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UNICEF: Una crisis dentro de otra crisis: mientras la COVID-19 sigue haciendo estragos, el aumento de la inversión es fundamental para poner fin a la mutilación genital femenina

Una crisis dentro de otra crisis: mientras la COVID-19 sigue haciendo estragos, el aumento de la inversión es fundamental para poner fin a la mutilación genital femenina

Declaración conjunta de la Dra. Natalia Kanem, Directora Ejecutiva del UNFPA, y de Catherine Russell, Directora Ejecutiva de UNICEF, sobre el Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina

NUEVA YORK, 4 de febrero de 2022 – “Una serie de crisis simultáneas están exponiendo a millones de niñas a un mayor riesgo de sufrir mutilación genital femenina.

“Los países que ya luchan contra el aumento de la pobreza, la desigualdad y los conflictos están viendo cómo la pandemia de la COVID-19 amenaza aún más los progresos alcanzados durante los últimos años para poner fin a esta práctica, generando una crisis dentro de otra crisis para las niñas más vulnerables y marginadas del mundo”.

“Incluso antes de la COVID-19, se estimaba que 68 millones de niñas corrían el riesgo de ser víctimas de la mutilación genital femenina entre 2015 y 2030. Debido a que la pandemia sigue provocando el cierre de escuelas y la interrupción de los programas que ayudan a proteger a las niñas de esta práctica nociva, es posible que en la próxima década se produzcan otros 2 millones de casos de mutilación genital femenina.

“Se estima que el rápido crecimiento de la población en algunos países aumentará aún más el número de niñas en riesgo, lo que hace más urgente acelerar los esfuerzos mundiales para eliminar esta práctica antes de 2030, tal como se establece en los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

“Además de dañar el cuerpo, la vida y el futuro de las niñas, la mutilación genital femenina es una violación de sus derechos humanos. Sólo una acción unida, concertada y adecuadamente financiada puede poner fin a esta práctica en todas partes.

“Mientras la comunidad mundial pone en marcha programas para llegar a las niñas y mujeres afectadas por la pandemia, es urgente acelerar las inversiones para acabar con la mutilación genital femenina. Se necesitan unos 2.400 millones de dólares para eliminar esta práctica en 31 países altamente prioritarios. En concreto, será necesario:

  • Invertir en el empoderamiento de las niñas y las mujeres, y proporcionar intervenciones y servicios adaptados a las víctimas y a quienes corren el riesgo de ser víctimas de la mutilación genital femenina.
  • Invertir en la creación de asociaciones y en la movilización de aliados –incluidos hombres y niños, grupos de mujeres, líderes comunitarios e incluso personas que han realizado la mutilación genital femenina en el pasado– para ayudar a eliminar la práctica.
  • Invertir en la formulación y aplicación de leyes a nivel nacional y en el fortalecimiento de las instituciones.

“Hasta ahora, los avances han sido claros y cuantificables. Hoy en día, las niñas tienen tres veces menos de probabilidades de ser sometidas a la mutilación genital femenina que hace 30 años, y en las últimas dos décadas se ha duplicado la proporción de niñas y mujeres en los países de alta prevalencia que se oponen a la práctica.

“Esos logros están ahora amenazados por un desafío sin precedentes. Es preciso mantener el impulso a escala mundial y aprovechar los años de progreso para acabar por completo con esta práctica dañina”.

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Notas para los editores

El Programa Conjunto UNFPA-UNICEF para la Eliminación de la Mutilación Genital Femenina tiene como objetivo erradicar la mutilación genital femenina mediante intervenciones en 17 países en los que esta práctica es frecuente. Al capacitar a las niñas y mujeres para que ejerzan sus derechos a la salud, la educación, los ingresos y la igualdad, el programa pretende contribuir a poner fin a los desequilibrios de poder que sustentan esta práctica nociva.

Fuente de la Información: https://www.unicef.org/es/comunicados-prensa/mientras-covid19-sigue-haciendo-estragos-aumento-inversion-fundamental-poner-fin-mutilacion-genital-femenina

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UNESCO: No hay excusas. Hay que mantener las escuelas abiertas. Los niños no pueden esperar

No hay excusas. Hay que mantener las escuelas abiertas. Los niños no pueden esperar.

