África/13 de Marzo de 2017/es.rfi.fr
Las Naciones Unidas estiman que la crisis humanitaria actual es la peor en el mundo desde la Segunda Guerra Mundial, especialmente en Yemen, Somalia, Sudán del Sur y Nigeria, cuatro países en guerra donde 20 millones de personas corren el riesgo de padecer malnutrición y hambruna.
Ante el Consejo de Seguridad, el subsecretario general y jefe de las operaciones humanitarias de la ONU, Stephen O’Brien, hizo un llamado urgente a la movilización, reclamando 4.400 millones de dólares a la comunidad internacional de aquí a julio para “evitar una catástrofe”.
“Naciones Unidas lanza una advertencia, el mundo enfrenta su peor crisis humanitaria desde del final de la Segunda Guerra Mundial, con más de 20 millones de personas confrontadas al hambre y a la inanición en cuatro países», declaró.
“Sin esfuerzos colectivos y coordinados globalmente, la gente simplemente morirá de hambre. Muchos otros sufrirán y morirán de enfermedades. Los niños tendrán retrasos (de desarrollo) y faltarán a la escuela. Los medios de existencia, el futuro y las esperanzas se habrán perdido”, advirtió O’Brien
Actualmente, Yemen es escenario de la “peor crisis humanitaria en el mundo”. Dos tercios de sus 18,8 millones de habitantes necesitan asistencia y más de 7 millones “ignoran de dónde provendrá su próximo alimento”, indicó el responsable, recordando los desplazamientos masivos de la población debido a los combates entre fuerzas gubernamentales y hutíes.
Los recientes acuerdos entre los dos bandos permitieron el ingreso de una ayuda alimentaria para 4,9 millones de personas los últimos meses.
“Sin embargo, todas las partes del conflicto se niegan arbitrariamente a dar un acceso durable a los trabajadores humanitarios y utilizan la ayuda con fines políticos”, declaró O’Brien.
El responsable estimó que hacen falta 2.100 millones de dólares para ayudar a 12 millones de personas y anunció una conferencia a nivel ministerial el 25 de abril en Ginebra, en presencia del secretario general de la ONU, Antonio Guterres, para recaudar los fondos.
En Sudán del Sur, O’Brien encontró “la situación “peor que nunca” debido a la guerra civil que azota al país desde diciembre de 2013, y consideró que las partes beligerantes son responsables de la hambruna en el país.
Más de 7,5 millones de personas necesitan ayuda humanitaria, es decir 1,4 millones más que el año pasado, en este país con 3,4 millones de desplazados.
En Somalia, más de la mitad de sus 6,2 millones de habitantes requieren asistencia y protección, incluidos 2,9 millones amenazados por la hambruna.
Cerca de un millón de niños menores de cinco años sufrirán este año malnutrición grave, detalló O’Brien.
Somalia está en declive después de casi tres décadas de caos y violencia entre milicias de clanes, bandas criminales y la insurrección de islamistas shebab.
“Lo que vi y escuché durante mi visita a Somalia fue abrumador, las mujeres y los niños caminan semanas para buscar comida y agua”, indicó.
“Perdieron su ganado, sus fuentes de agua potable se secaron y no les queda nada para sobrevivir”.
Entre tanto, el noreste de Nigeria, foco de una insurrección de los islamistas de Boko Haram desde 2009, está golpeado por el calentamiento climático y es víctima de la mala gobernanza.
Más de 10 millones de personas requieren ayuda humanitaria, de las cuales 7,1 millones enfrentan una “grave precariedad alimentaria”, señaló O’Brien.
Durante la conferencia de Oslo sobre Nigeria y su vecino Chad el mes pasado, los donantes anunciaron donaciones por 672 millones de dólares, muy por debajo de los 1.500 millones de dólares solicitados.
Fuente: http://es.rfi.fr/general/20170312-el-mundo-sufre-la-peor-crisis-humanitaria-de-las-ultimas-decadas-dice-la-onu