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Calidad docente

Por: El País. 

 

Más tiempo en el aula no es garantía de mejor educación

Los resultados educativos de un país dependen de muchos factores, pero la preparación y composición del profesorado es uno de los más importantes. La plantilla de docentes del sistema educativo español ha sufrido en la última década un envejecimiento acelerado que hace que en estos momentos dos de cada tres profesores tengan más de 40 años. La crisis ha jugado un papel determinante, porque a partir de 2010 obligó a reducir la tasa de reposición del profesorado, primero al 30% y en 2012 al 10%. Eso significa que a partir de ese momento por cada 10 profesores que se jubilaban o salían del sistema, solo se contrataba a uno. A esto hay que añadir la supresión de los incentivos que había para la prejubilación a los 60 años.

El resultado es que mientras la OCDE recomienda que haya un profesor menor de 30 años por cada dos mayores de 50, en España esa relación es de uno a seis. Así, el grupo de edad más numeroso es el que tiene entre 50 y 59 años. Mientras el grupo de los menores de 30 años se ha reducido en un 45%, el de 60 a 64 ha crecido un 93%. Las 51.000 plazas convocadas en los dos últimos años apenas permiten paliar este desequilibrio, porque gran parte de ellas han sido ganadas por profesores interinos con años de ejercicio y que finalmente regularizan su situación.

La edad no es ningún impedimento para una excelente labor docente, pero en una organización compleja como la educativa, asegurar la adecuada renovación es de vital importancia. La entrada de profesores jóvenes bien preparados es un elemento especialmente importante en un momento de transición tecnológica y cultural que requiere nuevos conocimientos y nuevas habilidades. Experiencia e innovación son los dos elementos que, bien combinados, permiten la madurez y el empuje que se precisa para una labor tan comprometida y que requiere tanta energía como la enseñanza.

Hay que añadir además que, comparado con el promedio de la OCDE, los profesores españoles tienen más alumnos por aula, una jornada lectiva más larga y menos tiempo para preparar las clases. Deberíamos revisar estos parámetros, porque más tiempo en el aula no es garantía de mejor educación, ni en el caso de los profesores ni en el de los alumnos. Los escolares españoles de secundaria, por ejemplo, tienen 1.054 horas lectivas al año, 246 más que los finlandeses y, en cambio, estos figuran desde hace años en los primeros puestos en los resultados de las pruebas de PISA, mientras que los españoles, pese a las mejoras de los últimos años, siguen en los puestos medios de la tabla. La calidad educativa no depende solo ni principalmente del tiempo que se dedica a clase ni del volumen de los contenidos que se imparten.

Es preciso revisar tanto el currículo que se imparte como la forma en que se utiliza el tiempo escolar. Y abordar también dos reformas pendientes que hace años que se plantean, y que se han convertido en carencias crónicas del sistema: la ausencia de un sistema general de formación continuada y evaluación del profesorado, y el desarrollo de una carrera profesional que permita incentivar y premiar la excelencia docente. Año tras año, informe tras informe, los expertos insisten en que estas reformas son necesarias para mejorar la calidad educativa. Lo sorprendente es que, sabiendo cuáles son las carencias, continuemos sin ponerles remedio.

Fuente del artículo: https://elpais.com/elpais/2019/09/13/opinion/1568397370_598946.html

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España: Agresiones sexuales

Por: El País

El aumento de delitos contra libertad sexual entre menores obliga a reforzar las medidas educativas y de prevención.

Los datos sobre agresiones sexuales que ofrece la Fiscalía General del Estado nos sitúan ante la evidencia de que, pese a los esfuerzos que se hacen en el ámbito educativo y de prevención social, los delitos contra la libertad sexual siguen aumentando. El número de delitos denunciados creció en 2018 un 23,2%, confirmando así la línea ascendente de los últimos años. El informe constata además la emergencia de tendencias muy preocupantes. La principal es el aumento de las agresiones sexuales entre menores. Aunque en números absolutos son cifras relativamente bajas —648 casos— lo relevante es la tendencia, con un incremento del 43% con respecto al año anterior. Es de presumir que, al tratarse de una edad con menos recursos que la adulta, el número de denuncias no refleje fielmente la realidad y el fenómeno sea mayor de lo que esas cifras indican.

