Page 1 of 5
1 2 3 5

10 millones de niños y niñas se encuentran en riesgo extremo en el Sahel central mientras la inseguridad invade los países vecinos

Diez millones de niños y niñas de Burkina Faso, Malí y Níger —el doble que en 2020— necesitan desesperadamente ayuda humanitaria, debido en gran parte a la espiral de conflictos que afecta a esas zonas. Además, a medida que las hostilidades entre los grupos armados y las fuerzas de seguridad nacionales van traspasando fronteras, casi 4 millones de niños y niñas de los países vecinos se encuentran en situación de riesgo, según se desprende de una nueva edición de La Infancia en Peligro publicada hoy por UNICEF.

“Los conflictos armados afectan cada vez más a los niños y las niñas, que son víctimas de la intensificación de los enfrentamientos militares o se convierten en el blanco de los grupos armados no estatales”, ha afirmado Marie-Pierre Poirier, Directora Regional de UNICEF para África Occidental y Central. “El año 2022 ha sido especialmente violento para la infancia en el Sahel central. Todas las partes en conflicto deben detener urgentemente los ataques contra los niños y las niñas y contra sus escuelas, sus centros de salud y sus hogares”.

Según datos de las Naciones Unidas, en Burkina Faso se registraron tres veces más muertes infantiles durante los nueve primeros meses de 2022 que en el mismo periodo de 2021. La mayoría de los niños murió por heridas de bala durante ataques a sus aldeas o como consecuencia de las heridas provocadas por artefactos explosivos improvisados o restos explosivos de guerra.

El conflicto armado se ha vuelto cada vez más brutal. Algunos de los grupos armados que operan en una amplia franja de Malí y Burkina Faso y, cada vez con más frecuencia, en Níger, utilizan tácticas como el bloqueo de ciudades y aldeas y el sabotaje de las redes de abastecimiento de agua. Según previsiones recientes, más de 20.000 personas que viven en la zona fronteriza entre Burkina Faso, Malí y Níger sufrirán una inseguridad alimentaria de nivel catastrófico en junio de 2023.

Algunos grupos armados que se oponen a la educación administrada por el Estado queman y saquean sistemáticamente las escuelas, y amenazan, secuestran o matan a los maestros. En Burkina Faso, Malí y Níger, más de 8.300 centros educativos han cerrado sus puertas al convertirse en un objetivo directo de los ataques, o bien porque los maestros han huido o porque los progenitores han tenido que desplazarse o estaban demasiado asustados para enviar a sus hijos a la escuela. En Burkina Faso, más de una de cada cinco escuelas se ha visto obligada a cerrar y el 30% de los centros escolares de la región de Tillaberi, en Níger, ya no funcionan a causa del conflicto.

Las hostilidades se extienden desde el Sahel central hasta las regiones fronterizas septentrionales de Benin, Côte d’Ivoire, Ghana y Togo y llegan a comunidades aisladas con escasas infraestructuras y recursos, donde los niños y las niñas tienen ya de por sí un acceso muy limitado a los servicios esenciales y reciben escasa protección.

En 2022 se registraron al menos 172 incidentes violentos, incluidos ataques de grupos armados en las regiones fronterizas del norte de los cuatro países mencionados. Se considera que hasta el 16% de la población de Benin, el país más afectado, se encuentra ahora en peligro, según una red de vigilancia regional. En las regiones septentrionales de Benin y Togo, nueve escuelas habían cerrado o habían dejado de prestar servicios debido a la inseguridad a finales de 2022.

La crisis se produce en una de las regiones del planeta más afectadas por el cambio climático. Las temperaturas en el Sahel están aumentando 1,5 veces más rápido que la media mundial. Por su parte, las lluvias se han vuelto más irregulares e intensas y han provocado inundaciones que han reducido el rendimiento de los cultivos y han contaminado las ya escasas reservas de agua. En 2022, las peores inundaciones de los últimos años dañaron o destruyeron 38.000 hogares en Níger, país que ocupa el séptimo lugar del mundo en el Índice de Riesgo Climático para la Infancia de UNICEF.

La insuficiencia en la financiación de la respuesta a la crisis en el Sahel central continúa siendo crónica y muy grave. En 2022, UNICEF recibió solo una tercera parte de los 391 millones de dólares reclamados para el Sahel central. En 2023, UNICEF ha solicitado 473,8 millones de dólares para apoyar su respuesta humanitaria en la región y en los países costeros vecinos.

