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Pedro Castillo, EE.UU., el fujimorismo… y la izquierda

Por: Aram Aharonian

La difusión de una serie de audios, entre ellas una de Vladimiro Montesinos, sanguinario jefe de inteligencia durante el gobierno de Alberto Fujimori, confirmó al menos una de las conspiraciones para descarrilar el proceso electoral en Perú donde ganó el socialista Pedro Castillo, e imponer en la presidencia a la candidata derrotada en las urnas, Keiko Fujimori.

En el audio, Montesinos da indicaciones para sobornar a tres de los cuatro integrantes del Jurado Nacional de Elecciones (JNE) con un millón de dólares a cada uno, e indica que el contacto para acceder a los jurados es Guillermo Sendón, un político simpatizante del fujimorismo. En una segunda llamada telefónica, Montesinos sugiere al mismo interlocutor, el coronel retirado Pedro Rejas Tataje, que la embajada de Estados Unidos podría ayudar a los conspiradores.

Mientras el candidato ganador, el maestro y dirigente social Pedro Castillo aseguró el viernes último en Cusco que el suyo será un gobierno “que piensa y siente como el pueblo”. “El Perú necesita que el pueblo sea escuchado. Lo primero que tenemos que agendar son los grandes problemas, las grandes brechas de desigualdad”.

Anunció que su gestión priorizará la salud y la educación, “que deben ser un derecho y no un negocio”, y también la agricultura. “Tenemos que hacer un gobierno austero. No nos verán robar un centavo a este pueblo”, ofreció.

“Cuando sales a hacer una propuesta te dicen terrorista, chavista, comunista, que le vas a quitar su plata a los inversionistas, que vas a ahuyentar la economía, que les vas a quitar su propiedad, su casa, su terreno. Todo eso es falso”, señaló, en alusión a la guerra sucia en su contra.

De todas formas, habría que ver hasta dónde llega y qué significa realmente el izquierdismo de Castillo. Hasta ahora se limita a exigir un reseteo del modelo neoliberal, con el fin de disminuir esas desigualdades. Su propuesta, incrementar al 20% del presupuesto la inversión en salud y educación, lo que conllevará un alza en la carga fiscal a las actividades mineras y de hidrocarburos

Algunas disquisiciones

En este contexto, al gobierno estadounidense de Joe Biden le tocó recibir una papa caliente y sabe que después de lo sucedido en Bolivia, lo más prudente es seguir la corriente del proceso, siempre y cuando no pierda la influencia para orientarlo, para que no se convierta en un proceso radical. Para Washington, pararlo no luce como opción ni conveniencia.

Y para eso, para contener el proceso antes que se desmadre, parece contara con la influencia del “progresismo” que encabezan los presidentes de México y Argentina, Andrés Manuel López Obrador y Alberto Fernández.

En el contexto regional, este  “experimento” con Castillo puede darle al gobierno de Biden elementos útiles para el caso de Colombia, un país de mayor importancia para los intereses estadounidenses, inserto en una grave crisis multidimensional y un estallido social que no se detiene. La tarea en Colombia es negociar con Gustavo Petro, hoy ganador de todas las encuestas preelectorales.

Para poder iniciar cualquier diálogo con Petro, primero deben garantizarle que podrá disuadir al uribismo (las fuerzas policiales y militares del Estado más las paramilitares) de que  lo maten y, seguramente, garantizarles una presencia política (en el Congreso y gobernaciones) que les garantice la impunidad de todos sus actos, de gobierno y en contra de los derechos humanos de la población.

Y mientras la derecha presionaba buscando desconocer las elecciones en las que fue derrotada y las autoridades electorales demoran en proclamar oficialmente su triunfo electoral, Castillo recibió el sábado último un amplio respaldo de los presidentes de Argentina y Bolivia –Aberto Fernández y Luis Arce-, y de varios exmandatarios de la región como Dilma Rousseff, Evo Morales, Ernesto Samper, Fernando Lugo, Manuel Zelaya y Leonel Fernández.

También de excancilleres y dirigentes políticos y parlamentarios regionales, todos ellos encuadrados dentro del progresismo. Castillo les habló de los graves problemas económicos y sociales del Perú, del durísimo impacto de la pandemia, de la pobreza, de la grave crisis de la salud y de la educación, desfinanciados por tres décadas de neoliberalismo, y señaló que “aquí lo que se necesita es un cambio estructural”.

Reveló que le habían pedido que modifique su discurso de cambio, que se le habían acercado a proponerle ministros para seguir por el mismo rumbo neoliberal, pero aseguró que no cederá a esas presiones. “Si vamos a hacer lo mismo, estamos perdiendo el tiempo”, les señaló. O advirtió.

