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Ser maestro, en nuestros días, no es profesión fácil

17 de mayo de 2017 / Fuente: https://compartirpalabramaestra.org

Por: Paola Pachón

Los docentes en nuestro país tienen ingresos de hasta menos de un salario mínimo. Sí, parece mentira pero es real. 

Existen muchísimas razones por las que 35 de 38 estudiantes, (cifras obtenidas en mis grupos de clase, aulas no tan grandes, la realidad es otra) deciden no ser docentes: quizá una de las principales es por lo económico. Los docentes en nuestro país tienen ingresos de hasta menos de un salario mínimo. Sí, parece mentira pero es real.

Cuando se está buscando empleo recibes ofertas que oscilan entre los $500.000 a $600.000 pesos, y peor aun cuando lees el perfil que buscan. Un día encontré una oferta de docente de básica con énfasis en inglés, con dirección de curso, jornada laboral de 6:30 a 4:30 pm, 2 sábados al mes hasta el mediodía, con estudios de maestría preferiblemente y con un sueldo de $600.000 pesos.

Sí, con ese sueldo. La verdad, me sentí terrible al leer dicha oferta porque cómo es posible que te ofrezcan un sueldo con ese valor, con todas las exigencias posibles, con un horario y carga académica difíciles, en fin. Pero infortunadamente es así. Aunque, pensándolo bien, no sé qué es peor: quien hace la oferta o quien la acepta.

Es comprensible que frente a tanta necesidad muchos profesionales en nuestro oficio por desespero económico acepten algo así y dejen de lado tanto sacrificio que se tuvo que pasar durante 5 años o más para obtener el título.

Lastimosamente, cuando alguien acepta esas condiciones, todos quedamos vulnerables a recibir una oferta así y por eso muchos de nosotros tardamos en obtener un empleo que se ajuste a nuestra necesidad económica y perfil profesional.

No obstante existen ofertas muy buenas pero los obstáculos para adquirirlas son los años de experiencia que se debe tener, la edad, el nivel de estudios que exigen como tener una publicación, una especialización, maestría, haber vivido en un país extranjero, manejo de una o dos lenguas,  jefatura de área o coordinación.

Cuando digo obstáculos no exagero, es la palabra apropiada porque volvemos a lo mismo, muchos de nosotros no podemos tener acceso a todo esto por cuestiones económicas, algunos o en su mayoría tenemos un hogar, una familia que mantener, hijos, entonces son factores que retrasan  el poder obtener un título o reconocimiento aún mejor aunque del todo lograrlo no es imposible.

Muchos dirán puede que tenga razón aunque esos no son los únicos obstáculos que se presentan en  nuestra profesión, también hay otros detalles, por ejemplo, cuando por fin se encuentra un trabajo que más o menos se adapta a lo que necesitamos, hay factores como el ambiente laboral que de una u otra manera afectan el desempeño de una comunidad educativa que sólo quiere ejercer su trabajo apropiadamente, ya que muchos de los colegas con los que trabajamos por el hecho de hacer más, hacerse notar hacen menos, dañan la imagen del otro, están pendientes de lo que el compañero hace y si no es de su agrado comienzan a manifestarlo con comentarios que no son de un profesional, juzgan su quehacer docente, en eso no son críticos constructivos, hacen críticas destructivas, que tristeza; también cabe anotar que muchas voces son silenciadas por la presión de grupo, quién lo creyera, adultos profesionales que prefieren callar, algunos para evitar inconvenientes ya que pese al estar rodeados de colegas a veces es mejor no entrar en discusiones que no llegarán a ninguna parte, otros simplemente deciden mantenerse alejados de malos entendidos, suele ser la mejor opción muchas veces pero no deberíamos optar por la indiferencia.

Colegaje por lo visto en muchos lugares no existe, qué tristeza que en lugar de trabajar en común por una educación mejor, se vaya a trabajar por criticar quién trabaja mejor o peor para dar quejas a los directivos de lo sucedido.

Ya que hablamos del ámbito económico y laboral, hablemos del social conformados por los padres de familia y cercanos que tienen otras profesiones.

Atender a padres de familia sí que es un desafío, es muy complicado poder entablar un diálogo con alguno ya que usualmente hay por menores de por medio; cuando se cita a un padre de familia es porque algo no anda bien con su hijo o hija y  aquí aparece la indisposición para esa citación.

En mi caso no recuerdo haber contactado a un padre de familia para felicitar a su hijo o hija, a menos que sea para entregar informe de periodo y su hijo deba recibir elogios. En fin, es muy cierto que en nuestra cotidianidad encontramos todo tipo de padres, como el que pese a que su hijo se distinga por ser el no mejor estudiante ni académica ni convivencialmente, lo defiende a capa y espada, para estos padres, siempre los docentes tenemos a su retoño entre ojos y queremos hacerlo perder el año, nunca  le permitimos el desarrollo de su libre expresión etc.

Algunos por ejemplo, nunca atienden ni una llamada por varias razones, nunca asisten , nunca escriben, nada de nada,  siempre fueron como los papás del chavo del 8 durante todo el año; otros por el contrario desean razón de todo, cuestionan todo, critican todo, están encima  a la entrada y salida, bombardean de preguntas, la plataforma está llena de sus quejas, sugerencias, reclamos  de una página o más y pretenden que se les conteste a la hora que sea, no importa si es el horario o no de atención a padres o fin de semana,   en serio , asfixian por Dios!

Por último, los pocos pero más queridos los padres que en verdad merecen que uno saque un poco de su tiempo, aquellos que en verdad valoran lo que hacemos por sus hijos a diario, los que con un saludo cordial y un gracias te hacen sentir que estás haciendo lo correcto, están atentos a colaborarte así sea por interés pero se hacen sentir de buena forma, aceptan recomendaciones y están pendientes de sus hijos, esta clase de padres debería existir más ya que si fuésemos un equipo la educación de sus hijos sería más apropiada.

Ahora bien, cuando en nuestro contexto social decimos que somos docentes… Ay Dios, es como si fuéramos quién sabe qué, somos criticados y burlados por nuestro salario, “un ingeniero, abogado, político etc. gana mucho más y no tiene que aguantar tantas cosas” así se refieren a nosotros qué tristeza y pues puede que tengan razón de alguna manera pero nosotros tenemos beneficios que otros no tienen por ejemplo, nuestro horario no es tan de oficina aunque depende del lugar donde laboremos, también los que tenemos familia tenemos la oportunidad de compartir vacaciones  con nuestros hijos dentro del mismo periodo escolar, no terminamos la jornada con los ojos cuadrados frente a un computador, no tenemos reuniones de gerencia que pueden durar sábado y domingo, aunque muchas veces empleamos nuestro fin de semana en planeación o calificaciones.

