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El director del Informe PISA: «La calidad de la enseñanza nunca podrá exceder la calidad de los profesores»

«Mejorar la calidad de la educación depende, en gran medida, de que las personas competentes quieran trabajar como docentes», explica Andreas Schleicher, el padre del informe PISA.

Andreas Schleicher es el padre del informe PISA, la más influyente prueba educativa internacional, organizada por la OCDE. PISA mide anualmente los conocimientos en matemáticas, ciencias y lectura de los alumnos de 15 años de 79 países diferentes, entre ellos el nuestro.

Andreas es alemán, nació en Hamburgo hace 56 años, titulado en Física y Matemáticas, especializado en estadística y, sin duda, una de las voces más autorizadas en el mundo de la educación. España acaba de aprobar su reforma educativa y, más allá del papel de las leyes en la mejora de la calidad de la educación, le hemos contactado para hablar con él acerca del papel que tenemos en este sentido los ciudadanos, en especial las madres, padres y docentes.

Andreas nos atiende por vídeo llamada en el marco de un evento online que organizamos bajo el título de ‘La educación importa’.

Pregunta: Andreas, ¿cómo conseguimos, más allá de leyes, mejor la calidad de la educación?

Respuesta: Con toda la tecnología de la que disponemos en el mundo, tenemos muy claro que la calidad de la educación, la calidad de la enseñanza nunca podrá exceder la calidad de los profesores. La pregunta que hay que hacerse es: ¿cómo podemos hacer la enseñanza atractiva, no únicamente en el aspecto económico (ya sabemos que es importante que los profesores tengan un salario adecuado), sino también desde el punto de vista intelectual, para que los mejores quieran ser profesores. En esto tiene mucha importancia el respeto que la sociedad debe tener hacia los profesores. Como padre, querré que mi hijo sea profesor cuando sea una profesión valorada. También se trata de crear un ambiente de trabajo para hacer el trabajo de profesor intelectualmente atractivo. Es decir, no se deben de impartir clases prefabricadas, sino que los profesores deben de convertirse en diseñadores creativos dentro del contexto de la enseñanza. Convertirse en los arquitectos de la educación del mañana. No solo ser instructores, también receptores; ser buenos mentores, buenos moderadores, buenos evaluadores. Si creamos este tipo de ambiente, yo creo que podemos conseguir que las mejores personas quieran ser, se conviertan en profesores.

Pregunta: Particularmente en España, ¿es la de profesor una profesión atractiva?

Respuesta: Bueno, si lo miras desde la perspectiva económica, el salario de los profesores no está mal en España si lo comparas con el salario de los trabajadores que están similarmente cualificados. Pero, una vez más, creo que el trabajo de los profesores está industrializado. Los profesores son las personas que entregan la información que otras personas han debatido. Esto no es el trabajo que inspira a las personas. Los profesores en España suelen trabajar aislados en la clase, saben todo lo que ocurre dentro de ella, pero no están conectados con los compañeros, no están conectados con el futuro de la educación o las investigaciones que crearán las enseñanzas del mañana. Yo creo que esa es la barrera que impide a las personas querer dedicarse a la enseñanza, a pesar del salario.

Pregunta: ¿Qué podemos hacer los ciudadanos para que los docentes sientan ese reconocimiento al que hacías referencia?

Respuesta: Yo creo que parte de la solución radica en construir una mejor relación entre la sociedad y los colegios. Los colegios han sido muy buenos a la hora de mantener a sus estudiantes dentro y al resto del mundo fuera. Y eso no es el futuro de la educación. De hecho, durante la pandemia ha sido el momento en el que los padres más se han involucrado en el aprendizaje de sus hijos, sintieron más responsabilidad; los profesores estuvieron más abiertos para establecer conexiones con los padres, aportándoles sus propios recursos para apoyar la educación de sus hijos. Se hicieron responsables, también desde el punto de vista del desarrollo social y emocional. Cuanto más sólida sea la estructura que construyamos en la relación entre los profesores y la sociedad, más se valorará por parte de la sociedad el trabajo de los profesores. Normalmente, no podemos apreciar el trabajo que no podemos ver. Incluso en España, en los últimos 10-15 años ha habido una tendencia hacia mercantilizar la educación. Los estudiantes se han vuelto los consumidores del aprendizaje, los profesores los proveedores y los padres los clientes, y esto ha creado un distanciamiento. Eso no es sano, la enseñanza no es nunca un fenómeno de transacción. Por ello, creo que es importante unir a los profesores, los estudiantes y las familias, que sientan esa responsabilidad y empoderamiento. Creo que es absolutamente crucial para fortalecer el valor de la enseñanza en la sociedad.

Pregunta: Eres el director de un informe que mide el nivel académico de los niños de todos los países de la OCDE… y has dicho en alguna ocasión que hay pequeñas cosas que podemos hacer las madres y padres que tienen gran repercusión en sus resultados… ¿cuáles son?

Respuesta: La enseñanza nunca triunfa sin que todo el mundo esté implicado, sin que todo el mundo forme parte del proyecto. Te pongo un ejemplo: el simple hecho de que los padres pregunten a sus hijos todos los días “¿Cómo ha ido el colegio?”, tiene un gran impacto el rendimiento matemático de los estudiantes en el informe PISA, mucho más que la propia renta familiar. Esto no significa que tengamos que emplear 3 horas de exhausto trabajo con los hijos, o que debamos tener un título de universidad para poder ayudarles. Simplemente, mostrarles que lo que han hecho en el colegio te importa a ti personalmente, que tiene importancia para ti. De esta forma, mejorará la actitud que tiene tu hijo hacia el aprendizaje, hacia la enseñanza. Si muestras, como padre, que respetas la autoridad del profesor y valoras su trabajo, tus hijos reflejaran esa actitud. Es una cuestión de actitud, más que de conocimientos o tiempo.