“La escala de la crisis en el Sahel central y, cada vez más, en los países costeros vecinos requiere urgentemente una respuesta humanitaria más contundente, así como una inversión flexible a largo plazo en servicios sociales esenciales resilientes que ayuden a consolidar la cohesión social, el desarrollo sostenible y un futuro mejor para los niños y las niñas”, ha declarado Marie-Pierre Poirier, Directora Regional de UNICEF para África Occidental y Central.

Para hacer frente a la creciente amenaza que pesa sobre la infancia en el Sahel central, UNICEF exige que se tomen las medidas siguientes:

  • Que los gobiernos del Sahel central y de los países costeros afectados, así como los asociados técnicos y financieros, aumenten significativamente las inversiones para ampliar el acceso a los servicios sociales esenciales y a la protección como vías clave para la paz y la seguridad. Este aumento debe centrarse en fortalecer los sistemas y las redes y apoyar a los trabajadores locales, que son los primeros en responder durante las crisis y en llegar sistemáticamente a los niños, especialmente en las zonas de difícil acceso.
  • Que todas las partes en conflicto cumplan con sus obligaciones morales y jurídicas básicas para con los niños, en virtud del derecho internacional humanitario y los derechos humanos. Esto incluye poner fin a los ataques contra los niños y las niñas y contra los servicios de los que dependen; respetar el espacio y el acceso humanitarios; aplicar protocolos específicos para el tratamiento de los niños afectados por los conflictos armados, y comprometerse sistemáticamente con las Naciones Unidas en planes de acción concretos para poner fin a las violaciones graves cometidas contra la infancia.

#####

Notas para los editores:

En 2022, UNICEF actuó en el Sahel central junto a sus aliados, llevando a cabo las siguientes intervenciones:

  • Proporcionó a casi 365.000 niños y niñas acceso a servicios de salud mental y apoyo psicosocial; dio acceso a 1,2 millones de niños y niñas a la educación formal y no formal, incluido el aprendizaje temprano; y vacunó a 1,1 millones de niños y niñas contra el sarampión.
  • Más de 446.000 niños y mujeres accedieron a servicios de atención primaria de salud en centros apoyados por UNICEF y 674.000 niños menores de cinco años recibieron tratamiento contra la emaciación grave. Asimismo, se suministró suficiente agua potable para beber y para uso doméstico a casi 820.000 personas.

En cinco países costeros limítrofes con el Sahel central, 7,1 millones de niños y niñas recibieron material escolar individual; se proporcionó agua, saneamiento y productos de higiene a 1,28 millones de personas y cerca de 1,9 millones de niños y mujeres tuvieron acceso a atención primaria de salud en centros apoyados por UNICEF.

Fuente: https://www.unicef.org/es/comunicados-prensa/10-millones-ninos-riesgo-extremo-en-sahel-central

Comparte este contenido:

Hallan a las 50 mujeres secuestradas en Burkina Faso, según medios

Las 50 mujeres que fueron secuestradas por terroristas armados entre el jueves 12 de enero y el viernes 13 de enero en el departamento burkinés de Arbinda, en el norte del país, han sido encontradas, según ha podido saber la agencia de noticias AIB.

El gobernador de la región del Sahel, el coronel Rodolphe Sorgho, anunció en un comunicado fechado el 16 de enero que, desde su desaparición, las autoridades habían llevado a cabo una búsqueda para dar con las mujeres «sanas y salvas», recalcan los medios locales.

Un grupo de 41 mujeres fueron secuestradas cuando se dirigían al monte, a cuatro kilómetros de la ciudad, en busca de hojas y frutos comestibles. Un día más tarde, un segundo grupo, de quince mujeres, corrió la misma suerte en las mismas circunstancias.

Más tarde, se conoció que hubo un tercer grupo de mujeres secuestradas, elevando la cifra de personas en paradero desconocido a casi 80, según informó Radio France Internationale, aunque esta cifra no fue confirmada por las autoridades.

La Secretaría general de la ONU, presidida por António Guterres, condenó el martes el secuestro a la par que instó a las autoridades de Burkina Faso a no escatimar en esfuerzos para llevar a los responsables ante la justicia, según informó su portavoz, Farhan Haq, en un comunicado.

Asimismo, el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Turk, también pidió en un comunicado el lunes la liberación de las mujeres burkinesas secuestradas en la provincia de Soum.

El departamento de Arbinda ha estado bajo bloqueo terrorista durante varias semanas, teniendo lugar de manera reiterada enfrentamientos entre las fuerzas del Ejecutivo de Burkina Faso y dichos grupos armados.

