«La educación es mucho mejor cuando los estudiantes y profesores aprenden juntos». Entrevista a Matt Murrie

Entrevista/02 Agosto 2018/Fuente: Semana

Matt Murrie es un estadounidense que busca a través de la pregunta What if…? dar pistas para transformar el modelo educativo tradicional y darle paso a la curiosidad, creatividad, innovación y emprendimiento. Matt estará en Cali el próximo 15 de agosto en el marco del encuentro académico Educación para el Progreso.

Semana Educación y la Alcaldía de Cali traen el próximo 15 de agosto al encuentro académico Educación para el Progreso al emprendedor, profesor de inglés, cofundador y curador principal de curiosidades de What if…?, Matt Murrie

Este estadounidense, autor del libro también llamado What if…? y otras publicaciones como While you were sleeping Every day on Earth hablará en la sultana del Valle sobre la importancia de hacer preguntas en los procesos educativos como mecanismo para incentivar la curiosidad, la creatividad y las mentes emprendedoras.

Semana Educación habló con él para tener un abrebocas sobre lo que será su conferencia. Esto fue lo que nos dijo:

Semana Educación: ¿What if… será el tema central de su conferencia en Cali?

Matt Murrie: Sí. Parto de la premisa de que todo el mundo tiene curiosidades. La idea es dar pistas para que las personas empiecen a explorarlas y encuentren ahí la energía para innovar y educar. What if…? es eso, una metodología para convertir la curiosidad en acciones y me parece muy valioso compartirlo con todos porque, luego de estar en muchos países, sigo comprobando que si algo tienen todas las personas es curiosidad. Puede que no tengan muchos recursos o capacidades, pero con curiosidad el dinero y los libros ya no son tan importantes. Eso quiero mostrar en Cali. Dar herramientas para que profesores y alumnos ‘curioseen’ y creen.

La curiosidad tiene mucho poder. Lo he visto en mi vida y en la de otros. De hecho, no creo que yo sea muy inteligente, pero si tengo mucha curiosidad.

Semana Educación: No es su primera vez en Colombia, así que ya tiene una idea de nuestros procesos educativos. ¿Cómo los ve?

Matt Murrie: Colombia es un país que en efecto tiene mucha curiosidad. Cada uno de mis viajes al país reafirma mi idea de que hay mucha energía para mejorar, muchas ganas para optimizar los procesos. Niños y maestros tienen mucha curiosidad, y eso desde mi filosofía es muy importante. En los Estados Unidos, por ejemplo, uno no ve tanto eso, todo se da por sentado,  no hay tanto interés en innovar. Pero Colombia tiene muchas ganas de cambiar, de mejorar, eso ya es una oportunidad.

Así mismo, la ruralidad es muy interesante para mí. Colombia puede ayudar a Colombia. Y con esto voy a otro punto que yo toco en mis conferencias y en lo que busco y es que la educación no solo se dé en un salón de clase o escuela, sino que todos seamos profesores y alumnos y en ese sentido, desde lo urbano se puede ayudar a impulsar lo rural en Colombia. Hay mucho poder en esto.

Semana Educación: En esta metodología de hacer preguntas, el profesor es crucial. ¿Cómo entrenarlos para que en lugar de dar respuestas hagan preguntas?

Matt Murrie: (Risas). Mi filosofía es que la educación es mucho mejor cuando los estudiantes y profesores aprenden juntos. Suelo dar la misma charla para profesores y alumnos, porque para mí todo parte de que somos iguales y de que como equipo se deben encontrar los caminos, las respuestas. Además hace más divertido el aprendizaje y está comprobado que cuando los estudiantes se sienten involucrados en la construcción de los conocimientos se apropian mucho más de ellos.

La idea es, entonces, que los profesores y general toda la comunidad comience a formular preguntas con What if…?, es decir, Qué tal sí…? Qué pasaría sí….? y que se planteen cuestionamientos aparentemente absurdos que los lleven a hacer más preguntas o a ser creativos e innovadores con sus respuestas. Insisto, no pienso que enseñar es un proceso que se da de maestro a estudiante, es una cosa colaborativa. Se da en conjunto. Cuando preguntas abres la puerta para que juntos se cuestionen. Es relevante para los estudiantes sentir al profesor más cercano.

Semana Educación: ¿Cómo se imagina la educación en un futuro próximo?