Pregunta: Escuchándote, Andreas, se podría concluir que un gran cambio en la educación puede conseguirse con ideas sencillas…

Respuesta: Sí, son ideas sencillas y también cosas que todas las personas podemos hacer. No es cuestión de no tengo el tiempo, no tengo la energía, no tengo la cualificación necesaria. Es el valor que le doy a la educación, al futuro, como le enseño a nuestros hijos lo que es importante. Si inculcas a tu hijo que todo depende de la inteligencia innata, si no ha nacido para entender las matemáticas, ¿cómo conseguirás que estudie y lo intente con todas sus fuerzas? Son las actitudes que le inculcamos a nuestros hijos lo que condiciona su pensamiento.

Fuente: https://www.elperiodicodearagon.com/educar-es-todo/2021/07/01/director-informe-pisa-calidad-ensenanza-54539816.html

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Reforma Educativa: Mirar a la Escuela de otra manera

México / 9 de diciembre de 2018 / Autor: Juan Carlos Miranda Arroyo / Fuente: SDP Noticias

En México, y en cualquier país del mundo, las modificaciones a los textos constitucionales o la aprobación de leyes nacionales, como acciones iniciales para emprender Reformas Educativas, no necesariamente han producido cambios de “raíz” en las prácticas educativas y docentes en las escuelas (1); esto lo digo porque el siguiente gobierno federal, próximo a ejercer el poder político en una semana, podría cometer el mismo error en que cayó el gobierno encabezado por el presidente Peña Nieto, en materia de políticas públicas y estrategias educativas. Pensar que los cambios sociales (estructurales o de base) se generan a partir de las modificaciones al marco legal, es dar por cierta una falacia. Esa ha sido la experiencia para el gobierno que va de salida, y lamentablemente para nuestra sociedad; ha sido una equivocación cometida tanto en el orden de la estrategia puesta en práctica como en la concepción (el contenido) de la Reforma Educativa recién ensayada durante el periodo 2012-2018. En consecuencia, esas han sido algunas de las razones del eventual fracaso de la iniciativa del “cambio” propuesto a través del “Pacto por México” (cuya responsabilidad y diseño se debe a los partidos políticos PRI, PAN y PRD), mediante una Reforma Educativa supuestamente estructural que, según los acontecimientos, ha sido rechazada por la mayoría de la sociedad.

Desde una perspectiva crítica del diseño de las políticas públicas en educación, considero que la estrategia para transformar el sistema educativo, tendría que ser operada exactamente al revés: Primero se tendrían que impulsar los “cambios educativos”, en la base, es decir, en las escuelas, en las aulas y, en segundo lugar, integrar los diversos esfuerzos colectivos, orientados hacia “la transformación”, para consolidarlos y extenderlos hacia todo el conjunto del sistema, a través de la adecuación o actualización de los diferentes instrumentos jurídicos y normativos. Lo anterior implica pensar al Estado no solo como una entidad hegemónica generadora del “deber ser” de una sociedad, sino también como el complejo institucional que, en representación de la misma, regula las prácticas sociales que permitan la convivencia armónica, justa, democrática y civilizada entre los miembros de la sociedad.

Coincido, en ese sentido, con las voces y los argumentos sociológicos (como los de Michael Fullan y Andy Hargreaves) que consideran o interpretan a la escuela desde otra mirada, sobre todo en coyunturas de reforma o de transformaciones profundas como la que vivimos en México. Así lo expresa concretamente Fullan cuando se refiere a ese tipo de reformas: “Hay dos dimensiones claves para la capacidad (del cambio educativo). Una es lo que los individuos pueden (o quieren) hacer para desarrollar su efectividad (desde la escuela), a pesar del sistema; la otra es la forma como los sistemas necesitan transformarse.» (2)

 

Ello significa que la escuela debiera convertirse, como colectivo de personas comprometidas con los aprendizajes significativos de sus estudiantes, en una “unidad autonómica” que aprenda a pensar y a operar el cambio a partir de sus prácticas concretas; a diseñar y emprender por su cuenta, y más allá de los dispositivos burocráticos del “sistema”, su “propia agenda o plan de reformas educativas y docentes (procesos de enseñanza y aprendizaje)” para la escuela y para cada grupo de alumnos en el aula. Sin duda, eso también implicaría poner en marcha un amplio proceso de revisiones críticas y autocríticas acerca de las “prácticas educativas y docentes” dominantes en la institución educativa, que incidan en la extensión, la pertinencia y la profundidad de los aprendizajes de los niños, las niñas y los jóvenes.

Para los tecnócratas y los simpatizantes (convencidos o no) del reformismo conservador (con orientación claramente neoliberal), sin embargo, la lógica del “cambio educativo” se reduce solo a una mera imposición de “modelos” o “programas” desde fuera (el “deber ser”) de las escuelas (como ha sido el caso de las reformas educativas promovidas durante las últimas décadas en varios países, y ha sido también la situación por la que ha pasado México). Eso se ha hecho a través de dispositivos técnicos únicos, nacionales y obligatorios, diseñados por expertos, funcionarios o científicos de la educación, cuyas propuestas han sido válidas para el autoconsumo de la propia comunidad científica (corporativa e institucionalizada), pero que son ajenas a las necesidades de las comunidades magisteriales, es decir, para las figuras educativas que laboran en las escuelas y en las aulas (docentes, directivos escolares y asesores técnicos), es decir, para quienes operan cotidianamente los planes y los programas de la educación pública.

 

En resumen, la ruta crítica elegida por el Estado mexicano, para los propósitos reformistas, fue la siguiente: el Poder Legislativo, por iniciativa del Ejecutivo, modificó el texto constitucional, sin consulta pública en 2013, y estableció como principio general y entre otros aspectos, en el Art. 3 de la Carta Magna, que la “calidad de la educación” se definiría como el “máximo logro de aprendizaje de los educandos”, con lo cual se fijarían las bases para el diseño o adecuación de las leyes secundarias en materia educativa (Ley General de Educación, Ley del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación y Ley General del Servicio Profesional Docente), a través de cuyos contenidos y aplicaciones, (como eje central de las políticas públicas), se enfocaron obsesivamente hacia la evaluación de las diferentes figuras educativas, de manera rigurosa y con consecuencias laborales, como el mecanismo universal que aseguraría alcanzar la llamada “calidad educativa”.

