible ante las demandas sociales en el marco de la pandemia del COVID-19 y se niega a dialogar con el movimiento social. No es una lucha solo del magisterio Boliviano, los padres y madres de familia se han sumado a esta protesta acompañando también la huelga de hambre.

¿Por que ocurre esta situación extrema? Luego de quedar 4 meses fuera de las aulas, el Ministerio de Educación de Bolivia sacó un Decreto Supremo Nº 4260 que pretende ser una respuesta educativa a los tiempos de pandemia, sin embargo, en realidad el mismo tiene el propósito de deslindar las responsabilidades estatales y transferir las mismas a la sociedad civil, que se convierte de hecho, en una forma de privatización de la Educación. Dicho decreto no contempla recursos adicionales del Tesoro General de la Nación, sino que pretende transferir las responsabilidades de actualización tecnológica y acceso virtual a las familias, estudiantes y docentes.

El decreto del gobierno Boliviano habla de una educación virtual sin tomar en cuenta que los estudiantes y padres de familia no tienen recursos económicos para acceder al Internet y para adquirir una herramienta tecnológica (celular, computadora, tablet); de hecho las unidades educativas no cuentan con plataformas digitales educativas.

Los compañeros en conflicto señalan que este decreto va en contra de la Constitución política del estado boliviano, donde se indica que toda persona tiene derecho a recibir educación gratuita e integral en todos los niveles de manera universal sin discriminación y, que la educación constituye una función suprema y primera responsabilidad financiera del Estado.

Por ellos los Maestros, Padres de Familia, Estudiantes bolivianos exigen:

  1. Abrogación del Decreto Supremo 4260
  2. Renuncia del Ministro de Educación Cárdenas
  3. Convocatoria al examen de ascenso de categoría para maestros.

 

Expresamos nuestra solidaridad activa con los y las compañeres en huelga de hambre y con la lucha de todo el magisterio boliviano, a la par que denunciamos ante el mundo la actitud autoritaria y neoliberal del actual gobierno boliviano

