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Ética, Enseñanza

Por: Margaret Andrews

¿Por qué la gente mentir, engañar y robar? ¿Por qué las «buenas» personas hacen cosas malas acciones – que saben que no deben tomar y hacer de todos modos? ¿Qué parte de la conducta antisocial de una persona es el resultado del carácter individual frente a la presión social? ¿Hay una manera de evitar que más personas hagan daño?

En la última década hemos sido testigos de los resultados de los hombres de negocios que hacen cosas malas y la desgracia que ha infligido a los individuos y la sociedad – «¿Qué podemos hacer para evitar que algo malo ocurra de nuevo» y cada vez que nos preguntamos, ¿hay una manera de evitar otro Bernie Madoff, Bernie Ebbers, o Jeff Skillings? O para prevenir desastres grandes y pequeños, tales como los creados por préstamos de alto riesgo, los reguladores no hacen su trabajo, uso de información privilegiada, o directores generales que ganan millones de dólares, mientras que el despido de decenas de empleados y / o manipular los estados financieros? Se espera así, y mientras el jurado está fuera de lo efectivo que es enseñar la ética, nadie está sugiriendo que dejemos de tratar.

? Pero, ¿qué es la ética, de todos modos Dictionary.com enumera su principal definición de la ética como:. «Un sistema de principios morales» BusinessDictionary.com tiene otra definición: «Los conceptos básicos y principios fundamentales de la conducta humana decente. Incluye estudio de los valores universales como la igualdad esencial de todos los hombres y mujeres, los derechos humanos o naturales, la obediencia a la ley de [la] tierra, la preocupación por la salud y seguridad y, cada vez más, también para el medio ambiente natural. Ver también la moralidad. «No estoy seguro de que algunos de estos son valores universales, pero sin embargo, ambas fuentes puntuales a la ambigüedad ya que la ética no siempre está tratando con» derecho «y» mal «, pero a veces puede ser una opción de un menor de males, una decisión matizado hacer frente a las compensaciones, o se perciba como situacional. De ahí que algunos de los problemas que tenemos en la enseñanza de la ética – y hacer que la gente, incluidos nosotros mismos, actuando de una manera ética.

AACSB recogió sobre este tema en un informe titulado enseñanza de la ética en las escuelas de negocios : «De la familia a la sociedad en general, desde el gobierno hasta el lugar de trabajo privada, violaciónes éticos – abusos de confianza pública y privada – se han convertido en una característica notable de la contemporánea paisaje. . . escuelas de negocios deben animar a los estudiantes a desarrollar una comprensión profunda de los innumerables retos en torno a la responsabilidad corporativa y gobierno corporativo; proporcionarles herramientas para reconocer y responder a las cuestiones éticas, tanto a nivel personal como organizacional; y hacerlos participar a nivel individual a través de análisis de ambos ejemplos positivos y negativos de la conducta diaria en los negocios. «Estas palabras fueron escritas en 2004 y desde entonces hemos tenido un montón de faltas éticas.

Después de la caída del mercado y 2.008 recesión global resultante, los medios de comunicación y las escuelas de negocios mismos empezaron a preguntarse en voz alta cómo algunos de los mejores y más brillantes del mundo habían wreacked tales estragos en la economía y en la vida de tantas personas.

A Wall Street Journal artículo de 2010, titulado » Las promesas no son suficientes: Escuelas de Negocios tiene que hacer un mejor trabajo Valores enseñar a los estudiantes ,» señaló: «la educación de negocios es mucho más científica de lo que era en sus primeros años. Se ha hecho más riguroso por la creciente influencia de estadística y economía. Creemos en la analítica. La mayoría de las organizaciones necesitan más análisis. Pero la analítica no son un sustituto de los valores. De hecho, una dependencia excesiva de análisis de las hojas de los gestores mal preparados para dirigir en momentos en que las estadísticas ocultan las dimensiones humanas de pleno derecho de una elección «.

