‘Como iglesia no nos oponemos a una educación sexual’, dijo Ulloa en la homilía enviada a la población durante la Cita Eucarística que se celebró ayer.
De acuerdo a Monseñor, el interés de la iglesia es aportar en su elaboración, pero que sea transparente.
La ley debe incluir sobre todo un verdadero castigo a los adultos, quienes cometen los abusos a las menores, porque es fácil señalar a la menor, pero detrás de ella hubo un adulto que abuso, recalcó Monseñor.
El proyecto de Ley N° 61 sobre salud sexual y reproductiva, se mantiene en primer debate desde el 2015.
Gloria Grifo de la Alianza Panameña por la Vida y la Familia apoya la posición de la iglesia, pues el mensaje que quiere dar la iglesia es que se formen familias responsables y no que se dé rienda suelta al libertinaje.