Matt Murrie: Espero que la educación sea colaborativa y horizontal, donde estudiantes y profesores sean iguales. Y donde los profesores no solo están en la clase, sino en todas partes. Que cada uno entienda que en cualquier lugar dondes esté o desempeñando el rol que sea en la sociedad per sé es un profesor y a la vez un alumno. En la comunidad está siempre un profesor y un estudiante, y si cada uno se apropia de esta idea y comienza a vivirla seguramente se trascenderá y se logrará un mundo más educado, con conocimientos compartidos.

El encuentro Educación para el Progreso será el escenario en el que la comunidad educativa de la ciudad, empresarios, gobierno y público general, se darán cita para reconocer, debatir, y repensar  la educación de Cali como motor del progreso de la región, siendo esta la bandera de la administración Armitage.

Imagen: https://static.iris.net.co/semana/upload/images/2018/7/30/577111_1.jpg

Fuente: https://www.semana.com/educacion/articulo/entrevista-a-matt-murrie/577110

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Uruguay: Experto instó a «cambiar pedagogías» para «acelerar» logros del Plan Ceibal

Uruguay/16 de mayo de 2017/Fuente: http://www.elpais.com.uy

El pedagogo Michael Fullan, experto en reformas educativas dijo hoy que Uruguay debe “cambiar las pedagogías para poder acelerar” lo que se ha logrado con el Plan Ceibal, el cual consideró “exitoso”.

«El mensaje es claro: hay que aumentar la interacción con propósito entre maestras y profesores y entre las maestras de las escuelas. Tenemos que cambiar las pedagogías para poder acelerar lo que tenemos. Ustedes han establecido los cimientos, ahora lo que hay que hacer es trabajar más, porque allí es donde van a encontrar el poder», dijo Fullan.

Fullan disertó hoy en un foro organizado por el gobierno que se extiende hasta mañana con motivo de los 10 años del Plan Ceibal con disertaciones de expertos internacionales en educación y tecnología.

Fullan dijo que «todo ha ido muy lento, pero ahora el cambio va a pasar muy rápidamente, y hablo de buenos cambios», apuntó.

El experto señaló que es clave “usar a los alumnos como agentes de cambio” y fortalecer los liderazgos. “Tienen una gran masa crítica de escuelas involucradas en el 25% de todo el país y eso es mucho” y “no hay ninguna escuela que haya podido cambiar de mal rendimiento a buen rendimiento si no tuvo un líder que lo ayudó”, planteó.

«Ha habido cambios en las pedagogías, pero no todos tienen que hacer lo mismo», dijo. «Los educadores tienen que aprender entre ellos», agregó, «aunque no sea cómodo».

Fullan dijo que describir el perfil de los educadores para el futuro «es difícil», pero planteó que tienen que ser personas que «interactúen con otros educadores en lo que se llama la educación colaborativa» y que se den «permiso de ser creativos para ser efectivos». «El cambio en el educador en la pedagogía es trabajar con estudiantes para que ellos estén mas libres y sean creativos de forma colectiva».

El experto planteó en base a investigaciones que “en aquellas escuelas donde la escuela mejoró, el director de la escuela participa como un estudiante con los educadores ayudándolos a salir adelante. Si no participa como estudiante no aprende, si mira de atrás puede dar recursos y oportunidades, pero si no participa como líderes no van a progresar. Los líderes de la educación tienen que liderar y aprender en igual medida y si no están aprendiendo no están liderando efectivamente”, reflexionó.

Fullan dijo que todo esto debe complementarse con contenidos interesantes porque “si a alumnos aburridos se les dan cosas aburridas no van a cambiar; hay que darles cosas que los motiven”. Por eso planteó como necesario un cambio en la “cultura” de la educación.

“Lo importante son las pequeñas cosas, hablamos de simpleza, tomamos cosas complejas, lo hacemos simple y lo hacemos interactivo. Tenemos que hacerlo a pequeña escala asegurándonos que lo hacemos a gran escala entonces luego vemos que el cambio individual lo hacemos en el sistema”, dijo Fullan. Y concluyó: “En los próximos cinco años no pueden dejarse estar, tienen que meterle energía para encontrar los resultados”.

Del evento participaron la ministra de Educación, María Julia Muñoz, el presidente del Codicen, Wilson Netto y de Secundaria, Celsa Puente y el director de la Oficina de Planeamiento y Presupuesto, Álvaro García.

