Saltar al contenido principal
Page 19 of 31
1 17 18 19 20 21 31

España: Los proyectos de innovación educativa como herramienta para la mejora de la calidad del proceso de enseñanza y aprendizaje

España/09 de Junio de 2018/El Economista

  • Vinculados a diversos ámbitos del conocimiento, y que ya se están aplicando

«OSWALDO: Observación y Evaluación de la docencia para la mejora de la calidad de la información»; «MOOC: Why biology matters»; «IMAX: Interacciones más allá de las asignaturas y las aulas para aumentar el éxito de los estudiantes»; «Experimentos interactivos en el aula y en tiempo real como herramienta docente en la enseñanza de conceptos económicos en ciencias sociales y naturales: una nueva propuesta vía smartphones» y «App Evalúate: una herramienta para el autoaprendizaje del estudiante «.

Estos son los cinco proyectos de innovación docente, que recibieron ayudas dentro del PlaCLIK 2016-2017, y que fueron presentados en el transcurso de la Jornada CLIK Prácticas de Innovación Educativa 2018, que tuvo lugar el pasado 1 de junio, en la sala de grados Albert Calsamiglia del campus de la Ciutadella, bajo la organización del Centro para la Innovación en Aprendizaje y Conocimiento (CLIK) de la Universidad.

Aparte de la exposición de estos cinco proyectos, que se han ido desarrollando e implementando a lo largo de este curso 2017-2018, la jornada contó con una bienvenida a cargo de Josep Lluís Martí, vicerrector para proyectos de innovación; y de Manel Jiménez, director académico del CLIK.

También incluyó dos ponencias sobre innovación docente: la primera, a cargo de Ismael Palacín, director de la Fundación Jaume Bofill, que expuso «Los retos de la innovación educativa: de las soluciones a los ecosistemas transformadores», y la segunda, a cargo de Albert Forn, director de mSchools, la rama educativa del Mobile World Capital Barcelona, que habló de «Una nueva forma de enseñar y aprender».

Este encuentro en torno a las prácticas de innovación educativa de la Universidad Pompeu Fabra tuvo lugar al día siguiente de la Jornada EDvolució, también organizada por el CLIK, y que se convirtió en un espacio de reflexión en el que expertos y pedagogos debatieron sobre los nuevos cambios en educación que la Universidad quiere tener en cuenta para el nuevo modelo educativo.

Exposición de los cinco proyectos referentes

Miquel Oliver, profesor del Departamento de Tecnologías de la Información y de las Comunicaciones (DTIC), junto con Encarna Atienza, del Departamento de Traducción y Ciencias del Lenguaje, presentaron «OSWALDO: Observación y Evaluación de la docencia para la mejora de la calidad de la información». El proyecto quiere impulsar la observación entre profesores, para la mejora de la calidad de la docencia, a partir de la metodología OSWALDO, y sobre todo, del feedback entre observador y observado. «OSWALDO permite poner un contrapunto en la evaluación basándose en procesos de observación sistemática del personal docente, o clase, entre iguales, es decir, entre profesores. Consiste en la implicación del propio profesorado con un rol de observador y a partir de unos criterios de evaluación basados ??en la reflexión crítica de la función docente», afirma Miquel Oliver, responsable del proyecto.

«MOOC: Why biology matters» es el título del proyecto impulsado por Jaume Bertranpetit, catedrático de Biología Evolutiva del Departamento de Ciencias Experimentales y de la Salud (DCEXS), que pretende proporcionar los contenidos de biología más relevantes, y especialmente los de biología humana, a los estudiosos de las ciencias sociales y de las humanidades en el ámbito de la Universidad.

«El proyecto pretende que los estudiantes puedan entender, interpretar y utilizar contenidos biológicos, que cada vez tienen más relevancia para muchas disciplinas, incluyendo las ciencias históricas, la filosofía, la lingüística, la antropología social, la política, la sociología, el derecho, la (bio)ética o la economía. Se trata de dar las bases para tener un pensamiento crítico en ámbitos en los que la biología pueda ser influyente», explica el profesor Jaume Bertranpetit.

Potenciar la enseñanza fuera del aula, con un aprendizaje basado en relaciones académicas tanto verticales como horizontales, con la creación de contextos que mejoren las interacciones entre los participantes, y un aprendizaje informal e interdisciplinario más allá de los planes de estudio, es el objetivo del proyecto «IMAX: Interacciones más allá de las asignaturas y las aulas para aumentar el éxito de los estudiantes».

Davinia Hernández-Leo, profesora del DTIC y responsable de IMAX, afirma que «este proyecto busca fomentar las interacciones sociales, a diferentes niveles, más allá del marco de las asignaturas o del aula, orientadas a la mejora de la adaptación, el tráfico, el aprendizaje y el empleo de los estudiantes de la UPF». Algunas de las actividades que propone son «mecanismos de mentorización (entre alumnado, profesorado y agentes externos) y actividades de aprendizaje compartidas, que comporten más impacto de los espacios físicos de encuentro en la Universidad y aprovechen el apoyo de espacios tecnológicos virtuales».

