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Palestina y las voces que han visibilizado el genocidio

Por: Karen Campos Rodríguez

“Palestina Libre desde el Río hasta el Mar” -Organización para la Liberación de Palestina-

“Hemos visto cómo un coro cada vez mayor de voces, incluidas, voces que antes apoyaban a Israel se desvían a otra dirección. Eso nos preocupa porque no creemos que contribuya a la seguridad o vitalidad de Israel a largo plazo…”. Jake Sullivan – Asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca-

De acuerdo con la publicación del 23 de mayo en RT ver [1], El Asesor de Seguridad estadunidense, Jake Sullivan expresó que el reconocimiento de Palestina como Estado por parte de naciones como España, Irlanda y Noruega, no es conveniente por razones de seguridad de Israel, ya que, las decisiones se deben hacer mediante negociaciones y no por decisión unilateral.

Lo anterior expuesto, es sin duda, una postura arbitraria y antidemocrática en el contexto internacional que distingue a Estados Unidos por su política, intervencionista, injerencista y colonialista.

Desde hace décadas, la Sociedad Internacional ha atestiguado el desplazamiento forzado y los crímenes de lesa humanidad a los que se ha enfrentado el Estado Palestino en un contexto de silencio y la complicidad por parte de Occidente ante un salvajismo estrepitoso del sionismo israelí, en una era en la que resulta inconcebible la figura del genocidio.

Bajo la justificación de la legítima defensa, el sionismo israelí emprendió desde octubre de 2023 una “contraofensiva” contra Hamás derivada de la operación “Tormenta de Al-Aasa”, misma que ha sido el resultado de las constantes violaciones al Derecho Internacional en la Franja de Gaza en un inicio.

Sin embargo, ante los bombardeos incesantes, la sociedad civil global ha quedado conmocionada ante el catastrófico escenario de violencia e incertidumbre, ya que pareciera que los colonos israelíes buscan el exterminio de la población palestina.

La legítima defensa está reconocida en el artículo 51 de la Carta de la Organización Naciones Unidas (ONU).

De acuerdo con Vázquez (1998) los elementos de validez de la legítima defensa son:

“a) Amenaza de un daño grave, inminente e irreparable.

  1. b) Que no haya medio de escapar a tal amenaza si no es con un recurso a los propios medios de defensa.
  2. c) Que la reacción defensiva sea proporcional al daño cuya amenaza se cierne sobre el sujeto.
  3. d) Que la acción de la legítima defensa sea de carácter provisional, tendiente a evitar un daño, y sin pretender imponer un castigo”.

La escalada israelí orquestada por el primer ministro y genocida Benjamín Netanyahu, en complicidad con Occidente, principalmente por su aliado, Estados Unidos encabezado por Joe Biden y su gabinete, han emprendido un genocidio sin precedentes en la zona de la Franja de Gaza y Rafah.

Justo el pasado 15 de mayo, se conmemoró el 76 aniversario de la Nakba de Palestina de 1948, en el cual se recordó la ocupación forzada por parte de Israel en medio de un nuevo genocidio por parte del sionismo israelí y la Guerra de Netanyahu, cuyos antecedentes remontan casi a finales de la Primera Guerra Mundial (1917), ya que ante el ascenso militar alemán en la Gran Bretaña que les llevaría a la capitulación, el ministro de asuntos exteriores británico Arthur James Balfour, buscó aliarse a lxs judíos sionistas que buscaban la creación de un Estado.

Esta alianza además de ayudarles militarmente a combatir con Alemania y el Imperio Turco-Otomano, este último con mandato en Palestina, después de que al finalizar la Primera Guerra Mundial la Sociedad de Naciones, impusiera la administración del territorio al Reino Unido como coste de la Guerra, buscaban emprender una estrategia geopolítica a través del Canal de Suez, el cual representa hasta nuestros días, una de las vías fluviales más importantes del mundo, cuya conexión une a Europa con el Océano Índico, así como con Estados de Asía-Pacífico y el Mar Arábigo.

A cambio, Balfour se comprometió con los sionistas a favorecerles al establecimiento de un asentamiento en territorio palestino, por lo que con la redacción de la Carta de Balfour se asentaron las bases jurídicas de lo que hoy es geográfica y políticamente Israel, en un acto de imposición e ilegitimidad.

De acuerdo con el documento: –La Cuestión del Palestina y la Asamblea General- de la Organización de las Naciones Unidas, “en la resolución 181 (II), la Asamblea General decidió dividir a Palestina en dos Estados, uno árabe y otro judío, con régimen internacional especial para Jerusalén”.

“Después de la Guerra de la Guerra de 1948, la Asamblea General, en su resolución 194 (III) de 1949, estableció la Comisión de Conciliación de las Naciones Unidas para Palestina para ayudar a las partes a alcanzar una solución definitiva reafirmando al mismo tiempo los derechos de lxs refugiados palestinxs al regreso y a la restitución”. En la resolución 3236 (XXIX) se refirmaron los derechos inalienables de lxs palestinxs a la libre determinación, la independencia, la soberanía nacionales y el derecho de regresar a sus hogares”.

Pareciera una falacia lo anteriormente expuesto por la Asamblea General ante un concierto de naciones, hoy, con pronunciamientos sin acciones, discursos pueriles vacíos y de doble moral, así como la nula credibilidad de la ONU ante un genocidio de proporciones descomunales, ya que, ante la mirada internacional, a Palestina se le ha violentado de la manera más atroz y flagrante, violando toda jurisprudencia, el Derecho Internacional y el Estatuto de Roma principalmente.

Es importante mencionar que actualmente Palestina se encuentra en calidad de observador permanente en Naciones Unidas. Asimismo, hay que precisar que no tiene ejército debido a los acuerdos de Oslo en los que les negaron el derecho, por lo que es sionismo se han impuesto con el control del espacio aéreo y marítimo, violando así también, el Derecho Aeronáutico y el Derecho Marítimo Internacional, situación que les ha posicionado en desventaja debido a la superioridad armamentista y tecnológica del sionismo israelí, por eso es que sólo se puede contextualizar esta masacre como la guerra de Netanyahu y genocidio.

En estos momentos es importante revisar el preámbulo del Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional, así como el contenido de los artículos 1 al 8 para cuestionarse a quién le favorecen los lineamientos de la justicia internacional.

Es importante destacar, que de acuerdo con el Derecho Internacional y el Estatuto de Roma de la Corte Penal Internacional [2] lo siguiente:

Artículo 5. crímenes de la competencia de la corte 1. a) el crimen de genocidio; b) los crímenes de lesa humanidad; c) los crímenes de guerra; d) el crimen de agresión.

