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Uruguay: Un llamado de alerta ante la privatización de la enseñanza pública

Redacción: Caras y Caretas/17-10-2018

Hay un proceso de mercantilización de la educación pública impulsada por grandes multinacionales. En países como el Reino Unido y Estados Unidos, pero también en África, esta estrategia está promoviendo la competencia entre las escuelas con una secuela de segregación y discriminación.

Evaluaciones en manos de empresas, fondos públicos para financiar instituciones privadas, venta de paquetes de ayuda para quienes tienen notas bajas, forman parte de una estrategia llevada adelante por grandes multinacionales. La privatización y mercantilización de la educación pública avanza en el mundo, según señalaron a Caras y Caretas Angelo Gavrielatos y Susan Robertson, de la Internacional de la Educación, una federación que representa a más de 30 millones de trabajadores y trabajadoras de la educación.  Gavrielatos y Robertson estuvieron en Montevideo para participar del seminario “La educación pública ente el proyecto de la globalización neoliberal” organizado por la Federación Nacional de Profesores (Fenapes) y la Federación Uruguaya del Magisterio-Trabajadores de la Educación Pública (Fum-Tep). Cuestionaron a las pruebas Pisa por su carácter y destacaron el sistema educativo finlandés ya que este, a su juicio, es lo contrario de la privatización en marcha.

¿Cuál es el motivo de vuestra visita a Uruguay?

Angelo Gavrielatos. Estamos aquí como integrante de la Internacional de la Educación, una federación global de sindicatos de la educación que representa a más de 30 millones de trabajadores y trabajadoras de la educación en 170 países. Más de 400 organizaciones sindicales la integran. Estamos aquí como parte de nuestra campaña global frente a la comercialización y mercantilización de la educación.

La privatización educativa está considerada como una de las principales amenazas a nivel mundial para poder alcanzar una educación de calidad. Estamos trabajando en Uruguay, como estamos en Argentina, en Perú, en Honduras, en otros lugares de América Latina y del mundo. Estamos aquí  para ver cuál es la manera más adecuada de poder confrontar esta amenaza.

Esta no es nuestra primera vez en Uruguay, vinimos el año pasado para lanzar una investigación sobre la privatización educativa, un mapeo de cuáles son las principales tendencias privatizadoras en Uruguay.

En esta visita nos ha acompañado la académica de la Universidad de Cambridge, Susan Robertson, quién tiene un gran conocimiento sobre los temas de privatización y que ha coordinado la investigación que se ha hecho en Argentina sobre privatización educativa.

Susan Robertson. Soy una investigadora independiente y he estado estudiando el fenómeno de la privatización educativa durante más de 20 años en diferentes países de todo el mundo. Uno de mis intereses particulares en el caso de Uruguay es analizar desde la perspectiva de la gobernanza global y cómo puede haber ciertas organizaciones a nivel global que influyen.

Cuando hablamos de privatización y mercantilización de la enseñanza,  ¿a qué ejemplos concretos se puede referir?

AG-La privatización tiene muchas caras, se manifiesta de manera diferente en cada país según el contexto político, el contexto social.

SR-El caso concreto del Reino Unido, por ejemplo, donde la evaluación se ha privatizado, tanto para estudiantes como para docentes. La inspección escolar también, los inspectores son privados, la gestión de muchas de las escuelas es también privada, han surgido escuelas con ánimo de lucro que están gestionadas por empresas y los docentes que trabajan para estas escuelas lo hacen para las empresas también. Hay compañías que gestionan cadenas de escuelas con ánimo de lucro en el Reino Unido, y también se están instalando en países del sur como en África. Liberia, por ejemplo.

AG-En Uruguay hablamos de una privatización latente, algo que va escalando dentro del sistema educativo.

SR-El discurso que justifica estas tendencias es de que si uno gestiona la escuela de la misma forma en que se gestiona una empresa, siempre tendrá una mejor eficacia, mayor eficiencia y por lo tanto, en el caso de la educación, esto va a a redundar en una mayor calidad.

En Uruguay hay liceos públicos de gestión privada…

AG-A pesar de este discurso que dice que los resultados académicos mejoran con la aplicación de principios de mercado a los sistemas educativos, tenemos evidencia suficiente, e investigaciones, que nos demuestran que no es así. Que la aplicación de principios de mercado a los sistemas educativos públicos siempre va a profundizar en la segregación educativa y en las desigualdades. Es un sistema que provoca una mayor desigualdad social.

SR-Uno de los principios de mercado que se aplican es la competitividad en las escuelas, o sea que las escuelas tienen que competir. Está claro que en esta competencia entre escuelas habrá unas ganadoras y otras perdedoras, y ahí es donde se produce la segregación y la desigualdad.

¿Cómo ven la situación actual en Uruguay?

AG-Hacemos un análisis partiendo de las propuestas que se están haciendo y de las consecuencias que ellas han tenido en otros países. Una de las propuestas habla de fomentar una mayor autonomía escolar frente a un sistema muy centralizado como es el uruguayo. Sabemos que esto produce una atomización del sistema educativo. Esto lo dice el informe 2016 de la OCDE (Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos) sobre Uruguay. Habla particularmente de esta necesidad de descentralizar, de dotar de mayor autonomía escolar para mejorar la eficiencia.

Esto entra en contradicción con otros informes de la OCDE que dicen todo lo contrario. Informes recientes indican que si se quieren mejorar los resultados académicos se  debe llegar a todo el sistema, a todos los niños y niñas. No se puede estar en competencia entre las escuelas.

SR-No tiene que ser siempre un proceso de descentralización, hay casos en que se da lo contrario en sistemas descentralizados pero donde los maestros tiene más posibilidades de organizarse e incidir, se busca centralizarlo más. Según el análisis de Cambridge es más una cuestión de desempoderar y desorganizar a los maestros, de separar, puede ir en la dirección de centralizar o descentralizar.

AG-En el caso de las alianzas público-privadas que se vienen promoviendo en todo el mundo hay evidencia de que no tienen un alto nivel de eficiencia como se dice y tampoco mejoran los resultados académicos.

SR-Incluso el Banco Mundial, que es uno de los actores que más promovido las alianzas público-privadas, reconoce en uno de sus últimos informes que objetivamente las uniones público-privadas no son una garantía de una mayor eficiencia ni de mejores resultados académicos.

AG-De acuerdo a la investigación que realizamos nos parece que Uruguay se encuentra en un cruce de caminos. Puede seguir la senda de la privatización con todas sus consecuencias negativas o puede fortalecer más aún su sistema público educativo. Los países que tienen los sistemas educativos más fuertes son aquellos que muestran los mejores resultados académicos.

Muchas de las propuestas que se están viendo ahora, presentadas como innovadoras, fueron implementadas en países anglosajones hace años, en Estados Unidos, en el Reino Unido, y ahora conocemos las consecuencias. Sabemos que este plan privatizador no ha funcionado. En ese sentido Uruguay está en una posición privilegiada al poder observar y aprender de esas experiencias y no repetir los mismos errores.

Tenemos que ver qué es lo que queremos decir con privatizar. Se trata de grandes empresas que quieren hacer mucho dinero con la educación.