Un artículo del New York Times titulado, » ¿Es hora de reciclar B-Escuelas ?» Apilados en: «Algunos dicen que las escuelas se han convertido en demasiado científico, también separado de los problemas del mundo real. Otros dicen que los estudiantes se les enseña a llegar a soluciones apresuradas a problemas complicados. Otro grupo sostiene que las escuelas dan a los estudiantes una visión limitada y distorsionada de su papel – que se gradúan con un enfoque en la maximización de valor para los accionistas y sólo una comprensión limitada de las consideraciones éticas y sociales esenciales para el liderazgo empresarial. . . En lugar de ser vistos como administradores económicas a largo plazo. . . gerentes llegaron a ser vistos como principalmente como agentes de los propietarios – los accionistas – y responsable de maximizar la riqueza de los accionistas «.

Las escuelas de negocios respondieron al escrutinio de creciente interés en la ética, todo, desde el juramento MBA proyecto se inició en HBS, a Dar voz de Babson to Value plan de estudios , a un aumento del 38% en los cursos de ética ofrecidos por las escuelas acreditadas por la AACSB entre 2009-2013.

Pero, ¿estos programas y / o clases funcionan? Un artículo de 2013 WSJ titulado » ¿Un ‘A’ de la Ética tiene ningún valor? «, Se señaló que «las escuelas no pueden calcular el bienestar moral de sus graduados de la misma forma que puedan cuantificar el éxito financiero o perspicacia técnica. Una de las pocas clasificaciones disponibles del Instituto Aspen de «Beyond Grey Pinstripes» informe-se suspendió el año pasado, en parte porque los investigadores no pudieron determinar el beneficio neto de los cursos de ética. Sin resultados demostrables, hay poco incentivo para que los decanos para agregar clases e instructores «.

Entonces, ¿cómo preparar mejor a los estudiantes para comprender mejor los dilemas éticos y cómo acercarse a ellos? Una forma puede ser la de entender las causas de las deficiencias éticas en el primer lugar. Un artículo de 2014 titulado The Washington Post, » ? ¿Se puede enseñar a los empresarios a ser ético » sugiere que las escuelas de negocios pueden estar acercándose a la ética todo mal: «Tenemos que entender por qué las personas se comportan de forma poco ética, incluso cuando piensan en sí mismos como virtuoso. Como una metáfora que he desarrollado para este propósito es que la mente se divide en dos partes que a veces conflictos, como un pequeño ciclista está sentado en la parte trasera de un elefante muy grande. El piloto es nuestro razonamiento consciente. Es la parte de nosotros que se entera de hechos y formula argumentos. El elefante en contraste, es el otro 99 por ciento de lo que sucede en nuestra mente. Es los procesos automáticos e inconscientes como la intuición, la emoción y el hábito. En una persona madura, el jinete y el trabajo de elefantes juntos en armonía, pero a veces – como en el caso de muchas transgresiones éticas – nuestro sentido racional del bien y el mal no es suficiente para dirigir la bestia inconsciente. A medida que pasa el lamento de Medea, a partir de las Metamorfosis de Ovidio poema: veo la manera correcta y lo apruebo, pero por desgracia! Sigo el mal. «Cuando el piloto y el elefante no están de acuerdo, el elefante es mucho más fuerte. Clases de ética tienen como objetivo el piloto «.

Dan Ariely ha hecho un gran engaño en la investigación cotidiana y cómo racionalizamos el comportamiento que sabemos que no es aceptable. Por ejemplo, lo que hace una investigación sobre las trampas y «los resultados mostraron que cuando las personas podrían engañar, por lo general lo hicieron .» En un artículo del WSJ , Ariely señala: «Durante la última década más o menos, mis colegas y yo hemos dado un vistazo de cerca por qué la gente hace trampa. . . Lo que hemos encontrado, en pocas palabras: Todo el mundo tiene la capacidad de ser deshonesto, y casi todo el mundo hace trampas – con sólo un poco. A excepción de algunos valores extremos en la parte superior e inferior, el comportamiento de casi todo el mundo está impulsado por dos motivaciones opuestas. Por un lado, queremos que se beneficien de las trampas y obtener la mayor cantidad de dinero y la gloria de lo posible; por el contrario, queremos vernos como honestos, gente honorable. Por desgracia, es este tipo de engaño de masas pequeña escala, no los casos de alto perfil, que es lo más corrosivo para la sociedad. «Hay varios mensajes en su blog de hacer trampa, también. Vale la pena leer – y una discusión más amplia a través de las escuelas de negocios.

