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Vuelta a la presencialidad en las escuelas: crónica de un naufragio anunciado

Por: Mauro Berengan

Durante la semana que pasó, en algunos casos con reuniones y en otros ya con clases, comenzó en todo el país la vuelta a la presencialidad en las escuelas. Superando grietas políticas, eludiendo el más mínimo contraste del discurso con la realidad, deshaciendo todo lo dicho, desconociendo el funcionamiento escolar, ocultando lo sucedido en otros países, con el salario docente en muchos casos debajo de la línea de ¡indigencia! y con escuelas aún en peores condiciones que las ya deplorables de la “normalidad” prepandémica, el desastre parece inevitable. Repasamos en esta nota las razones, los decires, las condiciones y el por qué de la resistencia docente a una medida insostenible -a pocos meses de contar con vacunas- que ha tomado no solo las escuelas, si no la opinión de la gran mayoría de la población.

Empecemos por el impulso gubernamental del presidente y el cuestionado ministro de educación Nicolás Trotta. Cierto es que la campaña “abran las escuelas” comenzó desde la oposición, pero fue rápidamente tomada, respondida e impulsada por el gobierno. Esto contradice todo lo que se sostuvo desde la comunicación oficial durante el año pandémico: nos dijeron que teníamos la oportunidad de adelantarnos, de ver lo que sucedía primero en Europa y actuar en consecuencia, pero los intentos de presencialidad fracasaron una y otra vez en Alemania, en Israel, en España y también, poco después, en los Estados Unidos, con avances y reveces constantes que lejos de ordenar la vida familiar la complicaron aún más, pues se debió retroceder en un ya de por sí difícil sistema de turnos por hijos e hijas. Y sí, no tenemos sus condiciones, sus salarios, sus transportes, sus insfraestructuras  ¿por qué divina razón funcionaría aquí?

Nos dijeron que priorizarían la vida por sobre la economía, incluso Alberto Fernández expresó públicamente, y desató un escándalo, que Macri lo había llamado telefónicamente para decirle “que mueran los que tengan que morir”. Pues bien, aquí estamos priorizando la presión mediática, política, económica, corporativa por sobre la vida, aquí estamos dejando que mueran los padres, madres, abuelas, las maestras que tengan que morir. Nos dijeron que no debíamos confinar gente en un espacio cerrado y, de nuevo, aquí estamos, yendo en colectivos y trenes apretados a aulas pequeñas, cerradas, en muchos casos sin siquiera ventilación, cual fiesta clandestina matutina.

¿Y en qué condiciones volvemos? Las fotos se han viralizado en las redes: escuelas con cloacas rebalsadas, piletas de baño caídas, ventanas que no abren, sin limpieza ni desmalezamiento, sin elementos de bioseguridad, sin personal en la puerta, con techos, pisos, paredes rotas. La foto de portada la tomé yo mismo y en mi escuela. Y es que no es ninguna novedad, las escuelas argentinas, la mayoría de ellas, las que no son para la élite, sobreviven con alambres y alfileres. Nos dijeron que la cuarentena nos había ayudado a ganar tiempo para crear infraestructura, pero no hicieron absolutamente nada en casi ninguna jurisdicción.

¿Y qué pasa con nuestro salario? ¿Cómo mantenemos las “burbujas” -esa palabra mágica que junto a “protocolo” eliminan la pandemia- si trabajamos en cuatro colegios para llegar a fin de mes? Veamos un ejemplo para nada excepcional: en la provincia Córdoba la canasta básica alimentaria (el límite de indigencia medido por el Centro de Almaceneros) es de 41.197 pesos, mientras que el salario docente de un cargo testigo según el simulador del sindicato es de 39.769. Sí, estamos en muchos casos bajo la línea de indigencia, seguimos perdiendo poder adquisitivo, y nada parece indicar que este año no sucederá.

Una campaña que se ha extendido por el país dice “las escuelas se abren con recursos, no con discursos” y, como vemos, parece dar en el clavo: los recursos, la materialidad, la pandemia; nada ha cambiado, solo el discurso y con eso basta. En pocos meses, según el plan de vacunación y aun suponiendo que se retrase, la mayoría de la población estará vacunada ¿por qué el apuro entonces?