Las autoridades educativas federales y estatales durante ese periodo (2012-2018) jamás admitieron, sin embargo, que el cambio educativo más redituable y duradero no es el que se da mediante el arreglo (en la oscuridad) entre las cúpulas del poder político y otros grupos privilegiados, sino desde las escuelas (y no me refiero a la iniciativa de poner a las “Escuelas al Centro”). Arreglo que históricamente se ha dado entre los actores sociales que cogobiernan y que constituyen las élites del poder científico técnico (grupos de expertos en educación que preservan la hegemonía en las instituciones legitimadoras del saber, como he descrito antes, cuyo coto de poder más actual, en México, ha sido el INEE), y que, en conjunto con otros grupos de poder, han tomado las decisiones importantes en materia educativa para la nación: cúpulas empresariales; alta jerarquía de las iglesias; dirigencias de la clase política y sindicales, así como el poder fáctico que ejercen los medios de comunicación, que participan, directa o indirectamente, en el proceso de validación o legitimación de los contenidos, los métodos, el financiamiento, la organización, los tiempos y la infraestructura de las escuelas.

 

Una de las cuestiones que habrán de ponderar las futuras autoridades educativas federales (que impulsarán la 4T), es la dinámica que prevalece en la esencia de las prácticas educativas y docentes cotidianas en las escuelas, en el sentido de revisar los estilos de enseñanza centrados en la “directividad”, así como su orientación para conservar los vínculos de dependencia docente-alumno. (Revisión que está en la cancha de los colectivos escolares). Situación que no es solo privativa de nuestro país, sino que también es observada en otras latitudes: En Colombia, por ejemplo, los investigadores reconocen que “… la mayoría de la población presenta una marcada deficiencia en la habilidad de evaluación de la tarea (de aprender por cuenta propia), lo cual se puede explicar porque la educación inicial (Preescolar y Básica) que han recibido los sujetos, ha concedido al maestro el control y evaluación de los aprendizajes, haciendo del estudiante un sujeto pasivo y dependiente de su tutor, con pocas posibilidades de alcanzar procesos de autonomía y autorregulación de su aprendizaje…” (3)

 

Es de tal modo la urgencia de revisar los métodos y los fundamentos relacionados con las prácticas educativas y docentes en la escuela, que el mismo INEE se ha dado a la tarea de preparar una propuesta para capacitar o actualizar a docentes, asesores y directivos escolares sobre esos procesos, mediante el estudio profundo y reflexivo de métodos de autoevaluación, a efecto de promover la “autonomía escolar” (4); lo cual en sí mismo constituye una buena idea, pues sintoniza con la crítica que he esbozado a lo largo de este comentario (en el sentido de movilizar el cambio “desde abajo” y en forma “horizontal” y no de manera “vertical” ni “desde arriba”). Sin embargo, la pregunta que me hago, ante la propuesta del INEE, es: ¿Por qué hasta ahora?

 

Fuentes consultadas y notas:

(1) “La práctica educativa de los docentes es una actividad dinámica, reflexiva, que comprende los acontecimientos ocurridos en la interacción entre maestro y alumnos.  No se limita al concepto de docencia, es decir, a los procesos educativos que tienen lugar dentro del salón de clases, incluye la intervención pedagógica ocurrida antes y después de los procesos interactivos en el aula”, según B. García-Cabrero, Loredo, J. y Carranza, G. (2008). Análisis de la práctica educativa de los docentes: pensamiento, interacción y reflexión.  Revista Electrónica de Investigación Educativa, Especial. Consultado en: http://redie.uabc.mx/NumEsp1/contenido-garcialoredocarranza.html

 

(2) M. Fullan. (1998) El significado del cambio educativo. (The Meaning of Educational Change: A Quarter of a Century of Learning). En: A. Hargreaves, A. Lieberman, M. Fullan y D. Hopkins (eds.): International Handbook of Educational Change (pp. 214-228). Dordrecht: Kluwer. Traducción de Santiago Arencibia y revisión técnica de Antonio Bolívar, reproducido en: Profesorado, revista de currículum y formación del profesorado, 6 (1–2), 2002, (España).

 

(3) Isabel A. Sierra Pineda y N. Carrascal Torres (2016) “Desafíos Epistemológicos y requerimientos en los Planes de Formación de Maestros para la Educación Infantil: El camino hacia la Autorregulación Temprana y la Autonomía”. Documento presentado en el 3er. Simposio Internacional y 4o. Coloquio Regional de Inv. Educativa y Pedagógica. Montería, Colombia.

 

(4) Sylvia Schmelkes; Galas Taboada, C.; Hamilton Vélez, E.V.; Chicharro Gutiérrez, M.P.; y Hamilton Vélez, J. (2018) “Autoevaluación y Autonomía Escolar: Principios y herramientas para la Gestión”. INEE. México.

 

Fuente del Artículo:

https://www.sdpnoticias.com/nacional/2018/11/26/reforma-educativa-mirar-a-la-escuela-de-otra-manera

ove/mahv

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Educación y sindicalismo

Autor: Pedro Echeverría V.

1. El Sindicato (el SNTE) y la Coordinadora (la CNTE) se han confrontado desde 1979, es decir, casi 40 años. 10 años la CNTE se enfrentó contra el liderazgo de Jongitud Barrios, protegido por el presidente López Portillo, y desde 1989 contra la líder Esther Gordillo impuesta en el cargo de secretaria general, por el presidente Salinas. El SNTE es un poderoso sindicato: a) porque cuenta con alrededor de millón y medio de afiliados y b) porque los maestros suelen ser líderes sociales en todos los estados de la República. Yo fui profesor durante 42 años (1960-2002) en todos los niveles escolares-educativos, por ello desde 1960 viví con gran intensidad las luchas magisteriales de oposición radical.

