Page 159 of 402
1 157 158 159 160 161 402

Venezuela: Andiep indicó que el éxodo de maestros afecta a la educación privada

Venezuela/ 27 de febrero de 2018/Fuente: El Nacional

El presidente de la Asociación Nacional de Institutos de Educación Privada, Fausto Romero señaló que los planes del Ministerio de Educación no toman en cuenta las instituciones particulares.

Fausto Romero, presidente de la Asociación Nacional de Institutos de Educación Privada de Caracas (Andiep), aseguró que el éxodo de profesores afecta los planteles educativos privados y que algunos colegios tuvieron que cerrar debido a la dificultad para pagar el sueldo de los docentes.

«Algunos docentes se van del país, pero hay otros que se mudan del sector privado al sector público o del sector público al sector privado y eso se ha evidenciado de enero para acá”, señaló Romeo.

El presidente de la Andiep indicó que para superar la crisis educativa que afecta el país se necesitan más de diez años.

“El país está inmerso en una situación crítica y el futuro de Venezuela se verá comprometido en diez años”, dijo a Unión Radio.

Romeo destacó que los intentos del Ministerio de Educación de “aliviar” la crisis que vive el sector educativo no abarcan a los planteles privados.

“El 27% del sistema educativo básico es del sector privado, cuando el Ejecutivo hace mejoras lo hace en torno a las escuelas públicas”.

Fuente de la Noticia:

http://www.el-nacional.com/noticias/sociedad/andiep-indico-que-exodo-maestros-afecta-educacion-privada_224013

 

Comparte este contenido:

Hacia un Nuevo Orden Comunicacional del Sur

Por: Judith Lisette González Rivero

RESUMEN

Históricamente el discurso dominante se ha apropiado de formatos de la industria cultural  (prensa,  radio, cine y la televisión),  para enajenar las mentes de los seres humanos a favor del status quo. Se trata de medios poderosos que operan como aparatos de control para el mantenimiento del orden establecido.  En el marco del proceso de construcción de una patria socialista, se hace imprescindible superar estos discursos hegemónicos, resemantizar y producir los discursos y prácticas sociales locales que apunten a la emancipación, lo que viene a ser ese nuevo orden comunicacional del sur, que se  esboza en la Ley del Plan de la Patria. A 18 años de una revolución que cuenta con una amplia mayoría popular, sigue, contradictoriamente  observándose cómo la industria cultural, a través de medios de difusión que se oponen abiertamente al sistema, con contenidos que enajenan a los usuarios, aplicando estrategias de guerras de cuarta generación, son los que más audiencia acaparan, en contraposición están los medios promovidos por el Estado, así como espacios alternativos, para los que se han hecho esfuerzos económicos y humanos significativos.  En la actual Ley del Plan de la Patria(2013-2019), legado de Hugo Chávez,  el tema  de la comunicación vinculado al desarrollo de una nueva geopolítica internacional es estratégico para hacer irreversible el tránsito hacia el socialismo y aparece en diversas metas de este instrumento legal, al cual es importarte dotarlo de basamento teórico . Se plantea como una aproximación al problema: ¿Cómo aportar a la conformación del nuevo orden comunicacional del sur? *Propósito central de la investigación: Desarrollar bases teóricas-conceptuales que fundamenten la construcción del  nuevo orden comunicacional del sur que se esboza en la Ley del Plan de la Patria.. *Opción epistemológica: teoría crítica (dialéctico-materialista, pensamiento decolonial). *Metodología: Investigación cualitativa. Métodos; Análisis y síntesis. Inducción-Deducción.  Investigación documental. *Aportes teóricos esperados de la investigación: se espera compilar apuntes teóricos que sirvan de marco referencial al nuevo modelo comunicacional que se esboza en el Plan de la Patria. *Importancia del Proyecto: Se producirá un planteamiento teórico-conceptual sobre el Nuevo Orden Comunicacional del sur que puede ser de utilidad en la praxis educativa de estudios de periodismo, comunicación social y la nueva geopolítica.

Descriptores: Comunicación,  Nuevo orden comunicacional, Sur

 

 

 

 

 

 

Hacia un Nuevo Orden Comunicacional del Sur

 

La Ley del Plan de la Patria, donde se establecen lineamientos para el desarrollo nacional de la República Bolivariana de Venezuela,  expresa directrices precisas sobre la conformación de Un nuevo orden comunicacional del Sur, en atención a esto nos hemos planteado, desde una investigación doctoral  dotar de referencias teórico-conceptuales, a esta propuesta ideada por el presidente Hugo Chávez, que permitirá interpretar y comprender ese nuevo paradigma de comunicación, como fase importante para su implementación.

La justificación de este trabajo en construcción se centra en su contribución para con  los estudios sobre la comunicación, como proceso estratégico que puede ser determinante  en  los cambios sociales en el mundo.   Específicamente desarrollará aportes teóricos, que pueden servir a la praxis pedagógica, de referencia para estudios de comunicación, periodismo y geopolítica,  sobre todo para instituciones emergentes cuyo rol histórico es fundamental, en cuanto al fortalecimiento de los procesos de transformación social que protagonizan el pueblo de Venezuela y otros países vanguardistas del mundo.

Las siguientes líneas, tienen como propósito esbozar los supuestos epistemológicos que acompañarán nuestra investigación doctoral, así como un acercamiento a  la descripción de las categorías analíticas, lo cual se desarrollará a partir de la teoría crítica,   y desde una perspectiva cualitativa. Desde este enfoque, se acogerán los principales referentes teóricos y la categorización de ese Nuevo Orden Comunicacional del Sur.

Este trabajo se desmarca del paradigma racionalista, por considerar, tal como expresa Martínez (1997), que ese modelo de ciencia que se originó después del Renacimiento sirvió de base para el avance científico y tecnológico de los siglos posteriores, sin embargo, la explosión de los conocimientos, de las disciplinas, de las especialidades y de los enfoques que se ha dado en el siglo XX y la reflexión epistemológica encuentran ese modelo tradicional de ciencia no sólo insuficiente, sino, sobre todo, inhibidor de lo que podría ser un verdadero progreso, tanto particular como integrado de las diferentes áreas del saber.

Asimismo,  compartimos los planteamientos de  Morín (1997), con respecto a que los problemas complejos no pueden ser resueltos por enfoques parcelados, de siglos anteriores, por ende la necesidad de adoptar el pensamiento complejo (desde el enfoque dialéctico), no mutilante, para resolver problemas complejos.

Según este autor, el “pensamiento simplificante” ha generado los mayores hallazgos de la historia del progreso científico y tecnológico, pero esos avances transformaron el escenario y permitieron la emergencia de males –que pueden considerarse específicamente modernos- como la contaminación mundial, la degradación ecológica, el aumento de la desigualdad riqueza-pobreza, la amenaza termonuclear, las corrientes migratorias intercontinentales de excluidos, la incapacidad de los poderes políticos locales para gobernar y las crisis de identidad cultural, entre otros. Son los males heredados del sistema capitalista, desde el que se construyó todo un paradigma (racionalista-positivista) para su sostenimiento, donde el rol de los medios masivos (o los medios del capitalismo) ha sido protagónico.

Esta investigación tiene en cuenta la urgencia de trascender el sistema capitalista, por ser un modelo destructor del planeta, agotado,  y que no da respuesta a las principales problemáticas del mundo.  Por lo tanto, este trabajo asume la necesidad de adoptar modelos científicos opuestos a los paradigmas neoliberales dominantes, y nutrirse de un modelo epistémico socio-crítico, que permita reflexionar cómo construir y cómo producir conocimiento científico sobre la base de que otro mundo es posible.

Pasaje al nuevo orden

Traspasar la barrera del no retorno, planteó Chávez en el Plan de la Patria (2013-2019), y apoyado en Antonio Gramsci, expresó “lo viejo debe terminar de morir definitivamente, para que el nacimiento de lo nuevo se manifieste en toda su plenitud”.

Ahora bien, la destrucción de lo presente no tiene por qué ser necesariamente negativa, sino que significa el pasaje al nuevo orden, donde el oprimido será libre y, aun el opresor de nuestro tiempo, se convierta en hombre, dejando de ser torturador, opresor, como lo explica Dussel (1972), filósofo de la liberación latinoamericana.

Para este autor argentino la liberación significa comprender qué opresión se cumple sobre nosotros y luego en la práctica asumir la emancipación  de la dependencia del capitalismo norteamericano desde la hegemonía política de las clases oprimidas: campesinas y obreras. De acuerdo con el filósofo, este proceso implica “ir más allá del orden establecido”, avanzar hacia un nuevo orden que hay que establecer al servicio del “Otro” que es negado por el status quo.