Este dato debe relacionarse con otro también inquietante: el aumento de las violaciones en grupo. La progresión de ejemplos excede el efecto contagio que pudiera haber tenido el caso de La Manada, tanto en la comisión de delitos similares como en la mayor sensibilidad social para denunciarlos. Todo indica que se extienden entre algunos jóvenes patrones de conducta sexual violenta, muy alejados de los valores que promueve el sistema educativo. Los expertos señalan el fácil acceso de los menores a la pornografía que se difunde por Internet como la principal causa. Así lo cree también la Fiscalía.

Sendos estudios realizados en las Universidades de Salamanca y de las islas Baleares muestran el alto grado de exposición de los niños y adolescentes a la pornografía, hasta el punto de que para muchos es la primera imagen que se hacen de las relaciones sexuales. Según estos estudios, el 63% de los chicos y el 30% de las chicas presenciaron pornografía online. El promedio de edad a la que los menores llegan a la pornografía es de 14 años, pero uno de cada cuatro la ha consumido antes de los 13.

Se trata además de un nuevo tipo de pornografía, de formas cada vez más violentas, basada en prácticas de dominación que incluyen relaciones con pequeños y la violación. Este tipo de contenidos, que a veces tienen una difusión viral, familiariza a los niños con prácticas de riesgo y presenta como normales conductas basadas en la agresividad, la satisfacción inmediata de los deseos y la simplificación de las relaciones interpersonales.

Estos datos plantean la necesidad de reforzar los programas de educación sexual para contrarrestar esta nociva influencia y de emprender medidas de prevención. Debe estudiarse si el uso de cámaras en lugares de ocio y centros educativos puede ayudar a prevenir, pero lo fundamental es que las familias tomen conciencia de estos peligros y ejerzan su responsabilidad en la vigilancia de los contenidos que sus hijos consumen en Internet.

Fuente e imagen: https://elpais.com/elpais/2019/09/10/opinion/1568133796_923535.html

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Andreu Navarra, profesor: «La educación actual ha convertido al docente en un monitor de tiempo libre»

Reseña: Olga R. Sanmartín

Historiador, escritor y profesor interino de Lengua y Literatura Castellana en Barcelona, critica la «pedagogía facilista» y la deriva hacia «la sociedad de la imbecilidad» del sistema educativo en su libro ‘Devaluación continua’.

Andreu Navarra (Barcelona, 1981) estaba un día en su casa corrigiendo los exámenes de sus alumnos de 14 años cuando se le acercó su hijo. «¿Esto explicas, papi? Pero si es lo que yo hago en clase», le hizo ver el sorprendido crío, que sólo tiene nueve años. «Mi hijo no exagera. Puedo confirmar lo que dice porque conozco lo que hace en clase; si les pongo sus mismos ejercicios a estudiantes de la ESO, muchos suspenden», asegura este historiador, escritor y profesor interino de Lengua y Literatura Castellana al que este año le ha tocado dar clase en un instituto a 40 kilómetros de Barcelona.

En los próximos días saldrá a la venta el libro de Navarra, Devaluación continua (Tusquets), en el que describe con crudeza lo que ha conocido durante los seis años que lleva dando clase en Secundaria. Alumnos de Bachillerato que confundían los océanos con los continentes en el mapamundi, creyendo que la tierra era la mancha azul y que el mar era la marrón; adolescentes a las puertas de la Selectividad que no saben el nombre de los ríos que pasan por su ciudad o que sitúan Madrid en el centro de un mapa de Cataluña; chicos y chicas en la pubertad que no distinguen un triángulo de un rombo o no saben hacer una simple división de calorías.

