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Education association requests Idaho’s public schools close for 3 weeks because of coronavirus

Education association requests Idaho’s public schools close for 3 weeks because of coronavirus

The Idaho Education Association released a statement Sunday morning calling on the state to close all schools for at least three weeks, including spring break, with ongoing evaluations of the situation, to help address the COVID-19 health crisis.

“Education leaders are uniquely positioned to help ‘flatten the curve’ and stave off a massive health crisis,” Layne McInelly, association president, said in the release. “Recognizing that school buildings often hold more than 250 people, five days a week, we must close our schools immediately for the health of our communities, students and staff.”

Idaho has five confirmed cases of COVID-19 as of Saturday evening, including two in Ada County. Government operations, large events and athletic activities have been canceled, scaled back or postponed.

Idaho’s public higher education institutions are moving classes to online only, and many private colleges have announced plans to do the same.

Late last week, Gov. Brad Little said individual school districts can close down if their directors feel it is necessary. Idaho Superintendent of Public Instruction Sherri Ybarra said school district superintendents had a teleconference Thursday when they discussed ways classes could continue for students in the event shutdowns did occur. A majority of Idaho’s school districts are able to conduct classes online, she said, and the superintendents also discussed options for pick-up points for homework for younger children for whom online classes would not be appropriate.

In the IEA’s statement Sunday, McInelly said, “Closing our schools will help prevent this disease from peaking, which would severely compromise our healthcare system and force a triage of life-saving care for patients. Schools are environments where viruses are likely to spread exponentially. The day a case is confirmed in one of our schools is the day after we should have closed the schools. The time to act is now.»

Fuente de la Información: https://www.idahopress.com/news/local/education-association-requests-idaho-s-public-schools-close-for-weeks/article_6f47e558-66be-59fe-97f0-75d0d8eae322.html

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ESTADOS UNIDOS Estudiantes protestan por el uso del reconocimiento facial por parte de las universidades

América del Norte/EEUU/Universituworldnews

Los estudiantes de universidades de todo Estados Unidos participaron en protestas para exigir que sus instituciones se abstengan de utilizar el reconocimiento facial en el campus, escribe Kari Paul para The Guardian .

Las protestas se produjeron después de que el rechazo liderado por estudiantes y el grupo de derechos digitales Fight for The Future contra un programa de reconocimiento facial propuesto en la Universidad de California, Los Ángeles (UCLA) llevó a la escuela a revertir el curso y abandonar la tecnología. Los estudiantes de alrededor de una docena de universidades organizaron protestas en el campus en persona esta semana, mientras que 36 universidades vieron acciones en línea, incluidas peticiones.

En 2019, los administradores de UCLA propusieron el uso de software de reconocimiento facial para la vigilancia de seguridad en el campus. En una campaña contra el programa, Fight for the Future ejecutó la tecnología de reconocimiento facial en más de 400 fotos de miembros de la facultad y atletas de la UCLA y descubrió que el software coincidía incorrectamente con 58 de aquellos con fotos en una base de datos de fotografías policiales. La mayoría de los mal identificados por la base de datos eran personas de color.
Informe completo en el sitio de The Guardian

Fuente: https://www.universityworldnews.com/post.php?story=20200307101035903

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Demandan en ONU más esfuerzos para avanzar en temas de género

América/Estados Unidos/11/03/2020/Autor y fuente: telesurtv

El mundo precisa de un mayor impulso en cuanto a la igualdad de género.

La 64 Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer, se pronunció en Nueva York, por continuar empoderando a mujeres y niñas para protegerlas contra la violencia de género en cualquiera de sus manifestaciones.

Los estados miembros de Naciones Unidas, expresaron este lunes en una declaración política su voluntad de actuar para avanzar en la igualdad de género y reconocieron también que urgen mayores esfuerzos ante los nuevos retos.

Entre los aspectos que se deben priorizar, la declaración política de la 64 Comisión de la Condición Jurídica y Social de la Mujer (CSW, por su sigla en inglés) incluye la educación y el papel del liderazgo de la mujer.

Otras cuestiones que han de recibir atención jerarquizada, a juicio de quienes asistieron a la sesión, son la participación de la mujer en los procesos de paz, su derecho a la cobertura médica, al empoderamiento económico y su trabajo en la acción climática.