Entonces, ¿cómo podemos mejorar la toma de decisiones éticas de nuestros estudiantes? Buena pregunta. EthicalSystems.org , una organización sin fines de lucro ubicada en la Universidad de Nueva York, recopila y comparte investigación sobre ética que se espera demostrar «, en el largo plazo, una buena ética es un buen negocio.» La investigación es muy interesante y abarca una amplia variedad de temas, incluyendo la contabilidad , el engaño y la honestidad , las influencias del contexto , la cultura corporativa , gobierno corporativo , la corrupción , la toma de decisiones , el liderazgo , y la enseñanza de la ética , entre otros. El sitio también ofrece actividades y casos sobre cómo enseñar la ética, así como una gran cantidad de recursos en esta área.

¿Cómo enseñar a su escuela de ética? Lo que funciona y lo que es sólo una ilusión? ¿Cómo abordar el problema de manera diferente? ¿Cómo podemos mejor inculcar la ética en los estudiantes – y la comunidad empresarial en general?
fuente: https://www.insidehighered.com/blogs/stratedgy/teaching-ethics

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Proyecto Institucional Comunitario (P.I.C.) y La Escuela con Padres Una alternativa en la Formación de Valores.

Autor: José Eduardo Hermoso

Para el año 2007, la educación pública en la República Bolivariana de Venezuela se encontraba en pleno auge, muchos estudiantes de todas las clases sociales se inscribían en las escuelas y liceos públicos del Estado, que además eran gratuitos, estas instituciones brindaban una calidad educativa por excelencia a través de las escuelas y liceos que se denominaban Bolivarianos, estos centros educativos se caracterizaban por jornadas escolares desde las 7:00 am hasta las 4:00 pm, donde predominaban la enseñanza de la música, teatro, canto, poesía, deportes,…, en estos centros educativos se implementaron los comedores escolares que distribuían el desayuno, el almuerzo y una merienda a todo los estudiantes y el personal que laboraba en la institución. En este año se había iniciado la reubicación de los damnificados que vivían en zonas de riego, este programa era parte de la gran la misión vivienda Venezuela. En la parte posterior a la institución en la cual yo laboraba se creó la zona residencial de “Arsenal” y se les otorgó privilegio de adjudicación de viviendas a las clases más desposeídas, esto dio como resultado, que un gran grupo significativo de estudiantes de muy bajos recursos se inscribiera y estudiaran en liceo donde yo daba clases.
El liceo tenía muchos actos culturales, al menos 3 por mes, estos actos eran de diversas índoles, pero se caracterizaban por la participación de casi todos los estudiantes, por lo general se hacían en la parte interna de la institución, la cual contaba con un patio central, en este año la matrícula de alumnos había aumentado de 700 a más de 1.000 en toda la institución, teníamos alrededor de más de 40 estudiantes por aula y 5 secciones por cada año escolar, es decir la institución era desde 1er año de bachillerato hasta 5to año, por supuesto el control de la disciplina de esta cantidad de estudiantes se hacía permanentemente por los docentes, el personal administrativo y obrero, y se reforzaba en los actos culturales.
En la celebración del epónimo del liceo Santos Michelena, que se realizaban en la primera semana de noviembre, se planificaban un sinfín de actividades, que en su mayoría se hacían en el patio central. El día de la presentación de las danzas del liceo, la directora de la institución visualiza que, en el 2do piso del edificio, se encontraba un grupo de estudiantes con actitud sospechosa, es decir, estaban cantando, en tono alto, al compás de la música de las danzas, pero sin embargo, misteriosamente estaban ocultos en una esquina. La directora me encomendó subir y ver que estaba pasando, al hacerlo me fui oculto para que no vieran, de tal modo de, llegar sin ser detectado. Mi sorpresa fue que al