Firman

Alfredo Velásquez (Secretario de Relaciones Internacionales del SUTEP, Perú), Fernando Abrego (Asociación de Profesores de la República de Panamá),  Laura Isabel Vargas (presidenta de la Unión Nacional de Educadores, Ecuador), David Lobâo (Coordinador General SINASEFE, Brasil), Pedro Hernández (Comité Ejecutivo de la Sección 9 Democrática, SNTE – CNTE, Ciudad de México, México), Marta Alfonso (Vicepresidenta de FECODE, Colombia), Claudia Baigorria (Federación Nacional de Docentes, Investigadores y Creadores Universitarios, CONADU Histórica, Argentina), Mercedes Martínez (Secretaria General de la Federación de Maestros y Maestras de Puerto Rico), Eduardo González (Movimiento por la Unidad Docente, Colegio de Profesores, Chile) Mariana Scayola Laumann (Secretaria General de ADEMYS, Ciudad de Buenos Aires), Xavier Diez (Vocero ISTEC, Cataluña), Luis Bonilla-Molina (Observatorio Internacional de Reformas educativas y Políticas Docentes), Francisco Torres (Secretario Gremial de la Federación Nacional Docente, FND-CTA Autónoma y Coordinador de Alternativa Docente, ANCLA / MST, Argentina), Colectivo Nuevos Maestros por la Educación (Colombia), Luz Palomino (Centro Internacional de Investigaciones Otras Voces en educación), Fernando Santana/Fernando Lázaro / Ezequiel Alfieri (CEIP-Histórica, Argentina), Laura García Tuñón ( Encuentro entre Docentes y Educadores Populares, ENDYEP, Argentina), Verónica del CID  (Red Mesoamericana de Educación Popular ALFORJA), Jorge Adaro (Secretario General Adjunto de ADEMYS, Buenos Aires, Argentina), Rose Mary Hernández, (Foro Venezolano por el derecho a la educación), Aníbal Navarrete (Regional Bio Bio, Colegio de Profesores, Chile), Lorena Gordillo/ Natalia Ziperovich (Sindicato Unido de Trabajador@s de la Educación, SUTE, Mendoza, Argentina), Diógenes Sánchez (Coalición Panameña por el derecho a la Educación), Yesid González Perdomo (Asociación Distrital de Educadores, Bogotá, Colombia), Facundo Fernández (Comisión directiva de AMSAFE, Argentina), Marco Raúl Mejía (Planeta Paz/Expedición Pedagógica, Colombia), Zuleika Matamoros (Movimiento Pedagógico de Base, Venezuela), Miguel Angel Hernández (SITRAIEMS, México), Federico Gayoso (Secretario General de COAD, Rosario, Argentina), Sandra Lario (Colectivo de Educadores Populares Desde el Sur, Argentina); César Valdovinos (CINPECER, México), Carlos Munevar (Red La Roja, ADE, Bogotá, Colombia), José Hidalgo Restrepo Bermeo  (Movimiento de Integración Democrática, MID, Colombia), Vanesa Gagliardi (Comisión Directiva de ADEMYS, Ciudad de Buenos Aires, Argentina, Legisladora electa de la ciudad), Richard Araujo  (Secretario Adjunto de Políticas Sociales, APEOESP, Sao Paulo, Brasil), Rosa Cañadel (Ex Vocera de Ustec Cataluña), Faustino    (CNTE Nuevo León, México), José Cambra (Docente de la Universidad de Panamá), Andrea Lanzette (SUTEBA Multicolor Lanús y Comisión Directiva de la CTA Autónoma de Lanús, Argentina), Edgard Isch (Docente de la Universidad Central del Ecuador), Erika Candelaria Hernández (Profesora Educación Indígena, Sección XXII, Oaxaca, México),  Grupo de Postdoctorado de Pedagogía Crítica y Educaciones Populares de Monterrey, México,  Luis Sánchez (Asociación de educadores Veragüenses, AEVE, Panamá), Lisa M.Fourier Córdoba (Presidenta UNETE, Endosa), Daniela Pérez Feijoo (Sec. General ADOSAC-PicoTruncado, Santa Cruz, Argentina), Luis Bueno Rodríguez (Coordinación de Relaciones Exteriores de CNSUESIC, México),  Adriana Astolfo (Sec. Adjunta ADOSAC PICo Truncado, Santa Cruz, Argentina), Hugo Aboites (Académico e Investigador en temas de educación, México), Graciela Calderón (Sec. Adjunta SUTEBA La Matanza, Buenos Aires, Argentina,), Daniela Vergara (Sec. DDHH AMSAFE Rosario, Santa Fe),  Angélica Lagunas (por la Minoría Aten Capital, Neuquén, Argentina), Silvia Fernández (Sec. Organización, SUTEBA Tigre, Buenos Aires, Argentina), Betiana Gaggioli (Sec. General ADOSAC San Julian, Santa Cruz, Argentina), Susana Llanos (Sec. Gral de ADOSAC Piedra Buena, Santa Cruz, Argentina), Lourdes Urbáez (Sociedad Venezolana de Educación Comparada). Siguen firmas. Para sumarte a esta declaración escribe a contacto@otrasvoceseneducación.org 

Comparte este contenido:

El magisterio mundial en solidaridad con los/las maestros(as) Bolivianos en Huelga de Hambre contra el gobierno neoliberal que amenaza la educación pública

En estos momentos maestras y maestros de Bolivia, afiliados a la Confederación de Trabajadores de Educación Urbana de Bolivia han sido forzados a tomar la decisión de ir a una medida extrema de huelga de hambre para denunciar al gobierno que quiere privatizar la educación, atentar contra las históricas conquistas del magisterio, a la par que se ha mostrado insensible ante las demandas sociales en el marco de la pandemia del COVID-19 y se niega a dialogar con el movimiento social. No es una lucha solo del magisterio Boliviano, los padres y madres de familia se han sumado a esta protesta acompañando también la huelga de hambre.

¿Por que ocurre esta situación extrema? Luego de quedar 4 meses fuera de las aulas, el Ministerio de Educación de Bolivia sacó un Decreto Supremo Nº 4260 que pretende ser una respuesta educativa a los tiempos de pandemia, sin embargo, en realidad el mismo tiene el propósito de deslindar las responsabilidades estatales y transferir las mismas a la sociedad civil, que se convierte de hecho, en una forma de privatización de la Educación. Dicho decreto no contempla recursos adicionales del Tesoro General de la Nación, sino que pretende transferir las responsabilidades de actualización tecnológica y acceso virtual a las familias, estudiantes y docentes.

El decreto del gobierno Boliviano habla de una educación virtual sin tomar en cuenta que los estudiantes y padres de familia no tienen recursos económicos para acceder al Internet y para adquirir una herramienta tecnológica (celular, computadora, tablet); de hecho las unidades educativas no cuentan con plataformas digitales educativas.

Los compañeros en conflicto señalan que este decreto va en contra de la Constitución política del estado boliviano, donde se indica que toda persona tiene derecho a recibir educación gratuita e integral en todos los niveles de manera universal sin discriminación y, que la educación constituye una función suprema y primera responsabilidad financiera del Estado.

