Page 2 of 2
1 2

Venezuela : África allende la oscuridad heredada del imaginario occidental Una toma de conciencia

América del Sur/ Venezuela /Julio 2016/María Gabriela Mata Carnevali/Artículo/Revista Humania del Sur. Año 5, Nº 8.

África allende la oscuridad heredada del imaginario occidental Una toma de conciencia

Autora:

María Gabriela Mata Carnevali

Cómo hacemos historia, refleja nuestra forma de pensar sobre la política, y cómo participamos en política afecta nuestra forma de ver lahistoria (Frederick Cooper, 2005). En consecuencia, como afirma Shotwell (1982), “la historia de la historia es el relato de aquel ahondar en la memoriay la curiosidad científica que da la medida de nuestra conciencia social y de nuestra vida intelectual”. “La historia de África, como la de la humanidad, es en efecto, una toma de conciencia” (Ki- Zerbo, 1981).
Más allá del “panafricanismo” y su vertiente académico cultural,el “afrocentrismo”, hace ya más de veinte años que se viene consolidando una brillante corriente historiográfica dedicada a los estudios de la “subal-ternidad”, que propone una conjunción interesante de las posturas antico-colonialistas con las teorías post modernas. Dentro de este marco la cultura se entiende como un “elemento esencial en la producción y reproducción cotidiana de la vida social”, incluyendo las relaciones de poder.
En otras pa-labras, es el proceso de resolución de la dominación y subordinación dentro de las relaciones sociales lo que define la cultura de los grupos dominantes y subordinados, colocando a la primera en posición hegemónica sobre la segunda, lo cual no siempre es aceptado pasivamente por parte de la población sometida.
Esto implica un dinamismo que niega la visión tradicional de la cultura como un inventario estático de costumbres y pensamientos particulares, y sitúa esta categoría como un elemento constitutivo integraldel proceso histórico; lo cual, a su vez, resalta la condición de agente de los seres humanos, es decir, su poder para cambiar el entorno en el que se desenvuelven (Dube, 1999). Para efectos de este trabajo, nos acogemos a este novedoso enfoqueque nos permite abordar las imaginaciones imperiales y las construcciones coloniales que perduran en la historia contemporánea de África, interrogar la añeja dialéctica de Imperio e Ilustración, y cuestionar la dinámica de raza y razón que sigue moldeando nuestras formas de conocimiento, pero, sobre todo, nos invita a profundizar en la comprensión de la dinámica de un continente que busca dejar atrás el rol “subalterno” que le ha sido asignado y que lo caracteriza como la parte “oscura” de nuestro mundo, reconociendo Humania del Sur 29 la “agencialidad”, o capacidad de acción, de los hombres y mujeres que luchan por hacer de su continente un lugar mejor para vivir.
Las ideas desarrolladas parten de dos observaciones planteadas en primera instancia por Achille Mbembe (2001: 6):
           1) Lo que se entiende por realidad social en África hoy es el producto de las prácticas sociales objetivadas, las cuales van mucho más allá del discurso y del lenguaje, aunque por supuesto, la experiencia existencial del mundo está, allí como en todas partes, estructurada simbólicamente a través del lenguaje.
           2) El sujeto africano no existe separado de los actos que determinan su realidad, o separados del proceso a través del cual esas prácticas son imbuidas de significado.
Adaptándolas a nuestro propósito tendríamos entonces que:
          A) Las prácticas de la dominación post colonial que configuran la realidad africana, y por tanto su ubicación en el orden internacional, obedecen , o son reflejo de, el imaginario occidental
     B) Los africanos, como sujetos de su propia historia, crean nuevos significados que pueden ser interpretadosde distintas maneras, y que nosotros escogemos leer como señales de un cambio en gestación.
 África en el orden internacional: Un producto del imaginario occidental
La discusión acerca de cómo es producido el conocimiento sobre África, por quién y con qué objetivos, resulta por demás relevante en relación a la posición que ocupa el continente en nuestra mente y en el orden internacional.
Para la gran mayoría de la gente, sobre todo en América Latina, a pesar de los innegables avances en el diálogo multilateral promovido por las cumbres ASA.
        1 .-África se encuentra al margen del acontecer internacional. Por lo tanto, no es de extrañar que a dicha región con excepción de Sudáfrica y los países de la OPEP– se la considere sumida en la pobreza, víctima de una cadena de guerras “tribales” o interétnicas, y fuera de la nueva dinámica mundial, o, en el mejor de los casos, integrada a ella sólo de manera superficial, lo que es atribuido a la incapacidad de los africanos para competir en el mercado libre ignorando, los que así piensan, los antecedentes históricos y los criterios políticos que explican las desigualdades en la economía mundial.
          2.- ¿Lecturas post coloniales?
Como el camino se hace al andar, otros nombres se han ido sumando
a la lista de africanistas críticos (algunos ya citados), cumpliendo un importante papel en la concienciación de las nuevas generaciones. Víctima de la trata de esclavos (siglo XVI al XIX), la Conferencia de Berlín y posterior repartición del continente (1884-1885), la tardía colonización (1900-1950),y ahora de la globalización, África necesita como nunca que sus pobladores se asuman como “sujetos” de su propia historia, para dejar de ser un “objeto” de la de los demás. Lamentablemente, pareciera que la historia del continente africano la escriben los medios de comunicación y ellos son responsables de que la imagen negativa heredada del imaginario europeo persista permeando incluso la producción académica reciente de la cual se retroalimenta en un
círculo vicioso. La información que nos llega de África rinde culto a la muerte, transmitiendo en vivo y en directo la agonía en los rostros de hombres, mujeres y niños africanos atrapados en guerras interétnicas, muriendo de hambre o víctimas de las inclemencias de la geografía y de enfermedades como el sida, la malaria y otras que hace tiempo dejaron de atormentar al resto del mundo. Parece que las cámaras y las plumas de los periodistas están para contar la historia de la muerte, no la intensidad de la vida y la fuerza de la esperanza. Cuando son generosos cambian la imagen de miseria por la de “exotismo»
Coda
Conviene, pues, mantener el esfuerzo por comprender una realidad tan compleja como la africana, para una mejor aproximación a la historia y los procesos contemporáneos que impactan a las regiones del mundo, con una conciencia clara de los conceptos y enfoques que vamos a utilizar. En lo que concierne a los estudios africanos, no podemos ubicarnos complacientemente en la época post colonial sin desmontar las formas y procesos asociados a la dominación colonial.