Artículo 8.  la Corte tendrá competencia respecto de los crímenes de guerra en particular cuando se cometan como parte de un plan o política o como parte de la comisión en gran escala de tales crímenes. 2. a los efectos del presente estatuto, se entiende por “crímenes de guerra”: i) el homicidio intencional; i) la tortura o los tratos inhumanos.

De acuerdo con Vázquez (1998), “En relación con los crímenes de guerra debemos mencionar dos instrumentos convencionales importantes; la Convención para la prevención y la Sanción del delito de genocidio y la convención sobre la imprescriptibilidad de los crímenes de guerra”.

En medio de un genocidio discursos sobran y las acciones son escasas o nulas por parte de los Estados, salvo aquellos que se han atrevido a romper relaciones diplomáticas con Israel o a unirse a la denuncia ante la Corte Internacional de Justicia impuesta por Sudáfrica por las incesantes violaciones a la jurisprudencia internacional, evidenciando así la fragilidad de los organismos internacionales pertenecientes a la estructura de la ONU, cuyo impacto recae de acuerdo a las cifras oficiales proporcionadas por medios de información como Palestina hoy 2.0, (quienes en distintas ocasiones han sido silenciadxs en las redes sociales) con base en la última información del 13 de mayo de 2024 lo siguiente:

“Resumen del GENOCIDIO EN Gaza [3]:

-220 días de genocidio.

-3.123 masacres cometidas por el ejército de ocupación.

-45.091 entre asesinados y desaparecidos.

-10.000 desparecidos.

-35.091 asesinados que llegaron a los hospitales.

-15.103 niños asesinados.

-31 niños muertos por hambre.

-9.961 mujeres asesinadas.

-492 asesinados del personal médico.

-69 asesinados de la Defensa Civil.

-143 periodistas asesinados.

-7 fosas comunes hechas por Israel en hospitales de Gaza.

-520 cuerpos encontrados en fosas comunes.

-78.827 heridos.

-11.000 heridos necesitan ser trasladados a otros países para recibir tratamiento

-17.000 niños viven sin sus padres o uno de ellos.

-11.000 heridos con necesidad de viajar para recibir tratamiento.

-10.000 pacientes con cáncer enfrentan el riesgo de muerte.

-1.095.000 pacientes con enfermedades infecciosas.

-20.000 casos de infección por hepatitis viral.

-60.000 mujeres embarazadas en riesgo.

-350.000 pacientes con enfermedades crónicas sin control y tratamiento adecuado.

-5.000 secuestrados por Israel de Gaza.

-310 secuestrados de personal de salud.

-20 periodistas secuestrados.

-2 millones de desplazados.

-103 escuelas y universidades quedaron completamente destruidas.

-311 escuelas y universidades parcialmente destruidas.

-247 mezquitas completamente destruidas.

-326 mezquitas parcialmente destruidas.

-3 Iglesias atacadas y destruidas.

-86.000 viviendas quedaron completamente destruidas.

-294.000 viviendas parcialmente destruidas.

-75.000 toneladas de explosivos arrojados por Israel.

-33 Hospitales fuera de servicio.

-55 centros de salud fuera de servicio.

-160 instituciones de salud fueron parcialmente atacadas.

-126 ambulancias destruidas.

-206 sitios arqueológicos y patrimoniales destruidos”.

¿Acaso esto no es genocidio?

Por todo lo anterior, como Internacionalista, me uno a las jornadas de protesta civil a nivel internacional, pronunciándome con repudio hacia el genocidio perpetrado por el Estado ilegítimo de Israel y sus cómplices hacia nuestras y nuestros hermanxs palestinxs.

Expreso mi solidaridad, apoyo y alteridad a lxs estudiantes y docentes que a nivel internacional han alzado la voz de quienes han callado con bombas, ante una ola de represiones en el ejercicio de su derecho a la libre manifestación, por parte de quienes ostentan en sus dobles discursos la libertad, la democracia, la paz, seguridad y fraternidad internacionales.

En estos momentos la resistencia son las voces invisibilizadas, continuando con la exigencia a nuestros gobiernos del rompimiento de relaciones diplomáticas con Israel, así como el boicot comercial de sus cómplices comerciales.

El genocidio que Netanyahu emprendió con premeditación, alevosía y ventaja, ha tenido consecuencias catastróficas, la más dolorosa, las niñeces y civiles asesinadxs, mientras, los sobrevivientes han quedado con secuelas físicas y psicológicas irreparables, sin hogar, sin familia y sin ayuda humanitaria, ya que los sionistas han dejado sin alimentos, agua potable y servicio médico a familias palestinas en Gaza y Rafah, siendo esta última ciudad, la que protagonizó uno de los ataques más desgarradores en un campo de refugiados.

Palestina Libre por el Apartheid, el desplazamiento forzado, los crímenes de lesa humanidad, el genocidio y las violaciones a la jurisprudencia internacional.

Palestina Libre por lxs que ya no están.

Palestina Libre por quienes están resistiendo con miedo, hambre, sin hogar, sin acceso a la salud ya la educación.

Palestina Libre para que se haga justicia y se aplique el peso de las leyes internacionales a lxs criminales de guerra.

Palestina Libre por la autodeterminación y el retorno a sus territorios.

Palestina Libre por la lucha de sociedad civil que son la voz de Palestina.

Palestina Libre por un Estado que no tan sólo sea reconocido, sino que sea libre y soberano.

Palestina Libre por el cese al fuego inmediato.

Referencias:

France 24. 25 años después de los Acuerdos de Oslo, el conflicto palestino-israelí sigue sin resolverse. https://www.france24.com/es/20180913-acuerdos-oslo-conflicto-palestino-israeli

Lastchan, T. (15/11/2023). “Desde el Río hasta el Mar”, el eslogan de la discordia. DW. https://www.dw.com/es/desde-el-r%C3%ADo-hasta-el-mar-disputa-por-el-eslogan-propalestino/a-67412000

Naciones Unidas. La cuestión de Palestina y la Asamblea General. https://www.un.org/unispal/es/data-collection/general-assembly/#:~:text=La%20Cuesti%C3%B3n%20de%20Palestina%20y%20la%20Asamblea%20General&text=La%20cuesti%C3%B3n%20de%20Palestina%20se,r%C3%A9gimen%20internacional%20especial%20para%20Jerusal%C3%A9n.

Vázquez, S. (1998) Derecho Internacional Público. Páginas|392,415.

[1] https://actualidad.rt.com/actualidad/510437-eeuu-preocupado-creciente-aislamiento-israel

[2] https://www.un.org/spanish/law/icc/statute/spanish/rome_statute(s).pdf

[3] https://www.facebook.com/profile.php?id=61555823877181

Fuente e Imagen: La autora escribe para OVE

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La denegación de la infancia palestina

‘Sin niñez desde el nacimiento’ revela la opresión sistémica a palestinos ‘Denegación desde el nacimiento’ revela la opresión sistémica a palestinos.

