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Argentina: Milei sigue sin dar respuestas, tenemos que continuar la rebelión universitaria.

Por: Santiago Sposito

Organicemos asambleas en todas las universidades para profundizar el plan de lucha de estudiantes, docentes, nodocentes y graduados ¡Podemos ganar!

Quince días pasaron desde el 23 de abril donde más de un millón de personas en todo el país desbordamos las calles y las principales plazas tomando como bandera la defensa incondicional de la universidad y la educación pública, en claro rechazo al bestial ajuste del gobierno de Milei. Pero pese a la contundencia de la convocatoria y al claro golpe que recibió el gobierno, todavía no hubo ninguna respuesta satisfactoria a las demandas universitarias y las negociaciones se encuentran empantanadas.
Se impone la necesidad para las comunidades universitarias de reunirse, realizar los balances correspondientes y continuar edificando un plan de lucha hasta quebrar el ajuste y derrotar el plan Milei.

Los rectores le dan aire a Milei, mientras el liberfacho asfixia las universidades

El Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), compuesto por los rectores de las universidades nacionales, decidió darle aire al gobierno pese a que los funcionarios no dieron una sola respuesta favorable a las demandas universitarias. El último comunicado del CIN publicado el 30 de abril no da lugar a dudas:
Luego de la extraordinaria manifestación a lo largo y a lo ancho del país por la marcha federal del 23 de abril, desde el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN) valoramos la convocatoria y el encuentro con las autoridades de la cartera educativa del Gobierno nacional que se realizó este martes en Buenos Aires (…) Aspiramos a que el camino del diálogo, el trabajo colaborativo y el respeto, lejos de la descalificación y la difamación, permitan resolver los problemas presentes para garantizar las condiciones indispensables para el funcionamiento de las universidades y el buen cumplimiento de sus tareas“. En el mismo comunicado, el CIN confirma que “Avanzamos en el diálogo, pero sin resultados concretos inmediatos, y seguimos bregando por soluciones en el corto plazo“.

Pese a ello, los rectores no comunicaron ningún plan de acción a seguir. De esta forma, las comunidades universitarias quedan a merced de una negociación, de la cual no forman parte, entre los burócratas del Estado y un puñado de rectores ¡Esto es inadmisible! Somos los estudiantes, docentes y no docentes quienes debemos tener la última palabra en este conflicto y, sobre todo, somos los que podemos torcerle el brazo al gobierno. No olvidemos que los rectores son los garantes de la precarización laboral al interior de las universidades desde hace décadas, al igual que del arancelamiento de las carreras de grado y la penetración del lobby capitalista que coloca el desarrollo científico de estudiantes y trabajadores al servicio de los intereses de la casta empresarial, la misma para la cual gobierna Milei.

Es simple: no podemos dejar el destino de las universidades en manos del gobierno y los rectores porque de esa forma vamos a perder ¿O acaso alguien puede pensar que Yacobitti, uno de los máximos responsables del radicalismo porteño, aliado de Martin Tetaz, puede verdaderamente enfrentar a Milei cuando en el Congreso los diputados de su espacio votaron a favor de la “Ley Bases” y se encuentran en pleno “toma y daca” con el gobierno para negociar el apoyo en el Senado? Lo mismo vale para los rectores del peronismo, que cacarean contra Milei pero se encuentran alineados a las distintas fracciones del PJ, que con la CGT a la cabeza pegaron el faltazo al Congreso para que salga dicha ley y colaboraron con la gobernabilidad de Milei. No se puede defender la educación pública pactando con Milei porque el gobierno del libertario es incompatible con la educación pública y con los derechos elementales de la clase trabajadora y los sectores populares.

Desplegar el movimiento estudiantil

Uno de los principales elementos de la rebelión universitaria fue el ingreso masivo del movimiento estudiantil al centro de la lucha. Postales como la histórica movilización de Psicología de la UBA, los 6 mil estudiantes y docentes movilizados de la UNLP, las potentes movilizaciones de los distintos CBC´S (abandonados por la FUBA), las masivas columnas de la UNSAM y la UNGS, la histórica columna independiente de los terciarios de la zona oeste del GBA, solo por mencionar algunos casos particulares que dan muestras del punto de inflexión en la subjetividad del movimiento estudiantil.

La irrupción de les estudiantes cobra aun mayor relevancia si tenemos en cuenta que la mayoría de los centros y federaciones estudiantiles se encuentran en manos de radicales y peronistas que actuaron en todo momento como un freno a la organización estudiantil, y solo gracias a la potencia del movimiento se logró desbordar las barreras de contención de la burocracia. La imposición de asambleas e instancias de lucha de los centros por parte del activismo (como ocurrió en Sociales y en Filo de la UBA) o la puesta en pie de espacios convocados desde abajo por estudiantes, graduados, docentes y nodocentes fueron un acierto y abrieron un canal de intervención masiva para miles de estudiantes. Es el camino que debemos profundizar hasta la huelga general universitaria.

Profundicemos la rebelión hasta la huelga general universitaria

La rebelión universitaria, pese a los bloqueos de los partidos capitalistas, continúa abierta. Hay que convocar a las asambleas y espacios de organización en todos lados para debatir cómo continuar la lucha.  El movimiento universitario, apoyado por la mayoría de la población trabajadora y popular, demostró tener la fuerza necesaria para ganar esta pelea, la izquierda debe jugarse a desplegar esa fuerza hasta el final impulsando el frente único de lucha. En ese sentido, la semana de protesta, del 13 al 18 de mayo, convocado por la AGD marca el camino a seguir. Repliquemos en todas las universidades del país acciones de lucha y visibilización del conflicto a través de clases públicas, festivales, ruidazos, abrazos simbólicos a las casas de estudio, cartelazos, semaforazos, etc; en el camino de preparar una acción central junto a los docentes que unifique el movimiento.

La irrupción del movimiento universitario confluye con una tendencia más marcada en el movimiento obrero y popular al hartazgo y repudio al plan antiobrero de Milei. La unidad de obreros y estudiantes puede pasar de su estadío de proclama a una lucha práctica cuando se trate en el Senado la Ley Bases con la reforma laboral. Allí debemos estar las universidades, con los centros, las federaciones y los sindicatos docentes y nodocentes, movilizados masivamente para darle un nuevo golpe al gobierno de Milei y contribuir a la derrota de todo su plan de guerra contra los de abajo que será la victoria de los trabajadores y los estudiantes.

https://prensaobrera.com/universidad/milei-sigue-sin-dar-respuestas-tenemos-que-continuar-la-rebelion-universitaria

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¿La clase media se le da vuelta a Milei?

Por Aram Aharonian

El gobierno de Javier Milei tomó conciencia de que el combustible que puede prender fuego a sus pretensiones es la clase media, que fue la que consolidó su triunfo en el balotaje. El enojo de un sector de la clase media llevó al ultraderechista a archivar el manual libertario y revertir el aumento de la medicina prepaga.