Sharlene, de 14 años, estudia en la mesa de costura en la casa de una sola habitación que comparte su familia en Mathare, un asentamiento informal en Nairobi, Kenia, donde las escuelas cerraron en marzo de 2020.

NUEVA YORK, 27 de enero de 2022 – “A medida que la variante ómicron de la COVID-19 sigue propagándose por todo el mundo, instamos a los gobiernos a que hagan todo lo posible para evitar que esta situación siga perturbando la educación de los niños.

“Para evitar una catástrofe educativa y conseguir que los niños vuelvan a aprender, UNICEF recomienda tomar las medidas siguientes:

“Mantener las escuelas abiertas. Se estima que el cierre total o parcial de las escuelas está afectando actualmente a 616 millones de niños. Sabemos que las medidas de mitigación permiten mantener las escuelas abiertas. También sabemos que las inversiones en materia de conectividad digital pueden ayudarnos a garantizar que ningún niño se quede atrás. Necesitamos tomar medidas audaces para que todos los niños puedan volver a la escuela. Esto incluye poner en marcha un apoyo integral centrado especialmente en los niños marginados de cada comunidad, que incluya clases de recuperación, apoyo a la salud mental y a la nutrición, protección y otros servicios clave.

“Vacunar inmediatamente a los maestros y al personal escolar. Los maestros y el personal escolar deben obtener un apoyo total y se les debe considerar una prioridad a la hora de recibir las vacunas contra la COVID-19, una vez que el personal sanitario de primera línea y las poblaciones de alto riesgo estén vacunados.

“UNICEF apoya la vacunación de los niños una vez que las vacunas estén disponibles para ellos y una vez que los grupos prioritarios estén totalmente protegidos. Sin embargo, no hay que hacer de la vacunación un prerrequisito para la escolarización presencial. Convertir la vacunación contra la COVID-19 en una condición para el acceso a la enseñanza presencial agrava el riesgo de negar a los niños el acceso a la educación y de aumentar las desigualdades. En consonancia con las recomendaciones de la OMS, UNICEF aconseja mantener las escuelas abiertas y garantizar que las estrategias de control de la COVID-19 que han puesto en marcha los países faciliten la participación de los niños en la educación y en otros aspectos de la vida social, incluso aunque los niños y adolescentes no estén vacunados.

“En condiciones de crisis siempre hay decisiones difíciles que obligan a hacer concesiones también difíciles, y nosotros somos conscientes de los desafíos sin precedentes que la pandemia de COVID-19 plantea a los sistemas escolares de todo el mundo. Pero es mucho lo que está en juego. Debemos hacer colectivamente todo lo que podamos para mantener a los niños en la escuela.”

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Fuente de la Información: https://www.unicef.org/es/comunicados-prensa/no-excusas-mantener-escuelas-abiertas-ninos-no-pueden-esperar
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UNICEF está listo para ayudar a las familias y los niños tras la erupción volcánica y el tsunami en Tonga

UNICEF está listo para ayudar a las familias y los niños tras la erupción volcánica y el tsunami en Tonga

SUVA, Fiyi, 17 de enero de 2022 : UNICEF Pacífico está listo para trabajar junto con el Gobierno de Tonga y sus socios para garantizar que se brinde apoyo urgente para salvar vidas a familias y niños después de la erupción volcánica y el tsunami.

“Estamos listos para brindar apoyo humanitario al Gobierno de Tonga y su pueblo afectado por la erupción volcánica y el tsunami”, dijo el representante de UNICEF en el Pacífico, Jonathan Veitch. “UNICEF trabajará con el gobierno, las organizaciones de la sociedad civil y otros socios de desarrollo para garantizar esfuerzos de respuesta inmediatos sobre el terreno, lo que incluye proporcionar agua limpia y suministros de salud de emergencia para los niños y las familias afectadas”.

Después de semanas de actividad volcánica que emitía cenizas, el volcán submarino Hunga Tonga Hunga Ha’apai en Tonga entró en erupción violentamente el 15 de enero, con imágenes satelitales que indican una columna de ceniza, vapor y gas de 5 km de ancho, que se eleva aproximadamente 20 km sobre el volcán. En cuestión de minutos, la erupción volcánica generó un tsunami de 1,2 metros que se estrelló contra las costas de la capital de Tonga, Nuku’alofa. También se emitieron advertencias de tsunami para Fiji, Samoa, Vanuatu, Australia y Nueva Zelanda.