Quisiera cerrar este escrito con lo siguiente, he escrito muchas cosas respecto a mi profesión y estoy cada vez más convencida que no me veo haciendo otra cosa , esto es para lo que nací, lo que amo hacer, lo que soy, lo que me motiva a diario para afrontar adversidades como las que mencioné anteriormente , amo ser docente porque tenemos la habilidad de transformar vidas,  de darnos a querer y odiar al mismo tiempo, dejamos en nuestros estudiantes recuerdos buenos y otros no tantos, lecciones de vida, lecciones de matemáticas, lenguaje o filosofía que aplicaran en sus vidas quizá sin darse cuenta.

Puedo decir firmemente que somos más valiosos de lo que muchos creen, quizá no tengamos la mejor posición económica para vestirnos con ropa de marca o poder manejar un auto de último modelo pero tenemos la sencillez y humildad para tocar corazones, y en muchas ocasiones gracias a esto fuimos también padres, madres, tíos, doctores,  psicólogos, cupido…

Colegas, compañeros de lucha, sólo me queda por decir gracias porque pese a que hay tantas cosas por las que debiéramos desfallecer o decidir cambiar de profesión no lo hacemos, seguimos en pie anhelando un mundo mejor, y esto no es fácil, cada día con cada avance nos espera un nuevo reto pero podemos con todo, somos más capaces y sabios cada día.

Mis respetos y mi más fiel agradecimiento.

Fuente artículo: https://compartirpalabramaestra.org/columnas/ser-maestro-en-nuestros-dias-no-es-profesion-facil

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Creatividad y cartografía un recorrido personal

17 de mayo de 2017 / Fuente: https://compartirpalabramaestra.org/

Por: Manuel Alejandro Herrera

Clases disruptivas y dinámicas siempre dejarán resultados positivos, tanto en el docente como en el estudiante.

Confieso que era de aquellos que no descubrían potencialidades ni ventajas en la espontaneidad, al contrario seguía un frígido esquema en el ejercicio profesional y académico que trasgredía incluso a mi vida cotidiana. Como una maquina vieja pero que aún funciona exigía una rutina que con el más mínimo cambio podría llegar a desajustarse, por pequeños momentos olvidaba que los seres humanos estamos dotados de la capacidad de crear y recrear objetos e ideas, esta capacidad innata que denominamos creatividad exige condiciones que le permitan desarrollarse y personas dispuestas a potencializarla ya que “la creatividad no es una cualidad de la que estén dotados particularmente los artistas y otros individuos, sino una actitud que puede poseer cualquier persona” (Esquivias S, 2004. 4).

Que la creatividad está articulada a la educación y al proceso de enseñanza y aprendizaje no está en discusión, sin embargo es necesario reconocer que las practicas docentes en ocasiones se encuentran limitadas a zonas de confort en las que el docente se estaciona y permanece de manera consiente para evitar nuevos retos y hacer mucho más “cómoda” su práctica pedagógica, corriendo el riesgo de caer en lo que se ha denominado la parálisis paradigmática “que se caracteriza por la tendencia a la perpetuación de metodologías y didácticas, a la repetición mecánica de contenidos, al temor a la curiosidad y cuestionamiento”  (Quiñones, Paralisis paradigmatica y su incidencia en el fluir de la creatividad en contextos educativos, ?).

El riesgo de caer en esta parálisis y algunas consideraciones profesionales sustentadas en apuestas teóricas a las que me acerque durante mi formación de licenciado me llevan a cuestionarme en los momentos en los que está por terminar mi primer año laboral, y son la motivación para evitar determinadas prácticas y así potenciar las posibilidades y talentos de mis estudiantes sin detenerme en sus debilidades como tal vez pudieran hacerlo mis profesores del colegio.

Algunos de esos elementos inhibidores de la creatividad en el salón de clase son los estereotipos y prejuicios que dominan el discurso docente ya que “la práctica prejuiciosa de raza, clase, genero, ofende la sustantividad del ser humano” (Freire, P, 2004. 17) y genera emociones y sentimientos que influyen en el rendimiento académico de cada estudiante, sobre todo cuando es el docente quien se considera poseedor exclusivo del conocimiento, porque “no se puede respetar el pensamiento del otro, tomarlo seriamente en consideración, someterlo a sus consecuencias, ejercer sobre él una crítica, válida también en principio para el pensamiento propio, cuando se habla desde la verdad misma, cuando creemos que la verdad habla por nuestra boca” (Zuleta, E. 1980)

Una herramienta que permite reconocer estas “malas prácticas pedagógicas” que recibiera en la escuela y que quisiera evitar en mi labor, es la cartografía social  que “se soporta sobre la noción de territorio, entendido desde una perspectiva de la complejidad, como el espacio socializado y culturizado está constituido por múltiples dimensiones interrelacionadas entre sí” (Red Académica, 2012). Para el caso de mi exploración personal la cartografía me permite desde una representación simbólica de mis territorios personales  identificar experiencias, personajes y situaciones que fueron potencializadores o inhibidores de mi proceso académico y creativo.

Asumir la cartografía como una opción para la sensibilización y la evocación de situaciones relacionadas con la creatividad en el que fue mi contexto escolar me permite proponer una dinámica grupal que sirve para la reflexión profesional, mientras reconstruyo situaciones personales que fueron limitantes y que hoy en día luego de algún elemento que reforzó mi desarrollo me permitieron dejarlas atrás o que por el contrario dejaron una huella nemónica que aún persiste.

Estoy seguro que este tipo de actividades no solo serviría para ser trabajada de manera individual o con el grupo de docentes sino que además puede llevarse al salón de clase, someterla a la creatividad de los chicos y permitirles a ellos representar en un espacio dominado por el respeto y la crítica constructiva una personificación de sus profesores para que estos evidencien como algunas palabras o acciones han generado desmotivación en sus estudiantes.

Bibliografía

  • Esquivias Serrano, M. (2004). Creatividad: Definiciones, Antecedentes y Aportes. Revista Digital Universitaria, 5(1).
  • Freire P. (2004). Pedagogía de la autonomía. Sao Paulo: Paz e Terra SA.
  • Quiñones, A. (?). Paralisis paradigmatica y su incidencia en el fluir de la creatividad en contextos educativos. En A. Quiñones, Cartografia de la Creatividad (pág. 4).
  • Quiñones, A. (2016). Cartografia: Un encuentro con la creatividad. En A. Quiñones, Cartografia de la creatividad (pág. ?). Bogota: Universidad Distrial Francisco Jose de Caldas.
  • Red Académica. (2012). ¿Y qué es eso de la cartografía social? 09 de Diciembre de 2016, de Red Académica Sitio web: http://www.redacademica.edu.co/archivos/redacademica/proyectos/ddhh/auto…
  • Zuleta, E. (1980). El elogio de la dificultad. 09 de Diciembre de 2016, de Universidad Tecnológica de Pereira Sitio web: file:///C:/Users/manuelhome/Desktop/el-elogio-de-la-dificultad.pdf

Fuente artículo: https://compartirpalabramaestra.org/columnas/creatividad-y-cartografia-un-recorrido-personal

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Innovación como agenciamiento educativo comunitario

17 de mayo de 2017 / Fuente: https://compartirpalabramaestra.org/

Por: Alexander Ballén

Una propuesta de la categoría «Agenciamiento educativo comunitario», para movilizar la potencia de las comunidades escolares.