En la Casa Rosada se vanaglorian con la revista Time, que puso a Milei entre las 100 personas más influyentes. Es un ranking curioso. No figuran Joe Biden ni Donald Trump ni Xi Jimping ni Vladimir Putin ni Lula, por ejemplo.

Milei, quien se jactó el viernes en la reunión de la derecha empresarial en el lujoso hotel Llao Llao de Bariloche, de llevar adelante el ajuste más grande la historia de la humanidad, fue alertado de que la crisis de la educación pública podría ocasionarle un efecto parecido al de la medicina prepaga, donde tuvo que dar marcha atrás con sus aumentos.

Las encuestas marcan que se empieza a afirmar una opinión mayoritariamente negativa a su gestión en ítems como jubilaciones, salud y educación. El falso anuncio de un acuerdo con las universidades nacionales fue un síntoma de eso. Para las encuestadoras “aún” conserva el 50% de apoyo. Ah, y el otro 50% está huérfano de liderazgo y de mística, aún en shock por el resultado electoral y las malas noticias y la crisis que le siguieron… Pero se teme que muy pronto se le termine la paciencia.

Pese a los análisis agoreros, parece lejano aún el día del “juicio final” en el que explota todo y Milei se va, y lo que ha logrado el gobierno es una convivencia más naturalizada de la oposición política y sindicial. No  ha habido ninguna prueba definitiva de la lucha de clases; pero hasta ahora el Mileinato no pudo llevarse puesto el régimen político.

Con su sesgo bonapartista, amenaza ahora con hacerlo cuando gane las elecciones de octubre de 2025 y su hermana Karina arme un nuevo partido. “En diciembre de 2025 presentaremos 3000 leyes para ser votadas en extraordinarias”, dijo, pero para esa fecha falta demasiado y demasiadas cosas podrían pasar antes.

El guatemalteco Augusto Monterroso escribió el cuento más breve del mundo: “Cuando despertó, el dinosaurio seguía ahí”. No hay en el país ese clima político asfixiante que había a mitad del año pasado, pero Milei sigue ahí. La posición no logra arrastar a las masas, y tampoco el gobierno. Hay un gran ausente, el peronismo en las calles -dice que primero tienen que “reorganizar el movimiento”- abandonando la contención popular para volver al poder en 2025, como Lula después de Bolsonaro.

Nadie espera un cambio en Milei: es la provocación permanente y está logrando aplicar un ajuste económico brutal. La burguesía política está incondicionalmente con la gobernabilidad pero no incondicionalmente con Milei. Pero el FMI ya dio dos alertas, uno sobre la situación social y otro donde le dicen que el ajuste macro fue más rápido de lo que creían, pero para que no sea un ave de paso el gobierno tiene que traducir estas medidas durísimas en leyes.

El gobierno tiene enfrentamientos con varias instituciones: con los gobernadores por los fondos, y todo el tiempo entran y salen cosas del proyecto de ley ómnibus, que de más de 600  artículos había bajado a 200, ahora podría crecer a 400, y se empieza a tratar esta semana en el Congreso, donde acumula dos derrotas: la caída de la ley original en febrero y la del Decreto de Necesidad y Urgencia en Senadores. Ninguna de estas derrotas abrió una crisis política, quizá porque nadie quiere que se vaya.

Está también la Corte Suprema de Justicia, que no se quiere pronunciar antes que las instituciones políticas y donde se metió el lío por la posible designación de Ariel Lijo como miembro de la Corte, un juez demostradamente corrupto.

El gobierno tiene a favor que las tres crisis que deberían unirse, política, social y económica, no hay quién las una. La crisis política no le importa al 56% que votó a Milei, donde es dominante el tema de la corrupción. La crisis social es distinta, porque si cae el techo de la escuela protestan todos. O lo que pasa con la epidemia de dengue, sobre la que el gobierno no actúa, copiando el negacionismo de Jair Bolsonaro acerca del covid.

Milei en su salsa

El entorno del presidente sabe que a Milei le importan sólo tres cuestiones: el déficit cero, las redes sociales y su fama en el mundo. Insisten en que se ha convertido en un referente internacional de la derecha, lo que deriva en frases grandilocuentes como la de que coordinaría acciones con los presidentes del mundo, lo que obviamente está muy lejos de la realidad, ya que “los mandatarios hablan con la casa matriz (Washington), no con la sucursal”, señala Raúl Kollman

Una semana atrás, Milei anunció la interrupción de su viaje a Dinamarca por el conflicto Irán-Israel y porque regresaría al país “para coordinar acciones con los presidentes del mundo occidental”. Como era previsible, ningún presidente del mundo occidental se dio por enterado. Hoy en día Milei no tiene presidentes con los que hablar. De haberlo hecho, el costoso equipo detrolls lo hubiera difundido.

Más allá de que no coordinó nada, produjo una crisis con dos de los mandatarios de la región –Gabriel Boric de Chile y Luis Arce de Bolivia– cuando su ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, repitió un añejo libreto estadounidense: que las triples fronteras entre Chile, Bolivia y Perú y la de Argentina, Brasil y Paraguay son el foco de todos los males.

En materia de sobreactuación, Luis Petri, el ministro de Defensa, solicitó ser una especie de socio de la OTAN, la alianza militar que encabeza Estados Unidos y los países europeos. Más allá de la cuestión constitucional, la asociación a la OTAN rompe con una tradición argentina de neutralidad, de no intervención y de buscar la paz como prioridad.

Desde hace años, Estados Unidos trata de desacreditar a las Naciones Unidas y fomenta “The coalition of the willing” (la coalición de los dispuestos), o sea la asociación de Washington con distintos gobiernos de distintas zonas, para influir en esas regiones y, en el peor de los casos, ejercer el papel de policía.

Y siguiendo con la sobreactuación, Petri, en videollamada con Milei, anunciaron la compra de los añejos aviones F-16 por un total de 700 millones de dólares a Dinamarca, unas aeronaves con software, instrumental y armamento ya obsoleto para la OTAN, pero aún un buen negocio para vendérselo a países subdesarrollados.

La pregunta hoy es de dónde va a salir el dinero de los F-16 en tiempos en que “no hay plata”. A Dinamarca hay que pagarle unos 300 millones de dólares y el armamento se paga aparte, otros 300 millones a Estados Unidos. ¿Pago en cuotas y recepción paulatina de los aparatos a medida que se realicen los pagos?

Mientras, 36 fiscales federales expresaron su preocupación frente a la decisión de Petri de desmantelar el área ministerial que investiga los crímenes de lesa humanidad. En una nota remitida al procurador interino Eduardo Casal, los fiscales señalaron que la falta de relevamiento y análisis de los archivos que están en poder de las Fuerzas Armadas irá en desmedro de las causas por crímenes de lesa humanidad.