Tuvo a una estudiante, que iba con una bandera independentista a clase, que no le supo explicar quién era Lluís Companys. En el debate existente sobre si la escuela actual es o no demasiado laxa, su sensación a partir de sus experiencias profesionales es que el nivel de los institutos españoles deja mucho que desear. Llega a decir que hay alumnos de Bachillerato «que no entienden lo que dicen los libros de texto» y que hay estudiantes de esta etapa «a los que le cuesta redactar textos de más de tres líneas».

«No estamos creando ciudadanos ilustrados, sino chicos que se vienen abajo por un mal examen o por tener que memorizar tres páginas».

«Estamos egresando analfabetos, un ciberproletariado sin los niveles mínimos para trabajar ni moverse por el mundo», expresa durante su entrevista a PAPEL este hijo de padres profesores criado en un barrio obrero que admira a Gregorio Luri y a la educadora sueca Inger Enkvist. «No estamos creando ciudadanos ilustrados, sino chicos y chicas muy vulnerables que se vienen abajo por un mal examen o por tener que memorizar tres páginas. ¿Cómo vamos a pretender que más adelante se enfrenten a un divorcio, o a la paternidad, o a un problema de salud?»

Su tesis es que «la ESO se ha convertido en lo que antes era la Primaria». ¿Por qué? «Porque la atención de los adolescentes pasa a estar secuestrada por el mundo virtual y eso hace que muchos no estén aquí, sino allí, pensando en los likesCuando se les compra un móvil, automáticamente dejan de leer. Los institutos no pueden competir con el mundo virtual porque a muchos alumnos no les importa su futuro, sólo les importa su presente en las redes», responde. Eso es culpa del sistema, de esa «sociedad de la imbecilidad» que desdeña el pensamiento ilustrado, las Humanidades y la reflexión y potencia a los youtubers y a los influencers.

Pero, avisa Navarra, la escuela postmoderna también «reproduce esos hábitos de consumo y prescinde de los hábitos académicos». El llamado modelo comprensivo fomenta, en sus palabras, «un sistema injusto» donde «los profesores tienen la función de trabajadores sociales» y donde «al peor alumno se le dedica la mayor cantidad de tiempo y atención». «Se presiona para que la escuela sea un lugar para la felicidad inmediata. La educación actual ha convertido al docente en un animador de hotel, en un monitor de tiempo libre. La tendencia es a convertir los centros académicos en centros de ocio. No estamos creando ciudadanos que participen en un proyecto responsable, los estamos obligando a pasar el rato», denuncia.

Relata que la «pedagogía facilista» presiona para que no se exija mucho a los alumnos, para que se desdeñen las notas y para que se facilite la promoción automática. «La infantilización ambiental ha iniciado el abordaje de las instituciones académicas», donde los críos se pasan el día haciendo actividades. También lo sufren los profesores, a los que durante su formación se les aplica la misma pedagogía comprensiva, con fichas, cuadros explicativos y colorines «que parecen de parvulario». Afirma que, como hay tantos alumnos que no hacen nada y tienen que permanecer en clase de forma obligatoria hasta los 16 años, se pone a los profesores a entretener a todos, igualando el nivel por abajo.

El libro trata de explicar el estado de ánimo de una parte del profesorado, ésa que siente que tiene que pedir perdón por intentar formar a los alumnos en conocimientos concretos y defender la importancia de la memoria -«Nuestro ser está hecho de memoria, sin datos no hay pensamiento posible»-, que vive desbordada por la burocracia y la Nueva Pedagogía.

Navarra habla de una jefa de departamento, una docente curtida que había enviado a la universidad a decenas de chicos del suburbio, que un día se le puso a llorar de forma desconsolada mientras corregía exámenes de 2º de Bachillerato. Se dio cuenta de que ninguno de estos alumnos llegaría a completar el curso. «Ella, que se había formado con el objetivo de transmitir unos conocimientos que pudieran proporcionar un salto social a los alumnos, se daba cuenta de que ahí no había nada. de que era una estación final. Era la constatación de que una generación no podría pasar a la Selectividad».