¿Qué intereses se pueden identificar atrás de esta estrategia?

SR-Tenemos grandes multinacionales, como Pearson de origen estadounidense, que dirige toda la industria de la evaluación estandarizada. La evaluación como tal hoy en día es una industria a nivel global y genera unos beneficios enormes. Derivado de esto se encuentran los denominados servicios de apoyo. Cuando van a una escuela que no saca buenas notas se venden paquetes de apoyo para mejorar lo que está fallando.

Hay grandes multinacionales que tienen estas cadenas de escuelas con ánimo de lucro implantadas en muchos países, en África, en la India, en América Latina. Tenemos la Fundación Varkey en Argentina que es dueña de una cadena de escuelas. O en Estados Unidos las cadenas de escuelas chárter, que son instituciones con ánimo de lucro. En este caso estamos hablando de fondos públicos que van a actores privados y que además no alcanzan la excelencia a la hora de analizar los resultados.

Cuando se habla de alianzas público-privadas decimos que se trata de dinero público para la ganancia del sector privado.

Los liceos públicos de gestión privada que se han instalado en Uruguay funcionan en base a la exoneración de impuestos a empresas que los financian…

AG-La exoneración fiscal es dinero que no se utiliza para invertir en la educación pública y para mejorarla. Se trata también de qué tipo de sociedad queremos, qué tipo de sociedad estamos construyendo. Queremos una sociedad en la que cada niño o niña, independientemente de su origen, p

uedan desarrollar su potencial al máximo. Pero vemos que estamos teniendo una sociedad más fragmentada, más segmentada, donde algunos niños o niñas van a poder tener éxito gracias a la educación.

Las pruebas Pisa, ¿forman parte de la estrategia?

SR-Primero hay que decir que las pruebas Pisa son dirigidas por una gran multinacional y son financiadas con dinero público.

Nosotros como sindicato de docentes no nos oponemos a la evaluación. Pisa forma parte de un sistema de evaluación estandarizada a nivel global. El hecho de que se haga una evaluación internacional no es malo en sí mismo, el problema es que Pisa se ha convertido en una industria. El problema es que los datos que se están generando a través de Pisa se están usando de manera ideológica para servir a determinados intereses.

Otro de los problemas que tiene Pisa es que solo analiza tres áreas; alfabetización, matemáticas y ciencias, fuera de estas tres áreas no se sabe absolutamente nada.

Otro tema de Pisa es que crea rankings en los que se compite entre realidades muy dispares como Finlandia y Perú. Tampoco el contexto latinoamericano se tiene en cuenta.

Por eso aparecen realidades muy dispares, países muy diferentes que incluso tienen objetivos distintos y como en un mundial de fútbol compiten al mismo nivel.

AG-No nos gusta el concepto de ganadores y perdedores en educación porque esto sirve en el fútbol pero no en la educación. Y Pisa se ha convertido en uno de los temas más mediatizados a nivel educacional en todos los países. Cada vez que las pruebas Pisa salen se publican en los medios de comunicación de todo el mundo, cosa que no sucede con otros temas educativos.

Las pruebas Pisa no mejoran los resultados académicos en ningún país. Cuando hablamos de la manipulación de los datos de Pisa hay un ejemplo muy concreto y es que hay países como Finlandia que han obtenido los puestos más altos durante varios años consecutivos y cuyas políticas educativas no tienen absolutamente nada que ver con todas estas políticas que se promueven desde la OCDE y que hablan de más autonomía escolar, más competitividad. En Finlandia no existe un sistema competitivo en absoluto. Es un sistema que tiene apenas evaluación. Es uno de los países donde la profesión docente es mas respetada, mejor remunerada, tiene mejores condiciones laborales y una gran autonomía profesional a la hora de enseñar. Los docentes participan activamente en el diseño del plan de estudios. Y a pesar de estos, que es claro en los resultados de Pisa, es uno de los datos que la OCDE ignora y promueve políticas que no van en esa línea.

Fuente: https://www.carasycaretas.com.uy/un-llamado-de-alerta-ante-la-privatizacion-de-la-ensenanza-publica/

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Desde Argentina, denuncia de la Internacional de la Educación: «Quieren terminar con la educación pública»

Redacción: Página 12

«Están provocando una crisis del sistema educativo para acelerar la privatización y mercantilización de la Educación Pública.» Así lo denunció la Confederación de Trabajadores de la Educación (CTERA) durante la presentación de un informe elaborado junto con la Internacional de la Educación, que reúne a 34 millones de docentes de todo el mundo, en el que también se advierte el crecimiento de la matrícula privada desde diciembre de 2015, debido al respaldo que el Estado da a ese sector en detrimento de las escuelas públicas. Además, resaltaron que el desprestigio del sistema público está fogoneado por fundaciones globales, encargadas de realizar evaluaciones estandarizadas como la consulta Aprender, impuesta por el gobierno de Cambiemos en todo el país.

«Hay un creciente desfinanciamiento de la educación pública, un desinterés del Gobierno Nacional en la escuela pública, con marcada tendencia a privilegiar a la educación privada», apuntó la titular de CTERA, Sonia Alesso, durante la presentación del informe «Tendencias privatizadoras de y en la Educación Argentina». La dirigente recordó que pocas semanas atrás la oposición en el Congreso intentó tratar una serie de proyectos de ley, presentados por los gremios docentes, para proteger el financiamiento educativo, pero el bloque del oficialismo se negó a bajar al recinto para tratar las iniciativas.

El titular de la CTA de los Trabajadores, Hugo Yasky, otro de los oradores de la jornada que se realizó en la UMET, hizo propias las denuncias acerca del vaciamiento de la educación pública y advirtió que el Presupuesto 2019, que se debate en Diputados, «está hecho a medida de los requisitos del FMI», y Educación es el área que sufrió más recortes. «Apuran la crisis del sistema educativo. Con ese Presupuesto no se puede funcionar», denunció Yasky.

Por su parte,  Susan Robertson, asesora pedagógica de la Universidad Cambridge, detalló el papel de los «actores sociales» que impulsan la privatización del sistema educativo y señaló en particular a la Fundación Varkey, que tiene injerencia directa en la Argentina. «Estos actores globales tienen una relación muy estrecha con estructuras políticas y de poder», subrayó Robertson, quien explicó que «tienen injerencia en la formación docente y en la evaluación, con gran financiamiento, deciden los contenidos de las evaluaciones y estandarizan los resultados, con un claro desprestigio hacia la educación pública».

Además de las fundaciones internacionales, el informe también advirtió la intervención de organismos como el Banco Mundial, el BID y la OCDE, que impulsan «evaluaciones con resultados tendenciosos para ubicar a la educación como un producto o servicio privado». «La falta de financiamiento, de políticas públicas, de bajos presupuestos, están creando una inequidad en la Educación Pública en la Argentina», advirtió la especialista.

Yasky, por su parte, agregó que esa «gobernanza global» de las políticas educativas también está integrada por la OMC, el FMI y el Banco Mundial, por lo que sentenció que «defender la educación pública como un derecho es ir en contra del sentido común que tratan de instalar los que hoy gobiernan la Argentina, pero también es ir en contra del sentido común que tratan de instalar quienes gobiernan el mundo». «Esta crisis que provocan es para acelerar la privatización y mercantilización de la educación pública», denunció Yasky.