Recule con la medicina prepaga

Un récord de más de un 165% de aumento en lo que va del año, como consecuencia del Decreto de Necesidad y Urgencia vigente,que desreguló el mercado, generó tal nivel de malestar social y ruido, incluso entre sus votantes, que decidió ceder parte de sus principios antes que pagar las consecuencias políticas.

Por primera vez desde que asumió Milei se vio obligado a abandonar su postura anti-intervencionista y tomó una decisión política en contra de sus principios libertarios: la regulación estatal en el mercado para retrotraer los precios de las empresas de medicina prepaga de salud al valor de las cuotas de diciembre de 2023 y luego aplicar un esquema de actualización mensual.

Todo ello en medio de una escalada de conflictividad apalancada por los despidos y la llegada de las nuevas tarifas de los servicios a los hogares y empresas. En paralelo,el gobierno redobló la apuesta y acudió a la Justicia para solicitar una medida cautelar contra 18 empresas y asegurar un mecanismo de devolución del dinero a los afiliados.¿Otra intervención del Estado para regular el mercado?

El recule tiene su razón en la preocupación por la respuesta en cadena de usuarios que podrían acudir a la Justicia ante los aumentos en telecomunicaciones, combustibles, energía, colegios. La realidad, nuevamente, desmintió a la teoría económica que sostiene que el mercado no tiene fallas y desbarató el fanatismo del Presidente quien considera a los empresarios “héroes benefactores” que pueden acabar con la pobreza del mundo… o acabar con el mundo.

*Periodista y comunicólogo uruguayo. Magíster en Integración. Creador y fundador de Telesur. Preside la Fundación para la Integración Latinoamericana (FILA) y dirige el Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE)

Fuente: https://estrategia.la/2024/04/22/la-clase-media-se-le-da-vuelta-a-milei/

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Al filo de la motosierra: las políticas de género en la era Milei

 Entre el desguace del Estado y la precarización de la vida, La Libertad Avanza logró reducir al mínimo las políticas de sostenibilidad que hacían más vivibles las trayectorias de mujeres y disidencias. ¿El desfinanciamiento también puede verse con anteojos violetas?

Apenas pasaron cien días desde que Javier Milei asumió el poder al grito de “AFUERA” y bajo la muletilla de “no hay plata”. En estos tres meses y medio las áreas de género de ministerios, municipios y secretarías fueron licuadas, desjerarquizadas o directamente desfinanciadas, sin nombramientos a cargo ni tareas que ejecutar. Bajo el mote de “ñoquis”, “vagos” y «militantes», las y los trabajadores estatales fueron estigmatizados por el Ejecutivo y vapuleados por los medios de comunicación. Si bien ya comenzaron a ejecutarse los despidos, aún se esperan más para fines de marzo, momento en el cual se vencen aproximadamente 70.000 contratos.

El depredador gobierno anarcocapitalista, que habló en reiteradas ocasiones de la “sangrienta agenda del aborto” y nombró a las feministas como su enemigo, se hizo notar recortando con su motosierra todo lo que hacía más vivible la vida de mujeres y disidencias. Lo que se pudo construir en los cuatro años de la anterior gestión, con autocríticas y medidas perfectibles, va cayendo poco a poco como la arena en un reloj.

Según el informe de la organización ELA y la Asociación Civil por la Igualdad y la Justicia (ACIJ) -titulado “Un ajuste que agranda la brecha”-, el gasto en las políticas públicas que apuntan a reducir la desigualdad de género fue, en lo que va de 2024, un 33% más bajo en términos reales que el año pasado. Eso significa incluso 9 puntos más de lo que sufrió el presupuesto nacional (24%). “Hicimos este informe porque veíamos que de parte del Ejecutivo había una narrativa explícita que se traduce en medidas concretas de recortar el gasto público, cayendo fuertemente sobre el contenido social. Nos parecía importante hacer zoom en las políticas de género para publicar el informe el 8M y así reabrir la discusión”, explica Malena Vivanco, economista del programa Justicia Fiscal de ACIJ. “Los recortes se dan porque los montos se licuan. El problema es que no se realiza una actualización constante frente a estos niveles de inflación”, asevera.

Malena Vivanco

Entre estas políticas recortadas se encuentra la moratoria previsional que bajó un 38% desde el año pasado, a pesar de que gracias a ella se jubilaron 6 de cada 10 mujeres en Argentina. También hubo una caída del 45,5% en pensiones no contributivas para madres de 7 o más hijes. En el caso de la Asignación Universal por Hije, cobrada en un 95% por mujeres, la caída fue del 4%. “La desigualdad de género no es nueva, es histórica y estructural. Las estadísticas demuestran que las mujeres son las más afectadas por la pobreza y quienes asumen de forma desproporcionada las tareas indispensables para la sostenibilidad de la vida”, asegura el documento.

El recorte de presupuesto afecta más a mujeres y diversidades porque todo lo que se achica en el Estado se agranda en responsabilidades en la casa, en todos los sentidos. Nosotras somos mayoría en las prestaciones ‘no contributivas’, que en realidad no lo son porque contribuimos muchísimo a la riqueza del país con nuestro trabajo no remunerado”, asegura la economista Lucía Cirmi Obón, Magister en Desarrollo y autora del libro «Economía para Sostener la Vida». “Cuando el Presidente dice que las moratorias para amas de casa no son sostenibles, se olvida que para que los hombres hayan podido salir a trabajar había alguien planchando, lavando y cocinando puertas adentro. El aporte de la economía del cuidado es del 25% del PBI y las jubilaciones se financian mayoritariamente con el IVA, que es el impuesto que más pagamos las mujeres. Para hablar de la sostenibilidad de las jubilaciones hay que hablar de la riqueza no grabada”, enfatiza Lucía.

Las políticas de prevención y asistencia a la violencia de género no fueron la excepción a la regla: en la Línea 144 se bajó un 12% el monto ejecutado. Según datos oficiales esta línea atendió, desde su creación en 2013, 125.000 comunicaciones por año. El programa Acompañar, que consta de un subsidio monetario para personas en riesgo de sufrir violencia de género, cayó en un 69% si se lo compara con el año pasado. La merma en este programa es clave a la hora de pensar los femicidios, crímenes de odio y travesticidios, ya que la autonomía económica es una pata fundamental para la salida de vínculos violentos. “Si dependes económicamente de tu agresor, no tenés posibilidad de salir de ese espiral de violencia”, subraya Cirmi Obón.