«La escuela ha dejado de ser un ascensor social», sostiene Navarra. Relata que en un colegio privado donde trabajó le hicieron aprobar a un estudiante de Bachillerato. La dirección le cambió la nota a pesar de que el alumno «no sabía ni interpretar cuatro líneas». Tres o cuatro años después se lo encontró trabajando en un tren y el chico le dijo que había intentado hacer la carrera de Derecho, pero no había podido terminarla ni salir adelante.

«FUERA LOS POLÍTICOS DE LA EDUCACIÓN»

El libro de Andreu Navarra pasa de puntillas por el conflicto catalán. Nada se dice en ‘Devaluación continua’ sobre el adoctrinamiento, la falta de neutralidad en escuelas de Cataluña o el modelo de inmersión lingüística, más allá de reconocer que su asignatura de Lengua y Literatura Castellana sólo tiene tres horas semanales (en otras autonomías son cinco) y hablar, en genérico, de que «en lugar de democracia estamos creando generaciones enteras de ultranacionalistas».

«Me parece que es sólo aparente que mi libro no hable de la situación en Cataluña. Lo que ocurre es que intento ofrecer una visión desde una perspectiva occidental, en la que los problemas de Cataluña se enmarcan: digo, por activa y por pasiva, que una sociedad sin análisis matizado de la realidad no sólo proporciona un sistema educativo fragmentario y defectuoso, sino que cultiva y desarrolla identidades políticas que se convierten en religiones civiles, intolerantes entre sí, precisamente para evitar la responsabilidad de que se construyan versiones racionales de lo que ocurre en el entorno inmediato», se defiende.

Fuente e imagen: https://www.elmundo.es/papel/historias/2019/09/09/5d74c885fdddffbb0d8b4662.html

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Reino Unido: Parents shocked as UK school asks kids to write ‘SUICIDE LETTER’ as part of English exercise

Europa/Reino Unido/RT
A school in the UK gave their teenage English students the task of writing a suicide note in the context of an exercise to explore suicidal feelings, prompting one “genuinely shocked” parent to complain.

Pupils aged 15 and 16 studying for their GCSE qualifications at Cheney School in Headington, Oxford, were set the assignment as part of studying the classic English play ‘An Inspector Calls’ by J.B. Priestley. The writing exercise was delivered on ‘World Suicide Day.’

One mother, who asked not to be named, told BBC News that the project was a “massive fail,” revealing that she had been left feeling “genuinely shocked,” after her child informed her about the distressing task.

The actual assignment was ‘Imagine you are a young woman in 1912 writing a suicide letter to those who care about you.’

The parent, who reportedly has a relative who attempted suicide, wrote a letter to the school’s Head of English, adding that there had been “no warning, no support, no encouragement.”

The school has since apologized “for any distress caused” and insisted that the exercise was “delivered sensitively,” claiming that the writing task had been reviewed and “adjusted accordingly.”

It’s not the first time the play in question has been embroiled in the same controversy. In 2015, pupils aged 14 and 15 at Beauchamps High School in Wickford, Essex, were also asked to pen a suicide letter for their English homework.

Set in 1912, the play centers on a mysterious inspector arriving at the home of a mill owner. He questions the wealthy family about the sudden death of Eva Smith, a young working-class woman.

Fuente e imagen: https://www.rt.com/uk/468682-school-suicide-letter-exercise/

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España: La inteligencia artificial reducirá los suspensos y el abandono en la universidad.

Europa/España/abc

El alumno tendrá un mentor inteligente que le acompañará durante el curso, le animará y le recomendará qué y cómo estudiar.

La Inteligencia Artificial (IA) permitirá en un futuro recomendar a cada persona cuáles son los estudios que mejor se adecúan a sus capacidades, gustos y proyección laboral, avisarle cuándo corre riesgo de suspender una asignatura y detectar un posible abandono antes de que ocurra, entre otras muchas cosas. «Todo esto permitirá reducir los suspensos y la tasa de abandono de la universidad», explica David Bañeres, investigador del grupo Systems, Software and Models Research Lab (SOM Research Lab) del Internet Interdisciplinary Institute (IN3), así como del eLearn Center (eLC), ambos de la Universitat Oberta de Catalunya (UOC).