Aprobada por consenso, esta declaración retoma las líneas principales de la Declaración de Beijing que, desde 1995, impulsa la emancipación y la promoción de la mujer en todo el mundo y define objetivos para la igualdad de género.

De acuerdo con fuentes diplomáticas, para evitar un fracaso en la adopción del documento se eliminó cualquier referencia a la salud sexual reproductiva, mención a la que se opone desde hace años la representación de Estados Unidos.

En materia de violencia, el documento convoca a eliminar, prevenir y responder a todas las formas de violencia y prácticas nocivas contra las mujeres y las niñas, ya sea en ámbitos públicos o privados, incluso a través de las redes sociales.

Asimismo, demanda combatir la trata de seres humanos y la esclavitud moderna, y garantizar el acceso a la justicia y la prestación a todas las mujeres víctimas de violencia de servicios de apoyo, incluidos los legales, de salud y sociales.

La 64 sesión se realizó de forma reducida por motivos de seguridad relacionados con el Covid-19.

Fuente: https://www.telesurtv.net/news/demandan-onu-esfuerzos-temas-genero-20200309-0052.html

Imagen: Prensa Latina

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El vídeo de una niña de seis años esposada aviva el debate sobre el arresto de menores en Florida

Redacción: El País

Kaia Rolle fue detenida en su escuela de Orlando y llevada a comisaría por una rabieta.

La pequeña Kaia Rolle, de seis años, no entendía para qué eran las abrazaderas de plástico que llevaba uno de los dos policías que se había presentado en su escuela. «Son para ti», el respondió el agente, y la niña rompió a llorar.

La escena, grabada en vídeo por una cámara policial, corresponde al inédito arresto de la menor el pasado mes de septiembre en un centro de educación preescolar e infantil de Orlando (Florida). La familia de la niña, que había denunciado que la pequeña había sido detenida y esposada, divulgaron los vídeos la semana pasada para apoyar una propuesta de nueva ley estatal que impediría el arresto de niños, presentada por dos senadores demócratas el pasado enero.

Según recoge CNN, que cita las declaraciones escritas del director, el subdirector y dos trabajadores de la escuela, las imágenes se tomaron a las 8.10 de una mañana una mañana de septiembre, tras agarrar una rabieta la pequeña porque quería usar sus gafas de sol en clase. El subdirector la condujo a un despacho de la escuela. «Kaia se volvió agresiva y me golpeaba con las manos en el pecho y el vientre. Yo la sostuve agarrándola por los antebrazos», señaló el responsable de la escuela.

En el vídeo, la niña aparece sentada en una oficina de su escuela, calmada, mientras una trabajadora del centro le lee una tarea de un libro. En ese momento, uno de los dos agentes que acaba de entrar en la estancia, dice: «Vale. Va a tener que venirse con nosotros». La mujer le indica a Kaia que tiene que irse con ellos. «Levántate y ven aquí», le insta el agente. «¿Para qué es eso?», pregunta la niña, refiriéndose a las abrazaderas que usa la policía como esposas. «Son para ti», responde el policía. Y en ese momento la menor rompe a llorar. «No, no quiero que me ponga las esposas. No me las ponga», suplica, mientras pide ayuda.

«Vámonos», insiste el agente. «Quiero quedarme en la escuela. Acabo de llegar», replica la pequeña que pide que la dejen en la escuela mientras que el policía y el agente que lleva la cámara la acompañan hacia la salida del edificio. Al tiempo, el agente que lleva la cámara le dice a la pequeña que le diga, mientras van en el coche de la policía, qué ha pasado. «No quiero entrar en un coche de policía», asegura entre sollozos la menor. «¿No quieres? Pues tienes que subirte», le dice el policía de la cámara. «Por favor, no, denme otra oportunidad», suplica la menor. Uno de los policías la mete en el coche mientras la pequeña llora y pide que, por favor, la dejen irse.

El agente que detuvo a la menor, Dennis Turner, arrestó a otro niño de seis años el mismo día en otro incidente, y ha sido expulsado del cuerpo policial. El agente estaba destinado al cometido de atención a las escuelas. La policía de Orlando difundió un comunicado en el que recordaba que el arresto de menores de 12 años es posible, pero requiere la aprobación del denominado «comandante de vigilancia». Esa aprobación no tuvo lugar en el caso de la pequeña Kaia, y la policía la condujo de regreso a su escuela.