*Periodista y comunicólogo uruguayo. Magíster en Integración. Creador y fundador de Telesur. Preside la Fundación para la Integración Latinoamericana (FILA) y dirige el Centro Latinoamericano de Análisis Estratégico (CLAE, www.estrategia.la)

Fuente: https://estrategia.la/2021/06/28/pedro-castillo-eeuu-el-fujimorismo-y-la-izquierda/

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EEUU: El Condado de King, en Washington, aprueba prohibir la Vigilancia con Reconocimiento Facial

Por: Red en Defensa de los Derechos Digitales/ Fuentes: r3d.mx

El condado de King, en el estado de Washington, aprobó el 1 de junio una prohibición para el uso de tecnología de reconocimiento facial en todos los departamentos del gobierno local, incluyendo la Oficina del Alguacil. Con esta acción, se suma a más de una decena de ciudades en Estados Unidos que han bloqueado el uso de esta tecnología.

La nueva medida prohíbe el uso de información que provenga del reconocimiento facial, la adquisición de esta tecnología e incluso que se pueda solicitar evidencia obtenida con estos sistemas, de acuerdo con The Seattle Times.

Para el Consejo del condado ─en el que se encuentra una parte importante de la ciudad de Seattle─ las principales razones para apoyar de manera unánime la ley fueron las preocupaciones en torno los sesgos raciales inherentes y a la violación al derecho a la privacidad de la ciudadanía.

“Creo que la tecnología levanta grandes preocupaciones, principalmente sobre su falta de precisión, sesgos demográficos, la invasión de las libertades civiles y la privacidad para todas las personas”, declaró la consejera Jeanne Kohl-Welles.

La ley ha sido alabada por sus cualidades, ya que es lo suficientemente amplia para cuidar los derechos de las personas y lo suficientemente específica para evitar que sea un obstáculo a la hora de investigar legítimamente los delitos. Además, contiene medidas de reparación en caso de que alguien sea objetivo del uso ilegal de esta tecnología.

Aunque en Estados Unidos, diversas ciudades como San Francisco, Oakland, Minneapolis y Portland, han prohibido en cierta medida el uso de esta tecnología, King es el primer condado ─conjunto de municipalidades─ en establecer una medida similar.

La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles (ACLU) en Washington celebró la decisión. “El movimiento para prohibir esta tecnología está creciendo a lo largo del país. Incluso cuando es 100 por ciento precisa, esta tecnología termina dañando de manera desproporcionada a comunidades marginadas”, expresó la organización.

Fuente: https://r3d.mx/2021/06/03/el-condado-de-king-en-washington-aprueba-prohibir-la-vigilancia-con-reconocimiento-facial/

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Posición de la UTLA EEUU sobre el conflicto Palestino-Israeli

Declaración sobre el conflicto de Oriente Medio

Han surgido preocupaciones sobre las mociones sobre el conflicto israelí-palestino planteadas en algunas de las ocho reuniones del Área UTLA de este mes. Las mociones fueron debatidas y discutidas, y fueron aprobadas en algunas de las reuniones de Área. No aprobaron en todas las reuniones.

Esto es parte de nuestro proceso democrático como sindicato. Cualquier miembro de UTLA puede traer un tema a nuestras reuniones de Área para ser discutido y debatido. Las mociones que se aprueban luego se trasladan a la Cámara de Representantes de UTLA, nuestro órgano más alto de toma de decisiones, cuya próxima reunión tiene lugar en septiembre. Las mociones presentadas por los miembros de UTLA en las reuniones regionales del Área no son opiniones oficiales expresadas por UTLA o sus líderes electos.

El debate y el desacuerdo son esenciales para la democracia y para nuestra unión, incluso cuando hay emociones profundas y conflictivas en ambos lados.

Como educadores, nuestro trabajo es crear entornos enriquecedores y seguros para todos nuestros estudiantes. UTLA se opone al racismo, sexismo, antisemitismo, xenofobia, homofobia, islamofobia y opresión en todas sus formas. Nos oponemos tanto al odio y la violencia antijudíos como al odio y la violencia antiárabes dondequiera que ocurran, y denunciamos los recientes ataques contra el pueblo judío en Los Ángeles.

Lamentamos la pérdida de todos los niños inocentes que se han visto atrapados en medio de este conflicto. Deploramos la destrucción de escuelas en ambos lados y la necesidad de convertir los lugares de aprendizaje en refugios de emergencia para albergar a las personas desplazadas. Obtener una excelente educación pública es y sigue siendo un derecho humano sin importar en qué país o territorio resida. Este principio debería unirnos a todos como una comunidad global de educación pública.

https://www.utla.net/news/statement-middle-east-conflict

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Agresión de EEUU a la infancia en Cuba

Por: Roberto García Hernández

La Operación Peter Pan, una de las acciones más crueles y violadoras de los derechos humanos de Estados Unidos contra la mayor de las Antillas, forzó el envío de más de 14 mil niños cubanos hacia territorio norteamericano, mediante el engaño de la eliminación de la patria potestad a los padres.