«El uso inteligente de los datos va a facilitar una educación exclusiva para cada persona», explica David Bañeres, que actualmente trabaja en un proyecto del eLC para desarrollar un tutor inteligente que atienda a los alumnos de la UOC las 24 horas de cada día de la semana. Este proyecto se enmarca dentro del programa Soul University, que este centro de investigación está diseñando para implantar la inteligencia artificial en la universidad durante los próximos diez años.

«Hasta hace poco las universidades no disponían de suficientes datos, sobre todo las presenciales, por lo que la aplicación de la inteligencia artificial se está introduciendo de forma más lenta que en otros sectores», explica Bañeres, quien, sin embargo, cree que ya estamos preparados para afrontar grandes retos de IA en la educación superior. Para el experto, saber utilizar estos datos en provecho del estudiante es fundamental para ayudarle durante toda su trayectoria académica.

Ya hay ejemplos de cómo la analítica de aprendizaje («learning analytics») mejora las notas de los estudiantes universitarios y reduce la tasa de abandono. En la universidad norteamericana Purdue, en Indiana, llevan años permitiendo a los profesores utilizar los datos de los alumnos para dar notificaciones en tiempo real y resolver los problemas académicos que puedan tener los primeros. Tras la implantación del proyecto, se detectó un incremento de las notas de excelente hasta el 13,84 %, una reducción de las de aprobado hasta el 9,38 % y los suspensos cayeron hasta el 9,40 %.

Educación exclusiva para cada estudiante

La inteligencia artificial va a permitir predecir qué materias completan el currículo de los estudiantes, cuáles son sus habilidades, qué asignaturas deben cursar para llegar a los objetivos que tienen, etc., y, en consecuencia, «se podrá ofrecer un aprendizaje más personalizado, casi diría que exclusivo, para cada uno», dice Bañeres. Y va a aplicarse fundamentalmente en tres niveles, según el investigador.

El primer nivel de aplicación comienza cuando el estudiante se informa sobre las opciones formativas. En ese momento, según su perfil y los datos de otros estudiantes recopilados por la IA, recibirá recomendaciones sobre qué grados, másteres y/o cursos son los más aconsejables para él. El segundo nivel de intervención se da en el campus, donde la gestión de datos permitirá proponer cuántas y qué asignaturas se deberían estudiar para asegurarse el aprobado. Y por último, el tercer nivel se da en cada curso y asignatura: «La inteligencia artificial puede responder automáticamente a las preguntas que hacen los estudiantes sobre la materia y, además, en función de cómo se va desarrollando la asignatura, proponer recomendaciones que los ayuden a estudiar», explica Bañeres.

La idea es que la persona esté asistida en todo momento. Su «tutor» también podrá, además de todo lo comentado, «hacer un acompañamiento emocional o planificar el tiempo de estudio del alumno», comenta Guillem Garcia Brustenga, director de Análisis de Tendencias del eLearn Center. Este «mentor» educativo acompañará y ayudará al estudiante en todo su viaje académico, desde las primeras cuestiones administrativas cuando accede a la universidad hasta la matriculación y, finalmente, la titulación. E incluso, entonces, su «trabajo» no termina, ya que puede permanecer «dormido» hasta que el estudiante decida volver a estudiar o incluso «a ponerse en contacto con él» para que le recomiende nueva formación académica para mejorar su currículo, adaptarse a nuevos entornos laborales, etc.

¿Y qué margen queda para el error? ¿Qué pasa si la inteligencia artificial se equivoca? «Está claro que son recomendaciones y así hay que tomarlo», responde Bañeres. Es el estudiante el que sabe si este trimestre ha empezado una relación personal que va limitar su tiempo de estudio, si tiene un familiar enfermo al que cuidar, etc. «Las máquinas se pueden equivocar, por supuesto, pero es cierto que la recopilación de datos personales y estadísticos permitirá hacer recomendaciones muy acertadas, tal y como se hacen en otros sectores no académicos», aclara.

