Cuba/06 de Enero de 2017/Radio Cubana
El 4 de enero de 1962 se creó el Departamento de Enseñanza Especial, momento que marca el inicio del sistema cubano de esa enseñanza. Aquí no había nada de eso. Ya en el curso 1977-78 se inició el plan de perfeccionamiento de la educación especial. Por esta época se inició también el desarrollo de los equipos necesarios».
Así recordaba Fidel el 4 de enero de 2002, al dejar inaugurada la Escuela Especial para niños autistas Dora Alonso, en Ciudad Escolar Libertad, La Habana. Acontecimiento que cubrí como reportera en una tarde muy fría, a través de una transmisión en vivo por la emisora Radio Rebelde.
Previo al comienzo del acto, el máximo líder de la Revolución realizó un extenso recorrido por los salones, aulas y otros espacios de la escuela para conocer en detalles sus peculiaridades. Así conoció de cerca la maravilla que resultó la nueva institución que tenía ante sí.
El intercambio con los maestros y especialistas duró más de media hora por lo que llené el espacio en el dial hablando sobre las características de la discapacidad, orígenes, causas y cómo la educación temprana permite que los niños tengan un mayor validismo para, con el tiempo, incorporarse de forma activa a la sociedad.
Fidel explicó algunas de las características claves de la discapacidad: «Un trastorno generalizado del desarrollo, caracterizado por su aislamiento, problemas cognitivos, comunicativos, sociales y del comportamiento» -estas no son palabras mías, sino de los técnicos que nos proporcionaron este material-, «unidos a un repertorio sumamente restringido de actividades e intereses, generalmente repetitivos y estereotipados».
«Este tipo de escuelas o el tratamiento del problema es costosísimo en el mundo». Me decía el responsable de la educación especial que habló allí. «Ya que en un país desarrollado puede costar siete mil, ocho mil o 10 mil dólares mensuales la atención de uno de los alumnos que padecen este problema, cuando sus familiares pueden pagarla».
En su discurso también les dijo a padres y directivos presentes: «Por esta época se inició también ya el desarrollo de los equipos necesarios. No quisiéramos omitir ninguno, voy a mencionar sólo, por ejemplo, el video-voz, los equipos de Medicid, Neurónica y más recientemente el Audic, que se desarrollaron para distintos fines y que hoy constituyen un importante apoyo para esta enseñanza».
«Hay otras consideraciones en torno a la importancia de la aplicación de una serie de programas que son verdaderamente impresionantes. Cito solo, por ejemplo, las escuelas de ciegos, dotadas con programas y equipos para el aprendizaje de la computación y las comunicaciones a través de la computación. En esta misma escuela hay cinco máquinas que tienen distintos usos».
Fidel les explicó que en todos los pedagógicos del país se estudiaba la licenciatura en educación especial y que se contaban, además, con círculos infantiles, salones y aulas especiales, hospitalarias en escuelas primarias, 15 círculos mixtos, 32 hogares para niños sin amparo filial y algunos alumnos reciben atención en sus casas por maestros ambulantes.
Les aclaró a todos que la educación especial era realmente todo un sistema. «Se garantiza la atención integral pedagógica, psicológica, física, médica y laboral a todos los niños con necesidades educativas especiales. Se atienden también en escuelas especiales los niños que son sordomudos y ciegos, esos tienen las dos características».
«Aquí se expresa la especial vocación de la mujer para trabajos tan abnegados, que requieren de un sentimiento maternal, como son las labores que desempeñan en estas escuelas».
«Nosotros hemos visto a los maestros, a los especialistas atendiendo a los niños, y se comprende perfectamente que requieren una atención muy especial. Me parece que una de las cosas más humanas que pueden observarse es una escuela como la que acabamos de ver ahora, y con toda razón alguien habló aquí de la abnegación de los maestros. Hay que ser personas verdaderamente consagradas al servicio de los demás; uno puede apreciar, cuando los ve ahí con su alumno, el incesante trabajo, el esfuerzo, y, además, la infinita satisfacción que experimentan cada vez que logran un avance. Es muy humana porque, principalmente, tienden a lograr que el niño y el adolescente se preparen y se adapten a convivir y a comunicarse, que son los dos problemas principales que los afectan».
Recordaba Fidel en esa ocasión la participación en las olimpiadas de los alumnos de estas escuelas, y la asistencia de más de 40 mil atletas con discapacidad mental. Mencionó sus resultados y medallas alcanzadas.
Dijo, además, que en 1990 surgió, por acuerdo de los participantes en el Congreso de Pedagogía en el país, el Centro de Referencia Latinoamericano para la Educación Especial.
«Desde que comenzó la batalla de ideas y las nuevas medidas relacionadas con la educación y la cultura -afirmaba Fidel- todos los nuevos medios se han ido aplicando a las escuelas especiales. También se están aplicando los programas de informática, y han demostrado ser un instrumento excelente para este tipo de enseñanza».
En el grupo de las primeras 67 escuelas dotadas con las 312 máquinas que hoy están funcionando, se incluyen las escuelas de ciegos y sordos, la escuela para limitados físicos motores y las escuelas de conducta en la capital. Está prevista la instalación de otras 851 máquinas en el presente curso escolar, con lo cual el programa de informática beneficiará a la totalidad de las escuelas.
«Hoy aquí hemos tenido el privilegio de visitar e inaugurar una de las más humanas de las instituciones para atender a seres humanos y, de cierta forma, con la experiencia que aquí se adquiera, estaremos ayudando, poniendo un granito de arena en la solución de los problemas en los otros países».
«Ya se dijo que nuestro país era centro de referencia en América Latina sobre enseñanza especial; pero les aseguro que puede hablarse de un centro de referencia mundial. Trato de pensar y no recuerdo nada ni parecido a lo que en nuestro país se ha hecho en este tipo de educación. Y muy conscientes, como estamos, de que es muy poco y también de que estamos avanzando rápidamente en este campo, sí, Cuba se convertirá en centro de referencia del mundo, y no solo en esto, sino en otras muchas cosas».
Con la presencia de Fidel, la inauguración de la escuela especial Dora Alonso, para niños autistas de Ciudad Escolar Libertad, constituyó el 4 de enero del 2002 una experiencia inolvidable.
Fidel lo ratificó en su discurso cuando afirmaba: «Estas escuelas ayudan a reducir los sufrimientos y muchos de los problemas los resuelven, y cualquiera que sea el dolor de tener un hijo con alguna dificultad, saber que toda la sociedad se preocupa por ese hijo y que la nación invierte los recursos que sean necesarios en ayudarlos, constituye una importante compensación de sus sufrimientos».
Fuente: http://www.radiocubana.cu/la-opinion/16268-experiencia-inolvidable-de-la-educacion-especial-con-fidel