Dos aplicaciones innovadoras como herramientas docentes

«Experimentos interactivos en el aula y en tiempo real como herramienta docente en la enseñanza de conceptos económicos en ciencias sociales y naturales: una nueva propuesta vía smartphones», es el título de un proyecto impulsado por Humberto Llavador, profesor del Departamento de Economía y Empresa.

«Se trata del desarrollo de una aplicación innovadora de uso libre para hacer experimentos en el aula en tiempo real y de manera interactiva entre los estudiantes, y que permite la difusión del uso de experimentos como herramienta docente. Primero lo queremos hacer en la UPF, y después, extenderlo en otros centros», apunta Humerto Llavador.

El último proyecto presentado fue «App Evalúate: una herramienta para el autoaprendizaje del estudiante», una aplicación que permite responder a preguntas de las asignaturas y saber al instante la respuesta correcta. Corre a cargo de dos profesores del DCEXS: Nora Pérez y Elisabet Moyano (responsable).

El proceso de evaluación, que se desarrolla en los grados de Biología Humana y de Medicina, en la Facultad de Ciencias de la Salud y de la Vida, es un proyecto colectivo y unificado que incluye Pruebas de Elección Múltiple (PEM) conjuntas. «Estos exámenes contienen preguntas de todas las asignaturas del trimestre, con un máximo de 100, y se llevan a cabo al final del trimestre. Una vez finalizado el examen, los estudiantes conservan el formulario y tienen a su disposición la plantilla con las respuestas correctas. Así, pueden corregir de manera inmediata sus respuestas y tienen la posibilidad de hacer reclamaciones, sugerir cambios en las respuestas correctas o bien solicitar la anulación de preguntas», afirman las docentes.

PlaCLIK, una convocatoria para mejorar la calidad docente a partir de la innovación

Estos cinco proyectos presentados en el transcurso de la jornada se enmarcan en la convocatoria PlaCLIK 2016-2017, que otorgó ayudas a un total de 22 propuestas, repartidas entre dos modalidades diferentes: Proyectos de Innovación Docente y Proyectos de reorganización docente.

El Plan de Ayudas de Apoyo a la Calidad y la Innovación en el Aprendizaje y el Conocimiento (PlaCLIK) se encuentra actualmente en el proceso de tramitación de la convocatoria 2018-2019, que ya ha resuelto una primera fase de recogida de ideas, con 34 de aceptadas, que pasan a la siguiente fase de redacción de proyectos. La resolución final está prevista para el 20 de julio de 2018.

El PlaCLIK, de carácter anual, tiene una dotación económica total de 90.000 euros, con un máximo de 8.000 euros de ayuda para cada proyecto seleccionado. Su objetivo es apoyar el diseño y el desarrollo de proyectos sobre innovación y mejora de la calidad docente en el marco de las titulaciones de la universidad que atiendan necesidades del proceso de enseñanza-aprendizaje y que aporten innovación a partir de varias líneas estratégicas.

Fuente: http://www.eleconomista.es/ecoaula/noticias/9194526/06/18/Los-proyectos-de-innovacion-educativa-como-herramienta-para-la-mejora-de-la-calidad-del-proceso-de-ensenanza-y-aprendizaje.html

Comparte este contenido:

Académico cubano cuestiona que educación en Latinoamérica coloque como guía al pensamiento “norte-céntrico”

Cuba/09 de Junio de 2018/La Diaria

Según Luis Salazar, está pendiente una “batalla cultural”

Luis Salazar es graduado en Ciencia Política con un posgrado en Filosofía. Además, es doctor en Ciencias Sociológicas y en Ciencias, por lo que alcanzó el máximo reconocimiento académico conferido por la Comisión Nacional de Grados Científicos de la República de Cuba. También fue presidente de la Asociación Latinoamericana de Sociología y ejerce como profesor en el Instituto Superior de Relaciones Internacionales y de la Facultad de Filosofía e Historia de la República de Cuba. Salazar pasó por Montevideo y planteó que en Latinoamérica la historia se aborda a partir del relato de las “clases dominantes” y en forma segmentada.

Una de tus especialidades es el pensamiento martiano ¿Cuáles son los planteos de José Martí que siguen siendo desafíos latinoamericanos?

Martí es infinito. Dijo muchas cosas de los problemas que tenía Latinoamérica a finales del siglo XIX. Fundamentalmente, nos dejó una gran tarea que está aún está vigente: luchar por la segunda independencia de América, ya no frente al colonialismo español sino frente al imperialismo norteamericano. También dejó planteado el ideal de unas repúblicas con todos y para el bien de todos, de una América Latina que abandonara los supuestos del modernismo y de la modernización y que reconociera sus propias raíces, las de los pueblos originarios y de los provenientes de África, que habían venido como esclavos. Dejó planteada la necesidad de una república moral, de la ética como uno de los fundamentos que debían tener las repúblicas latinoamericanas. Cuando miramos lo que está pasando en muchos países latinoamericanos respecto de la corrupción de las clases dominantes y a veces de algunos dirigentes, su pensamiento recoloca esa carga ética y de llamamiento a la lucha que Martí planteó.