Fuente: https://www.notimerica.com/politica/noticia-burkina-faso-hallan-50-mujeres-secuestradas-burkina-faso-medios-20230120220502.html

 

Comparte este contenido:

Burkina Faso: “Debemos salvar a los niños de la violencia y la depravación moral”

“Debemos salvar a los niños de la violencia y la depravación moral”

La cuestión relativa al segmento juvenil de la población es cada vez más preocupante en África Occidental. Niños soldados que han participado en disturbios y guerras civiles, niños explotados en plantaciones de cacao y algodón o que trabajan en sitios de búsqueda clandestina de oro, matrimonios forzados. En los últimos tiempos, por desgracia, el fenómeno de los niños yihadistas también se está agravando. El religioso misionero Donald Zagore, sacerdote de la Sociedad para las Misiones Africanas en Costa de Marfil, señalaba a la Agencia Fides que «Según la información proporcionada por el gobierno de Burkina Faso en la reciente masacre de Solhan, diócesis de Dori, la franja de edad de los niños implicados en el fenómeno está entre los 12 y los 14 años».

«Los niños deben ir a la escuela y no a otra parte. La situación es dramática para el futuro. Al mantener a estos pequeños en dinámicas de violencia y guerra, no sólo hipotecan sus vidas y su futuro, sino también el futuro de estos países. Los jóvenes representan el futuro. ¿Pero de qué futuro podemos hablar cuando lo que constituye la posteridad ya está siendo destruido? La utilización de niños en estos contextos de violencia y depravación moral es un crimen contra la humanidad. Un delito que hay que combatir con la máxima determinación».

Zagore insta a un sentido de responsabilidad por parte de todos ante esta dramática situación en África Occidental:

Las autoridades, los políticos, los religiosos, deben comprometerse en acciones comunes destinadas a defender y proteger los derechos de estas jóvenes víctimas. Hay que poner fin a la explotación infantil en todas sus formas. Trabajar para promover su dignidad en todos los ámbitos, religiosos y políticos, es un imperativo importante”.

DZ/AP

Fuente: Agencia Fides

Fuente de la Información: https://www.africafundacion.org/debemos-salvar-a-los-ninos-de-la-violencia-y-la-depravacion-moral

Comparte este contenido:

Burkina Faso: Cuestiones relativas a la salud y la seguridad que deben resolverse antes de reabrir las escuelas

Burkina Faso/PrensaIE

Los sindicatos de la enseñanza de Burkina Faso exigen a las autoridades públicas que garanticen unas medidas de seguridad apropiadas para estudiantes y profesores antes de reabrir las escuelas el 11 de mayo. Los sindicatos admiten que la enseñanza a distancia no se está impartiendo de manera uniforme por todo el país y que no puede remplazar a la educación en las aulas.

En Burkina Faso, todas las escuelas y universidades (públicas y privadas) cerraron el 14 de marzo como respuesta al brote de la COVID-19 que comenzó el 9 de marzo.

Iniciativas de enseñanza y aprendizaje a distancia

La continuidad de la educación en los cursos que estaban preparando exámenes fue garantizada mediante medidas temporales de enseñanza y aprendizaje, en asignaturas como francés, matemáticas y filosofía, a través de dos canales de televisión privados. Sin embargo, los estudiantes de familias pobres y de zonas rurales no tuvieron acceso a este servicio.

Más adelante surgió una iniciativa gubernamental del Ministerio de Educación que proseguía con la enseñanza desde seis canales de televisión y se creó también una radio escolar con lecciones preparadas por los profesores. Sin embargo, los sindicatos de la educación han criticado enérgicamente que se les haya excluido del proceso.

Mientras tanto, los preparativos para retomar las clases siguen su curso; la fecha prevista para la reapertura es el 11 de mayo para las clases que preparan exámenes y el 24 de mayo para el resto de los cursos. El Ministerio de Educación también ha adoptado medidas para adquirir dos millones de mascarillas que serán gratuitas para los alumnos (dos para cada uno).

Cuestiones que resolver antes de la reapertura

Aunque los sindicatos, los padres y madres y el Gobierno están de acuerdo en que el aprendizaje a distancia nunca sustituirá a la enseñanza en las aulas, los sindicatos de la enseñanza, así como los padres y madres, tienen inquietudes para las que desean respuestas. Por ejemplo, han exigido al Gobierno que incorpore medidas de protección adecuadas antes de abrir las instalaciones. Algunas de las denuncias se refieren a la falta de acceso al agua corriente o al mantenimiento de la distancia de seguridad en las aulas. Las clases, por ejemplo, suelen estar abarrotadas, con cuatro o cinco alumnos por banco en primaria. Según madres, padres y sindicatos, estos problemas deben resolverse antes de que docentes y alumnos vuelvan a la escuela.

