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La esclavitud moderna aún encadena a 40 millones de personas en el siglo XXI

Por: Clara Giménez Lorenzo

Un informe de la Walk Free Foundation, colaboradora de la Organización Mundial del Trabajo, señala que los trabajos y los matrimonios forzosos son las dos formas actuales de sometimiento, que afecta sobre todo a mujeres y niñas.

La esclavitud moderna aún encadena a más de 40 millones de personas en pleno siglo XXI, unas dramáticas cifras que cobran actualidad este viernes, día 23, en que se conmemora el Día internacional del recuerdo de la trata de esclavos y su abolición, de Naciones Unidas.

El dato pavoroso procede de las conclusiones del informe de la Walk Free Foundation ( WFF ), un organismo que colabora con la Organización Internacional del Trabajo ( OIT ).

El 23 de agosto de 1791 se produjo una revuelta de esclavos en la entonces colonia francesa de Santo Domingo (Saint Domingue), hoy Haití; revuelta que está considerada como el primer levantamiento contra el poderoso sistema esclavista .

Doscientos años después de aquel tiempo colonial, este cruel sistema de opresión persiste en nuestros días, como evidencia el Índice Global de Esclavitud (GSI, por sus siglas en inglés), elaborado por la citada WFF.

Según el informe de este organismo, publicado en julio de 2018, unos 40,3 millones de personas en el mundo son víctimas de la llamada esclavitud moderna , un término que incluye las situaciones en las que a una persona, mediante amenazas, violencia, coacción, abuso de poder o engaño, se le priva de su libertad para controlar su cuerpo, elegir o rechazar un empleo o dejar de trabajar.

Trabajo y matrimonios forzados

 La propia OIT considera dos formas actuales de sometimiento: el trabajo forzoso y los matrimonios forzados.

Ningún rincón del mundo está exento de situaciones de explotación

Casi 25 millones de seres humanos son víctimas del trabajo impuesto por personas o entidades públicas y privadas. Entre ellas, en torno a cinco millones sufren explotación sexual , y más de 15 millones se ven obligadas a casarse contra su voluntad.

El bochornoso ránking mundial de la esclavitud

 Los diez países que encabezan la esclavitud moderna son Corea del Norte, Eritrea, Burundi, la República Centroafricana, Afganistán, Mauritania, Sudán del Sur, Pakistán, Camboya e Irán, aunque ningún rincón del mundo está exento de situaciones de explotación.

En Brasil, por ejemplo, un caso denunciado es el de dos hermanos, Elias y Nerisvan Vieira da Silva, que estuvieron encerrados en una granja y en contacto permanente con productos tóxicos.

 Más de 400.000 personas sufren esclavitud en EEUU, según este índice

Elias y Nerisvan fueron amenazados con no recibir paga alguna por su trabajo si intentaban escaparse, según relata la ONG estadounidense Free the Slaves , que colaboró con otras organizaciones locales para devolverles la libertad, con lo que hoy han vuelto a trabajar como campesinos en el otro extremo del país.

El caso de estos hermanos tiene mucho que ver con los niños pescadores del Lago Volta (Ghana), los fabricantes de ladrillos de Pahasaur (India), o las 403.000 personas que sufren esclavitud en Estados Unidos, el país más desarrollado del mundo, según los datos del mencionado GSI.

 

  

Un grupo de trabajadores en una fábrica de ladrillos de Bangladesh. REUTERS

 Para la OIT, la vulnerabilidad económica es la principal causa de la esclavitud moderna.

Un 71% de las víctimas de esclavitud son mujeres, según la OIT

Uno de sus expertos, el brasileño Luiz Machado, explica a Efe por teléfono que «si los salarios no pueden cubrir las necesidades de los trabajadores y sus familias, buscarán otras formas para complementar sus ingresos e intentar vivir decentemente. Una familia pobre acepta cualquier tipo de trabajo para sobrevivir» .

Por lo que se refiere a la explotación por género, la OIT señala que un 71% de las víctimas son mujeres.

En concreto, las mujeres y las niñas representan el 99% de quienes sufren trabajo forzoso en la industria del comercio sexual, y llegan hasta el 84% las que son obligadas a casarse.

Seres humanos en venta

 Este sistema moderno de explotación no sólo afecta al tráfico de seres humanos en la medida en que las víctimas pueden ser sometidas en el ámbito doméstico y en el propio lugar de nacimiento.

La trata con fines de explotación sexual es un tipo concreto. Por ejemplo, no supone necesariamente el cruce ilegal de fronteras, pero cuando es así puede implicar también tráfico ilegal de personas.

Joy Amen Omoruyi fue captada en su Nigeria natal y obligada a prostituirse en las calles de Viena

A la joven Joy Amen Omoruyi la captaron en su Nigeria natal cuando confió en quienes supuestamente la ayudarían a llegar a Europa.

Joy pasó por Libia e Italia hasta que la instalaron finalmente en Austria, donde sus tratantes le informaron de que había contraído una «deuda» de 20.000 euros. Fue obligada a prostituirse durante varios meses en las calles de Viena para poder saldarla hasta que consiguió escapar.

Nueve años después, la joven vive en Pamplona (España) y trabaja en Acción contra la Trata (ACT) como auxiliar de mediación para luchar contra la explotación sexual. Su intención es sensibilizar sobre lo que ocurre a miles de mujeres y niñas que salen de países como Nigeria en busca de una vida mejor.

«Europa —asegura a Efe por teléfono— no es lo que la gente en mi país cree; tampoco es consciente de las dificultades y los peligros que hay en el camino… como caer en redes de trata».

 

  

Una mujer en prostitución en el polígono Marconi de Madrid. JAIRO VARGAS

Matrimonios forzosos también en España

 Se sabe poco sobre la práctica de obligar a casarse a las mujeres, una costumbre habitual en ciertas comunidades de África, Oriente Medio, Asia y América Latina.

Según sus propios cálculos, la UNICEF estima que aproximadamente 650 millones de niñas y mujeres en todo el mundo se han casado antes de cumplir los 18 años de edad.

En un contexto de globalización, multiculturalidad y migraciones, los matrimonios forzados han comenzado a aparecer en Europa.

«Todas las mujeres víctimas de matrimonios forzados sufren otras violencias, como agresiones sexuales, malos tratos o trabajos forzosos»

La Federación de Mujeres Progresistas de España (FMP) elaboró en 2018 el informe No Acepto , una investigación preliminar que pretende sacar a la luz los matrimonios forzados en este país.