Fuente: https://www.pagina12.com.ar/145170-quieren-terminar-con-la-educacion-publica

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Las luchas de los universitarios ayer y hoy: Nicaragua

Autor: José Luis Rocha

Los universitarios de hoy, que son mayores en número, también se enfrentan a mayores exigencias que los de ayer. 

Por sus contrastes y sus semejanzas, la revuelta de abril, en gran medida protagonizada por los estudiantes universitarios, puede recibir luces provenientes de las luchas estudiantiles contra los dos primeros Somoza. La inserción de la universidad en el sistema capitalista es el primer contraste. Cuando Carlos Fonseca Amador dirigió –en abril de 1968, hace exactamente medio siglo– un mensaje a los estudiantes para animarlos a que emprendieran protestas beligerantes que no se redujeran a meras proclamas, atribuyó la inercia estudiantil a la penetración capitalista en las universidades. En 2018, esa penetración se ha profundizado. Hay en Nicaragua un mercado donde compiten –no sólo dos sino– más de medio centenar de universidades, algunas enloquecidas por insertarse en los sistemas de acreditación internacional, autopublicando adefesios y autograduando doctores semianalfabetas que les permitan elevar su puntuación en los baremos de las multinacionales de la “accountability” académica.

La calidad se contabiliza en número de graduados, posgrados, doctores, reglamentos, procedimientos burocráticos, publicaciones, etcétera. Se ha mercantilizado un ámbito que antes no era “vendible”. En paradójica contrapartida, los estudiantes están recibiendo títulos cuyo valor facial no corresponde a su valor real porque reciben una retribución cada vez más deprimente cuando lo canjean en el mercado laboral. La burocracia universitaria se mercantiliza y sus “productos” son peor recibidos en el mercado. La parafernalia burocrática de la universidad se conecta al mercado; sus títulos están desconectándose cada día más y más.

Las y los estudiantes están jugando ese juego, les guste o no, lo entiendan o no. Nadie entre ellos ha cuestionado las reglas de ese juego. Ningún grupo de la coalición estudiantil ha emitido un pronunciamiento al respecto. Su lucha tiene una finalidad generalizable e inmediata: ponerle fin a la dictadura. En este horizonte estrecho pero urgente coinciden con los primeros universitarios antisomocistas de los años 40 e inicios de los 50, enfocados en impedir la reelección del primer Somoza. Sólo cuando se fueron creando círculos de estudio marxistas y de la teología de la liberación, las luchas universitarias intensificaron su ambición, decantándose hacia una batalla contra el sistema capitalista.

Este rasgo avisa de otro punto de contraste: los universitarios antisomocistas de los años 50 y más aún los de los 60 y 70 podían apuntar con el dedo hacia un horizonte tangible: la Unión Soviética, la Europa del este y la Cuba revolucionaria. Su anhelo tenía una concreción y era sistémica. No era utópico, sino tópico. Los universitarios de hoy parecen contentarse con aspirar a la democracia representativa, un objetivo que hubiera parecido modesto a sus predecesores, pero que por desgracia no lo es en el contexto actual.

Estos universitarios, huérfanos de utopías más amplias, se han tenido que enfrentar no a un Estado artillado como el de Somoza –a una Guardia Nacional que era el ejército de una familia, pero un ejército profesional al fin y al cabo-, sino a un Estado gamberro, que echa mano de antiguos militantes con experiencia militar a los que tenía en el olvido, los recoge de las acequias de la historia, los encapucha y los dota de armas y licencia para matar. El resultado salta a la vista. Había en la Guardia Nacional una especie de contención. No todos los excesos estaban permitidos contra manifestaciones pacíficas. Los estudiantes de hoy han enfrentado un baño de fuego que suscita la perplejidad de los analistas más curtidos.

En su memorable mensaje de abril de 1968, Carlos Fonseca hace un recuento de los estudiantes caídos en una década de lucha: un total de 23. Esas cifras incluyen los muertos en la traumática masacre de julio de 1959. La tarde del 23 de julio de 1959, un pelotón de la Guardia Nacional disparó contra una manifestación de universitarios en León y asesinó a cuatro estudiantes, una mujer y una niña. Los periodistas de la época hablaron de “asesinato en masa”. En la revuelta de abril de 2018, solamente el día de las madres hubo 18 muertos. La Asociación Nicaragüense por los Derechos Humanos ha registrado un total de 448 muertos, la mayoría asesinados por grupos paramilitares y la Policía Nacional. “Asesinato en masa” parece una etiqueta insuficiente.

Este es un contraste entre el antes y el ahora que no podemos pasar por alto. La explicación más simple es que Ortega es más criminal que Somoza. Sin duda los individuos imponen cierto sesgo a la historia cuando pueden decidir el rumbo de acontecimientos clave. Pero ni la aceptación de las doctrinas de Lutero se explica sin la oposición nacionalista germánica a las exacciones pecuniarias de Roma ni el arrastre de Hitler sin el antisemitismo tan arraigado y difundido, por mencionar sólo un aspecto del contexto. El contexto en el que operan los individuos explica mucho. El contraste entre el contexto de antes y el de ahora nos puede dar algunas respuestas.

Curiosamente el contexto actual parecía adecuado para que los organismos supranacionales –cuyo poder interventor se tiene en alta estima en la era de la globalización legal y judicial- sirvieran como fuerza de contención. Pero sus funcionarios casi vieron caer los cadáveres a sus pies y no consiguieron detener la serie de masacres que iban en curso. La rapidez con que corren las noticias también debía haber operado en favor de una rápida intervención de organismos internacionales. Pero no lo hizo. No lo hizo porque los organismos internacionales trabajan con la misma parsimonia de la era pre-informática, pero los criminales trabajan con menos contención y escrúpulos y más rapidez: para saber que no estamos ante casos aislados de falta de contención y de deseos de guardar las formas echemos una mirada a los numerosos asesinatos de periodistas y ecologistas en la vecina Honduras.

Sin embargo, esos crímenes han sido cometidos a cuenta gotas. Y en Nicaragua hubo una sucesión de masacres. ¿Por qué? Otras explicaciones del exceso de Ortega y la contención de Somoza encuentran asideros prestando atención al contexto interno. Propongo tres explicaciones, sin presumir que sean las únicas. En primer lugar, el FSLN como partido-iglesia. Los universitarios que enfrentaron a la dictadura somocista no estaban ante un personaje ni un partido que suscitaran tanta veneración. La militancia en el FSLN es un culto y sus adeptos inmolan su capacidad de juicio en su humeante altar. Este es un capital moral que los miembros menos escrupulosos del FSLN han sabido explotar. El carácter confesional del FSLN convence al Sumo sacerdote y su sacerdotisa de tener la razón y les permite actuar como jueces y emitir condenas.

En segundo lugar, hay un miedo a los números grandes que no debemos subestimar. El pánico produce reacciones drásticas. En 1950 había apenas 494 universitarios, grupo muy selecto en una población de 160,658 jóvenes de entre 18 y 25 años. Un quinquenio después ese grupo se había casi duplicado: en 1955 había 840 estudiantes universitarios. Aun así, los universitarios seguían siendo un ave rara dentro de un gran universo de 174,487 jóvenes de 18 a 25 años. Apenas uno de cada 200 jóvenes de ese rango etario estaba en la universidad.