A 100 años de la Reforma de Córdoba, ¿considerás que sus propuestas conservan valor y vigencia?

Aunque nos parezca raro, muchas de las propuestas de la Reforma de Córdoba de hace 100 años aún no se aplican en la mayoría de las universidades de Latinoamérica. Por ejemplo, el tema de que la universidad no se puede encerrar en sus muros, que tiene que ir a la sociedad; aún persiste un gran elitismo. Además, estamos viendo algo que no existía en aquel momento, que es la privatización de la enseñanza universitaria, la aparición cada vez más generalizada de universidades privadas a las que se les dice peyorativamente “universidades garaje”. En muchos casos, tampoco existen la autonomía universitaria y la voz de los estudiantes, cuyas demandas suelen ser vulneradas.

¿Cómo se educa sobre el pensamiento latinoamericano en las instituciones formales y cómo se hace en Cuba?

Hay una gran contradicción en torno a eso. La educación que se imparte hoy en todo el sistema de enseñanza y todas estas reformas (que yo llamo contrarreformas educativas) colocan como guía el pensamiento norte-céntrico. Respecto de América Latina, aprecio con mucha preocupación, y lo he podido constatar en mi recorrido por el continente, que la historia que se imparte es la construida por las clases dominantes. Es, por tanto, una historia sesgada, que no se condice ni explica los procesos de lucha que se están dando, ni los sujetos que participan en esos procesos. Es una educación que tiende a generar miradas nacionales sin conectar con el resto de América. En Argentina, historiadores prestigiosos como Norberto Galasso han demostrado cómo en ciertos aspectos la historia de ese país fue montada sobre mentiras, y que para construirlas incluso tuvieron que destruir documentos y rearmarlos con el fin de generar una historia argentina descontextualizada del resto de América Latina. La figura de José de San Martín, uno de los grandes libertadores de nuestra América, no se estudia lo suficiente. Permanente se insiste en la discrepancia entre Simón Bolívar y San Martín para demostrar que Bolívar era un autoritario y San Martín un ilustre. Nada de esto está demostrado, y cada vez llegan más evidencias sobre los entendimientos tan profundos que hubo entre Bolívar y San Martín en su entrevista de Guayaquil. Se versea la historia hasta en la creación de la bandera argentina, o en las estrofas que hablaban de la lucha por la independencia que le quitaron al himno nacional, para quitarle todo aquello que conectara con una vocación latinoamericana. En Cuba, eran escasos los profesores que hablaran de Martí, de Carlos de Céspedes o de Antonio Maceo antes de la revolución. Todo aquello formó parte de la batalla cultural que siempre está implícita en todo proceso de cambio y de los intereses populares y nacionales. Uno de los deberes fundamentales es divulgar, construir una nueva historia que sea la de los oprimidos y no la de los dominantes.

¿Los estados nacionales que se generaron a partir de la exclusión de lo negro u originario tienen muy marcado ese tipo de relato histórico?

Eso es lo que yo llamo el pecado de la modernidad latinoamericana. Ya lo dijo Martí: “Estúdiese primero la historia de los incas, aunque no se estudie la de los arcontes de Grecia. El libro francés y norteamericano no tienen respuestas a los problemas de nuestra América”. Todas esas cuestiones planteadas por él aún forman parte de los problemas educativos actuales en los distintos países latinoamericanos.

¿Estos problemas están acentuados por la globalización?

Están acentuados por cómo se forman los procesos ideológicos, con todo este tema de la posmodernidad, que precede a la globalización neoliberal en su máxima expresión. Son ideas que empiezan a surgir en los años 70 del siglo XX, con las teorías de la fragmentación del sujeto, de que se acabaron las utopías, se acabó la historia, todo esto hoy está incorporado a las bibliografías. Hoy se les pide a los estudiantes que conozcan la bibliografía que se produce en el norte y no la que produce el pensamiento latinoamericano. De hecho, los propios profesores están compelidos a buscar méritos en publicar en las grandes revistas del norte. Y publican pensamientos que no son críticos, que son –para utilizar una expresión de Aníbal Quijano y de los estudios poscoloniales– un pensamiento colonizado, forma parte de esa colonización del saber y del ser. La globalización neoliberal lleva en sí un componente que bien se puede llamar de “guerra cultural”, porque esta no es sólo económica o política, tiene también un componente civilizatorio y cultural. En Latinoamérica y el Caribe se puede apreciar en el hecho de que nuestros niños sepan quién es Mickey Mouse y no quién es Simón Bolívar.

¿Un ejemplo de esa guerra cultural es la imposición del idioma inglés?

Yo matizaría eso. Evidentemente, el inglés es el idioma predominante en el lenguaje de la técnica, de la ciencia y de la las nuevas tecnologías de la comunicación y la información. En ese sentido, no hay forma de escaparse de eso. De hecho, en Cuba el sistema educativo ha estado discutiendo que si queremos insertarnos en este mundo del conocimiento, necesariamente nuestros educandos tienen que aprender inglés. No tenemos los instrumentos, como hacen los españoles, de llevar al castellano muchas de las palabras que han surgido de aquellos que hoy monopolizan los conocimientos científicos contemporáneos. Además, dentro de las mismas lenguas existen luchas de descolonizaciones del saber y del ser, como entre el portugués de Portugal y el de Brasil, o el español de Latinoamérica y el de España, que son distintos.

