Cuba / 21 de abril de 2019 / Autor: Freddy Pérez Cabrera / Fuente: Granma
La nueva escuela especial para infantes con discapacidades físico-motoras de la región central de Cuba, remodelada especialmente para este fin, se unirá a la Solidaridad con Panamá, en La Habana; y a la que se construye en Santiago de Cuba, con las cuales se refuerza la calidad de la atención sicopedagógica y físico social a todos los niños que en la nación merecen un trato especial, atendiendo a sus limitaciones y discapacidades
A punto de iniciar sus actividades se encuentra la nueva escuela especial para infantes con discapacidades físico-motoras de la región central de Cuba, ubicada en lo que fuera el internado Marta Abreu, de Santa Clara, la tercera de este tipo con que contará el país, cuya matrícula será de 120 alumnos.
Con su apertura en los próximos días se da continuidad a las muchas obras de infinito amor ejecutadas por la Revolución en estos 60 años, en especial aquellas edificadas en bien de su más preciado tesoro, los niños, que como dijera nuestro Héroe Nacional José Martí, son los que saben querer.
La edificación, remodelada especialmente para este fin, se unirá a la Solidaridad con Panamá, en La Habana; y a la que se construye en Santiago de Cuba, con las cuales se refuerza la calidad de la atención sicopedagógica y físico social a todos los niños que en la nación merecen un trato especial, atendiendo a sus limitaciones y discapacidades.
Más que una escuela, un palacio
Lo que otrora fuera el internado Marta Abreu, se transformó desde agosto del pasado año en un hervidero de trabajo a fin de acometer la reparación capital del centro, lo cual ha incluido varios y complejos objetos de obra, según la explicación brindada por José Basilio Nováez Cabello, contratista principal de la inversión.
Para la Empresa de Proyectos de Arquitectura e Ingeniería de Villa Clara (Emproy), la obra constituyó un verdadero reto, para lo cual laboró un equipo multidisciplinario que tuvo a su cargo la realización de las modificaciones de una instalación cuya construcción data de 1948, explica Nováez, quien añade que para tal fin fueron convocados un grupo de 16 arquitectos e ingenieros de dicha entidad.
«Hemos tenido que acondicionar aulas, baños y dormitorios, esquivando cualquier barrera arquitectónica que pueda limitar el movimiento de los niños, además de trabajar en la construcción de un anfiteatro y en las áreas deportivas, pues se contará con un gimnasio y espacios para la debida rehabilitación de los infantes», asegura el especialista.
Asimismo, se identificaron las variantes de solución en cuanto al abasto de agua y el sistema de distribución, cuestión esencial en este tipo de instalación, lo que ha exigido cambios como la construcción de un tanque elevado y la implementación de una red de agua caliente con calentadores solares en cubierta, explica.
También se acometió el desmontaje de toda la carpintería de madera existente, la demolición de algunos muros y la sustitución parcial o total de los pisos en malas condiciones, además de la reparación e impermeabilización de las cubiertas y las redes técnicas de electricidad e hidrosanitarias, entre otras acciones desarrolladas por las empresas de Construcción y Montaje, la de Abastecimiento y Servicios a la Educación (Epase), la Geominera del Centro, la de Automatización Integral (Cedai) y la Constructora de Obras de Ingeniería (Ecoing 25).
A la par, se han acometido diversas acciones de decoración en paredes e instalaciones, que incluyen la colocación de cuadros y murales, así como la ambientación de espacios mediante la siembra de plantas y la utilización de macetas con plantas ornamentales, piezas escultóricas u otras que permitan realzar la belleza de la escuela.
El sueño realizado de Xiomara
La máster Xiomara Perdomo Rodríguez tendrá el honor de dirigir la escuela especial de Villa Clara, y lo hará con la sensibilidad de quien ha vivido muy de cerca los avatares de la discapacidad de su hermano y la experiencia de muchos años de dedicación a esa tarea.
«Me parece un sueño ver concretada esta obra, que era un anhelo de Fidel», nos dice emocionada Xiomara, quien reconoce que muchas veces se despierta en medio del sobresalto de estos días de tensión y le parece que no es posible que en tan poco tiempo ya la escuela sea una realidad.
«Aquí recibiremos alumnos de las cinco provincias centrales, desde Cienfuegos hasta Camagüey, con el objetivo principal de devolverlos en el plazo más breve posible a la enseñanza general, luego de que logren la máxima rehabilitación física posible y su estabilidad sicológica», explica.
Añade que allí se atenderán unos 120 niños en total, de los cuales 48 serán internos, en lo fundamental quienes residen en los municipios de Villa Clara y las provincias más lejanas; el resto tendrá la posibilidad de asistir de forma seminterna, o sea, irán a diario a sus casas con un transporte garantizado por la escuela.
Respecto al personal técnico-docente que laborará en el centro, Perdomo Rodríguez explica que se trata de profesionales con una alta calificación, con experiencia en esta tarea y que han sido seleccionados en diferentes centros de enseñanza de la provincia, el cual estará integrado por maestros, profesores de secundaria básica, computación y Educación Física, además de contar con especialistas en logopedia, rehabilitadores, sicopedagogos y bibliotecarias, entre otros especialistas.
Otra facilidad de la que podrán disponer los pequeños será la presencia permanente de médicos, enfermeras y la atención estomatológica, así como un cuerpo de veladoras que los cuidarán en los dormitorios por la noche.
La obra, ejecutada a un costo superior a los seis millones de pesos en ambas monedas, ya concluyó en su parte civil e inicia su puesta en marcha el próximo 20 de abril, cuando comenzarán a entrar los primeros niños al centro.
Previo a este inicio, se produjo un proceso de indagación e intercambio de experiencias en hospitales y escuelas de su tipo en el país, expone Xiomara, quien reconoce que todo ello contribuirá a que quienes acudan allí alcancen el máximo desarrollo de sus potencialidades y la mayor autonomía personal para su posterior integración familiar, escolar, laboral y social.
En Contexto
En 1962 se creó el Departamento de Educación Especial, preludio de esta enseñanza en el país, que desde entonces se ha sometido a constantes transformaciones para situarla a la altura de las necesidades de cada época y de los cambios en la pedagogía.
La Educación Especial en Cuba se sustenta bajo los mismos principios de la educación general y hoy redimensiona su papel, porque trabaja para la atención a niñas, niños y adolescentes con necesidades educativas especiales en cualquier contexto en el que se encuentren.
La no obligatoriedad del ingreso a los centros de la enseñanza especial –más allá de que, por su reconocimiento, se identifiquen por las familias como escenario ideal–, y el carácter eminentemente de tránsito reflejan el enfoque inclusivo que se le ha dado.
Fuente de la Noticia:
http://www.granma.cu/cuba/2019-04-15/nueva-escuela-para-los-que-saben-querer-15-04-2019-20-04-26
ove/mahv