La mayor parte del país se ha visto afectada por una capa de ceniza volcánica de 1 a 2 cm, que está afectando el suministro de agua y alimentos y tiene un impacto negativo en la calidad del aire. En los próximos días, el acceso al suministro de agua limpia será una prioridad inmediata. Las líneas de comunicación han estado interrumpidas desde el 15 de enero, lo que dificulta obtener información sobre el alcance de los daños.

Una vez que el Gobierno de Tonga confirme las necesidades, UNICEF estará listo para transportar sus suministros de emergencia almacenados previamente desde los almacenes de Fiji y Brisbane. Estos incluyen kits esenciales de agua, saneamiento e higiene (WASH), recipientes y baldes de agua, kits de prueba de campo de agua, lonas, kits recreativos y tiendas de campaña, que se pueden movilizar de inmediato para su distribución.

Con las fronteras cerradas en Tonga debido a la actual pandemia de COVID-19, UNICEF trabajará con el gobierno y sus socios sobre el terreno para llegar a los niños y las familias con el apoyo que necesitan con urgencia.

Fuente de la Información: https://www.unicef.org/press-releases/unicef-ready-support-families-and-children-aftermath-volcanic-eruption-and-tsunami

 

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Unicef: Protegemos del frío a los niños y niñas de Afganistán

Un invierno con temperaturas extremas pone en riesgo a miles de familias que ya se enfrentan a la desnutrición, a un largo conflicto y al impacto de la pandemia de COVID-19.

20/01/2022

En palabras de nuestro director de Emergencias, Manuel Fontaine, la infancia en Afganistán está «al borde de la catástrofe«. El país encadena una sucesión de eventos, como el prolongado conflicto, desastres naturales – particularmente sequías – y, por supuesto, la pandemia de COVID-19, que conducen inevitablemente a que la mitad de los habitantes del país necesite ayuda humanitaria.

Algunas cifras describen la situación extrema en la que se encuentra la población afgana:

  • Se estima que más de 1 millón de niños y niñas están en riesgo de padecer desnutrición aguda grave.
  • Las altas tasas de desempleo provocan un mayor empobrecimiento de la población.
  • Aumenta el riesgo de trabajo infantil por la necesidad de las familias de conseguir el sustento diario.
  • Unas 700.000 personas están desplazadas por el conflicto.
  • Crece el riesgo de enfermedades, como el sarampión.
  • Alrededor del 80% de la población no tiene acceso a agua segura, lo que hace más frecuente la aparición de diarreas entre los niños.
  • Más de 4 millones de niños y niñas no van a la escuela y muchos otros corren el riesgo de abandonarla.

Protegemos del frío a los niños de Afganistán.

La situación de vulnerabilidad en la que viven estos niños y niñas es alarmante, a lo que se añade actualmente la amenaza del frío, que deja a miles de familias en peligro por las bajas temperaturas del invierno.

El frío intenso en una tienda de campaña

Protegemos del frío a los niños de Afganistán.

En la provincia de Herat, al oeste del país, está ubicado el campamento para desplazados internos de Shaydayee. Allí viven Sediqa y sus hermanas, en una frágil tienda de campaña con escasa capacidad para atajar las inclemencias del tiempo.

Para soportar el frío, intentan calentarse con el fuego de la leña que les sirve también para cocinar. El combustible no es una opción, las familias se apoyan en estos pequeños «fogones» para mantenerse calientes.

Las temperaturas en muchas zonas de Afganistán ya están muy por debajo del punto de congelación. Las familias están luchando por mantener a sus niños y niñas a salvo, calentando sus hogares como pueden y buscando abrigo para proteger a sus hijos.

En Nuristán, una provincia montañosa, los niños y sus familias están expuestos a los 15 grados bajo cero que se alcanzan durante la noche. Las regiones de gran altitud son especialmente vulnerables.

Transferencias monetarias para cubrir necesidades básicas

Incluso antes de los recientes acontecimientos en Afganistán, ya se estimaba en 56% los niños y niñas que vivían en situación de pobreza multidimensional, es decir, con carencias en la atención de la salud, escaso acceso a educación, y, en general, un nivel de vida inadecuado.

La situación es particularmente difícil para las mujeres y las niñas, que corren el riesgo de que el cumplimiento de sus derechos se vea interrumpido, al igual que el acceso a los servicios esenciales.