¿Cómo es abordada Cuba en la educación latinoamericana?

Prácticamente en ninguna universidad latinoamericana se estudia nada que tenga que ver con la revolución cubana, se la nombra al pasar y de mala manera, cuando fue un hecho trascendente del siglo XX. Está silenciada. No se aborda en profundidad lo que la revolución cubana puede decir como laboratorio social, lo que enseña, y en su dialéctica con las demás luchas latinoamericanas, porque Cuba es una isla pero no una ínsula, también forma parte de América. Desde el territorio continental se habla de América Latina, no de América Latina y el Caribe. Existen estados nacionales que no son de origen latino, como las Antillas o territorios independientes en el Caribe británico, pero también existen territorios colonizados por Gran Bretaña. En esa región del Caribe tenemos a Haití, del que se habla muy poco, a pesar de haber tenido la primera revolución de liberación nacional y social que se produjo en el continente, que además fue hecha por esclavos. No se habla del Caribe neerlandés, nunca sabemos nada de lo que sucede en esos países, no se habla de Surinam, de Aruba, de Curazagua, de Bonaide, de San Martín, de Martinica ni de Guadalupe, que están colonizadas por Francia; no se habla de Puerto Rico, que sigue colonizado por Estados Unidos. Para el conocimiento que se difunde no solamente de la historia sino también de la geografía no existe el Caribe. Lo que Martí llamaba “las dolorosas islas del Caribe”.

Fuente: https://educacion.ladiaria.com.uy/articulo/2018/6/academico-cubano-cuestiona-que-educacion-en-latinoamerica-coloque-como-guia-al-pensamiento-norte-centrico/

Comparte este contenido:

Sin instituciones de Venezuela, universidades de América se reunirán en la Cres 2018

Venezuela/08 de Junio de 2018/Caraota Digital

La III Conferencia Regional de Educación Superior (CRES 2018) “es un evento que se hace cada 10 años previo a la Conferencia Mundial de Educación Superior en París. Ahí se reúnen los actores más importantes de la educación superior regional y debaten sobre los distintos aspectos que van configurando el fortalecimiento y desarrollo de la educación superior. El propósito es debatir cómo enfrentar desde las instituciones temas como la tecnología y estos avances tan rápidos del conocimiento”, aseguró Pedro Henríquez Guajardo, director del Instituto Internacional para la Educación Superior en América Latina y el Caribe.

Para el evento se han recibido más de 4700 inscripciones de las cuales esperan la asistencia de 3500. “51 países están representados, siendo la delegación más amplia la de Argentina, seguida por Colombia, México y Brasil respectivamente. En el caso de Venezuela únicamente hay inscritos de manera privada, pero no se contará con ninguna representación institucional”.

Uno de los objetivos a tratar es que las universidades logren un desarrollo sostenible a través de “un sistema de financiamiento razonable que vaya más allá del financiamiento del estado y de las personas (…) El crecimiento de los últimos 30 años ha sido caótico, especialmente por la incorporación del sector privado y buscar caminos para que la educación superior no sea lucrativa, sino que se asuma como un derecho”.

Otro de los temas será el de “los derechos de las patentes que en América Latina no es protegido, independientemente de que tengamos una serie de disposiciones, pero no son reconocidos mundialmente” añadió Guajardo.

Las universidades regionales vienen trabajando desde el 2008 a través de diferentes redes para coordinar cada uno de los planes establecidos.Con el éxito de las conferencias anteriores diferentes gobiernos se han interesado en participar en el evento. “Ocho países se han sumado a la iniciativa para hacer una presentación de ministros. Los gobiernos van a decir lo que están pensando. La conferencia busca articular el dialogo entre los gobiernos y las instituciones”.En comparación de la edición del 2008 destacó el “incremento de las matrículas y las instituciones, además de la tecnología, donde hay que buscar el equilibrio entre lo presencial y lo virtual”.“En el sector tecnológico hay brechas importantes entre instituciones. Pero va a costar mucho igualarlas porque las actualizaciones son muy caras todavía y las instituciones no tienen recursos para hacer adelantos tan importantes en tan poco tiempo”, explicó.

Acerca de las universidades en Venezuela señaló que “hay muchas dificultades para adecuarse a lo que se está demandando debido a La escasez, la falta de orientación, la falta de recursos para financiar a los docentes, los profesionales que se han ido y la ausencia de debates de planificación”.“En el año 2011 se paralizó la discusión sobre la transformación universitaria de Venezuela por un veto presidencial, ahora sería momento de reiniciar una discusión, ya que las instituciones del país necesitan dialogar sobre a donde tienen que dirigirse” consideró.

