Redacción: Prensa Latina
El coordinador de Unepey, Carlos Duarte señaló que no se podía pensar en una reforma educativa que regirá después en todo el sistema del país, sin tener en cuenta a los estudiantes.
Somos quienes sufren día a día la cruda situación de la educación y, por ende, conocemos perfectamente la situación en la que estamos y tenemos muchas soluciones para los problemas actuales, dijo.
Igualmente padres, maestros, representantes de organizaciones civiles y públicas solicitaron ser partícipes de la construcción de esa nueva reforma educativa, durante la audiencia pública convocada por el Senado.
Todos ellos coincidieron en rechazar fórmulas, modelos o asesores extranjeros e imposiciones en educación.
De cara a esa reforma educativa, el Ministerio de Hacienda, en representación del Fondo para la Excelencia de la Educación y la Investigación (FEEI), contrató al Banco Mundial, para un servicio de ‘asesoría reembolsable’.
El FEEI asignó dos millones 42 mil 721 de dólares para el proyecto denominado ‘Plan Nacional para la Transformación Educativa 2030’ (PNTE).
Ese servicio lo dará el Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento, dependiente del Banco Mundial, y contempla suministrar apoyo técnico y asesoramiento al ‘comité estratégico’, del que también formará parte, y gobernará todo el proceso para la preparación del PNTE y la hoja de ruta 2018-2030.
Para la secretaria general de la Organización de Trabajadores de la Educación del Paraguay Sindicato Nacional (OTEP-SN), Blanca Ávalos, esa intervención del Banco Mundial significará ‘una pérdida de soberanía’.
El país cuenta de sobra con expertos e investigadores para apoyar al Ministerio de Educación que debe liderar ese proceso de reformas, sin necesidad de pagarle al Banco Mundial, señaló Ávalos.