2. Las batallas de todos mis compañeros de la CNTE, por la democracia e independencia sindical durante casi cuatro décadas han sido realmente heroicas, tanto que han representado con mucho la vanguardia de las luchas sociales del país. Sus marchas y plantones se iniciaron desde 1979, pero se intensificaron en los últimos 18 años a raíz de los gobiernos panistas de Fox, Calderón y del priísta Peña con un activismo de los 365 días del año. Me preguntarían: ¿Por qué entonces no ha logrado deshacerse de los dirigentes espurios, “charros”, traidores del SNTE?, a) porque esos líderes son del PRI y fuertemente apoyados por los gobiernos y b) porque el nivel de conciencia de los maestros es muy bajo.

3. No olvidemos que el Sindicato (SNTE) fue creado por el gobierno de Ávila Camacho y con el secretario de Educación Torres Bodet en 1943, cuando se cambió el texto del artículo tercero constitucional de “educación socialista” a “educación nacional”. El sindicato de hecho nació al servicio del gobierno y del PRI con toda la cobertura a sus líderes. En las décadas siguientes muchos líderes del SNTE ocuparon diputaciones y senadurías del PRI. ¿Cómo se fortalecería una oposición si el liderazgo charro recibía todos los apoyos para consolidar el apoyo de los maestros que sólo buscaban préstamos de corto plazo e hipotecarios, apoyos para cambios de escuela y demás gestiones con apoyo gubernamental?

4. El discurso radical, de oposición, de la CNTE causó mucho miedo entre los maestros que sólo buscaban comodidad personal en su trabajo y que nunca entendieron el significado de democracia, libertad, solidaridad. Incluso hoy muy pocos entienden los significados educativos y sólo buscan la seguridad en el empleo. Solamente cuatro estados: Oaxaca, Michoacán, Guerrero y Chiapas, han destacado durante años como vanguardia; otros estados, DF, Morelos, Edo, de México, Zacatecas, Tlaxcala y otros dos o tres más, han apoyado con fuerza. La CNTE agrupa a unos 350 mil profesores, la cuarta parte de todo el SNTE, por ello le han bloqueado todas sus luchas y demandas, así como la distribución de cuotas sindicales.

5. Aunque por pocos días, me ha tocado estar en muchos plantones de la CNTE y observar el desplante de provocadores del gobierno y empresarios que se dedican a insultar con el pretexto de que bloquean y afean la ciudad. Grandes comerciantes, en vez de reclamar al gobierno por la solución de las demandas, se dedican a criticar a los profesores porque “ahuyentan” las ventas. La ciudad de México –que se supone es la de mayor conciencia del país- en vez de solidarizarse con las batallas de la CNTE por estar luchando por una buena educación, la critican porque con sus manifestaciones perjudican el tránsito de automóviles. Pero, lo importante es que la CNTE, en casi 40 años, “no se rinde ni se vende”.

6. Con el triunfo electoral de López Obrador y la liberación de la lideresa Esther Gordillo, muchas cosas van a cambiar: a) Que el líder, profesor Juan Díaz –antes secretario particular de Gordillo- será acusado de traidor y es posible que renuncie; b) Que la profesora Gordillo buscará su reinstalación como “presidenta vitalicia del SNTE” o secretaria general; c) Que el CNTE dará continuidad a sus batallas contra la llamada “reforma educativa” y contra el “charrismo sindical”. La novedad es el gobierno de AMLO que se iniciará el 1 de diciembre, pero que desde ahora actúa. Yo hice la propuesta hace algunas semanas de una reunión inicial de AMLO y especialistas con las tres corrientes con 10 representantes para iniciar la discusión del asunto.

7. La CNTE va muy adelante después de realizar varios foros con altos especialistas en educación en los que destacan Pérez Rocha, Gil Antón, Hugo Aboites, etcétera. Lleva la CNTE un trabajo muy adelantado en propuestas para cambios educativos. Lo que traba todo es el problema sindical que esencialmente es político. Los representantes de AMLO tendrían que ser muy inteligentes para mediar y sacar acuerdos buscando no antagonizar. Si se lleva a una elección general sin convicciones firmes, sin acuerdos fuertes, las cosas regresarán a los enfrentamientos. Lo que cabe son argumentos, intervención de especialistas en educación y política como los tres antes nombrados. López Obrador se juega en estos acuerdos una parte de su futuro como gobierno.

Fuente: http://www.rebelion.org/noticia.php?id=245859

 

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Argentina: “Si no se institucionalizan las innovaciones educativas se pierden con el tiempo”

Redacción: Aptus

En el marco del Pre Foro de Educación, organizado por Educar 2050 y la Bolsa de Comercio de Rosario, que se llevó a cabo el 28 de mayo en Rosario, diferentes actores del ámbito de la educación se reunieron para analizar las necesidades actuales de estudiantes y de escuelas e indagar acerca de cómo innovar tanto en el sistema educativo como dentro del aula.  

Bajo el lema “Los aprendizajes: cambios en el sistema y en el aula”, la mesa conformada por Guillermina Tiramonti, FLACSO; Cora Steinberg, UNICEF y Lucas Delgado, EduLab/CIPPEC, analizó cómo las herramientas tecnológicas y la innovación pedagógica irrumpen en el escenario escolar y se presentan como una oportunidad para transformar la realidad educativa.

Dialogamos con Lucas Delgado, coordinador de Educación de CIPPEC, una organización sin fines de lucro que produce conocimiento para construir mejores políticas públicas, quien brindó detalles de los temas que se abordaron en el panel y analizó diferentes aspectos de la educación actual.