llegar a una esquina vi a una estudiante de 4to año bailando muy sensualmente, en una de las columnas de forma circular, tipo pole dance, mientras el resto de los estudiantes cantaban y aupaban a la bailarina, ella, llego a tal punto que, se desabotono los primeros botones de la camisa y mostró una especie de franelita, fue en ese instante donde interviene y por supuesto, al estar todos concentrados en una esquina no les dio chance de escapar, y como era de esperarse, la gran mayoría de los estudiantes fueron llevados a dirección para que la directora aclarara el asunto, y así, comenzamos a conversar con más de 15 estudiantes que estaban involucrados en el hecho, la idea era simplemente, hacerles un llamado de atención porque pensamos que era solo una simple tremendura, mas sin embargo, descubrimos que la estudiante cobraba a sus compañeros para hacer los bailes y de paso no era la primera vez, de igual forma la estudiante bailarina tenía una actitud rebelde y no aceptaba la responsabilidad de lo ocurrido, alegando que ella no veía nada de malo en eso, esto nos obligó a llamar a la madre de la estudiante, la cual se presentó en pocos minutos en el Liceo.
Al llegar la madre de la estudiante Bailarina al liceo, nos quedamos atónitos, pues, estaba vestida con ropa ceñida y de una manera muy sensual, tenía un cuerpo muy esbelto y de figura atlética, de cabello negro largo, ella, la madre, al ver a su hija en la dirección, se acercó de forma muy violenta y halándola por el brazo le dijo: “Cuantas veces tengo que decirte que te portes bien”, “cuantas veces tengo que decirte que no estés por allí haciendo eso”, “que no está bien”, “que eres una menor de edad y te vas a meter en problemas”, “que debes cumplir la mayoría de edad para hacerlo de forma profesional”, “que no puede ser en cualquier lado”, entonces se voltea hacia los profesores que estábamos en la dirección, y dice: “profesores por favor discúlpenla pero ella me ve a mi haciendo eso y cree que ella puede hacer”, ella no ve que yo lo hago de forma profesional”, “cree que es un juego y por eso cobra barato”, “pero yo le he dicho que no, que espera a la mayoría de edad y que cobre lo justo”, todos los profesores que nos encontrábamos en la dirección, no salíamos del asombro de ver tal situación y al escuchar a la madre todo lo que decía. Esto prendió las alarmas e inmediatamente y pensamos ¿qué estaba pasando con los valores de nuestros nuevos estudiantes y representantes?, ¿que podíamos hacer referente a esta situación?.
Al día siguiente, se convocó a una reunión extraordinaria de profesores, allí se plateó como objetivo del proyecto institucional Comunitario (P.I.C.) el rescate de los valores y las buenas costumbres, entre estudiantes, representantes y todo el personal, entre las estrategias a implementar en el Proyecto de Aprendizaje (P.A.), se encontraban el involucrar a todos los docentes y todas las materias a fin de que, como eje transversal, se tomara lo valores y las buenas costumbres en todos los contenidos a dictar, de igual forma se implementó la Escuela con y para padres: esta escuela tendría la labor de ir incorporando a las madre, a los padres y representantes en las actividades del liceo y al mismo tiempo entender y comprender la situación en que se encuentran, para poder luego, diagnosticar los valores presentes en el hogar y trabajar así, el rescate de los valores y las buenas costumbres, se impartieron talleres con la defensoría del Pueblo, la casa de la mujer, defensoría del menor, el consejo comunal, entre otros.
La labor aquí fue titánica pero enriquecedora, Los docentes de la institución, a partir de estas experiencias, nos permitió entender el mundo de vida de nuestros nuevos representantes y verlos como sujetos de cultura y contexto diferente, que se integraban a una sociedad distinta de la que venían, producto esto, de más de 40 años de decidía por parte de los gobiernos anteriores y de exclusión social.