Muchos de los menores nunca volvieron a encontrarse con sus progenitores, o cuando lo hicieron –tras el paso del tiempo– apenas los reconocían y resultaba difícil la convivencia con ellos, según testimonios de algunas víctimas de ese crimen. 

En el afán por destruir la naciente Revolución, Washington desarrolló acciones de todo tipo, como el bloqueo económico, comercial y financiero, agresiones armadas y actos de terrorismo.

Sin embargo, la Operación Peter Pan, ejecutada del 26 de diciembre de 1960 al 23 de octubre de 1962, llegó a extremos de crueldad, y fue un caso de guerra psicológica dirigido a afectar lo más preciado de la familia cubana: sus hijos.

Para llevar adelante la desalmada maniobra, el país norteño y sus aliados dentro de la isla caribeña realizaron una feroz cruzada que aseguraba que el Gobierno revolucionario les quitaría la patria potestad a los padres para disponer de los hijos y enviarlos a la antigua Unión Soviética, o usarlos sin el consentimiento de los progenitores.

El medio empleado en ese mecanismo desestabilizador fue una campaña de propaganda a través de las ondas de la emisora Radio Cuba Libre (también llamada Swan), para provocar alarma y desasosiego en la población.

Entre sus antecedentes más inmediatos está la creación del Programa para Niños Refugiados Cubanos sin acompañantes, en los meses finales de 1960, por parte de contrarrevolucionarios nacidos en la isla y radicados en la península de Florida, bajo la dirección de la Agencia Central de Inteligencia.

Todo ese plan estuvo organizado por el Departamento de Estado norteamericano y la jerarquía de la Iglesia católica en Miami y La Habana, entre otras entidades y agencias federales.

Tanto dicho Programa como la Operación Peter Pan se iniciaron sin tener asegurado el alojamiento para la cantidad de infantes que esperaban sus turnos, a partir de los resultados de las insidiosas maniobras que desplegaron para lograr tales propósitos.

Además de Estados Unidos, diplomáticos de seis embajadas europeas y cinco latinoamericanas estuvieron involucrados en el trasiego de documentos y pasaportes.

De acuerdo con sus organizadores, la Operación Peter Pan finalizó el 22 de octubre de 1962, cuando comenzó la llamada Crisis de los misiles de Cuba y fueron suspendidos los vuelos entre ambas naciones. Sin embargo, durante varios años se continuó realizando de modo secreto.

Los menores de 16 años siguieron saliendo solos, vía España, con un visado regular del país ibérico, donde eran recibidos y los atendían miembros de la Iglesia católica, junto a un grupo de sacerdotes, religiosos y laicos emigrados naturales de la isla.

En una versión libre del famoso refrán, ahora esa historia se repite como otra tragedia, también protagonizada por niños, en la grave crisis migratoria que existe en la frontera de Estados Unidos con México, de la cual muchos culpan a la Administración del presidente Joe Biden.

Allí se concentran decenas de miles de indocumentados, una buena parte de ellos son infantes no acompañados, una adaptación ‘moderna’ pero igual de cruel a lo acontecido hace 60 años.

Como entonces, los sitios donde los albergan no cumplen un mínimo de condiciones indispensables para la vida cotidiana de los menores, la mayoría de los cuales no tiene contacto alguno con sus familiares en los lugares de origen, ni aquellos que lograron pasar la frontera hacia el norte. Ahora, como durante la Operación Peter Pan, son los infantes las principales víctimas de programas mal concebidos, incoherentes y basados en intereses políticos, en esta ocasión iniciados en parte por el exmandatario Donald Trump (2017-2020), pero sin que la nueva Administración demócrata encuentre una solución definitiva a esa situación humanitaria que cada día tiende a agravarse.

(Tomado de Correo de Cuba)

Fuente e imagen:  tercerainformacion.es

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Lo que dejó 2020 para la educación en EEUU

Por: http://eltiempolatino.com

«Que hablen mal de uno es espantoso. Pero hay algo peor: que no hablen», afirmaba el famoso escritor Oscar Wilde. Así, fuera a favor o en contra, con la designación de Betsy Devos como secretaria de Educación del gobierno de Donald Trump y con la llegada de la pandemia, el tema de las opciones escolares (school choice) recibió más atención en los últimos cuatro años que en cualquier otro momento de la historia.

Esta idea, que resultaba desconocida para un gran segmento de la población, de pronto, fue redescubierta y discutida masivamente por los medios de comunicación, en las cortes y en diversos foros públicos tales como paneles y eventos en línea.

