¿Por qué en Europa las mujeres se autoexigen más y llegan más al final de los estudios?
Las proporciones son muy altas en el caso de la enseñanza primaria (hasta los 12 años), donde las mujeres suponen un 83,2 por ciento de todos los docentes, mientras que los hombres son un 16,8 por ciento. En secundaria, primer y segundo ciclos, la proporción es de 61,5 por ciento (mujeres) y 38,5 por ciento (hombres). Y esto no digamos en la enseñanza infantil y preescolar, donde la presencia de hombres es una anécdota casi. Como media, según concluye el informe Eurydice (http://eacea.ec.europa.eu/education/eurydice/key_data_en.php), un tercio de los docentes son hombres y los dos tercios son mujeres en las enseñanzas primaria y media.
Por otro lado, en la enseñanza superior o universitaria, la distribución de estudiantes universitarios por sexo, según las mismas fuentes, en el curso 2013-2014, el 54,4% de los estudiantes universitarios son mujeres, sin embargo este porcentaje sube entre la población egresada (titulada) en que un 57,3 por ciento de los que consiguen graduarse son mujeres, pues entre los hombres se observan más abandonos de las aulas antes de terminar los estudios.
¿Tiene que ver la distribución por sexo de los docentes en las enseñanzas primaria y secundaria, con los resultados universitarios? ¿Por qué en Europa las mujeres se autoexigen más y llegan más al final de los estudios? Este es un estudio que no se ha hecho, o no se ha hecho en profundidad. Lo cierto es que a los niños varones y a los adolescentes sienten tener una exigencia menor.
Tibor Navracsics, comisario de Educación, Cultura, Juventud y Deporte de la Unión Europea, presentó los retos de la enseñanza en Europa de cara al año 2020, afirma que «el profesorado juega un papel crucial en la vida del alumnado, ya que le sirve de guía para lograr sus objetivos y modela sus percepciones. Ese es el motivo por el que ‘Educación y Formación 2020’, que es una estrategia europea en el ámbito de la educación y formación, presta especial atención al papel del profesorado, desde su elección, formación inicial y desarrollo profesional continuo, a sus oportunidades profesionales».
Luego, si juega «un papel crucial», hay que señalar que en la enseñanza hasta los 12 años está impartida por mujeres, y por tanto el rol femenino domina en la vida del alumnado a esas edades. ¿Es esto bueno o malo? No hay estudios suficientes para poder llegar a conclusiones precisas. Por otro lado, entre los hombres no es atractiva la enseñanza a esos niveles –especialmente en primaria– y se vuelcan más en la enseñanza media y universitaria.
El mismo informe Eurydice señala que cerca del 90 por ciento de la profesión docente está contenta con su entorno escolar y con su profesión, pero más del 80 por ciento considera que su profesión es poco valorada por la sociedad, que se les tiene en poco. Por ello, Europa ha iniciado una campaña de concienciación en la sociedad para hacia una mayor valorización social del profesorado.
En realidad esto choca con el hecho de que en casi todos los países de la UE la profesión docente es tratada como cualquier profesión universitaria. Un hecho claro es que en muchos países (sobre todo los latinos) los profesores son funcionarios públicos en su gran mayoría con pocas expectativas de mejorar su sueldo, a medida que avanzan en su ejercicio.
Los países nórdicos tienen bajos sueldos al principio de su profesión docente, pero los incrementan bastante con los años de servicio, y no así en los países del sur donde prevalece un sentimiento de una cierta frustración por cuanto hay poca diferencia salarial entre un profesor con 2 años de antigüedad y el que lleva 20 años, y tampoco hay diferencia entre un profesor bien calificado con uno que no lo está tanto. Faltan estímulos. Prevalece el igualitarismo el cual no fomenta estímulos para mejorar o para generar ilusión de futuro.
Fuente: http://www.diaridetarragona.com/opinio/tribuna/59526/%C2%BFes-un-matriarcado-la-ensenanza-en-europar