Una de las primeras razones que circulan para comprender este desatino es de carácter político: la posibilidad de recoger una demanda social, encarnarla, y así obtener apoyo electoral. Comenzó, como ya dijimos, con el macrismo y el “abran las escuelas”, un núcleo de buen sentido potente en la población, y fue tomada por el gobierno para contrarrestar el apoyo que conseguiría la oposición. Pero ¿la demanda existe? ¿En qué medida? Una encuesta realizada por el equipo SocPol de la Universidad Nacional de Quilmes y publicada en el Cohete a la Luna, muestra que el ¡77! % de la población considera que la presencialidad debe volver cuando esté la vacuna. La opinión mediática inventa, manipula la opinión pública, la convierte en opinión publicada ¿de quién es entonces la demanda? ¿Qué está recogiendo el gobierno con esta medida? Y es que no, no se trata de la oposición, se trata de quien gobierna.

Quizás haya que buscar la presión, la demanda, en los colegios privados, en los de la corporación religiosa y su pata educativa, en los colegios de élite y sus miembros, en las empresas que buscan normalizar su sistema de empleo. Pero esto lleva a una cuestión de fondo: si hay colegios que cumplen con las condiciones para la presencialidad, entonces la medida pasa por no admitir lo más evidente, que la educación no iguala si no que fortalece la desigualdad. El gobierno y su corporativo ministro no pueden decir “que vayan los ricos, y los pobres se queden en sus casas”, entonces parece un punto de llegada: que las clases presenciales comiencen, se suspendan donde no haya condiciones, y continúen en el colegio Alemán.

Esta construcción de un discurso mediático -que no público- favorable a las corporaciones no son entonces solo una “presión de la oposición”, si no también parte del ADN de la política educativa gubernamental encarnada en el ministro Trotta, y se acompaña de otra construcción mediática: llevamos un año sin clases. Pero la docencia argentina, y lo decimos con orgullo no con vocación (palabra que conlleva hacernos trabajar a destajo, sin condiciones, moralizando nuestra labor para escamotear los recursos), ha sostenido la educación reinventándose día a día, planificando y corrigiendo horas y horas, duplicando su carga laboral por menor salario, mientras los gobiernos subejecutaban presupuestos, no cubrían vacantes, no llevaban internet donde debía llegar. Y es que como dijo Adriana Puigróss, quien salió eyectada del ministerio de educación, e insospechada de opositora, los esfuerzos y recursos deberían estar puestos en cubrir de modo adecuado la virtualidad un tiempo más, hasta que estén las vacunas, y no en una apresurada vuelta a la presencialidad cuyos resultados están, en pocos días, a la vista.

La pandemia ha desnudado, para quien no la veía, la desigualdad rayana en el absurdo de los aspectos centrales de nuestra vida -los “esenciales”-, pero no implica ello aquel eslogan que ya nadie parece sostener “vamos a salir mejores”. Pues no, no estamos saliendo mejores, estamos fortaleciendo las desigualdades, estamos dividiendo la enseñanza en privilegiados y no privilegiados cada vez más, estamos cediendo  a las corporaciones mercantilizantes de la educación. Habitamos un país enormemente rico, donde unos pocos concentran millones y millones de dólares, donde una sola empresa de servicios (mercado libre, que nada produce) representa ya el 12% del PBI nacional, duplicando su tamaño en la pandemia, y mientras ésta situación persista los trabajadores y trabajadoras no podemos caer en la trampa de la escases de recursos que hasta muchos gremios reproducen; los recursos están, simplemente son ajenos, y el Estado impotente, o más bien garante.