¿Mi tutor será un chatbot?

«Cómo se aplicará esta IA no es tan relevante», explica el investigador. «Si las recomendaciones las hace un tutor virtual mediante un chatbot, estupendo. Si al estudiante le gusta más que se haga por medio de mensajes y notificaciones en su correo electrónico, en sus redes sociales, etc., también», explica Bañeres. Para el experto, los chatbots están de moda, pero lo importante no es el cómo, sino que los mensajes, las recomendaciones y las respuestas a las dudas del estudiante lleguen: «Ya se verá cómo va evolucionando. Ahora mismo el chatbot es la fórmula que más se está utilizando, pero no sabemos qué otras opciones se inventarán en el futuro».

Lo importante es la creación de un tutor educativo que ayude al estudiante, que también «será un asistente para el profesor», tal y como explica García Brustenga. «Lo podemos imaginar como una aplicación en el móvil con acceso por chat de texto o de voz (como Alexa o Siri)», añade. Además, será ubicuo, dará soporteen cualquier lugar y en cualquier momento y «se podrá mantener activo más allá de un curso completo», comenta para finalizar.

Fueten e imagen: https://www.abc.es/familia/educacion/abci-inteligencia-artificial-reducira-suspensos-y-abandono-universidad-201909121420_noticia.html

 

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Francia: Se necesita intensificar los esfuerzos para preparar a los estudiantes para el futuro, según OCDE

Europa/Francia/mba.americaeconomia

Según el informe «Educación en un Glance 2019» muestra que la tasa de empleo de los adultos con educación terciaria es 9% más alta que la de los adultos con educación secundaria superior.

La demanda de educación continúa aumentando, pero su mayor expansión solo será sostenible si combina la oferta de graduados con el mercado laboral y las oportunidades sociales, y les brinda las habilidades necesarias para navegar en el futuro, según el informe de la OCDE «Educación en un Glance 2019» publicado este martes.

Entre los jóvenes de 25 a 34 años, el 44% tenía un título universitario en 2018, en comparación con el 35% en 2008, en promedio en los países de la OCDE. La tasa de empleo de los adultos con educación terciaria es 9% más alta que la de los adultos con educación secundaria superior, y ganan 57%, apunta el informe.

Sin embargo, algunos sectores con alta demanda pueden tener dificultades para encontrar las habilidades que necesitan. Menos del 15% de los nuevos participantes en los programas de licenciatura estudian ingeniería, manufactura y construcción, y menos del 5% estudian tecnologías de la información y la comunicación, a pesar de que estos sectores ofrecen las mayores tasas de empleo e ingresos. Las mujeres están particularmente poco representadas y representan menos de una cuarta parte de los participantes en promedio en los países de la OCDE.

«Es más importante que nunca que los jóvenes aprendan el conocimiento y las habilidades necesarias para navegar en nuestro mundo impredecible y cambiante», señaló el secretario general de la OCDE, Angel Gurria, al presentar el informe en París. «Debemos ampliar las oportunidades y construir puentes más fuertes con las necesidades de habilidades futuras para que cada estudiante pueda encontrar su lugar en la sociedad y alcanzar su máximo potencial».

Muchas instituciones están evolucionando para satisfacer las demandas cambiantes del mercado laboral al promover vías flexibles hacia la educación terciaria, equilibrar las habilidades académicas y vocacionales, y trabajar más estrechamente con los empleadores, la industria y las organizaciones de capacitación. Pero también deben equilibrar las inscripciones más grandes con la necesidad de contener los costos, manteniendo la relevancia y la calidad de sus cursos, dice el informe.

El informe señala que el logro terciario está aumentando rápidamente en China, que no es un país miembro de la OCDE pero es uno de los socios clave de la organización.