En contraste, en 2014 había 123,220 universitarios y un total de 1,283,174 jóvenes de 15 a 24 años. Son universitarios cerca de 20 de cada 200 jóvenes de ese rango etario, que empleo por ser el más cercano al de 18-25 años disponible en las estadísticas oficiales. Los universitarios son muy numerosos. La lucha contra Somoza requirió el concurso de los estudiantes de secundaria para aproximarse a números significativos. En la revuelta de abril de 2018 ha bastado un porcentaje muy reducido de universitarios dispuestos a jugarse la vida para poner de cabeza un país tan pequeño como Nicaragua.

La relación numérica también favorece a los universitarios frente a las “fuerzas de orden”. En 1956, año del ajusticiamiento de Anastasio Somoza García y tres años antes de la masacre de julio de 1959, había 970 estudiantes. Ese año la Guardia Nacional registró en su haber 4,391 miembros, una proporción de 4.5 guardias por cada estudiante y de 349 guardias por cada 100 mil habitantes. Seis décadas después, tenemos 454 entre policías y militares por cada 100 mil habitantes, una combinación de fuerzas coercitivas superior a aquella de la que dispusieron los primeros dos Somoza. Pero la proporción con respecto a los universitarios se invirtió: ahora hay 4.4 universitarios por cada policía/militar. Este es el contexto demográfico y del peso relativo universitarios/fuerza coercitiva que produce pánico en el gobierno de Ortega.

En tercer lugar, las redes sociales actúan como magnificadoras de eventos, redes, aliados y contendientes. Facebook, Twitter, WhatsApp y los miles de blogs son mucho más rápidos, masivos y económicos que los volantes y folletos producidos en mimeógrafo de los universitarios que enfrentaron al somocismo. Sus imágenes y palabras son indestructibles, llegan a un público más amplio y son menos reprimibles que los discursos de dirigentes trepados sobre cajas de jabón a guisa de podio a cielo abierto. Los universitarios de hoy pueden –y de hecho lo hacen- seguir recurriendo a estos medios, pero ya no tienen que limitarse a ellos porque las redes sociales les permiten superar las limitaciones espaciotemporales. Los volantes podían ser decomisados y quemados. Los mensajes de WhatsApp atraviesan ciudades, países y continentes antes de llegar a los tenebrosos despachos de la seguridad del Estado.

La capacidad de convocatoria de los nuevos medios de comunicación pudo ser apreciada en las multitudinarias manifestaciones que desde su búnker en El Carmen la pareja presidencial vio. El hecho de que la vicepresidente se refiera a los autoconvocados como minúsculos, puchitos, remanentes, chingastes, poquedad y almas pequeñas es sintomático del pánico ante su tamaño. La palabra “minúsculos” aparece en cinco de los primeros nueve párrafos de su alocución del 19 de abril. La sangrienta reacción del poder fue proporcional al pánico experimentado. Fue terrorista todo lo que les provocó terror.

Los universitarios de hoy, que son mayores en número, también se enfrentan a mayores exigencias que los de ayer. Sobre sus espaldas la historia ha echado cuatro centenares de muertos. Enfrentan una dictadura que ha probado ser más sangrienta y que ahora busca descubrirlos, perseguirlos y castigarlos. En estos momentos están respondiendo a una dura ordalía que pone a prueba su compromiso y su creatividad. Ya probaron que tienen coraje. Las redes sociales seguirán siendo su instrumento, uno del que sus predecesores no dispusieron. Y aunque no hay determinismo tecnológico, las redes sociales expanden el horizonte de posibilidades. Sabemos que son un magnificador de los eventos. Falta averiguar si son también un acelerador de los procesos.

Fuente: https://www.rebelion.org/noticia.php?id=245979

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Se realizó en Argentina la III Conferencia Regional de Educación Superior

Argentina/16 de Junio de 2018/La Opinión

En la ciudad de Córdoba, Argentina, desde el lunes 11 hasta el  viernes 15 de junio, se llevó a cabo la III Conferencia Regional de Educación Superior (CRES). En ella se reunieron las autoridades de educación superior de América Latina y el Caribe.

Participaron más de 10 mil académicos entre rectoras, rectores, directores, directoras, docentes, estudiantes y representantes de numerosas organizaciones gubernamentales y no gubernamentales. Debatieron y analizaron la situación del sistema educativo de nivel superior en la región.

Acción

Al mismo tiempo, otro de los objetivos centrales de este encuentro, fue delinear un plan de acción para la próxima década. Será producto del intercambio de experiencias y reflexiones en torno a los principios de su fuerza transformadora, que contribuye al desarrollo sustentable de los Estados.

Por otro lado, esta conferencia tuvo como sede a la Universidad Nacional de Córdoba (UNC). Es en el marco de las celebraciones por los 100 años de la Reforma Universitaria que tuvo lugar en esta casa de estudios.

Trabajo

Durante esta edición se continuó el trabajo desarrollado en La Habana (1996) y en Cartagena de Indias (2008).  Cabe señalar, que dichas instancias contribuyeron a su vez a las Conferencias Mundiales de Educación Superior de la UNESCO de 1998 y 2009.

Por otra parte, es importante señalar que el encuentro estuvo organizado por el Instituto Internacional para la Educación Superior en América Latina y el Caribe (IESALC) de la UNESCO, la universidad anfitriona, el Consejo Interuniversitario Nacional de Argentina y la Secretaría de Políticas Universitarias del Ministerio de Educación y Deportes de la República Argentina.

CRES

Ante los reiterados intentos de mercantilizar la educación superior, por medio de tratados internacionales de liberalización de los mercados, las CRES acordaron definir a la Educación Superior como un bien público-social, derecho humano universal y responsabilidad de los Estados.

En ese sentido, significa que este nivel educativo debe garantizar el acceso abierto para todos y sin discriminación (igualdad), que el suministro del servicio de manera continua y sin interrupciones (continuidad y permanencia) y sea capaz de adaptarse a las nuevas situaciones, con el objetivo de garantizar la igualdad y continuidad.

Actividades

Como parte de las actividades de la semana, se tuvo previsto instancias de debate participativo con modalidades diversas (foros y eventos regionales) sobre el estado actual de la educación superior, sus fortalezas y debilidades, historia y evolución.

También se plantearon debates acerca de las mejoras y logros que se deben alcanzar en la próxima década, con vistas a los objetivos de desarrollo sostenible y a las definiciones de la agenda Educación 2030 de la UNESCO.

Conclusiones

Cabe destacar, que las conclusiones a las que arribó esta III Conferencia integraran la declaración y el plan de acción que llevarán los países de América Latina y el Caribe a la Conferencia Mundial de Educación Superior. La misma tendrá lugar en 2019, en la sede de la UNESCO en París, Francia.

Asimismo, los asistentes a la conferencia vivenciaron los festejos programados por la Universidad Nacional de Córdoba, el viernes 15 de junio con motivo de celebrarse el Primer Centenario de la Reforma Universitaria, un verdadero hito en la educación superior latinoamericana.