En cuanto a las políticas de cuidado, en los centros de primera infancia y los jardines casi no hubo presupuesto ejecutado, con una reducción que alcanza alrededor del 100% entre el año pasado y éste. Dichas decisiones no pueden verse escindidas de las consecuencias materiales que conllevan. El desfinanciamiento de las políticas de cuidado dificulta mucho más la tarea a la que las mujeres dedican el doble de horas promedio por día que los hombres, según el INDEC. “Consideramos que los recortes en las políticas de cuidado son una pérdida enorme porque son éstas las que van al núcleo del problema, las que ahondan en la base de la desigualdad que hay tanto en los hogares como fuera de ellos”, afirma Vivanco. Por su parte, Lucía explica: “En conjunto con el CELS hicimos el cálculo que de 43 políticas de cuidado 22 ya fueron derogadas, eliminadas o totalmente desfinanciadas, 15 están en alerta y solamente 7 en vigencia. Hay un retroceso muy grande en un periodo muy corto”. Ella fue quien se desempeñó durante cuatro años como subsecretaria de Políticas de Igualdad en el ex Ministerio de Mujeres, Géneros y Diversidad.

Lucía Cirmi Obón

El programa Registradas, que servía como incentivo para la formalización y permanencia en el empleo de las trabajadoras de casas particulares, se encuentra con las inscripciones cerradas desde el 31 de diciembre de 2023. Mediante este plan, el Estado nacional pagaba el 50% del salario de la trabajadora durante 6 meses, a cuenta del pago que realiza la parte empleadora. En lo que respecta al programa «Potenciar Trabajo», experimentó una reducción del 71% en comparación con el mismo período de 2023. Este programa contaba con un 63% de mujeres inscriptas a finales del año pasado. “Lo que está en peligro es la autonomía económica de las mujeres. Cuando dejamos todo librado al mercado nos damos cuenta que ese mercado prefiere varones porque piensa que nosotras somos más costosas”, continúa Cirmi.

Como si hiciera falta aclarar, otra de las medidas que fue borrada por el libertarismo fueron los análisis transversales del presupuesto y el presupuesto con perspectiva de género que había impulsado durante el gobierno anterior la Dirección Nacional de Economía, Igualdad y Género perteneciente al Ministerio de Economía y encabezada por Mercedes D’Alessandro. Esto, lejos de ser una mera formalidad, “representa una herramienta de gran alcance para comprender las prioridades del gobierno en la resolución de urgencias que aún afectan de manera desigual a distintos sectores de la sociedad, entre ellos a las mujeres y personas LGBTI+”, especifica el informe antes citado.

“Que no existan análisis transversales del presupuesto con perspectiva de género es un problema para la transparencia del gobierno. Todo esto se enmarca en una política de acceso a la información y disposición de la información pública que ya no son tan accesibles. Desde ACIJ hacemos pedidos de información pero vemos que ya no está disponible para todos”, concluye Malena.

Fuente de la información e imagen:  https://elgritodelsur.com.ar

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Paro nacional docente: 80 por ciento de acatamiento y fuerte reclamo a Milei

Por: Liliana Cañete

El paro logró una gran adhesión en las provincias en las que comenzaba el ciclo lectivo. Este miércoles 28 habrá un encuentro gremial para evaluar los próximos pasos a seguir.

El paro nacional docente convocado por la Confederación de Trabajadores de la Educación (Ctera) alcanzó un 80 por ciento de acatamiento en las diez jurisdicciones que debían comenzar el ciclo lectivo, en medio de protestas en defensa del derecho laboral y las partidas de conectividad y del incentivo docente, que debe enviar Nación a cada una de las provincias.

En todas las provincias se realizaron actos, concentraciones y movilizaciones para exigir la Paritaria Nacional Docente, el pago del FONID y del Fondo Compensador de Desigualdades Salariales, y partidas para comedores escolares y programas educativos, entre otros puntos.

La situación en nuestras barriadas populares y en cada una de nuestras escuelas, es una situación verdaderamente terrible: no alcanza la partida de comedor, no alcanza la partida de copa de leche, no hay plata para comprar guardapolvos, útiles escolares.

“La situación en nuestras barriadas populares y en cada una de nuestras escuelas, es una situación verdaderamente terrible: no alcanza la partida de comedor, no alcanza la partida de copa de leche, no hay plata para comprar guardapolvos, útiles escolares”, aseguró la secretaria general Sonia Alesso, en el acto realizado frente al Palacio Pizzurno, en la ciudad de Buenos Aires, acompañada por representantes de todo el país.

Crédito: Prensa CTERA

El subsecretario gremial de Suteba seccional Lomas de Zamora, Roberto Vinuesa, reclamó en diálogo con AUNO que Javier Milei “se haga cargo de las partidas que debe a las provincias, que fue conseguido a través de la larga lucha llevada a cabo por los docentes y los sindicatos que culminaron con esta remuneración que se pone a nivel nacional y es muy importante para todas las provincias”.

Por otro lado, señaló que las provincias “reciben una cantidad de dinero para comedores escolares y muchas de ellas obtienen un Fondo Compensador Salarial” con lo cual va a ser “muy difícil para muchas jurisdicciones poder pagar el sueldo a los docentes sin estos aportes que son por ley obligación del gobierno nacional”.

Además, Vinuesa sostuvo que Ctera espera que el Presidente “se haga cargo de de la situación, de lo que debe ejercer, lo que vienen realizando todos los ejecutivos a nivel nacional hasta ahora que es aportar las paritarias correspondientes”.

También advirtió que van a tener que “llevar a cabo un plan de acción que tendrá continuidad y que seguramente habrá otras movilizaciones y medidas de fuerza y de lucha en post de que sean escuchadas las reivindicaciones de los docentes”.

Vinuesa indicó que en la provincia de Buenos Aires tuvieron la ventaja de que el gobierno de Axel Kicillof “pueda solventar las partidas que tienen que ver no solo con el incentivo docente y la conectividad, porque también el Presidente se hacía cargo de la quinta hora, programa que es de nivel nacional y también de los proyectos correspondientes a las escuelas de doble jornada”.

En ese sentido, señaló que el gobernador bonaerense “se compromete a hacerse cargo de la quinta hora como también de la doble jornada”, que muchas provincias no lo pudieron realizar, por ejemplo, explicó que Santa Fe tuvo que levantarla “por falta de financiación”.

En una situación similar se encuentra el Programa Fines que contaba con financiamiento de Nación y que ahora Kicillof se comprometió a solventarlo, por lo menos por un semestre, ya que “sin los aportes del gobierno nacional es muy difícil, el gobierno provincial está haciendo todos los esfuerzos, pero tiene un límite debido a la falta de financiamiento del Presidente”, manifestó el docente.

Paro nacional docente: 80 por ciento de acatamiento y fuerte reclamo a Milei

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Argentina: Gremios docentes convocan a un paro y plan de lucha nacional

El Sindicato de Trabajadores de Educación Pampeana (Sitep), junto a otros gremios del país, le plantearon a la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (Ctera) que convoque a un paro docente y plan de lucha nacional ante el panorama planteado desde el gobierno de Javier Milei.

