El problema de las “Competencias” en la Educación

México / 12 de agosto de 2018 / Autor: Juan Carlos Miranda Arroyo / Fuente: SDP Noticias

Este lunes, en que este gentil espacio publicó mi comentario titulado: “SEP: Discutir la noción de “Competencias Educativas” (SDP Noticias, 6 de agosto, 2018), recibí algunos comentarios interesantes en redes sociales sobre el contenido del texto, mismos que comparto y comento a continuación.

Ayer, entre otros, la doctora Laura Frade escribió, vía Twitter: “El autor del artículo cuenta con muchas imprecisiones teóricas, históricas y filosóficas sobre la noción de competencia y sobre el propio modelo educativo 2017 que las desdibuja. Aprendizaje clave NO es igual que competencia. Desde ahí el error en su interpretación.”

Esta fue mi contestación: “Gracias por su interés, doctora. Nunca, en el texto, afirmo que ´aprendizajes clave´ sea igual a ´competencia´. Esa confusión la genera el propio texto oficial (ver glosario del Modelo Educativo 2017). Sobre las imprecisiones, le sugiero lea mi texto del 2013.” (Me refería al ensayo publicado hace cinco años, que lleva por título: “La noción de “Competencias” en la Reforma de la Educación Básica en México (2009-2011): Limitaciones y alternativas”, donde expongo, entre otros aspectos, un recorrido histórico acerca de la evolución de ese concepto. (1)

No se trata de desdibujar nada. Más allá de las definiciones o categorías teóricas o filosóficas (que han sido abordadas a profundidad por diversos autores y para lo cual hay sus respectivos espacios de debate), considero que lo importante del comentario publicado el lunes, es resaltar la actitud crítica; es decir, el hecho de que los docentes, directivos y asesores de Educación Básica, durante sus jornadas de actualización y formación continua, justamente, estén dispuestos a discutir, analizar, ponderar o valorar los presupuestos teóricos, filosóficos, históricos y metodológicos que “hay detrás” de los ideas que fueron seleccionadas por los asesores de la SEP (2016 y 2017), y que han servido de base para dar soporte tanto al Modelo Educativo (vigente) como al formato para trazar el diseño del plan y los programas de la Educación Básica, aprobados oficialmente en México (con el enfoque “competencial”). Esto incluye el análisis de los documentos de gobierno que toman como fuente dichos materiales impresos (como las Guías).

Pienso que el problema de la noción o concepto de “competencias” en la educación, es un asunto que comprende, entre otras interpretaciones, dos tipos de miradas: La primera, que adopta una concepción integracionista, “…que observa a la totalidad del educando, no lo divide en partes, como tampoco divide al conocimiento en disciplinas”(misma concepción que propone y defiende la Doctora Frade); y la segunda, que sugiere una visión “fragmentaria” sobre las competencias (criticada con argumentos por la misma Dra. Frade, cuando se refiere al Modelo Educativo 2016), que consiste en una “visualización del aprendizaje como cambio estrictamente cognitivo, (que) descarta a las competencias como médula central de la educación…”. ¿Cuál es la diferencia entre una y otra mirada? Por lo que alcanzo a observar, al revisar un ensayo reciente de la propia Dra. Frade (2), ella defiende al modelo “integral” que sobre las “competencias” sustentaba al Acuerdo 592 de la SEP, en 2011. Y critica al enfoque “fragmentario” de la propuesta oficial actual (Modelo Educativo 2016-2017); ambas concepciones fueron adoptadas por diferentes equipos de asesores de la SEP, según la coyuntura generada en cada caso.

Quizá lo más interesante de toda esta cuestión, es observar cómo ha evolucionado este concepto (de “competencias” en la educación) durante los procesos de formulación, revisión y rediseño de los contenidos y métodos educativos en los diferentes contextos de las Reformas Educativas en México. A reserva de realizar un estudio socio histórico más detallado, sistemático y riguroso al respecto, lo que queda claro es que en la escena del diseño curricular mexicano, han tomado el “poder” o la “hegemonía” dos o más diferentes equipos de expertos o asesores, mismos que han estado, con sus diferentes versiones, matices y aproximaciones sobre este concepto, cerca o dentro del círculo más próximo, íntimo, de los diferentes titulares de la SEP.

Cabe recordar que entre 2009 y 2011, la dirigencia del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), jugó un papel central en la definición de las políticas públicas educativas de ese tiempo (sexenio de Felipe Calderón). La hegemonía de la dirección del SNTE concluyó, (al menos en la parte de la toma de decisiones educativas técnicas, no político-sindicales), en el año 2012-2013, cuando cambió el escenario político con el relevo en el gobierno y comenzó la gestión del presidente Peña Nieto.