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Colombia: Escuela del sitio eso es un modelo para el mundo.

América del Sur/Colombia/09.06.2016/Autor:Anya Kamenetz,Steve Drummond,Sami Yenigun Fuente:http://www.npr.org/

Nueve mil pies de altura en los Andes colombianos, en la provincia de Boyacá, una pequeña escuela de naranja se sienta en una ladera salpicada de flores.

Treinta y tres estudiantes, de entre 4 a 11, a pie tanto como una hora para llegar desde las granjas de sus familias. Los estudiantes dan la bienvenida a la prensa en Inglés – «Bienvenido Bienvenido!» – Y en español, con una canción y una serie de actuaciones.

En uno, un niño de 8 años de edad en un uniforme escolar verde y una máscara de plumas de colores recita un cuento popular sobre un terrible monstruo, el tabaquismo y una llamada Mohan.

Es una presentación encantadora, pero también es mucho más que eso. Como se pone de pie allí hablando con voz clara, segura de sí misma, esta chica también está construyendo la confianza, la práctica de habilidades de desempeño y el aprendizaje de cómo compartir un escenario con otros.

De alguna manera se siente como que hemos viajado atrás en el tiempo. Pero estamos aquí, porque esta escuela, y el movimiento internacional que es parte de, llamada Escuela Nueva, sólo podría ser un modelo global para el futuro.

Clara Victoria Colbert, conocido por todos como Vicky, fundó la Escuela Nueva a mediados de la década de 1970.

Se dispuso entonces a tomar, teorías progresistas democráticas de educación – la cooperación, el aprendizaje a su propio ritmo, la educación artística centrada – y aplicarlos a algunos de los más pobres, escuelas menos dotados de recursos en el mundo.

Maestra María Isabel Camargo Guio pinta maquillaje mímica en uno de sus alumnos para una actuación.

Maestra María Isabel Camargo Guio pinta maquillaje mímica en uno de sus alumnos para una actuación.

Steve Drummond / NPR

Hoy en día, el método se practica en cierta medida en decenas de miles de escuelas en casi 20 países. Desde principios de la década de 1980, Colbert dice que ha llegado a unos 5 millones de niños. Sin embargo, esta «innovación de abajo hacia arriba», como ella lo llama, sigue siendo relativamente desconocido en los EE.UU.

La columna vertebral de la Escuela Nueva se llama la Guía de Aprendizaje – Colbert lo que llama «una combinación de un libro de texto, un libro y una guía para el maestro».

Como vimos arriba en las montañas en la escuela de una sola habitación llamada Escuela Rosal, una guía de aprendizaje se ve algo como un libro de historietas. Hay una diferente para cada grado. conceptos de lectura, escritura, matemáticas, ciencias y estudios sociales se combinan en cada lección.

Es una versión simplificada de aprendizaje basado en proyectos. Cada página de la lección tiene una historia ilustrada, preguntas abiertas, problemas de práctica y tanto una clase y una actividad para llevar a casa.

Esto permite a los estudiantes a ir más o menos a su propio ritmo – una baja tecnología, la versión de papel y lápiz de esa corriente días palabra de moda, «personalización».

Un estudiante recorta palabras de vocabulario e imágenes para un proyecto.

Un estudiante recorta palabras de vocabulario e imágenes para un proyecto.

Steve Drummond / NPR

En la Escuela Rosal, los niños se sientan alrededor de mesas: una diminuta uno de los 4 años de edad, hasta el más alto de los 10 años de edad.

Cada uno tiene un cuaderno abierto al lado de la guía de aprendizaje. En un momento dado, los niños más pequeños estaban cortando las fotografías desde una hoja de cálculo – una gallina, un zapato – y emparejarlos junto con las palabras adecuadas.