Desde la revolución bolivariana, a partir del surgimiento del presidente Hugo Chávez, se ha puesto en marcha un proceso de transformación social que desafía el viejo orden político-social neo-liberal impulsado por el imperialismo, como fase superior del capitalismo,  y se ha propuesto  un nuevo orden geopolítico para tratar de integrar a los pueblos del sur, desafiando el proyecto imperial.

En lo comunicacional, el Nuevo Orden Comunicacional del Sur, que se esboza en el Plan de la Patria, se propone para subvertir el orden establecido, con miras a trascender hacia el socialismo, en el marco de una nueva geopolítica integracionista e identitaria, contemplando el uso de la comunicación con un fin emancipador.

Tras una amplia revisión bibliográfica pudo determinarse, que sobre un Nuevo orden comunicacional del Sur, es muy escasa la teoría. Sus antecedentes se vinculan con el surgimiento del Movimiento de Países No Alineados (finales de los 60), cuando surge la teoría de la dependencia y comienza la mirada crítica al paradigma desarrollista -de la cual derivó un cuestionamiento  no solamente a un modelo de desarrollo socioeconómico sino a las estructuras y modelos de comunicación dominantes en este continente-, y el debate internacional sobre los desequilibrios del  sistema informativo internacional. En este contexto surgen  las tesis a favor de de un Nuevo Orden Económico Internacional (NOEI) y de un Nuevo Orden Mundial de la Información y la Comunicación (Nomic).

Tras todo un impulso de los países no alineados hacia el Nomic, en 1980 la Unesco publicó el Informe Mc Bride, elaborado por el premio Nobel de la Paz Sean McBride  junto a una comisión integrada por personalidades estudiosas de la información y la comunicación, en el que se planteaban 82 recomendaciones puntuales que se interpretan como puntos de partida para  dar respuesta a una preocupación mundial sobre la promoción de una comunicación al servicio de las mayorías. Era claro que sus finalidades trastocarían los procesos de dominación imperial que se  ejercen a través de la industria cultural y como era de esperarse, presiones desde Estados Unidos dieron al traste con  el célebre  informe.

Referencias sobre Nuevo Orden Comunicacional (sin la categoría del Sur) pueden hallarse en textos o ensayos donde autores abordan reflexivamente el referido  Informe Mac Bride. Estudiosos sobre el tema han mantenido la necesidad de repensar y reactivar esta propuesta, que esbozaban líneas de actuación revolucionarias sobre la comunicación, cuyas referencias servirán de soporte al trabajo doctoral propuesto.

Después de décadas de este evento, se considera alentador que países con gobiernos revolucionarios como Venezuela, retomen ideas de este documento y lo incorporen en leyes en pro de lo que implica la soberanía comunicacional, uso y acceso a los medios y la utilización de la comunicación para la  liberación y educación de los pueblos. Específicamente en la Ley del Plan de la Patria, se adjetiva ese nuevo orden, al llamársele de Nuestra América o del Sur, lo que  viene a colocar una carga de resistencia e identidad cultural, afianzando la finalidad descolonizadora de   este nuevo esquema y de fortalecimiento del proyecto de integración latinoamericana  impulsada por el Libertador y que posteriormente defendió con vehemencia Hugo Chávez.

 

Epistemología y teoría de la comunicación

Desde esta investigación se asumirán  los enfoques epistémicos críticos y culturales que resignifican a la comunicación como una herramienta para la liberación y formación de los pueblos y cuestionan y problematizan el rol de los medios de difusión masiva, que al servicio del imperialismo y de la oligarquía criolla, reproducen el sistema capitalista y sus desigualdades de diverso orden: económicas, políticas, educativas, de control y poder. Muchos de estos investigadores, en su mayoría latinos, han coincidido con la reevaluación y el rescate de los postulados básicos del Informe Mac Bride.

Este trabajo se apoyará en  investigadores que han abonado al nuevo orden comunicacional, desmitificado esa falsa comunicación-monólogo o comunicación dominadora que se ejerce desde los denominados medios de comunicación social y están creando una nueva conceptualización de la comunicación. O rescatando su significado originario imprescindible para revertir el neocolonialismo actual que se sostiene y es oxigenado a través de la industria cultural.

Asimismo, se apoyará en autores que se han encargado de develar la falsa neutralidad e ingenuidad de los medios masivos y las agendas ocultas de información,  y que han denunciado a estos medios como instrumentos de dominación y de invasión cultural

Es de hacer notar que los estudios sobre la comunicación son relativamente nuevos, surgen  en el siglo XX. Y al igual que al resto de las ciencias, desde el positivismo funcionalista se desarrollaron  modelos y teorías de la comunicación de masas, que sostuvieran el status quo.  Estos se centraban exclusivamente en la transmisión de señales y mensajes, como bien lo explica Kaplún (2003). Desde ese paradigma los fenómenos comunicacionales y sociales responden a leyes universales y se plantea el estudio objetivo y neutral de este fenómeno. La teoría crítica surge para hacer frente y desentrañar el orden establecido.

De especial referencia para esta investigación será la obra de Gramsci (1891-1937),  cuyo pensamiento influye e impregna muchos de los discursos teóricos críticos acerca de la comunicación y de la cultura, como la primera generación británica de los estudios culturales y es uno de los pensadores marxistas cuyas reflexiones mantienen mayor vigencia a comienzos del siglo XXI.  Gramsci añade la idea de hegemonía, como instancia de dominio cultural, que lleva a un consenso tácito, a una aceptación o sometimiento natural de las clases subordinadas. Los medios de comunicación aparecen aquí como uno de los elementos centrales en la difusión de los valores que construyen la hegemonía. La hegemonía se manifiesta en la aceptación de un orden determinado por parte del conjunto social cuando, en realidad, ese orden custodia los intereses de la clase dominante.

Como parte del pensamiento crítico resalta la Escuela de Frankfurt, la cual tuvo un alto impacto  en las reflexiones latinoamericanas sobre comunicación y cultura, en especial en un período clave de las posiciones críticas, como fueron los finales de los años sesenta y principios de los setenta.

Uno de los pensadores que asume el enfoque crítico de la Escuela de Frankfourt, es Ludovico Silva, quien  señalaría la naturaleza alienadora del sistema de medios de comunicación que alimenta las necesidades de un orden capitalista anti-humano en vez de los deseos humanos.

Es así, como este trabajo tomará en cuenta los planteamientos de Silva (1970) sobre el carácter alienante de estos dispositivos hegemónicos, y con especial atención  su teoría  de plusvalía ideológica, que se traduce como esa esclavitud inconsciente al sistema, esa explotación de la conciencia. Con base marxista, este autor venezolano devela como lo que Teodoro Adorno denominó la Industria Cultural y que este la resemantiza como Industria Ideológica, logra crear  todas las lealtades hacia la política capitalista, una industria que tiende al control masivo de las conciencias, mediante procedimientos tecnológicos de difusión de ideas. Y por ello, en el marco de la construcción de un sistema más humano y justo, se impone la necesidad de subvertir esos modelos.

La teoría crítica de Frankfurt, asimismo, sirvió de inspiración para el movimiento denominado Escuela Latinoamericana de la Comunicación (ELACOM), que surge en los 60, a partir de escuelas de periodismo en Argentina y Brasil. Su orientación fue cuestionar los modelos foráneos; desentrañar  la manipulación de la comunicación y la cultura que ha hecho el capitalismo, convirtiendo todo en mercancía; desarrollar modelos contrahegemónicos, con visión latinoamericana. Entre los pioneros de esta escuela destacan autores de diversas naciones, como Luis Ramiro Beltrán, Mario Kaplún, Marqués de Melo, Jesús Martín Barbero, Néstor García Canclini,  Armand Mattelart, Pablo Freire, entre otros.

Esta investigación tomará en cuenta los aportes epistémicos de esta Escuela Latinoamericana, para la cual la comunicación representa una relación de reciprocidad entre el emisor y receptor, donde destaca el diálogo, el acceso y la participación en los medios de comunicación. Sus esfuerzos también se enfocan en los efectos de la comunicación en los receptores, y en como la comunicación puede apalancar el desarrollo de las comunidades, generando transformación social. La ELACOM se apoya en el contexto de movimientos y luchas políticas y sociales de la región, construidas desde la dialéctica de la hibridación y el mestizaje que reconoce la praxis, la diversidad y la participación como medulares en la comunicación, entendida como mediación social.