Uno de los acontecimientos más sobresalientes ocurrió en junio y fue el caso Espinoza v. Montana Department of Revenue, que sentó un precedente al decidir la Suprema Corte de Justicia a favor de una familia que había elegido poner a sus hijos en una escuela perteneciente a una designación religiosa.

El estado de Montana buscaba negarle a los Espinoza las becas obtenidas a través de un programa subvencionado con donaciones privadas, incentivadas vía un crédito fiscal. El veredicto se amparó en la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos —que protege la libertad religiosa— y dictaminó que toda familia tiene derecho a escoger la escuela de su elección.

Con esta decisión, este tipo de opción escolar fue declarado neutro ante cualquier disposición anti-religiosa, permitiendo así que los padres tengan acceso a todas las posibles escuelas privadas en su comunidad, sean estas laicas o no.

De igual manera, este año la popularidad de educar desde el hogar se duplicó. De acuerdo con la Universidad de Virginia, la modalidad de aprendizaje virtual vino a hacer con la educación lo que Netflix hizo con las tiendas para rentar videos.

En consecuencia, la opción de home-schooling experimentó un incremento del 200%. No obstante, ante la imposibilidad de atender un salón en persona, la pandemia puso sobre el tapete la falta de acceso digital. Muchas familias no tuvieron las computadoras y capacidad de banda (WIFI) para cada uno de sus miembros en edad escolar. De ahí que la brecha digital pasara de ser un fenómeno poco debatido a convertirse en el sujeto esencial de la eterna polémica entre los que tienen mucho y los que tienen muy poco.

A su vez, los grupos de aprendizaje o learning pods entraron en su época de apogeo. La necesidad es madre del ingenio, dice el viejo proverbio. Por eso, ante la urgencia de continuar educando a sus hijos, los padres crearon de forma orgánica grupos guiados por maestros contratados para atenuar la interrupción académica y para garantizar cierto nivel de enseñanza presencial.

Los docentes empleados para dicha tarea reportaron encontrar mayor libertad al elegir horarios, estilo, contenido e incluso tarifas para hacer de su labor algo más innovador y remunerador tanto en lo financiero como en la parte de docente. De nuevo, también en este caso las familias de recursos económicos limitados no pudieron pagar por un maestro privado para implementar la opción de un learning pod.

En lugares como Florida, Arizona, Carolina del Norte, Indianápolis y Wisconsin, donde existe pluralidad de opciones escolares, los programas de becas para asistir a una escuela privada recibieron un mayor número de solicitudes y/o incrementaron el número de participantes.

Es decir, que las inusuales circunstancias impuestas desde marzo y las políticas de gobierno, han producido un auge en el ámbito de las opciones escolares. Ahora que aquello que se daba por sentado (obedecer el mandato de la asignación residencial) ha dejado de ser la norma, tal vez la educación escolar nunca vuelva a ser lo que era. Y las opciones escolares, cada vez más empleadas y conocidas, pudieran pasar a ser en el futuro algo más central que periférico nation-wide.

*http://eltiempolatino.com/news/2020/dec/16/opinion-lo-que-dejo-2020-para-la-educacion-en-eeuu/

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El nuevo capataz

Por: Raúl Zibechi


¿Quién ocupaba la Casa Blanca el 15 de abril de 1961, cuando Estados Unidos intentó invadir Cuba?

¿Quién comandó “la más importante de las operaciones secretas de toda la historia de Estados Unidos”, como la califica Cuba Debate?

¿Quién alentó a la CIA a poner en marcha “una fuerza mercenaria organizada, financiada y armada por el gobierno de los Estados Unidos, proveniente de Guatemala y de la Florida”?

“La verdad es que ningún otro presidente le dio tanta importancia a la CIA como Kennedy constatarúa el ex director de la CIA William Colby en sus Memorias” (https://bit.ly/2JShRtp).

Fracasada la invasión en los combates en las arenas de Playa Girón, gracias al compromiso y la sangre de miles de cubanos, el clan Kennedy se dedicó a preparar nuevas invasiones a la isla revolucionaria, estableciendo en Miami la estación de la CIA más grande e importante del mundo.

Podríamos seguir hablando de John Kennedy a propósito, por ejemplo de la “crisis de los misiles” soviéticos en Cuba, o de la escalada en la presencia militar estadounidense en Vietnam. En los casi tres años que ocupó la presidencia, se registró un aumento exponencial de EEUU en el país asiático, pasando de varios centenares a 16 mil efectivos, lanzando una guerra que años después tocaría su apogeo. Kennedy también fue el creador del Cuerpo de Paz para acoger voluntarios dispuestos a “ayudar” a los países del tercer mundo.

John Kennedy pasaba por ser un hombre moderno, joven, un ícono de las aspiraciones de la juventud estadounidense de la época, pero también de la minoría negra. Era demócrata y ese partido siempre fue identificado como progresista, al lado claro de los republicanos.