Mientras tanto, los estudiantes de tercer grado estaban usando cintas de medición para medir y hojas sueltas de papel de periódico con un área dada, y los niños grandes coloreaban en fracciones de cuadrados de papel cuadriculado. Cuando terminan sus propias lecciones, el entendimiento es que van a ayudar a los demás, y los niños más pequeños, antes de seguir adelante.

Las guías de aprendizaje cumplir un plan de estudios altamente estandarizado. Por otro lado, un beneficio de ese formato altamente estructurado es que se puede poner en práctica de forma rápida, con maestros que han tienen una formación menos formal.

Es tan flexible, de hecho, que entre los primeros aliados de Colbert en la aplicación de este modelo eran los productores de café del país: sus hijos podrían salir de la escuela para la temporada de cosecha, volver, y recoger justo donde lo dejaron.

Pero eso no es la única característica especial de las guías de aprendizaje. En la Escuela Nueva, la tarea está diseñado para promover otros objetivos sociales.

Puede incluso salvar vidas.

Muchas de las actividades para llevar a casa reforzar lo Colbert llama «comportamientos de supervivencia infantil.» Estos incluyen la vacunación, la nutrición, la inocuidad de los alimentos y cómo distinguir entre los resfriados y una infección respiratoria grave.

Por ejemplo, las guías podrían instruir a un niño a ir a casa y comprobar que su hermana pequeña ha tenido todas sus vacunas, o ir con su padre para inspeccionar la cisterna de ver que está cubierto para mantener alejados a los insectos.

Colbert dice lecciones como éstas se combinan el aprendizaje escolar con el sentido común, la aplicación en el mundo real. «En lugar de lectura,» ¿Cuál es el río más largo de Egipto? ‘ «, Explica,» Es, «¿Cómo puedo ayudar a mis hermanos no mueren de diarrea? ‘ «

‘ Revolución silenciosa’

Colbert acredita este instinto para el sentido práctico de su formación. Ella es la hija de un profesor colombiano que dirigió las escuelas normales, y un oficial de la marina de guerra de Estados Unidos. Estudió sociología en Stanford antes de regresar a su país de origen.

«Los sociólogos siempre quieren introducir cambios sociales, y batir el sistema de alguna manera,» dice ella. «Me di cuenta de que sólo había dos maneras de mejorar realmente las cosas de manera significativa. Usted hace una revolución social o haces una revolución silenciosa, que es la educación.»

En 1970 Colombia, la revolución estaba lejos de ser una abstracción. M-19, el movimiento guerrillero rebelde, formada en el año 1974; el famoso cartel de Medellín en 1976. La violencia se prolongó durante décadas.

Escuela Rosal encuentra en una colina 9.000 pies de altura en las montañas. Cuenta con 33 estudiantes, de entre 4 a 11, muchos de los cuales caminan hasta una hora para llegar hasta aquí desde las granjas de sus familias.

Escuela Rosal encuentra en una colina 9.000 pies de altura en las montañas. Cuenta con 33 estudiantes, de entre 4 a 11, muchos de los cuales caminan hasta una hora para llegar hasta aquí desde las granjas de sus familias.

Steve Drummond / NPR

Colbert no se desanimó. Ella tomó un trabajo en el Ministerio de Educación, al ver las escuelas como una palanca para transformar el país.

«Yo estaba totalmente consciente de que si no tenemos la educación básica de calidad, nada va a ser alcanzado en cualquier país del mundo», recuerda. «Usted no va a tener un desarrollo social, el desarrollo económico, la paz, la democracia. Es la única manera.»

En ese momento, los niños en el campo colombiano normalmente asistieron a escuelas de una sola habitación, con la educación obligatoria sólo hasta el tercer grado. Hubo una grave escasez de maestros, la mayoría de los cuales enseña de memoria y se basó en el castigo corporal. Freddy Tipazoca, un padre que nos encontramos en la Escuela Rosal, nos dijo que sus maestros «nos educados con los rosales.»

Poco después de volver a casa, Colbert conoció a un profesor llamado Oscar Mogollón, el director de una escuela manifestación en la ciudad de Pamplona.

