Autismo y sexualidad: Mitos, tabúes, inhibiciones y otras lindezas

Por: Daniel Comin

Si hay algo que genera problemas en el correcto desarrollo de las personas con autismo es todo lo que tiene que ver con la educación sexual, y curiosamente es una de las cosas que peor se trata, que menos se aborda, y de lo que menos se habla, generalmente por los errores sobre sexualidad que los propios neurotípicos tienen ¡Cómo va a enseñar quien no sabe!

Y es que nuestra sociedad libre, democrática, moderna, tecnológica, avanzada, bla, bla, bla, tiene a un montón de ciudadanos con un concepto errado de la sexualidad. Esta visión alterada ha sido afianzada por aspectos religiosos, tabúes de todo tipo, segregación, supremacismo, incultura,…, en fin, uno de esos males que desde tiempo inmemorable aquejan a nuestra sociedad.

Y claro, pensamos que sexualidad es algo solo relacionado con la práctica sexual, el coito, la fornicación, cópula, etc, etc. Aspectos que incluso han sido vistos como algo sucio e impuro. Incluso, a día de hoy, sigue habiendo gente que piensa que la fornicación fuera del matrimonio es pecado mortal, se abrirá la tierra y caerás directo al infierno, a ver si así se te pasa el calentón. Y es que el sexo se ve como algo sucio. Presumo que quienes dicen y piensan eso no son capaces de hacerse la representación mental de su madre y su padre echando un polvo. Porque no nos engañemos, a día de hoy es la única forma natural de tener hijos.

De igual manera, esa visión reduccionista, pecadora, sucia y horrible, ha maltratado a la mujer, considerando que su periodo menstrual era algo impuro, y por tanto convirtiendo a la mujer en algo impuro. Otro de esos mitos estúpidos que aun perdura a día de hoy en más mentes de las que cabría desear.

Si sumamos que la sociedad en su conjunto, es cínica y tiene doble moral, y además somos unos ignorantes en lo que a sexualidad se refiere, pues apañados estamos. Es curioso que los EE.UU., ese país de dura moral que castiga todo pecado, sea también el mayor productor de pornografía del mundo. Y es que a mayor prohibición de algo, mayor deseo, y además, más mitos y más aberraciones.

La sexualidad no es solo tener sexo, la sexualidad es algo más extenso e importante. Forma parte del conocimiento integral y del conocimiento del cuerpo, de nuestro propio respeto, de nuestras emociones y relaciones afectivas, de nuestra esencia como seres humanos. La sexualidad no es solo genitalidad, aunque la englobe, la sexualidad también es el respeto al otro, es el cambio permanente de nuestro cuerpo. La sexualidad es biológica, emocional, espiritual, física, básica y necesaria. La sexualidad es nuestra propia identidad como seres humanos, diversos y sociales. La sexualidad conforma la familia, al individuo, a la pareja, a todos en general. La sexualidad es como una red inalámbrica que conecta a todos los seres humanos, ahora bien, si no tienes bien configurado el sistema igual te piratean.

Por tanto, para estar bien configurados hay que estar formados, de forma serena y limpia, porque la sexualidad es el individuo, y no podemos, bajo ningún aspecto coartar ninguno de los múltiples aspectos que conforman la sexualidad, ya que eso viola los derechos de la persona.

Y además, dentro de la sexualidad se encuentra la orientación sexual de cada persona, que sea la que sea, siempre ha de respetarse, siempre. No hacerlo es nuevamente una vulneración de derechos. Y no, la orientación sexual de una persona no la define, no importa si eres heterosexual, homosexual, transgénero o lo que sea, eso no te define como persona.

Y dicho todo esto, si ya en general lo de la sexualidad no lo llevamos muy bien, o no tenemos las ideas claras, ahora viene cuando entra alguien con autismo en escena. Y aquí la cosa se complica, porque en función de las necesidades de apoyo de cada persona, casi podemos decir que les vamos a crear unos problemas u otros.

Aun recuerdo una vez en determinado lugar, estando yo con mi amiga Elaime Maciques, cuando una madre nos vino a preguntar en qué forma podía evitar que su hijo -ya un adulto- tuviera deseos sexuales. Básicamente nos estaba preguntando por fármacos u otro aditamento que generase cierta castración en ese hombre. Pero es que apenas un momento después aparece otra madre defendiendo la sexualidad de su hijo, un tipo de gran tamaño, ya un adulto. Y al principio iba bien, hasta que afirma con orgullo que ella se encargaba de masturbar a su hijo para que saliera ya despachado y a gusto de su casa.