Queda relativamente claro, entonces, que el problema de las “competencias” en la educación no solo es un asunto técnico, ni un campo únicamente de tensiones teóricas o metodológicas, sino también es un asunto social complejo, donde impera el conflicto entre sectores de la comunidad académica, y cuya deliberación queda en manos de la política o de la alta tecnoburocracia, pero no de los docentes en servicio, es decir, queda entre especialistas y expertos que están insertados en los diferentes grupos o espacios de decisión de las políticas públicas en la educación. En otras palabras, podría decirse que los círculos cerrados de las corporaciones académicas más influyentes (públicas y privadas), siempre han estado presentes en los espacios de disputa del poder y de la toma de decisiones sobre los asuntos de la educación pública. Por ello afirmo que, hasta el momento, éste ha sido un caldo que se ha cocinado “arriba”, no “abajo”.

Ojalá que los historiadores, sociólogos y antropólogos de la educación, así como los especialistas en Filosofía y Psicología Educativa, se den a la tarea de estudiar este fenómeno, y con ello desentrañen las dudas que surgen o puedan generarse acerca del por qué hay diferentes aproximaciones sobre el concepto de “competencias” en tan poco tiempo, pero no solo eso: también sobre otros conceptos importantes como el de los “aprendizajes”, la planificación de la “enseñanza”, así como sobre los distintos modelos “didácticos”, la evaluación educativa, los materiales o recursos y el papel de los sujetos en la educación, entre otros.

Punto y aparte para analizar y discutir, es el fenómeno que se ha generado a partir de la aparición del discurso del diseño curricular (desde 1990 a la fecha) basado en el desarrollo de “competencias”, sobre el cual se ha desarrollado, en países latinoamericanos sobre todo, un amplio mercado de consumo de conocimientos y tecnologías. Algunas universidades privadas (como la del Valle de México), ofrecen a la sociedad programas de posgrado (Maestría) “hiperespecializados” sobre el concepto de las “competencias en la educación” y sus derivaciones pedagógicas. También se han creado organizaciones de profesionales o asesores independientes que venden a los docentes y directivos de todos los niveles educativos, cualquier cantidad de cursos, talleres y diplomados, libros y demás materiales de estudio, con supuestas guías o estrategias para que los participantes dominen el concepto de “competencias” en la escuela.

Cada uno de los grupos de profesionales y especialistas de la educación tiene derecho a promover sus productos y servicios de la manera en que mejor le plazca o reditúe. Sobre ello no hay discusión. Lo que no se vale es hacer creer a los docentes, directivos y demás figuras educativas, que la verdad universal, única e indiscutible en la educación contemporánea, es el diseño curricular basado en el “desarrollo de competencias”. Ese es el problema de las “competencias” en la educación en México y en el mundo.

Vayamos a otra opinión. El doctor Alejandro Castro Santander me escribió lo siguiente: “…Me gusta cómo has encarado el tema de las competencias en educación. En Argentina venimos trabajando con ellas desde 1993. Y como dice Perrenoud, no entró en la práctica de los docentes, porque no fue aprendida en su escolaridad ni en la formación superior… siempre fue teoría, cuando el modelo llama a la acción.”

Así continúa el mensaje del doctor Castro Santander, especialista y líder académico en el tema de convivencia escolar en la Universidad Católica Argentina: “Personalmente, me gusta la síntesis del Informe Delors y los cuatro saberes (pilares), luego hablemos de las «habilidades» para el S.XXI  y la estrategia de las competencias (conocimientos puestos en acción) ¿Cuándo? Cuando la escuela que tenemos del S.XIX cambie, dando la oportunidad a la innovación con sentido… Mientras tanto, evito leer completos los trabajos que no le dan un lugar importante a las habilidades socioemocionales, al clima escolar, a la convivencia. Estos factores asociados a la calidad educativa hoy son ´prioridad educativa´ «. Completamente de acuerdo.

Agradezco a todos los maestros y las maestras, asesores y directivos que me han escrito para ampliar la discusión sobre estos temas. Estoy convencido en que ése es el único camino –la confrontación de ideas-, que nos permitirá sacar adelante a los nuevos y retadores proyectos educativos que vienen para la nación.