“La devaluación del 120%, la liberación de los precios, los tarifazos y el conjunto de medidas adoptadas por el gobierno de Milei, golpean duro a los bolsillos de la población trabajadora, jubilados y docencias, luego de 8 años de pérdida salarial”, expresaron en un documento en el que repasaron la situación de salarios frente a los gobiernos pasados de Mauricio Macri y Alberto Fernández.

Y ante el nuevo Gobierno nacional dijeron: “La no liquidación del Fondo Nacional de Incentivo Docente (FONID), de Conectividad, de fondos para la comida o para obras de infraestructura o del Fondo Compensador a las provincias, exigen una respuesta contundente de la docencia y las comunidades educativas. Que los montos de FONID y Conectividad sean en negro y nunca hayan sido incorporados al básico, habilitan con mayor facilidad el ataque a nuestro salario. Estos montos representan entre un 10% y un 30% según los distritos para los cargos que recién se inician”.

Además, recordaron: “El DNU 70/2023 (de Javier Milei) considera a la educación como ‘servicio esencial’, con el único objetivo de quitarnos el derecho constitucional a la huelga. Hoy ese apartado está suspendido por la justicia, pero gobierno nacional y provinciales apuntan a ese objetivo”.

“El presidente Milei dijo que gobernaría contra la casta -afirmaron-, pero hasta el momento los golpes son todos contra la clase trabajadora y los sectores populares, mientras la verdadera casta de empresarios, banqueros y el FMI acrecientan sus ganancias”.

Desde el Sitep destacaron que la Confederación General de Trabajadores tuvo que convocar a un paro nacional: “Fue una gran demostración de fuerzas en todo el país, aunque no le dio la continuidad necesaria para derrotar el plan de hambre y despojo que está en curso. La caída de la Ley Ómnibus fue un golpe muy fuerte al gobierno de Milei y los ‘dialoguistas’ cómplices”.

“La Ctera estuvo al margen de las movilizaciones de rechazo a la ley y de las concentraciones en el Congreso. El gobierno de Milei redobla su ataque, no porque esté fuerte, sino porque quedó debilitado luego del fracaso de la ley. Ante el inicio de las clases, es necesario promover instancias democráticas, asambleas y plenarios de delegados, para debatir y resolver acciones de lucha. La pulverización del salario y las jubilaciones, la enorme crisis social y el hambre que golpea a las barriadas e impacta directamente en las escuelas públicas, el recorte y la retención de los fondos educativos por parte de Milei y Caputo y el ajuste del gobierno nacional y de los gobernadores, exige un paro nacional y plan de lucha -que debe votar el Congreso de CTERA y los gremios docentes de la CGT- con un no inicio de clases nacional y en cada provincia”, expresaron.

Y convocaron a impulsar asambleas para votar el paro nacional docente. “Esta orientación de lucha es el único modo de revertir este presente lleno de acechanzas contra la docencia y la comunidad educativa toda. Las centrales y sindicatos nacionales deben abrir los espacios para que la docencia pueda intervenir y decidir las respuestas necesarias para enfrentar estos ataques. El Congreso convocado por la Ctera para el jueves 22 debe ser un paso en ese camino”, destacaron.

Gremios docentes convocan a un paro y plan de lucha nacional

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Anarcoeducación: ¿cómo es la educación que quiere Milei?

Por: Daniel Filmus

Desde el inicio del proceso de construcción del Estado Nacional, sobre fines del siglo XIX, todos los gobiernos que se sucedieron adjudicaron una función social trascendente al sistema educativo argentino. Por supuesto, esta función tuvo características muy diferentes de acuerdo al modelo socio-económico y político que se intentó implementar desde la conducción del Estado. Nos encontramos, por primera vez en la historia argentina, frente a una situación inédita: un gobierno que, a partir del intento de aplicación de las teorías de la escuela económica austríaca y del anarcocapitalismo, conceptualmente plantea que: a) el Estado no tiene que ser responsable de la gestión del sistema educativo y del acceso al derecho a la educación, ya que esto sería una responsabilidad de las familias y del mercado, y b) el modelo de desarrollo económico y de valores sociales no exige que la educación, la ciencia y la tecnología nacional jueguen un papel estratégico.

El Presidente Julio Argentino Roca promulgó en 1884 la Ley 1420 que estableció la obligatoriedad de la escuela primaria en Argentina. La función social que la Generación del ’80 concebía para la educación era muy precisa: construir la unidad cultural de una Nación que, tanto poblacional como territorialmente, era muy heterogénea. Hipólito Yirigoyen la concibió como una herramienta de democratización social, ampliando la escolaridad en todos los niveles, incluso el universitario a partir de la Reforma del 18. Más tarde, durante el proceso de sustitución de importaciones y el peronismo, se definió la función de la educación en dirección a satisfacer la formación de trabajadores y profesionales para atender las demandas de la industrialización que vivió el país a partir de la década del ’30. Las dictaduras posteriores vieron en la educación una política privilegiada para transmitir los valores que garantizaran el control ideológico, el orden y la disciplina. El sistema educativo se constituyó en una de las principales estrategias que debía posibilitar la aplicación y legitimación del terrorismo de Estado.

Cada gobierno que sucedió a la recuperación de la democracia también definió explícita o implícitamente la función social que concibió para la escuela, la universidad y la ciencia. Para el Presidente Raúl Alfonsín, la educación fue una herramienta fundamental para consolidar la democracia. Posteriormente, en los ’90, se intentó acompañar desde el sistema educativo el proceso de transformaciones neoliberales propuesto desde el modelo económico, transfiriendo los servicios educativos nacionales a las jurisdicciones y colocando como función principal de la educación la de formar para una economía de mercado.

El kirchnerismo, modificó fuertemente el modelo de desarrollo llevado adelante en la década anterior, para lo cual concibió la educación como una herramienta de integración social y desarrollo económico que privilegió la industria. Para ello aprobó un conjunto de leyes que conformaron un plexo normativo nuevo, revirtiendo las tendencias del período menemista. El gobierno de Mauricio Macri también propuso una función importante para el sistema educativo. Privilegió su papel en torno a difundir valores que consideró fundamentales para construir el orden social de mercado al que aspiraba, desarrollando valores que apuntalaban el individualismo, la competencia y el emprendedurismo. A su vez, el sistema educativo también desempeñó funciones importantes aun en los momentos en los que el país atravesó profundas crisis como las de la hiperinflación, la hiperdesocupación y la pandemia. En estos períodos el sistema educativo resintió su función pedagógica y se convirtió en un espacio de contención social y un “refugio” frente a una coyuntura que tendía fuertemente a la exclusión social.

