Por: Ignacio Mantilla
Muchos de ustedes habrán tenido profesores excepcionales, que en el salón de clases dan muestras de una excelente elocuencia y dominio del tema, pero que, inexplicablemente, pocas veces dejan una obra escrita como huella de esa cautivadora exposición magistral que se les reconoce. En la Universidad Nacional pasa en todos los campos del conocimiento y en cada facultad es posible identificar personajes que desde su extraordinaria docencia ponen una importante impronta en algunas generaciones de profesionales, pero que, en cambio, su obra escrita es corta y desconocida, aun para sus exalumnos.
Si bien esto ha venido cambiando con el tiempo, por las exigencias de producción académica que hacen las universidades de hoy, perviven entre nosotros aquellos maestros que utilizan únicamente la palabra hablada para la transmisión de sus conocimientos, sus enseñanzas y sus experiencias. Sin lugar a dudas, la historia oral, la palabra hecha sonido, es una poderosa vía de comunicación, pero necesita de mucho esfuerzo y disciplina para que el mensaje que se transmite sea conservado.
Debemos entender el libro como una tecnología que nos permite transmitir conocimientos, valores y la cultura. Por eso es importante ofrecer un espacio para estimular la publicación de algunos trabajos cuyos autores no han considerado difundir, pero que bien vale la pena dar a conocer.
Hace cinco años, pensando en una estrategia para divulgar los trabajos de algunas personas que han tenido una estrecha vinculación con la universidad, desde la rectoría ideamos las colecciones editoriales “Apuntes Maestros” y “Obras Escogidas”, que rescatan trabajos de académicos que han influenciado a cientos de estudiantes e integrantes de la comunidad universitaria.
Como lo expreso en la presentación de las obras que conforman la colección Apuntes Maestros, los autores son representantes excepcionales de distintas áreas del conocimiento: las artes, las ciencias, las humanidades. En la mayoría de los casos hemos tenido que recurrir a la insistencia para derrotar la modestia de los autores y editores que aún se encuentran entre nosotros, hacerles ver que nuestra colección es un reconocimiento justo a obras que se originan en el pensamiento maduro de quienes conforman la comunidad universitaria.
También debemos señalar que nuestras colecciones no se componen únicamente de autores colombianos, y desafortunadamente no todos se encuentran vivos. Existió un proceso de búsqueda de archivos, de rescate de la memoria, toda una labor tras escena que incluyó hablar una y otra vez con quienes conservaban sus archivos y memorias. Fue un intenso trabajo que nos permitió traer de vuelta a verdaderos clásicos del pensamiento social y científico.
En retrospectiva, uno de los más destacados es sin duda Marta Traba en facsímil, un compendio de material inédito y algunos textos poco conocidos de la filósofa y crítica de arte argentina que sacudió el campo artístico en las décadas del 60 y 70 del siglo XX. La extensa obra de Traba continúa siendo de interés y actualidad para los investigadores del arte y de la estética.
En el 2016, como un compromiso por la divulgación de la ciencia, decidimos publicar el libro de Juan Diego Vélez, Antonio Vélez y Ana Cristina Vélez, Neuróbicos. Los caminos del razonamiento.
La joya de la corona es sin duda la obra recopilada en dos tomos El Dorado. Estampas de viajes y cultura de la Colombia suramericana, de Ernst Rothlisberger, que fue incluido en la lista de los libros más importantes del 2016 por la revista Arcadia y El Espectador.
En 2016 también se publicaron en la colección Obras Escogidas dos tomos con la obra completa de Camilo Torres Restrepo, y este año el libro Campesinos de los Andes, de Orlando Fals Borda, en la misma colección, fue uno de los más vendidos durante la Feria del Libro de Bogotá.
El pasado jueves, además, se lanzaron los libros Las formas cambiantes de la criminalidad. Colombia a finales del siglo XX, de Pablo Cáceres Corrales; Notas históricas. Reflexiones sobre la Universidad Nacional de Colombia, de Fernando Sánchez Torres, y, en el marco del año Colombia-Francia, como la apuesta cultural para estrechar lazos entre los dos países se publicaron los libros El sentimiento de sí. Historia de la percepción del cuerpo, de Georges Vigarello, y La construcción social del cuerpo, de la socióloga Christine Détrez. En especial el libro de la socióloga francesa resulta clave porque reflexiona sobre cómo la idea del cuerpo ha venido cambiando a través de la historia, una apuesta investigativa que toma fuerza hoy con las exploraciones artísticas y los debates sobre tecnología y corporalidad.
Con motivo del cumpleaños 150 de la Universidad Nacional, además, ideamos una apuesta independiente de Apuntes Maestros y Obras Escogidas. Hablamos de la colección Sesquicentenario, que a través de 12 tomos y 167 autores pretende ser un relato claro y riguroso sobre la historia de la institución que ha formado a miles de colombianos.
Para el próximo año estamos preparando dos libros: la reedición de La Universidad Nacional de Colombia en sus pasillos, del profesor Ciro Quiroz, y Supervivencia del embrión bovino, de Aureliano Hernández. La nueva edición del libro de Quiroz, que se ha convertido de culto por su estilo de narración, estará acompañada de algunas caricaturas e imágenes de archivo de la Universidad Nacional desconocidas por el público lector.
Y para resaltar aún más el papel de las mujeres en la ciencia, tenemos como proyecto la publicación del libro Estructura, función y cambio de la familia en Colombia, de la antropóloga Virginia Gutiérrez de Pineda, quien fue pionera en el análisis de la configuración histórica de la forma en que conviven los colombianos.
Desde la rectoría de la Universidad Nacional, patrimonio de todos los colombianos, hemos venido apostándoles a todos los medios de difusión para lograr que los productos académicos y los aportes que se hacen a la comprensión de la intrincada realidad social y ambiental del país tengan mayor difusión y traspasen nuestra casa en común.
Fuente: https://www.elespectador.com/opinion/apuntes-maestros-columna-725098