En China, la proporción reciente de logros terciarios es del 18%, muy inferior al promedio de la OCDE. Entre los chinos de entre 25 y 34 años, se espera que el 67% ingrese a la educación terciaria por primera vez, un poco más que el promedio de la OCDE de 65%.

En 2017, el 2% de los estudiantes de educación superior chinos estudiaron en el extranjero, a la par con el promedio de la OCDE. Sin embargo, representaron el 23% del total de estudiantes entrantes en los países de la OCDE, que fue la mayor proporción entre todos los países miembros y socios de la OCDE, dice el informe.

Los programas vocacionales desempeñan un papel importante en China, tanto en el nivel secundario superior como en el terciario: el 42% de los estudiantes de secundaria superior y el 60% de los que ingresan a la educación terciaria por primera vez se inscribieron en programas vocacionales de secundaria superior y educación terciaria de ciclo corto, respectivamente.

El informe también evalúa cómo los jóvenes están pasando de la educación al trabajo, como parte de su análisis continuo de dónde se encuentran la OCDE y los países socios en su camino para cumplir el Objetivo de Desarrollo Sostenible para la educación en 2030.

Se encuentra que algunos países han logrado un progreso significativo en la reducción del número de jóvenes sin escolarizar en la última década. Las tasas cayeron 20% en la Federación de Rusia, 18% en México, 16% en Portugal y 10% en Australia y Nueva Zelanda entre 2005 y 2017.

«Education at a Glance» proporciona estadísticas nacionales comparables que miden el estado de la educación en todo el mundo. El informe analiza los sistemas educativos de los 36 países miembros de la OCDE, así como de Argentina, Brasil, China, Colombia, Costa Rica, India, Indonesia, la Federación de Rusia, Arabia Saudita y Sudáfrica.

Fuente e imagen: https://mba.americaeconomia.com/articulos/notas/se-necesita-intensificar-los-esfuerzos-para-preparar-los-estudiantes-para-el-futuro

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Bajo gasto público, altos sueldos, mayor carga lectiva para los alumnos… Así es la Educación en España según la OCDE

Europa/España/20minutos

España se sitúa a la vanguardia en Educación Infantil y en el número de horas lectivas que reciben los alumnos. Sin embargo, esto no se traduce en mejores resultados académicos, según el informe Panorama de la Educación 2019 de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) publicado este martes.

Además, el gasto público en educación es menor que en la media de países y el coste salarial del profesorado es relativamente alto. No obstante, no todo son malas noticias. El nivel educativo de la población adulta española (entre 25 y 64 años) sigue mejorando y la tasa de graduación por primera vez en segunda etapa de Educación Secundaria (Bachillerato) ha aumentado considerablemente, pasando del 56% al 81%.

Este informe reproduce los datos de los indicadores más importantes para España en comparación con la media de los países de la OCDE y de los 23 países de la Unión Europea que pertenecen a esta organización.

Escolarización infantil

La escolarización de los menores de 6 años es notablemente más alta en España que en la media de países de la OCDE. En 2017, el 97% de los niños de 3 a 5 años estaban matriculados, frente al 87%.

Asimismo, España da gran relevancia a las primeras etapas de Educación y Atención a la Primera Infancia (EAPI), con un 36% de niños por debajo de los 3 años matriculados en 2017. Este porcentaje supone un incremento de 21 puntos porcentuales con respecto a 2005.

Más horas de clase

En la primera etapa de Educación Secundaria, las diferencias en horas lectivas entre España y los países de la OCDE y la UE23 son notables, ya que los alumnos españoles reciben 1.054 horas anuales de clase, superando en 135 horas anuales la media de horas de clase en los países de la OCDE y en 162 horas a la media en los países de la UE23.

Sin embargo, el éxito académico no es especialmente bueno en España, por lo que esta carga lectiva no supone una mejora . De hecho, los finlandeses, que son los que menos tiempo pasan en las aulas, tienen el sistema educativo más aplaudido.