Entre los aspectos positivos de la educación superior de Venezuela destacó que se cuenta con “la mayor cantidad de estudiantes en el sistema público, además se incorporaron instituciones que no eran universitarias, aunque hay que lograr que lleguen al nivel que se espera”.

Aislamiento en la región“Debido a la situación del país no puede haber un intercambio mayor con Venezuela de todas las demás universidades, tecnológicamente no se asocian con otros países para desarrollar proyectos, además tienen rectores con más de ocho años porque no hay elecciones”, señaló Pedro Henríquez Guajardo.

El estancamiento de la educación viene a que “hay poca participación porque cuesta mucho salir de aquí y los niveles de remuneración se redujeron. Es muy difícil que un académico venezolano logre vincularse. Eso provoca un retraso para el desarrollo científico”.Profesionales en otros paísesComo resultado de la crisis Venezuela ha perdido a muchos de los mejores profesionales del continente quienes han decidido ejercer en países en el que puedan tener una buena calidad de vida. “Entre los migrantes que van a Chile hay un alto porcentaje que son de alta formación. La fuga de cerebro ha sido dramática porque el país no está ofreciendo las garantías mínimas de desarrollo. Forman a un médico por siete años para que se vaya y es una perdida para el país”.Los profesionales venezolanos están muy bien posicionados en el extranjero. El año pasado en Chile hubo exámenes de gran exigencia para reconocimientos de equivalencias en medicina y el 62 % logró aprobar para ejercer. Ellos ganaron el 62 % de médicos y ¿Qué pasa aquí? El país los pierde”, reflexionó.

La misma situación ocurre con miles profesionales en diferentes áreas. “Expertos químicos de petróleos están repartidos en todo el mundo”.

Para promover la continuidad de la educación en los migrantes, “la Unesco ha hecho un convenio en el que uno de los aspectos más innovadores es la actualización de reconocimientos de estudios para el desempeño académico y profesional, para incorporar a los desplazados”.“El documento se está terminando de aprobar por los países para que sea aplicado. Incluso incorpora estudios parciales. Por ejemplo, si te vas en cuarto año de periodismo para otro país y quieres que te reconozcan lo aprobado, con el tratado se podrá gestionar el proceso, aunque sea por un examen de equivalencia, pero se podrán reconocer los cuatro años anteriores” explicó.En el acuerdo estarán participando los 33 países de la región y esperan que empiece a aplicarse a mediano plazo.La Cres 2018 podrá ser seguida a través de si página oficial, así como por sus redes sociales. En ambas plataformas estarán compartiendo los documentos que se aprueban en el encuentro.

Fuente: http://www.cres2018.org/noticias/noticias-cres2018/sin-instituciones-de-venezuela-universidades-de-america-se-reuniran-en-la-cres2018

Comparte este contenido:

Chile crea Ministerio de Ciencias y Tecnología

Chile/02 de Mayo de 2018/Spanish.xinhuanet

La Cámara de Diputados de Chile aprobó hoy, por unanimidad y en último trámite, la ley que crea el Ministerio de Ciencia, Tecnología, Innovación y Conocimiento, en lo que el gobierno del presidente Sebastián Piñera ha definido como la mayor reforma en el sector en 50 años.

«El ministerio tiene varias instancias de coordinación, que hoy es el principal problema que tienen las instituciones, esto para que la burocracia no termine ahogando la innovación, la ciencias y la tecnología», dijo Gonzalo Blumel, ministro secretario general de la Presidencia.

El nuevo ministerio será encargado de asesorar y colaborar con el presidente en el diseño, formulación, coordinación, implementación y evaluación de las políticas, planes y programas destinados a fomentar y fortalecer la ciencia, la tecnología y la innovación derivada de la investigación científico-tecnológica, con el propósito de contribuir al desarrollo integral, sustentable e inclusivo del país.

De acuerdo con la nueva normativa, la misión fundamental de la nueva cartera será definir una política que fortalezca y amplíe las capacidades de investigación, de desarrollo e innovación tecnológica, además de orientar la formación de investigadores y procurar su adecuada inserción en el sistema, ya sea público o privado.

Además, el ministerio será el encargado de vincular de manera cada vez más estrecha el quehacer científico-tecnológico e innovativo con las preocupaciones de la sociedad, definiendo focos de acción y áreas prioritarias en función de los desafíos y oportunidades, tanto nacionales como regionales.

El ministro Blumel agregó que la nueva cartera «va a tener un efecto en la producción de conocimiento en el país».

«La creación de este ministerio, sin duda, es una de las mayores reformas estructurales a la ciencia en los últimos 50 años. Responde a un desafío de futuro y se hace cargo de una realidad urgente y necesaria para el desarrollo integral de nuestro país. Esta iniciativa crea las condiciones para que Chile pueda insertarse exitosamente y de manera protagónica en la cuarta revolución industrial, fomentando la ciencia, la tecnología y la innovación» , añadió.

La intención de crear este ministerio data de 2013, durante el primer gobierno de Sebastián Piñera. Luego, el proyecto contó con el apoyo del pasado gobierno de Michelle Bachelet. Aprobada la secretaría se convertirá en el ministerio número 24 del Estado.