Las propuestas de la Secretaria de Educación de Bogotá y el IDEP para construir la Red de Innovación del Maestro ha abierto una interesante discusión al interior de las redes de docentes investigadores del distrito, quienes incluso ya han entregado a los directivos del nivel central sus inquietudes y propuestas. Uno de los aspectos más polémicos en esta discusión es el que se refiere a la concepción de Innovación educativa desde la cual se abordará el trabajo en estos centros.  La pregunta no es para nada fácil de responder por cuanto la Innovación educativa ha tenido una serie de usos nocivos tales como el de la trivialización, la tecnofiliación y la tecnocratización que los maestros mismos han señalado.

a.     Trivialización: en cuanto se ha dado en calificar como Innovación a cualquier modificación en la práctica de los docentes a manera individual, lo que hace que no esté claro la naturaleza y el alcance verdadero de la innovación educativa.

b.     Tecnofiliación: en tanto se hace coincidir el uso de las TIC con la Innovación educativa, haciendo que esta quede reducida a una pura operación instrumental que deja de lado otros factores que permitirían una verdadera trasformación educativa.

c.     Tecnocratización: en cuanto la Innovación se vuelve un asunto puramente técnico que refiere a la construcción de modificaciones dictaminadas por técnicos que no tiene en cuenta el empoderamiento de las comunidades educativas.

Estos y otros usos polémicos hacen que hoy día resulte muy relevante generar una discusión amplia sobre la concepción de Innovación educativa que deberían privilegiar los centros de innovación del maestro y consecuentemente, sobre las implicaciones que para el magisterio y las comunidades educativas tendría esa elección teórica.

Agencia, innovación y comunidad educativa.

En el último año, junto con algunos docentes investigadores pertenecientes al Nodo de pensamiento pedagógico contemporáneo de la Red distrital de Docentes Investigadores hemos estado desarrollando un ejercicio de apertura y tolerancia académica que nos ha permitido utilizar diversas posturas filosóficas y políticas a fin de pensar una categoría:  Agenciamiento educativo comunitario. Esta categoría como lo explicaremos en adelante, nos pareció muy interesante para movilizar la potencia de las comunidades escolares en su lucha por la autonomía, el bienestar y la consecución de una educación más a fin con sus problemáticas, necesidades y deseos.

Este interesante ejercicio académico inició con los esfuerzos por comprender la categoría de agencia que tiene una gran potencia para explicar los efectos de la innovación en las comunidades educativas. Partimos de la consideración que hace Andrea González según la cual, en la actualidad se han venido construyendo nuevas perspectivas que analizan la acción de los sujetos y las comunidades desde un distanciamiento de la idea del sujeto trascendental propuesto por la filosofía moderna. Estas perspectivas conciben la acción como aquella actividad que se desarrolla en una trama de relaciones que se ponen en movimiento hechos y discursos de los seres humanos (Hannah Arendt).

Este carácter novedoso de la acción trastoca el orden o contexto normativo en el cual deviene (José Ema López), puesto que cada individuo trae consigo un milagro al mundo. De esta manera, las acciones se debaten entre lo posible y lo imposible, es decir, su existencia cae en un espacio no necesario, no natural pero que por su carácter múltiple permite la subversión. Esta noción de acción se amplía con la idea según la cual la agencia no es propiedad de un individuo sino es una interrelación de elementos de la realidad, de ahí que la responsabilidad no caiga exclusivamente en un sujeto, sino en la intersección o conexión de acontecimientos, agentes, prácticas, objetos y deseos, entre otros. (Deleuze y Guattari).

La agencia o su ejercicio: los agenciamientos permiten poner en funcionamiento las capacidades que residen en las personas y los colectivos humanos para lograr aquello que desean introduciendo efectos de novedad en los órdenes establecidos al interior de los territorios que habitan. Esto por supuesto, nos lleva a pensar la innovación como un agenciamiento de las comunidades educativas en su búsqueda por introducir la novedad necesaria que permita transformar los problemas de la educación.

Resumiendo, un Agenciamiento Educativo Comunitario (AEC) es una capacidad/acciónejercida por la comunidad educativa en búsqueda de su mejoramiento, refiere a un tipo específico de acción política, a partir de la cual las capacidades residentes en la comunidad se ponen en acción para introducir elementos de novedad que a su vez disparan trasformaciones subsecuentes en estos colectivos humanos.

Ahora bien, pensamos que no cualquier capacidad/acción podría entenderse como AEC, pues, para introducir una novedad capaz de modificar un sistema, es necesario que la comunidad realice una serie de operaciones como las de concientización crítica, deconstrucción, resignificación y reconstrucción que la dotan de la potencia necesaria para introducir novedad y hacer que esta perdure generando los efectos deseados. He aquí una relación íntima entre agenciamiento e innovación. En sentido lato, se habla de innovación como un cambio que es capaz de ser introducido de manera sostenible en el tiempo en el área en el cual es producido. Por eso, hablar de innovación educativa refiere no solo a la producción de ideas (creatividad), pedagógicas o didácticas interesantes o de inventos (creaciones didácticas), sino, sobre todo a procesos que sean capaces de generar alternativas de solución a problemáticas educativas que demuestren su capacidad para introducir novedad y encontrar sostenibilidad en el tiempo.

Hugo Mauricio Rodríguez explica la concientización crítica como requisito de un AEC desde una perspectiva fenomenológica al decir que es necesario acudir a la experiencia fenomenológica y hermenéutica. La primera implica realizar una descripción del sentido mismo de la experiencia, dejando a un lado toda mediación teórica o conceptual, ya desde la hermenéutica se configura al sujeto dentro del contexto social e histórico.  “La experiencia hermenéutica tiene que ver con la tradición. Es esta la que tiene que acceder a la experiencia. Sin embargo, la tradición no es un simple acontecer que pudiera conocerse y dominarse por la experiencia, sino que es lenguaje, esto es, habla por sí misma como si fuera un tú” (Gadamer. 2003. p.435). En consecuencia, las comunidades educativas se constituyen en la medida en que existen sujetos con la capacidad de actuar y comprender el entorno en el que existen. De acuerdo a ello, la formación de la conciencia crítica, esto es, la capacidad de pensar y actuar por sí mismo, necesita ser descrita desde la experiencia del sujeto con los otros sujetos.