La abuela de la menor asegura que a la menor «le han robado la infancia» y añade que su nieta no se separó de ella la primera semana y media tras el arresto. La primera vez en que la acompañó a la escuela tras el incidente, la pequeña comenzó a sollozar porque vio a un policía por el camino. Kaia, afirma su familiar, sigue teniendo pesadillas sobre su arresto.

Fuente: https://elpais.com/internacional/2020/03/02/mundo_global/1583136296_525169.html

 

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“El feminismo es la punta de diamante de una insurgencia internacional”. Entrevista a Silvia Federici

Por:  Victoria Furtado Y Mariana Menéndez

El aporte del feminismo ha sido también señalar las desigualdades, porque el capitalismo es producción de escasez, no producción de prosperidad, y producción de desigualdades.

 

Mientras alrededor del mundo se prepara la cuarta huelga feminista en cientos de reuniones, actividades y asambleas, escuchar a Silvia Federici resulta inspirador. En un impás de su andar por el mundo compartiendo claves y contagiando fuerza, Silvia nos recibió en su casa de Nueva York para conversar sobre la actualidad de las luchas feministas, las revueltas populares de los últimos meses, las tensiones del feminismo con la izquierda y los puntos más destacados de su último libro.

 

En los últimos años has estado viajando y en permanente contacto con compañeras y organizaciones feministas de América Latina y Europa. ¿Cómo ves la lucha feminista hoy?

Es un momento muy importante, muy particular. No solo en América Latina, aunque allí se ve con más impacto, es un momento en el que se da el encuentro del movimiento feminista, con toda su diversidad, con las luchas populares, con los movimientos sociales que, desde los años ochenta, han crecido en respuesta al ajuste estructural, a la política extractivista, al neoliberalismo. Este encuentro surge de una situación concreta muy fuerte, que es que todas estas políticas han impactado sobre todo en las mujeres y en la reproducción de la vida. Entonces las mujeres están en primer lugar no solo como víctimas del despojo sino también como luchadoras, como protagonistas de la resistencia. Y además de protagonizar la resistencia han necesitado hacer cuentas con los hombres de los movimientos, de las organizaciones mixtas. Y es aquí que se da el encuentro con el feminismo, el aporte del feminismo.

Se ha creado así un feminismo nuevo, un feminismo que yo creo que es muy poderoso porque tiene una mirada anticapitalista que reconoce toda una historia de opresión, tiene una mirada descolonizante. Es un movimiento que, al fin, abarca todos los aspectos de la vida. No es un movimiento que se focaliza en el trabajo como se entiende tradicionalmente, es decir, vinculado a la producción, sino que se preocupa por el campo, por el cuerpo, por lo que pasa en la comunidad. Y no es solamente oposición, es un movimiento que construye. Yo creo que esta es su gran fuerza, es lo que le ha permitido crecer en estos años a pesar de que la ola de fascismo, de la derecha sigue creciendo. Crece porque está creando una infraestructura nueva que nunca se ha visto en los movimientos revolucionarios dominados por los hombres: toda esta creatividad, la capacidad de recuperar saberes tradicionales, de crear ligámenes afectivos.

Yo creo que es un movimiento que tiene bases muy fuertes, por eso sigue sumando a mujeres que llegan de lugares diferentes, como en Argentina y Uruguay: de las organizaciones sindicales, de la economía solidaria, a las compañeras indígenas, a las campesinas. Esto es una fuerza. El movimiento feminista es el que trae las luchas hoy, en América Latina sin duda, pero esto, en forma diferente, está pasando también en otros lugares.

Precisamente, en los últimos meses hubo en América Latina una serie de levantamientos populares en defensa de una vida digna. Quizás los casos más claros son Chile y Ecuador, pero no son los únicos. ¿Cómo podemos leer estos procesos de lucha desde una perspectiva feminista que ponga en el centro la reproducción de la vida?

Yo creo que es importante una perspectiva feminista exactamente por eso, porque se enfoca en lo que es más fundamental, sea como objetivo o como condición de la lucha: el cambio de la reproducción de la vida cotidiana, de la reproducción social -no solamente de la reproducción doméstica- en todos los lugares. Porque reproducción significa trabajo doméstico, sexualidad, afectividad, significa también medioambiente, naturaleza, el campo, la agricultura, la cultura, la educación.