De abajo hacia arriba

“Este tipo de paneles apuntan a debatir y analizar qué cambios son necesarios, qué errores no deberíamos volver a cometer y cuáles son las deudas que aún existen en materia de transformación educativa”, expresó Delgado y destacó: “Es importante diferenciar cuáles son las problemáticas más urgentes por atender y desde CIPPEC vemos que actualmente la cuestión docente y de financiamiento de la educación, son dos aspectos que requieren atención”, expresó Delgado.

Respecto a cómo realizar la transformación educativa, el coordinador de CIPPEC aportó otra mirada que incluye a todos los actores: “Más allá de los cambios sistémicos que deben hacerse y más allá de las políticas que son necesarias, debe existir cierto empuje desde abajo hacia arriba, en términos de que si no pasa nada en las escuelas es muy difícil que el Estado pueda tomar ciertas prácticas que son propias de las instituciones educativas”.

Consenso e institucionalización

El año pasado CIPPEC presentó el libro “50 innovaciones educativas para escuelas”, con la intención de analizar cómo se instalan y materializan en la práctica de las aulas: “Efectivamente hay ciertas prácticas que pueden suceder en las aulas y que terminan de alterar los esquemas de aprendizajes de los alumno. Lo importante es ver si aparecen luego las políticas que las acompañen para poder sostenerlas en el tiempo”, explicó Delgado.

“Si no sucede esto, la innovación queda circunscripta a que el docente sea lo suficientemente activo y promotor de determinadas acciones. Luego el docente se va, y si eso no se institucionaliza de alguna manera, la innovación se pierde”, enfatizó el coordinador.

Por eso, destaca Delgado, “es importante que los cambios en innovación estén consensuados y articulados con todos los actores, tanto con los alumnos, como con los docentes, directivos hasta los supervisores y ministros” y dio un ejemplo: “Cuando hay un apoyo desde la política, como en el caso de Santa Fe o Salta donde se implementan las Tertulias Dialógicas Literarias, una propuesta que se trabaja en articulación con CIPPEC, te das cuenta cómo una práctica puede realmente escalar y sostenerse en el tiempo y luego son los propios alumnos la que la incorporan y aseguran su permanencia”.

Mirar y traducir

Consultado respecto a si es necesario transformar la escuela, Delgado sostiene que efectivamente la institución educativa, tal como se concibió a fines del siglo XIX, orientada a una cuestión industrial, es necesario modificarla y actualmente existen muchas iniciativas para resignificarla  como lugar de formación, lugar de aprendizaje, sin embargo, destacó que “aún no estamos de acuerdo en cómo hacerlo”.

“El Ministerio de Educación está mirando hacia afuera; cómo son los métodos de enseñanza de Finlandia, en Singapur, pero en definitiva lo que estamos necesitando es una traducción de eso a nuestra realidad latinoamericana para que tengan sentido con nuestras sociedades”, expresó Delgado y continuó: “No está mal mirar hacia afuera pero siempre y cuando no nos olvidemos de diagnosticar bien qué está sucediendo en nuestra región  y eso es algo de lo que carecemos”.

El coordinador de CIPPEC, sostiene que “No tenemos diagnósticos muy claros como para poder tomar las decisiones más adecuadas, en términos de políticas. Hemos avanzado mucho en Argentina en instalar una cultura de la evaluación en estos últimos años con las pruebas Aprender, pero aún faltan indicadores para entender cuál es el diagnóstico”.

La cuestión docente

Con respecto a la cuestión docente, que surge de los cuestionarios de las evaluaciones APRENDER,  desde CIPPEC se observa una problemática que consideran urgente de atender: actualmente hay pocas provincias que han podido avanzar en una contratación de un docente por cargo.

“Es necesario contar con docentes que puedan tener tiempo no solo para estar frente a la clase sino para trabajar con sus colegas, para trabajar en el seguimiento de sus alumnos, para comprometerse más en la institución”, expresó Delgado y enfatizó que desde CIPPEC promueven que haya un cambio real en la carrera docente.

“Es uno de los componentes esenciales para que podamos establecer mejores políticas y mayores compromisos de diferentes sectores con los procesos de cambio en la educación”, concluyó.

Fuente: http://www.aptus.com.ar/si-no-se-institucionalizan-las-innovaciones-educativas-se-pierden-con-el-tiempo/

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Los profesores que preservan la herencia cultural en la Amazonía peruana

Perú/28 de Abril de 2018/Canal IPe

Gracias a los programas del Formabiap, niños y niñas de comunidades indígenas en la Amazonía pueden aprender conservando sus conocimientos culturales.

Las comunidades indígenas y nativas del Perú tienen muchos conocimientos ancestrales que se mantienen a través de sus descendientes. Desafortunadamente, muchos de los profesores que llegan a enseñar a los niños no lo toman en cuenta y con el tiempo son olvidados.

El Programa de Formación de Maestros Bilingües de la Amazonía Peruana (Formabiap) vio en este obstáculo una oportunidad. Gracias a su trabajo formando profesores, son capaces de llegar a más niños y niñas y enseñarles preservando su lengua materna y conocimientos de su entorno.

La iniciativa fue desarrollada gracias al trabajo conjunto con el Instituto de Educación Superior Pedagógico Público Loreto y la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana.  Desde hace años, se enfoca en formar docentes de inicial y primaria para que puedan enseñar en comunidades nativas de la Amazonía.

Hasta el momento, cuentan con 292 egresados en educación primaria y 27 en educación inicial provenientes de pueblos indígenas como Achuar, Asháninka , Awajún, Bóóraá, Chapara, Shawi, Shipibo y muchos más.

Conoce más de ellos en la siguiente entrevista:

¿En qué consiste el trabajo de Formabiap en Iquitos?

Formabiap ha enfocado la formación de los docentes como protagonistas de cambios educativos y sociales de sus pueblos. Se espera que estos docentes, enraizados en su historia, conocimientos, cultura y valores, formen comunidades educadoras que valoren y hagan uso armonioso y respetuoso de los diferentes espacios que ofrecen la comunidad y el bosque.