A la concientización crítica le suceden procesos de deconstrucción como lo explica Adriana Rubiano , teniendo en cuenta que deconstruir en el ámbito de los educativo significaría aprender a cuestionar, desde las bases, pero en sus propios términos, a la realidad misma, apartándose por fin de la tendencia a darla por hecha, para entrar a concebir unos sujetos que puedan aportar a la constitución de la misma, porque son capaces de encontrar otro tipo de relaciones no solo entre significantes, sino en la forma misma de concebir lo real y que llevaría a que los sujetos se conviertan en agentes desencadenantes de otro tipo de relaciones y efectos que, sin embargo, no pretendan encapsular la verdad, pues ésta, según palabras de Derrida (1998) siempre escaparía a nuestros intentos inútiles por diseccionarla entre nuestros oscuros “laboratorios sociales”. Su inutilidad residiría en que lo real siempre escaparía al juego de los significantes, siempre es aquello que deambula, se escurre o toma otra forma ante nuestra mirada atónita. Lo interesante para el proceso deconstructivo reside en que si no es posible encerrar la realidad en un juego de significantes y de relaciones normalizadas por los agenciamientos educativos vigentes, también será posible modificar esas relaciones desde el fondo y crear así otro tipo de agenciamientos que redunden en prácticas materializables. Sin embargo, no puede esperarse que en este juego deconstructivo las relaciones entre significantes den lugar a ciertas verdades que simplemente vengan a remplazar a las anteriores; el sentido de toda deconstrucción tendrá que ser consciente de que todo el tiempo se estarían creando otras posibilidades de relaciones y efectos entre los cuerpos, las ideas y las prácticas, o los agenciamientos de los que hablaba Deleuze (2013) y que nos recuerdan que en el campo de lo social, y , específicamente de lo educativo, las piezas con que se juega todo el tiempo se van trasformando y, que por tanto, siempre se debe estar presto a la deconstrucción y al cambio constante en que el sentido se va desplazando a través del lenguaje.

Alcanzar una conciencia crítica de la realidad y deconstruirla no es aún suficiente para hablar con propiedad de un agenciamiento educativo comunitario efectivo y sostenible, a este respecto Andrés Cifuentes explica que para que una institución educativa llegue a ser una comunidad educativa agenciada es preciso resignificarla, es decir, darle un nuevo significado a aquello que la constituye como tal: su horizonte institucional, sus acuerdos de convivencia, su organigrama, etc. Y la fuente de dicho proceso, insiste él, la podemos encontrar en su thymos, o lo que es lo mismo, en sus energías políticas y morales fundacionales[1]: la idea de progreso subyacente a todo proyecto educativo y, la actualidad de su horizonte institucional, que hace del ´nosotros´ un agente participativo estructuralmente tendiente a la acción. Todo esto bajo la configuración del contexto educativo como un mundo homeotécnico (solidario, libre y cooperativista) fundado sobre una ética acrobática, donde el cuidado de sí y el cuidado del otro son la norma de toda relación interpersonal dada en este ámbito racional.

Finalmente, reflexionando el cierre del ciclo que plantean los agenciamientos educativos comunitarios, Andrés Santiago Beltrán propone romper la jerarquía de los significados fundacionales de la escuela y agenciar espacios-tiempo otros: «heterotopías» (Foucault, 1999), como apuesta de “reconstrucción”, lo cual no implica podar el árbol institucional, ni minar su raíz, sino alejar la mirada y contemplar el bosque en busca de la hierba que albergar el motor de la transformación, pues es rizomática: desborda el sujeto de enunciación y la acumulación de cosas y saber cómo lógica de reconocimiento social occidental. Desde prácticas localizadas en el ámbito escolar, es posible crear o potenciar otros campos de batalla por el reconocimiento. Esta perspectiva, permite pensar que la escuela no es sólo negación, sino la posibilidad de la liberación. “En el corazón de un árbol, en el interior de una raíz o en la axila de una rama, puede formarse un nuevo rizoma” (Deleuze; Guattari, 2002, p. 20)

Innovación Social Educativa como AEC

Cuando la Innovación educativa es vista como Agenciamiento Educativo Comunitario,  cobra una nueva y más potente dimensión que la hace comprender como una herramienta, para producir incremento de agencia en los miembros de la comunidad educativa y por su puesto en toda ella misma lo que le permite, no solo enfrentar la transformación positiva de sus problemáticas educativas sino ganar en autonomía y por tanto en la capacidad de decidir sobre su destino.

La Innovación Social Educativa (ISE) (Acosta:2016), es una metodología novedosa con la que hemos venido trabajando los procesos de innovación en las comunidades educativas desde una postura que supera los efectos de la trivialización, tecnofilia y tecnocratización en las que se le ha querido hacer caer.  La ISE tiene como propósito central usar la innovación como herramienta para la generación de agencia en las comunidades educativas y por tanto desde el enfoque de los AEC plantea cuatro grandes procesos:

  • Concientización crítica: busca hacer que las comunidades educativas cobren conciencia de sus potencias/falencias. En este proceso se desarrolla una serie de acciones para visibilizar las problemáticas educativas existentes y priorizar una a fin de innovar sobre ella.
  • Deconstrucción: busca desagregar los elementos constitutivos del problema, develar como funciona y desnaturalizar su existencia. Incluye acciones de caracterización profunda que permiten una comprensión profunda de la problemática sobre la que se está innovando.
  • Resignificación: busca crear nuevas lógicas de encuadre del problema para desde allí emerjan ideas creativas y novedosas. Plantea acciones como el renfoque y la ideación disruptiva.
  • Reconstrucción: busca generar posibilidades para poner a prueba la efectividad y sostenibilidad de la Innovación. Incluye acciones de prototipado, pibotaje y finalmente la institucionalización de la innovación.

Las Comunidades de práctica innovadora en Educación

La Innovación Social Educativa en tanto Agenciamiento Educativo Comunitario plantea como proceso trasversal la comunitarización, es decir un conjunto de acciones intencionadas destinadas al fortalecimiento del tejido social con miradas a generar incrementos en la agencia individual y comunitaria.

Para echar a andar los procesos de comunitarización, la ISE contempla la organización de Las COPIES: Comunidades de práctica innovadora en educación que son una fusión entre las comunidades de práctica identidad y sentido ampliamente educadas por (Wenger: 2001) de uso ya común en el campo educativo y;  los equipos de Innovación que se vienen desarrollando en diversas organizaciones.  Combinan de forma positiva las ventajas de cada una puesto que adoptan la potencia formativa de las primeras y la efectividad de las segundas.

Las COPIES en sí mismas, son organismos autorreferentes y autopoiéticos de las comunidades educativas que tiene como fin movilizar el potencial creativo de los integrantes en sus diversos estamentos, para generar conocimiento de y sobre la comunidad a la vez que las respuestas creativas para su mejoramiento.

