Redacción: Telemundo
Los tiroteos en sitios públicos han dado paso a toda una lucrativa industria de productos de seguridad personal, pero, al inicio de un nuevo año escolar, maestros y estudiantes exigen que el Congreso tome medidas para reforzar la seguridad en las escuelas.
Aunque las masacres del pasado fin de semana ocurrieron en un almacen de Walmart en El Paso (Texas) y un club en Dayton (Ohio), éstas fueron otro recordatorio de que nadie está a salvo de las balas en Estados Unidos. Entre las 31 víctimas hubo niños y estudiantes.
En lo que va de 2019, 112 personas han muerto en tiroteos masivos, o el equivalente de una cada dos días, según un análisis realizado de forma conjunta por el diario «USA Today”, la agencia de noticias AP y la Universidad Northeastern.
Y desde 2006, el país ha registrado 1,714 muertos en 311 masacres, o un incidente cada quincena. La cifra es igual de espeluznante en lo que respecta a las escuelas públicas: entre 2013 y 2018, ha habido al menos 405 incidentes de violencia en los colegios, que dejaron un saldo de 109 muertos y 219 heridos, según un análisis del grupo «Everytown for Gun Safety».
Masacres como las ocurridas en la secundaria de Columbine (Colorado) en 1999, la primaria de Sandyhook en Newtown (Connecticut) en 2012, o una secundaria en Parkland (Florida) en 2018, han dejado al descubierto las deficiencias en los sistemas de seguridad en los colegios.
Que el Congreso haga algo
Para activistas de grupos cívicos como “Moms Demand Action”, “Everytown for Gun Safety” y la Asociación Nacional de Educación (NEA), estos brotes de violencia también han aumentado las presiones para que el Congreso adopte de una vez medidas para mejorar la seguridad escolar, comenzando por restringir el acceso a las armas.
En declaraciones a Noticias Telemundo, Sharon Watts, co-fundadora de “Moms Demand Action” (Las madres exigen acción), dijo que su grupo mantendrá la presión sobre el Congreso durante todo el receso de agosto para que el mes próximo apruebe medidas para atajar la violencia de las armas.
La NEA y “Everytown for Gun Safety” promueven un plan de seguridad de ocho puntos para la verificación de antecedentes de compradores de armas; el fortalecimiento de la infraestructura de seguridad en las escuelas; prohibir el acceso a las armas de personas peligrosas, y aumentar la edad para la compra de armas semiautomáticas, entre otros elementos.
Miembros del grupo “Stand with Parkland”, en realidad padres convertidos en activistas tras la pérdida de sus hijos, pidieron en una audiencia ante un comité del Senado el mes pasado una ley que prohíba la fabricación, venta y tenencia de rifles de asalto, y condenaron la parálisis del Congreso por la presión de la conservadora Asociación Nacional del Rifle (NRA).
Al advertir que la inacción del Congreso sólo producirá más tiroteos, también pidieron más ayuda para las autoridades locales y estatales.
El pasado 30 de julio los congresistas Josh Gottheimer, demócrata por Nueva Jersey, y Elise Stefanik, republicana por Nueva York, presentaron una legislación bipartidista, denominada el «Acta de ALYSSA», en honor a Alyssa Alhadeff, una de las 17 víctimas del tiroteo en Parkland y antigua residente de Nueva Jersey.
Estados llevan la delantera
De aprobarse, la medida exigirá que todas las 98,000 escuelas públicas en Estados Unidos instalen alarmas “silenciosas” que los maestros puedan activar cuando un homicida irrumpe en las escuelas para alertar a la policía. También autoriza mayores inversiones para la contratación y capacitación de más agentes de seguridad en las escuelas.
La legislatura de Nueva Jersey adoptó una ley similar en febrero pasado, y otros estados también estudian sus propias medidas para fortalecer la vigilancia y protección de recintos escolares.
De hecho, en 2018, 43 estados estudiaron un total de 392 medidas y resoluciones relacionadas con la seguridad escolar, de las cuales 87 fueron adoptadas, según la Conferencia Nacional de Legislaturas Estatales.
En su cuenta en Twitter, el grupo “Stand with Parkland” aplaudió los esfuerzos del gobernador de Ohio, Mike DeWine, para que la legislatura en ese estado adopte un sistema universal de verificación de antecedentes de los compradores de armas, más acceso a servicios de salud mental, y restricciones para impedir que las armas caigan en manos de personas peligrosas.
Esas medidas “mantendrán seguros a los estudiantes en los colegios y harán más seguras a nuestras comunidades», dijo.
El presidente del Comité de Salud del Senado, el republicano Lamar Alexander, dijo a la prensa que su partido está explorando opciones bipartidistas para reforzar la seguridad escolar y aumentar los servicios de tratamiento para personas con trastornos mentales, pero no ofreció detalles ni fecha para el debate de esas medidas.
El líder de la mayoría republicana del Senado, Mitch McConnell, rechazó el pedido de la oposición demócrata de convocar una sesión de emergencia durante el receso de agosto para votar las medidas que aprobó la Cámara de Representantes en febrero pasado.
Esas medidas incluyen la puesta en marcha de un sistema de verificación de antecedentes de todo comprador de armas en todo lugar.
Por su parte, el Departamento de Educación prefiere que los distritos escolares y estados elaboren sus propios planes de seguridad, aunque ha puesto en marcha un programa de $15 millones para alentar a las universidades y distritos escolares a trabajar de manera conjunta para aumentar la contratación de profesionales de salud mental.
Ante la ausencia de una ley federal, los distritos escolares elaboran sus propios protocolos de seguridad, incluyendo simulacros de tiroteos.
Mientras, empresas como «Guard Dog Security» hacen su agosto con la venta loca de productos de seguridad personal, como rociadores de gas pimienta, pistolas con descarga eléctrica, y linternas de alta potencia. Sus mochilas anti-balas se venden como pan caliente en Walmart y Office Depot, con precios de hasta $220.
Fuente: https://www.telemundo.com/noticias/2019/08/08/tiroteos-ponen-bajo-la-lupa-la-seguridad-en-las-escuelas-en-visperas-de-un-nuevo