Para ello deben contar con la sabiduría de los mayores y la relación con los seres espirituales y tutelares, para generar y transmitir enseñanzas y aprendizajes pertinentes y culturalmente situados.

¿Cuáles son los retos que enfrentan los niños y niñas de estas comunidades para acoplarse al sistema educativo estatal?

La formación escolar castellanizante. Muchas escuelas de las comunidades indígenas tienen docentes que desarrollan sesiones de aprendizaje en castellano sin tener en cuenta que los niños y las niñas se han socializado en su lengua materna.

La escuela en las comunidades indígenas no considera los conocimientos propios o locales producidos en las actividades sociales y productivas, generando en los niños y niñas sentimientos de vergüenza y desvalorización de los conocimientos y prácticas de sus pueblos.

¿A qué problema u obstáculo en la currícula escolar responde el Formabiap?

Los obstáculos que nos encontramos son el desarraigo del niño o niña de su familia y su sociedad, la exclusión de los conocedores de la comunidad en la construcción de aprendizajes, el desarrollo de sesiones de aprendizajes en las cuatro paredes del aula y la falta de creatividad para utilizar los recursos del ambiente en la construcción de aprendizajes.

Para ustedes, ¿por qué es importante mantener esta riqueza cultural en nuestro país?

En primer lugar, es un derecho que tienen los pueblos de vivir de acuerdo a su cosmovisión y tradiciones culturales, y de seguir reproduciendo su cultura a través de sus generaciones.

La sabiduría indígena, en todo el mundo, es la alternativa a la crisis ecológica y de valores que estamos viviendo en el mundo global. Consideramos que la cultura de un pueblo amazónico, andino, afroperuano, costeño u otros de origen migrante es muy valiosa, por lo que, desde el hogar y la escuela se debe respetar y desarrollar sus lenguas, sus normas, sus valores y su forma de concebir el mundo.

Fuente: http://www.canalipe.tv/noticias/identidad/los-profesores-que-preservan-herencia-cultural-en-amazonia-peruana

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República Dominicana: Nuevos tiempos, un nuevo tipo de educación.

Por: hoy.com.do/ Leonardo Boff/21-03-2018

La realidad en las últimas décadas ha cambiado tanto que ha afectado también a nuestro estilo de educación. Cito algunos de estos cambios:
Hemos construido el principio de nuestra autodestrucción con armas nucleares, químicas y biológicas. Nada es absolutamente seguro y un accidente cualquiera puede destruir nuestra civilización.

El calentamiento global crece día a día. Si no hacemos nada, como la comunidad científica norteamericana ha advertido, podemos conocer dentro de algunos años un calentamiento abrupto de hasta 4-6 grados Celsius. Con eso, la mayoría de los seres vivos conocidos no resistirán y desaparecerán. Y parte de la humanidad también.

La escasez de agua potable (sólo el 0,3% es accesible a los seres humanos y a los animales) puede provocar guerras letales para garantizar el acceso a fuentes de agua dulce. O también alianzas de cooperación.

La planetización es un hecho nuevo en la historia de la Tierra y de la Humanidad. Salimos un día de África, donde estuvimos durante 4-5 millones de años y por eso somos todos africanos, y después nos esparcimos por los continentes; ahora estamos volviendo y encontrándonos en un solo lugar: la Casa Común, la Tierra.
La crisis ecológica afecta directamente al sistema-vida y al sistema-Tierra. Estamos destruyendo las bases físico-químicas que sostienen la vida. De continuar la sobrerexplotación de la Tierra, ella no aguantará y nuestra civilización estará amenazada.

Existe el peligro de que superbacterias que perdieron su hábitat por la deforestación puedan invadir ciudades y diezmar a miles de personas, sin que sepamos cómo enfrentarlas con potentes antibióticos.

Estos son datos, no fantasías. La gran mayoría de las personas no tiene conciencia de los peligros que corre. Es como en tiempos de Noé: todos se divertían y se reían del anciano, y vino el diluvio. Sólo que hoy es diferente: no tenemos un Arca de Noé que pueda salvar a algunos y dejar perecer a los otros. Todos podemos perecer.

Todo esto nos obliga a pensar sobre el futuro común de nuestra especie y de la Casa Común. Todo debe comenzar con una sensibilización general. En casa y en la escuela es donde tal nueva conciencia debe surgir.

Veamos qué tareas nuevas se presentan a los maestros y qué nueva percepción deben desarrollar en los educandos. Lógicamente la escuela debe llevar adelante su tarea básica, como la enunció la UNESCO:
(1) Aprender a conocer todo lo que el pasado nos legó. Como escribió Montaigne (1533-1592) en sus Ensayos: «el educador debe tener la cabeza sobre todo bien montada, más que bien llena». Es decir, saber la situación real de la Tierra y trasmitirla a los estudiantes;
(2) aprender a pensar, sabemos mucho y todo está en Google, pero no pensamos lo que sabemos. El saber es un poder que puede construir una bomba atómica o un antibiótico. El saber no es neutro. Pensar es detectar a quien sirve el saber y quiénes son los dueños del saber;
(3) aprender a vivir, que es crear un carácter recto, amante de la verdad, es ser un buen ciudadano participativo con un proyecto solidario de vida;
(4) aprender a convivir, pues hoy vivimos en medio de las mayores diferencias de raza, religión, ideas, opciones sexuales; no permitir que la diferencia se transforme en desigualdad; todos tienen derecho de vivir su modo de ser; importa estar abierto en las redes sociales al destino de los pueblos, muchas veces trágico como ahora en Siria; interesarse por el sufrimiento de los más pobres y excluidos;
(5) aprender a cuidar. Esto es nuevo pues sabemos que el cuidado es la ley básica de todos los seres vivos y también del universo; si no cuidamos del agua, la basura, de nosotros mismos y de las relaciones sociales, podemos dar espacio a la degradación; todo lo que amamos, lo cuidamos, y todo lo que cuidamos, lo amamos;(6) aprender a tener una ética y una espiritualidad. La religión puede ayudar pero no necesariamente, pues muchas hacen guerra y matan; ser ético es orientarse hacia el bien, asumir las consecuencias de nuestros actos, buenos o malos; optar por el bien común, por la verdad contra toda corrupción.