Al contrario de lo hecho por los gobiernos anteriores, el proyecto que encabeza Javier Milei no plantea ninguna función definida para el sistema educativo. Ya en su campaña electoral, el actual presidente planteó que había que eliminar la educación obligatoria. No era una postura improvisada. Es la concepción que muchos de los economistas ultraliberales y de la escuela austríaca enuncian como dogma.

Esta concepción no prevé que la educación juegue un papel importante en la formación para el trabajo, la productividad o el desarrollo científico-tecnológico. Principalmente, porque el modelo propuesto no incluye una ampliación del mercado de trabajo, un proceso de industrialización o de creación de conocimiento y tecnologías propias. Siguiendo las teorías del Capital Humano, los anarcocapitalistas sostienen que la sociedad no debe invertir en formar trabajadores o profesionales que no se sabe si encontrarán puestos laborales para ejercer su carrera, ya que ello implicaría “sobreeducar”. Bajo su paradigma, esto implica realizar un gasto público por el que no se obtendría una tasa de retorno que justifique la inversión social. En otras palabras, ¿por qué la sociedad debería financiar los estudios de un futuro ingeniero que seguramente no podrá aplicar en el país los aprendizajes que obtuvo a lo largo años de estudio? Se trataría así de una inversión a riesgo que debería ser asumida por los particulares.

En una sociedad altamente polarizada como la que propone este modelo, los pocos empleos altamente calificados que requerirá una economía crecientemente concentrada pueden ser cubiertos por los circuitos educativos de élite o de alta calidad que pertenecen principalmente al sector de la enseñanza privada. La mayoría de la población, que tendrá trabajos poco calificados, no necesitará una educación de calidad. Por otra parte, considera que son los propios actores del mercado, y no el Estado, quienes en última instancia tienen la responsabilidad de formar su propia fuerza laboral, ya que son quienes se apropiarán de la renta diferencial que produce el trabajo calificado. En este punto, la experiencia muestra que en nuestro país la mayor cantidad de mano de obra ocupada pertenece a pequeñas y medianas empresas o se desempeña en el cuentapropismo o la economía informal. Se trata de sectores que, a diferencia de las grandes empresas, no están en condiciones de generar instancias propias de capacitación laboral.

Al mismo tiempo, el ataque permanente y las amenazas de desaparición del CONICET, la prédica respecto de la inutilidad del trabajo de los investigadores y la inclusión en el proyecto de ley de la autorización para privatizar algunas de las importantes empresas tecnológicas, como ARSAT, NASA, VENG, DIOXITEX, etc., deja en evidencia que el modelo propuesto no incluye el desarrollo de las capacidades científico-tecnológicas nacionales, sino la dependencia de los centros mundiales de producción de conocimientos.

Sin embargo, más allá de todo lo expuesto, la característica particular del gobierno de Javier Milei es que no sólo no considera importante el sistema educativo para el modelo económico, sino que tampoco lo percibe como necesario para transmitir su ideología y sus valores. Al contrario que otros gobiernos, inclusive los que sostenían una perspectiva neoliberal o incluso autoritaria, no confía en la escuela, en los docentes y en el currículum escolar como posibles portadores de los valores culturales que quieren difundir.

Milei está convencido de que las redes le han ganado a la educación la supremacía en la capacidad de la construcción del imaginario social. Y es allí donde apuesta e invierte recursos para lograr una hegemonía ideológica en torno al individualismo, el liberalismo y la lógica del mercado. El fuerte impacto que ha tenido el actual presidente en su llegada a la juventud a través de las redes en la campaña electoral, lo fortalece en esta convicción.

Por otra parte, los defensores del anarcocapitalismo proponen que no hay que confundir educación con escolaridad; sostienen que hay que combatir la escolaridad porque es una herramienta del Estado para adoctrinar con ideas colectivistas o populistas a niños y jóvenes. Por lo tanto, la primera tarea es apartar al Estado de la educación. La educación, para la escuela austríaca, es una responsabilidad indelegable de las familias que deben adquirir, de acuerdo a su capacidad de consumo, igual que cualquier otro bien que se distribuye en el mercado. Uno de sus principales defensores, Nogalez Lozano sintetiza esta posición: “…para el anarcocapitalismo no cabe duda que una educación libre exige en todo momento separar la educación del Estado; apostar claramente por la implantación de los mercados privados en la enseñanza libre, mercados en los que no exista coacción alguna, ni en la forma ni en los contenidos educativos y en donde el total protagonismo de la enseñanza lo tengan oferentes y demandantes de la enseñanza…”

En sintonía con esta concepción, el Poder Ejecutivo incluyó en la primera versión del Proyecto de Ley Ómnibus un artículo en el que se permitiría que los niños desde los 9 años cursen sus estudios en sus casas sin ir a la escuela y sin seguir necesariamente los planes oficiales para el aprendizaje, legalizando el “home schooling” y el “unschooling”. La resistencia que provocó esta propuesta obligó a que en los borradores de la nueva versión del proyecto de Ley -hoy en suspenso- aparezca más diluida, sólo para actividades extracurriculares. Pero, aun así, como iniciativa para menores de 18 años y para la escuela primaria, continúa siendo discriminadora. Los principales factores de trabajo por la igualdad que tiene el sistema educativo son el ámbito de la institución escolar y la actividad presencial del docente.

Llama la atención de que a pesar de denostar la participación del Estado en la educación, en el proyecto de Ley Omnibus se amplía notoriamente su función de control y de evaluación del sistema y sus protagonistas. Entre otras, se incluyen nuevas instancias de pruebas para quienes egresan del nivel secundario y para los docentes. Ahora bien, ninguna de estas instancias aparece vinculada a estrategias pedagógicas que permitan subsanar los problemas de calidad de la educación que seguramente estas evaluaciones permitirán detectar. Ni siquiera están vinculadas a nuevas formas de promocionar. Si no es para mejorar o para promocionar, ¿para qué se pretende evaluar? Es evidente que el objetivo es favorecer la discriminación social. Por ejemplo, en un país donde 2 de cada 3 jóvenes termina la escuela media, ya no alcanza con este certificado para conseguir trabajo. Todas las investigaciones muestran que los empleadores, a la hora de incorporar personal, privilegian a aquellos trabajadores que egresan de los colegios o circuitos educativos a los que concurren sectores sociales más acomodados. Ahora tendrán un nuevo indicador para seleccionar a sus trabajadores: el resultado de la prueba al finalizar el ciclo medio. Como ya muestran las pruebas Aprender, el nivel socioeconómico de la familia es el principal predictor de la nota que obtienen los jóvenes. Nuevamente serán quienes provienen de los sectores más desfavorecidos los que corran el riesgo de una mayor discriminación, aún para aquellos trabajos que no requieren de los conocimientos adquiridos en la escuela.