Él estaba trabajando con asesores internacionales para hacer lo que parecía casi imposible: permitir que todos los estudiantes en un aula multigrado para trabajar a su propio ritmo. Y al mismo tiempo, incorporar actividades prácticas y aplicaciones prácticas de conceptos abstractos. Al mismo tiempo, la construcción de la ciudadanía, los ideales democráticos, y la cooperación.

Las ideas se inspiraron en las teorías del desarrollo de Jean Piaget y los métodos educativos progresistas de María Montessori, Reggio Emilia y John Dewey.

En 1976, Mogollón y Colbert se unieron para escalar el sistema. Ellos tenían que enseñar a los maestros que les quedaba muy poca educación formal. Y tenía que ser asequible: En la actualidad, la Escuela Nueva cuesta alrededor de $ 30 por estudiante por año por encima del gasto medio anual de Colombia de aproximadamente $ 2,000 por estudiante de escuela primaria por año.

El bajo costo, las innovaciones de instrucción prácticas son una parte clave del modelo de Escuela Nueva. Pero en nuestra visita a la Escuela Rosal y una segunda escuela, Colegio Gimnasio Santander, nos dimos cuenta de algo igualmente importante: la alegría, el compromiso y calidez.

La escuela de montaña está repleto de las artes, Reggio Emilia al estilo. Además de la recitación cuento popular, se nos trata de una actuación mímica, un espectáculo de marionetas y varias canciones.

Una niña recita un cuento popular local como parte del plan de estudios de estilo Montessori de la Escuela Nueva.

Una niña recita un cuento popular local como parte del plan de estudios de estilo Montessori de la Escuela Nueva.

Steve Drummond / NPR

Justo al lado de la clase principal, hay una sala de almacenamiento repleta de artículos de arte y proyectos de los niños han hecho. Una estantería tiene una hilera de pequeñas esculturas de arcilla basada en el juego Angry Birds.

Las paredes del aula están cubiertas con carteles de los estudiantes, y los móviles de colgar el sistema solar desde el techo. Colbert estaba convencido de la importancia de esto desde el principio: «Los niños necesitan bloques, colores de aprendizaje activo.»

El aprendizaje social y emocional, otra palabra de moda hoy en día , es muy evidente aquí. Modelo cooperativo de la escuela pone un gran énfasis en los valores democráticos: Casi todos los niños ha sido elegido para algún cargo o comisión, con responsabilidades como limpiar y recoger el deporte en el recreo.

Los primeros estudiantes que nos recibió, moviendo las manos formalmente, eran el presidente de quinto grado y secretario.

Hay un PTA activo también. Los padres se turnan para la limpieza y el mantenimiento de los jardines, incluso cocinar el almuerzo.

‘Convivencia’

María Isabel Camargo Guio ha sido el maestro en la Escuela Rosal durante 10 años.»Me encanta todo acerca de este método,» ella nos dice en español. «No es como si les puedo enseñar el concepto de bondad; lo estamos viviendo.»

Una palabra que usan mucho en la Escuela Nueva es la «convivencia» – que significa, más o menos, el arte de vivir juntos.

En la pared del aula, hay un tablero en el que los estudiantes dejan notas de amistad y aliento suave uno para el otro.

Maestra María Isabel Camargo Guio da instrucciones a un grupo de estudiantes. Conceptos de diferentes temas se combinan en cada lección, en una versión simplificada de aprendizaje basado en proyectos.

Maestra María Isabel Camargo Guio da instrucciones a un grupo de estudiantes. Conceptos de diferentes temas se combinan en cada lección, en una versión simplificada de aprendizaje basado en proyectos.

Steve Drummond / NPR

Una chica llamada Laura escribe, en español: Estimado Natalie, te amo porque eres mi mejor amigo y juegas conmigo. Espero que tomar una buena ducha … y es de esperar que pueda tener una mejor escritura a mano. Gracias por todo.

El énfasis en la bondad se extiende a los extraños. Cuando llega la hora de que nos vayamos, cada estudiante abraza a cada uno de los visitantes.