Vamos derecho al naufragio y allí moriremos algunos de nosotros, la noticia llegará, habrá que retroceder, se desorganizará nuevamente la familia, la escuela, los pibes y pibas cargarán con haber contagiado a un familiar, seguiremos cobrando una miseria, las escuelas seguirán cayendo, y todo esto habrá sido más que anunciado. Ahora que estamos en agenda pública es el momento de hacernos escuchar, de replantear dónde coloca la sociedad y sus gobiernos a la docencia, de repreguntarnos por la escuela y la educación, es hora de exigir y conquistar, y necesitamos para ello de gremios docentes que no actúen de brazos ministeriales, que respondan a sus bases, que estén a la altura de la enorme tradición sindical argentina, que luchen por la igualdad. Saldremos mejores solo si actuamos con fuerza y con unidad, es hora de poner de pie la educación.

Fuente e imagen: https://contrahegemoniaweb.com.ar/2021/02/21/vuelta-a-la-presencialidad-en-las-escuelas-cronica-de-un-naufragio-anunciado/

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Venezuela: Educadores llaman a protesta nacional el #16Sep, día que inicia nuevo año escolar.

América del Sur/Venezuela/efectococuyo

Docentes y dirigentes sindicales del sector educativo en todo el país han manifestado que el lunes 16 de septiembre las escuelas no abrirán, a pesar de que es la fecha pautada por el chavismo gobernante como el día del comienzo del año escolar 2019-2020.

Esta decisión ha sido tomada por  educadores ante el descontento por el salario insuficiente que reciben por parte del Estado y las condiciones en las que se encuentran las escuelas.

La Coalición Nacional Sindical convocó a recibir el año escolar con una protesta nacional contra la implementación de “docentes exprés” al sistema educativo, y para reclamar un salario equivalente a 400 dólares.

El punto de concentración en Caracas será la sede del Ministerio de Educación con destino a Miraflores, casa de gobierno de Nicolás Maduro, el próximo 16 de septiembre.

Protesta en el interior del país

En Portuguesa, la unión sindical hizo un llamado a “hacer un frente nacional de lucha sin tregua ni descanso”, en favor de salarios a los docentes que no sean “esclavizantes” a partir también del mismo día.

Bajo la consigna “somos profesionales y nunca seremos esclavos” hicieron el llamado a que ningún docente regrese a clases el 16 de septiembre, y en cambio convocan el lunes y martes a una asamblea. También tienen pensado hacer una recolección de firmas en los catorce municipios de Portuguesa.

En Lara, este jueves 12 el sindicato educativo de Lara hizo una reunión con docentes en los municipios Iribarren, Morán y Palavecino. En vista de que concluyeron que no existen las condiciones mínimas para iniciar el año escolar, protestarán el lunes frente a la Zona Educativa de Lara.

Esta protesta incluye la respuesta a la amenaza de incorporar a los graduandos del programa de formación de la Micro Misión Simón Rodríguez, los llamados “maestros exprés”.

Según Fran Andrade, profesor de este estado, ya se han incorporado bachilleres a planteles como la Escuela Costa Rica; sin embargo, se ha visto que algunos de estos muchachos inclusive han renunciado, en vista de que el pago que se les ofrece es insuficiente.

En Sucre, de acuerdo con Robert Franco, sindicalista del movimiento “Los guerreros del pórtico”, incluso están pensando trasladarse a la protesta convocada en Caracas, si obtienen los recursos para movilizar a los 180 docentes que se pusieron a disposición en la asamblea que sostuvieron este jueves.

El también profesor reclamó que se han suspendido del sistema a 42 docentes en las últimas dos quincenas por hacer quejas públicas del mal funcionamiento de la educación y exigir mejoras salariales. También se le anunció que, para la quincena de septiembre, 28 docentes más quedarán suspendidos y que existe una amenaza para quienes no se incorporen este lunes a dar clases.

“Los laboratorios del partido PSUV han estado buscando los nombres de los que vamos a las marchas, y nos obligan para permanecer en el sistema y firmar un acta que diga que no vamos protestar”, dijo.

Franco dijo que se había anunciado que este 16 el ministro de Educación, Aristóbulo Istúriz, se haría presente en Carúpano en un acto político.

No existen las condiciones en los planteles

También en Bolívar los educadores protestarán en la escuela Las Américas que, según Aida González, presidenta del Colegio de Profesores del estado, es un plantel cuyas condiciones están “por el suelo”.