Pero, si podemos y debemos, siguiendo la línea de los estudios “subalternos”, intentar despojar al continente de sustatus de víctima reconociendo en sus hombres y mujeres, agentes capaces de cambiar las cosas; considerar en toda su valía el aporte de las sociedades africanas que luchan, rebosantes de vida y esperanza,  por abrirse camino ante las adversidades. África “emergente” merece al menos igual atención que la África “pobre”, “a punto de morir”, heredera del imaginario occidental. Concederle su espacio

contribuye a “desproblematizar” el continente, lo cual resulta deseable, nopara negar la oscuridad, sino para atraer la luz. Al fin y al cabo, “el búho de Minerva vuela de noche”, la sabiduría se despliega al anochecer luego de que los eventos ya han tenido lugar.

 

Referencias
Abramovici, P. (2005). Activisme militaire américain. Maniere de voir. 79.
Le Monde Diplomatique.
Anderson, Benedict (1991).Imagined Communities
. Verso, London (2nd edition),
pp: 1-8.
Bisbal, Marcelino (1999).Teoría de la Comunicación. Curso universitario de
locución. Caracas: UCV.
Blom Hansen T. y Stepputat F. (2001). States of imagination.
Carolina del Norte, USA. Duke UP.
Bou Bou Hama y J. Ki-Zerbo (1982). Lugar de la historia en la sociedad Africana. Historia General de África I.
París: UNESCO.
Comaroff, Jean and Comaroff Jhon (1992). Ethnography and the Historical Imagination
. San Francisco: Oxford, Westview Press.
Cooper, F. (2005). Colonialism in Question. California: University of California Press.
Dube Saurabh (2004). Post colonial passages: Contemporary History Writing on India. USA: Oxford University Press.
_____. (1999).Pasados poscoloniales. México: COLMEX.
Entralgo, A. (2005). El oro de la costa y otros recorridos.
La Habana: Instituto Cubano del Libro. Editorial de Ciencias Sociales.
Fall, Yoro K. (1988). L ́Histoire et les historiens dans l ́Afrique contemporaine. En:
René Remond ( ed. )
Être historian aujourdhui. Paris: UNESCO.
Fayolleo C. y Goldberg S. (1978): “Prólogo”. Narrativa africana . La Habana.
Harootonian H. (2000). Overcome by modernity: History culture, and community
in interwar Japan.Princeton: Princeton Universdity Press.
Hegel,G.W.F. (1982).
Fuente:http://www.saber.ula.ve/bitstream/123456789/31357/3/articulo2.pdf
Fuente imagen :http://api.ning.com/files/UNsexXQ7LVlZtVTqi*f-4UIJrgagv78Sl5xUl1oxLBuqyRTB-aTaHTuArpXUJOFqDFXEnyNr4CuGVCjau20ZmcWujl80HURY/PORLADIVERSIDAD.jpg
Comparte este contenido:

Mosonyi: Identidad patrimonial necesita mayor aporte de indígenas y afrosdecendientes

América del Sur/ Venezuela/Julio de 2016/Correo del Orinoco

Autor: Luis Ángel Yáñez
La Biblioteca Nacional, tomó la iniciativa de promover el libro, la lectura y la escritura como patrimonio material e inmaterial que nos identifica como venezolanos y nuestroamericanos; y que posiciona la archivología como ciencia que preserva y conserva el patrimonio y la memoria.
La interculturalidad es un factor determinante en la construcción de nuestra identidad patrimonial -como pueblo criollo mestizo- de allí la necesidad de incorporar en nuestro sistema educativo aspectos provenientes de nuestros pueblos originarios, sin embargo, a excepción del progreso que en este tema se ha experimentado en las escuelas fronterizas, escuelas bolivarianas, en la universidad indígena así como dentro de instancias del Poder Popular, se ha avanzado poco en el resto del país en esta materia.
Así lo sentenció Esteban Emilio Mosonyi, antropólogo y lingüista, Rector de la Universidad Nacional Experimental Indígena del Tauca durante su ponencia en el Segundo Encuentro “El libro, la lectura y la escritura como constructores de identidad patrimonial” que se desarrollo en la sede de la biblioteca Nacional.
“He visto muy poco esfuerzo por introducir elementos de las culturas indígenas y muy poca de los afrosdecendientes dentro de nuestra sociedad mestiza, lo cual perpetua el modelo de imponer una cultura, eurocentrista, sobre las otras con el objetivo de mantener las relaciones de colonialismo, dependencia y estructura de clases (…) faltan recursos, planificación y programas aunque existen esfuerzos como el de la Colección Bicentenaria donde podemos encontrar la adecuación del idioma castellano a lenguas originarias”.
Dentro de los mitos en contra de nuestras lenguas originarias, Mosonyi identificó que “todavía no se domina, ni se evalúa el valor de la lengua indígena, porque se cree que sólo sirven dentro de un estrecho margen cultural y que a medida que se amplía su uso comienzan las fallas de vocabulario o gramaticales que obligarían ha introducir tantos prestamos del español que se terminaría por transformar estos idiomas hasta el punto de dar paso a juajiroñol o wayuñol, los cuales ya no se reconocen como indígenas”.
Para Mosonyi el mito hay que derrumbarlo ya que los idiomas indígenas tienen vocabularios, sintaxis, instrumentos y patrones gramaticales suficiente para reproducir cualquier texto literario, administrativo o científico. Ciertamente, hay formas de resignificación de las palabras originales así como de introducción de elementos arcaicos de las propias lenguas, prefijos y otras muchas maneras de producir palabras nuevas que hacen innecesario ligar los lenguajes con el español.
LIBROS PROTAGONISTAS
El profesor Sady Loaiza, director de la Biblioteca Nacional, durante la inauguración aseveró que en el marco del 183° Aniversario de la creación de la Biblioteca Nacional, institución encargada de preservar el patrimonio histórico de la nación, se tomó la iniciativa de promover el libro, la lectura y la escritura, a objeto de que estos sean reconocidos como patrimonio material e inmaterial que nos identifique como venezolanos y nuestroamericanos; y posicionar la archivología como ciencia que preserva y conserva el patrimonio y la memoria.
“Este patrimonio nos permitirá, conjuntamente con otras ramas de las ciencias sociales y las humanidades, conservar el pensamiento y la palabra para las generaciones venideras; tal y como se desprende de la Declaración de México sobre las Políticas Culturales, 1982 donde se establece que el patrimonio cultural de un pueblo comprende las obras de sus artistas, arquitectos, músicos, escritores y sabios, así como las creaciones anónimas, surgidas del alma popular, y el conjunto de valores que dan un sentido a la vida. Es decir, las obras materiales y no materiales que expresan la creatividad de ese pueblo: la lengua, los ritos, las creencias, los lugares y monumentos históricos, la literatura, las obras de arte y los archivos y bibliotecas.”
ECOSOCIALES
La Biblioteca Pública del Zulia “María Calcaño” participartá mediante la intervención de Venus Ledezma, jefa del Departamento de Extensión, que presentará la ponencia “El Portal de la Vida: nuevo camino para la promoción de lecturas”, tema que comparte autoría con Yolanda Delgado, mediante la cual se pretende hacer un aporte en aras de la formación de conciencias eco-sociales. “Queremos reivindicar la convivencia respetuosa en comunión con los otros seres vivos y retornar a la memoria sabia de nuestros pueblos originarios, que bien se sabían parte del mundo y no su centro”. Acotó Ledezma.
ENDO-CULTURA
José Ángel Fernández, escritor, sociólogo y coordinador del Departamento Socio-Antropológico de la Biblioteca Pública del Zulia, presentará su ponencia denominada “La Preservación del Shikiirujutu Wayuu (Pensamiento Wayuu) a través de los cuentos escritos y los Jayeechi (relatos cantados), con fragmentos de textos de Miguel Ángel Jusayú y de Ramón Paz Ipuana. Cada presentación de los relatos cortos y jayeechi serán intercalados por la ejecución de un instrumento musical wayuu, como la tootoroyooin (clarinete ideóglota), maasi (flauta de viento) y la sawawa (flauta de viento).
Esta iniciativa que dentro del marco del “II Encuentro El libro, la lectura y la escritura como constructores de identidad patrimonial”, intenta demostrar la circulación del shikiirujutu wayuu.- pensamiento wayuu que se da en forma expedita a través de extractos y vocalización de fragmentos de aküjalaa / relatos) y jayeechi (relatos cantados) cómo procesos endo-culturativos en la sociedad wayuu.
Foto: Esteban Emilio Mosonyi: los idiomas indígenas tienen instrumentos y patrones gramaticales para reproducir cualquier texto
Fuente: http://www.correodelorinoco.gob.ve/comunicacion-cultura/mosonyi-identidad-patrimonial-necesita-mayor-aporte-indigenas-y-afrosdecendientes/