Lo anterior, para colocar al futuro presidente Joe Biden en su justo lugar.

Recomiendo la lectura de un informe de la revista digital Rampant, de izquierda socialista, que comienza recordando que “Joe Biden no es solo un leal soldado del neoliberalismo, ha sido el arquitecto de gran parte del panorama político infernal de hoy” (https://bit.ly/2IjrtwR).

En la década de 1970, Biden “lideró la lucha contra la eliminación de la segregación en las escuelas”, siendo “el único miembro del Comité Judicial del Senado que bloqueó a dos personas negras designadas para el Departamento de Justicia”.
Según la publicación, “Biden votó en contra de la abolición del anacrónico y antidemocrático Colegio Electoral, una reliquia de la esclavitud, que instaló de manera antidemocrática tanto a Bush como a Trump”.

En la década de 1980, Biden se destacó por sus campañas contra el derecho al aborto y fue “uno de los arquitectos originales de la desastrosa Guerra contra las Drogas”. Defendió a los segregacionistas y supremacistas blancos, apoyó las reformas impositivas retrógradas de Reagan para favorecer a los ricos, mientras “abogó por recortes en la seguridad social”

En la década de 1990, Biden “se opuso a la igualdad de derechos para la comunidad LGBTQ”, fue diseñador del Plan Colombia, apoyó la desregulación del sistema financiero que facilitó la brutal concentración de riqueza y, según varios medios, realizó acoso a mujeres.

En los 2000 votó a favor de la Ley Patriota, apoyó la guerra en Irak, apoyó el apartheid y la limpieza étnica en Palestina. Se opone al servicio de salud Medicare para todos los estadounidenses, a la legalización de la marihuana y apoya las sanciones de Venezuela.

Los datos están ahí, y cada quien es libre de aceptarlos o rechazarlos, aunque creo que no admiten discusión.

Pensar que Biden es mejor que el fascista de Trump, es siempre una opción que, además, nos ayuda a sentirnos mejor. Algo tal vez necesario en estos momentos de pandemia y militarización crecientes.

Pero es una opción totalmente alejada de la realidad. De Barack Obama se dijo algo similar a lo que se decía de Kennedy, por el simple hecho de que en vez de ladrar, como Trump, sonríe, y es afrodescendiente. Bajo la presidencia de Obama se pergeñaron los golpes contra Fernando Lugo en Paraguay y Manuel Zelaya en Honduras, se dinamitó la “primavera árabe”, se produjeron los bombardeos israelíes sobre la franja de Gaza con más de 400 niños muertos y 2.400 heridos y EEUU apoyó activamente el derrocamiento del presidente Mohamed Morsi, el primer jefe de Estado egipcio surgido de elecciones. Faltan Libia, Siria y la brutal guerra en Yemen, entre otras agresiones.

Me sorprende lo fácil que es engañarnos ante la acumulación de evidencias. Si calificamos a Trump como fascista, ¿qué diríamos de Biden? ¿Y de Obama?

Mientras sigamos creyendo que alcanza con cambiar de mandones, seguiremos siendo prisioneros de los finqueros, que esos no cambian a menos que los expulsemos, recuperando la hacienda.

Fuente e imagen:  https://desinformemonos.org/el-nuevo-capataz/

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Con B(a)iden, toda cambia/nada cambia para Latinoamérica y el Caribe

Por: Aram Aharonian

Nadie tenía dudas de que nada iba a cambiar para América Latina y El Caribe si Donald Trump lograba su reelección. El triunfo de Joe Biden abrió la caja de una cantidad de interrogantes: entre ellas, si logrará asumir el mando y para qué lo asumirá. La gran ventaja que tiene ante su predecesor es que al menos sabe dónde queda su patio trasero.

El nuevo presidente recibirá enormes presiones para dar marcha atrás a muchos de los cambios radicales en temas que van desde la política exterior hasta la crisis climática. Pese a que lo intentó hasta los últimos días, Trump buscó algún logro en materia de política exterior, que incluían un acuerdo de paz para Medio Oriente, retirar las tropas de distintos países y lograr la liberación de rehenes estadounidenses que se cree se encuentran cautivos en Siria.Joe Biden alcanza los votos electorales necesarios para ser presidente de los Estados Unidos | El Economista

Pero no hay que olvidar que Biden, exvicepresidente de Barack Obama, es un anciano, incapaz ya de hablar coherentemente. Será la cara del gobierno, no quien tome las decisiones, de lo que se encargará el lobby de la élite globalista, el gran capital trasnacional, la Red Atlas y su red de think tanks de la derecha, Wall Street, el Deep State y, obviamente, el aparato armamentista-militar.