«Hay un mayor incentivo para patentar. Este es el triunfo de tener la disposición de poder conversar y dialogar en Chile, hemos tenido muy buenas noticias no para el gobierno sino que para Chile», comentó Blumel.

En tanto, Mario Hamuy, presidente del directorio de la estatal Comisión Nacional de Investigación Científica y Tecnológica (Conicyt), sostuvo que «este proyecto crea una institución y podrá ser dotado de políticas públicas de Estado. La instalación no es de un día para otro, probablemente el 2019 va a estar operando».

Fuente: http://spanish.xinhuanet.com/2018-06/01/c_137221398.htm

Comparte este contenido:

Avanzamos hacia una conmoción de la especie humana

Por: Javier del Arco

Sólo el conocimiento tecno-científico alumbrará la posthumanidad

Asistimos a una revolución asimétrica de proporciones colosales que apunta a una gran conmoción, a una puntuación de la especie humana. Tan sólo el conocimiento tecno-científico podrá rescatar lo rescatable y hacer emerger una nueva humanidad necesariamente muy diferente de la actual: la posthumanidad

La filosofía ha discurrido en estos años por riberas acuosas y, ciertamente insustanciales  por el agotamiento de la retórica postmoderna. Sin embargo presiento un fuerte retoñar de ésta en el campo científico. La sucesión ininterrumpida de acontecimientos científicos, tecnológicos (que hemos  reunido en un sólo concepto) y sociales en un mundo totalmente asimétrico, turbulento y desgraciadamente violento, necesitan de una profunda reflexión.

Nuestro objetivo es la ciencia, pero no por la ciencia, sino en cuanto que actividad del hombre y para el hombre. Sospechamos que carece de límites y por eso, como se explicará a continuación, la hemos acompañado de una cierta ética para que la estirpe humana comprenda que es una gran estupidez autodestruirse.

Mejor una evolución por traumática que sea. Si como establecen Eldrege y Jay Gould en su teoría del Equilibrio Puntuado (1), la especiación se produce en situaciones de crisis, es más que posible que en pocos años emerja una nueva humanidad y vaya pereciendo la vieja. Esta pirueta biológica, que a buen seguro será muy criticada, me da pie a esperar con Höldeling que allí donde se halla el mayor peligro, radica también lo que salva.

Hace unos años el Profesor Quintín Racionero , Catedrático de Filosofía de la UNED, expresaba  en un lúcido artículo publicado en la Revista de Filosofía (2) que la postmodernidad no era “algo” que venía después de la modernidad y derivado de ella, sino que se trataba de un enfoque distinto del pensamiento filosófico, científico y vital.

Como ya anunciaba Lyotard en su célebre conferencia  dictada en 1971 y luego muy publicada (3) “La condición postmodena. Un informe sobre el saber”, la postmodernidad tenía el carácter de condición, no se trataba de una continuidad, sino de un nuevo enfoque del pensamiento filosófico y científico que, además, abría la puerta a un nuevo modelo social: el de la sociedad líquida, estudiado exhaustivamente por el sociólogo Zygmunt Bauman en múltiples libros, cuyo primer exponente, al menos para mí, fue su obra “Modernidad líquida” (4). A éste le siguieron diversos títulos que trataban desde el amor hasta el miedo, es decir una visión del hombre en un mundo inseguro, dubitativo, sin puntos de referencia ni “puertos seguros donde cobijarse” y un tanto desquiciado.

Este panorama de incertidumbre, riesgo (5) y cansancio (6) nos deja pocas certidumbres. Yo las reduzco, en el plano filosófico y a mi parecer vital, tan sólo a dos: la epistemología, y como ciencia secundaria “de amortiguación y reflexión sobre lo investigado y lo innovado”, la ética. En mis reflexiones yo reservo a la ética un doble papel modulador: el de evitar en lo posible el riesgo que la ciencia conlleva impulsada por la inteligencia y el de recordar al científico la necesidad de la libertad propia y la de los demás.

Bien sé que el problema del libre albedrío es abstruso y quienes tendrán la última palabra creo que serán los neurocientíficos (7). No obstante, yo me refiero a una libertad más “casera” referida a la convivencia entre seres humanos que han de respetarse los unos a los otros en un marco convivencial donde la libertad de cada uno termine donde comience la libertad del otro, de los otros. Esto me da pie a una reflexión absolutamente paralela pero creo que necesaria.

Emmanuel Levinas, en su reflexión ética, identificaba al “otro” con el extranjero, la viuda y el huérfano (8). Hoy esa identificación sigue siendo válida si ese extranjero lo identificamos con el emigrante y le añadimos la mujer maltratada hasta la extenuación o la muerte por causas del machismo, la religión y culturas diabólicas en las que la mujer queda cosificada, los niños pobres del tercer y cuarto mundo y los mayores, abandonados todos por la crueldad del pensamiento turbocapitalista dominante. Sobre la necesaria “domesticación” del macho, son importantes las reflexiones de Peter Sloterdijk en su magnífica obra “Normas para el parque humano”, cuya lectura recomiendo.

