Vacaciones en el sector educativo, derecho al descanso y calendario escolar

Por: Javier Méndez

El anuncio del calendario escolar a finales del ciclo anterior causó desconcierto e irritación dentro del magisterio por cómo se impuso la dinámica escolar para este periodo. Como tomado de los manuales de política educativa neoliberal, se han aumentado los días de clase. ¿Esto beneficia a las comunidades escolares?

Con el argumento de “recuperar las clases”, el calendario escolar 2021-2022 fue modificado, lo que implica el aumento de días de clases, de 190 a 200, para alumnas y alumnos, mientras que los días laborales para docentes y personal de apoyo se incrementan de 205 a 225.

Lo anterior, tomando en cuenta un periodo extraordinario de recuperación de contenidos, desde el inicio del ciclo escolar hasta las últimas semanas de noviembre. De esta manera, atentando contra el descanso de niñas, niños, adolescentes, trabajadoras y trabajadores de la educación, se pretende revertir el rezago educativo que implicó el Aprende en Casa, luego de que no se garantizaron las condiciones -en primer lugar de conectividad- para la educación a distancia.

Así, este primer periodo vacacional se redujo a exactamente dos semanas, cuando antes se regresaba a las aulas después del 6 o 7 de enero. Esto a pesar del desgaste que implicó el regreso a clases presenciales que, por ejemplo, en muchos casos implicó la atención tanto presencial como a distancia, aumentando la carga laboral docente.

 

También como parte de las modificaciones al calendario escolar para este ciclo lectivo figura la reducción del receso escolar de verano, que comenzará a partir del 28 de julio, cuando en otros años este periodo comienza dos semanas antes. Esta tendencia a incrementar la cantidad de días de clase no es nueva, sino que proviene de las viejas políticas neoliberales que pegaron un salto con la reforma educativa de Enrique Peña Nieto y que para continúan con la 4T.

Es bien sabido por docentes y especialistas en educación que México se encuentra entre los países con más días/horas de clase. En este rubro inclusive está muy por encima de la media en la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE), que marca un aproximado de 799 horas para primaria y 919 para secundaria. Esta media desde luego que países como Suecia o Finlandia la reducen hasta 601 y 808 horas respectivamente.

En el extremo opuesto, países como México y Chile mantienen a las y los estudiantes de secundaria más de mil 100 horas en el aula. Cabe destacar que los gobiernos de ambos países han mantenido durante décadas el ataque a la educación pública, a distintos ritmos pero de forma constante. Parece ser que la lógica de mercado, aplicada en educación, establece que mayor cantidad de horas aumenta la “calidad educativa”, pero ¿este criterio es verdad? ¿Se puede pensar o percibir un incremento de este valor en las escuelas que aumentaron sus horarios y/o sus días de clase?

La SEP planteó en 2016 que “Un calendario con más horas por día y mejor aprovechamiento crea mejores condiciones para fortalecer los resultados de los aprendizajes en las aulas”. Lo que está detrás de esto, sin embargo, es una visión empresarial que busca naturalizar largas jornadas y poco descanso, para formas así a la futura mano de obra en beneficio de la patronal.

Vacaciones y derecho a descanso, una cuenta pendiente

Según estadísticas, países como México, Estados Unidos, China y Filipinas son los que se encuentran con menos días de vacaciones por año. El vecino del Norte no contempla días pagados al año, mientras que en China y Filipinas solamente se tienen hasta 5 días por año en promedio. En México el promedio de días de vacaciones por trabajador es de 6 al año.

Formalmente el magisterio es el sector de trabajadores que cuenta con más días de recesos y vacaciones al año, si se comparan con las estadísticas presentadas arriba. Sin embargo, las jornadas laborales de las y los docentes suelen ir más allá del aula: asistir a cursos de capacitación, revisar actividades, aplicar evaluaciones o diseñar planeaciones son solo algunos de los trabajos que realiza la y el docente fuera del salón de clases, e inclusive fuera de la jornada laboral, pero estos no se contemplan dentro de las estadísticas laborales del sector.