Por ellos los Maestros, Padres de Familia, Estudiantes bolivianos exigen:

  1. Abrogación del Decreto Supremo 4260
  2. Renuncia del Ministro de Educación Cárdenas
  3. Convocatoria al examen de ascenso de categoría para maestros.

 

Expresamos nuestra solidaridad activa con los y las compañeres en huelga de hambre y con la lucha de todo el magisterio boliviano, a la par que denunciamos ante el mundo la actitud autoritaria y neoliberal del actual gobierno boliviano

Firman

Alfredo Velásquez (Secretario de Relaciones Internacionales del SUTEP, Perú), Fernando Abrego (Asociación de Profesores de la República de Panamá),  Laura Isabel Vargas (presidenta de la Unión Nacional de Educadores, Ecuador), David Lobâo (Coordinador General SINASEFE, Brasil), Pedro Hernández (Comité Ejecutivo de la Sección 9 Democrática, SNTE – CNTE, Ciudad de México, México), Marta Alfonso (Vicepresidenta de FECODE, Colombia), Claudia Baigorria (Federación Nacional de Docentes, Investigadores y Creadores Universitarios, CONADU Histórica, Argentina), Mercedes Martínez (Secretaria General de la Federación de Maestros y Maestras de Puerto Rico), Marie Buisson (Secretaria General de la Fédération des métiers de l’éducation, de l’enseignement supérieur, de la recherche, de la formation, de la culture, FERC-CGT, Francia). González (Movimiento por la Unidad Docente, Colegio de Profesores, Chile) Mariana Scayola Laumann (Secretaria General de ADEMYS, Ciudad de Buenos Aires), Xavier Diez (Vocero ISTEC, Cataluña), Luis Bonilla-Molina (Observatorio Internacional de Reformas educativas y Políticas Docentes), Francisco Torres (Secretario Gremial de la Federación Nacional Docente, FND-CTA Autónoma y Coordinador de Alternativa Docente, ANCLA / MST, Argentina), Colectivo Nuevos Maestros por la Educación (Colombia), Luz Palomino (Centro Internacional de Investigaciones Otras Voces en educación), Fernando Santana/Fernando Lázaro / Ezequiel Alfieri (CEIP-Histórica, Argentina), Laura García Tuñón ( Encuentro entre Docentes y Educadores Populares, ENDYEP, Argentina), Verónica del CID  (Red Mesoamericana de Educación Popular ALFORJA), Jorge Adaro (Secretario General Adjunto de ADEMYS, Buenos Aires, Argentina), Rose Mary Hernández, (Foro Venezolano por el derecho a la educación), Aníbal Navarrete (Regional Bio Bio, Colegio de Profesores, Chile), Lorena Gordillo/ Natalia Ziperovich (Sindicato Unido de Trabajador@s de la Educación, SUTE, Mendoza, Argentina), Diógenes Sánchez (Coalición Panameña por el derecho a la Educación), Yesid González Perdomo (Asociación Distrital de Educadores, Bogotá, Colombia), Facundo Fernández (Comisión directiva de AMSAFE, Argentina), Marco Raúl Mejía (Planeta Paz/Expedición Pedagógica, Colombia), Zuleika Matamoros (Movimiento Pedagógico de Base, Venezuela), Miguel Angel Hernández (SITRAIEMS, México), Federico Gayoso (Secretario General de COAD, Rosario, Argentina), Sandra Lario (Colectivo de Educadores Populares Desde el Sur, Argentina); César Valdovinos (CINPECER, México), Carlos Munevar (Red La Roja, ADE, Bogotá, Colombia), José Hidalgo Restrepo Bermeo  (Movimiento de Integración Democrática, MID, Colombia), Vanesa Gagliardi (Comisión Directiva de ADEMYS, Ciudad de Buenos Aires, Argentina, Legisladora electa de la ciudad), Richard Araujo  (Secretario Adjunto de Políticas Sociales, APEOESP, Sao Paulo, Brasil), Rosa Cañadel (Ex Vocera de Ustec Cataluña), Faustino    (CNTE Nuevo León, México), José Cambra (Docente de la Universidad de Panamá), Andrea Lanzette (SUTEBA Multicolor Lanús y Comisión Directiva de la CTA Autónoma de Lanús, Argentina), Edgard Isch (Docente de la Universidad Central del Ecuador), Erika Candelaria Hernández (Profesora Educación Indígena, Sección XXII, Oaxaca, México),  Grupo de Postdoctorado de Pedagogía Crítica y Educaciones Populares de Monterrey, México,  Luis Sánchez (Asociación de educadores Veragüenses, AEVE, Panamá), Lisa M.Fourier Córdoba (Presidenta UNETE, Endosa), Daniela Pérez Feijoo (Sec. General ADOSAC-PicoTruncado, Santa Cruz, Argentina), Luis Bueno Rodríguez (Coordinación de Relaciones Exteriores de CNSUESIC, México),  Adriana Astolfo (Sec. Adjunta ADOSAC PICo Truncado, Santa Cruz, Argentina), Hugo Aboites (Académico e Investigador en temas de educación, México), Graciela Calderón (Sec. Adjunta SUTEBA La Matanza, Buenos Aires, Argentina,), Daniela Vergara (Sec. DDHH AMSAFE Rosario, Santa Fe),  Angélica Lagunas (por la Minoría Aten Capital, Neuquén, Argentina), Silvia Fernández (Sec. Organización, SUTEBA Tigre, Buenos Aires, Argentina), Betiana Gaggioli (Sec. General ADOSAC San Julian, Santa Cruz, Argentina), Susana Llanos (Sec. Gral de ADOSAC Piedra Buena, Santa Cruz, Argentina), Lourdes Urbáez (Sociedad Venezolana de Educación Comparada). Siguen firmas. Para sumarte a esta declaración escribe a contacto@otrasvoceseneducación.org 