En estas circunstancias, las transferencias de dinero en efectivo desempeñan un papel esencial para satisfacer las necesidades críticas más inmediatas y evitar que en las familias se tengan que tomar decisiones difíciles, como optar por el trabajo infantil. Una madre beneficiaria del programa en Parun, nos contaba lo importante que es para ella: «yo compraré comida y ropa de abrigo para mis niños».

En UNICEF estamos ampliando el uso de transferencias humanitarias de efectivo para facilitar una respuesta más rápida y digna para  las familias vulnerables que luchan por cubrir sus necesidades diarias y superar las múltiples crisis a las que se enfrentan, incluidos los duros inviernos. Durante estos meses de frío, 65.000 familias en tres provincias de Afganistán recibirán transferencias monetarias.

UNICEF está en marcha con suministros que salvan vidas

Distribuimos ropa de abrigo en Afganistán.

La llegada del camión que trae suministros es un alivio para los miles de niños, niñas y sus familiares en Herat. En esta ocasión, descargamos 5.000 mantas, lonas de plástico y cubos para distribuir entre 1.700 familias.

Estamos entregando estos kits a las familias más vulnerables en diferentes provincias de Afganistán, priorizando aquellas que cuentan con mujeres embarazadas y lactantes, familias con niños con discapacidad y hogares encabezados por mujeres.

En UNICEF llevamos 70 años trabajando en Afganistán, con el objetivo de salvar, proteger e impulsar los derechos de la infancia. Actualmente, nuestra prioridad es el fortalecimiento de los servicios esenciales que se han visto interrumpidos por la complicada situación que atraviesa el país.

Solo el pasado mes de noviembre, por ejemplo, junto a nuestros aliados en el terreno, tratamos a más de 37.000 niños menores de cinco años con desnutrición aguda grave, vacunamos a casi 105.000 niños y niñas contra el sarampión, apoyamos una campaña contra la polio y dimos acceso a la educación formal e informal a más de medio millón de niños.

Fuente de la informaciòn e imagen: UNICEF

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UNICEF: Aumentan las graves violaciones de los derechos del niño en los conflictos en todo el mundo, advierte UNICEF

Aumentan las graves violaciones de los derechos del niño en los conflictos en todo el mundo, advierte UNICEF

NUEVA YORK, 31 de diciembre de 2021 – Este año ha traído una serie de graves violaciones contra los niños en conflictos tanto prolongados como nuevos, advirtió hoy UNICEF.

Desde Afganistán hasta Yemen, y desde Siria hasta el norte de Etiopía, miles de niños pagaron un precio devastador mientras continuaba el conflicto armado, la violencia entre comunidades y la inseguridad. La semana pasada, según informes, al menos cuatro niños se encontraban entre las víctimas, ya que al menos 35 personas murieron, incluidos dos miembros del personal de Save the Children, en el estado de Kayah, en el este de Myanmar. Este fue solo el último ejemplo de alto perfil del devastador conflicto que afecta a los niños y las continuas amenazas a los trabajadores humanitarios.

“Año tras año, las partes en conflicto continúan demostrando un terrible desprecio por los derechos y el bienestar de los niños”, dijo la Directora Ejecutiva de UNICEF, Henrietta Fore. “Los niños están sufriendo y los niños están muriendo a causa de esta insensibilidad. Se debe hacer todo lo posible para mantener a estos niños a salvo de daños «.

Si bien los datos para 2021 aún no están disponibles, en 2020, la ONU verificó 26,425 violaciones graves contra niños. Los primeros tres meses de 2021 vieron una leve disminución en el número total de violaciones graves verificadas; sin embargo, los casos verificados de secuestro y violencia sexual continuaron aumentando a tasas alarmantes, en más del 50 y el 10 por ciento, respectivamente, en comparación con el primero. trimestre del año anterior.

Los secuestros verificados fueron más altos en Somalia, seguida por la República Democrática del Congo (RDC) y los países de la cuenca del lago Chad (Chad, Nigeria, Camerún y Níger). Los casos verificados de violencia sexual fueron más altos en la RDC, Somalia y el República Centroafricana.

Este año se cumplen 25 años desde la publicación del informe fundamental de Graça Machel ‘El impacto de la guerra en los niños’, que instó a la comunidad internacional a tomar medidas concretas para proteger a los niños del flagelo de la guerra y pidió a las Naciones Unidas y a la comunidad mundial actuar para proteger a los niños.