El feminismo toca una gama muy vasta de temáticas vinculadas a la reproducción de la vida que son el fundamento de cualquier cambio social, que son el fundamento de cualquier lucha. No puede haber una lucha exitosa sin cambiar estos que son los aspectos más importantes de la vida. Por eso yo creo que en estos levantamientos que se han dado en Chile, en Ecuador, la participación de las mujeres es muy importante; sobre todo mirando a largo plazo, mirando estos movimientos no como una rebelión momentánea que mañana va a caer, sino como movimientos que expresan una revuelta muy profunda, que expresan un decir “basta ya” muy profundo con este sistema tan injusto, tan violento. Y pensando a largo plazo la perspectiva y las actividades de las mujeres son fundamentales.

Estas luchas feministas de las que estamos hablando, anticapitalistas o de un feminismo popular, se preocupan por una diversidad de asuntos. Se interesan no solo por los problemas de las mujeres sino por el conjunto de las relaciones sociales y con la naturaleza. No obstante, muchas veces se intenta ubicar nuestras voces de mujeres en lucha como sector, como si solo pudiésemos hablar de los temas de las mujeres. En particular este es un conflicto con la izquierda. ¿Cómo valorás la relación entre el feminismo y la izquierda?

Yo creo que esto es muy fundamental, creo que la izquierda no quiere ver. Los intereses masculinos vuelven ciegos a los hombres que proyectan sobre las mujeres lo que es su propia situación: son ellos que representan solamente un sector, un tipo particular de lucha. Lo que me parece importante del movimiento feminista es que ha abierto los ojos y ha descubierto todo el universo de la reproducción de la vida. Es un movimiento que verdaderamente mira no solamente un sector de la vida de los trabajadores, un sector del proletariado en el capitalismo, sino que mira en su totalidad. En los años setenta, al comienzo, se hablaba de reproducción como trabajo doméstico, pero en las últimas tres décadas hemos visto que reproducción es todo. Es el cultivo, las semillas, el campo, la salud, la educación, la crianza,  la calidad del aire, los entramados afectivos, etc.

El aporte del feminismo ha sido también señalar las desigualdades, porque el capitalismo es producción de escasez, no producción de prosperidad, y producción de desigualdades. El capitalismo produce no solamente mercancías sino también divisiones y jerarquías como su condición primaria de existencia. Por eso el feminismo nos da una perspectiva más amplia, que no es sectorial sino que mira la totalidad de la vida. Claro que hablamos de un feminismo anticapitalista, no un feminismo de estado creado por las Naciones Unidas y los gobiernos para reclutar mujeres para las nuevas formas de desarrollo capitalista. Es muy importante clarificar esto porque hoy también hay un feminismo de estado, un feminismo institucional. No hablamos de estos feminismos.

A menos de un mes del 8 de marzo, en muchos países se están preparando, paros, movilizaciones y acciones. ¿Cuáles son los desafíos de cara a la próxima huelga feminista y, más en general, para mantener abierto este tiempo de lucha?

Para mí lo más importante es siempre el proceso, no la fecha, sino el proceso de construcción. El 8 de marzo es la manifestación de lo que se ha hecho, es un momento simbólico muy importante, pero lo más importante es lo que se construye en el proceso de contactar mujeres que, aunque muchas veces tienen intereses comunes, no se encuentran, el proceso de crear nuevos espacios. También es un momento de profundizar en lo que queremos.

Entonces, por un lado, crear en concreto nuevas formas de organización, nuevos espacios, porque el espacio es fundamental, tener lugares donde podemos encontrarnos. Por otro lado, el programa, lo que queremos, porque todavía tenemos muchas cosas por definir. Por ejemplo, todavía se habla muy poco en el feminismo de la situación de la infancia, que para mí es trágica hoy, es una situación de crisis muy fuerte. Necesitamos articular más nuestro programa, sea en forma de oposición a lo que se está haciendo, sea en forma de construcción, de comprender lo que queremos, qué tipo de sociedad y relaciones queremos. Y, como siempre, el tercer objetivo es superar las divisiones de todo tipo que todavía existen entre las mujeres: raciales, de la diversidad sexual, de edad entre jóvenes y mayores, etc. Este es un objetivo muy importante porque la divisiones y las jerarquías son lo que más nos debilita y el arma más potente que tienen para crear nuevos conflictos, para mostrar que tenemos intereses diferentes, para hacer que nuestras energías se dispersen en luchas sectarias entre nosotras.