A modo de cierre

En los momentos en los que se escribe este texto, Bogotá se enfrenta a un desafío histórico; hacer de los Centros de Innovación del maestro un factor decisivo para impulsar radicalmente la calidad de la educación de sus habitantes y hacer de ella una Ciudad Educadora. No obstante, esto solo será posible en la medida en que la Innovación que se realice en los centros que creará la ciudad tenga la capacidad para impulsar soluciones efectivas y sostenibles a las problemáticas educativas de las comunidades escolares. Aquí, deberíamos recordar el viejo adagio que enseñaba que hay tres cosas que nunca retornan: la flecha disparada, la ofensa proferida y la oportunidad desperdiciada.

Bibliografía

Acosta, W. (2016). La innovación Social Educativa: un camino a la trasformación de las comunidades educativas. Editorial REDIPE. Cali.

Arendt, Hannah. (1996).  Entre el pasado y el futuro. Ocho ejercicios sobre la reflexión política, Traducción de Ana Poljak, Península, Barcelona, 1996.

_____________. (2005). La condición humana, Paidós, Barcelona.

Deleuze, G & Parnet, C. (2013). Diálogos: Pre-textos Ed.

Deleuze, G. (1970). La lógica del sentido. Medellín: El bote de vela Ed.

Deleuze, Guilles; Guattari, Felix. (2002). Mil mesetas. Capitalismo y esquizofrenia. España. Pre-textos.

Derrida, J. (1998). De la gramatología, Siglo XXI, México, pp. 7-10. Edición digital de Derrida en castellano.

Ema López José Enrique, Del sujeto a la agencia (a través de lo político). Recuperado el 3 de diciembre de 2016 En http://www.raco.cat/index.php/Athenea/article/viewFile/34133/33972

Foucault, Michel. (1999). Estética, ética y hermenéutica. En Obras esenciales (vol. III). Barcelona: Paidós.

Fraser, N. (2006). ¿Redistribución o reconocimiento? Un debate político-filosófico. Trad., Pablo Manzano. Ediciones Morata, Madrid.

————- (2008). Escalas de Justicia. Trad., Antoní Martínez. Herder, Barcelona.

Foucault, M. (2014). El gobierno de sí y de los otros. Curso en el College de France (1982-1983). Trad., Horacio Pons. Fondo de Cultura Económica, Buenos Aires.

Sloterdijk, P. (2011). Sin salvación. Tras las huellas de Heidegger. Trad. Joaquín Chamorro. Ediciones Akal, Madrid.

—————– (2012). Has de cambiar tu vida. Sobre antropotécnica. Trad., Pedro Madrigal. Pre-textos, Valencia.

Wenger, E.  (2001). Comunidades de práctica: aprendizaje, significado e identidad. Paidós.

Contenido original publicado en La Silla Vacía y republicado con permisos del autor.

[1] Este concepto griego es tomado de Peter Sloterdijk, para quien en el contexto social actual es un término que refiere a todos los afectos del ánimo que tienen que ver con la afirmación de sí mismos de los individuos, o lo que es lo mismo, con el valor de sus personalidades o caracteres: por lo que deben sentirse orgullosos.

Fuente artículo: https://compartirpalabramaestra.org/columnas/innovacion-como-agenciamiento-educativo-comunitario

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El profesor cierra los ojos, Vol. 2

17 de mayo de 2017 / Fuente: https://compartirpalabramaestra.org

Por: Miyer Pineda

La función de los docentes presenta muchos retos y va más allá de la enseñanza en sí.

Les confieso que cada vez que dudo de mi oficio como docente vuelvo a ciertas palabras de Borges. Me detengo en ciertas líneas y las deletreo en mi mente hasta que actúan como una droga tranquilizante; como un placebo, supongo. Cada vez que me acuerdo del salario que me pagan, o cada vez que debo soportar la intransigencia, soberbia, indiferencia, prejuicios, escasos resultados, o los sucesos macondianos, comalianos, kafkianos, etc., o mejor dicho, todo eso que sucede no solo en la escuela sino en todo lo que tiene que ver con ella, como las políticas de los gobiernos de turno, o eso que llaman con justicia el MEN (Ministerio de Educación), o esa vocación de servidumbre que es demasiado palpable en muchos jóvenes y en muchos docentes, que pregonan discursitos que solo unos pocos intentan encarnar, para sosegarme, vuelvo a Borges y a sus palabras sin sosiego:  “Nada se edifica sobre la piedra, todo se edifica sobre la arena, pero nuestro deber es edificar como si fuera piedra la arena”.

¿Esta no es la labor del maestro en estos momentos tan inhumanos en los que ese concepto ha sido degradado y sometido a la indignación y la miseria? ¿No son los maestros esa piedra que una más otra conforman la muralla, la columna, el templo del saber, a dónde llegan a humanizarse los habitantes de este país, tan ávido de dignidad, imaginación  y sabiduría? ¿No es la escuela el oasis para este desierto mediático de incertidumbre? Piedra y arena. Símbolos de una sociedad que pareciera despreciar la labor tan necesaria de quienes tenemos la obligación de recordar, que es el conocimiento una posibilidad de humanización. Alguien dirá: “El sueño de la razón engendra monstruos”, citando a Goya, para recordar que el conocimiento no es solo racionalidad instrumental, y tendrá la razón desde ese escenario. Sabemos que el conocimiento que cede al fetichismo del contenido no es más que un dato para participar en “¿Quién quiere ser millonario?”, un cascarón vacío de sentido ético, estético, axiológico, ontológico, etc. Y, sin embargo, el mismo conocimiento llevado al rigor poético despercude y oxigena el problema de lo que significa ser ciudadano en este mundo de hoy. Conocimiento y contenido sí, pero capaces de trascender e ir de la mano con el desarrollo de habilidades de pensamiento que permitan al estudiante rastrear el sentido del mismo, y su importancia para la construcción de un proyecto de nación humano.

Les confieso que cada vez que dudo de mi oficio como docente, vuelvo a ciertas palabras de Borges. Me gusta repetir la línea que dice: “La puerta es la que elige, no el hombre”. Esta línea me sirve para ser romántico. ¿Y qué maestro que se precie de tal, no lo es? ¿Acaso el maestro no fue elegido por alguna energía universal o por alguna divinidad, para levantarse cada día y compartir el asombro? El asombro de estar vivos y el asombro de pensar, de reconocer en el otro a un prójimo al que puede tocarlo la belleza del lenguaje, la belleza de los diversos infinitos que posee el saber. Por estas razones, se me hacen sospechosos, no sólo aquellos dictámenes que no surjan del aula o de intentar transmitir esa experiencia, sino de esa parcelación paulatina del conocimiento; cada vez más cátedras que parecen feudos, y que hacen discutible la posibilidad de un saber integral o interdisciplinario, y que han vuelto la escuela un territorio kafkiano y burocrático, incluso medieval.