Las Naciones Unidas han verificado 266.000 casos de violaciones graves contra niños en más de 30 situaciones de conflicto en África, Asia, Oriente Medio y América Latina durante los últimos 16 años. Estos son solo los casos verificados a través del Mecanismo de seguimiento y presentación de informes dirigido por la ONU, establecido en 2005 para documentar sistemáticamente las violaciones más atroces contra los niños en las zonas de conflicto. Las cifras reales serán mucho más altas.

Afganistán, por ejemplo, tiene el mayor número de víctimas infantiles verificadas desde 2005, con más de 28.500, lo que representa el 27% de todas las víctimas infantiles verificadas a nivel mundial. Mientras tanto, la región de Medio Oriente y África del Norte tiene el mayor número de ataques verificados a escuelas y hospitales desde 2005, con 22 ataques de este tipo verificados en los primeros seis meses de este año.

En octubre, UNICEF destacó que 10.000 niños habían sido asesinados o mutilados en Yemen desde que se intensificaron los combates en marzo de 2015, el equivalente a cuatro niños por día.

Lejos de los titulares, la ONU ha verificado violaciones en países como Burkina Faso, Camerún, Colombia, Libia, Mozambique y Filipinas.

A pesar de décadas de promoción con las partes en conflicto y quienes influyen en ellas, así como de mecanismos mejorados de seguimiento, denuncia y respuesta por violaciones graves de derechos, los niños siguen siendo los más afectados por la guerra. Cada día, las niñas y los niños que viven en zonas en conflicto soportan horrores indescriptibles que ningún ser humano debería experimentar jamás.

El uso de armas explosivas, particularmente en áreas pobladas, es una amenaza persistente y creciente para los niños y sus familias. En 2020, las armas explosivas y los restos explosivos de guerra fueron responsables de casi el 50% de todas las víctimas infantiles, lo que provocó la muerte y mutilación de más de 3.900 niños. Las armas explosivas pueden tener efectos letales y duraderos en los niños, incluida la interrupción de servicios esenciales para su supervivencia.

En muchos casos, los niños son víctimas de múltiples violaciones graves de derechos. En 2020, por ejemplo, el 37 por ciento de los secuestros verificados por la ONU llevaron al reclutamiento y uso de niños en la guerra, y estos casos superaron el 50 por ciento en Somalia, la República Democrática del Congo y la República Centroafricana.

UNICEF pide a todas las partes en conflicto, incluidas las 61 enumeradas en los anexos del informe anual del Secretario General de 2021 sobre los niños y los conflictos armados, que se comprometan con planes de acción formales y tomen medidas concretas para proteger a los niños. Estos incluyen evitar que ocurran violaciones graves en primer lugar, liberar a los niños de las fuerzas y grupos armados, proteger a los niños de la violencia sexual y detener los ataques a hospitales y escuelas.

Las partes en conflicto han firmado solo 37 planes de este tipo desde 2005, un número sorprendentemente bajo dado lo que está en juego para los niños.

“En última instancia, los niños que viven una guerra solo estarán seguros cuando las partes en conflicto tomen medidas concretas para protegerlos y dejen de cometer violaciones graves”, dijo Fore. «A medida que nos acercamos al final de 2021, pido a todas las partes en conflicto que pongan fin a los ataques contra los niños, defiendan sus derechos y luchen por lograr resoluciones políticas pacíficas para la guerra».

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Notas para los editores:

Las seis violaciones graves son: asesinato y mutilación de niños; Reclutamiento y utilización de niños por fuerzas armadas y grupos armados; Violencia sexual contra niños; Ataques contra escuelas u hospitales; Secuestro de niños; y negación del acceso humanitario a los niños.

Fuente de la Información: https://www.unicef.org/press-releases/grave-violations-childrens-rights-conflict-rise-around-world-warns-unicef
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Afganistan: Aumento de los riesgos para la salud de los niños en todo Afganistán a medida que continúan las interrupciones en los servicios de salud y nutrición y se acerca el invierno

Aumento de los riesgos para la salud de los niños en todo Afganistán a medida que continúan las interrupciones en los servicios de salud y nutrición y se acerca el invierno

Afganistán, Kandahar: durante una visita de un equipo móvil de salud y nutrición en la aldea de Nasaji, una enfermera de nutrición mide la circunferencia del brazo de un niño para determinar su estado nutricional en la aldea de Nasaji en la provincia de Kandahar

KABUL, 22 de diciembre de 2021 – Los  niños de Afganistán son cada vez más vulnerables a las enfermedades debido a la combinación mortal de desnutrición creciente, una crisis alimentaria sin precedentes, sequía, interrupciones en los centros de salud y nutrición vitales, falta de acceso y mala calidad del agua y servicios de saneamiento y un clima invernal paralizante.  