Comparte este contenido:

Una voz africana rebelde contra la injusticia

Por: Marco A. Gandásegui, Hijo

¿Puede África darle lecciones al resto del mundo? En particular, ¿a los pueblos de América nuestra? Aminata Traoré, quien fuera ministra de Cultura y Turismo de Mali y candidata a la Secretaría General de las Naciones Unidas, genera fuertes debates cuando se refiere a los problemas mundiales de la coyuntura actual: el terrorismo, la democracia y el desarrollo.

Los medios silencian las voces africanas. Parecieran no existir. Los periodistas Alex Anfrus y Elodie Descamps entrevistaron a Aminata Traoré en forma extensa. Aquí reproducimos lo esencial del mensaje que proyecta su voz a un mundo convulsionado y víctima del despojo.

¿Cómo analiza el fenómeno terrorista que asola África y todo el mundo?

En primer lugar hay que analizar rigurosamente las causas: ¿Por qué ahora? ¿Y por qué por todas partes? Precisamente porque se han globalizado la injusticia, la desesperación y el desprecio. En la década de 1990, como consecuencia de las políticas de ajuste estructural, sonó la alarma: ‘cada año hay entre 100 000 y 200 000 jóvenes diplomados que llegan al mercado laboral y el modelo económico no crea empleo ‘. ¿Qué se puede hacer? A menudo los jóvenes solo pueden elegir entre el exilio y el fusil. Estos dos fenómenos contemporáneos y concomitantes están vinculados intrínsecamente al lamentable fracaso de un modelo económico que Occidente no quiere cuestionar.
Para muchos medios y analistas el yihadismo emanaría directa y principalmente de la religión. ¿Considera suficiente esa explicación?