Comparte este contenido:

Acceso a la educación de las niñas en Latinoamérica puede retroceder por la pandemia

Redacción: Vistazo

El acceso a la educación de las niñas de América Latina podría «retroceder décadas» debido a la pandemia de la COVID-19 si los Gobiernos «no toma medidas urgentes» que incluyan concienciar a los padres para que garanticen su retorno a las escuelas, alertó este jueves la ONG Plan International.
Plan recordó que la cuarentena decretada por los Gobiernos en los países de la región para frenar la propagación de la COVID-19 ha dejado al 95 % de los estudiantes «alejados de los servicios de educación, con dificultades de acceso a las redes de protección y apoyo social».
«En el caso específico de las niñas, la combinación de factores de riesgo como la violencia basada en género, el embarazo precoz, los matrimonios y uniones infantiles tempranas y forzadas, el asumir las responsabilidades del hogar, la falta de acceso a servicios de salud sexual y reproductiva pueden llevar a que muchas niñas no regresen a las escuelas», dijo la ONG global.
El derrumbe de la economía en América Latina por la pandemia, que la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) prevé hasta de un 8 % en 2020, afectará a la educación de las niñas, ya que muchas familias «han visto la reducción de sus ingresos» y «no podrán costear el valor de los estudios, o dejarán a sus hijas al cuidado de la casa y la familia», explicó la especialista de Plan International, Janaina Hirata.
Es por ello que alertó de que «si los gobiernos no toman medidas de respuesta urgentes, y se hace un trabajo de concientización con padres y madres que garantice que sus hijas retomen el ciclo escolar (…) la brecha de género en términos de acceso a la educación podría ampliarse retrocediendo décadas y dejando atrás lo logros ya obtenidos» en favor de las niñas y adolescentes.
CONSECUENCIAS DE CERRAR ESCUELAS
El aumento de la violencia doméstica en América Latina, embarazos en adolescentes y el riesgo de aumento de los matrimonios y uniones infantiles tempranas y forzadas son algunas de las consecuencias por cerrar escuelas que Plan Internacional señala.
Países como Colombia, El Salvador y Perú han reportado un alza de la violencia doméstica durante el confinamiento, lo que se «espera siga en aumento afectando el bienestar de las niñas y adolescentes», denunció la organización.
La pandemia puede disminuir el financiamiento de programas de salud sexual y reproductiva dirigidos a niñas, adolescentes y jóvenes, con lo cual pueden aumentar los embarazos adolescentes en la región.
Los casamientos forzados y prematuros también pueden incrementarse ya que es otro de los grandes problemas que afrontaba la región antes de la llegada del coronavirus: 1 de cada 4 mujeres jóvenes se casó o unió antes de los 18 años según datos de la organización.
Fuente: https://www.vistazo.com/seccion/mundo/actualidad-mundial/acceso-la-educacion-de-las-ninas-en-latinoamerica-puede-retroceder
Comparte este contenido:

En plena pandemia once presos se recibieron de bachiller en una de las cárceles de Campana, Argentina

Redacción: Infocielo

Son alumnos del CENS N°456 y están alojados en la Unidad 57 del Servicio Penitenciario Bonaerense. Tres lograron el secundario al aprobar Inglés y Sociología, dos con Geopolítica y uno Filosofía, otro Comunicación y Medios y otro Lengua y Literatura. La semana próxima reciben la nota otros ocho estudiantes, por lo que la cifra de egresados llegaría a 19

Aunque la pandemia cambió la rutina de los establecimientos educativos en contexto de encierro, un grupo de privados de libertad alojados en una de las cárceles bonaerenses de Campana obtuvieron su título de bachiller en Ciencias Sociales luego de aprobar el último examen.