 

(1) Juan Carlos Miranda Arroyo (2013) “La noción de “Competencias” en la Reforma de la Educación Básica en México (2009-2011): Limitaciones y alternativas”. Rev. Iberoamericana de Educación, vol. 61, Núm. 4. OEI. (versión digital)

 

(2) Laura Frade Rubio. (2016) Críticas y propuestas a la propuesta de plan curricular del Modelo Educativo 2016.

http://www.calidadeducativa.com/articulos/Vol-09/Art-50-CrIticas-y-propuestas-a-la-propuesta-de-plan-curricular-del-Modelo-Educativo-2016.pdf

 

jcmqro3@yahoo.com

 

Fuente del Artículo:

https://www.sdpnoticias.com/nacional/2018/08/07/el-problema-de-las-competencias-en-la-educacion

ove/mahv

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España: Innovación como motor del cambio metodológico para mejorar el proceso educativo

España / 1 de octubre de 2017 / Autor: Redacción / Fuente: Interempresas

El I Congreso Internacional de Innovación Educativa, organizado por el Departamento de Educación, Cultura y Deporte del Gobierno de Aragón, reunió los pasados 22 y 23 de septiembre a 1.400 personas en un encuentro para debatir sobre innovación y las nuevas metodologías en el ámbito educativo.

Expertos como María Acaso, Richard Gerver, David Johnson, David Cuartielles y César Bona convirtieron durante dos días a Aragón en referente internacional de la innovación educativa. En este foro de debate se sentaron varias claves sobre el momento actual y futuro de la innovación educativa y sus metodologías:

  1. La innovación educativa trata de mejorar el sistema, no lo transforma, y es la vía para lograr el cambio real en las aulas.
  2. El alumno está en el centro de este sistema, en el que docentes y familias tienen que trabajar juntos.
  3. La tecnología forma parte de la vida y no hay que dejarla fuera de las clases, ya que es una de las principales herramientas de aprendizaje. Pero nunca puede sustituir al profesor.
  4. La empatía o la gestión de las emociones son tan importantes como los contenidos en un colegio.
  5. La innovación no es un fin en sí mismo, debe tener la misión de desarrollar el potencial de los alumnos como seres humanos. Hay que darles herramientas para la vida.
  6. El objetivo del aprendizaje cooperativo es que cada miembro del grupo sea un individuo más fuerte.
  7. Las artes y el pensamiento artístico (‘Art Thinking’) son necesarios en la estrategia educativa para afrontar las incógnitas del siglo XXI: el ser humano es creativo por naturaleza y no hay que dejar de potenciar esta cualidad.
  8. Las administraciones deben estar comprometidas con la innovación educativa y el cambio metodológico.
  9. La educación representa la vida, por lo que en la escuela las asignaturas deben mezclarse. Los currículos deben ser flexibles e incorporar habilidades y competencias.
  10. Los profesores deben ser diseñadores de experiencias de aprendizaje. Deben ser capaces de hacer que los alumnos conecten lo que se les enseña con el mundo real, con sus vidas.

El congreso fue, además, un foro para difundir las metodologías innovadoras que están transformando la educación, como demuestran los 14 talleres programados, denominados ‘Tiempos de acción’, en los que los docentes pudieron conocer determinadas tendencias educativas y aplicarlas con un sólo objetivo: tener la capacidad de ponerlas en marcha de forma inmediata en el aula.

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María Acaso, una de las actuales líderes en España y Latinoamérica de la Revolución Educativa, durante su intervención en el Congreso.

Apuesta por la educación artística

“Para afrontar las incógnitas del siglo XXI, necesitamos situar las artes como una estrategia educativa. Por esta razón queremos identificar el Art Thinking como un marco de acción, incluso social. No es una asignatura que debamos aprobar, es un espacio político desde el que abordar las problemáticas contemporáneas para analizarlas y ver qué podemos hacer”. Así lo expuso María Acaso, una de las actuales líderes en España y Latinoamérica de la Revolución Educativa (#rEDUvolution), durante el Congreso.

Acaso explicó que debemos preguntarnos cómo puede ser que, cuando BlaBlaCar, Uber, Airbnb o Tinder han transformado por completo nuestras formas de vivir y de relacionarnos, “la mayoría de los contextos educativos permanezcan igual que hace muchos años” y apostó por la revolución artística a través del Art Thinking: “La educación artística nos convoca a repensarla en un momento en el que los mundos visuales que nos rodean no paran de crecer y de hacerse cada vez más complejos”.

Consciente de que “demandar que la verdadera innovación en la educación del siglo XXI pasa por la incorporación de las artes puede chocar con lo real”, Acaso explicó que “los cuestionamientos éticos deben recuperarse como base de los procesos de aprendizaje, y es en este proceso de restauración donde las artes cumplen su papel. Demos, por lo tanto, la bienvenida a repensar la educación a través de las artes”, matizó.