González aclaró que las reparaciones en Bolívar del plan «Una gota de amor para mi escuela en resistencia» solo llegaron al 10% de los colegios.

“Lo hicieron para tener una referencia o pasar una propaganda política de que estaban haciendo las reparaciones en todo el estado, y no es así” dijo.

También reveló que en Bolívar no saben nada hasta ahora del Programa de Alimentación Escolar (PAE), a pesar de las últimas declaraciones de Istúriz, en las que dijo que el Ministerio contaba con suficientes alimentos para cubrir los comedores el resto del año.

El viceministerio de Educación en Instalaciones y Logística había anunciado que para el año escolar 2018-2019, se repartirían 603.000 mil toneladas de alimentos mediante el PAE a 24.000 planteles.

No obstante, cuando el Colegio de Profesores de Bolívar llamó a las madres procesadoras, estas les dijeron que no han convocado a la primera reunión para informarles qué va a suministrar el PAE.

También ante la Asamblea Nacional, Gricelda Sánchez, líder del Sector Educación de la Coalición Sindical Nacional, dijo que “en 90 % de las escuelas del país el programa de alimentación no está funcionando”.

Fuente e imagen: https://efectococuyo.com/la-humanidad/escuelas/

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Docentes argentinos denuncian falta de condiciones en escuelas

América del sur/Argentina/04 Julio 2019/Fuente: Prensa Latina

Con imágenes de niños tapados con colchas en las aulas bonaerenses, en medio de la ola de frío, sindicatos docentes denuncian hoy la falta de condiciones en las escuelas de la provincia de Buenos Aires.

Desde twitter, los maestros señalan al Ejecutivo local por lo que sucede en los colegios de esa localidad argentina, donde para muchos menores es imposible dar clases por falta de calefacción y estufas en sus lugares de estudios.

En un mensaje, el Sindicato Unificado de los Trabajadores de la Educación de la Provincia de Buenos Aires (Suteba) denunció la situación y apuntó de manera particular cointra la actual gobernadora María Eugenia Vidal y el ministro de Educación en la provincia, Gabriel Sánchez Zinny.

‘Los alumnos y docentes nuevamente sufren las consecuencias de un Estado ausente, poniendo en riesgo la salud y el derecho a la educación adecuada’, remarcó ese gremio, que ha dado dura pelea al Ejecutivo local no solo por aumentos salariales para los docentes, sino también por la falta recurrente de condiciones en varios centros de estudios.

El Sindicato además denunció la falta del suministro de gas e instalaciones eléctricas en las escuelas, que no permite que el funcionamiento de la calefacción en las aulas e impide la operación de las cocinas y, por ende, la provisión de alimentos y bebidas calientes, advirtieron.

Al señalarlo en cifras, Suteba precisó que, por ejemplo, en la localidad de Lomas de Zamora hay 59 escuelas sin gas, en tanto en Florencio Varela existen 20 escuelas sin conexión de gas y más de 40 sin calefacción y en la capital de la provincia, La Plata, más de 100 escuelas tienen problemas de calefacción o no tienen gas.

Con la etiqueta #escuelasbajocero, que fue tendencia en twitter, los docentes piden al gobierno hacer algo urgente.

‘El Gobierno de (María Eugenia) Vidal, en campaña electoral, dice que se ocupa de la Educación, pero la realidad muestra otra cosa: chicos y chicas tienen que ir a las escuelas con frazadas porque no tienen calefacción ni cocina para una comida caliente. Con frío no se puede aprender’, cuestionó en esa red el líder sindical Roberto Baradel.

En una nota difundida por el sitio La Tecla, la Secretaria General Adjunta de Suteba, Silvia Almazán, precisó que la semana anterior hicieron una denuncia pública tras un estudio que reveló la existencia de 417 escuelas afectadas y más de 200 mil alumnos perjudicados.