Tras este hiato, ciertamente más largo de lo que hubiese deseado pero necesario, retomo el hilo del discurso.

Una única cultura

La epistemología hoy retoma las preguntas de Kant -sobre todo el compendio de ellas sobre que es el hombre- en un clima de alta ebullición científica y tecnológica. Pero responder a eso es imposible sin realizarnos antes muchas otras preguntas  porque hoy la filosofía se fundamenta esencialmente en preguntas, y muchas de esas preguntas no pueden responderse con los elementos de los que la ciencia dispone. Otras ya sí y desde hace poco tiempo.

Pues bien esa visión epistemológica de nuestro tiempo, necesariamente transversal y por ende transdisciplinar, debe comenzar por afirmar que la cultura es una, compuesta por elementos diversos que se substancian en una unidad, como recordaba siempre el añorado Ángel Martín Municio.

Desde ese presupuesto unificador de las ciencias en su más amplia acepción, pretendemos bucear en  los nuevos avances científicos y tecnológicos, y ponerlos en sintonía unos con otros y, especialmente con su descubridor: el hombre.

Debo decir que la ciencia y la tecnología se han entrelazado, re-mezclado, formando un armazón elástico, modulable y sin fin, pero con fuertes disrupciones o puntuaciones (como denominaba Stephen Jay Gould a los hechos repentinos que ocurren en la evolución). Eso es lo que una mayoría denomina tecnociencia y revolución tecnocientífica (9).

Como señala Manuel Castells “la integración creciente entre mentes y máquinas, incluida la del ADN, está borrando lo que Bruce Mazlish denomina la cuarta discontinuidad, -la que existe entre humanos y máquinas- alterando de forma fundamental el modo en que  nacemos, vivimos, aprendemos, trabajamos, producimos, consumimos, soñamos, luchamos y morimos” (10). Por todo ello, podemos afirmar que más allá de nuevos paradigmas y modelos, asistimos a una revolución asimétrica de proporciones colosales que no sólo afecta al sustrato material con el que los los humanos hacemos la historia, sino también  a la naturaleza intrínseca de su protagonista principal: el hombre

El Homo Sapiens, un gran primate depredador (en este caso en su acepción más amplia), está dotado de un único y poderoso cerebro, un universo de 1.350-1400 gr., con una complejidad de sus conexiones neuronales y la plasticidad de las mismas, extrema.  A partir de esa prodigiosa máquina que es nuestro peligroso cerebro, que puede contar hoy con fabulosos recursos tecnocientíficos,  surge la pregunta obligada: ¿tendrá ese cerebro la capacidad suficiente para construir máquinas capaces de auto-reproducirse y auto-mejorarse igualando o superando su propia capacidad?

El hecho, de producirse, recibe ya el nombre de singularidad tecnológica basado en el advenimiento de la inteligencia artificial general (también conocida como IA fuerte). La singularidad tecnológica   (11) implica que un determinado equipo de computación, una red informática de múltiples equipos, o bien un robot, podrían adquirir por sí mismos la capacidad de auto-mejorarse con la característica de ser capaces de auto-reproducirse y, posteriormente, intervenir de forma autónoma en el diseño y construcción de otras computadoras o robots mejores que sus máquinas originarias. Se dice que las repeticiones de este ciclo probablemente darían lugar a un efecto fuera de control, algo así como una explosión de inteligencia (12), en donde las máquinas inteligentes podrían diseñar generaciones de máquinas sucesivamente más potentes. La creación de inteligencia sería muy superior al control y la capacidad intelectual humana (13).

Hacia una gran conmoción

Personalmente, me interesan algunos autores de los que hablaré en sucesivos artículos. Ese interés radica en la emergencia de las ciencias biológicas en su combinación con las tecnologías informacionales, como partes importantes de todo  este proceso.

En 2009, Raymond Kurzweil (al que deberemos próximamente dedicar un espacio más amplio) y el fundador de X-Prize, Peter Diamantes, anunciaron la creación de la Universidad de la Singularidad, cuyo propósito consiste en educar, inspirar y preparar a los científicos e ingenieros para aplicar tecnologías exponenciales suficientemente potentes para hacer  frente a los grandes retos de la humanidad (14). Esta curiosa Institución está financiada por Google, Autodesk, ePlanet Ventures y un grupo de líderes de la industria tecnológica afines a dicha Universidad. La organización sin fines de lucro ejecuta un programa anual de posgrado de diez semanas durante el verano que abarca diez tecnologías diferentes y elementos tecnocientíficos concomitantes. También se llevan a la práctica una serie de programas en todo el año.

En 2010, Aubrey de Grey a quien tuve el placer de presentar en un importante Seminario organizado por Tendencias 21 en El Escorial, acuñó el término “Methuselarity” (15), que podríamos  traducir muy libremente por “Modelo Matusalén” por el que postula hasta que punto la tecnología médica mejora tan rápido que la vida humana útil esperada aumenta más de un año por cada año vivido.

