América Central/El Salvador/04-02-2022/Autor@s: /Fuente: www.elsalvador.com
La ministra Carla Hananía de Varela afirmó que el modelo semipresencial es flexible porque permitirá seguir trabajando desde o fuera de las aulas, además se cuenta con protocolo de bioseguridad.
Entre alegría, nerviosismo y medidas de bioseguridad para prevenir contagios, miles de estudiantes del sector público volvieron este lunes a las aulas. Las autoridades educativas, quienes inauguraron el inicio del año escolar 2022 en el Centro Escolar República de Honduras, de esta capital, afirmaron que se trabajará en modelo semipresencial opcional, por segundo año consecutivo.
“¡Llegó el día, aquí estamos!, dijo la ministra Carla Hananía, quien durante la ceremonia inaugural estimó que son alrededor de 1.3 millones de estudiantes del sector público y privado que están ya en las aulas.
“Es una modalidad semipresencial y opcional, utilizando las diferentes plataformas que hemos puesto a disposición de maestros y alumnos que son la radio, la televisión, las guías impresas, la plataforma de Google Classroom. En resumen la educación sigue y no se va a detener”, afirmó.
En las últimas semanas, dada la incidencia de casos de covid entre la planta de docentes y administrativos, gremios de profesores del sistema de enseñanza pública han insistido en que las clases deberían comenzar virtuales, porque según argumentan no todas las escuelas guardan las condiciones y recursos para cumplir los protocolos de bioseguridad.
Hananía de Varela sostuvo que se cuenta con un protocolo de bioseguridad y si se respeta este protocolo las aulas y las escuelas seguirán siendo seguras, porque se está adoptando la responsabilidad entre padres de familia, maestros, directores, ministerio de Salud y todo el personal del Ministerio de Educación.
“Si los padres de familia no quieren enviar a sus hijos no los envíen, siguen trabajando desde casa. Si los quieren enviar nosotros estamos vigilantes que el protocolo se respete. Si se detectan casos positivos el protocolo indica qué hacer y junto con el Ministerio de Salud se determina cuánto tiempo se va a cerrar y cuándo se va a abrir. Esta flexibilidad es la que nos permite dos cosas importantes: garantizar la salud, garantizar la vida y garantizar el derecho a la educación”, aseguró la funcionaria.
José Tránsito García Gómez, director del Centro Escolar República de Honduras, expresó que en los últimos dos años la institución ha tenido mejoras en las instalaciones, así como en el equipamiento de docentes y estudiantes, de ahí que este año quieren enfocarse en impulsar fortaleciendo los valores como la responsabilidad, excelencia, equidad y el dominio de las herramientas informáticas, además de la lectura y matemática.
En otros centros de la ciudad los directores, profesores, padres y alumnos hicieron lo propio en el primer día de clases, retando las adversidades, como se pudo verificar durante un recorrido.
El Centro Escolar República de Costa Rica, el Centro Escolar República de Argentina y el Instituto Nacional Francisco Menéndez (INFRAMEN), siempre de esta capital, son de los que están aplicando de forma estricta las medidas sanitarias: en las dos primeras instituciones se constató que no se permite la entrada a los padres de familia, mientras en el tercero se observó como los alumnos hicieron una fila para ingresar, se `puso en práctica el distanciamiento social y la aplicación del alcohol gel.
Los centros de enseñanza solo permitieron ingreso de padres o madres en casos excepcionales, como en aquellos en donde acompañan a niños con limitantes de movilización; como ocurrió en el Centro Escolar Costa Rica con Ángel, un pequeño que en el pasado sufrió una trombosis cerebral.
En opinión del profesor Hugo Canjura, director del INFRAMEN, los jóvenes han asimilado con con gran entusiasmo el regreso a clases: “La situación de la pandemia no podemos obviarla, por lo que hemos decido empezar con los primeros años”, recalcó.
Canjura precisó que determinaron dividir a los estudiantes en dos grupos, uno de ellos tomará las clases presenciales y el otro de forma virtual, dado que ahora tienen computadora y les es más fácil.
“Cada alumno debe tener la mascarilla, se les toma la temperatura, el uso de alcohol gel. Hemos rotulado para que ellos estén constantemente pendientes de las medidas”, agregó Canjura.
En el INFRAMEN también se pudo observar que en las aulas solo se permite 20 estudiantes, a cada alumno se le entregó una mascarilla, los pupitres están distanciados y los que no se pueden utilizar tienen una calcamonía como indicativo.
La opinión de los padres en torno al regreso a clases presencial está dividido. Este lunes, algunos padres se decantaron por la idea de que sus hijos tomen las clases presenciales y otros por la virtualidad.
Natividad Vásquez Pérez, de 41 años, quien llevó a su hija Maritza Esmeralda Morales Vásquez, de 12 años, al Centro Escolar República de Costa Rica, dijo que son mejores las clases presenciales y se mostró confiada de que su hija no se contagie. La madre contó que la escolar atenderá el sexto grado y según detalló tiene dos vacunas contra la covid-19.
Para Herber Rivera, de 57 años, otro padre de familia que llevó a su hijo Guillermo Rolando Rivera, de 15 años, al Centro Escolar República de Costa Rica, la opción es la educación virtual. Según dijo este lunes será el único día que asistirá a la escuela de forma presencial para recibir las indicaciones, el resto del año estudiará desde casa para evitar que se enferme.
Aunque Guillermo Rivera ya tiene las dos dosis de vacuna anticovid, su padre señaló que muchos de sus familiares ya sufrieron la enfermedad y la variante ómicron, de ahí que no quiere que su hijo corra el mismo peligro.
María Guadalupe Hernández, de 33 años, quien tiene dos hijas en la Escuela Costa Rica (Luisa Michelle Hernández, de 7 años, y Brixia Adriana Hernández, de 11), dijo que “me da un poco de miedo pero ellas querían venir”. En este caso ambas están vacunadas.