Desde octubre cuando comenzó la última agresión de Israel contra Gaza descrita como “una fábrica de asesinatos masiva”, la deshumanización literal y real de los palestinos se ha intensificadoUNICEF ha calificado a Gaza de “cementerio de niños” y “un infierno en vida”, como resultado de los severos e implacables ataques de Israel.

La relatora especial de Naciones Unidas, Francesca Albanese, se refirió a la “denegación deliberada a la niñez desde el nacimiento” de los palestinos bajo la “ocupación eterna” de Israel, que ha causado un “daño interminable” a la población. Sin embargo, la violencia israelí contra los niños palestinos no es un fenómeno reciente.

‘Niega la niñez’ a los palestinos durante generaciones

Israel ha matado al menos a 14 500 niños palestinos desde el 7 de octubre. Sin embargo, los abusos de Israel contra los niños palestinos antes de esta guerra ya habían sido ampliamente documentados. El periodista Chris Hedges detalló la violencia de los israelíes contra los niños palestinos en Gaza en su libro de 2002 “La guerra es una fuerza que nos da significado”:

Se les ha disparado a niños en otros conflictos de los que he informado […] pero nunca antes había visto a los soldados llevar niños como ratones a una trampa y asesinarlos por deporte. […] “Todos tiramos piedras”, dijo Ahmed Moharb, de diez años. “Por el altavoz, el soldado nos dijo que fuéramos a la cerca a buscar chocolate y dinero. Luego nos insultaron. Luego lanzaron una granada. Empezamos a correr. Le dispararon a Ali por la espalda. No volveré a ir. Tengo miedo’.

La académica palestina Nadera Shalhoub-Kevorkian, cuyo trabajo se centra en trauma, crímenes de Estado y criminología, vigilancia, violencia de género, derecho y sociedad, y estudios sobre genocidio, acuñó el término “unchilding” (negación de la infancia) en 2019, para examinar críticamente el uso de niños palestinos como ventaja para lograr objetivos políticos.

Middle East Monitor informó que, entre 2000 y 2020, “las fuerzas de ocupación israelíes habían matado a 3000 niños. A algunos los mataron frente a los lentes de los medios internacionales, como a Muhammad Al-Durrah de 11 años”. En 2021, Defence for Children International también destacó los ataques de Israel contra niños palestinos, y Human Rights Watch observó un aumento en el número de niños palestinos que los israelíes ha matado en Cisjordania en agosto de 2023.

En 20202022, y mediados de 2023, Save the Children informó sobre los abusos punitivos sistemáticos por parte de Israel y el trauma bajo custodia de los niños palestinos, incluidos registros corporales sin ropaManifestaron que “el cargo más común que se les imputa a niños es el de lanzar piedras, por el que la pena máxima es de 20 años”.

Defence for Children International encontró que la mayoría de los niños procesados entre 2013 y 2018 experimentaron abusos por parte de israelíes mientras estaban bajo custodia. Ahmad Manasra se hizo conocido por pasar toda su adolescencia en prisión, incluidos dos años bajo régimen de aislamiento, lo que le provocó un grave deterioro psicológico. Según The Guardian, el encarcelamiento masivo de niños palestinos por parte de Israel representa “un universo oculto de sufrimiento que afectó a casi todos los hogares palestinos”.

«Los niños palestinos merecen crecer». Pancarta de manifestación pacífica a favor de Palestina en Berlín, 2 de diciembre de 2023. Foto del autor, utilizada con autorización.

El papel de los medios en promover la denegación de la infancia palestina

Dos artículos de Jason Burke de The Guardian, publicados el 22 y 23 de noviembre, ilustran la denegación de la infancia palestina representada en los medios. Burke señaló en ambos artículos que “los rehenes [israelíes] que serían liberados son mujeres y niños, y los prisioneros palestinos también son mujeres y personas de 18 años o menos”.

El uso de lenguaje divergente dentro del mismo artículo para referirse a los niños es paralelo a la jerarquía morir” versus “matar», que se utiliza para restar importancia a las muertes palestinas versus israelíes en los medios.

Los artículos de The Guardian siguieron un período intenso marcado por comentarios racistas denigrantes, incluidos los comentarios del primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu. en octubre, en los que llamó a los palestinos los “hijos de la oscuridad” y “animales humanos”.

The Guardian no es la única agencia de noticias que emplea un lenguaje divergente, vago o impreciso cuando hace referencia a niños y bebés palestinos. Associated Press se ha referido a los niños palestinos como “menores”, Sky News describió a una niña de cuatro años como  una “jovencita”, y The Washington Post ha utilizado el término “vidas frágiles” en lugar de “bebés prematuros”. Un vistazo diario de los principales titulares archivados de The New York Times del 22 de noviembre al 3 de diciembre revela un mínimo indicio de víctimas palestinas, lo que ciertamente no refleja el gran número de muertes infantiles que ocurrieron durante ese período.

Después de su publicación, The Guardian modificó ambos artículos mencionados anteriormente para referirse a los palestinos menores de 18 años como «niños». Para explicar el cambio, en una nota al final de los artículos escribieron: «Cualquier insensibilidad anteriormente expresada fue involuntaria».

El influenciador judío queer Matt Bernstein (mattxiv) declaró en Instagram: “Cuando nos permitimos ver a los palestinos como algo menos que seres humanos íntegros […] nos volvemos cómplices de nuestra propia bancarrota moral”.

El lenguaje utilizado en las noticias es crucial para comunicar detalles clave a los lectores. Un estudio de la Universidad de Columbia de 2016 encontró que al 59% de los enlaces publicados “no les hicieron clic y presumiblemente quedaron sin leer”, y subrayaron la importancia de los titulares de noticias al informar e influir en las audiencias. Las palabras utilizadas en los avances de las redes sociales, como el título y el tema, son críticos para quienes no leen más allá de los titulares para comprender el alcance de la situación.

«Es como si estuviéramos pagando en exceso por un pecado que no cometimos. Niña de tres años en Gaza». Pancarta de una manifestación pacífica a favor de Palestina en Berlín, 4 de noviembre de 2023. La cita es de Save the Children. Foto del autor, utilizada con autorización.

Niños racializados en alto riesgo

La denegación de la infancia no es exclusiva de los palestinos, y se pueden obtener perspectivas valiosas si se examina otros grupos racializados que también son objeto de violencia significativa.

En Estados Unidos, los niños negros tienen seis veces más probabilidades que los niños blancos de que la Policía los mate a tiros. Casos destacados, como los asesinatos de Trayvon Martin, de 17 años, Ma’Khia Bryant, de 16, y Tamir Rice de 12, ilustran el riesgo excesivo que enfrentan los niños negros en su vida diaria.