Por último, el Presidente J. Milei y su Ministro de Economía, Luis Caputo, anunciaron que el mayor ajuste en el gasto público se efectuará en las transferencias a las provincias. Ello implica, no sólo dejar de cumplir con la inversión prevista en la Ley de Financiamiento de Educación, sino también profundizar las desigualdades entre las jurisdicciones que están en muy diferentes condiciones para hacerse cargo de los aportes que no enviará la Nación. Este proceso ya lo hemos vivido en los inicios de los ’90 a partir de las transferencias de instituciones educativas a las provincias sin los recursos correspondientes. Los resultados estuvieron a la vista: se profundizó el deterioro, la desarticulación y la desigualdad del sistema educativo. Los anuncios respecto de la intención de reemplazar el modelo actual por el financiamiento de la demanda o la aplicación de los vouchers, contribuiría aún más a ampliar las brechas sociales frente a la educación.

En síntesis, nos encontramos frente a un riesgo inédito en la historia de nuestro país. Una combinación particularmente peligrosa para el futuro educacional. Un gobierno que niega el papel del Estado en la regulación del funcionamiento de la sociedad y en particular de su participación en la distribución de conocimientos y valores a través del sistema educativo. Un proyecto económico que no demandará mayor capacitación para la mayoría de la fuerza laboral. Un modelo de construcción de hegemonía ideológica que prescinde del papel de la escuela para concentrarse principalmente en las redes sociales. Una política de ajuste económico que disminuirá drásticamente la inversión en educación, ciencia, y tecnología, y golpeará fuertemente el salario docente, profundizando la desigualdad y condicionando la posibilidad del inicio y continuidad del ciclo lectivo y la calidad de los aprendizajes escolares.

El anarcocapitalismo sólo nos puede llevar a la anarcoeducación. Estamos frente a la posibilidad de que, lejos de solucionarse los actuales problemas del sistema educativo, la aplicación de estas políticas lleve a un enorme aumento de la desarticulación interjurisdiccional, a la agudización de la desigualdad en el acceso y las oportunidades de niños y jóvenes, y a un descenso mayor aun en la calidad de la educación que brindan nuestras escuelas. Una verdadera anarquía educativa.

A pesar de estas intenciones del oficialismo, y como se vio en el debate del Proyecto de Ley Ómnibus, existe en las distintas fuerzas políticas, en la sociedad y, particularmente, en la comunidad educativa, una fuerte convicción de que la educación, la ciencia y la tecnología deben jugar un papel decisivo en la construcción de una Argentina que logre combinar un fuerte crecimiento económico con mejores condiciones de distribución del ingreso e igualdad social. También existe un fuerte consenso en que nuestro sistema educativo necesita de profundas transformaciones si se pretende colocar a la educación a la altura de este desafío. Que así como está, nuestra escuela no logra resolver exitosamente la función social que tiene encomendada respecto de la necesidad de garantizar una educación moderna y de calidad para todos. Hay coincidencia en que no se trata únicamente de “resistir” o de estar a la defensiva frente los intentos de aplicar la anarcoeducación. La urgencia del momento exige abrir el diálogo entre todos los sectores democráticos para avanzar en la formulación de una amplia coalición entre todos aquellos que valoran el insustituible papel de la educación, con el objetivo de elaborar en forma participativa las mejores propuestas de cambio y dar el debate y la lucha para que se implementen.

https://www.pagina12.com.ar/712019-anarcoeducacion-como-es-la-educacion-que-quiere-milei?

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Entrevista a Carla Gaudensi: “Milei lo explicó bien, las feministas somos enemigas del capitalismo”

Por: Fundación Rosa Luxemburgo – Argentina

 

Conversamos con Carla Gaudensi, Secretaria General de la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (FATPREN) y trabajadora en la Agencia pública de Noticias Télam, acerca del paro convocado por las principales sindicales del país para este 24 de enero en rechazo a las decisiones neoliberales del presidente “libertario”.

En sus primeros días de gobierno el presidente argentino Javier Milei ha propuesto medidas disruptivas que han generado el rechazo entre sus detractores e incertidumbre entre sus votantes. Sus políticas económicas se centran en la reducción del gasto público, la simplificación del sistema impositivo y la promoción de la libre competencia. Todas medidas en detrimento de las clases medias y populares de la Argentina. Algunos, como en su reciente alocución en el Foro Económico Mundial en Davos, lo ven como un defensor apasionado del liberalismo económico, mientras que otros y otras cuestionan la viabilidad y los impactos regresivos de sus propuestas.

En medio de este escenario económico y político críticos, conversamos con Carla Gaudensi, Secretaria General de la Federación Argentina de Trabajadores de Prensa (FATPREN) y trabajadora en la Agencia pública de Noticias Télam, acerca del paro convocado por las principales sindicales del país para este 24 de enero en rechazo a las decisiones neoliberales del presidente “libertario”.

FRL: ¿Por qué realizar un paro general de trabajadores a poco más de un mes del gobierno de Javier Milei?      

CG: Creemos que se da con tanta rapidez porque ya desde el primer día que asume este gobierno provoca una devaluación brutal de más del 120 por ciento, que deteriora mucho más el poder adquisitivo de los asalariados y asalariadas y ni hablar de los trabajadores que están en la informalidad o que están en la economía popular. Esa devaluación se traduce directamente a los precios, afectando a los sectores más humildes de nuestro país, un país donde la riqueza está muy concentrada en pocas manos. No pasaron ni diez días de esa primera devaluación y tuvimos la presentación de un Decreto de Necesidad de Urgencia (DNU), donde no había ninguna necesidad ni ninguna urgencia.

FRL: ¿Cuáles serían los reclamos principales contra este DNU?

Entre otros puntos, pretende una reforma laboral incluyendo cambios sustanciales en la organización sindical. Buscan debilitar la estructura laboral y las regulaciones en materia económica. También ataca a los inquilinos, la mayoría de quienes son trabajadores y trabajadoras en nuestro país tienen el acceso a la vivienda muy limitado. Hoy la clase trabajadora en general no puede acceder a una vivienda. La desregulación en materia de alquileres también es una transferencia de riqueza a sectores económicamente más poderosos en nuestro país o para las inmobiliarias. Otra norma que contiene este decreto que nos involucra a quienes somos trabajadores y trabajadoras de prensa es el que atenta contra las empresas del Estado, pretendiendo transformarlas en sociedades anónimas. Nosotros tenemos los medios de comunicación públicos nacionales como Radio Nacional, la Televisión Pública y la agencia de noticias Télam, que es el lugar donde yo trabajo. Son tres medios públicos nacionales. En su conformación los medios públicos nacionales tienen un rol social y buscan cambiar esa identidad para transformarla en una sociedad con fines de lucro. Se altera el sentido de cumplir con ese carácter social que garantiza acceso a toda la ciudadanía.

