Page 2 of 2
1 2

Más de 70 por ciento de niños chinos utilizan redes sociales

21 de Enero 2018/Fuente y Autor: spanish

Una encuesta dada a conocer hoy señala que 70,9 por ciento de los estudiantes de primaria y secundaria en China utilizan la aplicación de mensajes instantáneos WeChat.

La encuesta también reveló que 75,9 por ciento de los niños chinos tienen su propio teléfono móvil, señaló el Centro Nacional para la Infancia de China.

Las cifras se basan en la encuesta aplicada a alrededor de 9.000 niños de toda China.

Sin embargo, el 28,8 por ciento de los entrevistados nunca lee noticias en línea y 43,2 por ciento nunca ha tocado un periódico.

El centro pidió hacer esfuerzos para resolver la brecha digital entre la educación urbana y rural y para proteger la privacidad de los niños usuarios de internet.

Fuente de la noticia: http://spanish.xinhuanet.com/2018-01/19/c_136906324.htm

Fuente de la imagen: https://www.iebschool.com/blog/wp-content/uploads/2017/06/Redes-Social

Comparte este contenido:

En Francia los móviles se quedarán sin recreo

Por: Liliana Arroyo

El primer error es pensar en el móvil como pantalla y no como herramienta. Cambiar el punto de vista es un paso indispensable para repensar las medidas desde la inteligencia emocional, el acompañamiento y la maduración del autocontrol.

Hace pocos días el ministro de educación francés anunciaba las nuevas medidas sobre el uso de los móviles en las escuelas francesas para el curso que viene. En las aulas ya estaban prohibidos, pero en septiembre de 2018 se extenderá la restricción de uso a los patios y los pasillos. Más allá de su aplicación en los distintos centros, vale la pena analizar las motivaciones que llevan a esta propuesta. Las medidas, explicó Jean-Michel Blanquer, parten de razones pedagógicas pero también emplazan la preocupación sobre las pantallas por el riesgo que según él conllevan en términos de salud pública.

Ante este escenario, es importante dar un paso atrás y tomar perspectiva. Más que entrar a discutir la conveniencia o no de la prohibición, vale la pena revisar los principios en los que se fundamenta.

  1. Asumir que el uso de las pantallas afecta a la salud pública: el primer error es pensar en el móvil como pantalla y no como herramienta. Digamos que lo piensan des de un uso exagerado, demonizando “las pantallas” y hablando de adicción sin considerar la dimensión patológica del término. Una cosa es mal uso, otra cosa es una dependencia enfermiza. Esto nos lleva a recordar que el móvil no es sólo una pantalla o un dispositivo. Es una herramienta multiusos que puede disrumpir por completo el sistema educativo. Es una ventana al mundo entero y es la posibilidad de alimentar la curiosidad en cualquier momento y lugar. Está claro, eso tiene ventajas e inconvenientes. Pero es como los cuchillos: no los vamos a prohibir en el comedor por los posibles usos violentos, lo que haremos es educar en el cómo, cuándo y para qué usarlos.
  2. Pensar que prohibir el móvil soluciona el ciberacoso: Una de las intenciones es evitar los vídeos grabados en reciento escolar que después se puedan subir a internet para burlarse. Quien quiera hacer un vídeo, lo hará a la salida. Y quien quiera burlarse, no necesita un vídeo para ello. El ciberacoso es justamente una línea roja que hay que trabajar. Pero es una cuestión conductual y no instrumental. Las soluciones contra el bullying pasan por educar el respeto, educar en la identificación de las situaciones del abuso de poder y hacer conscientes de su responsabilidad a los cómplices necesarios. Se puede educar el ciberacoso sin el móvil en la mano, pero irá bien trabajarlo en combinación con ello.
  3. Creer que los centros educativos libres de móviles ganan la guerra “interminable” entre profes y alumnos: algo estamos planteando mal si los móviles son motivo de guerra y discusión en las aulas. Con todo el potencial educativo que tienen que sólo sirvan para generar discusión indica que estamos todavía muy verdes.

A su favor diré que donde menos me preocupa que se prohíba el móvil es en los espacios del recreo. Ahí sí que me parece acertado favorecer la conexión con los niños y niñas que te rodean, el estímulo de la imaginación y sobretodo la interacción y el juego simbólico son fundamentales para el desarrollo. Aunque deberíamos revisar qué perjuicio tiene que vean vídeos de su youtuber de referencia y los comenten. Quizá lo interesante es ayudarles a identificar qué es educativo y qué no, qué conviene ver y qué no. De qué nos podemos reír y qué cosas no hacen ninguna gracia. Y ya de paso, planteemonos si creemos que lo “bueno” o “normal” es algo que se parezca a la socialización que tuvimos en el siglo XX cuando estamos en el XXI y los avances son de vértigo.

En definitiva, la prohibición es una solución cortoplacista que no pretende comprender el fenómeno en su complejidad y que deja los móviles a la altura de un estorbo que hay que apartar, ladear y obviar en lugar de gestionarlo. No estamos ante un problema pedagógico o un riesgo para la salud. Estamos ante un fenómeno social muy relevante que ha venido para quedarse. Queramos o no, cuanto antes lo abordemos pensando en términos de cómo mejoramos los procesos de aprendizaje y cómo los ponemos a nuestro favor para explorar nuevos límites, nuevos temas y trascender las propias paredes de los centros, mejor.