Ya que lo mencionás, ¿cómo ves las relaciones intergeneracionales en el movimiento feminista?

Soy optimista, porque he viajado mucho y veo que en España, en Argentina o aquí mismo, en Nueva York, a mis charlas llegan mujeres jóvenes. Yo tengo setenta y siete años y en mis presentaciones la mayoría, el ochenta por ciento son mujeres muy jóvenes, de diecinueve, veinte años. Me parece que hay un deseo de conectar. En los años setenta, en los movimientos mixtos se decía “nunca confíes en nadie que tiene más de treinta años”. Y bueno, yo puedo entender por qué, pero afortunadamente eso no pasa ahora con el feminismo.

Hay un deseo de comprender, de conectarse con personas mayores. Aunque todavía la problemática de los mayores se está tocando muy superficialmente. Hoy los mayores, y sobre todo las mujeres mayores, viven una crisis muy fuerte. Muchas de ellas trabajaron toda su vida ayudando a los hombres a vivir y a morir, y cuando ellas necesitan ayuda porque no pueden trabajar más, no tienen recursos porque la mayor parte de su vida la han pasado trabajando sin ninguna ganancia. En Estados Unidos, las mujeres mayores son las que mayormente pueblan los refugios del estado. Son situaciones verdaderamente trágicas, sobre todo las de quienes no son autosuficientes, que muchas veces viven en condiciones terribles. Yo creo que esto, como la situación de la infancia, no se ha problematizado lo suficiente en el movimiento feminista. A pesar de que el movimiento reúne hoy a mujeres de varias edades, todavía es una problemática que debe ser incluida. Porque si hablamos de violencia, la miseria económica y afectiva en la que viven tantas mujeres mayores es una forma de violencia.

La lucha feminista está siendo muy fuerte en muchas partes del mundo, pero al mismo tiempo hay un avance, conservador en el mejor de los casos, directamente fascista en otros. ¿Cómo hacemos una lectura feminista de este proceso?

Si ponemos esta violencia de hoy en el contexto del siglo veinte, sin irnos al siglo dieciséis o diecisiete, podemos ver que el capitalismo, en cualquiera de sus fases de desarrollo reciente, ha sido siempre muy violento: dos guerras mundiales donde murieron casi cincuenta millones de personas, la tortura de masas como sistema de dominio en América Latina a partir de los sesenta, todas las guerras que tanto gobiernos demócratas como republicanos de Estados Unidos han impulsado, etc. Pienso que es importante contextualizar esto para no pensar que es una novedad, para ver que, sobre todo cuando se siente amenazado, hostigado, el capitalismo necesita desplegar esta violencia.

Y hoy el capitalismo se siente amenazado. En primer lugar, porque hace años se quejan de que el nivel de ganancia no es suficiente, entonces es un capitalismo en crisis. En segundo lugar, porque hay un avance, porque el feminismo es la punta de diamante de una insurgencia internacional. Son años y años de insurgencia continua. Desde la primavera árabe hasta hoy, es una insurgencia que siempre necesita de más tortura, guerra, cárcel. Entonces veo toda esta violencia como una respuesta que no es una novedad, sino la respuesta usual del capitalismo que se siente en crisis, que siente que sus fundamentos están en peligro y se enfrenta a movimientos internacionales que, sin estar coordinados tienen las mismas temáticas. Porque de Brasil a Chile, pasando por Ecuador, Líbano, Haití, hay una resistencia al empobrecimiento, a la miseria, a la violencia policial y del estado.

No es casual que cuando las compañeras en Chile dijeron “el violador eres tú”, con un gran coraje, porque hacer esto en Chile no es lo mismo que hacerlo en otros países, esto ha circulado inmediatamente. Esta internacionalización y circulación inmediata de las preguntas, objetivos, consignas, formas de organización, nos dice que hay una insurgencia, un decir “basta” que es muy general. Pienso que los Bolsonaro y todas estas iniciativas de la iglesia y económicas son una respuesta. No se puede imponer una austeridad brutal, un despojo brutal por años y años, expulsar a millones de personas de sus tierras, sin organizar un enorme dispositivo de violencia.