Tal como lo explica Kaplún (2003) en el Comunicador Popular, los teóricos e investigadores latinoamericanos, con concepciones críticas, señalan que los medios masivos -tal como operan actualmente en su casi totalidad-, no son “medios de comunicación “, sino “medios de información” o de “difusión”. Podrían llegar a ser realmente “de comunicación” (de hecho algunos pocos excepcionalmente, han logrado y demostrado serlo); pero para ello tendrían que transformarse profunda y radicalmente. Estos investigadores han desmitificado esa falsa comunicación-monólogo o comunicación dominadora  y están creando una nueva conceptualización de la comunicación. O rescatando su significado originario.

De los autores mencionados anteriormente, es importante destacar a Freire, quien tal como lo explica Barranquero en su trabajo Latinoamérica en la ruptura del paradigma de la comunicación para el desarrollo,  sus escritos dentro del campo de la educación y la pedagogía, van a influir poderosamente en las perspectivas de la comunicación participativa, educativa, popular y alternativa. Freire no se refiere tanto a los medios de comunicación masivos, como al proceso mismo de la comunicación humana y al uso de “medios populares” concebidos por las propias comunidades para su (auto) conocimiento y el reconocimiento de los otros y de la propia realidad.

El boliviano Beltrán, referido por Barranquero,  abre una nueva dirección hacia una nueva ciencia de la comunicación y de la comunicación para el cambio social. La obra del autor gira constantemente en torno a la relación entre comunicación y desarrollo, desmarcado, desde luego, del paradigma desarrollista. Beltrán es sobre todo conocido por iniciar una profunda reflexión sobre la necesidad de organizar y planificar la comunicación para el cambio mediante políticas (nacionales) de comunicación y otras estrategias comunitarias.

Otro texto importante a considerar es Pensamiento Comunicacional Latinoamericano, del saber al poder  (2009), donde Marqués de Melo propone que un nuevo orden mundial del siglo XXI puede ser utópicamente construido a partir de la acumulación crítica de conocimientos empíricamente elaborados conforme a metodologías adecuadas (híbrida, mestizas e incluso endógenas) con el fin de generar teorías susceptibles de producir cambios que nos conduzcan a un tipo de sociedad próspera, justa, plural y democrática (p162).

Resalta Marquez de Melo que  el legado de los pioneros que dieron la batalla por esta causa en los años 70, debe ser considerado como una referencia desde la cual pensar acciones. A su vez, estima   como un desafío el elucidar los fenómenos comunicacionales,  adoptando perspectivas latinoamericanas, responsabilidad en la que deben estar comprometidas las nuevas generaciones de investigadores.

Otros apuntes a considerar, son los derivados de la Pedagogía de la Comunicación, propuesta por Mario Kaplún (1998), quien plantea que así como hay una comunicación masiva al servicio de los intereses de la clase dominante, es necesario y lógico que la nuestra seleccione los hechos de acuerdo con los intereses de las masas y de su propia versión.

Más adelante el autor expone que:

           Tomar partido no es manipular. Comunicar, construir y emitir un mensaje es, pues, siempre optar, tomar posición. La tantas veces invocada «objetividad» no es sino un mito de la gran prensa, que la predica para legitimarse y la pregona en sus Escuelas de Periodismo, y es la primera en no practicarla. (p.160)

Para este autor, la tan nombrada y consagrada por el paradigma positivista, objetividad periodística, es una falacia, lo cual es compartido plenamente por esta investigación.

Comunicación revolucionaria

De los autores latinos contemporáneos,  consideramos pertinentes los aportes de Fernando Buen Abad. Este mexicano desarrolla una obra denominada Filosofía de la comunicación (2006), un planteamiento que no solo hace crítica de la ideología y la práctica dominantes sino que propone cobrar conciencia de las condiciones concretas en que se opera la comunicación bajo el capitalismo, sus raíces sociales, de clase, de las condiciones reales que las engendran y de las soluciones prácticas que permitirán transformarlas.

Plantea que no habrá transformación real de la comunicación si no hay transformación real de la sociedad, así como no puede haber transformación real de la sociedad, si no hay transformación de la comunicación. Con lo cual estamos plenamente de acuerdo.

Sólo a partir de profundizar, ensanchar y clarificar la obligatoriedad de un marco teórico programático que situé al trabajo como punto de partida para el estudio de la comunicación podremos garantizar que tal es verdaderamente compromiso de análisis y síntesis científico para la transformación de la realidad hacia un nuevo orden mundial de la comunicación, su reivindicación como trabajo humano creador y la desaparición de toda alienación y apropiación privada de los medios para la comunicación. No habrá transformación real de la comunicación si no hay transformación real de la sociedad. (p.56)

Este filósofo mexicano  es uno de los investigadores más activos en reivindicar y reevaluar el significado  del Nomic.

Entre los objetivos de esta propuesta filosófica está la intención de producir argumentos sobre la necesidad de un nuevo orden comunicacional internacional, de tipo revolucionario, en oposición al modelo globalizado de los monopolios imperiales neoliberales.

Plantea que la comunicación revolucionaria, debe ser  transformadora que expanda e inaugure visiones y conciencia de una humanidad sin clases, sin Estado, sin propiedad privada.

Comunicación magnética que encienda todas las máquinas amorosas para la resolución de los problemas en la vida práctica armada también con poesía para liberar a la humanidad de todo aquello que la aprisiona en los límites de sus necesidades más elementales. (p.36)

Sostiene el filósofo que no es la fuerza de la comunicación un medio para acceder a un mundo “ideal”, “perfecto” dogma de sectarios, sino para salir de uno falso.

       Comunicación lumínica que transforme al mundo… que transforme la vida. Sabemos que hay riesgos como nunca en las circunstancias presentes. Es imposible revitalizar el mundo en que vivimos, es inútil aferrarse a él, es preciso atreverse a cambiarlo desde sus logros mejores. Y eso tiene costos que son, hoy por hoy, ineludibles. (p.36)

Su propuesta de comunicación revolucionaria, con la cual se identifica plenamente este trabajo, plantea una comunicación que transforme, que esté al servicio de la revolución, que debe ser  hecha por todos, donde es imprescindible la unidad, la formación y organización de los trabajadores para trascender el régimen de propiedad de los medios de producción, y con ello, los de comunicación.

Epistemología y filosofía  del Sur

Las  concepciones teóricas de un Nuevo orden comunicacional del Sur que se plantean en esta investigación doctoral, tomará en cuenta nuestros  tiempos y nuestras raíces, asumiendo enfoques de los estudiosos del pensamiento decolonial que plantean  la búsqueda y realce de nuestra propia identidad, como alternativa ante los procesos globalizantes.

Esto puede hacerse sin desechar las riquezas de la tradición crítica occidental  ni  las posibilidades históricas de emancipación social de la modernidad occidental, como lo señala  Boaventurade Sousa. En su obra Epistemología del Sur (2010),  este autor propone la  ecología de los saberes. Una ecología de las temporalidades, una ecología de los reconocimientos, una ecología de las trans-escalas, una ecología de la productividad, una hermenéutica diatópica, una sociología de las ausencias, una sociología de las emergencias, haciendo emerger la consistencia de los pluralismos y de sus singularidades componentes.

Importante soporte para este trabajo, serán las contribuciones de estudiosos de la filosofía de la liberación, como Dussel, quien ha elaborado toda una filosofía del Sur, en cuya tesis analiza la asimetría Centro-Periferia, plantea que el Sur es la periferia del sistema mundo explotada y empobrecida, y como la dominación del Norte (en todos sus niveles) ha condicionado el subdesarrollo del Sur. Al tiempo que cuestiona como desde la colonización, las culturas milenarias del Sur del mundo han sido negadas, despreciadas e ignoradas por ese sistema mundo.

Dussel formula un diálogo interfilosófico e intercultural Sur-Sur, cuyos enfoques serán considerados por este trabajo, ya que propone  la transversalidad de un diálogo intercultural transmoderno para la mutua liberación de las culturas universales postcoloniales. Por cuanto son identidades que han sobrevivido a la modernidad  y en la actualidad están en pleno proceso de renacimiento, buscando caminos nuevos para su desarrollo próximo futuro.

La  “Trans-modernidad” la presenta este autor como un proyecto mundial que intenta ir más allá de la modernidad europea y norteamericana. Indica todos los aspectos que se sitúan “más-allá” (y también “anterior”) de las estructuras valoradas por la cultura moderna europeo-norteamericana, y que están vigentes en el presente en las grandes culturas universales no-europeas y que se han puesto en movimiento hacia una utopía pluriversa.