«Aún no existen grandes datos sobre esta realidad», comenta la abogada Beatriz Lázaro, asesora de la FMP como especialista en violencia de género y una de las autoras del informe.

Lázaro diferencia dos supuestos tipificados en el Código Penal: los matrimonios comprendidos dentro de la trata y aquellos que se producen en el entorno familiar. «Todas las mujeres víctimas de matrimonios forzados -dice- normalmente sufren otras múltiples violencias, como agresiones sexuales, violencia de género o trabajos forzosos».

Luchar contra la esclavitud

 Luiz Machado, el citado experto de la OIT, asegura que «todos los Estados están en contra de la esclavitud moderna, pero muchos no reconocen que exista en su propio territorio. El mayor desafío es este reconocimiento, y la actuación posterior».

España es el cuarto país en un ránking de 20 con más dependencia de esclavitud moderna en la cadena de suministro de la industria pesquera

En España, por ejemplo, la esclavitud moderna también es un hecho que afecta a unas 105.000 personas, según el GSI. Desde enero de 2019, la Guardia Civil del país inspeccionó hasta 952 locales donde pudo producirse explotación laboral. También liberó a 68 víctimas y detuvo a 38 delincuentes .

Asimismo, se lanzó la campaña #trabajoforzoso, que se dirige directamente a posibles víctimas de trata de seres humanos.

En España, de entre quienes sufren explotación sexual, el 90% son mujeres y niñas, mientras la explotación laboral afecta a un 80% de hombres frente a un 20% de mujeres.

Más allá de denunciar estos graves delitos y presionar a las autoridades para que endurezcan la legislación , los expertos consideran que la sociedad civil puede actuar en el día a día contra la esclavitud del siglo XXI.

Lo más sencillo, dicen, es intentar conocer de dónde vienen los productos que consumimos. Según el GSI, España es el cuarto país en un ránking de 20 con más dependencia de esclavitud moderna en la cadena de suministro de la industria pesquera.

Los bienes de consumo con más riesgo de haber sido producidos en situaciones de esclavitud son ordenadores y móviles, ropa, pescado, cacao y caña de azúcar.

No todo el mundo tendrá la oportunidad de ayudar a personas como Joy o los hermanos Da Silva, pero cada ciudadano puede conocer, denunciar y luchar en la medida de sus posibilidades contra una lacra como la esclavitud moderna.

Fuente: https://www.rebelion.org/noticia.php?id=259711

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Trata transatlántica: Una mancha indeleble en la historia de la humanidad

Redacción: Cambio 16

Sojourner Truth fue subastada a los 9 años junto a un rebaño de ovejas, gracias a la trata de esclavos que imperó en el mundo durante 4 siglos. Luego de eso fue vendida dos veces más, golpeada diariamente, acosada, acusada y despojada de sus pocos derechos.  Hoy 23 de agosto su historia resuena como la de muchos otros seres humanos en el Día Internacional del Recuerdo de la Trata de Esclavos y de su Abolición.

Ver imagen en Twitter

Este día fue propuesto por la Unesco con el fin principal de no borrar de la memoria global el capítulo más abyecto de la historia universal: la trata transatlántica de esclavos. De manera que se pueda resaltar y abordar las formas de opresión y racismo que existen en la actualidad.

La trata en el “comercio triangular”

Entre 1501 y 1830, 15 millones de mujeres, hombres y niños aproximadamente, fueron víctimas de la trata transatlántica que transportaba esclavos desde África hacia América. Tanto fue la marea humana venida desde el África que en aquel momento existían 4 esclavos por cada hombre blanco en el nuevo continente. Durante la trata trasatlántica existían dos rutas de comercio:

  • Una al norte, dominada por británicos y franceses.
  • Otra al sur, dominada por portugueses y brasileños.

El comercio de esclavos se conoció como “comercio triangular”. Consistía en la salida de barcos desde la Europa occidental (Portugal, Francia, Inglaterra y los Países Bajos) con suministros de todo tipo.

Los barcos llegaban hasta la costa occidental de África, donde algunos de los productos de Europa se intercambiaban por esclavos negros. De allí partían hacia las Antillas o las costas americanas, donde los esclavos junto a la mayor parte de la mercancía europea se intercambiaban por azúcar, tabaco, cacao y metales preciosos para su vuelta a Europa. España se integraría más tarde a este tipo de comercio.

La mayoría de los cautivos de la trata transatlántica provenían de las zonas centrales y occidentales de África. Ya en Norte y Sudamérica eran obligados a trabajar en plantaciones de cacao, café, algodón, coco, tabaco; en las minas de oro y plata; en los campos de arroz, en la construcción de barcos y en las casas como sirvientes.

Impacto en las mujeres

La trata transatlántica tuvo un impacto mayor en las mujeres, quienes debieron soportar no solo explotación laboral, sino también explotación sexual. Señala la ONU que a medida que estaba más cerca el término del comercio de esclavos, los propietarios aumentaron la presión sobre las mujeres para acrecentar la población de esclavos.

Para esos años, la población de africanos fue tan grande que aún hoy se observa su influencia en América. De allí que este 2019 el tema escogido para la conmemoración del Día Internacional del Recuerdo de la Trata de Esclavos y de su Abolición sea “Recuerdo de la Esclavitud: El Poder de las Artes por la Justicia”.

Las artes que liberan

Las artes son y han sido una vía para enfrentar la esclavitud, empoderar a las comunidades esclavizadas y rendir homenaje a aquellos que lucharon por la libertad y la hicieron posible, de acuerdo con la ONU.

De hecho, en Estados Unidos surgieron  “canciones de trabajo” que estaban asociadas a la herencia de los africanos víctimas de trata. Las canciones se utilizaban para recordar su lugar de origen y son consideradas por algunos autores antecedentes del blues.

 

El Día Internacional del Recuerdo de la Trata de Esclavos y de su Abolición rinde un tributo a la noche entre el 22 y 23 de agosto cuando en Haití los esclavos de distintas plantaciones se sublevaron y arrasaron con el estado de Tremes. La finalidad de este día es continuar la lucha contra los prejuicios raciales y combatir las nuevas formas de esclavitud que afectan a 21 millones de personas en la actualidad, según la UNESCO.