 

En el sistema capitalista, los desarrollos cintíficos y tecnológicos que han aumentado la productividad del trabajo, no se traducen en mayor tiempo de descanso y ocio, sino que, por un lado, se imponen largas jornadas laborales y menos días de descanso, y por otro el desempleo de millones. Es en este marco que la tendencia en el sector educativo es acercarse a los reducidos tiempos de descanso promedio de la clase trabajadora en su conjunto.

Ante ello, es necesario organizarnos para pelear por nuestro derecho a un buen descanso, con vacaciones suficientes y pagadas para todos, y por ejemplo para reducir la jornada laboral a seis horas, cinco días a la semana, lo que permitiría que las madres y padres de familia pasen más tiempo con sus hijos, así como combatir el desempleo mediante el reparto de las horas disponibles.

Con la promesa incumplida de la 4T para revalorizar al magisterio, se pone en la mesa de debate la necesidad de marcar nuestra independencia política como trabajadores respecto al gobierno y las instituciones del régimen, así como de la oposición de derecha, y de organizarnos desde las bases para la lucha por recuperar nuestro sindicato de manos del charrismo, para ponerlo al servicio de defender nuestros derechos y ampliarlos.

Fuente de la información:  https://www.laizquierdadiario.mx

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Mario Aguilar y el agobio de los profesores online: “Este Gobierno no sólo no nos cuida, sino que tenemos que andar nosotros cuidándonos de él”. Chile

El presidente del Colegio de Profesores es enfático en que el Gobierno ha quedado al debe en todo este proceso de educación online producto de la pandemia, ya sea por falta de apoyo a los docentes, por decisiones burocráticas como el oficio referente al libro de clases o por mantener la evaluación docente, entre otros, o la nula preocupación por el estado de salud mental de los docentes que “no paran desde la mañana hasta la noche”. “Es como si el tema no existiera para el Ministerio de Educación”, sostiene. Respecto a la vuelta a las aulas, es enfático: “Piñera quería hacernos volver en mayo (…) porque ellos entienden los colegios como guarderías para que la gente pueda salir a trabajar, pero no vamos a aceptar condiciones que no garanticen la seguridad. No es descartable que no se pueda volver en todo el año 2020. Con los niños no se juega”.

La semana pasada en El Mostrador, la docente Javiera Henríquez publicó la columna de opinión “Profesores online al borde del colapso mental”, donde relata con detalles cómo es un ajetreado día del obligado trabajo a distancia de los maestros, una modalidad que debido a la pandemia no es descartable que se extienda por todo este año, como han admitido desde el mismo gremio.

Para el presidente del Colegio de Profesores, Mario Aguilar, lo que cuenta su colega en la  columna “simplemente refleja una realidad”. “Por supuesto que es frustrante lo que la colega describe, yo entiendo perfectamente esos sentimientos. Esto de las clases a distancia es muchísimo trabajo, un verdadero agobio, la gente no para desde la mañana hasta la noche”, cuenta.

Según el dirigente, en todo este proceso, el Gobierno ha quedado al debe, ya sea por falta de apoyo a los profesores, por decisiones burocráticas como las referentes al libro de clases o por mantener la evaluación docente. “Este Gobierno no solo no nos cuida, si no tenemos que andar nosotros cuidándonos de él”, acusa.

Con todo, Aguilar señala que pese a todas las dificultades, los profesores han desempeñado su trabajo lo mejor posible. “Hay mucho compromiso que es ético. Esta situación del teletrabajo en el caso de los docentes, legalmente es bien precario, es bien ambiguo. Pero la mayoría -o casi todos- han entendido que aquí hay una responsabilidad social y eso es lo que ha primado, a pesar de que hay muchas adversidades y hay muchos abusos”, señala.

Uno de estos problemas básicos por ejemplo, dice relación con internet, un elemento clave para las clases a distancia. “Cada uno de los profesores está pagando su internet, por ejemplo. Algunos colegas han tenido que aumentar el ancho de banda, porque tenían un plan básico, que ahora no sirve porque se usa el Zoom o se usan plataformas que requieren mejor calidad de internet. Uno puede decir ‘bueno, no es tanto,’ pero finalmente es un costo que no nos correspondería, que tendrían que asumirlo los empleadores, el Ministerio de Educación y no se está haciendo. Pero igual la gente responde y no ha abandonado a sus estudiantes de ninguna manera, eso no lo vamos a hacer”.