Cambiar el punto de vista es un paso indispensable para repensar las medidas desde la inteligencia emocional, el acompañamiento y la maduración del autocontrol. Los alumnos, y de hecho todos, necesitamos aprender qué nos aportan los móviles y en qué circunstancias está bien usarlos y cuándo no. Esos códigos de relación con o sin móvil o a través de él, forman parte de la experiencia de la socialización. Y hoy, educar en la socialización digital es tan o más importante que en la socialización analógica. Lo que seguro no veo es cómo vamos a educar en ello desde la prohibición. Porque lo que se prohíbe se tacha. Se ladea. Se empuja al margen. Y si educar es una conversación constante sobre la danza entre los límites y las posibilidades, la prohibición coarta el cuestionamiento. Porque lo que se prohíbe, no se puede educar.

Fuente: http://eldiariodelaeducacion.com/blog/2017/12/22/francia-los-moviles-se-quedaran-sin-recreo/

Comparte este contenido:

Francia sopesa prohibir el teléfono móvil en las escuelas

17 Diciembre 2017/Fuente y Autor: El Periódico

Es el tema uno de los temas de conversación estos días en Francia a través de whatsapp o de cualquier otra aplicación del móvil con la que se comuniquen los adolescentes al otro lado de los Pirineos: el minsitro de Educación, Jean-Michel Blaquer quiere prohibir el uso de teléfonos dentro de las escuelas a partir del curso 2018-2019. No es que se quiera impedir su uso en clase, algo comprensible, sino en cualquier espacio de la escuela. Nada de niños en el recreo que sustituyan el juego por una pantalla. Francia es el país de los debates, de todo tipo. Ahora, el de los teléfonos.

Emmanuel Macron ya apuntó esta meta en la campaña de las presidenciales. En la era de las comunicaciones, puso sobre la mesa la necesidad de imponer un apagón parcial en las vidas de los niños y adolescentes. La intuición sugiere a los expertos en educación que el teléfono es un elemento de distracción que afecta más allá de lo previsible. Los niños en Francia, como en España, pueden comenrza a tener su primer teléfono móvil a partir de los nueve años. Los padres, a veces, se lo compran no solo porque se lo pidan, sino porque si se trata de niños que van solos a la escuela, les proporcionan mayor seguridad, sin preguntarse primero si han puesto en sus manos un artefacto que influirá negativamente en su formación.

Fuente de la noticia: http://www.elperiodico.com/es/sociedad/20171216/francia-sopesa-prohibir-telefono-movil-escuelas-6499949

Fuente de la imagen: http://estaticos.elperiodico.com/resources/jpg/0/6/1513441954360.jp

Comparte este contenido:

Francia quiere prohibir los teléfonos móviles en colegios y universidades en 2018

Francia/12 de Diciembre de 2017/Xataka

Los teléfonos móviles pasan bastante tiempo en nuestras manos cada día, de ahí que cada vez les exijamos más y más autonomía y no nos conformemos con cifras que hace algunos años habrían sido más que suficientes. La razón es que nos hemos alejado mucho de la época en que sólo servían para llamar, ahora son el centro de nuestro ocio y, en ocasiones, incluso nuestra televisión portátil.

En los móviles encontramos la información al momento, la forma de estar con los que realmente no están y un rincón al que evadirnos siempre que lo sintamos necesario, de ahí que se hayan convertido en un problema en determinados ámbitos como el educativo, donde hace falta atención y concentración. Y es por eso que Francia se ha propuesto prohibirlos. Concretamente, de aquí a septiembre de 2018. Es en lo que trabajan en estos momentos.

Un curso 2018 – 2019 sin teléfonos

Jean-Michel Blanquer, Ministro de Educación francésJean-Michel Blanquer, Ministro de Educación francés

Esta futura prohibición, que por ahora sólo figura entre los planes del país al norte de los Pirineos, figuraba en el programa electoral de Emmanuel Macron, actualmente vigesimoquinto presidente de la República Francesa. Para el partido que dirige Macron, la cuestión de las pantallas es de «salud pública».

La confirmación de que el Gobierno francés trabaja en la prohibición de los teléfonos móviles en las aulas ha llegado a través del programa Gran Jurado en la televisión de su país. El invitado, Jean-Michel Blanquer, Ministro de Educación, ha sido el encargado de anunciar que se trabaja para lograr la prohibición de las pantallas negras rectangulares para el curso 2018-2019.

«Es bueno que los niños no los usen demasiado, en todo caso, que no las usen antes de los 7 años», afirmó Blanquer

Septiembre de 2018 es la fecha que se marca Blanquer para que dé comienzo esta prohibición que debe afectar tanto a las escuelas de primaria como a las universidades públicas. Nada se ha comentado sobre si esta normativa aplicaría en el ámbito de los recintos educativos privados, habría que esperar a que el Gobierno lograse poner en marcha su plan para evaluarlo con detenimiento.

Durante la entrevista a Blanquer se pone sobre la mesa la necesidad del uso del teléfono con fines educativos, cuando se trata de usarlos para recopilar información, y también en situaciones de emergencia en las que el alumnado necesite ser localizado o bien localizar a otras personas. La pregunta permitió al Ministro de Educación matizar que el plan de prohibición de teléfonos móviles está aún en estudio.

Estamos trabajando aún en este tema y puede hacerse de diferentes formas. Los alumnos pueden necesitar el teléfono para fines de enseñanza o bien para situaciones de emergencia, de modo que los teléfonos podrían estar confinados.

Lo que significa que tal vez se estableciesen localizaciones en las que dejar el teléfono móvil al acceder al aula, de forma que el alumno pudiese usarlo entre clases o durante sus ratos de descanso. Sea como fuere, parece que todo está demasiado en el aire pero que la intención del Gobierno francés es clara: los teléfonos móviles han de prohibirse en las aulas. Como afirmó Blanquer en la entrevista, «algunas universidades ya lo hacen».

Fuente: https://www.xatakamovil.com/movil-y-sociedad/francia-quiere-prohibir-los-telefonos-moviles-en-colegios-y-universidades-en-2018

Comparte este contenido:
Page 2 of 2
1 2