La espiritualidad es una dimensión antropológica, como lo es la razón, la voluntad y la libido; somos espirituales cuando planteamos preguntas últimas: ¿por qué estoy aquí, cuál es el sentido del universo, de la vida y de mi propia existencia…? Ser espiritual es desarrollar lo que neurólogos y neurolingüistas llaman el “punto Dios en el cerebro”: siempre que abordamos aspectos de lo sagrado y del sentido último de la vida hay una aceleración de nuestras neuronas; es el “punto Dios”, que nos permite intuir que por detrás de todas las cosas hay una Realidad amorosa y poderosa que sustenta todo, las estrellas y también nuestras vidas. El “punto Dios” está hecho de amor, de compasión, de solidaridad y de devoción; nos hace más sensibles a los otros, y más humanos; cultivar el “punto Dios” es superar el materialismo actual y nutrir la esperanza sobre el fin bueno de todo.

Los educadores deben imbuirse de estos nuevos desafíos y enseñárselos a sus educandos. Sólo así estaremos a la altura de los graves peligros que se nos presentan.

*Fuente: http://hoy.com.do/nuevos-tiempos-un-nuevo-tipo-de-educacion/

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La educación en 2030: una escuela menos relevante y un aprendizaje más individual

Por: Daniel Sánchez Caballero

Expertos dibujan cómo será la escuela del futuro en el año 2030.

«El sistema educativo está agotado, aburre a los alumnos, por eso hay tanto fracaso», opinan los especialistas.

Los centros dejarán de ser la única fuente de conocimiento, que pasará principalmente por los contenidos online, según una encuesta entre autoridades de la materia.

Los profesores pasarán de ser transmisores del conocimiento a ejercer de guías de los alumnos.

Los colegios e institutos tienen ordenadores, pizarras digitales, wifi. Los profesores tienen blogs o páginas web en las que cuelgan apuntes, ejercicios o información general e interactúan con sus alumnos. Algunos centros hasta tienen apps para pasar lista y comunicar a los padres ausencias injustificadas de sus hijos. Pero si se rasca un poco la escuela sigue teniendo una estructura básicamente decimonónica, anclada en tiempos pasados. No se ha acabado de modernizar en su conjunto más allá de introducir elementos modernos.

Pero la tecnología avanza cada vez más rápido y todo acaba llegando. Así lo creen al menos expertos de todo el mundo, que vaticinan grandes cambios desde ya mismo —algunos más visibles, otros menos— que configurarán una nueva escuela para el año 2030. Una escuela que perderá su papel preponderante como principal fuente de conocimiento frente a internet, donde las tradicionales clases magistrales desaparecerán, el profesor cambiará su rol —de impartir conocimientos a ejercer de guía de los alumnos—, el curriculum será más individualizado para cada estudiante y los conocimientos académicos perderán peso en favor de las habilidades personales y las competencias.

Esta es la escuela que imagina para dentro de 15 años la  organización WISE(Cumbre Mundial por la Innovación en Educación, en sus siglas en inglés, creada en 2009 por la Fundación Qatar), según el resultado de  una encuesta llevada a cabo entre 645 de sus miembros, expertos en educación entre los que destacan nombres como el lingüista Noam Chomsky o el profesor Sugata Mitra o ex políticos de primer nivel.

De escuelas, métodos y docentes

Quizá uno de los cambios de futuro más importantes que se avecinan en la escuela es el que sufrirán los centros. El 93% de los encuestados por WISE sostiene que los colegios evolucionarán hacia métodos más innovadores. La tradicional clase en la que un maestro se sitúa frente a sus alumnos y les «suelta un rollo» ya no sirve. Más aún, como sostiene Elena Martín, catedrática de Psicología Evolutiva y de la Educación, «las clases organizadas en filas y columnas deberían ser inadmisibles».

Antonio Moreno, catedrático de Didáctica y Ciencias Experimentales de la Universidad Complutense de Madrid, cree que «el sistema educativo está agotado, no da más de sí. La escuela tradicional es un aburrimiento, por eso hay tanto fracaso». Muchos comparten análisis. «Los alumnos hace diez años escuchaban, ahora ya no», explica Manuel Jesús Fernández, director del instituto Virgen del Castillo de Lebrija (Sevilla). Motivo por el que decidió implantar el aprendizaje por proyectos y le está funcionando. Se ha vuelto a ganar a sus alumnos.

John Mahaffie, uno de los principales estudiosos de la educación del futuro y miembro de WISE, añade que «la gente suele pensar que para innovar hay que gastar dinero y dar a cada estudiante una tablet o notebook, pero hay enfoques no tecnológicos mucho más interesantes. Por ejemplo, cambiar la rigidez del sistema actual de clasificar a los niños por su edad».

El propio papel de las escuelas se intuye como otro de los grandes campos de discusión y cambio en un futuro. Algo menos de la mitad (un 43%) de los 645 expertos de WISE considera que los contenidos online pasarán a ser la primera fuente de conocimiento frente a la escuela física o el entorno social y personal del alumno. Nuria Miró, directora del  colegio Montserrat de Barcelona y miembro de WISE, coincide en que «se discute mucho sobre si la escuela debe pervivir como el lugar de aprendizaje. Yo no creo que vaya a desaparecer, será un ámbito más», opina. Miró entiende la escuela como «un catalizador de los intereses de los alumnos, los intereses sociales, de lo que pasa en el barrio, etc. para que todo sea una comunidad de aprendizaje».