Él puede parecer tonto, pero es tan poderoso como el propio globalismo. Por suerte, Kamala Harris, la primera vicepresidenta electa de EEUU, tiene 56 años, 22 menos que el próximo presidente. Y, para cuando asuma, en enero de 2021, podrían haber muerto más de 350 mil estadounidenses debido al coronavirus.

Las relaciones con el patio trasero

Si gana Biden, habrá una aceleración de la reubicación de industrias, muchas de ellas en Latinoamérica, que queda mucho más cerca desde un punto de vista no solo geográfico sino también ideológico. Industrias en sectores como la tecnología, el almacenamiento de datos, la fabricación de material médico, e incluso energía.

Argentina, Chile y Bolivia en particular, son muy importantes porque uno de los sectores estratégicos para la economía verde norteamericana son los minerales estratégicos como el litio, y también las tierras raras, que se encuentran en Latinoamérica (y no se necesita importarlas de China), imprescindibles para el desarrollo del sector estratégico como en armamento y supercomputadores.trump

Biden cree que se debe apostar por un gran Plan Marshall para Centroamérica y generar empleo en estos países. Así mejoraría la economía… y terminaría con la inmigración ilegalLo que propone  es «rebuilt better», reconstruir mejor. No se puede  volver a lo de antes, porque el mundo ya no es ni será igual

Para el equipo económico del demócrata, a nivel de sostenibilidad, se debe basar la recuperación económica en un eje verde, apostar por infraestructuras, eficiencia energética, energías renovables, almacenamiento de energía, o sea, todos estos sectores, innovación y I+D que son absolutamente estratégicos. Y eso, que viene de la mano de las grandes trasnacionales estadounidenses, tiene un impacto en Latinoamérica, también.

Expectativas

Cuatro años después de sacudirse con la llegada de Donald Trump al poder, muchos esperan que la política estadounidense hacia América Latina volverá a dar un giro brusco, dadas las declaraciones de Biden sobre aumentar la cooperación continental en problemas que causan ese éxodo en la región, como la violencia y la pobreza, elevar la importancia de otros asuntos en la agenda hemisférica, incluidos los derechos humanos, el medioambiente y la corrupción.

Ésto pondrá a prueba el vínculo de Washington con países como México o Brasil, según expertos. Diplomáticos y ex altos funcionarios estadounidenses sostienen que sus posiciones en materia de comercio, derechos humanos, cambio climático y lucha contra la corrupción podrían resultar incómodas para algunos de los gobernantes de la región, acostumbrados a un Trump, que hacía la vista gorda.

Se teme que la posición de Biden sobre comercio, trabajo y medio ambiente, sea mucho más dura que Trump.

América latina no será una prioridad, especialmente para un presidente que enfrentará una grave emergencia económica y sanitaria. México sería el principal foco de atención debido a su larga frontera terrestre -fuente de inmigración ilegal y contrabando de drogas- y a su condición de gran socio comercial y de inversiones. Biden prometió poner fin a muchas de las políticas inmigratorias de Trump y dejar de construir el muro en la frontera mexicana. Ya veremos.

Eso conlleva sus propios riesgos. Thomas Shannon, un ex alto funcionario del Departamento de Estado, dijo: «El mayor desafío al principio quizás sea el tema de la inmigración. Hay una verdadera presión para que se reviertan las medidas sobre migración, refugiados y asilo, pero si no tienen cuidado en cómo lo hacen, podría llevar a muchos centroamericanos a decidir que éste es el momento de dirigirse al norte».

Las opiniones de Biden sobre la deforestación de la Amazonia y la promesa de “consecuencias económicas importantes” si Brasil no cumple con el plan de 20 mil millones de dólares para recuperar la selva tropical, ya molestaron a Jair Bolsonaro, émulo de Trump, quien afirmó que el electo presidente había mostrado una «clara señal de desprecio hacia la coexistencia cordial y fructífera».

En Washington midieron la respuesta: Para los asesores de Biden, la problemática del clima es muy importante y la idea es aislar a Bolsonaro y a sus socios, sobre todo considerando que  perder a su gran amigo en el norte podría ser un gran problema para un gobierno como el de Bolsonaro, que tiene todos los huevos en esa canasta.

Pero Bolsonaro no es único que se jugó por Trump. También lo hizo el colombiano ultraderechista Iván Duque, que ahora teme la reducción y/o fiscalización de los miles de millones de dólares que recibe anualmente para –supuestamente- combatir el narcotráfico y la violencia.

Desde su círculo de asesores se sostiene que en cuanto a Venezuela, al igual que con Cuba, es poco probable que un gobierno de Biden vuelva directamente a la tregua de la época de Obama; la influencia de los votantes latinos ultraderechistas en el estado clave de Florida se encargará de eso. Es más probable que se avance con pasos cautelosos para crear confianza.