Fuente de la Noticia:

http://www.interempresas.net/Tecnologia-aulas/Articulos/196115-Innovacion-educativa-como-motor-del-cambio-metodologico-para-mejorar-el-proceso-educativo.html

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Otra forma de educar es posible

Por. Kenia Lugo de Contrera

Comienza otro año escolar, comienza un nuevo ciclo y como siempre es necesario reflexionar sobre nuestro papel como padres y como educadores en la vida de nuestros niños y adolescentes. Nunca es tarde para repensar cómo podemos hacer mejor las cosas, ya que estamos acostumbrados a responder mecánicamente a todo lo que sucede a nuestro alrededor sin atrevernos a cuestionarlo y salir de la zona cómoda. Es mas fácil y mas productivo para una sociedad capitalista mantener los esquemas que año tras año y día tras día se repiten en nuestras vidas y terminamos convertidos en autómatas o seres alienados por un sistema al cual no le interesa que desarrollemos nuestro potencial y seamos libres verdaderamente.

Desde que nacemos se nos imponen costumbres, creencias, estereotipos que iremos asimilando lentamente hasta convertirnos en la persona que otros quieren que seamos y no la que deseamos ser. Esa que existe en nuestro interior y lucha por emerger con todas sus potencialidades, sueños e ideas y que nos hace únicos.

Pero otra realidad es posible: una en la que nos hacemos a nosotros mismos si nos facilitan las oportunidades, si los conceptos de crianza y formación fuesen algo distintos, si nos atreviéramos a cambiar los esquemas que nos imponen.

La visión de la maternidad, paternidad, maestras y maestros, debe evolucionar, dejar de ser castradoras y represivas, verticales y autoritarias para convertirse en relaciones de respeto, equilibrio y orientación. Un verdadero mentor te motiva a hacer las cosas por ti mismo, a que desarrolles tus talentos, a que indagues, descubras tus propias verdades; te ofrece las herramientas para que tú construyas, te invita a que preguntes, te deja saciar tu curiosidad, te invita a soñar, no coarta tu creatividad, no te manda a callar si preguntas; no te dice que es mejor que hagas los problemas de matemática si lo que te provoca es dibujar, respeta tus talentos y te ayuda a que los desarrolles; no te impone sus ideas, valora no solo tus conocimientos sino también aquello en lo que mas te destacas: tu nivel de empatía e inteligencia emocional, te corrige amorosamente, trata de comprenderte y, sobre todo, hace lo que hace con amor y con la convicción de que ama su labor.

Y por supuesto, todo comienza desde el hogar, una madre y un padre amorosos te crían para la vida, sin devorarte o engullirte en sus expectativas, neurosis o temores. No compite contigo, ni te obliga a estudiar lo que ellos quieren, ni a comportarte como a ellos les agrada, ni te presiona para que complazcas al “qué dirán”, ni te grita u ofende, no critica; te ofrece las posibilidades de desarrollar tu creatividad, de que conozcas todo tu potencial, te respeta y respeta tus sueños, tu personalidad, tus gustos, tu forma de pensar y sentir, te escucha, comparte tiempo de calidad contigo; te cuida pero también te deja experimentar, conversa contigo, te ayuda a ver las consecuencias de tus actos mas que castigarte; te deja ser y crecer en búsqueda de tu propio yo y cuando creces se convierte en uno de tus mejores amigos que te da sabios consejos pero que al final respeta tus decisiones, por supuesto siempre dándote las orientaciones básicas para crecer.

Pero al final, sabemos que ni familia ni escuela tienen la culpa de ser como son, son estructuras que vienen de años y años de tradiciones que se instauraron hace tanto tiempo que cuesta creer que puedan ser diferentes. Sin embargo, los tiempos van cambiando y debemos ir adaptándonos, todos los conceptos evolucionan y cada día somos testigos de estos cambios.

Hay países donde los conceptos educativos son muy revolucionarios, ni hablar de los nuevos conceptos de familia. Poco a poco nos vamos preparando para un nuevo tipo de sociedad y de humanidad, aunque a veces la desesperanza parezca apoderarse de todos. Mientras haya vida hay esperanza, y la vida es ese reto, ese viaje para descubrirnos, construirnos, crecer, madurar, dejar atrás lo obsoleto e innovar. Saber que debemos dejar de lado lo que no es nuestro, lo que nos han impuesto y desaprender lo que nos hace daño para ser la mejor versión de nosotros mismos que podamos ser.

Fuente: http://www.correodelorinoco.gob.ve/opinion-libre/otra-forma-educar-es-posible-tematica/

Imagen: www.correodelorinoco.gob.ve/wp-content/uploads/2016/09/Vargas-psique-y-sociedad.jpg

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