Desde esta perspectiva expuesta por Dussel se plantea desarrollar las potencialidades de esas culturas y filosofías ignoradas; acciones llevadas a cabo desde sus propios recursos, en diálogo constante con la modernidad europeo-norte americana, en aras de una filosofía mundial futura pluriversa y por ello transmoderna (lo que supondría igualmente ser transcapitalista en el campo económico)

En esta misma línea, el teórico argentino plantea el rescate de la historia de la cultura Latinoamerica a partir  de “situar” a todas las culturas que inevitablemente se enfrentan hoy en todos los niveles de la vida, cotidiana, de la comunicación, la educación, la investigación, las políticas de expansión o de resistencia cultural o hasta militar.

Al respecto, Dussel en su obra Caminos de la Liberación Latinoamercana (1972) apunta que nuestra historia ha sido conducida por otros cauces. Cuando terminamos de leerla, y más si la estudiamos, quedamos alienados, como europeizados, extraños. Asegura, que América Latina está fuera de la historia.

Plantea reconstruir la  identidad histórica de América Latina en oposición  a las “reducciones historicistas” de nuestra realidad latinoamericana, y desde el marco de la historia mundial. (Desde el Asia nuestro componente amerindio; la proto-historia asiático-afro-europea hasta la cristiandad hispana; la cristiandad colonial hasta la “cultura latinoamericana dependiente”, postcolonial o neocolonial).

En  esta práctica  de exclusión y desprecio de la identidad de los pueblos del sur,   es indiscutible que los aparatos ideológicos del estatus quo han jugado un rol fundamental,  por lo tanto un Nuevo orden comunicacional del Sur,  debe concebirse a la luz de enfoques que se revelen y reviertan  esta situación.

Mirarnos con nuestros propios ojos

En el contexto internacional de los medios de comunicación, las asimetrías entre el Norte y el Sur es un problema que ha estado presente en el centro de los debates intelectuales desde comienzos de los años setenta,  cuando se desarrolló la gran batalla en torno al proyecto del Nuevo Orden Mundial de la Información y la Comunicación, el NOMIC

Este trabajo tomarán en consideración los aportes de Ramonet, quien participó en este movimiento, y explica  que en  el Informe  McBride se demostraba que el desequilibrio en materia de información en favor del Norte era de tal magnitud, que amenazaba la singularidad y la diversidad de las culturas, en particular las del Sur. Situación que sigue con alarmante vigencia.

Este autor plantea la cuestión de la propiedad de los medios para saber de dónde venían los mensajes, quién los elaboraba, qué sentido y qué consecuencias podía entrañar la recepción de éstos en los espíritus y en las mentes de aquellos que los recibían. Los mensajes sobre el sur, en gran parte eran elaborados desde el norte. Desde entonces se alerta sobre la preocupación del problema de la manipulación de las personas del Sur por parte de los medios de comunicación del Norte.

Sobre esta arista, se considerará como relevante citar al estudioso uruguayo Aharonian que plantea la creación de espacios que permita mirarnos con nuestros propios ojos. Es necesario dejar de ver al Sur, con ojos del Norte (p.73), plantea.

Desde el IV objetivo histórico de la Ley del Plan de la Patria relacionado con el desarrollo de una nueva geopolítica internacional, que propendan al equilibrio y la paz del planeta, lo comunicacional reviste directa e indirectamente, un papel estelar.

De acuerdo a lo que se interpreta de este instrumento jurídico, el tema  de la comunicación vinculado al desarrollo de una nueva geopolítica internacional es estratégico para hacer irreversible el tránsito hacia el socialismo y aparece en diversas metas de esta norma.

En dicha ley, se adjetiva ese nuevo orden comunicacional, al llamársele de Nuestra América o del Sur, lo que  viene a colocar una carga de identidad cultural, afianzando la finalidad descolonizadora de   este nuevo esquema y de fortalecimiento del proyecto de integración del Libertador y que posteriormente defendió con vehemencia Hugo Chávez.

Ahora bien, ese concepto integrador planteado por Chávez en el Plan de la Patria va más allá del  sur de América y El Caribe, se propone aquí la unión interregional Sur-Sur como  América del Sur-África (ASA) y el América del Sur-Países Árabes (ASPA).

Consideramos que un Nuevo orden del sur plantea entonces un sentido geopolítico, de lucha contra las históricas asimetrías, del Norte y el Sur del planeta,  países explotadores y explotados, países dominadores y pueblos dominados,   aquellos que tienen acceso a la información y aquellos que carecen del mismo. Debe entonces -desde  paradigmas emergentes- asumirse como una herramienta geopolítica que  propenda a reconocer y exaltar nuestros verdaderos orígenes, asumiendo procesos tendientes  a descolonizar el poder, el saber y el ser, utilizando la comunicación como un instrumento al servicio de la liberación de los pueblos.

Bibliografía:

-Álvarez, Federico (2010) La información contemporánea. Imprenta Nacional (AVN). Caracas

– Aharonian, Aram . (2007) Apuntes sobre comunicación y democracia. Editorial El Perro y la Rana. Caracas

-Barranquero, A. (2005) Latinoamérica en la ruptura del paradigma de la comunicación para el desarrollo. El recorrido de los pioneros en la búsqueda de alternativas democráticas. España. Universidad de Málaga

-Buen Abad, F (2006)  Filosofía de la Comunicación. Minci Caracas-venezuela

De Sousa, Boaventura. (2010) Descolonizar el saber. Ediciones Trilce. Chile

-Morín, E. (1997), ¿La ciencia pierde la razón?: Revista Universidad del Valle, No 17, agosto.

-Dussel, E.  (2011) Filosofía liberación Fondo de Cultura Económica.  México.

–Dussel, E.  (1972) Caminos de la liberación de Latinoamérica. Latinoamericana Libros. Argentina

– Dussel, E.  (2009) Política de la Liberación. Volumen II La arquitectónica. Editorial Trotta. Madrid

—Dussel, E.  (2005) Transmodernidad e interculturalidad (Interpretación desde la Filosofía de la Liberación)” UAMIz., Mexico City, 2005. Publicado en http://enriquedussel.com/txt/TRANSMODERNIDAD%20e%20interculturalidad.pdf

–Dussel, E.  (2015) Filosofías del Sur. Edicionesakal. México

-Kaplún, M. (2003). El Comunicador Popular. Publicado en : //biblioteca.ffh.uh.cu/…/Mario%20Kaplun-na%20pedagogia%20de%20la%20comunicacion%20(el%20com

Ramonet, I (2012) La Tiranía De La Comunicación.. Colección Emancipación Obrera. Publicado en: https://es.scribd.com/document/248988601/Ramonet-Ignacio-La-Tirania-de-Las-Comunicaciones

-Ley del Plan de la Patria, (2013-2019)

–MacBride, Sean (1981). Un solo mundo, voces múltiples. Comunicación e información en nuestro tiempo. México, D.F., Fondo de Cultura Económica-UNESCO.

-Marqués de Melo, J (2009) Pensamiento Comunicacional Latinoamericano, del saber al poder  : Comunicacion Social Ediciones y Publicaciones

-Martínez, M. (1997). El paradigma emergente, hacia una nueva teoría de la racionalidad científica. México: Trillas.

Comparte este contenido:

Venezuela: Encovi: Acceso a la educación en jóvenes pasó de 48% en 2016 a 38% en 2017

Por: El Nacional/21-02-2018

El ente indicó que 39% de los estudiantes no asiste la mayoría de las veces a clases. El motivo principal es la falta de alimentos y transporte.

Este miércoles la Encuestadora de Condiciones de Vida (Encovi) realiza un conversatorio en la Universidad Católica Andrés Bello para algunos indicadores sociales y económicos del país.

El ente creado en 2014 indicó que aproximadamente 12.734.931 personas asisten a un centro de enseñanza. Sin embargo, el acceso a la educación en jóvenes de 18 a 24 años pasó de 48%, en 2016 a 38%, en 2017.

Las causas, según Encovi, son el menor acceso a la educación y servicios educativos privados. El rezago escolar en jóvenes entre 12 y 17 años llega a 15%.

Anitza Freites, integrante de Encovi, explicó que tres de cada cuatro jóvenes deja de ir a la escuela alguna vez por falta de comida.

“Se necesitan mecanismos de protección social para niños y adolescentes, quienes son sujetos de doble violación de los derechos (de alimentación y educación)”, dijo Freites.