A medida que la situación humanitaria continúa deteriorándose en Afganistán, los brotes de enfermedades potencialmente mortales ponen en peligro la vida de los niños. Hasta ahora se han notificado más de 66.000 casos de sarampión en niños en lo que va de 2021. También ha habido brotes de diarrea acuosa aguda, malaria y dengue. Este año se han confirmado cuatro casos de poliovirus salvaje tipo 1 (WPV-1).  

Las severas condiciones climáticas invernales, con temperaturas ya muy por debajo del punto de congelación en muchas áreas, aumentan el riesgo de neumonía y enfermedades respiratorias agudas (IRA), ya que las familias luchan por calentar sus hogares y mantener a sus hijos calientes. Los niños que viven en regiones de gran altitud son especialmente vulnerables y necesitan asistencia urgente para salvar vidas, como ropa de invierno, mantas y combustible para calefacción. Entre el 25% y el 30% de las muertes de niños menores de cinco años se deben a infecciones del tracto respiratorio, y el 90% de estas muertes se deben a neumonía.  

“Nos acercamos a una coyuntura crítica para los niños de Afganistán, ya que el invierno trae consigo una multitud de amenazas para su salud”, dijo Abdul Kadir Musse, Representante interino de UNICEF en Afganistán. “No hay tiempo que perder. Sin una acción urgente y concertada, incluida la garantía de que tenemos los recursos para desplegar transferencias de efectivo adicionales y suministros de invierno, muchos de los niños del país no vivirán para ver la primavera ”. 

A principios de este mes, UNICEF lanzó su mayor llamamiento  para un solo país  para responder a las necesidades de más de 24 millones de personas en Afganistán, la mitad de las cuales son niños. El llamamiento de UNICEF por 2 mil millones de dólares tiene como objetivo ayudar a evitar el colapso de la salud, la nutrición, WASH, educación y otros servicios sociales vitales para los niños y las familias.  

El mes pasado, UNICEF proporcionó a más de 10.000 trabajadores de la salud de primera línea en más de 1.000 establecimientos de salud los sueldos para noviembre y apoyó a más de 1.000 establecimientos de salud con suministros médicos y materiales de calefacción para el invierno. El UNICEF también proporcionó servicios de atención primaria de salud fundamentales, incluida la inmunización, a través de instalaciones de salud y equipos móviles de salud y nutrición. UNICEF vacunó a casi 105.000 niños de entre 6 meses y cinco años contra el sarampión. Una campaña nacional contra la poliomielitis alcanzó a 8,5 millones de niños, incluidos más de 2 millones de niños que vivían en zonas anteriormente inaccesibles. Ese mismo mes, UNICEF pudo tratar a más de 37.000 niños que padecían desnutrición aguda grave; brindó acceso a agua potable a más de 22.000 personas, incluso a través de camiones de agua;  

UNICEF estima que 1 de cada 2 niños menores de cinco años sufrirá desnutrición aguda en 2022 debido a la crisis alimentaria y al escaso acceso a los servicios de agua, saneamiento e higiene.  

Guiado por principios humanitarios, UNICEF dará prioridad a las intervenciones que salvan vidas para tratar a los niños y proporcionar otros servicios vitales. La respuesta de UNICEF ayudará a asegurar la continuidad de los servicios esenciales al prevenir el colapso de los sistemas que son críticos para los niños, al mismo tiempo que salvaguarda los logros obtenidos con tanto esfuerzo, incluida la protección de los derechos de las mujeres y las niñas. UNICEF cuenta con el apoyo de la comunidad internacional al facilitar exenciones a las sanciones para asegurar el suministro oportuno de bienes y servicios a los niños de Afganistán.   