Fuente: https://www.cambio16.com/la-trata-un-negocio-de-vieja-data-dia-internacional-del-recuerdo-de-la-trata-de-esclavos-y-de-su-abolicion/

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Un recorrido por la trata y el grooming, como otro medio para tal fin

Redacción:  El Editor Platense

El flagelo de la trata de personas no es un fenómeno de nuestros tiempos. Este se encuentra íntimamente relacionado con la esclavitud y se remonta al período precolombino. En aquella época, el tráfico y la prostitución en América Latina era una práctica de los españoles cuando tomaban o entregaban “el botín de mujeres” al vencedor, dando origen al comercio sexual y creando establecimientos para su ejercicio.

Posteriormente, en la colonia, aparecen las primeras normas por las cuales se castigaba dicha actividad, así como al proxenetismo, con sanciones que podían llegar hasta la muerte. El término “trata” nace en el año 1869 cuando la Real Academia lo introdujo en su diccionario en cuya definición se hacía referencia a comercio de esclavos negros (mayormente provenientes del África). La expresión “trata de blancas” surgió tiempo después y su origen es francés. Este concepto se desarrolló en la sociedad burguesa para diferenciarlo de la trata de negros. Posteriormente, con la venida del Moralismo Reformador anglosajón surgió el interés en cuestiones como el proxenetismo y la prostitución de mujeres y niños.

Con el devenir de los años, se vio la necesidad de regular la explotación sexual de mujeres. Por tal razón, en el año 1902 la Reina María Cristina creó “El Patronato Real para represión de trata de Blancas”, que perduró hasta el año 1931, siendo reemplazado por el “Patronato de Protección de Mujeres”. Dos años después, en París, se firmó el Acuerdo Internacional para asegurar una protección eficaz a la trata de blancas.

Posteriormente a la Segunda Guerra Mundial, el comercio de mujeres con fines de explotación sexual fue en aumento, debido a que el conflicto bélico trajo aparejado grandes corrientes migratorias (principalmente desde Europa hacia América Latina) y con ello pobreza y hambre. También migraron las prácticas proxenetistas europeas.

La guerra también trajo otra consecuencia: la redacción de Convenios y Protocolos internacionales (entre los que podemos nombrar el “Convenio para la Represión de la Trata de Persona y de la Prostitución Ajena” firmado el día 2 de diciembre del año 1949), los cuales ya no se referían a la “trata de blancas” sino a “trata de mujeres”, dando lugar a una concepción más amplia a la trata.

El concepto fue evolucionando hasta que, en el año 2000, se firmó el Protocolo de Palermo -el cual entró en vigor en el año 2003 y ya son 171 países que lo han ratificado-. En el mismo se abandona definitivamente el término “trata de blancas” o “trata de mujeres”, adoptándose de manera definitiva “trata de personas” o “tráfico de personas”, definiendo dicho crimen. Esencialmente, «tratar» o «traficar» es el transporte de personas, por medio de coerción, engaño, o consentimiento para el propósito de explotación como trabajo forzado o consentido o prostitución. La «trata de personas» puede significar el reclutamiento, transporte, traslado, acogida o recepción de personas, bajo amenaza o por el uso de la fuerza u otra forma de coerción, secuestro, fraude, engaño, abuso de poder o una posición de vulnerabilidad, o recibir pago o beneficios para conseguir que una persona tenga bajo su control a otra persona, para el propósito de explotación.

La explotación puede incluir, como mínimo, la explotación de la prostitución de otros u otra forma de explotación sexual, trabajo forzado o servicios, esclavitud, o prácticas similares a la esclavitud, servidumbre, o remoción de órganos.

En consonancia con la promulgación del Protocolo de Palermo, el 29 de abril del año 2008, Argentina -uno de los países ratificantes del protocolo- sancionó y promulgó la Ley 26.364 de «Prevención y Sanción de la Trata de Personas y Asistencia a sus víctimas» que busca prevenir y sancionar la trata de personas, tanto de adultos como de niños, niñas y adolescentes y también de asistir a las víctimas, y sancionar a los
tratantes.

La ley 26.364 fue modificada por la Ley 26.842 -promulgada el 27 de diciembre del año 2012-, suprimiéndose la distinción entre víctimas mayores y niños, niñas y adolescentes y agrava las escalas penales. Además, incorporó dos finalidades de explotación que no estaban expresamente contempladas en la ley 26.364. Una de ellas, agregada en el inciso d del artículo 1, es la promoción, facilitación o comercialización de la pornografía infantil o la realización de cualquier tipo de representación o espectáculo con dicho contenido. Aquí cabe hacer una aclaración, la llamada “pornografía infantil” se encuentra reprimida el art. 128 del Código Penal Argentino.

Ahora bien, la trata de personas “… en su vertiente más avanzada, implica la cosificación del ser humano, la pérdida absoluta de la libertad (ya sea psíquica o física) y su dominación absoluta por el sujeto activo quien se aprovechará de su fuerza de trabajo con el objetivo último de obtener una mayor ventaja económica” .

LA EXPLOTACIÓN SEXUAL DIGITAL

Bajo estas premisas surge un interrogante: ¿es posible la explotación sexual digital?  Recordemos que nos encontramos transitando una era donde lo digital va ganando espacios en las actividades cotidianas de las personas. Basta con mencionar que al día de hoy uno puede adquirir desde un teléfono celular hasta un inmueble o, incluso, ser usuario de lo que se denomina “billetera digital”. También, vale mencionar que las relaciones interpersonales se han llevado a este mismo plano. Hoy en día, existe un sinfín de redes sociales, aplicaciones, etc. (Facebook, Twitter, Instagram y otras no tan conocidas como Grinder, Amino, Tinder), donde los usuarios crean un perfil, suben fotografías, comparten historias y concretan citas.

A partir de ello, podemos advertir cómo las nuevas formas de comunicación empiezan a jugar un rol preponderante en la manera en que se ofrecen servicios de índole sexual. Vemos que a través de redes sociales se publicitan servicios de acompañantes, se ofrecen packs (compilación de fotografías pornográficas) a cambio de dinero, o como ha proliferado el sistema de contratación de pornografía a través de cámaras web (donde el cliente abona una suma de dinero a cambio de ver en vivo y en directo al actor/actriz e interactuar con ellos).