Suspensión de salarios y huelgas

Aunque se pretendía reabrir las escuelas el 28 de abril, finalmente se optó por aplazar la fecha a raíz de los desacuerdos entre el Gobierno y los sindicatos. El Gobierno había suspendido los salarios de 726 funcionarios, muchos de ellos profesores (miles de funcionarios también han sufrido recortes en sus salarios). Algunos de los profesores cuyos salarios fueron suspendidos estaban de baja por maternidad o por enfermedad.
Esta controversia tuvo lugar tras una huelga de funcionarios en febrero y a principios de marzo como consecuencia de la decisión gubernamental de aplicar un nuevo impuesto sobre sus prestaciones (como el subsidio de la vivienda). Cuatro de los cinco afiliados nacionales de la Internacional de la Educación (F-SYNTER, SNEA-B, SNESS y SYNATEB) participaron en la huelga. Finalmente, el ministro de Educación anunció que se pagarían los salarios suspendidos.

Por otra parte, se han revisado las trayectorias laborales de 78 000 docentes, según el convenio alcanzado en 2019, y se prevén subidas de salarios y otros beneficios por valor de 40 000 millones de USD.

Sin embargo, en el sector privado los docentes y el personal de apoyo educativo no han percibido sus sueldos como consecuencia del cierre y el Gobierno no ha tomado medidas para que puedan cubrir sus necesidades básicas y las de sus familias.

Zonas de conflicto

Los sindicatos de la educación también han señalado que la población del norte y el este de Burkina Faso ha sido víctima de ataques frecuentes y mortales de grupos terroristas, lo que ha provocado el cierre de escuelas en esas zonas. Ahora hay más de 700 000 personas desplazadas y se han construido escuelas alternativas con el apoyo económico de ONG y donantes en los lugares donde se refugia esta población.

Se puede consultar la guía de la IE para la reapertura de escuelas e instituciones educativas aquí.

Fuente:https://www.ei-ie.org/spa/detail/16770/burkina-faso-cuestiones-relativas-a-la-salud-y-la-seguridad-que-deben-resolverse-antes-de-reabrir-las-escuelas
Comparte este contenido:

8 millones de niños son obligados a abandonar su educación por la violencia en África occidental

8 millones de niños son obligados a abandonar su educación por la violencia en África occidental

8 millones de niños son obligados a abandonar su educación debido a la violencia en África occidental Un informe de UNICEF calcula que más de 8 millones de niños en edad escolar en África occidental han sido obligados a abandonar la escuela debido a la violencia extrema.

Burkina Faso, Malí y Níger se encuentran entre las naciones más afectadas con casi 1 millón de personas desplazadas, y más de la mitad de las que provienen de Burkina Faso.

Ver más en video.

 

Comparte este contenido:

Un futuro digital para Burkina Faso

África/Burkina Faso/03 Enero 2020/El país

‘OuagaLab’ lleva ocho años fabricando prototipos tecnológicos y dando alas a la imaginación de jóvenes autodidactas, en la capital de un país en el que más de la mitad de la población tiene menos de 30 años

“Con una impresora 3D podemos hacer infinitas impresoras 3D”, dice riendo Gildas Guiella, el fundador de primer FabLab —laboratorio de fabricación digital— en África Occidental. La primera impresora de OuagaLab en Uagadugú, Burkina Faso, fue una donación anónima y, a partir de entonces, el entusiasmo de los jóvenes del laboratorio digital hizo el resto. “Ahora, simplemente, compramos algunos componentes e imprimimos los demás, y entonces ensamblamos nuevas impresoras 3D; ya contamos con unas nueve y, con ellas, proveemos de prótesis a la industria biomédica y construimos prototipos de máquinas bajo pedido. Hemos llegado a hacer una mano ortopédica”, cuenta Guiella, a su paso por Madrid, donde participó del taller Grigri Pixel en torno a la hospitalidad.