 Fuente de la Información: https://www.unicef.org/press-releases/rising-health-risks-children-across-afghanistan-disruption-health-and-nutrition

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UNICEF: Una histórica encuesta intergeneracional muestra que los jóvenes son un 50% más propensos que los mayores a creer que el mundo se está convirtiendo en un lugar mejor, aunque se muestran impacientes por actuar ante las crisis crecientes

Una histórica encuesta intergeneracional muestra que los jóvenes son un 50% más propensos que los mayores a creer que el mundo se está convirtiendo en un lugar mejor, aunque se muestran impacientes por actuar ante las crisis crecientes

En medio de la COVID-19, las generaciones más jóvenes también tienen mayor propensión a confiar en los científicos y a aceptar la cooperación internacional, según una encuesta internacional de UNICEF-Gallup realizada entre más de 21.000 niños y adultos

Los niños, las niñas y los jóvenes son casi un 50% más propensos que las personas adultas a creer que el mundo se está convirtiendo en un lugar mejor con cada nueva generación, según una reciente encuesta internacional de UNICEF y Gallup publicada antes del Día Mundial de la Infancia.

La encuesta muestra que los jóvenes también tienen mayor propensión a creer que el período de la infancia es mejor ahora que en épocas anteriores, y una mayoría abrumadora cree que los jóvenes de hoy disfrutan de una atención sanitaria, educación y seguridad física mejores que la generación de sus padres. Sin embargo, a pesar de su optimismo, los jóvenes distan mucho de ser ingenuos: están impacientes por actuar contra el cambio climático, muestran su escepticismo respecto a la información que consumen en las redes sociales y hacen frente a sentimientos de depresión y ansiedad. Es mucho más probable que se vean a sí mismos como ciudadanos del mundo que las personas de más edad, y es más probable que prefieran la cooperación internacional para hacer frente a amenazas como la pandemia de COVID-19.

“No faltan razones para el pesimismo en el mundo actual: el cambio climático, la pandemia, la pobreza y la desigualdad, el aumento de la desconfianza y un nacionalismo creciente. Pero hay un motivo para el optimismo: los niños y los jóvenes se niegan a ver el mundo a través de la lente sombría de los adultos”, dijo Henrietta Fore, Directora Ejecutiva de UNICEF. “En comparación con las generaciones anteriores, los jóvenes del mundo siguen teniendo esperanza, una mentalidad mucho más abierta y están decididos a lograr que el mundo sea un lugar mejor. Los jóvenes de hoy están preocupados por el futuro, pero se ven a sí mismos como parte de la solución”.

La encuesta, un proyecto denominado La infancia en transformación, es la primera de este tipo en la que se pregunta a varias generaciones su opinión sobre el mundo y lo que supone ser un niño hoy en día. Se encuestó a más de 21.000 personas de dos cohortes de edad (15-24 años y 40 años o más) en 21 países. Se realizaron encuestas representativas a escala nacional en países de todas las regiones –África, Asia, Europa y América del Norte y del Sur– y entre todos los niveles de ingresos.

En general, los datos indican que las generaciones jóvenes son un producto de la globalización. Por ejemplo, como término medio, el doble de los jóvenes (39%) que de los mayores (22%) se identifican más con el hecho de formar parte del mundo que con su

propio país o localidad. Cada año que pasa, las personas tienen una media de un 1% menos de probabilidades de identificarse como ciudadanos del mundo.

La encuesta –realizada durante la pandemia– también revela que los niños y los jóvenes suelen confiar más en los gobiernos nacionales, los científicos y los medios de comunicación internacionales como fuentes de información precisa. Sin embargo, según la encuesta, los jóvenes de hoy son conscientes de los problemas a los que se enfrenta el mundo:

  • La mayoría de los jóvenes consideran que Internet presenta graves riesgos para los niños, como por ejemplo el estar expuestos a contenidos violentos o sexualmente explícitos (78%) o sufrir acoso (79%).
  • Sólo el 17% de los jóvenes dice que confía “mucho” en las plataformas de las redes sociales para obtener información precisa.
  • Mientras que el 64% de los jóvenes de los países de ingresos bajos y medios creen que los niños de su país van a estar económicamente mejor que sus padres, los jóvenes de los países de ingresos altos tienen poca fe en el progreso económico. En estos países, menos de un tercio de los jóvenes encuestados afirman que los niños de hoy crecerán en una situación económica mejor que la de sus padres.
  • Más de un tercio de los jóvenes dicen sentirse a menudo nerviosos o ansiosos, y casi uno de cada cinco dice sentirse a menudo deprimido o con poco interés por hacer planes.
  • Como término medio, el 59% de los jóvenes afirma que los niños de hoy en día sufren una mayor presión para tener éxito que la que tuvieron sus padres al crecer.

