Inglaterra implementa una educación sexual progresista, aunque los padres se quejan

Por: Iliana Magra.

Las escuelas inglesas ampliarán de manera significativa la educación en materia de sexo y relaciones para cubrir temas que incluyen las relaciones entre personas del mismo sexo, las personas trans, la menstruación, el abuso sexual, la salud mental, la mutilación genital femenina, el matrimonio forzado, la pornografía y el sexteo.

El gobierno anunció los cambios, que representan la primera revisión del programa educativo sexual desde 2000 en esa nación y que han sido recibidos con una oposición vocal por parte de algunos padres y escuelas religiosas, que quieren poder evitar algunos de los elementos en sus programas. Pese a la oposición, el programa de estudios ya es ley y entrará en vigor en septiembre de 2020.

“No hay una guía para la educación sexual y en materia de relaciones con la que todos vayan a estar felices”, dijo Damian Hinds, ministro de Educación del Reino Unido ante el Parlamento el 25 de febrero, después de anunciar las revisiones.

“Nuestros lineamientos se basan en que estos temas obligatorios deberían ayudar a mantener seguros a los niños, ayudarlos a prepararse para enfrentar el mundo en el que están creciendo” y también “ayudarlos a fomentar el respeto a los demás y a la diversidad”, agregó.

Los padres podrían excluir a sus hijos de algunos elementos, entre ellos los que son más explícitamente sexuales, pero no de otros, explicó Hinds. Sin embargo, eso será posible solo hasta que los estudiantes tengan 14 años: a partir de los 15 dependerá del estudiante decidir si participa en todas las materias de educación sexual ofrecidas.

El programa educativo desarrollado por el gobierno británico será obligatorio para cualquier escuela en Inglaterra que reciba financiamiento público, incluidas las escuelas religiosas. Escocia, Gales e Irlanda del Norte, los demás países que conforman el Reino Unido, tienen estándares distintos.

Para el lunes por la mañana, cuando el nuevo plan de estudios fue establecido como ley, una petición en línea para que los padres tengan más poder de decisión respecto a lo enseñado a los estudiantes había acumulado más de cien mil firmas. Mientras el Parlamento debatía la política ese día, discusión que no afectó la política final, decenas de manifestantes estaban reunidos afuera.

El gobierno “prácticamente está adoctrinando a los niños con una ideología específica acerca de que no existe el bien ni el mal y que todo es como a ti te plazca, básicamente”, dijo Musa Mohammed, de 32 años, padre de tres que se unió a la manifestación. “Estos son nuestros hijos; sus padres deben encargarse de ellos, no el Estado”.

Britta Riby-Smith, madre de tres, dijo que acudió a las protestas frente al Parlamento para apoyar “la causa cristiana”.

Riby-Smith criticó que con el nuevo programa “la agenda LGBT se hará más fuerte”  medida que los niños crezcan. “Es algo que quiero que sepan mis hijos; definitivamente no quiero que sean ignorantes, pero me gustaría ser yo quien se lo enseña”.

No obstante, la parlamentaria Helen Jones, del opositor Partido Laborista, insistió en que el nuevo programa no defendía ningún conjunto de opiniones en específico, sino que estaba diseñado con el fin de preparar a los niños para que se enfrenten al mundo tal como es.

“Es menos probable que los jóvenes que reciben una buena educación en materia de sexualidad y relaciones tengan sexo antes de tiempo; también es mucho menos probable que se contagien de alguna enfermedad de transmisión sexual”, comentó.

Algunas defensoras de la salud de las mujeres habían organizado una campaña a favor de enseñar acerca de la menstruación pues argumentaron que las niñas a menudo no estaban conscientes de posibles señales de padecimientos dolorosos o peligrosos relacionados.

Jessica Ringrose, profesora de Sociología de Género y Educación en University College London, dijo que el programa era prometedor. Agregó en entrevista que “será genial que logren abordar todos esos temas”.

La educación sexual ya existe en la mayoría de las escuelas inglesas, pero, según la política de 2000, el programa es más limitado y está más enfocado en las escuelas secundarias; además, gran parte del programa no es obligatorio. Los niños generalmente comienzan la educación secundaria a los 11 años.

Los nuevos estándares incluyen educación obligatoria en primaria y secundaria acerca de qué factores hacen a una relación sana o nociva, parte de un enfoque más amplio respecto de la salud mental y física. Se recomienda comenzar la educación sexual básica en los últimos años de la escuela primaria, pero no es un requisito.

El programa de educación sexual en secundaria y preparatoria incluye temas nuevos como el hecho de que “hay distintos tipos de relaciones estables de compromiso”, sobre “qué constituye el acoso y la violencia sexuales” y respecto a que el “material pornográfico a menudo presenta una imagen distorsionada de las conductas sexuales”.

Fuente del artículo: https://www.educaciontrespuntocero.com/noticias/que-es-la-educacion-inclusiva/100528.html

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