La ola de frío afecta a esta capital y al llamado conurbano bonaerense con fuerza. Hoy los termómetros en algunas zonas se acercaron a cero grados y se pronostica un invierno crudo

Fuente: https://www.prensa-latina.cu/index.php?o=rn&id=288364&SEO=docentes-argentinos-denuncian-falta-de-condiciones-en-escuelas
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Panamá: Diputados citan a ministra de Educación para que responda sobre las condiciones de las escuelas

Panamá / 1 de febrero de 2018 / Autor: Redacción / Fuente: La Prensa

El pleno de la Asamblea Nacional aprobó este lunes 29 de enero citar a la ministra de Educación, Marcela Paredes, para que responda un cuestionario de cuatro preguntas concerniente a las condiciones físicas de algunos planteles del país.

La propuesta fue presentada por un grupo de diputados de distintas bancadas.

Las preguntas que deberá responder la ministra Paredes son:

1- ¿Qué planes tiene el Ministerio de Educación (Meduca) para minimizar los efectos económicos, financieros y sociales de la dispersión escolar, tanto de alumnos como docentes, que se ha provocado con la demolición unilateral por parte del Meduca de la escuela de la comunidad de El Giral y qué tiempo prevé el Meduca, tomara la construcción de nuevas edificaciones para la comunidad educativa de El Giral?

2- ¿Qué otras escuelas del país, y sobre todo en la provincia de Colón, tiene planificados demoler el Ministerio de Educación; explique usted si existen planes de contingencia ante las eventuales demoliciones de escuelas en el territorio nacional?

3- Existe un número no especificado de escuelas primarias y secundarias con significativo porcentaje de carencias estructurales, ¿cuántas de ellas están en proceso de reparación y cuántas prevé usted que no estarán listas para empezar el año lectivo 2018 por cualquiera que sea la causa?

4- ¿Explique el estatus de la infraestructura de la escuelas Pablo Arosemena, el IPTC en Colón, la escuela República de Venezuela, escuela República de Costa Rica, escuela Santiago De La Guardia y la escuela San Isidro de San Miguelito, escuela Antonio José De Sucre, y diga si las mencionadas escuelas estarán listas para empezar el año escolar 2018?

Fuente de la Noticia:

https://www.prensa.com/politica/Diputados-ministra-Educacion-responda-condiciones_0_4951754802.html

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Argentina: Lanzaron licitación para calefactores para las escuelas

Argentina/Enero de 2018/Fuente: Bariloche 2000

El Ministerio de Educación lanzó la licitación pública para la adquisición de 50 equipos de calefacción central, destinados a establecimientos educativos, con un presupuesto oficial que asciende a $ 1.823.500. La apertura de ofertas será el 9 de febrero, a las 9 de la mañana.

Se trata de equipos con un rango de potencia que va de los 34.000 a los 38.000 kcal, que deberán ser entregados en un plazo de 30 días, a partir de la contratación de su proveedor. A ellos se sumaron en la misma licitación 90 repuestos que la cartera educativa tendrá en stock para futuras reparaciones.

El subsecretario de Coordinación, Adrián Carrizo, indicó que “con esta compra estamos planificando y previendo el servicio de calefacción para el próximo invierno. Los equipos complementarán a los provistos por las empresas de mantenimiento escolar y/o municipios que firmaron convenios con Educación”.

Los pliegos de la licitación deben ser retirados en la sede del Ministerio de Educación y Derechos Humanos, en calle Roca 260, Viedma.

Fuente: https://www.bariloche2000.com/noticias/leer/lanzaron-licitacion-para-calefactores-para-las-escuelas/111918

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Guatemala: Estudiantes reciben clases bajo el sol en Puerto Barrios, por falta de edificio

14 Enero 2018/Fuente: prensalibre/Autor: Dony Stewart y Rigoberto Escobar

Según padres de familia y maestros, desde hace ocho años, cuando la escuela comenzó a funcionar, los estudiantes

“Se cuenta con el terreno propio, pero las autoridades no han puesto interés en construir el edificio. No es justo que nuestros niños reciban clases en estas condiciones. Exigimos una solución”, dijo un padre de familia.

Carlos Bautista, padre de familia, expresó: “Es lamentable que las autoridades educativas no construyan una escuela para que los niños tengan un lugar digno para recibir sus clases”.