El logro académico correspondió a once estudiantes alojados en la Unidad 57 matriculados en el tercer ciclo del CENS N° 456, los que aprobaron su última materia y con todas las medidas de bioseguridad y respetando la distancia social, recibieron en una ceremonia sus respectivas medallas y certificados.

Dentro del programa impulsado por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, denominado “Más trabajo, menos reincidencia”, se establecieron acuerdos con la Dirección General de Cultura y Educación para avanzar con las actividades educativas en las cárceles y garantizar este derecho a los privados de libertad.

Las evaluaciones fueron confeccionadas por los docentes de cada materia, en el marco del Plan de Continuidad Pedagógica que permite mantener las actividades educativas en épocas del aislamiento social preventivo obligatorio por la pandemia de Covid-19.

De los once, dos aprobaron Geopolítica, uno Filosofía, tres Inglés, uno Comunicación y Medios, tres Sociología y uno Lengua y Literatura.

Gabriel tiene 19 años, es de san Miguel y está detenido por robo desde hace 20 meses. “En la calle llegué hasta quinto año, pero por ambición dejé la escuela y me puse a robar. Ahora, acá en la cárcel pude reflexionar de lo que hice”, dijo el flamante egresado.

“Acá en el penal me decidí a terminar la secundaria y ya soy bachiller. Agradezco a los docentes y a las autoridades penitenciarias por esta posibilidad. Mi idea es poder estudiar Ingeniería cuando recupere la libertad”, agregó Gabriel, quien se recibió al aprobar con 6 Geopolítica.

Este viernes ocho internos más rindieron las materias vía on line, por lo que la cifra de egresados podría ascender a 19. Las notas van a estar la semana próxima.

Cumplimiento del protocolo

Para rendir las materias se implementaron todas las medidas preventivas vigentes indicadas por protocolo sanitario como el distanciamiento apropiado y el uso de barbijo, y se distribuyeron las pruebas en dos salones de la escuela, para los alumnos de un mismo pabellón, en tanto que para aquellos que estaban en otros pabellones se les administró los exámenes de forma individual.

Esta tarea se llevó adelante en forma conjunta entre las autoridades docentes y el personal penitenciario que representado por la coordinadora de Educación y Cultura de la Unidad 57 Patricia Marra, se encargó de supervisar los exámenes en estrecha relación remota con las autoridades educativas.

En ese sentido la coordinación educativa del Servicio Penitenciario Bonaerense, dependiente de la Subdirección General de Educación, con el respaldo del director de Unidad 57 Gastón Collado, se considera un enlace necesario y fundamental para lograr el desarrollo exitoso del Plan de Continuidad Pedagógica, al actuar de nexo permanente para viabilizar el acceso de los estudiantes a las tareas y actividades diagramadas por los docentes, con un seguimiento diario y su posterior devolución para la revisión de las mismas por parte de los profesores.

Por último, también se les tomó examen a los alumnos que debían rendir la tercera mesa evaluatoria para promocionar de año, ubicándolos en el año que corresponde y así realizar la tarea educativa necesaria específica a través de los cuadernillos y/o tareas que remiten sus profesores.

Asimismo, se destaca que desde que comenzó la cuarentena se puso en práctica una nueva modalidad educativa en la que los docentes sostienen el vínculo con sus alumnos a través de un envío semanal que se puede sintonizar en una FM local, donde les comparten el contenido educativo de cada materia.