La investigadora Alisha Nguyen explica:

Para justificar el trato deshumanizante contra los niños negros, la lógica blanca afirma que los niños negros son menos inocentes y que, por lo tanto, deberían recibir menos protección y no merecen el mismo nivel de tolerancia en comparación con los niños blancos.

Más tarde, Steve Loomis, presidente de la Asociación de Patrulleros de la Policía de Cleveland, describió a Rice como «un niño de 12 años en un cuerpo de adulto» como manera de justificar la fuerza excesiva utilizada por el policía que asesinó al niño de sexto grado.

De manera similar a los comentarios de Loomis, ha habido intentos de justificar el asesinato de niños palestinos. El Ministro de Defensa israelí, Avigdor Lieberman, declaró en entrevistas de radio y en X el 30 de noviembre, “No hay inocentes en Gaza”. El presidente Isaac Herzog compartió el mismo sentir.

«No hay inocentes en Gaza”.

Como activista y educadora, Wagatwe Wajuki dijo en X:

Si uno se pregunta por qué los negros se identifican con la lucha por la liberación palestina: la negativa de los medios blancos a ver a nuestros hijos como niños resuena. […] Bajo la supremacía blanca, la infancia se racializa porque asocian la infancia con la inocencia y solo los niños blancos son considerados inocentes.

El periodista israelí Gideon Levy escribió en Haaretz sobre los niños que mató Israel:

Ninguna explicación, justificación o excusa podría jamás encubrir este horror. Sería mejor si la maquinaria propagandística de Israel ni siquiera lo intentara. […] Un horror de esta magnitud no tiene otra explicación que la existencia de un Ejército y un Gobierno que no tienen límites establecidos por la ley o la moral.

Fuente de la información:  https://es.globalvoices.org

Fotografía: Global voices. Parque infantil en Cisjordania. Foto de Justin McIntosh, agosto de 2004. Wikimedia Commons. (CC-BY-2.0).

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El genocidio se recrudece

Las imágenes son impactantes, infantes bajo los escombros de edificios, mujeres y hombres desgarrados por las máquinas de matar, los tanques sionistas toman sus posiciones estratégicas en Rafah, el último reducto de sobrevivencia palestina, donde el cruce a Egipto es ocupado por las bestias militares israelíes y la entrada de ayuda humanitaria está totalmente suspendida, al tiempo en que las bombas ininterrumpidamente iluminan la oscura noche de un genocidio descarado y cínico, ante el cual el imperialismo estadounidense calla y juega con el doble discurso mientras sigue aportando millones de dólares, y las potencias de la Unión Europea y la OTAN se han olvidado de las sanciones económicas y políticas contra Israel, siendo que con total descaro no emiten mensajes pidiendo un alto al fuego, justo cuando se hablaba de una oportunidad para el avance en las negociaciones.

La ONU dice que es inaceptable la ocupación de Rafah, pero su discurso queda varado en el desierto de las hienas que devoran sus funciones y emprenden el avance del despojo territorial contra Palestina. Este genocidio es alevoso, se viene preparando desde hace más de 75 años, se ha saboreado en el comedor sionista inhumano entre gusanos y bestias que juran ser los “elegidos” asesinando en nombre de un Dios que jamás aceptaría la barbarie que hoy vivimos. En Israel, una parte de su población, con clara orientación sionista, baila y celebra este genocidio, gestos de una deshumanización profunda, pues ¿cómo se han olvidado de que ellos lo vivieron ante los nazis y hoy lo recrea su Gobierno sin un mínimo de conciencia contra el pueblo palestino? El genocidio se recrudece y ya nadie lo puede negar, aunque con formas legaloides haya quien busque desviar la verdad, hoy asistimos al infierno en la tierra, y las bombas, los tanques, las balas y la muerte avanzan con descaro por encima de toda humanidad.

Pero, así como un sector de la población israelí celebra la barbarie, también un importante segmento del pueblo de Israel se manifiesta contra el genocidio y pide el fin del gobierno de Benjamín Netanyahu, como ya se hacía antes del 7 de octubre del año pasado. Asimismo, en gran parte del mundo, los pueblos claman por el fin del genocidio; la juventud y los trabajadores y trabajadoras de muchas naciones, alzan la voz por un cese al fuego y por el derecho de Palestina de existir y ser libre. En países como Estados Unidos, Francia, México, Argentina, Cuba, España, Alemania y más, los estudiantes toman las universidades y los espacios públicos para rechazar la barbarie sionista, sin importar el incremento de la represión de los gobiernos aliados de este genocidio, pues nadie que se sienta humano puede seguir en silencio ante este crimen de lesa humanidad.

Es humanamente imposible no sentir dolor e indignación ante las imágenes de muerte y brutalidad en las que se observa el daño a infantes, mujeres y hombres; seres humanos. Es inconcebible estar en silencio frente al genocidio, no se puede callar sin ser cómplice. No es tiempo de ser indiferente y jugar a la neutralidad, los gobiernos del mundo deben romper relaciones con Israel y llamar en unión a un inmediato cese al fuego, y los pueblos hermandados debemos seguir hablando y clamando por la libertad palestina, por la justicia global y el fin de esta barbarie cuya esencia no es otra que la inhumana sinrazón del sionismo y el imperialismo. Callar no es opción ante el genocidio contra Palestina.

Fuente de la información: https://insurgenciamagisterial.com

Fotografía: El diario

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Las protestas estudiantiles propalestina se extendieron en el mundo

No sólo piden el cese de hostilidades entre Israel y Hamas, sino que también exigen a las autoridades universitarias que pongan fin a cualquier acuerdo con instituciones, empresas u organismos de Israel.

Los campamentos en contra de la guerra en la Franja de Gaza, organizados por estudiantes de más de 60 universidades estadounidenses, no solo resultaron en más de 2,500 detenidos –según el último recuento del diario The New York Times–, sino que también generaron el anuncio de una huelga de hambre por tiempo indefinido por parte de al menos 14 alumnos de la Universidad de Princeton. Estas protestas se replicaron en países vecinos como Canadá y México, así como en países europeos como Francia, España, Reino Unido y Suiza. Además de exigir un cese al fuego inmediato, muchos estudiantes están exigiendo a las autoridades universitarias que pongan fin a cualquier acuerdo con instituciones, empresas u organismos de Israel.

Francia

En Francia, las autoridades quieren evitar una situación tensa como en Estados Unidos. Las fuerzas de seguridad desalojaron el viernes el campus de la Universidad de élite Sciences Po París, donde un centenar de estudiantes había lanzado el jueves una nueva ocupación. El desalojo se desarrolló sin incidentes, según informó la Policía de París en un comunicado.