Evaluación del Plan

La apertura del evento la realizó el presidente del Plan Ceibal Miguel Brechner quien hizo un repaso de los 10 años y habló sobre los desafíos de futuro. Brechner resaltó la creación de una biblioteca online que se implementará el próximo año.

Dijo que el país se enfrenta a una «revolución tecnológica» que tiene como centro «la inteligencia artificial» y advirtió que el impacto que va a generar «es muy grande».

Brechner dijo que el desafío hoy es «formar un joven crítico» que «pueda saber leer hoy» la información.

Para esto planteó que hay tres pilares en los que se debe trabajar.El primer es «profundizar la red de aprendizaje», el segundo es «la personalización de la educación». Dijo que «la educación no es una industria en serie como fue planificada sobre fines del siglo XVIII» y la tecnología «permite la personalización». Por último planteó «trabajar más fuerte en pensamiento computacional que es tratar de entender los problemas, un problema dividirlo en pedazos chicos, resolverlos, generar algoritmos para su resolución, reutilizarlos para otras cosas y enfocarlo de distinta manera el problema». Eso dijo que es algo que esperan hacer en escuelas de tiempo completo.

Más allá de eso dijo que es importante el liderazgo que desempeñen los docentes como referentes.

Fuente de la Noticia:

http://www.elpais.com.uy/informacion/experto-insto-cambiar-pedagogias-acelerar.html

 

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Gino Ferri:“No es posible pensar que en nueve años los padres solo ven a las maestras y basta ”

Entrevista al educador italiano Gino Ferri, maestro durante muchos años de las escuelas de Reggio Emilia y ahora formador de maestros en Catalunya, que defiende romper con un modelo demasiado rígido.

Gino Ferri lleva en las espaldas 25 años como maestro en las escuelas infantiles de Reggio Emilia, en Italia, un municipio referente en materia de educación infantil. Ahora, sin embargo, prevé instalarse en Cataluña, donde imparte cursos y asesora escuelas para renovar su forma de enseñar. No hablamos de Reggio Emilia, sino de la situación de las escuelas en nuestra tierra y de todo lo que se puede hacer para romper con un modelo educativo demasiado rígido.

Si hablamos de cooperación en la educación, ¿Cómo crees que funciona la relación entre los niños y niñas más pequeños y los maestros?

Más que hablar de cooperación, me gusta hablar de construcción social de los aprendizajes. Los seres humanos construyen no solo sus pensamientos y su conocimiento, sino también su identidad por medio de la relación. Debemos pensar en escuelas cuyo fundamento sea la posibilidad de construir todo lo que pasa allí dentro por medio de la relación. Esto significa entre los niños y niñas, pero también con los adultos.

Claro que todo esto requiere una organización que lo apoye. Para que los niños y niñas puedan vivir procesos ricos es mejor que desarrollen todos sus caminos de conocimiento en grupos pequeños. Si dentro de una clase hay 26 niños, tienes que organizar el trabajo en muchos grupos pequeños que actúan al mismo tiempo haciendo cosas diferentes, y es lo que estoy intentando trabajar aquí con las escuelas que he asesorado, intentando provocar pequeños cambios, porque la costumbre es todos los niños y niñas haciendo lo mismo al mismo tiempo. Las clases a menudo solo tienen mesas, sillas y nada más, y lo que hay que construir es un imaginario en el que las maestras puedan pensar en organizar los espacios en formatos diferentes, mucho más ricos, con oportunidades variadas, de modo que luego puedan organizar pequeños grupos que puedan hacer cosas en autonomía. Y la maestra tiene que poder trabajar cada día con un pequeño grupo diferente, de manera que los niños y niñas puedan disfrutar de las oportunidades que aprender en relación les ofrece.

Todo esto es una carga muy grande para los y las maestras, acostumbrados a hacer algo menos complejo.

Claro, pero lo que noto es que las maestras tienen ganas de cambiar, muchísimas ganas. Si trabajan de forma muy tradicional, muy rígida, es porque no conocen posibilidades diferentes y se enganchan a formas muy rígidas porque les dan seguridad. Y el trabajo que estoy haciendo ahora como formador es ayudar a las maestras a imaginar posibilidades diferentes y a no tener miedo de probar formas diferentes de vivir su día a día. Muchas veces actúan rígidamente porque les da seguridad, pero si las apoyas y les dejas pensar posibilidades diferentes diciéndoles «poco a poco», «pequeños cambios», y sobre todo recurriendo a la ayuda de tus compañeras, dialogando, se puede hacer, y lo hacen con ganas.