Fuente: https://infocielo.com/nota/119707/en-plena-pandemia-once-presos-se-recibieron-de-bachiller-en-una-de-las-carceles-de-campana/

 

Comparte este contenido:

Ecuador: la educación online desde casa es imposible e injusta

América del sur/Ecuador/18 Junio 2020/elpais.com

Un 70% de estudiantes tiene dificultad en el acceso a la enseñanza en línea en el país andino. La carencia de teléfonos inteligentes o Internet, la caída de ingresos y la falta de capacitación impiden la normal formación de millones de niños durante la pandemia. Padres, madres y profesores lo cuentan

Cuando la pandemia de covid-19 empujó la educación virtual en Ecuador, Anita Gualichico, madre de tres estudiantes, taxista de día y costurera de noche, tuvo que comprar un smartphone con mayor capacidad que el suyo para descargarse las aplicaciones que le pedían los profesores de sus hijos. Fueron 300 dólares que resolvió pagar a plazos. También tuvo que destinar uno o dos dólares para las recargas diarias y, cuando vio que eso era demasiado para su bolsillo, le propuso a su vecina, que tenía Internet fijo, compartir la cuota mensual de casi 30 dólares que cuesta el servicio.

Otro revés para esta madre de 37 años, que vive en el valle que colinda con Quito, fue no tener una impresora en su casa. Los primeros días dibujaba muchas de las actividades, sobre todo las de su hija de cinco años, pero desde que el centro de computadoras del barrio volvió a abrir, acumula las tareas de sus hijos y va a imprimir una vez por semana. Siempre encuentra una fila larga de otros padres. La espera suele ser de casi una hora. Gualichico se mantiene con su mascarilla casera y su cabello recogido.

—¿Cómo ve la educación a distancia?

—Yo a ratos no le veo bien, porque todos no tenemos las facilidades. A veces si me siento mal, en la noche me pongo a pensar si pudiera comprar la computadora y la impresora, no tuviéramos que estar así, pero la situación económica no nos da para endeudarnos más ahorita —dice Anita, y comenta también las dificultades que tiene para guiar a sus hijos con la tareas—. Nos toca tomar el tiempo de estar leyendo con tranquilidad para resolver, sí resulta complicadito. Las matemáticas es lo que más me cuesta, eso de las divisiones, la raíz cuadrada, una ya no se acuerda. Igual con mi chiquita, los fonemas, yo pronunció de una forma y ella me dice que no es así, que la profesora le explicaba de otra manera.

Llevar la escuela a la casa no ha resultado fácil en Ecuador. La ministra de Educación, Monserrat Creamer, ha reconocido que un 70% de estudiantes tiene dificultad en el acceso a la educación en línea, pero los datos estaban allí desde 2018: el porcentaje de hogares con acceso a Internet es de 37,17% a nivel nacional y baja al 16,07% en el área rural, según el Instituto de Estadísticas y Censos.

El ensayo del aprendizaje virtual en el país andino comenzó el 13 de marzo. Hasta ese momento se había evaluado el primer quimestre del año escolar. Casi dos millones de estudiantes de la sierra y el oriente del país cambiaron de modalidad abruptamente y deberán terminar el año escolar a distancia. Los alumnos de la costa, que suman algo más de dos millones y medio, se unieron al experimento en mayo.

El Ministerio de Educación informó que hasta el 18 de mayo hubo un flujo de casi 850.000 usuarios activos en su plataforma, que tiene 1.200 recursos educativos para reforzar los conocimientos. Andrés Bedón, director de tecnologías para la enseñanza en la Cartera de Educación, estima que los usuarios se duplicarán a partir de junio, con la incorporación de los estudiantes de la costa. Aún así es evidente que no todo el universo de los estudiantes en Ecuador (4,6 millones) visita la plataforma. La apuesta de las autoridades es la tele y radio educación, pero esta alternativa tampoco llega a todo el territorio. Hasta la casa de Gualichico, rodeada de campos de maizales, corrales de animales y caminos empedrados, no llega la señal de televisión. La radio sí, pero esta madre no tiene suficiente información.

—Los profesores nos mandaron un mensaje al celular diciéndonos de las clases por televisión y radio, pero no fue desde el principio. Además donde yo vivo no me coge bien la señal de la televisión, solo salen esas rayitas… Tendríamos que poner una antena arriba de la casa para coger un poquito de señal. La radio sí coge, pero en cambio no sé qué emisoras buscar para la educación.

El cierre de las escuelas también impactó a los 200.000 docentes que tiene Ecuador. La instrucción que dio el Ministerio de Educación a los docentes fue que usaran una plataforma llamada Team, pero no hubo ninguna capacitación previa. Susana Ponce, de 39 años, maestra de una escuela pública de Tulcán, ciudad fronteriza entre Ecuador y Colombia, hizo como muchos profesores:  crear grupos de WhatsApp para comunicarse con los padres de familia y enviarles las tareas.

—¿Qué opina de la disposición del Ministerio de Educación?

—Ellos se imaginan que todos tenemos capacidad de tener un Internet fijo, que la conectividad es excelente, que todos manejamos las plataformas, pero la realidad de nuestro medio es muy diferente. Ya es complicado para nosotros como docentes, mucho más para los padres de familia.