Hoy hay modelos primitivos de interacción hombre-máquina ya en funcionamiento como son los brazos robóticos que siguen órdenes cerebrales o la restauración de funciones neuronales dañadas, por poner algún ejemplo. Pero la interacción profunda aun no se ha producido.

No obstante lo dicho, si el paradigma TIC ha revolucionado el mundo, está convergiendo con él otro mucho más silencioso pero de mayor potencia que es el NBIC.

En este sentido, algunos autores utilizan «la singularidad» de una manera más amplia para referirse a los cambios radicales en nuestra sociedad, provocados por las nuevas tecnologías como la nanotecnología molecular (16)

Por último y retomando la idea expuesta al comienzo del artículo, nos hallamos en un periodo previo,o periodo post-pos(no es orientalismo, es juego de palabras). Por cierto, el último término de este tipo es la posverdad de la que nos ocuparemos en su momento.

Este periodo, creo que en trance de finalización sin predecir tiempo alguno, apunta a una gran conmoción, a una puntuación de la especie humana. Tan sólo el conocimiento tecnocientífico podrá rescatar a lo rescatable y emerger entonces una nueva humanidad necesariamente muy diferente de la actual: la posthumanidad.

Fuente: https://www.tendencias21.net/Avanzamos-hacia-una-conmocion-de-la-especie-humana_a44563.html
Comparte este contenido:

México: Los pobres fuera de las universidades. La actual sociedad de castas

México/26 de Mayo de 2018/LJZ

Los jóvenes entran de manera selectiva a estudiar una carrera: parecemos una sociedad de castas. Los pobres entran en un 20 por ciento a las universidades, es decir, 8 de cada 10 jóvenes que ingresan a las instituciones de educación superior son de los deciles superiores de la escala de ingreso. Lo que también se expresa en los estados de la república: en Chiapas, Oaxaca o Guerrero existen coberturas de educación superior que oscilan del 15 al 19 por ciento; mientras que en Sonora o Nuevo León rebasan los 35 puntos porcentuales. Zacatecas está en los promedios nacionales de 28 de 100. Lo importante es constatar el giro clasista en la oportunidad de estudiar: tanto en los estados (unos pobres y otros de renta media), como al interior de cada estado, los jóvenes que están en las aulas son los que pertenecen a las clases medias y altas. La desigualdad brutal en aquellos que logran el derecho a educarse. Lo que a su vez se observa en las mediciones de movilidad social. Si la educación es el movilizador social más importante, la desigualdad educativa tiene como efecto la petrificación de los estratos sociales: en México la cuna es destino. La tierra de la injusticia.

Hubo dos décadas de acelerado crecimiento de todas las coberturas educativas, de 1990 al 2010. Después de ese tiempo, el proceso se congeló. En secundaria se pasó de 54 a 96 por ciento; en bachillerato subió de 17 a 53 por ciento; y en educación superior (en promedios nacionales) se brincó de 8 a 26 por ciento. Fueron los tiempos de la descentralización y federalización de la educación. En los últimos años sólo el bachillerato ha podido crecer un poco, la educación superior sigue estancada. Así las cosas, significa que los presupuestos de este último nivel educativo son por demás regresivos: gasto público (de todos) que financia a los ricos. La única manera de curar esa regresividad es con mejores coberturas. Más inversión.

Otra cosa es el análisis de las oportunidades reales de movilidad de aquellos que logran entrar. Aquí hay factores muy interesantes: resulta que un factor de movilidad no es el conocimiento adquirido, sino el capital social apropiado por los jóvenes durante su cursada. En otras palabras: en las universidades donde asisten los hijos de los empleadores, es donde los alumnos alcanzan mejores tasas de colocación, pero es por las relaciones sociales que logran durante los estudios, no a los estudios mismos. Traducido: la amistad es un valor económico esencial. Por ello, en las universidades públicas donde hay poca presencia de las familias de los empleadores (entre los que se cuenta clase política), aun cuando sean académicamente muy buenos, tienen pocas posibilidades de colocación en los puestos de ventaja en el mercado laboral. Hace falta arrancar una reforma social profunda para cambiar el rostro de la sociedad de castas en que vivimos. Socialmente, aun, vivimos en la Colonia.

Fuente: http://ljz.mx/2018/05/25/los-pobres-fuera-de-las-universidades-la-actual-sociedad-de-castas/

Comparte este contenido:

España: Programas de movilidad para disminuir la endogamia universitaria

2. Brinda apertura a nuevas ideas, nuevas metodologías de trabajo y técnicas de enseñanza.
3. Permite el intercambio entre universidades y sistemas educativos totalmente opuestos.
4. Capacita a los docentes para enseñar en contextos diferentes, adaptándose siempre a las necesidades de sus estudiantes.
5. Permite a las universidades el contacto directo y real con expertos de todas partes del mundo.
La movilidad docente facilita la creación de vínculos con universidades de todo el mundo y favorece su desempeño a nivel de investigación, pues sus docentes cuentan con nuevas herramientas para realizar investigaciones que, en definitiva, enaltecen al centro para el cual trabajan.

Comparte este contenido:
Page 19 of 31
1 17 18 19 20 21 31
OtrasVocesenEducacion.org