MÁS ALLÁ DE LA PERIFERIA DE LA PIEL

Acaba de publicarse “Beyond the periphery of the skin”, tu último libro [1]. Allí contraponés una noción de cuerpo tal y como ha sido pensada por el capitalismo -es decir, como máquina de trabajar y, en el caso de las mujeres, como máquina de procrear-, con el cuerpo tal y como ha concebido por la imaginación radical colectiva, en particular por el feminismo a partir de los setenta. ¿Qué significa hoy el cuerpo como categoría de acción social y política?

Me gusta la idea de cuerpo-territorio porque inmediatamente nos da una imagen colectiva. No solamente porque es el primer lugar de defensa y conecta el discurso del cuerpo con el discurso de la tierra, de la naturaleza, sino porque pone el discurso del cuerpo como una cuestión colectiva. Entonces, el discurso del cuerpo es sobre quién gobierna a quién, sobre quién tiene el poder de decidir sobre nuestras vidas.

Yo pienso que esta es una de las preguntas fundamentales, de fondo en la lucha. Porque hay un estado que quiere controlar cada minuto, no solamente en el trabajo. En el caso de las mujeres, invade nuestro cuerpo, nuestra realidad cotidiana, de forma cada vez más intensa y más opresiva que en el caso de los hombres. El problema del aborto es muy ejemplar. Entonces yo creo que pensar el cuerpo desde una mirada feminista hoy es particularmente crucial para determinar quién tiene la posibilidad de decidir sobre nuestra vida.

Cuerpo significa vida, significa reproducción, significa afectividad. Todo rodea la temática del cuerpo: la comida, el sexo, la crianza, la procreación. Entonces la lucha por el cuerpo es la lucha por los aspectos más fundamentales de la vida. Por eso creo que asombra a tantas mujeres con una intensidad tan fuerte, porque aquí se decide quién es el patrón de nuestra vida, ¿somos nosotras o es el estado?

Pero vos enfatizás en reclamar el cuerpo de forma colectiva, en recuperar la capacidad de decisión colectiva sobre nuestras vidas…

Sí, capacidad colectiva, absolutamente. Solas somos derrotadas. Por eso hay que salir de la casa por la lucha. No por el trabajo, salir de la casa por la lucha, salir de la casa para juntarse, salir de la casa para enfrentarse a todos los problemas que tenemos solas.

La idea de ir más allá de la periferia de la piel tiene que ver con postular una noción expansiva del cuerpo. Para eso discutís el cuerpo expansivo concebido por Bajtín, que se expande mediante la apropiación e ingesta de lo que está más allá de él, y proponés una idea igualmente expansiva pero de naturaleza radicalmente distinta. Hablás de una “continuidad mágica” con otros organismos vivos y de un cuerpo que reúne lo que el capitalismo ha dividido. En ese sentido, ¿el cuerpo sería el punto de partida para pensar la interdependencia?

No pienso en un cuerpo que quiere apropiarse, sino en un cuerpo que quiere conectarse. No quiere comer el mundo, quiere conectarse con el mundo. La mirada del siglo dieciséis y diecisiete, del renacimiento sobre el cuerpo no lo entendía como algo completamente aislado, no era una isla sino que era abierto. Podía ser afectado por la luna, por los astros, por el viento. Ese cuerpo que es expansivo porque no está separado del aire, del agua. Y también está íntimamente conectado con el cuerpo de los otros. La experiencia del amor y del sexo es ejemplar, pero no es la única que muestra como continuamente somos afectados y nuestro cuerpo cambia. La tradición del mal de ojo, por ejemplo, tiene que ver con que los otros te pueden hacer sufrir, o te pueden hacer feliz, te cambian.

No podemos pensar el cuerpo como los capitalistas lo piensan, como lo piensa la ciencia hoy, es decir, un cuerpo que es completamente máquina, que es un agregado de células, y cada célula tiene su programa, cada gen tiene su programa, no es algo orgánico. Mi mirada y mi intento es promover una visión del cuerpo que va exactamente al contrario de la mirada que domina hoy en la ciencia. Cada vez más, se intenta aislar el cuerpo en pequeños pedazos, cada uno con su característica. Es una fragmentación. Pienso en el fracking, hoy cuando los científicos piensan al cuerpo hacen una especie de fracking epistemológico que disgrega el cuerpo.