Las autoridades de la universidad permitieron la entrada policial después que el gobierno pidiera a los rectores usar todos sus poderes para mantener el orden público. Esta fue la segunda manifestación en el lugar, tras un bloqueo previo realizado por unos 200 alumnos una semana antes, el cual fue disuelto por la policía el mismo día que se produjo.

Los agentes también expulsaron en los últimos días a estudiantes propalestinos que protestaban en universidades en Lyon y Saint-Etienne. El lunes hicieron lo mismo en la Universidad de La Sorbona de París, símbolo de las protestas de Mayo del 68. «La evacuación fue bastante brutal con una decena de personas arrastradas por el suelo, pero sin detenciones», dijo Rémi, un estudiante de 20 años que participó de la manifestación, a la agencia de noticias AFP.

Otros países europeos

En el este de España, la acampada en solidaridad con Palestina que inició el lunes en la Facultad de Filosofía de la Universidad de Valencia, decidió este sábado tomar el interior del edificio ante la falta de respuesta por parte del rectorado de la universidad y «a pesar de la negativa y la tentativa de la decana a llamar a la policía», destacaron representantes de la protesta. Estos reclaman el «fin del genocidio en Gaza» y el cese de acuerdos de las universidades e instituciones con cualquier empresa u organismo de Israel, informó la agencia de noticias EFE.

En Irlanda, estudiantes del Trinity College de Dublín acamparon en la institución y bloquearon el sábado la entrada a un edificio que suele atraer a muchos turistas. El presidente del sindicato estudiantil de la universidad, Laszlo Molnarfi, mencionó en la cadena RTE que los manifestantes también piden que su institución corte sus vínculos con Israel. El establecimiento destacó en un comunicado que «para garantizar la seguridad, el acceso al campus estará restringido a estudiantes, personal, residentes y miembros del departamento de deportes».

En Suiza, un grupo de estudiantes propalestinos que se encuentran desde el jueves haciendo una sentada en la Universidad de Lausana (UNIL) anunció que se quedarán allí al menos hasta el lunes, indicaron medios locales el viernes. El rector del centro educativo, Frédéric Herman, afirmó que no prevén realizar controles de identidad de los manifestantes ni imponer sanciones contra ellos. Los estudiantes exigen al rectorado la elaboración de una lista de las colaboraciones en curso con instituciones israelíes, así como su interrupción inmediata. Además, instan a un alto el fuego inmediato en la guerra y el restablecimiento de la financiación de Suiza a la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA).

En Reino Unido, el primer campamento universitario se instaló la semana pasada en la de Warwick, y después en los campus de las de Bristol, Sheffield, Manchester, Leeds y Newcastle. Una de las organizadoras, Stella Swain, detalló el jueves a los medios que todas las protestas hasta ahora fueron pacíficas y que no hay nada que indique que no lo serán. «Habría muy pocos motivos para una respuesta (policial)», sostuvo.

Canadá y México

En Canadá, activistas propalestinos también instalaron tiendas de campaña en la Universidad McGill de Montreal, la Universidad de Ottawa, la Universidad de Columbia Británica en Vancouver y en la Universidad de Toronto. El miércoles un juez de la provincia de Quebec se negó a ordenar el desalojo de un campamento estudiantil en la Universidad McGill. Ali Salman, portavoz de esa protesta, afirmó al diario The Gazette de Montreal que la institución financió el «apartheid en Sudáfrica y el genocidio de la población indígena del territorio canadiense». «McGill ha estado en el lado equivocado de la historia durante casi toda su historia. Así que estamos aquí para cambiar esto. Estamos aquí para exigir que se deshagan de algo que está mal, que es el genocidio que está ocurriendo en Gaza”, enfatizó.

En Ciudad de México, cerca de un centenar de estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la más grande del país, instalaron el viernes un campamento en los alrededores de la institución para reclamar al gobierno mexicano que rompa relaciones diplomáticas y comerciales con Israel y que la propia UNAM detenga cualquier tipo de colaboración con instituciones de dicho país.

Representantes de la protesta reivindicaron en una conferencia de prensa las intenciones pacíficas del campamento, pero no descartaron la posibilidad de que las autoridades los desalojen. Claudio Escobar, estudiante de Filosofía de 28 años, criticó la respuesta del gobierno del estadounidense Joe Biden ante las protestas estudiantiles en ese país. «Estos gobiernos están dispuestos a todo para acabar con el movimiento estudiantil más importante en Estados Unidos desde el movimiento antiguerra de la guerra de Vietnam», dijo a AFP.

Cuestionamiento a Israel y Occidente

Kevin Ary Levin, licenciado en sociología por la UBA y magíster en estudios de Medio Oriente por la Universidad de Columbia, explicó a PáginaI12 que la situación en Europa es similar a EE.UU., porque en muchos países de Europa hay una comunidad árabe y musulmana muy grande que se identifica con la causa palestina. «Era cuestión de tiempo hasta que este fenómeno estadounidense también irradiara en Europa, donde a lo largo de la guerra hubieron manifestaciones muy grandes, sólo que no fueron específicamente estudiantiles», aclaró.

El sociólogo también señaló que esta situación es el reflejo de una guerra que, políticamente, para Israel estuvo perdida desde el momento en el que empezó. «Parte de la estrategia de Hamas era reforzar las críticas a Israel, tanto dentro como fuera de la región, involucrando a ese país en una guerra que el actual gobierno no iba a poder rechazar al estar conformada por los sectores más belicistas y teocráticos dentro del espectro político israelí», detalló.

Por su parte, el licenciado en ciencias políticas Carlos Pereyra Mele, indicó a este medio que estas protestas universitarias muestran que los liderazgos europeos y estadounidenses se transformaron en aparatos que no representan a la sociedad. «Occidente perdió su rumbo histórico porque ya no maneja la situación global desde una posición de preponderancia, sino en una posición de descenso de poder internacional», apuntó el especialista en geopolítica del centro de estudios CENEGRI con sede en Pelotas, Brasil .

«Podemos ver con gran precisión que se están volviendo a realizar los acontecimientos de la década del 60 y 70 con la guerra de Vietnam, cuando las principales protestas contra la guerra iniciaron en el propio Estados Unidos y en los países europeos, acusando al gobierno de estar cometiendo crímenes», recordó el politólogo.

«Con la experiencia del conflicto en Gaza, estamos asistiendo al más espantoso genocidio en vivo y en directo y que no tiene una respuesta lógica ni humana de esos crímenes que se están cometiendo en nombre de una supuesta seguridad que todos sabemos que es falsa. Entonces, los estudiantes están desarrollando su histórico rol que es cuestionar el orden establecido, los modelos que se han impuesto durante décadas y que hoy hacen agua por todos lados», remarcó.

