Efecto Cocuyo
Para la escuela de Educación de la Universidad Católica Andrés Bello(UCAB), el estancamiento de Venezuela es consecuencia de la ausencia depolíticas educativas «coherentes con nuestra realidad», según afirmó en un comunicado difundido este sábado, 15 de enero.
El estancamiento de Venezuela como nación es consecuencia de la ausencia de políticas educativas coherentes con nuestra realidad, es consecuencia de la desprofesionalización a propósito de la carrera profesional del educador venezolano, es consecuencia de la ausencia de participación activa de la familia como actor educativo de primer orden.
El estancamiento de la educación venezolana es responsabilidad de todo un país», señaló la institución a propósito de la conmemoración del Día del Maestro.
El inicio de la crisis de la democracia de partidos implicó, continuó el comunicado, también la crisis del sistema educativo, situación que se convirtió en «bandera de la demagogia» de actores que asumieron la educación como prioridad pero que no hicieron nada.
Condiciones precarias
La Escuela de Educación de la UCAB consideró que esta profesión es la «viga sostén en la recuperación y restablecimiento de la democracia venezolana». Por esta razón, la institución felicitó a los casi 500 mil docentes que cumplen con su labor en «las peores condiciones materiales, laborales y emocionales en las que se puede ejercer».
Las escuelas venezolanas han trabajado como han podido en los últimos años. Según datos del Diagnóstico Educativo de Venezuela (DEV 2021), 25% de los maestros y 15% de los estudiantes de nivel básico y medio abandonaron las aulas en los últimos tres años. Además, los planteles sufren carencias importantes en el suministro de servicios públicos.
El pasado viernes, 14 de enero, la Formación de Dirigentes Sindicales (Fordisi) y un grupo de docentes venezolanos se presentaron frente a la sede del Ministerio de Educación en Caracas para exigir un bono de 600 dólares por el incumplimiento del contrato colectivo y mejoras en las condiciones de trabajodentro de las escuelas.
«El año pasado decíamos que estábamos en pobreza crítica y hoy ya no encontramos qué otro calificativo utilizar», dijo el presidente del Sindicato Venezolano de Maestros, Edgar Machado, en rueda de prensa.