Para mí, el cuerpo se debe reconectar con los animales, con la naturaleza, con los otros. Este es el camino para nuestra felicidad y salud corporal. Porque la infelicidad, precisamente, incluye el cercamiento del cuerpo. Hay un cercamiento no solamente de la tierra, como he escrito en El Calibán y la Bruja, sino también de los cuerpos. Cada vez más nos hacen sentir que no podemos depender de los otros, que a los otros hay que tenerles miedo. Este individualismo exasperado, que se ha acentuado con el neoliberalismo, es verdaderamente miserable. Nos hace morir, porque es una vida conceptualizada en el nombre del miedo, del temor, en vez de ver que la relación con los otros es un gran enriquecimiento.

El último texto del libro, “On Joyful Militancy”, es especialmente hermoso. Allí oponés dos ideas de militancia: una militancia alegre, que nos hace sentir bien y conecta con nuestros deseos, versus una política y una militancia tristes.

Para mí la militancia triste es una militancia que no tiene futuro, pero existe. Yo creo que la militancia dominada por los hombres es una militancia triste, es una militancia como trabajo alienado, es una militancia donde se piensa “debo ir a otra reunión” como quien piensa “debo ir a trabajar”. Es ese compañero que siente la sumisión histórica, no le gusta, no tiene entusiasmo, no le da nada, pero lo hace como un deber, como una obligación. Esto no es construir otra sociedad.

Se pueden correr riesgos, pero eso es diferente. A veces se corren riesgos porque hacerlo te da algo, te cambia la vida. Pero te cambia ahora, no en un futuro, no en veinte años quizás, te cambia ahora. Para mí esto es construir un mundo nuevo. No se trata solamente de decir “no”. La vida se cambia en la forma como empezamos a relacionarnos diferente con otras personas y a descubrir cosas de nosotros mismos. Porque cambiamos, haciendo relaciones diferentes cambiamos. Y yo creo que la vida es tan triste para la mayoría de las personas en el mundo que no van a agregar otra tristeza, prefieren morir a la noche mirando la televisión en lugar de ir a una reunión donde todo sea dolor o aburrimiento.

Lo que desde el feminismo estamos nombrando como política del deseo sería un poco la antítesis de esta militancia triste…

Exactamente. Y es la creatividad, la creatividad de la militancia. Yo esto lo he experimentado profundamente porque me acuerdo de la diferencia que vi, en pocos años, cuando las mujeres dejaron los movimientos con hombres, los movimientos mixtos. Las mujeres cambiaron así (da vuelta las palmas de las manos). Empezaron a hablar, a cantar, a crear, a dibujar. ¡Fue como una explosión de creatividad increíble! Antes hacían todo el trabajo doméstico de las organizaciones. ¡Se ha hecho tanto trabajo doméstico en los movimientos con los hombres! Y por fin luego fue muy diferente, se volvió un placer.

[1] Federici, Silvia. 2020. “Beyond the Periphery of the Skin: Rethinking, Remaking and Reclaiming the Body in Contemporary Capitalism”. Oakland, PM Press.

Fuente e imagen:  http://zur.org.uy/content/%E2%80%9Cel-feminismo-es-la-punta-de-diamante-de-una-insurgencia-internacional%E2%80%9D-entrevista-silvia?fbclid=IwAR1SHjCifHzRXhnQTH0oxEMthzCaXf8Z-SCuFaQSe4qXD-beHb2S7UhROpc

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Estados Unidos: Trump limitará el acceso de beneficios del Seguro Social a personas con discapacidad que no hablan inglés

Redacción: Univisión

Las normas actuales indican que el hecho de que una persona no hable inglés es una causa adicional de imposibilidad de trabajo para que el Seguro Social acepte un caso de discapacidad laboral. Ahora se eliminará la categoría «incapaz de hablar inglés», lo que limitaría el acceso de solicitantes que no son angloparlantes a estos beneficios.
Una nueva ley de la administración de Donald Trump limitaría el acceso a los beneficios por discapacidad del Seguro Social para aquellas personas que no hablan inglés.

Para aplicar a este tipo de beneficios, el solicitante –con una discapacidad que se espera que dure más de un año–, debe someterse a una evaluación que incluye la educación de la persona, que tiene en cuenta si el aplicante habla inglés con el objetivo de saber si puede encontrar trabajo con su condición médica. La categoría de educación divide a los solicitantes en cuatro subcategorías: educación secundaria y superior, educación marginal, educación limitada y «analfabeto o incapaz de comunicarse en inglés».