En esta línea se manifiesta también Moreno. «A la escuela hay que descargarla de tanta responsabilidad. Yo hablo de municipio o el barrio escolarizado, transferir a estos entornos competencias del ámbito extraescolar», explica. Según este experto, «dar más participación a las familias, a las instituciones locales, dará más sentido social a la escuela, que es lo que debe tener».

El rol de los profesores es otro de los cambios que verán las escuelas, según WISE. Los expertos de esta organización apuestan mayoritariamente (73%) por un docente que pasará a ejercer de mentor o guía de un alumno que construirá su conocimiento a partir de diferentes fuentes y no como transmisor casi único del conocimiento como sucede hasta ahora (19%).

Moreno, profesor de futuros profesores, coincide: «El maestro es una persona que colabora en este proceso, en que la formación vaya dirigida en este sentido. Administrando también los saberes, a ser un orientador además de un promotor de saberes. De técnicas de estudio, etc. para que aprendan a manejar la información», asegura. Sin embargo, José Antonio Martínez, presidente de honor de la Federación de Asociaciones de Directivos de Instituto Fedadi, matiza que «se podrá cambiar la metodología, meter ordenadores, etc. pero al final siempre hay un momento de transmisión». Para este ex director de instituto, a los maestros siempre les quedará la labor de «inculcar el sophos, el amor a la sabiduría, a saber algo».

Conocimiento y financiación

El informe de WISE también se refiere a los currículos y las características de los alumnos. Los expertos de la organización opinan que las habilidades personales como la capacidad de conectar y empatizar con los demás o tomar decisiones, junto al saber hacer frente al saber a secas —las competencias— ganarán peso en la educación en detrimento de los conocimientos académicos que se valoran ahora. El saber hacer frente al saber tradicional.

Moreno pone un ejemplo muy básico. «Los alumnos ya no escriben, lo hacen en el ordenador. Emperrarse mucho en la escritura y la ortografía tiene los años contados, lo mismo que el cálculo. ¿Por qué ir contra la calculadora?», empieza. «Otra cosa es la comprensión lectora, esto es diferente. Hay que saber leer y entender. Y escribir en el sentido de utilizar el pensamiento para expresar algo, saber discutir, argumentar», sostiene.

También opinan los expertos que los curriculum tenderán a la individualización, a adaptarse a los perfiles de cada estudiante. Esta tendencia ya se da en algunos centros. Miró, directora del Montserrat, explica que en su centro basaron todo el cambio en este concepto. «Buscamos formas para atender a cada alumno, hacer un aprendizaje más personal», explica. «Creemos en las inteligencias múltiples y en que cada alumno en inteligente en algo», añade. De esta manera, introdujeron nuevos temas como la emprendeduría social, «el ajedrez, la robótica, el huerto escolar… Trabajamos todas las inteligencias, no sólo las matemáticas o la lengua como se venía haciendo». Han conseguido que el centro se considere de referencia en innovación educativa.

Por último, siete de cada diez expertos de WISE opinan que la financiación de la educación dejará de ser cosa fundamental de los Estados para pasar a las familias o incluso las empresas. Respecto a las compañías, la encuesta también prevé que vayan adquiriendo paulatinamente un rol importante en la certificación de los conocimientos o habilidades, igualando en importancia a los títulos académicos que expiden las organizaciones educativas como las universidades.

Los cambios que ya están aquí

Sin necesidad de echar la vista tan hacia delante como 2030 también se vislumbran otros cambios en los centros educativos, quizá más palpables, con un horizonte temporal de entre un año y cinco, según la edición anual del informe Horizon Report del instituto NMC de Austin (Texas, EE UU), que aglutina a cientos de universidades, museos y centros de investigación.

A corto plazo —un año— los centros educativos verán introducirse cambios metodológicos como el aula invertida (flipped classroom). Con este método, una realidad ya en algunos centros españoles, los alumnos hacen el trabajo de obtención de información en su casa para luego utilizar la hora de clase en ponerlo en común o plantear dudas al profesor, de manera que se aprovecha mejor el tiempo en el aula con los docentes. Otro de los cambios más próximos es la introducción del llamado Learning Analytics en la educación. Esto es, la utilización del big data (cantidades masivas de datos de cuyo análisis se extrae información y conclusiones) para por ejemplo detectar las decisiones tomadas en diferentes sectores educativos que, cruzadas con el rendimiento de los estudiantes, puedan traducirse en proporcionar aprendizajes personalizados o identificar problemas: qué funciona y qué no.

A dos o tres años vista NMC apuesta por la impresión 3D y los videojuegos y la llamada gamification. El uso de impresoras 3D en el sector educativo estará reducido por su coste, pero las ventajas son evidentes: poder reproducir y estudiar en clase elementos que de otra manera serían inaccesibles para los alumnos. O plasmar físicamente el resultado de un proyecto. Respecto a los videojuegos, Horizon Report justifica que «la cultura del videojuego ha crecido hasta llegar a una porción sustancial de la población. Jugar ha dejado de ser meramente recreacional». En este sentido, la gamification se presenta como la introducción de «elementos, mecánicas y contextos de los videojuegos en situaciones ajenas a ellos». Y a los videojuegos se les reconoce que fomentan la implicación en el pensamiento crítico, en la resolución creativa de problemas y en el trabajo en equipo, habilidades todas ellas que los educadores defienden como básicas.

Por último, en un horizonte temporal de cuatro o cinco años aparecen el Quantified Self. A partir de esta «automedición» o monitorización de datos con tecnologías portátiles (como ya hacen los móviles o está a punto de hacer la ropa inteligente, los wearebles), NMC asegura que «resulta fácil imaginar» que la combinación de la información obtenida del learning analytics con estos datos personalizados «podría revelar cómo las modificaciones del contexto mejoran los resultados del aprendizaje».

Fuente: http://www.eldiario.es/sociedad/escuela-diferente_0_328617413.html

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