Pues bien, todo comienza a oscurecer cuando estas redes son utilizadas por uno de los segmentos sociales más vulnerables: los niños, niñas y adolescentes. Esto nos obliga a enfocar la mirada y ser más precavidos a la hora de analizar la explotación sexual. No es nada nuevo que este grupo eterio pasa la mayor parte de sus horas detrás de un celular o una computadora interactuando a través de redes sociales (la llamada cultura de la habitación ), muchas veces sin conocer a su interlocutor en “la vida real”.

Al analizar estas nuevas costumbres que tienen los niños, niñas y adolescentes se empiezan a vislumbrar nuevas conductas delictivas como el grooming.

Recordemos que lo que se tipificó con el grooming, es el hecho que un adulto, mediante las tecnologías de la información y la comunicación, se contacte con un niño, niña o adolescente, con el propósito de cometer un ataque contra su integridad sexual.  Y ¿cómo actúa el pederasta digital? En muchos casos, todo comienza a partir de ganarse la confianza de los niños, niñas y adolescentes para que estos brinden una fotografía o video intimo (comprometido) y, luego, a través de amenazas, coacción o, básicamente, chantaje, obtener de la víctima otros actos cuya consecuencia resultan mucho más graves.

A esta altura, el que en sus inicios aparecía como un groomer, pudo haber provocado en el niño, niña o adolescente la pérdida absoluta de su voluntad psíquica –por las amenazas y/o coacción- y dominarlo. A partir de ese momento, se comienza a transitar hacia conductas mucho más graves.

En efecto, aquí el grooming es el punto de partida para aquellos que, a costa de las vulnerabilidades económicamente perjudicándolos, toda vez que son ellos quienes mayoritariamente utilizan las redes de los niños, niñas y adolescentes, pretenden beneficiarse.

Esta nueva especie, a la que podemos denominar “explotador sexual digital”, recurre a perfiles falsos, donde simula ser un niño de la edad de sus interlocutores con la finalidad de ganar su confianza. Pretenden ser sus amigos y los seducen para obtener imágenes sexuales. Lo novedoso es que ya no lo hacen con el fin de contactar a los niños, niñas y adolescentes con fines sexuales o para obtener material pornográfico, sino que son captados y sometidos a fin de que realicen prácticas sexuales.

Para ello, utilizan los servicios de teleconferencia que permiten las distintas plataformas (como whatsapp, Facebook, o páginas de streaming, que posibilitan la transmisión en vivo y en directo, etc.).

Son contactados por personas (a las que podríamos encuadrar como clientes), que se vinculan con el sujeto que las “controla” –tratante-. Este les da el contacto (ya sea el número telefónico o el usuario de determinada red social), para luego interactuar. Claramente esta situación no encuadra en lo que actual y tradicionalmente conocemos como “trata de personas”, delito que se encuentra previsto y reprimido por el artículo 145 bis del Código Penal, puesto que no contempla las acciones descriptas anteriormente.

Fuente: https://eleditorplatense.com.ar/nota/9741/un_recorrido_por_la_trata_y_el_grooming_como_otro_medio_para_tal_fin

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Canadá inyectará importantes sumas para luchar contra la explotación sexual

Redacción: Rcinet

Deplorando el aumento de los casos de pornografía infantil, el gobierno federal canadiense anunció la ampliación de la Estrategia Nacional para la Protección de los Niños contra la Explotación Sexual en Internet y un fondo de 22 millones de dólares adicionales en tres años para combatirla. 

Ralph Goodale, Ministro de Seguridad Pública y Preparación para Emergencias, dijo que la situación es crítica ya que cada vez se denuncian más crímenes sexuales contra menores a la policía.

El número de incidentes de pornografía infantil conocidos por la policía aumentó en un 288 por ciento en Canadá entre 2010 y 2017, y estos casos no se denuncian, dijo Goodale.

«El delito de explotación sexual de los niños es atroz e intolerable para todas las personas decentes. Este delito es motivo de grave preocupación para el gobierno, los organismos encargados de hacer cumplir la ley y los asociados internacionales y otros niveles de gobierno. El compromiso constante de nuestro gobierno tendrá un impacto significativo en la lucha contra este flagelo, tanto a nivel internacional a través de nuestro trabajo con el Grupo de los Cinco como a nivel nacional a través de nuestro apoyo a los esfuerzos de la policía para investigar y procesar a los depredadores, a través de nuestra mayor conciencia y a través de nuestra estrecha colaboración con la industria digital.»Ralph Goodale, Ministro de Seguridad Pública y Preparación para Emergencias

Cooperación internacional

Canadá trabaja en colaboración con socios internacionales para luchar contra la explotación de los niños en línea. Esta colaboración consiste en compartir información para identificar a los depredadores en línea, y también compartir las mejores prácticas y las lecciones aprendidas en la lucha contra la explotación infantil en el cambiante entorno de Internet.

El anuncio canadiense de este martes surge como respuesta a la reunión del 28 y 29 de julio pasados, de los miembros de la alianza de inteligencia Five Eyes (Canadá, Australia, los Estados Unidos, Nueva Zelandia y el Reino Unido), que se reunieron en Londres (Reino Unido) con dirigentes de la industria digital, incluidos representantes de Microsoft, Twitter, Facebook y Google, para examinar la explotación sexual de los niños en línea.

Los ministros reiteraron su esperanza de que la industria digital convierta en una prioridad la creación de un entorno en línea más seguro para los niños. Acordaron seguir cooperando para contrarrestar este crimen vil y despreciable.

Después de la cumbre de dos días en Londres, los ministros de alto nivel dijeron que la codificación (encriptamiento) no debe hacerse a expensas de la seguridad pública.

«Nos preocupa que las empresas diseñen deliberadamente sus sistemas de manera que se impida cualquier forma de acceso al contenido, incluso en los casos de los delitos más graves. Las empresas tecnológicas deben incluir mecanismos en el diseño de sus productos y servicios cifrados para que los gobiernos, actuando con la autoridad legal apropiada, puedan obtener acceso a los datos en un formato legible y utilizable».Declaración Five Eyes posterior a la cumbre

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Los cinco aliados de habla inglesa tienen un acuerdo para compartir inteligencia y técnicas para reunirla, una relación que se desarrolló a partir de una alianza secreta de la Segunda Guerra Mundial entre los equipos de cifrado y descifrado británicos y estadounidenses.

Los datos encriptados hacen más difícil que los espías se entrometan. Los gobiernos occidentales han dicho que esto puede complicar las investigaciones y los enjuiciamientos de las personas involucradas en el abuso sexual infantil o el terrorismo.