Informe: Axel Schwarzfeld

https://www.pagina12.com.ar/734060-las-protestas-estudiantiles-propalestina-se-extendieron-en-e

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Sobre la presentación de Crónicas intempestivas. Historia del ascenso del EZLN

El día sábado 16 de marzo se hizo la presentación de Crónicas intempestivas. Historia del ascenso del EZLN 1987-1994. Clavería 22, situada en la Alcaldía Azcapotzalco fue el espacio cultural que nos abrió las puertas. A continuación, reproduzco las notas que preparé para el evento.

Historia, texto y pretexto

Hola, buena tarde a quienes nos acompañan el día de hoy. Agradezco que hayan venido.

Antes de comenzar, no podemos dejar de condenar el genocidio que el Estado de Israel realiza contra el pueblo palestino, para lo cual pido un minuto de silencio ante la barbarie que ha desatado el reino del capital contra miles de niñas y niños, mujeres y hombres, un crimen contra la humanidad que nos está marcando profundamente.

Pido un aplauso al pueblo palestino que resiste, los llevamos en nosotros.

Saludo las luchas del trabajo, las resistencias. Siguen abiertas las venas en Latinoamérica; en México, sigue sin resolverse la desaparición forzada de los normalistas de Ayotzinapa.

Bien. Charlemos sobre el texto ¿Cómo fue que llegamos a estas Crónicas intempestivas?

Sería quizá a finales de los noventa que pasaba horas platicando con el entonces profesor Andrés, quién había sido el responsable de fundar la primera escuela neozapatista en la Selva Lacandona en el año de 1989 y fue electo en 1993 para presidir la Subsecretaría Popular del partido marxista Fuerzas de Liberación Nacional que se fundó en el Congreso de 1993, realizado precisamente en la escuela del EZLN donde fue director. Cabe mencionar que en aquel Congreso fue donde las comunidades indígenas decidieron el levantamiento armado de 1994.

Ya imaginaran las horas y horas de anécdotas en las que estábamos inmersos y que empezábamos a reflexionar. Interminables aventuras con las que pretendíamos explicarnos un complicado y comprometedor proceso que nunca había sido contado sino hasta el día de hoy, en este libro. Es un libro con información inédita, que no van a encontrar en otros trabajos, son sucesos de primera importancia que no se habían dado a conocer.

No se habían dado a conocer por lo comprometedor que resultaban, pero a más de treinta años de distancia, en un acto incluso de justicia, es necesario hacerlos públicos. Ya le pertenecen al pasado.

Si se dan cuenta, si no contáramos lo que contamos en el libro, estos procesos estarían borrados, como si no hubiesen acontecido. Ese es el pasado, constantemente lo estamos reconstruyendo desde el presente. Es así que el libro es una irrupción en el presente.

Por simple que parezca, van a leer el resultado de alrededor de veinte años de reflexión.

A mediados de la primera década del siglo XXI, fue que decidí realizar un trabajo sobre el EZLN. Para entonces el problema era que los testimonios no podían salir a la luz, por la cercanía de los eventos, apenas había pasado una década del levantamiento de 1994, y por secrecía militante era prácticamente impensable dar a conocerlos. Sin embargo, pensé que se podía hacer un rodeo, rearmar algunos procesos recurriendo a otras fuentes, secundarias, y tramposamente llegar a las conclusiones que solo podía dar el testimonio, pero sin decir que venía del testimonio, sino diciendo que se hacían a título de hipótesis. La opción no era descabellada. Carlos Montemayor y Daniel Bensaid, sin ser militantes del EZLN habían hecho comentarios muy atinados, sospecharon muy bien las dificultades de la organización más allá de la retórica con la que se conducían.

Fue así que recabé bibliografía que tenía que ver con el desarrollo de la izquierda en México y en el mundo. ¡Imagínense! Para los que no saben, en ese tiempo todavía pesaban los azotes masoquistas de la caída del bloque socialista y las condenas contra el marxismo. Para mí eso era un choque, porque detrás de la retórica con la que se fue presentando el EZLN cuando sale a la luz, todos los ahí involucrados habíamos crecido en un ambiente marxista por completo, algo extraño para los ajenos, y, por otro lado, dentro de esos mismos personajes externos había quienes usaban al EZLN para mostrar que lo nuevo ya no era el marxismo, sino los nuevos sujetos. No supieron y parece que hasta la fecha reniegan de ese pasado del EZLN que ellos ni vivieron, ni personificaron. Hay que decirlo con fuerza, el EZLN realizó una política marxista exitosa en las comunidades indígenas, que después tuvo que ocultar y administrar por proceso que detallo en el libro.

En ese entonces, el trabajo no pude elaborarlo porque ahora me enfrentaba a mi inmadurez intelectual que me impidió darle salida a lo que me proponía, en ese tiempo era lector, como lo habían sido muchos de los marxistas latinoamericanos, de Althusser y de Poulantzas; también leíamos a Marx, organizamos algunos seminarios de lectura de El Capital y estuvimos reunidos con varios camaradas que hoy nos acompañan, haciendo círculos políticos y de estudio.

Después de un periodo de más de una década, en 2016-2017 me sentí capaz de afrontar nuevamente el desafío. Para entonces, con dos amigos, José Luis Ríos y Gabino Ángeles, veníamos escribiendo públicamente desde 2009 bajo el nombre del Centro de Estudios, Documentación y Análisis Materialista. Y Gabino, que estaba en el doctorado, me comentó que llevaba una materia donde veían metodología de historia oral. Me proporcionó todo el material del curso y me puse a estudiar. Elaboré, con su asesoría, 14 bloques de preguntas, para extraer el testimonio principal. Aborté misión cuando empezamos con las primeras entrevistas, que grabamos. En una sesión nos llevamos alrededor de 4 horas y ni siquiera agotamos el bloque 1. Me volví a estampar con pared y dejé el proyecto.

Por fin, en 2021, en plena pandemia, encontré una mejor manera de recabar el testimonio para exponer los procesos que verán en el texto. En realidad, después de darle miles de vueltas, durante dos décadas, lo que pasó es que ya había elaborado, si se quiere inconscientemente, la concatenación del proceso, ya había ordenado los acontecimientos de tal manera que aparecen interrelacionados. Encontré una coherencia explicativa.

Mi sobrina, quien fue de las lectoras finales del texto, me hizo el señalamiento de algunas notas explicativas que de repente pareciera que pueden ponerse en otro lado, pero se trata de la dificultad del orden expositivo del texto, pues rearmé un contexto y para eso vi dos opciones: o buscaba reconstruir aquel entorno minuciosamente, tratando de no dejar huecos; o reconstruía lo necesario. Opté por la segunda opción, por consideración al lector, para no abrumarlo con cuestiones que consideré secundarias para lo que quería destacar, aunque fueran importantes. De ahí esas notas explicativas.