Si fuese así, ¿por qué no surgió mucho antes ese pensamiento del radicalismo religioso? Fue a partir de las décadas de 1980 y 1990 cuando numerosas personas abandonadas por culpa de las políticas neoliberales fueron a las mezquitas y al Corán a buscar respuestas al desempleo y a la exclusión. Si no hubiese sido así, en Irak los generales de Sadam Hussein no habrían encontrado islamistas en Abu Ghraib para sentar las bases del Estado Islámico. ¿Cómo llegaron a introducirse en los en los barrios pobres? ¿Por qué fascinan también a la ‘clase media ‘? Hay un vacío ideológico abismal que no se quiere reconocer.

Si en la actualidad los pueblos dispusieran de más justicia, más empleo y más respeto se podrían garantizar la paz y la seguridad, pero eso supondría que los que dominan deberían renunciar a parte de sus privilegios. No pueden. Eso sería hacerse el harakiri reconociendo que se equivocan. El modelo no crea empleo y no responde a las demandas sociales. Para disfrutar hoy de la paz, una paz auténtica y estable, y de la seguridad humana —que no hay que confundir con la ‘segurización ‘— hay que introducir en el debate los asuntos mineros, petroleros y otros. Garantizar la seguridad humana a los individuos por medio del empleo, la sanidad, la educación y otros servicios sociales básicos considerados gastos improductivos.

¿Cuáles son, desde su punto de vista, los desafíos de la sociedad civil y de los intelectuales africanos del siglo XXI?
Hay que ir más lejos en el trabajo de desmontaje de las ideas recibidas y de descontaminación de las mentes sobre el crecimiento, la emergencia y otras historias absurdas. Si el sistema fuese bien, ¿por qué se encontraría Europa en una crisis existencial que la está conmocionando? Pienso que las soluciones prestadas han revelado sus límites a la luz de nuestras experiencias, de nuestras vivencias, de nuestras aspiraciones. Por desgracia una gran parte de los que se denomina ‘la sociedad civil ‘ no se atreve a levantar las cuestiones que enfadan a los ‘donantes ‘. Localmente no pueden hacer nada sin la ayuda de la ‘comunidad internacional ‘.

Aminata Traoré concluye recordando a Patrice Lumumba, el héroe moderno de África:
A muchas personas que habrían podido y quisieron hacer cosas se lo impidieron. El asesinato de Patrice Lumumba fue el acto fundacional del caos político. Los asesinatos políticos a lo largo de las décadas de 1960 y 1970 traumatizaron y disuadieron a los dirigentes que querían fundirse con sus pueblos.
En la actualidad, cuando hablamos de la sociedad civil, a menudo está formateada, es prudente e incluso timorata. Ahora está surgiendo un sentimiento de revolución interna frente a la segunda recolonización del continente que no deja indiferentes a los africanos. Hay que capitalizar esos esfuerzos de cuestionamiento para desarrollar nuestra capacidad de proposición, de anticipación y de acciones transformadoras de nuestras economías y de nuestras sociedades en el sentido del interés común.

África se prepara para darle lecciones al resto del mundo.

Fuente: http://laestrella.com.pa/opinion/columnistas/africana-rebelde-contra-injusticia/2394716

Comparte este contenido:

Movimiento afrovenezolano trabaja propuestas culturales y pedagógicas para el currículum educativo

Cimarrones establecieron mesas de trabajo con el Ejecutivo

Caracas/ 6 mayo 2016 | Correo del Orinoco/ Luis Lovera Calanche

 Durante un coloquio denominado ‘Cultura, interculturalidad y pedagogía cimarrona’, el Poder Popular rindió un homenaje al profesor universitario, investigador y pedagogo Luis Antonio Bigott

Afrovenezolanos rindieron homenaje al revolucionario, profesor universitario y pedagogo, Luis Antonio Bigott, quien falleció el pasado 26 de febrero

El movimiento afrovenezolano estableció ayer diversas mesas de trabajo con organizaciones populares y representantes de los ministerios del Poder Popular para la Educación y para la Cultura, a fin de exponer distintas experiencias sobre las prácticas culturales, interculturales y de Pedagogía Cimarrona, de cara a la transformación del currículum educativo.