Internet y la explotación sexual

(Foto: ©iStock/Marcos Calvo)

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

No cabe duda que el Internet ha cambiado la forma en que se cometen los delitos de explotación sexual de los niños y la forma en que se llevan a cabo las investigaciones y los enjuiciamientos.

La Real Policía Montada de Canadá (RCMP), ha establecido programas nuevos y estratégicos para poder hacer frente a ese tipo de crimen que son vulnerables entre otros, creando el Centro Nacional de Coordinación de la Explotación Infantil (NCECC) es parte integrante de la respuesta del Canadá al alarmante aumento de la delincuencia relacionada con la explotación sexual de los niños en Internet.

La RCMP es miembro fundador del Virtual Global Taskforce (VGT) un organismo internacional de lucha contra la explotación sexual en línea de los niños en todo el mundo. El grupo tiene los siguientes objetivos:

Por otra parte, el Centro Canadiense para la Protección de la Infancia, gestiona la línea telefónica nacional, cyberaide.ca, y los programas de sensibilización y educación del público.

Fuente: https://www.rcinet.ca/es/2019/08/06/canada-inyectara-importantes-sumas-para-luchar-contra-la-explotacion-sexual/

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5 datos reveladores sobre la trata de personas en Sudamérica: explotación sexual, adopción ilegal y más

 

Cada vez se detectan y reportan más víctimas de trata en el mundo, según la ONU. Este 30 de julio se celebra el Día Mundial contra la Trata, un flagelo en Sudamérica afecta más a las mujeres que en su mayoría son víctimas de explotación sexual.

Antonio Guterres, secretario general de la ONU, destaca que falta mucho por hacer para “llevar a las redes transnacionales de trata ante la justicia y, sobre todo, para asegurarse de que se detecta e identifica a las víctimas y de que estas pueden acceder a la protección y los servicios que precisan”, dijo según el portal de noticias de la organización.

Mira estos 5 datos impactantes sobre la trata de personas en la región, según la ONU:

1. La mayoría de las víctimas de trata detectadas son mujeres

Según un informe de la ONU de 2018, en 2016 el 51% de las víctimas de trata en Sudamérica fueron mujeres. El 12% fueron hombres; el 31% niñas menores de edad y el 6% niños.

2. Bolivia y Perú reportan más niños víctimas

La mayoría de las víctimas de trata en estos países andinos son niños.

3. La mayoría son explotadas sexualmente

El 58% de las víctimas detectadas son explotadas sexualmente: 96% de ellas son mujeres (más mujeres adultas que niñas). El 32% son obligadas a trabajos forzados: 33% hombres, 26% mujeres, 24% niñas y 17% niños. Y el 10% para otros propósitos, que incluyen mendigar dinero en las calles y adopción ilegal.

4. Bolivia reportó unas 170 víctimas de adopción ilegal

Entre 2014 y 2017, en este país se detectaron unas 170 víctimas de trata para adopción ilegal.

MIRA: Rechazan referendo contra la adopción para homosexuales, solteros y viudos en Colombia

5. Las víctimas van en su mayoría a otros países de la región

“Durante el período comprendido entre 2014 y 2017, las víctimas de América del Sur fueron detectadas o repatriadas desde diferentes países, principalmente en otros países de América del Sur, pero también en países de América Central y el Caribe. Víctimas de la parte norte del continente, como Colombia y la República Bolivariana de Venezuela, se detectaron en países de América Central y el Caribe de relativa proximidad geográfica, como como Panamá y la República Dominicana“, explica la ONU.

El 93% de las víctimas son halladas en la misma región.

Cada vez hay menos víctimas sudamericanas detectadas en Europa.

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Colombia: Las estudiantes que buscan frenar la explotación sexual de menores

América del sur/Colombia/02 Mayo 2019/Fuente: Semana

Por primera vez el Concejo de Bogotá aprobó un proyecto planteado por seis estudiantes de colegios para frenar la explotación sexual de menores. La medida contempla la creación de una ruta de prevención en las instituciones educativas de la capital.

Con gran emoción seis estudiantes lograron que su proyecto de acuerdo para prevenir la explotación sexual de menores alrededor de los colegios fuera aprobado en segundo debate en el Concejo de Bogotá.

Una noticia que impulsa a los estudiantes a participar en la política local desde temprana edad, pues por primera vez un proyecto de acuerdo de la Mesa Distrital de Cabildantes Estudiantiles, un espacio en donde los jóvenes participan y reflexionan sobre los temas de la ciudad llega al Concejo de Bogotá.

Astrid Fonseca estudiante y coautora del proyecto, cuenta que, desde hace un año vienen trabajando en este tipo de iniciativas con el acompañamiento de la Veeduría Distrital y la Secretaría de Educación Distrital. Asegura que, entre todos los cabildantes estudiantiles identificaron que uno de los problemas que más aqueja a los niños y jóvenes de Bogotá es la explotación sexual de los menores.

Entre los cientos de temas que nos preocupan, priorizamos la explotación sexual, porque vimos que hay un número creciente de casos de abuso sexual en menores”, explicó la estudiante.  

Video insertado

Veeduría Distrital@VeeduriaBogota

Dos iniciativas de los fueron aprobadas hoy en @ConcejoDeBogota Estudiantes invitan a jóvenes a pertenecer a esta instancia de participación juvenil reiterando que se puede ser incidente con sus propuestas por Bogotá @Educacionbogota

Ver los otros Tweets de Veeduría Distrital
Y es que, según cifras del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), en Colombia se identifican, en promedio, 100 casos de explotación sexual infantil al mes, siendo este uno de los flagelos que más golpea a la niñez.

Una vez el proyecto sea sancionado por el alcalde Enrique Peñalosa, será implementado por las entidades competentes: las Secretarías Distritales de Seguridad, Convivencia y Justicia, Salud, Educación y Gobierno.

Entre las estrategias que contempla el proyecto para prevenir este tipo de delitos en los colegios, está la articulación y talleres entre rectores, docentes y las escuelas de padres. También, se creará una ruta de prevención y erradicación de la Explotación Sexual Comercial de Niños, Niñas y Adolescentes (ESCNNA) en las instituciones educativas de Bogotá.