La maestra María Miguel Marroquín dijo que en varias oportunidades han solicitado la construcción al Ministerio de Educación (Mineduc) y apoyo a varias instituciones, pero hasta el momento no han recibido respuesta.

“Solo hemos recibido promesas y los niños siguen recibiendo clases en lugares inadecuados y a la intemperie. Nosotros cumplimos con darles la educación, pero es triste la situación en la que estamos”, expresó.

Indicó que ante la falta de lugar para impartir clases, no les quedó más que impartirlas en el terreno que fue donado por una empresa.

“Los padres de familia ayudaron a limpiar el predio, pero el inmueble no cuenta con las condiciones adecuadas y pone en riesgo la salud e integridad de estudiantes y maestros”, dijo otra maestra.

La directora de la escuela, Jacqueline Méndez, explicó que hace seis años una empresa bananera donó el terreno, el cual ya se encuentra a nombre del Mineduc, y que desde ese entonces gestionaron la construcción del edificio; sin embargo, no han dado resultado.

Comentó que durante tres años el Sindicato de Trabajadores Bananeros les prestó una galera, pero la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres lo declaró inhabitable, por riego de colapso.

Añadió que los padres de familia se han tomado a la tarea de limpiar el terreno donado, donde improvisarán aulas con nailon y madera para que reciban clases sus hijos.

El director Departamental de Educación, Julio De León, expresó que conocen del caso y que aún falta que el Mineduc efectúe otros trámites para iniciar la construcción del edificio.

«La próxima semana sostendremos reuniones con la directora, padres de familia y representantes de la comunidad para buscar una solución inmediata», afirmó.

En Petén

Debido a las malas condiciones en las que se encuentran los salones de clases, los estudiantes de la Escuela Tres de Abril Gregorio Cocón Escalera de San Benito, Petén, reciben clases hacinados y en los corredores.

Según maestros, el establecimiento educativo fue construido hace seis décadas y desde entonces no ha recibido mantenimiento.

“Este problema es de todos los años y las autoridades no hacen nada, no es posible que no exista un proyecto favorable para la escuela”, dijo Pablo Chacón, padre de familia.

Emilacia Acosta Vásquez, maestra, dijo: “Decidimos impartir clases en el corredor, porque los niños están más seguros que en las aulas, pues las vigas están podridas y las paredes con agujeros».

Randy Ponce Corado, director de la escuela de la jornada matutina, indicó que el edificio alberga a 836 estudiantes, de los cuales 160 reciben clases en aulas compartidas, corredores y en el patio.

«Los niños de segundo grado de tres secciones son los más afectados, pues reciben clases en la intemperie», expresó Ponce.

Amílcar Corzo Méndez, director departamental de Educación, dijo que se planificarán para los próximos días una reunión con directores y padres de familias con el fin de buscar una pronta solución.

Fuente de la noticia: http://www.prensalibre.com/ciudades/izabal/estudiantes-reciben-clases-bajo-el-sol-en-puerto-barrios-por-falta-de-edificio

Fuente de la imagen: http://d3ustg7s7bf7i9.cloudfront.net/mmediafiles/pl/41/41ee4a8c-eb5c-4515-a7fb-57d8d02ba348_749_4

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¿Adiós a la participación ciudadana?

Pluma Invitada

Pedro Flores-Crespo y Laura M. Ramírez Mejía*

En la avenida de Tlalpan, de la Ciudad de México, se lee una manta adosada a la fachada de una escuela pública que dice que los estudiantes no regresarán a clases hasta que haya un dictamen debidamente avalado por la autoridad. Se teme que después del sismo del 19S, la infraestructura escolar no ofrezca las condiciones de seguridad para que todas las niñas, niños y jóvenes regresen a clases. Esta manta está firmada por los padres de familia.

Parece que la energía social desplegada luego de la tragedia no fue debidamente entendida y mucho menos encauzada por las autoridades educativas del país. Por ejemplo, al dar a conocer los ocho pasos para el regreso a clases el 22 de septiembre pasado, la Secretaría de Educación Pública (SEP, Comunicado 270), omitió mencionar completamente a los Consejos Escolares de Participación Escolar (CEPS) y al Consejo Nacional de Participación Social en la Educación (Conapase).