Dado que los presidentes de las naciones andinas (Chile, Perú y Ecuador) dejarán su cargo durante el primer año de un nuevo presidente el pragmático (y cada vez más moderado) argentino Alberto Fernández es uno de los que pueden beneficiarse de un gobiero de Biden.

Rusia y China

El principal desafío para Biden en política exterior será la redefinición de la actitud hacia China y Rusia. El 95% de los antibióticos que se venden en EEUU, se producen en China. El 62% de todo el material médico que se usa en los hospitales del país se fabrican en China. Eso difícilmente vuelva a volver a ocurrir en un gobierno demócrata.

El mensaje histórico de que a EEUU le va mejor económicamente con los republicanos no deja de ser un mito. Nunca ha sido cierto –aunque ha sido bien vendido-  y cuando se mira históricamente, los periodos de mayor bonanza y riqueza económica en EEUU. han sido siempre bajo mandatos demócratas.Estados Unidos vs Rusia, ¿Quién es más poderoso militarmente?

George Bush padre dejó al país con el mayor déficit fiscal en la historia del país. Ocho años más tarde, Bill Clinton dejó a EE.UU. con el superávit fiscal más grande en la historia del país. Con Bush hijo, ocho años más tarde, al país termina con el mayor déficit en la historia, superando el récord de su padre.

Obama recogió la batuta y sacó a EEUU de la peor crisis económica que se vivió desde los años 1930, recupera al país y lo deja otra vez en una situación muy bien encaminada, y ha sido Trump en cuatro años el que ha llevado al país ahora a  batir todos los récords de endeudamiento público.

Cambio de paradigma

Biden propone un cambio de paradigma, un momento decisivo y disruptivo en la historia de EEUU, un cambio de modelo económico y de modelo energético. El objetivo es que para 2050 EEUU sea un país de cero emisión, carbono neutral… teniendo en cuenta que es hoy el segundo país que más contamina del mundo.

Para que eso ocurra, el cambio es disruptivo y se basa en avances tecnológicos, en innovación, en un cambio total donde EE.UU. pasa de ser parte del problema, que es hoy un país que sigue liderado por un negacionista que no escucha la evidencia científica, a tener un presidente que impulsa toda la recuperación económica basándose en un eje de economía sostenible. 

A diferencia de Trump, Joe Biden conoce Latinoamérica in situ y sabe bien de la importancia que tiene para la seguridad nacional de Estados Unidos. Y una de las lecciones que deja la pandemia de coronavirus es que EEUU precisa acercar sus cadenas de suministro, tras verse absolutamente contra las cuerdas cuando varios países tuvieron que salir a mercados internacionales a mendigar barbijos y equipo médico.

Rusia y China

Si no se produce una guerra civil, lo que no es de descartar en las circunstancias actuales, Biden se opondrá al auge de la multipolaridad. Las posibilidades de una nueva guerra mundial son mucho mayores, porque una potencia nuclear cuya soberanía se basa en la capacidad militar es designada como su principal enemigo desde el principio.

Biden actuará en el marco de la geopolítica clásica tratando de atacar Rusia y de alguna manera seducir o neutralizar por lo menos a China(China).

Entre Rusia y China, Biden elige a Rusia como principal enemigo y China como una preocupación neutral o secundaria. A los globalistas les molesta más el poder militar de los polos alternativos que su poder económico. Rusia es una gran potencia geopolítica con armas nucleares y política conservadora. Ese es el principal obstáculo para el establecimiento del orden mundial liberal.

Biden intenta rebajar en Pekín la tensión por la nueva zona de defensa aérea china | Internacional | EL PAÍSCon Biden, Rusia será el principal objeto de presión, ataques y posibles conflictos. La hegemonía global del Occidente liberal está asegurada por la debilidad del poder de la tierra, es decir, de Rusia como Eurasia. Entonces, a los ojos de Biden, China puede considerarse como una parte orgánica del sistema liberal internacional y la expansión internacional de la economía china no es la principal amenaza para el globalismo.

Para Biden, Estados Unidos es la vanguardia del globalismo, la fortaleza de la hegemonía mundial liberal, del imperio global con la misión principal liquidar los estados nacionales, impedir el surgimiento de nuevos polos, e instalar un gobierno global liderado por los capitalistas internacionales, las élites y los monopolios de forma generalizada, incluidos segmentos occidentales y no occidentales.

Las urgencias

La tarea principal y más urgente de Biden en sus primeros 100 días en la Casa Blanca será poner en marcha un nuevo plan nacional de lucha contra el coronavirus, que en EEUU ha contagiado a millones de personas y se ha cobrado más de 220.000 vidas (más que en ningún otro país del mundo). Deberá también tomar medidas para reparar sus desastrosas consecuencias económicasBlack Lives Matter - Wikipedia, la enciclopedia libre

El moderado Biden también recibirá la presión del ala progresista de su propio Partido Demócrata, que ejerce una influencia creciente y aspira a grandes cambios institucionales para responder a las cuestiones más urgentes del futuro del país. Recibe una depresión económica y una pandemia, y lo estarán eligiendo para que resuelva todo esto y haga algo grande..