Con esta medida que entraría en vigor el próximo 27 de abril se eliminaría el inglés como un factor de logro educativo, por lo que a aquellos que no son angloparlantes les costaría más calificar para la ayuda. Es decir, la Administración del Seguridad Social (SSA) ya no consideraría la «incapacidad de una persona para comunicarse en inglés» en las solicitudes, tanto para el Seguro de Discapacidad del Seguro Social (SSDI) como para los beneficios del Ingreso de Seguridad Suplementario (SSI).

Sin embargo, ahora la SSA indica que las categorías «analfabeto» e «incapaz de comunicarse en inglés» nunca deben estar juntas. A pesar de que la mayoría de las personas que corren el riesgo de quedar discapacitados por una lesión laboral son inmigrantes no educados, la SSA argumenta que hay personas que aunque no dominan el inglés sí han recibido un alto nivel de educación en sus países de origen.

Además, señalan que la fuerza de trabajo hoy es más diversa y que ahora es más fácil para las personas mayores aprender inglés y mejorar así sus perspectivas de empleo.

«Un programa de discapacidad exitoso debe evolucionar y apoyar la toma de la decisión correcta tan pronto como sea posible. Para ayudarnos a hacer eso, debemos modernizar las reglas y normas que usamos para evaluar cómo determinamos los beneficios por discapacidad», puntualiza la SSA en su sitio oficial, y añade: «Las investigaciones muestran ahora que la incapacidad de comunicarse en inglés ya no es una buena medida del nivel de educación de una persona o de su capacidad para trabajar».

Unas 10,000 personas se verían afectadas con esta nueva regla, estima la SSA, sobre todo los puertorriqueños. Según un artículo del Huff Post, aunque solo el 1% de todas las indemnizaciones por discapacidad se destinaron a residentes de Puerto Rico en 2016, ese porciento representó casi un tercio de los beneficios concedidos en parte por la incapacidad de hablar inglés, una cantidad que a la administración Trump le parece «aparentemente desproporcionada».

Fuente: https://www.univision.com/local/nueva-york-wxtv/trump-limitara-el-acceso-de-beneficios-del-seguro-social-a-personas-con-discapacidad-que-no-hablan-ingles

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ESTADOS UNIDOS Los ‘desiertos educativos’ son un problema asombroso y las universidades con fines de lucro se están aprovechando

América del Norte/EEUU/Universityworldnew

Una cosa es no poder pagar una educación universitaria. Es un tema completamente diferente cuando ni siquiera tienes una universidad a tu alrededor, escribe Aarthi Swaminathan para Yahoo! Finanzas

Un informe reciente del Jain Family Institute (JFI) revela que el acceso a la universidad no se trata solo del costo de la universidad. El acceso físico a las instituciones públicas de educación superior en todo Estados Unidos también ha sido muy desigual. Específicamente, las regiones del oeste de Estados Unidos tienen poco o ningún acceso a una institución de educación superior, en comparación con la costa este. Laura Beamer, líder del proyecto de financiación de la educación superior en JFI y una de las dos autoras del estudio, dijo a Yahoo Finance : “Aunque el acceso financiero es extremadamente importante, el acceso geográfico también es una parte muy importante de este diálogo y se debe hablar más. « El acceso desigual tiene amplias implicaciones para los futuros estudiantes, la mayoría de ellos negativos.

Las partes de los EE. UU. Donde hay «poco o ningún acceso» a una institución de educación superior «son terrenos de caza principales para instituciones con fines de lucro», dijeron los autores. El sector de educación superior con fines de lucro ha experimentado un tremendo crecimiento desde la crisis financiera. En 2016, el Banco de la Reserva Federal de Nueva York señaló que la inscripción en escuelas de educación superior con fines de lucro se había «disparado» cuando el país salió de la Gran Recesión. Las universidades con fines de lucro también han conocido a los graduados con altos niveles de deuda estudiantil y, en algunos casos, brindan educación de baja calidad con falsas promesas de colocación laboral.
Informe completo sobre Yahoo! Sitio de finanzas

Fuente: https://www.universityworldnews.com/post.php?story=20200222090842419

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