Por otro lado, hay que considerar la situación de los estudiantes, también marcada por las carencias, por lo que Aguilar plantea que este año se debiera flexibilizar las calificaciones. “Sería bastante injusto que califiques a un alumno que no ha tenido conexión a internet, o sería bien injusto que lo hicieras repetir solo porque no tuvo conexión a internet o en su casa no había forma de hacerlo. Por lo tanto, las calificaciones deberían obviarse por este año y después nivelarse el próximo año”, señala.

La «visión empresarial» del Mineduc

Otro foco de preocupación para los profesores es el de salud mental de sus asociados.  “Hay colectivos que han empezado a realizar trabajos de relajación, de desarrollo personal. En nuestro repositorio además hay bastante material pedagógico para apoyar a nuestros colegas, para tratar trastornos del sueño, técnicas de cómo enfrentar los temores, etcétera. Pero de arriba nada, es como que el tema no existiera para el Ministerio de Educación, o que no existiera para la Agencia de Calidad o la Superintendencia”.

Aguilar atribuye esa despreocupación a que en el Gobierno “tiene esa visión empresarial que nosotros hemos criticado mucho, esa visión de que ellos son los dueños del país y nosotros somos sus empleados, y que por supuesto hemos estado en discusión con eso. Lo discutimos el año pasado cuando tuvimos un largo paro y seguimos en discusión con esa lógica empresarial y gerencial con los que administran el país”.

Sin embargo, admite que hay un cambio de mano con la llegada de Raúl Figueroa al ministerio, en lugar de Marcela Cubillos. “Ella (Cubillos) es muy fanática ideológicamente, ella es de extrema derecha, tiene ese pensamiento duro, esa cosa muy autoritaria. Si bien Figueroa ideológicamente no es tan distinto, es un tipo con quien se puede interlocutar más fluidamente, tiene un trato distinto, no tiene esa prepotencia tan dura y ese autoritarismo tan amenazante de Cubillos”.

“No hay que gastar el tiempo en tonteras”

Pese a ello, los problemas con el Mineduc no amainan, y otro foco de conflicto es el oficio ministerial referido a los libros de clases. «El ministerio sacó esa circular famosa que planteaba una serie de trabajo administrativo, burocrático que normalmente es inútil, pero en este contexto es más inútil. Nosotros hemos llamado a la gente a que no gaste tiempo en tonteras, llenar el libro de clases en este contexto es lo más estúpido que hay, aunque después salió el ministerio un poco reculando, diciendo que no, que era opcional eso, que no era obligación”, cuenta.

Pero este tema administrativo no es el único que preocupa a os profesores, y Aguilar señala que se debe ir más allá y se debe suspender la evaluación docente. “El ministerio no ha accedido a suspenderla, pero hay un proyecto de ley de iniciativa parlamentaria que se está tramitando. (…) Nosotros creemos que se debe suspender y redestinar los fondos, es mucha plata la que se malgasta, derechamente hacerlo este año sería botar plata”.

Respecto a la vuelta a clases, el timonel del magisterio es enfático en que no están las condiciones “Piñera quería hacernos volver en mayo, porque ellos entienden los colegios como guarderías para que la gente pueda salir a trabajar. Pero no vamos a aceptar condiciones que no garanticen la seguridad en la salud, los mismos padres y apoderados no van a estar dispuestos a arriesgar a sus hijos. No es descartable que no se pueda volver en todo el año 2020. Con los niños no se juega”, finaliza.

Fuente: https://www.elmostrador.cl/noticias/pais/2020/06/29/mario-aguilar-y-el-agobio-de-los-profesores-online-este-gobierno-no-solo-no-nos-cuida-sino-tenemos-que-andar-nosotros-cuidandonos-de-el/

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