Otro de los problemas que afecta al sector educativo es la remuneración salarial. De acuerdo con Encovi, loque genera como consecuencias la deserción de docentes de los centros educativos.

Demetrio Marotta, economista y docente, indicó que existe una alta intervención del Estado en el mercado laboral, excesivas restricciones a la actividad empresarial e inseguridad jurídica. Agregó que 200.000 personas perdieron su empleo en 2017.

*Fuente: http://www.el-nacional.com/noticias/sociedad/encovi-acceso-educacion-jovenes-paso-2016-2017_223949

 

Comparte este contenido:

Venezuela: Ministerio de Educación se reúne con sindicatos por convención colectiva 2018-2020

Venezuela/ 20 de febrero de 2018/Por: AVN/ Fuente: http://globovision.com

Autoridades del Ministerio de Educación y los sindicatos de educación del país sostuvieron este viernes una reunión exploratoria para intercambiar opiniones sobre la discusión de la convención colectiva 2018-2020, que iniciará formalmente en los próximos días.

El encuentro contó con la participación del ministro para la Educación, Elías Jaua, y los siguientes representantes de los gremios sindicales del sector educativo: Sindicato Nacional Fuerza Unitaria Magisterio (Sinafum), Federación Nacional de Profesionales de la Docencia, Federación de Trabajadores Sindicalizados de la Educación, Federación de Educadores de Venezuela, Federación de Trabajadores de la Enseñanza y Afines de Venezuela, Federación Venezolana de Maestros, Colegio de Licenciados de la Educación en Venezuela y Trabajadores Profesionales de la Educación en Venezuela, refiere una nota de prensa.

Así como también la Federación Unitaria del Magisterio de Venezuela, Sindicato Nacional de Funcionarios Públicos del Ministerio de Educación, Sindicato Nacional de Secretarias Educacionales del Ministerio de Educación, Sindicato Revolucionario de Trabajadores del Ministerio de Educación, Sindicato Revolucionario de Trabajadores del Ministerio de Educación, Federación Nacional de Obreros Bolivarianos del Ministerio de Educación y Deportes, y la Federación Nacional Revolucionaria Bolivariana de Trabajadores del Sector Público.

Con esta reunión se da cumplimiento al mandato del presidente de la República, Nicolás Maduro, quien el pasado 17 de enero instruyó comenzar la discusión del contrato colectivo unificado para todos los trabajadores dependientes de este ministerio, con el fin de proteger sus derechos laborales.

Fuente de la Noticia:

http://globovision.com/article/ministerio-de-educacion-se-reune-con-sindicatos-por-convencion-colectiva-2018-2020

 

Comparte este contenido:

Resignificación de la afectividad infantil en la educación como base de sustentación y expansión de la socialidad empática

Por: Iliana Lo Priore.

El presente texto recoge una propuesta de investigación y difusión colectiva e institucional que desde la necesidad de problematizar la noción de afectividad que ha predominado hasta ahora en el medio educativo escolar de la niñez, de la adolescencia y de la juventud, busca  reconsiderarla como afectación al  tratar de trascender  lo emotivo como límite de su significado, ya que la replantea como capacidad de los cuerpos de afectar y de ser afectados por su tipo de relacionamiento con los otros seres y entes con los que interactúa en el mundo.  De aquí que propongamos el término afectualidad en vez de afectividad, ya que no se trata de algo tan solo inmanente o inherente a cada cuerpo y no trascendente, su capacidad afectiva, sino que planteamos hacer trascendente  esa inmanencia afectiva como potencia relacional, de afectación de los cuerpos, o corporeidad.  Renombrar la emoción afectiva, en tanto cualidad adjetiva o predicativa, como sustantivo-sujeto, la afectualidad, es imprescindible para referir y resaltar una significación-otra. La  problematización  deviene de los cambios que ha experimentado el contexto sociocultural e institucional moderno de nuestros países latinoamericanos, así como  los de otras regiones en el mundo, producto de una dilatada crisis estructural profunda por la que atravesamos a nivel planetario, y que repercute  en la experiencia vital de las relaciones y encuentros que forman a la corporeidad.

Son numerosos los investigadores sociales y de otros campos que,  pese a sus diferencias,  concuerdan en que la crisis general que asola al modo civilizacional que prevalece en el mundo , y que conocemos como época Moderna, obedece al agotamiento o “fin” de dicho modo de producir y reproducir la vida-muerte en el planeta, y que el tránsito epocal  convulsivo en todos los planos que en consecuencia vivimos de crisis civilizacional en lo económico, social, ecológico, político, educativo, en las racionalidades, en el conocimiento, etcétera, se  debe denominar Posmodernidad, aunque algunos opten por nombrarlo “modernidad tardía o tardomodernidad”, “sobremodernidad”, “transmodernidad” , etcétera. Crisis que nos obliga éticamente a buscar alternativas a ese “modo civilizatorio” que por sobradas  razones ha sido calificado como depredador de la naturaleza y de la humanidad.

Entre los efectos culturales del agotamiento de la Modernidad destaca la deriva semiótica, por falta de correspondencia o anclaje en la realidad de los signos como lo tuvieron imaginaria o simbólicamente en el pasado, de los significantes o ideas-fuerza de progreso, desarrollo, igualdad, justicia social, evolución histórica, humanización, educabilidad, etcétera (Lanz, 1998).  Ideas-fuerza que alimentaron, principalmente desde el siglo XVIII con el movimiento ideológico-cultural de la Ilustración europea, la esperanza de millones de seres que guiados por aquellas promovieron los ideales sociales del capitalismo liberal y del socialismo o capitalismo de Estado, así como las conflagraciones de las dos guerras mundiales del siglo XX que condujeron a la muerte de millones de seres humanos y a un reparto geopolítico del mundo entre las potencias guerreras.  Geopolítica de las potencias que nos mantiene en vilo ante una siempre amenazante tercera conflagración mundial.

Es de resaltar para nuestros efectos, que el concepto de Posmodernidad ha sido usado por destacados investigadores educativos en la región para aproximarse a la comprensión de la repercusión de la crisis de la Modernidad en la educación, por ejemplo, Peralta (2017), lo ha usado parcialmente, –sin las implicaciones que aquí apuntamos en función de la educación de niños y niñas–, y considerar su incidencia en la elaboración de lo que denomina currículos posmodernos para la infancia.

No obstante esa disolución de los fundamentos de la Modernidad y sus realizaciones prometidas, y que han dejado un gran manto de incertidumbre por el derrumbe de las grandes teorías, relatos y narraciones o  presuntas verdades generales establecidas (Morin, 1995), hay investigadores de la Posmodernidad que paralelamente han evidenciado el surgimiento de un nuevo tipo de relacionamiento sociocultural como efecto inverso posmoderno, que han denominado socialidad en tanto nueva forma de sociedad o de agregación entre los hombres y mujeres, que despunta desde fines del siglo pasado (Maffesoli, 1990).  Una socialidad de tipo empática que se traduce en la sensibilidad de una comunidad emocional, que llama Maffesoli por sus formas de agregación por empatía, neotribalización o nuevas tribus.  Noción ésta que ha resultado muy productiva en las investigaciones en torno a los nuevos comportamientos y tendencias que manifiestan los adolescentes y jóvenes en los diferentes países latinoamericanos. Esta socialidad empática, que actúa como una “nebulosa afectual” permea  diversos ámbitos de la vida cultural que propicia nuevas sensibilidades por proximidad afectiva y gustos compartidos desde el deporte,  la música, la estética, etcétera, hasta la ética y la política, llegando incluso a transfigurar a ésta última en el ámbito de lo público: “la política como antipolítica” por el rechazo a las formas tradicionales burocráticas de participación en los asuntos de interés general, por ejemplo, los partidos políticos; así como el rechazo ético-corporal a las instituciones gubernamentales o estatales que son consideradas administradoras parcializadas de políticas del poder o dominio de unos grupos o intereses sobre los demás, como ha sido el caso manifestado por los movimientos de los “indignados” en Europa.  Incluso la prevalencia  de la imagen, no se debe tan solo a su mediatización tecnológica digitalizada, sino a la recuperación sinérgica  que ésta favoreció  por su existencia previa como tendencia cultural posmoderna.

