Asia/Japón/08 Noviembre 2018/Fuente: Prensa Latina
Un total de 101 estudiantes, 67 de ellos damas, fueron rechazados de forma fraudulenta los dos últimos años y podrán asistir a clases desde el inicio del curso escolar si así lo desean, indicó la universidad citada por la agencia de noticias Kyodo.
‘Actuamos de manera inapropiada en asuntos relacionados con los exámenes de ingreso. Nos disculpamos profundamente con todos los afectados’, señaló en una conferencia de prensa Yukiko Hayashi, recién electa presidenta de la TMU.
Según Hayashi, primera mujer que dirige la casa de altos estudios, se adoptarán medidas para corregir esa situación.
La práctica discriminatoria de la TMU salió a la luz mientras la fiscalía de Tokio investigaba a ese centro por actividades corruptas que involucraban a sus principales ejecutivos y un alto funcionario del Ministerio de Educación.
Tras el escándalo, el gobierno nipón emprendió una pesquisa y descubrió alrededor de 30 escuelas de medicina en todo el país con disparidades significativas en las tasas de aprobación entre solicitantes femeninos y masculinos en los últimos seis años.
Las universidades implicadas buscaban mantener la proporción de estudiantes mujeres en torno al 30 por ciento con la justificación de que las doctoras a menudo renuncian o toman largas licencias después de casarse o tener hijos.
El primer ministro nipón, Shinzo Abe, se ha comprometido a promover una nación ‘donde las mujeres puedan brillar’, pero en la práctica la sociedad japonesa sigue lastrada por la desigualdad de género, también en ámbitos laborales y educativos.