Los CEPS, según la Ley General de Educación (LGE) están integrados por padres de familia y representantes de sus asociaciones, maestros y representantes de su organización sindical, directivos de la escuela, ex alumnos, “así como con los demás miembros de la comunidad interesados en el desarrollo de la propia escuela”. Sus funciones son múltiples: Opinar sobre los ajustes al calendario escolar, tomar nota de los resultados de las evaluaciones, propiciar la colaboración entre maestros y padres de familia para salvaguardar la integridad y educación plena de los educandos y algo muy relevante en el contexto del 19S: Llevar a cabo las “acciones de participación, coordinación y difusión necesarias para la protección civil y la emergencia escolar”.

Ninguno de los ocho pasos enlistados por el secretario Aurelio Nuño hacen alusión alguna a los CEPS cuando su función podría haber sido clave. Si para regresar a clases se debían revisar las instalaciones escolares por parte de los Directores Responsables de Obra (DRO), ¿no podría haberse incluido en tales diligencias a un miembro del CEPS para que diera legitimidad y confianza al resto de la comunidad educativa de que tales revisiones eran apropiadas? ¿No hubiéramos ganado todos si el dictamen oficial del DRO hubiera sido avalado por el presidente del consejo escolar? La SEP perdió una magnífica oportunidad de probar su Modelo Educativo para el siglo XXI – en la parte de gestión y autonomía escolar – en una situación real y tristemente trágica.

Es sintomático que la SEP no sepa interactuar con la ciudadanía contando con los mecanismos formales para ello. Cuando el maestro Nuño anunció que la reconstrucción de las escuelas se haría de manera transparente, omitió hacer suya la justificación del Comité de Contraloría Social de los CEPS, que establece que por medio de la vigilancia ciudadana “los beneficiarios” de ciertos programas – en este caso, rehabilitación de escuelas -, puedan verificar la adecuada aplicación de los diversos recursos públicos. ¿Será que sigue activándose en algunos funcionarios el chip de “máxima autoridad” y dueños exclusivos de las escuelas cuando podrían compartir responsabilidades en pos del bien público?

La omisión total de los CEPS – y del Conapase – en el proceso de reconstrucción y rehabilitación de escuelas contrasta con el discurso oficial de este consejo: “Ha sido durante la presente administración que el papel de la ciudadanía ha cobrado mayor importancia como factor para la equidad y pertinencia de la labor de las escuelas. La promulgación del programa sectorial de Educación, abrió las vías para la gestión escolar participativa. Así la toma de decisiones se comparte a la par de la responsabilidad, esto permite una mayor trasparencia en la rendición de cuentas.” (http://www.consejosescolares.sep.gob.mx/en/conapase/Que_Hacemos)

Y otra omisión grave. Mientras el Cuarto Informe de Gobierno reportaba que había más de 200 mil consejos escolares de participación social instalados, para este año, el Quinto Informe de Gobierno ya ni los menciona. ¿Será que no se desea perder el tramo de control sobre las escuelas? ¿Por ello cambiaron las reglas para elegir al presidente del Conapase y volverlo más oficialista? ¿Es la subestimación de la participación social una consecuencia tácita de querer recuperar la rectoría de la educación por parte del gobierno? Ésta es un buen punto para iniciar la reflexión sobre la “reforma de la reforma”, como diría Rodolfo Ramírez.

Las distintas administraciones encabezadas por el Partido Revolucionario Institucional raramente han simpatizado con la idea de compartir el poder para tratar de resolver los problemas que enfrentamos los ciudadanos. Ellos se erigen como el Jefe, el Padre que organiza – y mal – a lo infantes; pero no olvidemos la lección de las tragedias acarreadas por los sismos de la CDMX: el gobierno es fácilmente rebasado por los hechos y surge de manera espontánea una ciudadanía, que aunque desestructurada y efímera, ha demostrado que es capaz de cambiar el régimen político por la vía pacífica.