Y luego, suponiendo que asistimos al desmantelamiento de la escuela como “territorio libre del sueño”, diciéndolo en palabras de Juan Manuel Roca, o a la destrucción de ese “tercer espacio” en el que es posible la ilusión, como lo pensó de manera bellamente radical, Rodrigo Arguello, en ese ensayo que publicó en el libro Ciudad gótica, esperpéntica y mediática (1998), entonces nos queda otro aforismo borgesiano: “Que la lámpara de un hombre se encienda aunque ningún hombre la vea. Dios la verá”.

Las estadísticas indican que en las últimas décadas han sido asesinados más de mil profesores. Otros tantos han sido amenazados, otros cientos se encuentran a merced de sus propios colegas, estudiantes o de padres de familia, otros son ninguneados por los burócratas de las secretarías de educación, o aplastados por directivos infames que más parecen adecuarse al dispositivo carcelario en sus frustradas vocaciones castrenses: les tocó ser profesores.

De eso se trata todo esto. De tener el valor civil de entrar a un espacio carcelario (uniformes, reglas, patio, fugas, alarmas, vigilantes, alucinógenos, relaciones de poder, hambre, matoneo, agotamiento del instinto y del deseo a través de la experimentación y la crueldad), para intentar hacerle entender a los “pobres condenados” (docentes, padres de familia y estudiantes) el valor de la libertad de la mano del pensamiento. Y perdonen la ironía pero sé que más de uno se verá reflejado.

Las estadísticas indican que en las últimas décadas han sido asesinados más de mil profesores. Otros tantos han sido amenazados, otros cientos se encuentran a merced de sus propios colegas, estudiantes o de padres de familia, otros son ninguneados por los burócratas de las secretarías de educación, o aplastados por directivos infames que más parecen adecuarse al dispositivo carcelario en sus frustradas vocaciones castrenses: les tocó ser profesores. Otros docentes desesperanzados y pesimistas pero con esperanza a pesar de todo, porque comprenden que el cambio se hace uno a uno, en un aula en la que ya no cabe ni un estudiante, en la que confluyen la pobreza y toda su prole de problemas (maltrato, hambre, vicios, antivalores, criminalidad, etc.), y sobre ese escenario la posibilidad de analizar nuestros espacios vitales, quizás elucubrar sentido y finalmente, pensar.

Cada vez que advierto estos y otros muchos problemas, recuerdo a Borges y sus palabras sin sosiego.  Y luego pienso que siempre alguien escucha al maestro, y que por esos que escuchan, el maestro se levanta y se prepara, mientras al otro lado de la ciudad el estudiante se levanta y se prepara, a pesar de la miseria y a pesar del mundo, porque ese es el maestro que se acerca a lo que se merece, y entonces vale la pena ir al “campo de concentración” a escucharlo. Moraleja: El estudiante debería pensar que en ocasiones tiene el maestro que se merece.

7.  Feliz el que no insiste en tener la razón, porque nadie la tiene o todos la tienen.

15.  Que la luz de una lámpara se encienda, aunque ningún hombre la vea. Dios la verá.

33.  Da lo santo a los perros, echa tus perlas a los puercos; lo que importa es dar.

40.  No juzgues al árbol por sus frutos ni al hombre por sus obras; pueden ser peores o mejores.

41.  Nada se edifica sobre la piedra, todo sobre la arena, pero nuestro deber es edificar como si fuera piedra la arena…

Ese es el poder del asombro a través del lenguaje, a través del poder de la palabra y del diálogo, propicias para ese desierto de país en el que al año violan a más de 24.000 niños, en el que hay casi 7 millones de desplazados, en el que asesinan a más de 40 seres humanos cada día, en el que mueren niños de hambre o de sed. Este panorama nos recuerda a los maestros que a través de nosotros se defienden la dignidad y la democracia, y que esa función social debe ir de la mano de la imaginación y del asombro porque ya Borges lo había dicho en uno de sus cuentos: la falta de imaginación es lo que mueve al hombre a la barbarie.

MIYER FERNANDO PINEDA: Licenciado en Ciencias Sociales, Magister en Historia y Doctorando en el doctorado en Lenguaje y Cultura en la UPTC. Profesor del colegio Quebec y catedrático de la UPTC Duitama.

Fuente artículo: https://compartirpalabramaestra.org/columnas/el-profesor-cierra-los-ojos-vol-2

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Humanidades, la unidad en un mundo de saberes fragmentados

Por: Miguel Angel Belmonte

Director del Departamento de Educación y Humanidades de la Iniversitat Abat Oliba CEU (Barcelona)

Hojeando un diccionario visual de alemán para principiantes, encontré el clásico término Geistenwissenschaften (literalmente, ‘ciencias del espíritu’) para traducir la palabra castellana Humanidades. Sin necesidad de remontarse a la influyente Introducción a las ciencias del espíritu (1883) de Wilhelm Dilthey ni a toda la polémica en torno al estatuto epistemológico de las ciencias de la naturaleza y las ciencias humanas, sí que conviene recordar la advertencia que este pensador alemán hacía respecto al peligro de subordinar el saber humanístico al científico-natural: «La potencia creciente del conocimiento de la naturaleza tuvo como consecuencia para ellas [las ciencias sociales e históricas] una nueva relación de subordinación, no menos opresora que la antigua», refiriéndose a la subordinación medieval de los saberes humanos a la teología. Esta resistencia de espíritus ilustrados ante el apabullamiento con que las ciencias naturales pretenden someter a los saberes humanísticos viene siendo una constante hasta la actualidad.

Fue Ortega y Gasset quien introdujo en el ámbito hispánico esta cuestión. Prologando la obra de Dilthey, señalaba el filósofo español: «Todo este conjunto enorme de labor teórica se ha llamado en Alemania ‘ciencias del espíritu’ o ‘culturales’, y en Francia, ‘ciencias morales y políticas’. Estas denominaciones son de las más desdichadas entre los nombres de las disciplinas científicas, que, por caso curioso, no han tenido nunca buena suerte al ser nombradas (nota: el hecho es tan general que, por fuerza, se oculta tras él una causa histórica de rango categórico referente al origen y evolución de la ocupación teórica en la vida humana). Yo he propuesto que se las llame sencillamente ‘humanidades’. Basta para ello ampliar el significado que la palabra tuvo en los estudios medievales y renacentistas y advertir que esta ampliación no hace sino instalar el término en el más propio y natural sentido de su acepción vulgar». Tiene razón Ortega en considerar significativa la dificultad generalizada para nombrar los estudios humanísticos. Al margen de intentos como el de Dilthey con sus «ciencias del espíritu», es indudable que en los sucesivos intentos fallidos de nombrar estos saberes refleja un cierto automatismo lingüístico por el que intentamos dignificar con las palabras algo que desestimamos en los hechos culturales reales.