La breve consideración hecha sobre la condición posmoderna nos ha servido para resaltar una de sus tendencias: su socialidad empática que promueve comunidades o tribus por afinidad afectiva de duración efímera, según Maffesoli.  Una tendencia que contrarresta al prevaleciente narcisismo individualista  disolvente de vínculos sociales orgánicos cohesionadores, producido por el modo civilizatorio moderno depredador-competitivo, sin que por ello la tribalización deje de  expresar como potencia afirmativa  la individuación de modo colectivo que busca la realización o satisfacción  personal de cada quien de manera conjunta, por más efímeras que estas experiencias asociativas puedan ser.  Experiencias que deseamos estudiar o investigar, repotenciar institucionalmente y dar mayor afirmación sociocultural a través de la educación de los niños y niñas para fortalecer los relacionamientos sociales por medio de la afectualidad para provecho de una mejor sociedad o una sociedad-otra.

Cabe aquí, por consiguiente, aproximarnos  a lo que se ha entendido por afectividad, sin que ello escamotee lo que debe ser investigado colectiva e institucionalmente al respecto. Lo hacemos para evidenciar con una comparación crítica la inconsistencia de seguir sustentando una representación de la afectividad desactualizada para dar cuenta de las nuevas realidades socioculturales que la implican.

Aunque existen diversas conceptualizaciones sobre la afectividad que responden principalmente a enfoques disciplinarios (psicológicos, antropológicos, sociológicos, etcétera), queremos recuperar resumidamente la perspectiva filosófica de Baruch de Spinoza (1980).  Para él no existe una sola clase de afecto, sino varias, o una afectividad múltiple: afectio y afectus. El afectio es el estado de un cuerpo cuando afecta a otro o es afectado por otro, mientras que el afectus consiste en la modificación continua o intensiva que sufre el cuerpo como aumento o disminución de su capacidad o poder de acción.  Para él el afecto es inmanencia concreta y abstracta o virtualidad potencial realizable de los cuerpos.  Por ello, para otro filosofo que lo comenta, Gilles Deleuze (1984), el afecto es inmanencia de la inmanencia, o inmanencia del poder puro, poder de afectar otros cuerpos. No obstante, reiteramos que para nosotros el afecto en tanto afectualidad, es una inmanencia de la corporeidad que se puede manifestar de manera trascendente en la transformación de las relaciones sociales y sus instituciones para que sea también poder emancipador de los cuerpos por sí mismos.  Trascendencia que nos es muy cara a los educadores para reconsiderarla como potencialidad manifiesta en una socialidad que la expresa posmodernamente para refundar o cambiar la sociedad desde su reconfiguración educativa, particularmente en la formación de la infancia.

Por ello creemos que es relevante y urgente acometer la tarea de investigar colectivamente las posibilidades que encierra la afectualidad al superar las limitaciones que la representación de la afectividad prevaleciente obstaculiza e impide, y, por otra parte, registrar y  potenciar las experiencias educativas en distintos planos y aspectos que desde esta nueva perspectiva acometan los educadores por su proyección sobre la afirmación de una socialidad empática transformadora de la sociedad.

Para desarrollar esa tarea indagativa y experimental es necesario articularnos con base en proyectos de investigación, seminarios itinerantes, conferencias, encuentros, conversatorios, talleres, etcétera.  En esta dirección estratégica destacan los educadores de la infancia por cuanto es parte de su acervo pedagógico-educativo la valoración de la afectividad en el desarrollo socioemocional y cognitivo del niño para su desenvolvimiento social presente y futuro. De aquí que la revisión crítica y experimental o práctica de esa valoración para adecuarla a los nuevos tiempos y al “espíritu de la época”, no sea extraña u ajena a su quehacer profesional. Centrándose para ello, en la revisión del tipo de agenciamiento pedagógico de  encuentros relacionales empáticos densos o  intensos que subjetiven  las experiencias relacionales de afectualidad, su  composición u organización para desarrollar la capacidad o poder de afectar y ser afectados individual y  colectivamente por esa clase de socialidad.

Con base en lo planteado, y por la dimensión y exigencias que se desprenden, vemos como un requerimiento encontrar una forma de articulación entre quienes compartan esta propuesta para facilitar su promoción y realización.  Para efectos de las temáticas a ser abordadas desde las diferentes formas señaladas, sugerimos las siguientes, sin que ello implique un orden agotado y cerrado:

– Contexto sociocultural de crisis de la Modernidad y advenimiento de la socialidad posmoderna, y sus derivaciones para la infancia principalmente.

– Implicaciones epistémicas y epistemológicas de una racionalidad sensible o empática ante las racionalidades modernas, particularmente para la “racionalidad educativa moderna”.

– Surgimiento de nuevos dispositivos de subjetivación de los cuerpos: sujeción y des-sujeción en los niños y niñas.

– Antecedentes teóricos sobre la afectividad y nuevos desarrollos: la afectualidad.

– Derivaciones educativas del “fin de la Modernidad” y crisis escolar para reconsiderar la función pedagógica de los docentes.

– Consideraciones, acciones y experiencias educativas orientadas en función  del agenciamiento  de la afectualidad infantil o de su potencia relacional.

REFERENCIAS

Deleuze, M.  (1984)  Spinoza: filosofía práctica.  Tusquets editores: Barcelona

Lanz, R.  (1998)  Temas posmodernos. Crítica de la razón formal. Fondo Editorial de la Asamblea  Legislativa del Estado Miranda: Caracas

Maffesoli, M.  (1990)  El tiempo de las tribus.  Editorial Icaria: Barcelona

Morin, E.  (1995)  Introducción al pensamiento complejo. Editorial Gedisa: Barcelona

Peralta, M.V.  (2017)  Construyendo currículos posmodernos en la Educación Inicial Latinoamericana.  Homo Sapiens Ediciones: Rosario

Spinoza, B.  (1980)  Ética demostrada según el orden geométrico. Editorial Orbis: Madrid

 

  • Correo: ilianalopriore11@gmail.com

 

Comparte este contenido:

Aprendizaje para todos

Venezuela / 11 de febrero de 2018 / Autor: Paulino Betancourt Figueroa / Fuente: Efecto Cocuyo

El acceso a la educación está consagrado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos y en la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño, siendo también una inversión en el desarrollo estratégico para las naciones. De allí la importancia de nuestro bachillerato que es parte esencial del sistema educativo nacional, así como de la estructura económica y social del país, donde millones de jóvenes estudiantes se forman para tener éxito en la vida.

Sin embargo en la actualidad enfrentan una perspectiva de pérdida de oportunidades para insertarse en el sistema universitario y en el mercado laboral, debido a que nuestras escuelas primarias y secundarias están fallando en educarlos. Al advertir sobre esta “crisis de aprendizaje” en la educación, podemos decir que la escolarización sin aprendizaje implica desaprovechar una oportunidad de desarrollo, siendo además una gran injusticia para los niños y jóvenes venezolanos. Por lo tanto, hoy más que en otros tiempos necesita ser transformado en beneficio de nuestra juventud.

En el Informe sobre el Desarrollo Mundial 2018: Hacer realidad la promesa de la educación al servicio del desarrollo, se sostiene que sin el aprendizaje, la educación no cumplirá su promesa de eliminar la pobreza extrema y crear oportunidades y prosperidad compartidas para todos. Incluso después de varios años en la escuela, millones de niños no pueden leer, escribir o hacer cálculos matemáticos básicos. Esta crisis de aprendizaje está ampliando las brechas sociales en lugar de reducirlas. Los jóvenes estudiantes que ya están en desventaja debido a la pobreza, el género o la discapacidad llegan a la adultez temprana sin siquiera las habilidades más básicas para la vida.

“Esta crisis de aprendizaje es una crisis moral y económica”, tal como lo indica Jim Yong Kim. “Cuando se imparte bien, la educación promete empleo a los jóvenes, mejores ingresos, buena salud y una vida sin pobreza. Para las comunidades, la educación estimula la innovación, fortalece las instituciones y fomenta la cohesión social”. El informe recomienda medidas políticas concretas para ayudar a países en desarrollo como el nuestro a resolver esta grave crisis de aprendizaje, recabando evidencia de lo que funciona para orientar la toma de decisiones educativas y promover un movimiento social fuerte que impulse cambios efectivos en la educación, fomentando el “aprendizaje para todos”.

Según el informe de seguimiento de la educación en el mundo, elaborado por la Organización de Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO), cuando recientemente se les pidió a estudiantes africanos de tercer grado que leyeran una oración, tres cuartas partes no entendieron lo que decía. En la India rural, casi tres cuartas partes de los estudiantes de 3er. grado no pudieron resolver una resta d6e dos dígitos como “46 -17” y al llegar al 5to. grado, la mitad aún no podía hacerlo. El documento advierte que América Latina y el Caribe enfrentan un retraso de 65 años con respecto a lo establecido para el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS), para garantizar la universalización de la educación básica y media superior. Mientras que Venezuela enfrentaría un rezago de 70 años en el cumplimiento de los ODS de mantenerse las tendencias actuales.