Gildas, que estudió ingeniería electrónica e informática, empezó a ilusionarse con un laboratorio participativo cuando todavía estaba en la universidad y asistió a un evento de InnovAfrica. En aquel encuentro se habló de los FabLabs y el concepto se materializó en máquinas que, enseguida, él y algunos compañeros comenzaron a montar. De ahí que, en 2011, Guiella reuniera a otros amigos y conocidos para esparcir la idea de que no solo estaba en sus manos discutir sobre su destino sino también construir cosas que ayudaran a hacer realidad cualquier idea. Ahora tiene 35 años y es el mayor del equipo que lleva adelante el laboratorio OuagaLab, compuesto por unos siete integrantes, de los que el menor tiene 19 años.

De aquellos días inspiradores salió también la convicción de que tenían que crear “un modelo de laboratorio que fuera posible de sostener” en su contexto y para afrontar su “problemática específica”. Porque si algo no elude Guiella es el hecho de saber que vive y trabaja en un país con escasa escolarización, situado entre los últimos del mundo en desarrollo humano y, al mismo tiempo, con el 60% de la población de menos de 30 años: “Empezamos por formar gente en electrónica, cartografía y programas informáticos de código abierto, dándoles herramientas con las que los chicos podrían trabajar en el futuro, en el ámbito digital. Y entonces se creó una comunidad en torno a ese aprendizaje, una comunidad ética con las mujeres y donde no importaba la formación académica de cada uno, sino sus ganas y su compromiso”.

Con el componente humano predispuesto, OuagaLab necesitó un espacio físico en el que funcionar y convocar a nuevos participantes. Así, arrancaron con un terreno cedido por la familia Guiella y pudieron construir los tres edificios con los que cuentan hoy en la capital de Burkina Faso, gracias a una acción de crowdfunding, en 2013, en la que consiguieron algo más de siete mil euros para levantar las primeras paredes con sus propias manos. Entonces, el OuagaLab tuvo su primera sede: “Un FabLab, más allá de la definición clásica, es para mí un espacio que da esperanza y competencias, sobre todo, de vida comunitaria, que trae consigo transformación intelectual y social. Un laboratorio de fabricación no son las máquinas, sino las personas de esa comunidad. Ponemos el acento en el trabajo colaborativo y en el do it yourself, pero para dar soluciones adaptadas a nuestro contexto”, según la definición de su fundador.

Quizá sea cierto que las máquinas son la excusa por la cual se acerca la gente a hacer cosas con otra gente. Hoy, los que encabezan la asociación son cinco varones y dos chicas, de los cuales tres no han ido a la universidad: Son gente apasionada que aprende de manera autodidacta. Por ejemplo, el principal artífice de los ensayos en impresión 3D es un chico que no terminó el bachillerato: “Lo principal es el interés. Hay jóvenes que no saben leer porque nunca ha ido a la escuela y utilizan internet porque han desarrollado la imaginación y diferentes capacidades para retener la información a su manera”.

¿Cuáles son esas otras particularidades de Burkina Faso a las que se refiere el inventor? “Por ejemplo, en el ámbito educativo, ningún maestro o profesor puede mandar a sus alumnos a buscar información en Internet, porque eso sería un castigo: la conexión a Internet es carísima con respecto a los ingresos medios de la población. Tener datos puede costar unos 17 euros por mes, frente a un salario básico que apenas alcanza los 50 euros mensuales. Tampoco hay Red en las casas ni en la calle. Solo las empresas tienen acceso a un router. Y en la universidad, sí hay conexión WiFi, pero es tanta la cantidad de gente intentando conectarse que el sistema colapsa”, explica Gildas.

Frente a este panorama, la respuesta del OuagaLab fue desarrollar una caja educativa para los estudiantes, provista de una tarjeta electrónica y una antena WiFi, y que contiene contenidos pedagógicos de todos los niveles que han sido cargados en el laboratorio. Los usuarios pueden, así, conectarse a esos dispositivos para, a su vez, descargar la información allí disponible.

Estos jóvenes innovadores financian sus propios proyectos a través de la provisión de soluciones tecnológicas para el tercer sector (organizaciones que trabajan en servicios, como la educación o la agricultura, entre otros). Por un lado, elaboran sus propios planes y, por otro, facturan servicios como la fabricación y los ensayos de un secador a energía solar, o el desarrollo de una aplicación para que los apicultores comercialicen la miel. “Somos un espacio de innovación y de intermediación”, recalca el fundador.