Fuente: http://laopinion-digital.com/ultimas-noticias/educacion/se-realiza-en-argentina-la-iii-conferencia-regional-de-educacion-superior/13-06-2018

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Otro impulso a la mercantilización de la educación y el conocimiento

Por; Matías Caciabue

La Sociedad del Conocimiento, con el saber cómo eje vertebrador de la acumulación de riquezas y la dominación política, se construye en base a la producción, circulación y apropiación privada del denominado conocimiento estratégico.

El conocimiento estratégico es el segmento del saber humano que logra acortar los tiempos sociales de producción y extracción del valor económico en cada momento histórico, el que puede realizar un rotundo cambio en la composición orgánica del capital, el que mejor consigue construir la organización de lo social, la hegemonía política o imponer, en su defecto, la dominación armada (militar, policial, paramilitar).

Lenin, en el prólogo de su libro sobre el Imperialismo como fase superior del capitalismo de 1917, le otorga ese atributo a los trenes y la industria ferroviaria. Perón, en sus reflexiones sobre la defensa nacional en los días previos al 17 de octubre de 1945, otorga esta singularidad al desarrollo de la industria pesada (maquinaria agrícola, transporte terrestre, aéreo y marítimo, entre otros).

En este siglo, podríamos afirmar que las industrias de la información y la comunicación digital, la nano y la biotecnología, la robótica, la inteligencia artificial, y ciertas ramas del sector energético (nuclear, algunas renovables, shale oil) son algunas de las áreas asignadas como de conocimiento estratégico.

Este debate está siendo tomado por el G-20, a pedido de Argentina, con la conformación del Grupo de Trabajo Educativo (GTE). Mercedes Miguel, la actual Secretaria de Innovación Educativa de la Nación sudamericana, es quien la está coordinando.

Formada en la Universidad Católica Argentina y en el Institute for the Future of Learning de la Universidad de Harvard, “Michi” Miguel fue coordinadora del área de Educación de la Fundación Grupo Sophia, un think-tank argentino articulado a la aristocracia financiera global que aportó la primera línea de cuadros de la Alianza Cambiemos: Horacio Rodríguez Larreta (Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires), María Eugenia Vidal (Gobernadora de la Provincia de Buenos Aires), Marcos Peña (Jefe de Gabinete de la Nación), Gustavo Lopetegui y Mario Quintana (responsables de la administración presupuestaria de la misma).

Miguel es la responsable de la implementación del programa gubernamental de inclusión digital denominado “Escuelas del Futuro”, muy controvertido entre actores institucionales y gremiales del sistema educativo.

Dicho programa prescinde de un diagnóstico actual de lo que pasa en la Escuela, sobrevalora la función de la tecnología digital en el proceso de enseñanza-aprendizaje, desdibuja los roles de docentes y estudiantes en el uso de las TIC´s en el aula, y formula una propuesta educativa respondiendo a criterios propios de la mercadotecnia.

La matriz de éste programa es la que pareciera estar guiando la discusión educativa del G-20. Al menos es la agenda que la presidencia argentina impulsa en las reuniones de “sherpas” de los días 12 y 13 de abril, 11 y 12 de junio y 3 y 4 de septiembre, que culminarán con una reunión de ministros de educación el día 5 de septiembre.
La agenda de la globalización y la digitalización de la sociedad ordenan el debate educativo de este foro de países. La producción y la apropiación del conocimiento estratégico de la llamada “Cuarta Revolución Industrial” está reiteradamente explicitado en el G-20.

Se sabe que el G-20 es un espacio promovido como una especie de poder ejecutivo del Estado Global, ese difuso y líquido entramado institucional que la aristocracia financiera está construyendo junto con tratados económicos transcontinentales como el TPP-11, el TISA, el TIPP o el TLC del Mercosur con la Unión Europea.

De la poca información que circula, dada la ausencia de documentos públicos y de convocatorias a organizaciones de la sociedad civil, sorprende como se plantea la promoción de políticas de financiamiento internacional al sistema educativo, en sintonía con lo planteado en los mencionados TLC Globales en el área de servicios, donde se incluye, sin excepción, al sector educativo.

En una nota auspiciosa de las reuniones educativas G-20 del diario La Nación se afirma el impulso gubernamental a “políticas de gasto e inversión educativa más eficiente, que podrán ser acompañadas por mecanismos de financiamiento internacional”. Otro tanto se informa en una entrevista a Mercedes Miguel por parte del portal Infobae.

¿Qué parte de la educación necesita financiamiento internacional? ¿Qué se ofrecerá como contraparte? ¿Cuáles políticas se impondrán y cuáles no? ¿Cuál es el modelo de educación, ciencia y tecnología que se busca implementar? ¿Se convocará a los actores del sistema educativo y universitario a su implementación? ¿El G-20 sostendrá a la educación y al conocimiento humano como derechos de los pueblos o cómo servicios transables en un mercado mundial que tiende a concentrarse más y más? Éstos y muchos más interrogantes están abiertos a la espera de respuestas.

La presión por mercantilizar la educación y la creciente apropiación privada del conocimiento estratégico, es parte del torbellino planetario de centralización y concentración del capital, y de extracción de la mayor tajada de plusvalía por parte bancas de inversión, fondos financieros, bolsas, y empresas transnacionales en un súper nodo donde las 28 corporaciones financieras sistémicamente importantes trabajan con un activo consolidado de U$S1,82 millones cada una, es decir, mayor al PBI nominal de Argentina (0,54 millones de dólares), e incluso de Brasil, la novena potencia mundial (1,76 millones).

Estas corporaciones, protagonistas del control en la red financiera global, pueden llegar a tener al menos 7 escalones inferiores de empresas multinacionales subsidiarias controladas a partir de deudas y acciones. Al mismo tiempo, no escapan de su radio de influencia los propios Estados Nación a partir del control extorsivo de sus bonos de deuda (los llamados “fondos buitre”).

Discutir la propiedad, la producción, la circulación y la apropiación del conocimiento estratégico, así como la visión que orienta la educación en tanto proceso social, es discutir la posibilidad de una región y un mundo distinto. Los Pueblos de Latinoamérica debemos impulsar un debate en éstos temas y obligar a nuestros gobiernos a abrir a la sociedad su agenda de debate.

Fuente: https://www.rebelion.org/noticia.php?id=240284

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Reforma educativa o tóxico del conocimiento

Por: Darío Balvidares

Si todos los caminos conducen a Roma, entonces destruyamos Roma”

(aforismo implicado)

Alfredo Grande

De lo que vamos a tratar aquí es de la continuidad tóxica de la reforma educativa, de la macropolítica y desposesión de la educación pública, en el marco de las políticas que organizan la acumulación por desposesión. Del flujo permanente hacia la privatización del conocimiento y la estandarización de las subjetividades sociales y colectivas.

Hace varias décadas, por lo menos tres, tomando como referencia la Cumbre de Jomtien, Tailandia 1990, “Educación Para Todos”, en que la avanzada reformista se hace visible con las leyes de educación y sus propuestas transgénicas.