Los 21 alumnos de Susana deberían aprender a leer, escribir, sumar y restar en este año escolar, pero algunos están lejos de alcanzar esas metas. Menos aún cuando sus padres se conectan con menos frecuencia al WhatsApp.

—No avanzan al mismo nivel que en el aula. Los papitos no tienen la pedagogía o la paciencia para indicarles. A los papitos les pido que les pongan a sus hijos al teléfono, para ver si pueden leer y están todavía quedaditos.

El director de la escuela de frontera, Carlos Enríquez, está al tanto de las familias que dejan de comunicarse y dedica un par de días de la semana para llevar las tareas impresas hasta el domicilio de los estudiantes que han dejado de hacerlas. Va, sobre todo, al área rural donde evidencia que las familias tienen necesidades más apremiantes que la educación de sus hijos. «Los padres me dicen: ‘Señor director, ya no tenemos ni un dólar para poner recargas’. Ellos prefieren invertir ese dólar en alimentación», cuenta el docente. «Vemos gente muy pobre, por eso también estamos procuramos recoger víveres para llevarles».

En las comunidades indígenas y campesinas es más difícil seguir la educación virtual. Los padres de familia escasamente han completado algunos niveles de la educación básica. Tampoco pueden descuidar sus cultivos ni sus animales para ocuparse de las tareas de sus hijos. En estos casos, se espera que los profesores hagan un esfuerzo extra para que los estudiantes no desconecten de la escuela. Mercedes Curichimbi, profesora indígena de 40 años, explica una vez por semana las tareas en un grupo de WhatsApp y se toma el tiempo de llamar por teléfono convencional a los padres que no tienen un teléfono inteligente.

«Mi forma de trabajar es la siguiente: yo envío los lunes en la mañana la actividad y ellos mandan antes del fin de semana. La comunidad está a dos horas del pueblo más cercano y una persona sale los viernes para hacer la recarga de todos. Yo conozco la realidad de allá, hay una señora que tiene tres hijitos y no tiene esposo ni teléfono inteligente, a ella todos los lunes le doy las tareas a través de una llamada telefónica, uno a dos horas me toma. No quiero que ningún niño por la economia o la distancia quede perjudicado», explica. .

—¿Sus alumnos están siguiendo las clases por radio o televisión?

—La frecuencia no alcanza a esas comunidades tan alejadas y ellos no están como nosotros en la ciudad, quedando hasta muy de día en la casa. Ellos van a las tres o cuatro de la mañana a ordeñar la vaca, a deshierbar la chacra… Es dificil decirles que se queden en la casa para que oigan la radio. Gracias a ellos tenemos la comida en la ciudad.

Durante la entrevista, Mercedes comenta también su desazón por la reducción del salario que ha anunciado el Gobierno central por la situación económica que atraviesa el país. Hasta ahora los docentes ganaban 817 dólares, pero con la reducción ganarán unos 100 dólares menos. La maestra indígena, además, se queja de que en los dos últimos meses han recibido el salario con 20 días de retraso. «Eso nos perjudica, de nuestro bolsillo sale para el Internet, las llamadas, el transporte, el vestuario, pero hay que seguir».

Varias voces ya hablan del fracaso de acelerar la educación virtual en medio de la pandemia por la covid-19. “Ningún país estaba preparado para implementar un sistema nacional de educación virtual operando desde el hogar. La pandemia ha expuesto al rojo vivo los enormes déficits e inequidades tecnológicos y sociales que existen en el mundo y dentro de cada país”, dice Rosa María Torres, pedagoga e investigadora ecuatoriana. La Unesco ha alertado que la mitad del total de los alumnos en el mundo (unos 826 millones) no tienen acceso a una computadora en el hogar y el 43% (706 millones) no tienen Internet en sus casas. Además, a pesar de que mediante los teléfonos móviles los estudiantes pueden acceder a la información y conectarse con sus profesores, unos 56 millones de alumnos viven en lugares donde no llega la cobertura de las redes móviles.

La Unesco también llamó la atención sobre la formación que requieren los maestros para impartir eficazmente la educación a distancia y en línea, pero ese apoyo es particularmente escaso en los países de bajos ingresos. “Son temas críticos en toda la región la falta de preparación y experiencia docente en el manejo del mundo virtual”, opina la investigadora ecuatoriana. Esto se agrava en el caso de Ecuador donde la enseñanza de informática o computación salió del currículo escolar en 2015. Al hilo de eso, un grupo de profesores de esa asignatura, en abril pasado, hizo un pedido formal a las autoridades para que revisen esa decisión. En la carta se señala que el manejo de las nuevas tecnologías quedó a discreción de cada centro educativo y eso ha contribuido a los problemas que ahora enfrentan alumnos y profesores para manejar los dispositivos electrónicos necesarios para la educación virtual.