Pero, además, el Concejo también aprobó un segundo proyecto presentado por los estudiantes. Se trata del Acuerdo 148 de 2019 por medio del cual se implementan Herramientas Digitales de Información, Orientación y Comunicación para prevenir el consumo de sustancias psicoactivas

De acuerdo con Astrid Fonseca, será una base de datos en donde los jóvenes puedan acceder a información rápida y concisa respecto al consumo de sustancias psicoactivas, embarazo adolescente y paternidad a temprana edad. “Este es un proceso que nos llena de orgullo porque estamos acortando esa distancia que existe entre los dirigentes políticos y las ideas de los nosotros los jóvenes”, expresó Astrid.

“Estamos en un momento fundamental en el cual los jóvenes contribuyen no solo a entender mejor las problemáticas en los entornos escolares y del barrio, sino que con este tipo de iniciativas nos ayudan a proponen soluciones”, destacó el veedor Distrital, Jaime Torres-Melo.

Imagen tomada de: https://static.iris.net.co/semana/upload/images/2019/4/30/611721_1.jpg

Fuente: https://www.semana.com/educacion/articulo/aprobado-proyecto-que-propone-frenar-la-explotacion-sexual-en-los-colegios/611726
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Las jóvenes que escaparon de Corea del Norte y cayeron en una red de sexo por internet en China

Redacción: BBC Mundo

Consiguieron escapar de Corea del Norte, pero cayeron en las manos de una red de explotación sexual que las mantuvo cautivas durante años.

La ciudad china de Yanji se encuentra cerca de la frontera con Corea del Norte. Allí, en el tercer piso de un edificio residencial, dos mujeres jóvenes arrojan por la ventana sus sábanas rotas y atadas entre sí.

Cuando las vuelven a subir, ya están amarradas a una cuerda de verdad.

Las dos empiezan a descender. «Rápido, no tenemos mucho tiempo», les mete prisa su rescatador.

Una vez a salvo en el suelo, se dan la vuelta y corren hacia una furgoneta.

Pero todavía no están fuera de peligro.

MiraDerechos de autor de la imagenCHUN KIWON
Image captionMira pasó cinco años forzada a atender a clientes surcoreanos por internet.

Mira y Jiyun son desertoras del régimen norcoreano y, con algunos años de diferencia, ambas fueron engañadas por traficantes de personas.

Una vez en China, la misma gente que las ayudó a escapar de su país las entregó a un servicio de sexcams o de sexo a través de internet.

Mira, durante los últimos cinco años, y Jiyun, durante los últimos ocho, estuvieron encerradas en un departamento en el que eran obligadas a trabajar como «chicas de sexcam», teniendo que realizar con frecuencia actos pornográficos frente a una cámara web.

El sitio web en el que trabajabanDerechos de autor de la imagenCHUN KIWON
Image captionMientras más tiempo enganchaban al cliente, más dinero generaban para el director.

Salir de Corea del Norte sin el permiso del régimen es ilegal, pero aun así, muchos arriesgan sus vidas por escapar.

En Corea del Sur, existe un refugio para ellos pero el tramo de tierra que separa estos dos países se encuentra muy militarizado y lleno de minas antipersonas, así que es casi imposible huir hasta allí de modo directo.

Así que muchos desertores han tenido que ir al norte y cruzar hacia China.

Pero China los considera «inmigrantes ilegales», así que sus autoridades los devuelven a Corea del Norte si los encuentran. Si esto sucede, al regresar a territorio norcoreano son objeto de torturas y prisión por su «traición a la patria».

Menos desertores

Muchos detractores huyeron a mitad de los 90, cuando una gran hambruna conocida como la «Ardua Marcha» causó la muerte de al menos un millón de personas.

Pero desde la llegada al poder de Kim Jong-un, en 2011, el total de personas que abandonan el país ha caído en más de la mitad. Este declive ha sido atribuido a un mayor control en la frontera y a un aumento de las tarifas de los traficantes de personas.

Mapa

Mira huyó de su país con solo 22 años.

Nacida cerca del final del periodo de hambruna, creció como parte de una nueva generación de norcoreanos. Gracias a una pujante red de mercados clandestinos, llamada localmente «Jangmadang», tenían acceso a reproductores DVD, cosméticos, falsificaciones de ropa de marca, así como memorias USB llenas de películas extranjeras ilegales.

Este flujo de materiales venidos de fuera hacía que algunos quisieran desertar. Los filmes traídos de contrabando desde China dejaban echar un vistazo al mundo exterior y motivaban a abandonar Corea del Norte.

Mira fue una de las influenciadas.

«Me encantaban las películas chinas y pensaba que todos los hombres chinos eran así. Quería casarme con un chino y durante muchos años investigué cómo irme de Corea del Norte».

Su padre, antiguo soldado y miembro del partido, era muy estricto y sometía a la familia a un horario apretado. En ocasiones, hasta le pegaba.

Mira quería formarse para ser médico, pero su padre se lo impidió. Se fue frustrando cada vez más y soñaba con una vida nueva en China.

«Mi padre era miembro del partido y era asfixiante. No me dejaba ver películas extranjeras, tenía que levantarme e irme a la cama a una hora exacta. No tenía mi propia vida».

Río TumenDerechos de autor de la imagenGETTY IMAGES
Image captionEl río Tumen le sirve a Corea del Norte de frontera natural con Rusia y China.

Durante años, Mira intentó encontrar un traficante que la ayudara a cruzar el río Tumen, que separa a Corea del Norte de China y Rusia, y escapar a través de esa frontera altamente controlada. Pero los lazos cercanos de su familia con el gobierno hacía que a muchos traficantes les preocupara que ella fuera a denunciarlos.

Al final, tras cuatro años intentándolo, encontró a alguien dispuesto a ayudarla.

Como muchos desertores, Mira no tenía suficiente dinero para pagarle a su traficante directamente.

Así que, a cambio, accedió a ser «vendida» para saldar su deuda con trabajo. Pensó que la enviarían a un restaurante.

Pero la engañaron. La red de tráfico de personas a la que había recurrido reclutaba mujeres norcoreanas para hacerlas trabajar en la industria del sexo.

Tras cruzar el río Tumen hacia China, Mira fue llevada directamente a la ciudad de Yanji, donde fue entregada a un hombre coreano-chino a quien ella conocería solo como «el director».

Un voluntario, Mira y JiyunDerechos de autor de la imagenDURIHANA
Image captionMira y Jiyun recorrieron China para poder escapar a un tercer país.