La utilización del término “transgénico” aplicado en una interpretación sobre la reforma educativa está asociado, de manera metafórica (tal vez, no), a los organismos modificados genéticamente, no por su evolución natural, sino por la intervención de las corporaciones extractivistas. Especialmente, por las necesidades de esos “nuevos” productos que requieren la paradójica intervención de venenos para subsistir. Así que toda alusión a los componentes tóxicos del agro-negocio, son directamente aplicables al proceso reformista de la educación.

Todos sabemos para qué se desmontan territorios y la consecuente modificación de su ecosistema; el proceso de sojización creciente, el monocultivo que necesita de los agrotóxicos para vivir. ¡Curioso! El veneno como fuente de vida y devastador al mismo tiempo. La palabra griega φαρμάκων (fármakon) resume que es toda sustancia que altera la naturaleza de un cuerpo, remedio y veneno, lo saludable y lo perjudicial al mismo tiempo.

No se ignora lo que provoca el glifosato (uno de los venenos letales utilizados en las fumigaciones) en la tierra y en sus nutrientes; no se ignoran los efectos en los humanos y los seres vivos en general. En nuestro caso, las pruebas están en los Pueblos Fumigados con el crecimiento en los índices de cáncer y enfermedades respiratorias y en la piel (probados con informes científicos). La reciente mortandad de peces en el río Paraná y afluentes, que los funcionarios gubernamentales adjudicaron al “intenso calor”, pero que no fue la interpretación de los ambientalistas, que adjudican el fenómeno a la cantidad de agrotóxicos que se encuentran en las aguas.

Una prueba de esto es que “un estudio del Conicet publicado en la revista internacional Environmental Pollution reveló que el peligroso herbicida glifosato se acumula en los campos argentinos, sobre todo en Entre Ríos y más precisamente en Urdinarrain (…) El equipo de científicos también ubicó rastros del herbicida en aguas de superficie… 1 El resultado es que esa localidad entrerriana está entre las primeras más contaminadas del mundo.

Similares efectos provoca la mega-minería; de hecho en el marco de las protestas se realizó una extensa marcha en bicicleta, con el lema “Jáchal No Se Toca”, desde la provincia de San Juan (“provincia minera”) hasta la Ciudad de Buenos Aires, para culminar en el Congreso de la Nación el 27 de febrero. A propósito de los reclamos de los habitantes de la ciudad de Jáchal por la contaminación de sus ríos producto de las actividades y derrames de cianuro provocados por la empresa Barrick Gold y por sobre todo en defensa de los glaciares, para que la actual ley, poco respetada por las mineras, no sea, además, modificada con un proyecto del gobierno para ampliar, aún más, los beneficios a esas corporaciones de manera que además del pasivo ambiental que provocan sus actividades, también intervengan en los glaciares, reservorios del agua pura del planeta.

En este sentido, los procesos de acumulación capitalista a gran escala no sólo aseguran mayor concentración de la riqueza, sino que, además, funcionan como un eficaz instrumento de dominación y desposesión territorial.

Las continuas represiones a toda forma de protesta y la etiqueta del enemigo interno adjudicado al pueblo mapuche2, son la exposición del paradigma político en el que también ingresa la reforma educativa.

Los despidos masivos en el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI); en los Yacimientos Carboníferos de Río Turbio (YCRT); en el Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET); en ministerios y distintas dependencias gubernamentales; en el Hospital Posadas.

La reforma del cálculo en los haberes de los jubilados, que les quita 100 mil millones de pesos y que pone las históricas y paupérrimas jubilaciones, que percibe la mayoría, en peores condiciones; los aumentos obscenos de las tarifas en favor de las corporaciones que obtienen millonarias ganancias por servicios que deberían ser públicos y no privatizados: luz, gas y agua.

El aumento de los medicamentos y los combustibles en manos de las corporaciones, que tienen sus CEO en el gobierno.

A todo esto y mucho más (que por economía del artículo es necesario que los lectores completen con lo que seguramente ha quedado implícito, no omitido en esta breve descripción de la coyuntura), sumemos la decisión del cierre de escuelas en la provincia de Buenos Aires; la decisión de cierres de los Institutos de Formación Docente (IFD) son más que marcas de las políticas de desposesión. En este sentido cabe recordar que la política de “desaparición” de las paritarias nacionales está en el proyecto de Ley, llamado “Plan Maestro” (2017)

El último acuerdo marco nacional, se acordó que el salario mínimo de un docente será siempre un 20% mayor al salario mínimo, vital y móvil definido anualmente por el consejo del salario y la Nación garantizará esto, con fondos del nuevo Fondo Compensador. Por otra parte, el Ministerio del Interior negoció con las provincias beneficiarias del antiguo Fondo Compensador la disminución gradual de los fondos girados por este concepto según la siguiente escala: 2016 mismo monto que en 2015; 2017 = 75% de este monto; 2018 = 50%; 2019 = 25% de este monto y en 2020 desaparece este concepto” Plan Maestro (pág. 30)

El decreto del ejecutivo 52 / 2018 lo que hace es adelantar, en época de (des) negociaciones paritarias, lo que ya estaba escrito en el proyecto de ley que el ejecutivo envió al congreso para su discusión este año, para legalizar el final de las paritarias nacionales, aunque sin legitimidad puesto que no había necesidad, ni urgencia de adelantar compulsivamente lo que está en un proyecto para debatir en el parlamento, salvo en la “necesidad” y la “urgencia” de los mandatos estandarizados que suscriben.3

Pero… mientras vastos sectores sufren la desposesión…

Por el contrario, la avanzada de las universidades privadas, fundaciones y ong corporativas aparecen como la contraparte emergente de las políticas que ellas mismas diseñan, bajo el influjo de instituciones transnacionales como el Banco Mundial, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), el propio FMI, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y las corporaciones empresariales que formulan sus mandatos y el gobierno ejecuta como parte de la trama.

Lo que “informa” (recomienda–afirma-impone) el Banco Mundial4

Uno de los últimos informes del BM, inscribe, literalmente, las políticas que se llevan a cabo en la reforma. La constante del documento es, luego de señalar las diferencias en los desarrollos de “aprendizaje” entre “países pobres” y “países ricos” y de aclarar que: “El equipo se basó en el análisis, investigaciones y revisiones bibliográficas de investigadores y especialistas de todo el mundo” (pág.10); con lo que nos encontramos es con más de lo mismo: “la crisis educativa”, “la ‘mala’ formación de los docentes”, etc. etc.

En las siguientes citas no seguimos el desarrollo lineal del documento, puesto que intentamos rastrear las definiciones ideológicas del Banco que aparecen diseminadas en todo el libelo que no hace más que reorganizar sus posiciones respecto de lo que viene expresando desde los comienzos de la reforma mercantilista de la educación.

El objetivo internacional es generar desprestigio en los docentes como causa de lo que llaman “crisis educativa” al mismo tiempo que los ponen como pieza fundamental del sistema y del cambio ¡fármacon!, es decir que aquellos que se adapten al proceso de desposesión serán considerados “saludables” y los que no, “perjudiciales”. Por supuesto que esto lo venimos escuchando de nuestros funcionarios vernáculos, en este proceso de reorganización escolar.