Docentes y padres han instado a una revisión en profundidad del sistema para evitar que los alumnos pasen en clase más horas lectivas que la media. Desde la Asociación de Profesores de Madrid señalan a 20minutos.es que «lo importante no es que un alumno reciba a la semana 30 horas o 28, sino que esas horas se den en buenas condiciones».

«Para ello son necesarios muchos cambios: bajar el número de alumnos por aula, especialmente en las aulas donde se dan circunstancias que dificultan el aprendizaje; que los profesores recibamos formación continua adecuada, especialmente en habilidades didácticas, y en condiciones que sean accesibles; ir actualizando los contenidos de las asignaturas que marca la legislación; y reforzar la acción orientadora de los psicólogos y tutores de los centros educativos para aumentar la motivación de los alumnos y detectar los problemas en sus inicios», añaden.

Baja tasa de gasto público

España presentó un gasto total por alumno en instituciones educativas inferior a la media de la OCDE. La mayoría de los países dedicó un porcentaje significativo de su presupuesto público a la educación: para los países de la OCDE supuso un 10,8% del gasto público total, la media en los países de la UE23 fue de un 9,6% mientras que en España se situó solo en un 8,6%.

En concreto, España gasta el 3,1% de su producto interior bruto (PIB) en Educación Primaria y Secundaria, en comparación con el 3,5% en la media OCDE.

Una mayor retribución del profesorado

En general, los salarios de los profesores de las enseñanzas no universitarias aumentan con el nivel educativo en el que enseñan. En España, el salario de los profesores es superior al salario medio del conjunto de países de la OCDE.

Si se compara la retribución salarial del profesorado español con la del resto de los países, es alta al inicio de la carrera docente y moderada al final de dicha carrera, teniendo en cuenta que España es uno de los países en el que los profesores necesitan más años para alcanzar el máximo en la escala retributiva.

No obstante, la Asocación de Profesores de Madrid no está de acuerdo con este apartado: «Si es correcto, sólo puede significar que en muchos países de Europa los docentes están muy mal pagados. Consideramos que también en España tenemos un reconocimiento menor del que merecemos, tanto en salario como socialmente, como trabajadores cualificados con mucha responsabilidad y necesidad de formación constante».

Tasa de desempleo más alta en España

El nivel de formación de las personas está correlacionado con su situación laboral. Las que tienen un nivel educativo más alto alcanzan tasas de empleo más elevadas, mientras que las personas con un menor nivel de cualificación tienen más riesgo de estar desempleadas.

Las tasas de empleo en España, para todos los niveles de formación, son más bajas que la media de los países de la OCDE y de la UE23. Con las tasas de desempleo ocurre lo contrario, en todos los casos son más elevadas en España.

En el caso de las tasa de desempleo de la población de 25 a 34 años con segunda etapa de Educación Secundaria o postsecundaria no terciaria, la tasa se sitúa en el 18%, frente al 7% de los países de la OCDE y el 8% de los de UE23.

La brecha de género es menor en España

El 50% de las mujeres de 25 a 34 años en España obtuvo una titulación terciaria (universitaria) en 2018, frente a un 38% de los hombres.

Sin embargo, los varones con nivel de Educación Terciaria presentaban tasas de empleo más altas que las mujeres: 76% de estas, frente al 81% de los hombres.

En los países de la OCDE, aunque las mujeres jóvenes tienen un nivel educativo superior al de los hombres, también presentan tasas de desempleo más altas para los mismos niveles de educación alcanzados.

En el conjunto de empleados a tiempo completo con estudios universitarios, las mujeres ganan menos dinero que los hombres en todos los países de la OCDE, si bien la brecha de género es menor en España que en la media de países de la organización. En 2017, las españolas entre 25 y 64 años con educación terciaria se quedaron en el 82% de las retribuciones de los hombres con el mismo nivel educativo, frente al 75% observado en la media de países.

Fuente e imagen: https://www.20minutos.es/noticia/3758980/0/informe-ocde-educacion-espana/

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