Yanji se ubica en el corazón de la región Yambián y alberga a una gran población de etnia coreana. Se ha convertido en un concurrido centro de comercio con Corea del Norte, pero también en la una de las principales ciudades chinas en las que los desertores norcoreanos se esconden.

La mayoría de desertores son mujeres. Al carecer de estatus legal en China, son particularmente vulnerables a la explotación. Algunas son vendidas como novias, a menudo, en áreas rurales. Otras son obligadas a prostituirse o, como Mira, a participar en la industria del sexo por internet.

«Era tan humillante»

Cuando Mira llegó al departamento, el director le reveló finalmente a cuál iba a ser su nuevo trabajo.

La emparejó con una «mentora» con quien compartiría la habitación. Mira debía observar, aprender y practicar.

«No podía creerlo. Como mujer, era tan humillante quitarte la ropa así frente a la gente. Cuando me puse a llorar, me preguntaron si lo hacía porque extrañaba mi casa».

Mira en el sitio webDerechos de autor de la imagenCHUN KIWON
Image captionLas jóvenes se contactaban con Chun a través del sitio web en el que trabajaban, pero en realidad lo que hacían era planear la huida.

La página web de sexo y la mayoría de sus usuarios eran surcoreanos. Pagaban por minuto, así que se animaba a las mujeres a que mantuvieran la atención de los hombres la mayor cantidad de tiempo posible.

Cada vez que Mira titubeaba o se mostraba temerosa, el director la amenazaba con regresarla a Corea del Norte.

«Todos los miembros de mi familia trabajan en el gobierno y si vuelvo, estaría llevando vergüenza a mi apellido. Preferiría desvanecerme como el humo y morir».

En el departamento, llegó a haber nueve mujeres al mismo tiempo. Cuando la primera compañera de habitación de Mira escapó junto a otra joven, Mira fue puesta con otro grupo de chicas. Así fue como conoció a Jiyun.

Jiyun mira por la ventana
Image captionJiyun huyó de Corea del Norte porque quería ganar dinero para alimentar a su familia.

Jiyun tenía solo 16 años cuando se escapó de su país en 2010.

Sus padres se habían divorciado cuando ella tenía dos años y su familia cayó en la pobreza. Dejó de ir a la escuela a los 11 años para poder trabajar y finalmente decidió ir a China un año para llevar dinero a casa.

Pero, como Mira, también acabó engañada por su traficante, que no le dijo que trabajaría frente a una cámara.

«No podía volver con las manos vacías»

Cuando Jiyun llegó a Yanji, el director intentó enviarla de vuelta a Corea del Norte. Dijo que ella era «demasiado oscura y fea».

Pese a la situación, Jiyun no quería regresar.

«Es un tipo de trabajo que desprecio al máximo, pero había arriesgado mi vida para venir a China así que no podía volver con las manos vacías».

«Mi sueño era alimentar a mis abuelos con algo de arroz antes de que se fueran de este mundo. Por eso pude aguantar todo. Quería enviar dinero a la familia».

Jiyun trabajó duro creyendo que el director la recompensaría por hacerlo bien. Aferrándose a la promesa de que sería capaz de contactar a su familia y enviarles dinero, pronto se convirtió en la que más dinero ingresaba para la casa.

«Quería ser reconocida por el director y quería contactar a mi familia. Pensé que si era la mejor de la casa, sería la primera en ser liberada de ese trabajo».

Jiyun escapó del departamento llevándose solo algunas cremas para la cara, pañuelos húmedos, una toalla higiénica, algo de maquillaje y un peine.
Image captionEsto era todo lo que tenía Jiyun cuando se escapó.

A veces solo dormía cuatro horas por la noche para poder alcanzar el objetivo diario de US$177. Estaba desesperada por ganar dinero para su familia.

En ocasiones, Jiyun incluso consolaba a Mira, diciéndole que no se rebelara sino que intentara razonar con el director.

«Primero, trabaja duro», le decía a Mira, «y si el director no te envía a casa después, entonces puedes razonar con él».

Jiyun afirma que durante los años en que ganaba más que las otras chicas, el director la favoreció mucho.

«Yo pensaba que se preocupaba por mí de verdad. Pero los días en los que las ventas bajaban, le cambiaba la cara. Nos regañaba por no intentarlo con fuerzas y por hacer otras actividades malas como mirar películas dramáticas».

El departamento era vigilado de cerca por la familia del director. Sus padres dormían en la sala y la puerta de entrada estaba cerrada.

El director les traía comida a las chicas y su hermano, que vivía cerca, venía cada mañana a tirar la basura

«Era un confinamiento total, incluso peor que una prisión», asegura Jiyun.

A las jóvenes se les permitía salir cada seis meses o, si sus ingresos eran lo suficientemente altos, una vez al mes. En esos escasos momentos, ellas se iban de compras o a la peluquería. Pero incluso entonces no se les permitía hablar con nadie.

Mira llevaba algunas medicinas, entre las que había curitas y gotas para los ojos.
Image captionY esto, lo que llevaba consigo Mira.

«El director caminaba muy cerca de nosotras, como un amante, porque tenía miedo de que nos escapáramos», dice Mira. «Yo quería caminar como me diera la gana, pero no podía. No se nos permitía hablar con nadie, ni siquiera para comprar una botella de agua. Me sentía como una tonta».

El director había nombrado «encargada» a una de las norcoreanas y ella vigilaba al resto cuando él no estaba.

El director le prometió a Mira que la casaría con un buen hombre si trabajaba duro. A Jiyum le prometió que le permitiría contactar a su familia.

Cuando Jiyun le pidió que la liberara, él le dijo que ella necesitaba ganar US$53.200 para pagar el viaje. Luego que dijo que no podía dejarla en libertad porque no podía encontrar a ningún traficante.

Mira y Jiyun nunca vieron el dinero que habían ganado con su trabajo frente a la cámara.

Al principio, el director accedió a darles el 30% de las ganancias, la que les entregaría cuando las dejara en libertad.

Pero Mira y Jiyun se iban poniendo más nerviosas a medida que se daban cuenta de que tal vez no iban a ser libres nunca.

«Matarme no es algo en lo que pensaría normalmente, pero traté de tomar una sobredosis de medicamentos y traté de saltar de una ventana», dice Jiyun.

La ayuda de un cliente

Los años pasaron: cinco para Mira y ocho para Jiyun.

Luego un cliente de Mira, a quien ella conocía desde hacía tres años, se compadeció de ella. La puso en contacto con el pastor Chun Kiwon, que lleva 20 años ayudando a desertores norcoreanos.

