Francia/20 de Marzo de 2017/20 Minutos
La Semana del aprendizaje móvil examina este año cómo la tecnología puede ayudar a resolver necesidades educativas. Los dispositivos móviles son las más valiosa posesión de los refugiados y estudiantes desplazados crisis y guerras.
El mundo se enfrenta en estos tiempos a las cifras más altas jamás registradas de grupos humanos desplazados. Nunca hubo tanta conciencia sobre el problema pero nunca hubo tantos refugiados. En 2015, según cálculos del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), 24 personas por minuto fueron obligadas a abandonar sus hogares, cuatro veces más que hace diez años, y uno de cada 113 habitantes del planeta se ha visto desplazado por motivos de conflicto o persecución. Más de la mitad de los refugiados son niños.
Los dispositivos móviles se han convertido en una de las más valiosas posesiones para estos refugiados. No sólo les permite mantener el contacto con los suyos, sino que cada vez son más usados para mantener el vínculo con la educación. Las tecnologías móviles facilitan la integración en las comunidades de acogida, ayudan a estimular la imaginación, permiten la recuperación y sirven de orientación en el tránsito de un presente incierto a un futuro más prometedor.
La próxima semana, del 20 al 24 de marzo, se celebra en la sede de la UNESCO en París la Semana del aprendizaje móvil. Por lo explicado antes, estará dedicada este año a examinar el modo en el que la tecnología puede ayudar a resolver las necesidades educativas de los refugiados y de los estudiantes desplazados a causa de una guerra, una crisis o una emergencia en sus países de origen. ACNUR calcula que los niños refugiados tienen cinco veces más probabilidades de verse privados de escolarización que los no refugiados.
En este momento, sólo la mitad de los niños refugiados tiene acceso a la educación primaria y esta brecha se agranda conforme se avanza en edad. Así, menos de una cuarta parte de ellos de los refugiados se matricula en secundaria y sólo un uno por ciento accede a la enseñanza superior. Es fundamental que los niños en desarraigo no se queden aún más rezagadosSegún datos del Instituto de Estadística de la UNESCO, los niños que viven en zonas en conflictos presentan tasas de escolarización cada vez más reducidas.
Sin embargo, la educación, una valiosa herramienta para ayudar a romper el círculo de la violencia, no se tiene en cuenta en las primeras etapas de intervención en situaciones de crisis y emergencia. “Es fundamental que los niños que se encuentran en situación de desarraigo debido a las guerras y a la violencia no se queden aún más rezagados”, afirma Filippo Grandi, Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados. La Semana del aprendizaje móvil, promovida por la UNESCO y el ACNUR, congregará a líderes y expertos de los diferentes sectores de la educación, las tecnologías y las crisis humanitarias para compartir prácticas innovadoras que se llevan a cabo en todo el mundo y dar visibilidad a las opciones que disponen los gobiernos y otros organismos.
La UNESCO tiene un programa específico que investiga cómo las tecnologías móviles asequibles pueden potenciar el aprendizaje, especialmente entre los grupos humanos más vulnerables. El ACNUR, que también realiza estudios en torno al tema, ha creado una unidad para la innovación, encargada de elaborar soluciones que ayuden a los refugiados. Además, se ha asociado con otras organizaciones para formar el Humanitarian Education Accelerator (Programa acelerador de la educación humanitaria), con el fin de definir, apoyar y difundir las últimas innovaciones educativas.
Fuente: http://www.20minutos.es/noticia/2988485/0/educacion-crisis-guerra-refugiados-tecnologia-semana-movilidad/