Tras las multitudinarias protestas por el asesinato de George Floyd a manos de un policía en Minneapolis, también hay mucha expectativa por un posible paquete legislativo en el Congreso que reforme a las fuerzas del orden. Biden también recibiría muchas presiones para poner fin a una anticuada regla del Senado estadounidense conocida como ‘filibusterismo’, que permite al partido en la oposición paralizar los nombramientos y el proceso legislativo.

Los demócratas también dicen que Biden hará que Estados Unidos reingrese de forma inmediata en la Organización Mundial de la Salud reanudando sus contribuciones financieras; que unirá nuevamente a Estados Unidos al Acuerdo de París por el clima; y que anulará las prohibiciones de entrada impuestas por la Administración Trump a los viajeros de países musulmanes.

Biden ha prometido que también volverá al acuerdo nuclear de 2015 con Irán, llamado Plan de Acción Integral Conjunto aunque para decidir cuándo habrá que negociar antes el listado de requisitos a cumplir por Teherán para regresar al pleno cumplimiento de los límites a sus actividad nucleares definidos en el plan

El equipo de campaña de Biden propuso convocar una cumbre de democracias para su primer año de mandato. El ala más progresista del partido presionará para no se limite a replicar el orden internacional de antes de Trump, especialmente en lo referido a las relaciones con aliados autocráticos como Arabia Saudí, y firmar cuanto antes una ley, ya acordada por el Congreso, para frenar el apoyo de EEUU a la guerra dirigida por los saudíes en Yemen..

.Especulaciones

Si gana Biden, seguramente implosione definitivamente el farsesco “gobierno” del autoproclamado presidente Juan Guaidó en Venezuela, arrastrando a la Unión Europea, que le retirará el reconocimiento después del 5 de enero, un mes después de las elecciones parlamentarias en el país caribeño.

Biden reabrirá la apertura con Cuba para facilitar relaciones con Venezuela y promover la paz en Colombia. Los acreedores negocian con la vicepresidenta venezolana Delcy Rodríguez para aliviar las sanciones. La idea del equipo de Biden es aliviar las sanciones a Cuba y Venezuela, obviamente no levantarlas todas…Once tesis sobre Venezuela y una conclusión escarmentada | Cubadebate

Thomas Shannon, ex subsecretario de Estado para Asuntos del Hemisferio Occidental y Roberta Jacobson, ex secretaria de Estado,  regresarán seguramente a Foggy Bottom, el Departamento de Estado.

La ecuación regional para el próximo gobierno es utilizar el «hándicap» favorable en el terreno militar para negociar el control del «lomito» de los recursos estratégicos de la región (los mejores yacimientos de hidrocarburos de Venezuela, el litio de Bolivia, el agronegocio de Brasil y Argentina, la biodiversidad amazónica)

Para lograrlo y hacerlo sostenible, negociará en «términos chinos»: Usando el paradigma boliviano: industrialización local del litio, control estricto del impacto ambiental, participación accionaria y/o fiscal congrua, beneficios para las comunidades circunvecinas y de la provincia)

Shannon es considerado como el más inteligente funcionario que ha pasado por el Departamento de Estado en unos cuantos años, y es parte del equipo de Biden. Con volvería la diplomacia como medio de transición, que es más racional y lógico ya que se eliminará toda amenaza de invasión, una de las amenazas permanentes de la administración Trump.

Con la administración Biden, los expertos señalan que cambiará la dinámica en la Organización de Estados Americanos (OEA) y Claver-Carone saldrá del Banco Interamericano de Desarrollo, donde fue impuesto por Trump hace poco tiempo. Significará, asimismo, el respeto a la soberanía nacional y no interferencia en los asuntos internos.

Este es el «New Deal» que le conviene a los EEUU (e incluso a las Fuerzas Armadas estadounidenses, que demasiados retos tienen en Asia). El problema es que este New Deal no es el que le conviene al «swamp» (pantano) de Washington, Miami ni al iceberg sumergido del mundo financiero que sobrevive gracias al lavado, y otros grandes  negociados financieros.

Es la lógica hora de las especulaciones y cada uno narrará su historia y su análisis. La interrogante está en el título: Con B(a)iden, toda cambia/nada cambia para Latinoamérica y el Caribe

Fuente e imagen: http://estrategia.la/2020/11/08/con-baiden-toda-cambia-nada-cambia-para-latinoamerica-y-el-caribe/

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