La encuesta también concluye que los jóvenes aspiran a que se avance más rápidamente en la lucha contra la discriminación, a que haya más cooperación entre los países y a que los responsables de la toma de decisiones les escuchen:

  • Como término medio, casi tres cuartas partes de los jóvenes que son conscientes del cambio climático creen que los gobiernos deberían tomar medidas importantes para afrontarlo. La proporción es aún mayor en los países de ingresos bajos y medios bajos (83%), donde se espera que el impacto del cambio climático sea mayor.
  • En casi todos los países encuestados, una gran mayoría de los jóvenes afirman que sus países estarían más seguros frente a amenazas como la COVID-19 si los gobiernos trabajaran en coordinación con otros países en lugar de hacerlo por su cuenta.
  • Los jóvenes demuestran un mayor apoyo a los derechos LGBTQ+, y las mujeres jóvenes están a la cabeza de la lucha por la igualdad.
  • Como promedio, el 58% de los jóvenes de 15 a 24 años cree que es muy importante que los líderes políticos escuchen a los niños.

“No podemos saber lo que está en la mente de los jóvenes si no les preguntamos. La encuesta de UNICEF refuerza la importancia de escuchar a la próxima generación y entender sus perspectivas”, dijo Joe Daly, asociado principal de Gallup. “Los niños de hoy son los líderes del mañana; es crucial que las generaciones mayores pongan de su parte para garantizar que nuestros hijos hereden un mundo mejor”.

La encuesta descubre algunas esferas en las que las opiniones de las generaciones jóvenes y mayores son bastante parecidas, especialmente en lo que respecta al clima, la importancia de la educación, la colaboración mundial y la capacidad de acción de los niños. Por el contrario, el optimismo, la mentalidad global y el reconocimiento del progreso histórico reflejan algunas de las divisiones más profundas.

“Si bien esta investigación ofrece una visión matizada de la división generacional, presenta una imagen clara: los niños y los jóvenes de hoy encarnan el espíritu del siglo XXI mucho más claramente que sus padres”, dijo Fore. “Ahora que UNICEF se prepara para celebrar su 75º aniversario el mes que viene, y antes del Día Mundial de la Infancia, es fundamental que escuchemos directamente a los jóvenes sobre su bienestar y sobre la manera en que están cambiando sus vidas”.

El Día Mundial de la Infancia, que se celebra todos los años el 20 de noviembre, tiene como objetivo concienciar sobre los millones de niños a los que se les niega el derecho a una atención sanitaria adecuada, a la nutrición, a la educación y a la protección, y hacer oír la voz de los jóvenes como algo fundamental en cualquier debate sobre su futuro.

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Notas para los editores

Junto con la publicación de la encuesta, UNICEF presenta una nueva plataforma interactiva, http://changingchildhood.unicef.org/es/, que contiene el conjunto completo de datos de la encuesta y el informe del proyecto.

El proyecto La infancia en transformación es la primera encuesta en la que se pregunta a varias generaciones de personas de todo el mundo su opinión sobre lo que significa ser un niño hoy en día. Para el proyecto, UNICEF se asoció con Gallup para encuestar a más de 21.000 adultos y niños en 21 países entre enero y junio de 2021. Todas las muestras son probabilísticas y representativas a nivel nacional de dos poblaciones distintas en cada país: personas de 15 a 24 años y personas de 40 años o más. El área de cobertura es todo el país, incluidas las zonas rurales, y el marco de muestreo representa a toda la población civil, no institucionalizada, dentro de cada cohorte de edad con acceso a un teléfono.

Los países encuestados son: Alemania, Argentina, Bangladesh, Brasil, Camerún, España, Estados Unidos, Francia, Japón, India, Indonesia, Kenya, Líbano, Malí, Marruecos, Nigeria, Perú, Reino Unido y Ucrania.

Fuente de la Información: https://www.unicef.org/es/comunicados-prensa/historica-encuesta-intergeneracional-muestra-jovenes-propensos-creer-mundo-convirtiendo-lugar-mejor

 

 

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