El informe señala que cuando los países y sus líderes hacen del “aprendizaje para todos” una prioridad nacional, los estándares de educación pueden mejorar dramáticamente. Por ejemplo, un país como Corea del Sur, devastado por la guerra, con tasas de alfabetización muy bajas en la década de los 50, alcanzó una educación de alta calidad hasta la escuela secundaria en 1995 y sus jóvenes se desempeñaron al más alto nivel en evaluaciones internacionales de aprendizaje. Los resultados de 2012 de Vietnam de un examen para estudiantes de secundaria en matemáticas, ciencias y lectura llamado PISA, mostraron que sus alumnos de 15 años se desempeñaban al mismo nivel que los de Alemania, a pesar de que Vietnam es un país mucho más pobre.

En definitiva, la propuesta de una estrategia educativa debería ser la siguiente: Invertir temprano, invertir con inteligencia e invertir para todos. En primer lugar es necesario estimular el aprendizaje desde temprano y en forma continua, dentro y fuera del sistema de educación formal. Para que las capacidades esenciales que se adquieran en los primeros años posibiliten el aprendizaje durante toda la vida, es esencial contar con programas de salud prenatal y desarrollo temprano que incluyan la educación y la salud para hacer de ese potencial una realidad. En segundo lugar, para obtener valor por el dinero asignado a la educación es necesario hacer inversiones inteligentes; es decir, inversiones que han demostrado ser efectivas en el proceso de aprendizaje. La calidad debe ser el foco de las inversiones en educación. En tercer lugar, el aprendizaje para todos implica garantizar que cualquiera de los estudiantes, no solo los más privilegiados ni dotados, adquieran los conocimientos y las capacidades que requieren para afrontar su vida futura.

Fuente del Artículo:

Aprendizaje para todos

 

Comparte este contenido:

En Venezuela: Lanzamiento del Nº1 de la Revista Territorios Comunes, “Ecología y ecologismos en Venezuela”

AméricadelSur/Venezuela/ecopoliticavenezuela.org/

El Observatorio de Ecología Política de Venezuela (OEP) se complace en anunciar que ya se encuentra disponible al público el Número 1 de la Revista Territorios Comunes, Ecología y ecologismos en Venezuela, en el cual se plantean diferentes debates, miradas, diagnósticos y propuestas sobre el asunto socio-ecológico y las diferentes pulsiones, movilizaciones y disputas que se producen en torno a los bienes comunes en Venezuela.

En este dossier participan: Francisco Javier Velasco Páez, Vladimir Aguilar Castro y Linda Bustillos Ramírez, Esteban Emilio Monsonyi (En entrevista con Emiliano Terán Mantovani y Francisco Javier Velasco), Lusbi Portillo, Alejandro Álvarez Iragorry, Liliana Buitrago, Nicanor a. Cifuentes Gil y Lenin I. Parra Montes de Oca, Rafael Uzcátegui , Alicia Moncada y Aimé Tillet, Nelson Muñoz, Movimiento Semillas del Pueblo – Campaña Venezuela Libre de Transgénicos, Alejandro López González, Marc Villa, y José Ángel Quintero Weil.

Para acceder a la revista, pulse click aquí.

Presentación

Venezuela vive una crisis sin precedentes en su historia. En todos los sentidos, la economía petrolera nacional ha colapsado, precarizando seriamente la vida de los venezolanos. Del mismo modo, se han ido desarrollando formas de caotización social, disfuncionalidad de las instituciones y el escenario político se ha vuelto cada vez más tenso y violento. El conjunto de voces que se reúnen en este texto que presentamos, nos proponen pensar también otras dimensiones de este proceso, haciendo un llamado vital, urgente: la crisis que vivimos no es sólo de orden económico, político-partidista o cultural, sino también de carácter ambiental. El ya viejo modelo de desarrollo extractivourbano-importador no sólo ha dejado históricamente múltiples y significativos impactos socio-ambientales en todo el país, sino que también esta lógica depredadora ha avanzado en el período de la ‘Revolución Bolivariana’, afectando cada vez más y de manera dramática las bases de la vida ecológica de las y los venezolanos, las posibilidades de la reproducción de la vida. Una deforestación rampante avanza en los territorios del país y con ella sigue generándose mayor pérdida de biodiversidad; múltiples factores tóxicos o elementos perturbadores afectan las fuentes de agua en el occidente del país, en la región andina, en los Llanos, en la región central, en el oriente del país, en el delta del Orinoco, la región Guayana y en los cuerpos marítimos; los efectos del cambio climático se hacen evidentes en las modificaciones de los ciclos de lluvia así como en las temperaturas promedio, lo que afecta especialmente a las economías locales de campesinos y pueblos indígenas; industrias extractivas van contaminando el aire de las áreas donde se instalan, provocando enfermedades a los habitantes de ellas; la degradación avanza sobre las áreas protegidas del país al tiempo que siguen creciendo prácticas de extracción y apropiación informal e ilegal de bienes comunes –como la minería ilegal, la sustracción de madera o el tráfico de especies en peligro de extinción–; lo que en conjunto socava la soberanía alimentaria y la productividad de los ecosistemas. En este contexto crítico, el Gobierno impulsa una serie de reformas económicas enmarcadas en la Agenda Económica Bolivariana y sus 15 ‘Motores Productivos’ y lleva adelante una ampliación de las fronteras de la extracción en toda la geografía nacional, donde resalta el relanzamiento del mega-proyecto ‘Arco Minero del Orinoco’ (AMO), una amplia zona de 111.846 kms2 (12% del territorio nacional) ubicada en los estados sureños de Bolívar y Amazonas, con áreas ricas en oro, coltán, diamantes, hierro, bauxita, entre otras, que a la vez se solapan con delicadas zonas de reserva naturales y territorios indígenas. Se han anunciado negociaciones con unas 150 empresas internacionales, planteándose una nueva importancia histórica para la minería en el país.

Todas estas polémicas transformaciones económicas, con un alto impacto socio-ambiental, aparecen encuadradas en los decretos de ‘estado de excepción y emergencia económica en todo el territorio nacional’ que han sido prorrogados permanentemente desde enero de 2016 hasta la fecha, y en la ‘plenipotenciaria’ Asamblea Nacional Constituyente, instalada formalmente el 4 de agosto de 2017. Es en este momento histórico que surge la propuesta del Observatorio de Ecología Política de Venezuela (OEP), una organización que busca visibilizar y analizar las desigualdades e impactos socio-ecológicos que se generan a raíz de la transformación e intervención de la naturaleza, los ecosistemas y los territorios, comprendiendo su relación con el modelo económico dominante; al tiempo que persigue producir un registro, sistematización y difusión de los diferentes saberes y experiencias producidas en torno a las luchas ambientales en el país, la defensa de los bienes comunes naturales y los territorios, así como la promoción de modos de vida cónsonos con el cuidado de la naturaleza, la vida y las diferentes formas de comunidad. En este sentido, OEP pretende dar voces y espacios de diálogo a diversas comunidades afectadas por estos impactos socio-ecológicos, que suelen tener poca o nula presencia en los medios hegemónicos; promover la articulación y el encuentro de los variados ecologismos del país; y ofrecer insumos para la investigación académica y militante respecto a los diversos asuntos políticos y sociales de la ecología en Venezuela.

Territorios Comunes, la revista del OEP, es uno de esos insumos que persigue ampliar los aportes y contribuciones que, desde la ecología política, puedan generarse para comprender las dimensiones socio-históricas y particularidades del modelo venezolano, así como el amplio y diverso tejido socio-territorial de comunidades, pueblos, grupos sociales y organizaciones que plantan resistencias y construyen alternativas al mismo. Territorios Comunes busca así, enriquecer un campo de estudio que en Venezuela ha sido muy poco trabajado y atendido, pero que es fundamental no sólo para comprender los fenómenos de impactos ambientales en el país, sino también los flujos de energía, agua y materiales que constituyen la economía del extractivismo, así como las disputas socio-políticas y formas de vida que se desarrollan en torno a los bienes comunes para la vida. Territorios Comunes es propuesta como una revista que pueda recoger una diversidad de registros, inspirada en la comunidad de saberes que componen las luchas socio-ambientales en el país y América Latina (conocimiento científico/académico, cosmovisiones indígenas, saberes campesinos, conocimiento activista o ‘disidente’, entre otros). En este sentido, apuesta por la riqueza y complejidad que ofrecen las variadas miradas, narrativas, subjetividades y epistemologías que emergen desde las disputas territoriales venezolanas.