Si dices que sí hay ganas, ¿crees que hay un problema en la formación de maestros?

La formación es una cosa y lo que luego se vivirá dentro de las escuelas es otra, y es así en todo el mundo. También diré que me parece que aquí las universidades tienen muchas más relaciones positivas con las escuelas que por ejemplo en Italia. Allí son mundos separados, pero aquí, como he visto por ejemplo en Vic, hay relaciones mucho más estrechas. No creo que sea un problema de formación, sino de cómo pensamos en la escuela.

Con este modelo tradicional del que hablas, de niños y niñas sentados en filas y la maestra dando la lección, da la sensación de que la gente se va volviendo gris. ¿Crees que este modelo mata la ilusión de maestros y niños?

Hay niños de cuatro o cinco años que han perdido la capacidad de imaginar. Sí, podría contarte ejemplos increíbles donde se pueden ver niños de cuatro o cinco años que están acostumbrados a no imaginar, que han perdido toda su capacidad de imaginar. Si preguntas a las maestras por qué está pasando esto, al principio se quedan un poco sorprendidas, pero luego reflexionando llegan a la conclusión de que es porque los estamos acostumbrando así. No solo tienen que hacer todos lo mismo y al mismo tiempo, sino además llegar todos al mismo resultado. Las herramientas que se utilizan, y demasiado, aquí en las escuelas 3-6, las fichas, tienen por finalidad hacer llegar a todos los niños y niñas al mismo resultado, pero es algo que está cambiando, porque hay sensibilidad, hay disponibilidad para cambiar, para imaginar posibilidades diferentes. Lo que hay que hacer aquí es invertir más en el ámbito de la formación dentro de las escuelas. No solo proponer cursos en los que se pueda matricular todo el mundo, sino trabajar más dentro de las escuelas. Lo que veo cada día es que entrando en las escuelas y trabajando junto a las maestras las cosas ya cambian. Incluso en las escuelas más rígidas.

¿Y cómo funciona esta formación dentro de las escuelas?

Lo que hago yo es conocer la realidad de las escuelas sobre unos determinados temas y luego interpretar un poco lo que veo y proponer preguntas para reflexionar. Por ejemplo, hace unos días en una escuela de Terrassa hablábamos sobre los procesos de cambio que ellos ya habían hecho desde hace unos años. Pero luego reflexionamos sobre las herramientas que utilizan para evaluar a los niños y niñas, y mi pregunta fue: ¿Qué relación existe entre estas puñeteras herramientas que utilizáis y los cambios realizados? Y entonces se dieron cuenta de que tenían que cambiar, porque con los niños y niñas de infantil estaban evaluando los resultados, mientras que en nuestra vida cotidiana hemos intentado hacer algo diferente. Es un ejemplo muy particular, pero este es el tema. E inmediatamente nacen procesos de cambio. En una realidad muy dinámica como es Cataluña, ahora lo que debería hacerse es trabajar más dentro de las escuelas. Y llevar la formación dentro de las escuelas, con los claustros, con los grupos, porque hay disponibilidad.

¿La evaluación es un elemento que te ata al modelo tradicional?

Evaluar es importante, porque es una asunción de responsabilidad que debe hacer la escuela, devolver algo que hable de todo lo que ha vivido el niño a lo largo de su ciclo dentro de la escuela. Lo que hace falta es preguntarnos qué es lo que evaluaremos, porque esta pregunta habla de tu idea de qué es la educación. Si solo evaluarás los resultados académicos, incluso en P-3 y P-4, ya está, y para mí evaluar significa también ayudar a las familias a comprender algo diferente. Es decir, que hoy en día los resultados académicos evaluados de forma tradicional no tienen sentido, porque el mundo está lleno de chicos que han tenido buenísimas notas y que ahora no tienen trabajo y están a la espera. «¡Ah, nadie me busca!», dicen. La verdad es que la escuela, en una realidad como la actual, debe ayudar a las personas a saber pensar, saber construir y saber actuar. Para ello se debería involucrar a las familias en la escuela, porque si no lo que las familias esperan de la escuela son buenas notas, buenos resultados académicos. Pero también es responsabilidad de la escuela ayudar a las familias a comprender algo diferente.