Durante un conversatorio denominado ‘Coloquio, cultura, interculturalidad y pedagogía cimarrona’, efectuado en la sede del Instituto de Patrimonio Cultural, en Caño Amarillo, Caracas, el director de Interculturalidad del despacho para la Educación, Benjamín Martínez, afirmó que actualmente se desarrolla una revisión profunda y compleja del currículum educativo.

Afirmó, en ese sentido, que deben crearse políticas para impulsar la práctica de la Pedagogía Cimarrona.

“Lo más importante es la descolonización de lo saberes y haceres. Sin transversalizar eso en el currículum educativo no hacemos nada”, subrayó durante el homenaje al profesor universitario e investigador Luis Antonio Bigott, quien falleció el pasado 26 de febrero, hombre ilustre con una amplia trayectoria profesional, siempre firme en su compromiso con la pedagogía crítica, la educación popular, la emancipación del pensamiento y la transformación de la educación universitaria nuestramericana.

Martínez reconoció, además, que el currículum educativo actual tiene sus limitaciones: sigue siendo occidental.

“He allí la importancia de una categoría que es la Afroepistemología, reflexionada durante muchos años por el profesor Luis Chucho García . No hay un concepto que englobe la diversidad de los pueblos africanos, ni las luchas de los cimarrones y de las cimarronas, quienes protagonizaron diversas formas pedagógicas propias para la reconstrucción de sus idiomas. Los separaron para que no se pudieran comunicar. Por eso este esfuerzo por impulsar la espiritualidad”, reflexionó.

Por su parte, la directora general de Interculturalidad de Min-Cultura, Kelly Potella, ratificó el apoyo a las propuestas del movimiento afrovenezolano, a través de diversas de diversos organismos como el Centro Nacional del Disco (Cendis) y la Fundación Editorial El Perro y la Rana, entre otros entes.

El profesor universitario y escritor Luis Chucho García instó a las autoridades a generar un documento de trabajo junto al Poder Popular, para impulsar líneas de trabajo concretas.

Al mismo tiempo, insistió en la necesidad de reconocer el carácter autónomo de los movimientos sociales. En ese sentido, citó un adagio del pueblo Fon: ‘Si no nosotros no entramos en un juego, otros están jugando por nosotros’.

“Es importante el tema del conocimiento. Si nosotros no tenemos un conocimiento desde adentro (…) nuestras luchas no van a tener sentido”, argumentó.

El proyecto de la pedagogía cimarrona plantea la elaboración de la biblioteca afrovenezolana

PROYECTO CIMARRÓN

El proyecto de la Pedagogía Cimarrona plantea la elaboración de la Biblioteca Afrovenezolana, en el contexto del Decenio de los Pueblos Afrodescendientes (2015 – 2024), aprobado por la Organización de las Naciones Unidas, bajo los principios de justicia, reconocimiento y desarrollo.

La biblioteca estará dirigida en tres instancias: 1) La publicación de textos referenciales sobre la afrovenezolanidad, para las y los docentes 2) La publicación de texto escolares para los alumnos en las diferentes modalidades 3) La publicación de materiales didácticos, así como vides, calendarios, juegos entre otros.

Durante el conversatorio, los especialistas hicieron sugerencias para la puesta en práctica de la cultura, la interculturalidad y el patrimonio cultural de la afrovenezolanidad en el sistema educativo. Igualmente, conversaron sobre las distintas experiencias de las prácticas culturales, interculturales de la pedagogía cimarrona.

Benjamín Martínez: «Lo más importante es la descolonización de los saberes y haceres»

CULTURA, INTERCULTURALIDAD Y PEDAGOGÍA CIMARRONA

Cultura, interculturalidad y Pedagogía Cimarrona son tres segmentos totalmente articulados para la comprensión de la afrovenezolanidad, no solo en el sistema educativo bolivariano formal, sino en el contexto social comunitario que trasciende la territorialidad afrovenezolana.

Las experiencias de la defensa del patrimonio cultural venezolano en el medio educativo se ha venido realizando desde que las y los africanos fueron secuestrados y traídos como esclavizados a estas tierras.

La actividad fue organizada por el Instituto de Patrimonio Cultural; la Fundación Afroamericana; la Diáspora Africana; el Movimiento Afrorevolucionario Juan Ramón Lugo; la Red de Organizaciones Afrovenezolana y la Red de Afrodescendientes de Venezuela.

Foto/Héctor Rattia
Caracas
Comparte este contenido:
Page 2 of 2
1 2