En la Cámara de Diputados el gobierno presentó una “Ley Ómnibus”, que no sólo contenía el DNU, sino que contenía un montón de leyes más que apuntaban a cada sector de la economía, a cada sector de la actividad económica y productiva de nuestro país y que apuntaba a destruir, no solo la organización en la sociedad como la concebíamos, sino que seguía apuntando los cañones cada vez más a los sectores populares, beneficiando a las élites concentradas. Lo han dicho en las exposiciones en la Cámara de Diputados, cada artículo parece que tiene nombre y apellido de alguna empresa.

FRL: ¿Qué tipo de actores sociales son los que convocan al paro?

CG: Históricamente la Confederación General del Trabajo (CGT) es la central más aglutinante y de mayor cantidad de gremios, pero en los años noventa, en un momento histórico neoliberal muy parecido a este, tuvieron variadas visiones de cómo enfrentar esa etapa histórica, así surge la Central de Trabajadores y Trabajadoras de la Argentina (CTA), que actualmente tiene una división. Lo que podemos inferir de estas últimas décadas es que cuando hay gobiernos que vienen a atacar a los intereses de la clase trabajadora, la unidad se vuelve urgente y se teje por arriba y por abajo; se cristaliza en el objetivo central que es defender a la clase. Creo que esos momentos, los más regresivos en materia de derechos sociales, laborales y económicos, nos han llevado a poder generar esa gran articulación y que hoy se está dando también con quienes están en los movimientos sociales o en la economía popular, que son trabajadores no registrados en la formalidad pero que generan aportes a la producción nacional, sea de bienes y servicios generando riqueza económica y social. De hecho, a partir de la victoria de Milei pareciera que hay una ausencia de liderazgos políticos y ante eso hoy la CGT y la CTA junto a los movimientos sociales, son los que están encabezando esta reacción en la sociedad para demostrar que hay una resistencia a estas medidas empobrecedoras. Incluso se están sumando al paro sectores de la sociedad que en otras etapas históricas han tenido bastante reticencia a la organización sindical porque los medios de comunicación, entre otros sectores, estigmatizan muchísimo a quienes están en los sindicatos.

Es casi impensado que haya un paro a un mes y medio de gobierno cuando en general siempre se pide que haya seis meses de contemplación o de “luna de miel”. Pero no existió porque es muy brutal la intención de destruir todo el tejido social. Esta política de “shock”, como ellos la llama, realmente no perjudica a ningún sector concentrado. En ninguna norma se plantea discutir las grandes riquezas. Todo lo que propone es transferencia de los que menos ingresos tienen a los que más ingresos tienen, entonces ahí hay un ataque claro a las grandes mayorías. Tal vez es mejor que en este momento los protagonistas sean las organizaciones de los trabajadores y trabajadoras que son los que ven afectado el corazón de su organización. Si el DNU se aprueba, en nuestro país desaparece la organización de los trabajadores como la tenemos concebida a la fecha.

FRL: ¿Cómo crees que se recompone, en ese sentido, el campo popular y de izquierdas en general, en este momento de avance de la ultraderecha en lo social, económico, político? 

CG: Está faltando que emerja de todo este proceso una conducción política natural. Apenas salió el DNU hubo una protesta espontánea, los famosos cacerolazos que son parte de un emergente que surge en el 2001, en la crisis más importante que tuvimos en nuestro país. Esa fue la muestra de contrarrestar el discurso que ellos habían implantado: “ganamos por el 56%, podemos hacer lo que queramos”. Entonces no fue un cheque en blanco para que nos sigan empobreciendo. Se empieza a ver en los sectores que lo votaron incomodidad, pero todavía no un enojo contundente. Otros dicen que hay que darle tiempo. Y ¿qué se está haciendo? Me parece que quienes de alguna manera estamos en distintas organizaciones estamos ampliando nuestro alcance a través de multisectoriales, que es algo que, de alguna manera, surge en la provincia de Buenos Aires y las impulsa el gobernador opositor al gobierno, el peronista Axel Kicillof. Él mismo dice que estas iniciativas no tienen un sello partidario, que es amplio a toda la sociedad civil afectada por estas políticas neoliberales y pide que abran en lo posible la participación.

Nuestra idea es armar algo más transversal, más sectorial, para empezar a caminar los barrios y ver cómo va decantando ese malestar social hablando con los vecinos. Eso se está haciendo en varios puntos de la provincia de Buenos Aires y en las provincias del país. Ya no son solamente las centrales sindicales, sino que empiezan a participar vecinos, vecinas en asambleas.

FRL: ¿Qué rol cumplen los feminismos en esta recomposición del antagonismo social y teniendo como antecedente el discurso de Milei en Davos donde apuntaba al movimiento como uno de los responsables de la crisis actual en Argentina y “Occidente”?

CG: No sorprende que Milei ataque a los feminismos porque sabemos cuál es su idea política, conocemos su rechazo desde siempre. Creo que en líneas generales no se puede reproducir lo que dijo en Davos, realmente es una brutalidad, no tengo palabras para describirlo. Aunque quizás lo explicó muy bien. Él define al capitalismo como enemigo del feminismo y sí, entendió todo, las feministas somos enemigas del capitalismo. El patriarcado y el capitalismo son uno solo y ahí está la lucha de los feminismos para combatirlos. El feminismo es una absoluta lucha contra la opresión. Y es una lucha de clases y de géneros contra esa opresión que sostiene el capitalismo en sí mismo. Así que me parece que él lo entiende bien. En las últimas horas nos preguntaban en algunos medios de comunicación si nos indignaba el discurso, pareciera que querían que nos indignáramos. Y a nosotras nos pareció tan natural lo que sucedió. En todo caso es un discurso que rechazamos completamente. No hay dónde enfocarse ahí. No nos vamos a indignar por esa parte, me indigno desde que arrancó. Dijo que Occidente estaba en peligro. Es como el DNU que promulga, no se pueden analizar seriamente, lo rechazamos en su conjunto. Lo mismo con el discurso en Davos. Me parece que es todo reprobable. Y lo del feminismo ni hablar, pero creo que lo entendió bien.

Desde los feminismos hay que repensar una agenda más arraigada en la clase que, desde mi punto de vista, un poco se fue perdiendo. Se perdió mucho la calle también. Perdimos el protagonismo y la agenda en la calle. Costó entender cuál era la agenda. Después del logro con la legalización del aborto pareciera que se diluyó la agenda feminista. Y ahí nos costó repensar. Nosotras tenemos que estar al frente de la pelea. Es así lisa y llanamente. De hecho, en las asambleas feminisas últimamente hay compañeras que nos dicen que esperan realmente que se deje de hablar de determinadas cosas y discutamos más bien cómo vamos a poner el cuerpo en las movilizaciones y en los paros. Cómo vamos a poner el cuerpo a los distintos lugares, en vez de seguir teorizando sobre lo mismo.

Fuente de la información e imagen:  Fundación Rosa Luxemburgo – Argentina

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