Del primer borrador hasta llegar al libro impreso, pasaron casi 3 años de arduo trabajo, de octubre de 2021 a febrero de 2024.

Bueno ¿qué van a encontrar en el texto? Van a encontrar un proceso no contado hasta la fecha, del entorno previo inmediato al levantamiento armado. ¿Qué no van a encontrar? Historias idílicas, no hay fantasías ni mitología que ha desbordado el movimiento, tampoco propagada, ni la clásica frivolidad, de que bailan los corazones mientras el reino del capital nos pasa la aplanadora. Hay que recordar que las comunidades indígenas neozapatistas están cercadas por militares y asediadas por el narcotráfico. Por cuestiones tácticas, me parece que eso se tiene que poner en primer lugar y en un segundo lugar la fantasía.

No estoy en contra de los mitos y la fantasía, pienso que son una vacuna contra lo totalitario de la razón moderna, que se impone como única y acusa a lo demás de desviación. Pero desconfió del romanticismo; encierran la desilusión y su reverso: la conversión política.

El texto contiene un esfuerzo crítico, espero que remueva la cómoda tranquilidad a la que se llegó desde el análisis. Espero zarandear las pasiones y la razón.

Por otro lado, el libro no contiene una pedacería de sucesos, sino que se tiene que apreciar la obra en su conjunto, así está redactada.

Y hago el anuncio de que escribí otra segunda parte, cargada a la reflexión filosófico política, pero por exceso de trabajo y valoración editorial, se decidió dejar para otra publicación. Así que este libro apenas es el primero. Ojalá más compañeras y compañeros militantes de aquellos años, se animen a escribir. Ni las Fuerzas de Liberación Nacional ni el EZLN son propiedad exclusiva de sus dirigentes o de luminarias, sino de las militancias que las conforman y suelen ser relegadas, escondidas bajo el tapete. Ellas son grandes protagonistas.

Ayer, miles de militantes organizamos un levantamiento armado, arriesgando el pellejo, pensando acabar con la lucha de clases, hoy seguimos buscando acabar con esa violencia en la historia desde otras formas de lucha, pero que siguen siendo anticapitalistas, porque la revolución es posible, no solo deseable.

Este evento, me permite hacer una invitación a la reorganización de las fuerzas anticapitalistas. Mantengámonos en contacto, volvamos a levantar las redes anticapitalistas, armemos nuevas redes de lucha, de resistencia, no tenemos que pedirle permiso a nadie, ni someternos al arbitrio de nadie, busquemos la libertad organizativa.

Uno de los desafíos principales de las luchas actuales es la lucha contra el trabajo precario. ¿Cuántos de los presentes no estamos en situación de precarización laboral? En ese sentido, el texto es un pretexto, nos permite reunirnos para pensar en cómo afrontar ese problema. La contradicción capital-trabajo sigue siendo nuclear en el funcionamiento del mundo; y no hay que olvidar que hasta el día de hoy no se han reconocido los Acuerdos de San Andrés. La lucha sigue siendo contra el capitalismo.

Muchas gracias.

Fotografía: Egbert Méndez

Fuente de la información e imagen:  https://insurgenciamagisterial.com

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Israel y Gaza: guerra de la información y periodistas en el punto de mira

La FIP cifra en casi un centenar el número de reporteros asesinados este año en todo el mundo. Tres cuartas partes de ellos han muerto cubriendo el asedio en la Franja

Al menos, sesenta y tres periodistas y trabajadores de los medios han muerto en Oriente Medio desde que empezara la última guerra de Gaza, hace poco más de dos meses.

Son algo más que un daño colateral. En buena parte, si no en la mayoría de los casos, esos periodistas –todos palestinos– no fueron bajas casuales de la guerra, como otras víctimas civiles palestinas, sino objetivo preciso y predeterminado de los ataques de Israel.

Varios más han desaparecido y un número impreciso resultó herido. Son cifras que surgen de un meticuloso recuento de la Federación Internacional de Periodistas (FIP/IFJ, International Federation of Journalists).

A esa siniestra estadística, debemos sumar los nombres de tres periodistas muertos en Líbano, entre ellos Issam Abdallah, de la agencia Reuters. El 13 de octubre se encontraba con otros seis colegas –de la cadena Al Jazeera y de la agencia francesa AFP– cuando dos impactos de las fuerzas israelíes los alcanzaron de lleno. Estaban en Alma Al-Chaab,una localidad situada a poco más de un kilómetro de la frontera líbanoisraelí. Resultado del bombardeo repentino: un muerto (el mismo Issam Abadallah) y seis heridos, entre ellos la fotorreportera libanesa Christina Assi, a quien después los médicos tuvieron que amputar una pierna.

“Amnistía Internacional ha investigado directamente en Líbano, donde hemos interrogado a nueve testigos de la escena: los propios periodistas afectados y otras personas que se encontraban en las inmediaciones”, ha declarado Marija Ristic, coautora del informe de Amnistía Internacional, quien insiste en decir que, a la vista de los vídeos disponibles (57 exactamente), “se ve claramente a los periodistas vistiendo chalecos con la palabra press, lo mismo que alguno de sus vehículos”.

Las fuerzas israelíes tuvieron tiempo para comprobar que se trataba de un grupo de periodistas

Según ha declarado Ristic al diario La Libre Belgique, “las imágenes y las grabaciones sonoras señalan que varios helicópteros y un dron israelí sobrevolaron el grupo durante 46 minutos antes del ataque”.

De modo que las fuerzas israelíes tuvieron tiempo para comprobar que se trataba de un grupo de periodistas. Otro elemento que destaca el citado informe es que hubo dos disparos de obús distanciados entre sí 37 segundos. “No se dispara contra alguien dos veces si no lo consideras un objetivo”, apunta Marija Ristic. No hay error posible, según ella, que define el ataque como “dos lanzamientos deliberados”.

Tres investigaciones, la mencionada de Amnistía Internacional, así como otras de la agencia AFP y del colectivo Airwars explican con claridad cómo sucedió y el origen israelí de los dos obuses. No había ningún objetivo militar posible en el entorno. Ni casas cercanas. Y los choques militares de ese día por allí acontecieron a un kilómetro y medio de distancia.

En este punto, antes de continuar la lectura, invito al lector a repasar el vídeo de Airwars que recrea las circunstancias.