El Banco Mundial en lo que pretende ser un documento actual, actualiza lo mismo que hace 30 años ya expresaba: “…En el aula, los docentes no están lo suficientemente capacitados para evaluar el aprendizaje de manera eficaz, sobre todo cuando las evaluaciones se enfocan en destrezas más complejas (…) No hay una manera eficaz de integrar los resultados de la evaluación formativa que los docentes realizan en el aula con este tipo de información confiable sobre todo el sistema…” (pág. 30)

Con “información confiable” remite a la recogida en las pruebas estandarizadas, para asegurar el negocio de la estandarización y la reingeniería de las subjetividades individuales, primero; sociales después. Como se verá más adelante (o atrás en el libelo).

La segunda parte de la cita refuerza la poca credibilidad de la “evaluación formativa docente”: “No hay una manera eficaz de integrar los resultadosde la evaluación formativa que los docentes realizan en el aula con este tipo de información confiable sobre todo el sistema…” (pág. 30)

Parece ser que lo que los docentes hacen en el aula no es confiable, puesto que la única información confiable es la estandarizada (que los docentes no construyen, ni diseñan); sin embargo la evaluación de los docentes es formativa, tal vez porque se funda en saberes y no en competencias, como la “información confiable”.

“…las evaluaciones nacionales pueden ayudar a controlar la calidad de las evaluaciones subnacionales poniendo de relieve los casos en que las tendencias o los niveles de los logros de los estudiantes difieren de un tipo de evaluación a otro”. (pág.30)

El control es la categoría utilizada en la reforma, nunca se habla de, por ejemplo, mirada pedagógica. Puesto que la calidad, sólo es la calidad de los resultados estandarizados.

¿Por qué? Porque la única mirada es la de la pedagogía instrumental, la de rendición de cuentas y los resultados.

Las evaluaciones internacionales también suministran información que ayuda a mejorar los sistemas. Las evaluaciones internacionales (como las del PISA, el TIMSS y el PIRLS) y las regionales (como las del PASEC en África occidental y central, y la del Laboratorio Latinoamericano de Evaluación de la Calidad de la Educación [LLECE]) brindan una perspectiva adicional sobre el nivel de aprendizaje de los estudiantes. (…) Además, pueden ser herramientas poderosas desde el punto de vista político: dado que a los dirigentes de los distintos países les preocupan la productividad y la competitividad a nivel nacional, las comparaciones internacionales pueden generar conciencia sobre el nivel de retraso que experimenta un país con respecto a otros en la promoción del capital humano.”(pág. 30)

¿Acaso, es el neo darwinismo social el que genera la era de la posverdad, o al revés?

Una interesante reflexión, tomada de un dicho popular, que aparece en el documento mundial dice: “… ‘sólo se puede gestionar lo que se puede medir’ y ‘no se engorda a un cerdo pesándolo más veces’, encierran algo de verdad” (pág.28)

Por supuesto que en el apartado documental, el “dicho popular” lo relaciona con otro remanido concepto reformista que es la “rendición de cuentas”, que en el tóxico campo semántico de los reformadores se asocia a vigilancia. Pero, claro que no están hablando de vigilancia epistemológica, sino de “vigilar y castigar” en el sentido más foucaultiano de la significación. Porque el proceso de reforma ha descalificado el “saber” y lo ha sustituido por las “competencias” y ha anulado los tiempos pedagógicos y los ha transformado en una carrera estandarizada hacia su objetivo común, la “rendición de cuentas”.

Todo el reformismo educativo, pletórico de estándares y resultados, es un proceso de toxicidad permanente, en el que el eslogan (“el sistema educativo no sirve más”, afirmó el entonces ministro de educación – hoy senador por la provincia de Buenos Aires – Esteban Bulrrich y reafirmó la gobernadora, María Eugenia Vidal) y el campo semántico de la crisis, los maestros mal formados, las escuelas del siglo XIX, la necesidad de conocimientos socialmente productivos y las bondades de la competencia entre escuelas y docentes han manipulado hasta el hartazgo a la población y vulnerado la subjetividad social para producir el desplazamiento continuo hacia el mercado privado de la educación, incluso la propia gobernadora de la provincia de Buenos Aires lo reivindica utilizando esas operaciones lingüísticas en su discurso de apertura de sesiones de la legislatura bonaerense.

Pero, volvamos al documento para verificar la neoliberal concepción bancaria (mundial) de la educación: “La educación debe equipar a los estudiantes con las competencias que necesitan para llevar una vida saludable, productiva y significativa. (…)Tienen que saber hacer cuentas, de modo de poder comprar y vender productos en los mercados, elaborar presupuestos familiares, interpretar convenios de préstamo o escribir códigos de ingeniería de software. (…) Y necesitan las competencias socioemocionales (como la perseverancia…) el aprendizaje que se supone debería garantizar la escuela (ya sea que esas expectativas se basen en los programas académicos formales, en las necesidades de los empleadores o simplemente en el sentido común) a menudo no ocurre”. (Pág. 16).

Al parecer esta cita resume todo el pensamiento reformista; lo que debe ocurrir, no ocurre.

¿Entonces los docentes no están capacitados para formar a sus alumnos en matemática aplicada para que aprendan a comprar y vender productos en los mercados? Lo que desde el punto de vista del Banco sería enseñarles a llevar una vida saludable.

¿Tampoco tienen las competencias necesarias para que sus estudiantes sean capaces de interpretar convenios de préstamo o escribir códigos de ingeniería de software o para adiestrarlos en la perseverancia de adaptarse a las necesidades de los empleadores?

¿Cuál es el rol de la nueva educación bancaria?

Equipar a los estudiantes con competencias

Ya no se trata de saber, no se trata de formar en conocimientos, entonces, de qué aprendizaje se trata.

Se trata de adiestramiento, de “aprender” una secuencia de “instrucciones” para estar disponible para el mercado, para lo que los “empleadores necesitan”, mano de obra adaptable y flexible, incluso capaz de “escribir códigos de ingeniería en software”, pero no de pensarlos.

Tal vez, la nueva concepción bancaria de la educación sirva para diseñar los “escribientes” del siglo XXI, incluso capaces de diseñar una ojiva nuclear o un motor de licuadora, pero incapaces de saber los alcances de cada diseño, puesto que la nueva concepción bancaria anula el desarrollo del pensamiento crítico.

Y como no lo va a anular, si no hay contenidos, si lo que nos proponen los reformadores es una educación pública carente de contenidos, incluso carente de docentes. La propuesta de la “Nueva Escuela Secundaria” sobre tiempos de enseñanza – aprendizaje distribuye un 30 por ciento a cargo del docente y el 70 restante desde plataformas digitales.

¡Celebración de la educación Mario Bros!