¿Y cómo llevamos las familias a la escuela? ¿Cómo cambiar esta relación?

Cambiando la forma de encontrarse con las familias. Las escuelas hacen casi solo encuentros individuales con la familia, y casi no hay encuentros en grupo. Para mí este es el primer paso que se debería hacer, porque es dentro de los encuentros en grupo donde puedes construir una cultura de la educación diferente, también con los padres. Sobre todo fomentando el diálogo entre los padres, y el de estos con la escuela, a partir de los significados que cada día vamos construyendo con los niños y niñas dentro de los procesos educativos.

¿Hay que educar también a los padres, entonces?

No es educar porque tú como escuela lo sepas todo, pero sí involucrar a los padres para que la escuela pueda ayudar a cambiar su mirada hacia la infancia y hacia lo que puede ser la educación, si no todo sigue igual. Nos encontramos en un contexto social que lo hace difícil. Ante el individualismo, los padres y madres piensan solo en su hijo, que tenga buenos resultados…

Claro, por eso hay que cambiarlo y hacer más encuentros de grupo, porque, claro, si no solo tenemos entrevistas individuales en que  cada familia solo pide por su hijo y no mira nada de lo que hay en el contexto en el que vive su hijo cada día, sobre todo hablando de un modelo de escuela 3-12 como el que hay aquí. ¡Los niños y niñas viven nueve años dentro de la misma escuela! No es posible pensar que en nueve años los padres solo ven a las maestras y basta.

¿Y crees que los cambios en la escuela son una palanca para cambios también en la sociedad?

Desde la Revolución Francesa, a finales del siglo XVIII, la escuela siempre ha sido pensada como posibilidad para cambiar la sociedad. Y si pensamos en lo que ha pasado desde los años sesenta del siglo pasado, es lo mismo. La escuela es la posibilidad fundamental para cambiar la sociedad. Está claro que los cambios no son tan radicales, pero es una posibilidad importante, y no solo para preparar personas que sepan hacer cosas, porque no es así. Ahora saber hacer cosas mecánicamente no sirve de nada. Ahora lo que es necesario para cada persona es saber interpretar la realidad y saber construir posibilidades.

Más allá de la escuela, ¿cómo educa la sociedad en la que vivimos? ¿Cómo educa el entorno?

Hay que preguntar a los niños para que se pongan en la situación de pensar y hacer hipótesis. Una de las funciones de la escuela debería ser dar a los niños y niñas la posibilidad de saber interpretar qué pasa dentro de la sociedad. Y esto se hace fomentando la capacidad de los niños y niñas de hacer hipótesis, aunque no tengan nada que ver con la realidad. Hacer hipótesis como posibilidad para conocer, las que sean. Y hablo de niños y niñas muy pequeños, de P-3 y P-4. No decirles todo-esto-es-así, sino preguntarles para que se pongan en la situación de pensar, hacer hipótesis, imaginar, darse explicaciones de los fenómenos que encuentran cada día. Y no darles una puñetera ficha ya con el resultado.

Hemos hablado de la educación infantil, un poco al margen de lo puramente académico, pero a medida que avanzan los niños o los jóvenes esto va ganando cada vez más peso.

Es importante, pero también lo que hace la diferencia es cómo la escuela propone lo académico intentando estar cerca de las formas de aprender de los seres humanos. ¿Cómo aprendemos los seres humanos? La psicología y las ciencias de la mente nos han dicho que el ser humano aprende de forma activa, no solo haciendo, sino entrando en una relación fuerte con su objeto de aprendizaje, y esto vale para los niños de P-3 y para los de sexto de primaria. Debería ser la manera a través de la cual la escuela propone también lo académico, no simplemente mediante informaciones que pasan de los profesores a los alumnos, si no no cambia nada.

Fuente de la entrevista: http://www.laeducacioncuantica.org/educacioncuantica/SEducacionCuantica?PN=16&PE=2&WEBLANG=1&VOLNOT=noticia2&VOLTIP=-1&VOLPAG=1&NOTICIA=636#noticia

Fuente de la imagen: http://www.laeducacioncuantica.org/educacioncuantica/pages/images/uploads/969.jpg

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