¿Estamos entonces en un callejón sin salida? No. Lo que hemos de hacer es preguntarnos abiertamente acerca de cuáles son los fines de la educación. Qué es lo que valoramos y qué es lo querríamos valorar más. Si, por ejemplo, el valor de lo útil es el valor superior, entonces es absurdo preocuparse por la situación o el futuro de las humanidades. ¿Por qué? Porque si la manera de salvar las humanidades es convenciendo a la sociedad hiper-pragmática de que las humanidades son muy útiles, entonces hemos destruido la esencia de las humanidades, cuyo objeto está en la línea de los fines y no en la línea de los medios, de lo útil. Los que necesitan la utilidad para justificar su existencia son los saberes técnicos. Así, pues, hemos de plantearnos en todos los ámbitos educativos, desde el ámbito familiar hasta el ámbito universitario y la alta investigación, qué fines, qué bienes, qué virtudes buscamos. Y una vez establecidos, podremos pasar a deliberar sobre si hace falta más formación matemática, más formación geopolítica o más habilidades cibernéticas.

Se plantea entonces la objeción típicamente moderna: no nos vamos a poner nunca de acuerdo en qué fines ni qué bienes ni qué virtudes hemos de buscar, así que discutamos solo acerca de los medios… Objeción esta que no deja de ser paradójica. En especial cuando los mismos que la plantean suelen dar por bueno el fomento de la capacidad de comunicar, por ejemplo. Estimulemos la capacidad de comunicar, pero no vayamos a creer que podamos llegar a algo verdaderamente común.

Así las cosas, a menudo la defensa de las humanidades se limita a la defensa de una especie de marco escéptico en el que se han de circunscribir los avances científicos y así seguir incrementando el bienestar general. Pero entonces, de nuevo, las humanidades habrían perdido su razón de ser. Y es que solo si estamos dispuestos a plantearnos en serio la pregunta acerca de qué es el ser humano, la pregunta acerca de quiénes somos verdaderamente, tiene sentido luchar por las humanidades y su personalidad propia en el conjunto de los saberes.

Desde un sustrato cultural humanístico se puede fundar un análisis crítico de los logros o pérdidas que la sociedad del siglo XXI vaya protagonizando. Sin tal sustrato, perdemos el contacto con lo que fuimos y quedamos expuestos a cualesquiera procesos de deshumanización. Distopías literarias del siglo XX como las de Orwell o Huxley ya nos advirtieron de la posibilidad de un mundo donde los saberes técnicos hiper-desarrollados convivieran con un infierno en la tierra. El saber humanístico podría definirse, entonces, como aquel que nos proporciona una atalaya desde la que observar, comparar y juzgar los acontecimientos sin dejarse arrastrar por modas sociales, pseudo-mesianismos intelectuales o utilitarismos de cualquier especie. El saber humanístico es el que proporciona a la diversidad de los saberes una unidad que evite la fragmentación y el sinsentido de diversas áreas académicas desconectadas entre sí en una reedición de la barbarie del «especialismo» que el antes citado Ortega denunció en La rebelión de las masas.

La formación a través de la educación en estos presupuestos humanísticos requiere una superación de la pobre dualidad ciencias-letras que durante tanto tiempo ha emponzoñado la organización escolar en su raíz. Necesitamos una cultura educativa en la que se reivindique una y otra vez la urgencia de plantear las grandes preguntas acerca de la naturaleza humana, independientemente (y como presupuesto) de la formación de especialistas en las diversas áreas del saber. Un sociólogo que, por ejemplo, desestime la capacidad de la razón filosófica para discernir el significado de la vida humana, no será, a la postre, más que un mecánico al servicio de resortes de poder económicos y políticos. Lo mismo se puede decir de un filólogo, de un historiador o de un poeta. De ahí que la defensa radical de las humanidades no es meramente un conflicto entre diversos especialistas que piden más presupuesto para sus proyectos de investigación. La defensa radical de las humanidades reclama incluso a los propios humanistas profesionales que estén dispuestos a plantear, una y otra vez, la pregunta por la naturaleza humana. Pregunta que, para ser planteada de modo sincero, ha de estar formulada de tal manera que estemos abiertos a sorprendernos ante la realidad de una respuesta que se nos ofrece a nuestra mirada, liberada de prejuicios utilitaristas.

Fuente:http://www.educaweb.com/noticia/2017/04/27/humanidades-unidad-mundo-saberes-fragmentados-13920/

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Colombia, Ocde e instituciones económicas

Por: Beethoven Herrera Valencia

En el país, se critica que las leyes se promulgan sin valorar impactos fiscales, y parlamentarios se enfrentan a los equipos técnicos del Ejecutivo.

os cambios institucionales suelen ocurrir en momentos de crisis, y terminan en reformas de política económica y del sistema financiero. Por ejemplo, el sistema monetario existente se diseñó en Bretton Woods cuando la Segunda Guerra Mundial llegaba a su fin, y el establecimiento de bancos centrales independientes ocurrió después de un periodo de generalizada hiperinflación.

Una de las lecciones de la crisis del 2008 fue la necesidad de instituciones fiscales independientes (IFI) y la orientación de la Ocde sobre buenas prácticas gubernamentales ha aumentado estas instituciones. Aunque la primera IFI creó en 1936, en Bélgica, entre el 2000 y el 2010 se crearon IFI en 5 países, y entre el 2010 y el 2015, se crearon13 de los 35 países de la Ocde. Es decir, casi el 40 por ciento de las IFIs existentes en Estados miembros de la Ocde se crearon después de la crisis financiera del 2008.

La IFI más sobresaliente es la Oficina de Asistencia Técnica Presupuestal para el poder legislativo de EE. UU., de carácter técnico e independiente de apoyo al Congreso, de igual forma que ha recomendado que el Dane sea autónomo.

Dicha Oficina, nace en 1974 a raíz del conflicto entre Nixon y el Congreso, controlado por los demócratas, pues el presidente se rehusaba a ejecutar recursos que el Congreso había apropiado para proyectos importantes, como el Acta de Agua Limpia.
En ese momento, los congresistas entendieron que debían enfrentar el grave problema en su relación con el poder ejecutivo: la debilidad para soportar sus propuestas de leyes que tenían impactos presupuestales y económicos, lo cual los enfrentaba a una discusión con asimetría de fuerzas entre la Casa Blanca y el Capitolio.

En Colombia, se critica que las leyes se promulgan sin valorar sus impactos fiscales y los parlamentarios se enfrentan individualmente a los equipos técnicos del Ejecutivo, no existe una oficina técnica del Congreso y cada parlamentario tiene su Unidad de Apoyo Legislativo. Aunque no vivimos una crisis como las que condujeron a la creación de las IFI en otros países, la decisión de adherir a la Ocde nos coloca ante el imperativo de cumplir esa recomendación, y se está preparando esa decisión.

La función legislativa se beneficiaría al contar con una oficina que aporte insumos técnicos a los congresistas, de modo que soporten sus proyectos de ley con elementos de rigor técnico, y, actualmente, hay un proyecto del BID y el Pnud que prepara un proyecto de ley que conduzca a la creación la oficina de apoyo económico al Congreso de la República.Si se concreta la iniciativa, esta será de indudable utilidad, si mantiene el rigor técnico y no cae en los vicios del burocratismo clientelista.