La autoridad educativa en Ecuador considera que un 7% de la población estudiantil no tiene acceso a nada. Eso equivale a unos 320.000 estudiantes. “Hay muchas lecciones que nos deja la pandemia y esto nos obliga a fortalecer esas deficiencias para repensar este proceso de enseñanza”, dice el funcionario de Educación consultado para este reportaje. “Las tareas que a futuro tiene el ministerio son fortalecer el sistema de tele-educación y radio-educación y mejorar los contenidos digitales abiertos, la conectividad y las competencias digitales de los docentes”.

Todavía no está claro en el país andino cómo será la calificación final de los estudiantes que desconectaron a mitad del año lectivo. De momento deben presentar un portafolio con los trabajos hechos. Torres opina que no debería haber un criterio punitivo en la evaluación final. “Sería un error monumental, penalizar a los estudiantes que no saben suficiente. Los profesores han hecho lo que han podido y los padres más de lo que han podido”.

Los problemas para seguir la educación a distancia no son exclusivos de las periferias, las fronteras o las comunidades indígenas o campesinas de Ecuador, en Quito hay estudiantes que han quedado rezagados por sus circunstancias familiares. En el seno de una familia venezolana, que vivía de la venta ambulante de productos de limpieza, dos estudiantes, de 12 y 14 años, no han podido continuar con su educación. Cuando la pandemia confinó a los adultos de la casa, fue imposible contar con los recursos para sostenerse. Lograron quedarse en la vivienda que alquilaban en el sur de la ciudad, por un acuerdo con la casera, y mantuvieron los servicios básico por la orden gubernamental de no cortarlos mientras dure la crisis. Pero la conexión a Internet empeoró.

«Tengo Internet, pero es malísimo. Las clases de Zoom no las agarra, los videos tampoco. En estos últimos meses solo un teléfono puede conectarse. Tenemos tres meses ya atrasados, debe ser por eso que no está bueno. Dejamos de cancelar por el tema de la pandemia, ahorita hay prioridad en la comida», relata Dayanira Blanca, 40 años, madre de las dos adolescentes. «Las clases de zoom no las descarga en el teléfono de mi esposo que no es tan bueno y nos perdemos las explicaciones del profesor».

El grupo familiar ingresó al país hace un año. Dayanira Blanca llegó primero con cuatro de sus cinco hijos, a los 15 días llegó su esposo y, un mes más tarde, su hija mayor con sus dos niñas y el esposo. Desde el día uno, esta familia numerosa hizo todo lo posible para arraigarse. La educación de las dos adolescentes fue una prioridad. Dayanira consiguió cupo para sus dos hijas, aunque en distintos centros educativos. Al final del primer quimestre, esta madre cuenta que solo una de ellas se había adaptado a la escuela ecuatoriana y fue más fácil conectar con sus profesores.

«Contactamos con una compañera de mi hija por Facebook y esa niña me dio el número del papá que creó el grupo de WhatsApp y nos incluyeron», cuenta Blanca. «La profesora de mi otra hija me llamó un día, me pidió el numero de Whatsapp, el correo y los datos de identificación de mi niña, pero no me volvió a llamar ni me ha mandado nada al correo. Intenté llamarla, pero parece que se comunicó desde una cabina y no hay forma», prosigue.

Diego Chango, de 30 años, obrero de la construcción y padre de dos niños de seis y ocho años, tampoco ha podido seguir el ritmo de la escuela virtual. Al igual que la familia venezolana, en su casa solo cuentan con un teléfono inteligente y hacen recargas semanales para recibir los deberes. «Trato de estar al día con los deberes de mis hijos, busco conexión a WiFi para mandar los deberes, pero no siempre lo consigo», dice este padre que dejó de percibir ingresos al igual que su esposa, que se dedicaba a cuidar carros en las calles. Ahora ambos venden frutas en las calles del sur de la ciudad y cuando pillan una señal de WiFi abierta, en alguna plaza o estación de autobuses, se detienen para tratar enviar los deberes de sus hijos.

Fuente: https://elpais.com/elpais/2020/06/12/planeta_futuro/1591955314_376413.html

Comparte este contenido:
Page 15 of 471
1 13 14 15 16 17 471