Otras posibilidades de financiación son los proyectos conjuntos con Naciones Unidas en materia de agricultura, reciclaje, energía o salud, o el patrocinio con los fondos de la francofonía, que aporta el estado francés. “Nosotros elegimos”, advierte Guiella. Y así, eligiendo bien, han llegado a consolidar tres espacios: un edificio de coworking, una incubadora de empresas y el FabLab, que es un espacio abierto a los jóvenes y en el que se factura a las empresas externas que quieran desarrollar allí sus prototipos tecnológicos. El objetivo ahora es la autonomía financiera.

Gildas, que ha acompañado también el nacimiento de otros FabLabs en Mali, Togo, Benín, Níger, Costa de Marfil y Chad, se prepara para un encuentro conjunto de laboratorios de fabricación del continente, en noviembre, en Benín. Su lema es no perder la esperanza, esa que nota que escasea entre los migrantes africanos que llevan tiempo dando vueltas por Europa. “Yo les confirmo que las cosas se mueven y que hay mucho por hacer allí, en casa, pero no les digo que vuelvan, porque puede que a ellos les resultaría muy difícil volver a enraizarse. Lo que sí hay que hacer es recuperar la esperanza, donde quiera que uno viva”.

Fuente e imagen: https://elpais.com/elpais/2019/12/12/planeta_futuro/1576163731_151450.html

Comparte este contenido:

Los dirigentes sindicales mundiales del ámbito educativo manifiestan su solidaridad con los docentes africanos que viven en países azotados por la violencia

Por: Internacional de Educación 

En su 52ª reunión, celebrada del 2 al 4 de abril, en Bruselas, Bélgica, el Consejo Ejecutivo de la Internacional de la Educación expresó su solidaridad con las organizaciones miembros al enterarse de los actos de violencia política y terrorista, que se han cobrado la vida de docentes y estudiantes en Burkina Faso, MaliNíger y Nigeria en los últimos meses. 

La IE se comunicará con las autoridades de estos cuatro países africanos con el fin de insistir en que se gestionen los riesgos de seguridad para docentes y maestros. Asimismo, exigirá que se consulte a sus organizaciones miembros para la elaboración de planes de acción coherentes que respondan a las necesidades inmediatas y a más largo plazo de las comunidades locales. 

Por otra parte, la federación sindical mundial de docentes insta a las autoridades públicas de Burkina Faso, Mali, Níger y Nigeria a: 

  • Mejorar la investigación y la respuesta a la violencia política en el entorno educativo, así como a tomarlas medidas necesarias para poner fin a las ejecuciones extrajudiciales, examinartodos los casos denunciados y garantizar que todos los presuntos culpables sean llevados ante la justicia; 
  • Acelerar la acción para restaurar el derecho a la educación en todo el país garantizando escuelas protegidas y seguras para la enseñanza y el aprendizaje, tal como se estipulaen los instrumentos internacionales que estos países han ratificado; y 
  • Garantizar la libertad de asociación y la aplicación efectiva del derecho a la negociación colectiva con el propósito decrear un entorno favorablepara entablar negociaciones sobre gestión laboral que mejoren la situación y las condiciones laborales de los docentes y los trabajadores de apoyo a la educación. 

Los cuatro países han ratificado la Declaración sobre Escuelas Seguras, un compromiso político intergubernamental destinado a proteger a los estudiantes, los docenteslas escuelas y las universidades de ataques perpetrados por las fuerzas y los grupos armados, así como a restringir el uso militar de la infraestructura educativa. La Declaración comprende una serie de compromisos relacionados con medidas específicas y concretas que pueden reducir el riesgo de ataques y atenuar su impacto. Si sus organizaciones afiliadas lo solicitan, la Internacional de la Educación puede contactar con la Coalición Mundial para Proteger la Educación de Ataques (GCPEA, por sus siglas en inglés) para estudiar de qué manera se puede incluir a los sindicatos de docentes en actividades destinadas a implementar la Declaración con el fin de defender el derecho a la educación y proteger la vida de los docentes y los estudiantes. 

Fuente de la información: https://ei-ie.org/spa/detail/16230/los-dirigentes-sindicales-mundiales-del-%C3%A1mbito-educativo-manifiestan-su-solidaridad-con-los-docentes-africanos-que-viven-en-pa%C3%ADses-azotados-por-la-violencia

Fuente de la imagen: https://ei-ie.org/spa/detail/16230/los-dirigentes-sindicales-mundiales-del-%C3%A1mbito-educativo-manifiestan-su-solidaridad-con-los-docentes-africanos-que-viven-en-pa%C3%ADses-azotados-por-la-violencia

Comparte este contenido:
Page 1 of 5
1 2 3 5