Presentamos aquí el primer número de la revista, un Dossier en el cual se evalúa la “Ecología y ecologismos en Venezuela: balances, desafíos y oportunidades”, con miras a construir una mirada colectiva e interpretativa sobre los ecologismos venezolanos y las particularidades históricas y actuales de su entorno eco-político, donde resalta el modelo petrolero, el rol del Estado venezolano y la instauración contemporánea de la Revolución Bolivariana (1999-actualidad). Con este número intentamos dar respuesta a la pregunta ¿dónde estamos y hacia dónde vamos respecto al tema socio-ecológico en el país?, proponiendo algunas coordenadas fundamentales para pensar y accionar respecto a estos horizontes, contribuir a generar un tejido de saberes y experiencias a nivel nacional y sensibilizar al público en general acerca de estos trascendentales temas. Cuando hacemos referencia a los ecologismos venezolanos, no apuntamos única y necesariamente a las tradicionales y conocidas organizaciones ambientalistas, sino fundamentalmente al conjunto de comunidades, pueblos, pobladores y grupos sociales que defienden las condiciones socio-ecológicas y la reproducción de la vida en sus propios territorios u otros no tan próximos, los cuales son reivindicados desde variadas perspectivas de naturaleza y códigos culturales. El conjunto de luchas socio-ambientales que brotan desde los territorios venezolanos es el reflejo de un rico mosaico de prácticas, valoraciones y resistencias desde la pluriculturalidad popular del país. El dossier será presentado en dos secciones. Una primera que busca analizar las perspectivas histórica y conceptual, y los horizontes comunes de los ecologismos populares y comunitarios en Venezuela. Posteriormente en la segunda sección, se presentan diversas experiencias y enfoques del quehacer de estos ecologismos, en los cuales se resaltan sus formas de organización y militancia, resultados de sus luchas, así como diferentes temáticas específicas que amplían las variadas miradas del tema ambiental. En primer lugar, Francisco Javier Velasco hace un recuento histórico del surgimiento del ambientalismo venezolano, mostrando su evolución hasta la actualidad y la manera cómo progresivamente el tema ambiental se va posicionando con mayor fuerza en el debate político y expande su radio de acción. Por su parte, Vladimir Aguilar y Linda Bustillos evidencian la relación existente entre extractivismo y fragmentación de territorios indí- genas, resaltando a su vez los efectos devastadores que este ha provocado en los pueblos originarios y en la no concreción de sus derechos reconocidos constitucionalmente. En el artículo de Emiliano Teran Mantovani, se describe cómo el contexto del desarrollo petrolero de los últimos cien años en el país ha tenido un rol determinante en las particularidades de los ecologismos venezolanos, al tiempo que evalúa cómo en la Revolución Bolivariana, aunque se ha enarbolado un ideal de ‘justicia social’, se mantienen viejos patrones de degradación ecológica y marginalización social que han profundizado la injusticia ambiental. El autor señala que esto ha puesto sobre la mesa una crucial contradicción ecológica para estas expresiones del ambientalismo en el país, que estaría llegando a un punto de inflexión en la actualidad. Seguidamente se presenta una entrevista al antropólogo Esteban Emilio Mosonyi, en la que este destaca la importancia de la unión del movimiento étnico-indígena con las luchas ambientales; analiza en clave histórica la valoración marginal que se le ha otorgado a los pueblos indígenas en Venezuela, con lo que polemiza con varias corrientes intelectuales; ofrece su balance sobre la Revolución Bolivariana y reflexiona acerca de los aportes de la cosmovisión indígena para un movimiento de cambio en el país.

Revista Territorios comunes N° 1

Lusbi Portillo problematiza la política indígena en el período reciente y plantea una crítica a lo que considera la colonialidad en la República Bolivariana de Venezuela, partiendo de un análisis sobre el caso de la lucha yukpa en la Sierra de Perijá. En este sentido, ofrece también desafíos para detener, a partir de las movilizaciones sociales, los ‘dos Arcos Mineros’ del país.

En el marco de lo que considera una situación de crisis humanitaria compleja en Venezuela y de graves casos de injusticia ambiental, Alejandro Álvarez Iragorry desmiente que la protección del ambiente sea contraria a los intereses de los pueblos y enfatiza que la defensa de los derechos humanos ambientales es la única garantía de la protección y conservación del ambiente. Liliana Buitrago evalúa las prácticas y narrativas de movimientos sociales venezolanos planteando que, algunas nociones y procesos estructurales de las construcciones postcapitalistas de dichas organizaciones, pueden contribuir y enriquecer los debates ecologistas, en la medida en la que están determinados por los horizontes de la reproducción de la vida. Nicanor Cifuentes y Lenin Parra reflejan las tensiones que el ‘poder popular ecológico’ tiene con el Estado-Gobierno actual, debido a las enormes dificultades que existen para concretar el avance de las reivindicaciones ecológicas contenidas en el proyecto bolivariano. En este sentido, analizan con una mirada crítica el proyecto del Arco Minero del Orinoco, sin dejar de problematizar los dilemas que se le presentan a la militancia ecologista frente las amenazas externas a la Revolución Bolivariana. Rafael Uzcátegui propone algunas reflexiones críticas a la genealogía del abordaje que hace la izquierda venezolana en relación a lo indí- gena y cómo esto se expresó en el Socialismo del Siglo XXI venezolano, generando muy cuestionables formas de dominación sobre los pueblos originarios.

Ya en relación a la segunda sección de este número, Alicia Moncada y Aimé Tillett exponen la forma cómo los pueblos indígenas de Amazonas han construido diversos procesos de lucha por sus territorios y en defensa del bosque amazónico y la reproducción de la vida, en el marco de la Revolución Bolivariana. Los autores reseñan tanto sus logros organizativos y constitucionales como los procesos de cooptación y desmovilización de los que han sido objeto, lo que ha creado conflictos internos y limitaciones. Nelson Muñoz presenta una cró- nica desde la acción-reflexión ecológica partiendo de las luchas ambientales contra la expansión del carbón en la Sierra de Perijá, en el estado Zulia. De esta forma, describe cómo se van consolidando los métodos y enfoques de sus organizaciones, cómo van fortaleciendo sus movilizaciones, desde el momento que surge esta explotación hasta la llegada de la Revolución Bolivariana.

El Movimiento Semillas del Pueblo expone su experiencia desde el año 2012 para la construcción de la propuesta innovadora de Ley de Semillas, aprobada por la Asamblea Nacional en el año 2015. Esta organización destaca cómo esta ley es única en la región y el mundo, en la medida en la que propone una ruptura profunda con el modelo hegemónico de producción capitalista al plantear una concepción no mercantilizada de la semilla y dar reconocimiento y validación a los modelos consuetudinarios de producción de las mismas

Alejandro López analiza el problema del cambio climá- tico en Venezuela y su relación con la energía y el modelo extractivista. Destaca cómo este fenómeno no sólo afecta la vida de numerosas comunidades rurales e indígenas, sino también incide en el incremento del consumo eléctrico nacional, agudizando la crisis del sector. Reivindica el desarrollo de las energías renovables en contraposición al modelo extractivista y de explotación del carbón y otros combustibles fósiles, aunque subraya la necesidad de no olvidar que el patrón de degradación ecológica está determinado por las desigualdades producidas por el propio sistema mundial.

El sociólogo y cineasta Marc Villá hace un breve recorrido por la producción de cine y documental en Venezuela respecto al tema ambiental, analizando la poca difusión de este tipo de lenguajes y enfoques, a pesar de ser un país signado por la explotación petrolera y con tantos conflictos ambientales y energéticos. Por último, José Quintero Weir narra la historia del Lago de Maracaibo, vista desde la cosmovisión del pueblo indígena añuu, mostrando cómo se han contrapuesto dos formas de ver el mundo. En este sentido, pone en juego la distinción entre el petróleo y el ‘mene’, y cómo la progresiva destrucción del lago precisamente ha implicado la aniquilación de los añuu.

Esperamos que este conjunto de miradas, historias, reflexiones y experiencias puedan enriquecer, inspirar y contribuir en cualquier modo a todos los procesos que tributen a la defensa y reproducción de la vida. Hay mucho, mucho por hacer.

 Índice y artículos en web:
 Fuente: http://www.ecopoliticavenezuela.org/2018/01/23/lanzamiento-del-no1-de-la-revista-territorios-comunes/
Comparte este contenido:
Page 159 of 402
1 157 158 159 160 161 402