Es sólo un ejemplo de la estrategia bélica de Israel contra los periodistas. En ese diario belga ya citado, Anthony Bellanger, secretario general de la FIP, lo analiza así:

“Incluso durante la guerra de Irak, que produjo numerosas víctimas entre el colectivo de la prensa, no pudimos ver esa manera de apuntar tan sistemáticamente [a los periodistas]. Empezó a ser así desde 2011, durante la guerra de Siria y con el desarrollo de las redes sociales, cuando Facebook, Twitter y otras redes similares, dieron acceso múltiple a la ciudadanía. Todo cambió. Desde entonces, los autócratas y los beligerantes quieren asumir por sí mismos la comunicación vía las redes sociales. No les gusta que haya otras fuentes en su lugar”.

En otros conflictos, los periodistas y la población pueden –en determinadas circunstancias– huir del frente de batalla. Eso no es posible en Gaza, donde desaparecen día a día los suministros y las reservas de agua, electricidad, medicinas y alimentos.

El estado de Israel –y al sur Egipto, no lo olvidemos– controla las puertas para entrar y salir. El secretario general de la FIP resume así el valor de la información y el riesgo diario que corren los periodistas palestinos en Gaza:

“Todos los civiles, incluidos los periodistas, están enjaulados en una cárcel a cielo abierto que se va transformando en una fosa común”.

Y además, ningún reportero del exterior ha sido autorizado a trabajar allí.

Todos los civiles, incluidos los periodistas, están enjaulados en una cárcel a cielo abierto

Así que la cobertura informativa sólo es posible para los mismos periodistas que son –a la vez– víctimas fáciles del conflicto armado. Una parte ha muerto en –digamos– acciones bélicas normales. Porque se encontraban en el momento y lugar no deseados, mientras ejercían su oficio. En otros casos, bastantes, hay más que indicios que apuntan hacia la responsabilidad israelí por medio de ataques intencionados, contra ellos y contra sus oficinas y domicilios familiares. Anthony Bellanger pone varios ejemplos que se refieren a ese modus operandi deliberado. Lo precisan las imágenes de Al Jazeera en el ataque contra la oficina de la AFP en Gaza.

“Se ve cómo un proyectil atraviesa la oficina destruyéndolo todo, pero sin afectar al resto del edificio. Israel utiliza la inteligencia artificial para identificar a los miembros de Hamás. Funciona igual para los periodistas. Cualquiera que cuente lo que pasa es [para los responsables] un enemigo potencial, fácilmente identificable”, concluye Bellanger.

En menor medida, lo que sucede en Gaza acontece en cierto modo en Cisjordania. Israel controla esa parte de Palestina con mano de hierro, aún más desde el 7 de octubre.

En territorio israelí, los corresponsales acreditados saben que en cualquier momento su acreditación puede ser cancelada y que entonces dispondrán de un plazo breve para salir del país. En algunas ocasiones, las autoridades israelíes utilizan simples pretextos administrativos, según Anthony Bellanger, quien subraya que llevar un chaleco con la mención press puede también convertir al periodista en un objetivo claro. “Un riesgo doble –reitera Bellanger– porque se asume [el peligro de] situarse en la zona y simultáneamente el de ponerse en el punto de mira” [con el uso de un chaleco en el que está escrito press].

En Gaza, la estadística de víctimas mortales de la guerra se aproxima a las veinte mil, la mayoría mujeres y menores de dieciocho años. Los gazatíes que sobreviven lo hacen en condiciones humanitarias execrables, lo más cerca que pueden de la (cerrada) frontera con Egipto. El 85% de los palestinos de Gaza está desplazado de su lugar de origen en un territorio reducido y estrecho, convertido en un gran trampa mortífera.

Ahora, no hay negociaciones para liberar más rehenes, mientras el Consejo de Seguridad de la ONU debate de nuevo la situación, tras el veto estadounidense favorable a Israel.

Los reporteros palestinos que siguen vivos y continúan ejerciendo su oficio de periodistas ayudan a mantener informada a la opinión pública del planeta. Son los ojos que nos ayudan a ser conscientes de cómo la inmensa prisión a cielo abierto (Gaza) se va convirtiendo día a día en un gran cementerio.

La FIP cifra en casi un centenar el número de periodistas asesinados este año en todo el mundo. Tres cuartas partes de ellos eran periodistas y reporteros que vivían y trabajaban en Gaza. Quienes sobreviven allí, siguen en el punto de mira de Israel.

Fuente de la información e imagen:  https://ctxt.es/es

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Victoria de la campaña de boicot: Puma deja de patrocinar la selección Israelí de fútbol

“Después de años de campaña global, el movimiento de Boicot y Desinversiones (BDS) ha conseguido que Puma deje de patrocinar la selección israelí de fútbol”. Así celebraba la cuenta española de este movimiento internacional la decisión de la compañía de dejar de asociar su marca con el equipo nacional de Israel. Según afirman desde BDS Madrid, “el boicot funciona para debilitar el supremacismo y genocidio israelí”.

Según Puma, un grupo empresarial alemán, la decisión se tomó hace un año y no está relacionada con las llamadas al boicot, que ya eran una constante mucho antes del 7 de octubre. El fin del patrocinio se hará efectivo a partir del año próximo, cuando la tercera mayor empresa de ropa deportiva del mundo dejará de proporcionar la equipación al equipo israelí.

La firma del convenio entre Puma y el Estado de Israel en 2018 provocó una intensa campaña de boicot internacional contra la compañía en la que este movimiento acusaban a la empresa de estar lavando la imagen de un Estado que viola diariamente los derechos humanos de la población palestina y de estar apoyando a los asentamientos ilegales en Cisjordania dado que la Asociación de Fútbol de Israel incluye a equipos de estas colonias.

En las últimas semanas, las movilizaciones contra Puma se han acentuado en diversas ciudades. Desde la compañía, insisten que no hay razones políticas sino solo financieras y estratégicas.

Según el movimiento BDS, los años de “presión ininterrumpida y global” sobre Puma y los daños a su imagen deberían considerarse “una lección para todas las compañías que apoyan el apartheid israelí”. Desde este movimiento global, agradecen a los cientos de grupos de solidaridad de base, atletas y equipos alrededor del mundo que apoyaron la llamada de 215 equipos palestinos para hacer boicot a Puma.

“Esta victoria del boicot es una victoria agridulce mientras continúa la limpieza étnica de los palestinos por parte de Israel. Pero nos da esperanza y determinación para responsabilizar a todos los responsables del genocidio y partidarios del apartheid hasta que todos los palestinos puedan vivir en libertad, justicia e igualdad”, dicen desde el movimiento BDS internacional.

Fuente de la información e imagen:  El Salto


Foto: Familias palestinas se refugian en tiendas de campaña y trabajan para que las tiendas no se desborden de agua y barro en el campamento improvisado alrededor del Hospital Nasser en Khan Yunis. 19 de noviembre de 2021. (Mohammed Zaanoun / Activestills)

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