Otra prueba de los componentes tóxicos de la reforma remite a algunos de los participantes del documento bancario: “En las reuniones de consultas estuvieron representadas, entre otras, las siguientes OSC: Action Aid, la Campaña Mundial por la Educación, Education International, la Fundación Bill y Melinda Gates, la Fundación LEGO, la Fundación MasterCard, ONE Campaign, Oxfam, Save the Children, Teach for All, y World Vision. Asimismo, un grupo diverso de OSC participó en la sesión del Foro de las OSC realizado durante las Reuniones de Primavera de 2017 del Banco Mundial y el FMI, así como en un foro virtual que tuvo lugar en marzo de 2017…” (Pág. 10)

No valen mayores comentarios, el lector sabe otorgarle la significación a las organizaciones que allí aparecen como aportantes de “ideas” reformistas, muchas de ellas subvencionadas por el propio Banco Mundial o por el Departamento de Estado de los Estados Unidos y el Reino Unido.

Sin embargo es importante destacar que dos de las organizaciones5, “preocupadas por la educación”, que figuran en el documento bancario, Oxfam Save The Children, fueron protagonistas cuando contrataron servicio de prostitutas, incluso menores de edad, mientras prestaban “servicios humanitarios” en Haití, así como incidentes de acoso.

Así las cosas, cabe preguntarse por el dicho que cita el documento bancario: “…no se engorda a un cerdo pesándolo más veces…” ¿De qué cerdos habla?

¡No más tóxicos!

Es imprescindible salir de la reforma que desde hace 30 años ha puesto en crisis la educación pública, con sus toxinas capitalistas, para convertirla en un activo financiero y de generación de recursos humanos para servir a los intereses de las corporaciones empresariales, fundaciones y ong, dispositivos que se expanden como los agrotóxicos en el proceso de fumigación.

La neoliberal concepción bancaria de la educación es un decálogo contra lo público, lo común y un ariete contra las subjetividades individuales y colectivas, a eso, algunos intelectuales, cooptados por la colonialidad del poder, lo llaman “la educación del siglo XXI”.

Parafraseando el epígrafe de Alfredo Grande, si todos los caminos conducen a la reforma, entonces destruyamos la reforma, antes de entrar en la era del pospensamiento.

Notas:

1 http://www.eldiaonline.com/segun-conicet-urdinarrain-la-tierra-mayor-indice-glifosato/

2 Tipificado en el lonko encarcelado, Facundo Jones Huala, juzgado, por segunda vez (en la primera había sido sobreseído) para ser extraditado a Chile. De hecho, fue en el marco de la protesta por su liberación en la que se produjo la desaparición seguida de muerte de Santiago Maldonado en el contexto represivo llevado a cabo por la gendarmería en el PuLof Resistencia Cushamen (provincia de Chubut – agosto de 2017). Y unos meses después el asesinato del joven mapuche, Rafael Nahuel, perpetrado por el grupo “Albatros” de la Prefectura Naval Argentina (Lago Mascardi – provincia de Río Negro 25-11-2017)

3 Incluso, el incentivo ofrecido en provincia de Buenos Aires en la paritaria es, además de, del todo inaceptable, 15%, la incorporación del presentismo escalonado, para aquellos docentes que no hagan uso del derecho a la licencia, que por estatuto le corresponda. Mientras que en la Ciudad de Buenos Aires, es del 12%; en ambos casos sin “cláusula gatillo”, es decir, el reacomodamiento salarial según el aumento de la inflación.

4 Banco Mundial 2018, Informe sobre el desarrollo mundial 2018: Aprender para hacer realidad la promesa de la educación, cuadernillo del “Panorama” General”, Banco Mundial, Washington DC: Licencia: Creative Commons de Reconocimiento CCBY 3.0 IGO.

5 “El escándalo de Oxfam en Haití destapa otras 120 denuncias de abuso en ONG británicas” en www.eldiario.es/desalambres/ 11/02/2018

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Perú encabeza el ranking de América Latina como región de mayor privatización educativa

Perú/10 de Marzo de 2018/Mundo

Latinoamérica es la zona del mundo en la que la mercantilización educativa más se hace sentir desde 1990, con Perú a la cabeza y su 116% de aumento de la matrícula en el sector privado. Comienza el nuevo ciclo lectivo 2018 y al mismo tiempo las movilizaciones, los conflictos y las negociaciones entre sindicatos y Gobiernos.

De hecho en Argentina y Chile, por ejemplo, no está claro aún si el comienzo de clases será normal en todo el país. Por distintas razones, los sindicatos resuelven por estas horas qué harán a partir del 5 de marzo. Ambos países ponen en práctica algunas reformas en sus sistemas, ya resistidos el año pasado por trabajadores y estudiantes sobre la base de que profundizan un modelo que cada vez hace más agua.

En la Ciudad de Buenos Aires los cursos se iniciaron hoy en medio de un conflicto que los llevará a parar el lunes 5 y el martes 6, fecha en la que debería ponerse en marcha el sistema en todo el país. Pero eso no ocurrirá porque aún no hubo acuerdo salarial, ni en otros sentidos.

En la capital del país, más allá de que este jueves 1 y el viernes 2 se dictan clases, «hay 11.000 niños y niñas que no tienen vacante en las escuelas públicas y deben recurrir a privadas. Recordemos que 55% del sistema educativo de la Ciudad de Buenos Aires está en manos de privados y muchos de ellos reciben subsidios por parte del Estado», denunció a Sputnik Amanda Martín, secretaria general adjunta de la Asociación Docente de Enseñanza Media y Superior.

En este sentido, explicó que para medir el impacto que tendrá el Gobierno de Mauricio Macri en el sector educativo basta con mirar la experiencia de la capital argentina, donde el hoy presidente inició su carrera política como jefe de Gobierno porteño.

«En política educativa el macrismo, que ya tiene 10 años gobernando en la Ciudad de Bueno Aires, ha demostrado su verdadera orientación con respecto a la educación pública: un ajuste presupuestario permanente, reformas y contrarreformas que no han hecho más que degradar a la educación en sus distintos niveles y la tarea docente cuando la miseria social creciente estalla en las aulas, ya no solo como característica de la Ciudad sino en el resto del país».

Desde el otro lado de la cordillera aporta su testimonio a este informe Darío Vásquez, secretario general del Colegio de Profesores de Chile.

«Hemos llegado a la conclusión de que frente al modelo neoliberal nadie puede solo. Queremos impulsar una clara política de alianzas entre todos los sectores vinculados a la educación con las cuales hacer un planteo común al pueblo de Chile sobre lo que proponemos para luchar frente al gobierno que viene».

La referencia era para la asunción de Sebastián Piñera el 11 de marzo, aunque Vásquez aclaró que el fracaso educativo no se le puede achacar exclusivamente a la derecha. «En los años 90 supusimos que venían cambios profundos en todo sentido, en los ámbitos políticos, culturales y sociales de Chile, pero nada de eso ocurrió con los gobiernos de la Concertación, sino que hubo una continuada de la política neoliberal».

De lo que no tiene duda Vásquez es que «lo que va a ser el nuevo Gobierno es seguir consolidando el modelo. Chile ha sido el laboratorio del neoliberalismo y por lo tanto, hubo una proliferación excesiva de la escuela privada. El grueso de los estudiantes está matriculado allí y la mayoría de los profesores trabaja en ese sistema. Revertir la situación va a costar mucho porque la competencia entre colegios por la matrícula, que es lo que financia el sistema, va a seguir existiendo», concluyó.

Fuente: https://mundo.sputniknews.com/radio_telescopio/201803021076689317-educacion-conflictos/

 

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