Chun Kiwon leyendo
Image captionEl pastor Chun Kiwon recibió un mensaje de texto en el que se le informaba que Mira y Jiyun estaban a salvo al otro lado de la frontera China.

El cliente también instaló de manera remota una aplicación de mensajería en la computadora de Mira para que pudiera comunicarse con el pastor.

Chun es muy conocido entre los desertores norcoreanos. La televisión estatal norcoreana lo ataca frecuentemente, llamándolo «secuestrador» y «estafador».

Desde que fundó su organización caritativa Durihana en 1999, él estima en 1.200 los desertores a quienes ha ayudado a estar en una situación segura.

Recibe dos o tres pedidos de rescate al mes, pero el caso de Mira y Jiyun le pareció particularmente preocupante.

«He visto chicas que habían estado encerradas durante tres años. Pero nunca había visto un caso en el que estuvieran retenidas tanto tiempo. Me rompe el corazón».

Noticias norcoreanasDerechos de autor de la imagenDURIHANA
Image captionLa prensa norcoreana habla mal de Chun.

Chun asegura que el tráfico de desertoras se ha vuelto más organizado y que algunos de los soldados norcoreanos que vigilan la frontera están involucrados.

Al tráfico de mujeres, a veces se le llama «comercio de cerdos norcoreanos» en la región fronteriza de China. El precio de las mujeres puede ir de cientos a miles de dólares.

Pese a que es difícil obtener estadísticas oficiales, la Organización de las Naciones unidas (ONU) se ha mostrado preocupada por los altos niveles de tráfico de norcoreanas.

El Departamento de Estado de los Estados Unidos elabora un Informe de Tráfico de Personas anual que constantemente señala a Corea del Norte como una de las peores naciones en cuanto a trata de blancas.

Chun KiwonDerechos de autor de la imagenCHUN KIWON
Image captionJiyun pudo contactar con Chun gracias a un cliente que se apiadó de ella.

En el transcurso de un mes, Chun se mantuvo en contacto con Mira y Jiyun a través de la página de sexo por internet, fingiendo ser un cliente. De esa manera, las jóvenes podían hacer como si estuvieran trabajando cuando en realidad estaban planeando su escape.

«Normalmente, los desertores encerrados no conocen su ubicación porque son llevados hasta los departamentos con los ojos tapados y de noche. Por suerte, ella [Mira y Jiyun] sabían que estaban en Yanji y podían ver el letrero de un hotel afuera», dice.

Chun usó Google Maps para determinar con exactitud su ubicación exacta y envió a un voluntario de su organización Durihana para que explorara los exteriores antes del escape.

Mapa

Salir de China es peligroso para cualquier desertor norcoreano.

La mayoría quiere llegar a un tercer país o a una embajada de Corea del Sur, donde se les garantiza un vuelo a ese país y asilo.

Pero viajar por territorio chino sin documentos es arriesgado.

«En el pasado, los desertores podían arreglárselas viajando con documentos falsos. Pero estos días, las autoridades llevan consigo un dispositivo electrónico que detecta si son auténticos o no», explica Chun.

El escape

Después de huir del departamento, Jiyun y Mira comenzaron su largo viaje a través del gigante asiático con la ayuda de voluntarios de Durihana.

Sin ninguna documentación, no se arriesgaban a registrarse en hoteles ni albergues, así que tuvieron que dormir en trenes o pasar noches en vela dentro de restaurantes.

En su último día en China, tras soportar una escalada de cinco horas por una montaña, finalmente cruzaron la frontera y entraron a una nación vecina. La ruta y el país no puede ser mencionados por motivos de seguridad.

Manos con arañazos
Image captionJiyun tuvo que escalar una montaña durante cinco horas para poder salir de China.

Mira y Jiyun no conocieron a Chun hasta 12 días después de haber escapado del departamento.

«Creo que estaré perfectamente a salvo cuando reciba la ciudadanía surcoreana, pero solo haber conocido al pastor Chun me hace sentirme segura. Lloré al pensar que había alcanzado la libertad», dice Jiyun.

Juntas, viajaron por auto otras 27 horas hasta la embajada de Corea del Sur más cercana.

Embajada de Corea del Sur
Image captionLos desertores norcoreanos suelen querer alcanzar una embajada surcoreana porque saben que allí se les garantizará un vuelo a Seúl y asilo.

Chun dice que a algunos norcoreanos les parece especialmente difícil de llevar la última parte del trayecto, ya que no están acostumbrados a viajar en carro.

«Los desertores suelen marearse y a veces se desmayan después de haber vomitado mucho. Es una carretera infernal que recorren quienes buscan el cielo«.

Justo antes de entrar en la embajada, Mira sonría nerviosamente y dice que tiene ganas de llorar.

«Me siento como si hubiera salido del infierno», asegura Jiyun. «Me vienen muchos sentimientos a ratos. Si voy a Corea del Sur puede que nunca vea a mi familia otra vez y me siento culpable. Ese no fue mi motivo para irme».

El pastor y las jóvenes entran en la embajada juntos. Unos segundos después, solo Chun regresa. Su trabajo está acabado.

Mira y Jiyun miran hacia China
Image captionMira y Jiyun consiguieron salir de China gracias a la red de voluntarios de Chun.

Mira y Jiyun se subirán en un vuelo directo a Corea del Sur, donde pasarán por un riguroso proceso de revisión por parte de los servicios nacionales de inteligencia para verificar que no son espías.

Luego pasarán hasta tres meses en Hanawon, un centro para refugiados norcoreanos, donde se les enseñará habilidades básicas para adaptarse a su nueva vida en Corea del Sur.

Los desertores aprenden a hacer compras, usar un celular, los principios de la economía de mercado y reciben capacitación para poder trabajar. También se les da asesoramiento.

Luego, se convertirán en ciudadanas oficiales de Corea del Sur.

«Quiero aprender inglés o chino para poder convertirme en guía turística», responde Mira cuando se le pregunta sobre qué sueña alcanzar en Corea del Sur.

«Quiero vivir una vida normal, tomando café en una cafetería y charlando con amigos», afirma Jiyun. «Una vez alguien me dijo que la lluvia pararía algún día, pero para mí, la temporada de monzones ha durado tanto que había olvidado que el sol existía».

Fuente: https://www.bbc.com/mundo/noticias-internacional-46938658

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