Beethoven Herrera Valencia
Profesor U. Nacional y externado
Colaboración, Luis Alberto Rodríguez

Fuente: http://www.portafolio.co/opinion/beethoven-herrera-valencia/colombia-ocde-e-instituciones-economicas-505874

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Se cumple el ‘sueño americano’: tropas de EEUU en la Amazonia

Por Raul Zibenchi

Por primera vez en la historia tropas de Estados Unidos participarán en un ejercicio militar en el corazón de la Amazonia. Se trata del AmazonLog que se desarrollará entre el 6 y el 13 de noviembre en la brasileña Tabatinga, ciudad situada en la orilla izquierda del río Solimoes, en la triple frontera entre Perú, Brasil y Colombia.

Los ejercicios militares no tienen precedentes en América Latina. La propuesta tomó como referencia la operación de la OTAN realizada en Hungría en 2015, que desplegó 1.700 militares en una simulación de ayuda logística. Los objetivos consisten en el control de la migración ilegal, la asistencia humanitaria en grandes eventos, operaciones de paz en regiones remotas, acciones contra el tráfico de drogas y los llamados ‘delitos ambientales’.

«El lugar elegido fue Tabatinga porque queremos mostrar al mundo las dificultades de nuestra Amazonia», dijo el general del Ejército de Brasil, Guilherme Cals Theophilo. No dijo que mostrarán también los secretos mejor guardados de la región considerada el pulmón del planeta, la más rica en agua y biodiversidad. Agregó que se trata a la vez de enseñar cómo los bosques tropicales son útiles para «un debate científico y tecnológico» relacionado tanto con la paz como con la guerra.

Militares de EEUU (archivo)

Ni Siria ni Corea del Norte: ya hay otro ‘candidato ideal’ para ser atacado por EEUU

Han sido invitadas las fuerzas armadas de Colombia, Argentina, Bolivia, Perú, Ecuador, Chile, Uruguay, Estados Unidos, Panamá y Canadá. Entre los países con Gobiernos de izquierda ha sido Bolivia el primero en confirmar su participación. También ha sido invitado el Consejo de Defensa Suramericano (CDS), perteneciente a la Unasur, así como la Junta Interamericana de Defensa situada en la órbita del Pentágono.

La realización de estos ejercicios supone tres cambios importantes, dos de ellos afectan directamente a Brasil y el tercero a toda la región.

El primero es que Brasil había sido hasta ahora muy celosa en la custodia de la Amazonia. Un mensaje que circula entre militares dice: «Invitar a las Fuerzas Armadas de EEUU para hacer ejercicios conjuntos con nuestras Fuerzas Armadas, en la Amazonia, es como un crimen de lesa patria. Enseñar al enemigo cómo combatirnos en la selva amazónica es alta traición», según divulgó el periódico Zero Hora.

Nelson Düring, director de la página militar Defesnet.com.br, señala que los ejercicios son «un retroceso que confunde la inserción brasileña en asuntos internacionales». El experto en temas militares recuerda que «hasta ahora no eran aceptados militares extranjeros en el Centro de Instrucción de Guerra en la Selva (CIGS). Ahora ya tenemos norteamericanos, europeos y hasta chinos». Concluye en sintonía con las voces críticas: «Brasil debe preservar sus secretos». Los sectores nacionalistas de las Fuerzas Armadas temen que la base multinacional temporal que se establezca en Tabatinga, pueda convertirse en permanente, como sucedió en Hungría en 2015.

En segundo lugar, AmazonLog 2017 refleja una inflexión en las relaciones militares entre Brasil y Estados Unidos. En 1952 se firmó un acuerdo militar entre Brasil y Estados Unidos, rubricado por los presidentes Harry Truman y Getulio Vargas, para el intercambio de armamento por minerales estratégicos como uranio. Era un momento de fuertes presiones de Washington sobre Brasilia para impedir el desarrollo de tecnología nuclear propia.
El 11 de marzo de 1977 el presidente militar Ernesto Geisel denunció el tratado, ya que el Gobierno de Jimmy Carter interfirió en los asuntos internos con el argumento de la defensa de los derechos humanos. En 1989 esa distancia se incrementó.

Joao Roberto Martins Filho, expresidente de la Asociación Brasileña de Estudios de Defensa, señala que «desde el fin de la guerra fría Brasil se separó de EEUU, que era un aliado estratégico y de repente comenzó a actuar como superpotencia única. Eso provocó una reacción de hiperdefensa de la Amazonia».

​Con la llegada de Donald Trump y de Michel Temer a la presidencia de EEUU y Brasil, las relaciones están cambiando. Los ejercicios conjuntos de noviembre son apenas la parte más visible de un acercamiento en el área de defensa. En marzo el jefe del Comando Sur, Clarence K. K. Chinn, fue condecorado en Brasilia con la Medalla al Mérito Militar y visitó las instalaciones del Comando Militar de la Amazonia donde se realizarán los ejercicios AmazonLog.

La principal empresa brasileña de defensa, Embraer, cerró un acuerdo en abril con la estadounidense Rockwell Collins en el área aeroespacial y el Comando de Ingeniería, Desarrollo e Investigación del Ejército de EEUU abrió una oficina en Sao Paulo, para profundizar en las relaciones de investigación e innovación de tecnologías de defensa. El 3 de abril el Ministerio de Defensa de Brasil anunció que está desarrollando un «proyecto de defensa» conjunto con EEUU, según informó CNN.

Por último, se registra un paso atrás en el proceso de integración regional. En el marco de la Unasur, espacio sudamericano en el que no participa Estados Unidos, se creó en 2008 el Consejo de Defensa Suramericano (CDS) con el objetivo de consolidar una zona de paz suramericana, construir una visión común en materia de defensa y articular posiciones regionales en foros multilaterales.

El CDS apuntaba hacia la autonomía regional en materia de defensa y consolidaba la ruptura con el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca (TIAR) creado en 1947, que refleja la dominación de EEUU sobre el continente. El TIAR se deslegitimó durante la guerra de las Malvinas (1982) ya que EEUU apoyó a Inglaterra. Con los años, varios países se salieron del TIAR: Perú, México, Bolivia, Cuba, Venezuela, Nicaragua y Ecuador.

Ahora el nuevo Gobierno de Brasil invita a los ejercicios AamazonLog tanto al CDS como a la Junta Interamericana de Defensa que pertenece a la OEA. De ese modo, se legitiman los espacios en los que participa el Pentágono y se diluyen los espacios propios de la región sudamericana. Un juego nada sutil en momentos críticos en que la región necesita establecer distancias con Washington y afirmar su indentidad.

Fuente:https://mundo.sputniknews.com/firmas/201705101069057983-america-latina-washington-militares/

 

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