En el primer caso tuve que parar a Elaime, quien se enojó al ver como esa señora pretendía castrar a su hijo, quitarle ese derecho. En el segundo caso, casi nos quedamos en estado catatónico los dos. Y esto es bastante habitual ¿Convierte eso en malas madres a esas dos mujeres? No, dudo que en ningún momento pensaran que hacían nada malo, ni la primera castrando, ni la segunda en su violación incestuosa. Es que no eran conscientes, su propia educación las había llevado a pensar y actuar así, de esa forma tan increíble.

Y bien, quizá alguien pueda pensar que eso son casos aislados, pues no, es más habitual de lo que nos parece. Muchas veces se pretende convertir a las personas con autismo en seres asexuados, en niños eternos. La cantidad de traumas que podemos crear es tremenda. Eso es una agresión consentida por todos. Y da igual el nivel de necesidades de apoyo que la persona requiera, porque si requieren de mucho apoyo los asexuamos y/o esterilizamos, y si requieren de poco apoyo los estigmatizamos. Malo en cualquier caso.

En los últimos 5 años habremos organizado más de 50 eventos, talleres, cursos, jornadas,…, solo en una ocasión tuvimos que cancelar un acto por poca participación, y adivinen de qué era el taller. Efectivamente, un taller de sexualidad. Algo de lo que en realidad no tenemos ni idea, y de lo que casi nadie se atreve a saber.

¿Y qué cosas se enseñan en la sexualidad?

Pues muchas cosas. Y desde edades temprana. Niños y niñas con buena educación sexual son poco propensos a recibir abusos sexuales, eso que a todos nos da pavor, que cada vez que oímos que alguien abusó de un niño nos rasgamos las vestiduras. Pues bien, si el niño tiene buena educación sexual va a ser mucho más difícil que sea abusado.

Enseñamos relaciones afectivas, sí, eso también es sexualidad. Hablamos de respeto, de privacidad, de normas sociales, de comunicación, de procesos biológicos como la menstruación. Cosas tan cotidianas como esas. Nada hay más dramático que ver a una niña de 10 años, con autismo pre-verbal, que sale del baño de colegio con sus braguitas manchadas de sangre en los tobillos y con una cara de pánico porque no sabe que diantres le está pasando ¡En qué maldito momento alguien pensó que no había que explicarle a esa niña la menstruación!

También se enseñan valores, expresiones afectivas, habilidades sociales, a tener límites,… La sexualidad forma parte de la vida de la persona, y es OBLIGATORIO enseñarla. Nos esforzamos como locos para que nuestro hijo siga incrustado en un aula y que lleve el ritmo académico, pero no hacemos ni caso a sus necesidades básicas, nos empeñamos en que sepa álgebra, escribir sin faltas de ortografía y que sepa cual es la capital de Turkmenistán, que no dudo que son cosas importantes en la vida. Un día tienes que ir a Asjabad por trabajo y hay que saber que es la capital de Turkmenistán, algo importante en la vida de todos.

Pero luego nuestra hija o hijo no tiene ni idea de la menstruación, de los cambios físicos, de lo que ello conlleva, de su propio cuerpo, etc, etc. Eso sí, tendrán un trauma de por vida pero son capaces de ubicar Asjabad en un mapa.

¿Y por qué es tan importante que demos una correcta educación sexual?

Pues porque en la vida de la persona va a tener más relevancia una sexualidad adecuada que saber donde está Asjabad. Porque le vamos a dar herramientas para evitar abusos. Le vamos a evitar sustos y traumas. Haremos que su desarrollo sea más armónico. No tendrá dudas que quizá resuelva de forma poco adecuada. Conseguiremos que tenga un desarrollo sexual adecuado. Evitaremos conductas sexuales inadecuadas o fuera del contexto social.

Educuar en sexualidad es educar para la vida, para la sociedad, nos pasamos las noches llorando con esa especie de mantra sadomasoquista de ¡Qué será de mi hijo cuando yo falte!, mantra que convierte a nuestro hijo en incapaz, ya que, sin mamá y papá, parece que se vaya a morir en tres minutos dada su inutilidad. Pero luego no dedicamos unas horas a prepararlo para la vida, ya que por norma nos vamos a morir antes que ellos, así que el mejor legado que podemos darles es el prepararlos para vivir en este mundo, que es en el que viven ellos.

Por todo esto y por mucho más hay que educar en sexualidad. Y si quieren saber más sobre sexualidad, hagan clic AQUÍ. Siéntanse orgullosos de no trasladar a sus hijos sus traumas y miedos.

Fuente: https://autismodiario.org/2017/01/20/autismo-sexualidad-mitos-tabues-inhibiciones-otras-lindezas/

Comparte este contenido:

Daniel Comin

Director y Editor de Autismo Diario y responsable de supervisión de artículos científicos. Especializado en sistemas de desarrollo y economía sostenible. Co-autor del proyecto de formación técnica y reinserción social de África Central para United Nations Development Programme (ONU) y AIDICO. Coordinador del proyecto de salud pública para tribus nativas de Norteamérica.