Y esto todavía no termina.  Si en 1985 la sociedad tuvo un papel fundamental en el momento mismo de la tragedia descubriendo una fuerza antes desconocida para sortear la emergencia, 32 años después la ciudadanía tiene una oportunidad para hacerse presente en la fase que viene de reconstrucción y en ese proceso la postura del gobierno será crucial:  aprenderá la lección y permitirá una mayor participación social o seguirá cerrando espacios, si es que aún pueden ser cerrados, cuando poco a poco la sociedad civil empieza a organizarse.

La etapa de la reconstrucción es un momento ideal para mantener la participación ciudadana, es cierto que la pasión de las primeras horas va mermando a medida que se regresa a la cotidianidad pero el espíritu de solidaridad y la conciencia de que en los momentos delicados es cuando más hay que defender los derechos de todas las personas parece estar vivo y puede capitalizarse para levantarse de nuevo.

No se trata de restarle la responsabilidad que tiene tanto el gobierno federal como a los poderes estatales, municipales y delegacionales (en el caso de la CDMX), se trata de aprovechar los espacios para observar procesos, exigir rendición de cuentas y monitorear los procesos de construcción segura.

¿Y qué pasa en el tema educativo?  Como mencionamos anteriormente, ante la contingencia no se tuvieron en cuenta los CEPS ni el Conapase, en la emergencia se perdió la oportunidad de usarlos como mecanismos participativos para garantizar la primera preocupación que era el regreso seguro de las niñas y los niños a las escuelas.  Sin embargo, es ahora cuando el papel de la participación social se puede desplegar para exigir que el regreso a las escuelas garantice el derecho de nuestros estudiantes a recibir la mejor educación ¿Cómo?

En primer lugar hay que entender que la escuela no es sólo un edificio sino que es una comunidad, si los edificios se cayeron o ya no son aptos para que regresen los estudiantes la comunidad debe exigir espacios temporales óptimos para que se reinicien las clases.

También es la comunidad la que será fundamental al momento de brindar apoyo socioemocional.  El equipo docente debe tener protocolos de acción para que los estudiantes puedan procesar los momentos difíciles que vivieron, pero será mucho mejor el impacto si toda la comunidad escolar centra la atención en que cada niña o niño tenga herramientas emocionales para hacer frente a la tragedia, supere la situación difícil y esté listo para seguir aprendiendo.

De la comunidad también depende escuchar a las niñas, los niños y los jóvenes sobre la escuela que quieren y necesitan.  Es muy triste que los edificios se hayan venido abajo pero puede ser una oportunidad para que la reconstrucción responda a una escuela diferente donde los estudiantes se involucran en la definición de los espacios que necesitan. Es su derecho participar. Hoy somos más conscientes de la necesidad de tener escuelas que respondan a los requerimientos de cada comunidad escolar.

En cuanto a la rendición de cuentas, es la comunidad escolar quien debe vigilar que los recursos materiales se destinen apropiadamente y con visión de equidad.  No es momento de conformarse con una escuela de segunda, el dinero debe llegar a todos los afectados y los recursos deben dirigirse eficientemente para que todas y todos puedan asistir a una escuela digna y segura y esto no será posible si sólo se hace una cuenta donde se divida el presupuesto de reconstrucción entre las escuelas afectadas.

Que el gobierno no parezca interesado en valorar el papel de la sociedad civil no implica un adiós a la participación ciudadana, minimizar los espacios ya existentes es un error pero desconocer el potencial de los ciudadanos en esta contingencia puede serlo aún más

Esperamos que la construcción de los edificios sea sólo la parte más externa de lo que México necesita:  la reconstrucción de su sociedad, con una ciudadanía fuerte, participativa y corresponsable. Las lecciones que nos dejaron los sismos fueron sólo el comienzo, que la fuerza no se agote y que nuestros gobiernos comprendan que el ciudadano es ya real; no imaginario.

Fuente del articulo: http://www.educacionfutura.org/adios-a-la-participacion-ciudadana/

Fuente de la imagen: http://www.educacionfutura.org/wp-content/uploads/2017/08/Puebla2-768×576.j

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