Algunos expertos creen que esta escuela, diseñado para los estudiantes pobres, rurales, podría convertirse en un modelo para el futuro, incluso en los Estados Unidos.

Uno de esos expertos es Rebecca Winthrop. Dirige el Centro de Educación universal de la Brookings Institution . Ella llama a la Escuela Nueva «un muy buen modelo para la nueva forma de la escolarización,» debido al énfasis en la comunidad, el trabajo en equipo y el liderazgo de los estudiantes.

Cuando Winthrop habla de la nueva forma de la escolarización, que significa algo específico.

Su equipo ha estado comprometido con todos los países del mundo en la creación de un nuevo programa mundial para la educación, a través de la ONU Objetivos de Desarrollo Sostenible proyecto. Es como una gran lista de tareas pendientes para el planeta.

Los Objetivos de Desarrollo del Milenio, de 2000 a 2015, incluyen la educación primaria universal. La matrícula creció en 7 puntos porcentuales – Decenas de millones de niños en todo el mundo. Los Objetivos de Desarrollo Sostenible, aprobada el pasado otoño, ampliar la agenda para centrarse en una «amplitud de las oportunidades de aprendizaje», o lo que a veces se denomina habilidades del siglo 21.

«En la vida, la gente tiene muchos caminos,» dice Winthrop. «Pero queremos que tengan agencia para poder actuar y desarrollarse plenamente lo que quieren hacer al máximo. Necesitan confianza en sí mismo, ser capaz de negociar, formar buenas relaciones, ser un miembro constructivo de la comunidad.»

En otras palabras, convivencia.

cepillos de dientes y tazas de los estudiantes se sientan en un alféizar de la ventana.

cepillos de dientes y tazas de los estudiantes se sientan en un alféizar de la ventana.

Steve Drummond / NPR

Nuevas fronteras

Con el tiempo, Vicky Colbert ha tenido que usar muchos sombreros diferentes, mientras que la búsqueda de su visión. Hasta finales de la década de 1980, trabajó en el Ministerio de Educación de Colombia. Entonces, todo el gobierno se reorganizó. Las escuelas fueron a control local, y muchos cayeron el modelo.

Así que se fue a trabajar para las Naciones Unidas, teniendo Escuela Nueva internacional. Con el tiempo, se extendió a 17 países de América Latina.

La variación en la forma en que el modelo ha sido puesto en práctica hace que sea difícil realizar un seguimiento de los resultados. Pero, en general, la Escuela Nueva tienen mejor asistencia a las escuelas rurales convencionales tienen, y hay menos de repetición de grados, un mejor comportamiento y las puntuaciones de rendimiento más altas.

Un informe de la UNESCO desde la década de 1990 se veía en las escuelas de toda América Latina y se encontró Colombia fue el único país, aparte de Cuba, donde las escuelas rurales pobres estaban haciendo un mejor trabajo que las escuelas de la ciudad con mejores recursos. Se acreditan esto a la ventaja de la Escuela Nueva.

Más recientemente, Colbert ha iniciado una sin fines de lucro independiente, la Fundación Escuela Nueva – Volvamos a la Gente (Volviendo a las personas). Están trabajando en el seguimiento de los aumentos en los comportamientos como la cooperación entre los estudiantes de la Escuela Nueva.

juegos de receso se juegan a menudo como un grupo y se centran en la bondad y la cooperación. "No es como yo les puedo enseñar el concepto de bondad", dice Guio. "Lo estamos viviendo."

juegos de receso se juegan a menudo como un grupo y se centran en la bondad y la cooperación. «No es como yo les puedo enseñar el concepto de bondad», dice Guio. «Lo estamos viviendo.»

Steve Drummond / NPR

También están la actualización del modelo para trabajar en las ciudades, donde la población mundial está cada vez más cambiantes. Visitamos uno en la capital de Boyacá, Tunja. La escuela no era en realidad una escuela privada bajo costo en lugar de una escuela pública. Se cobra matrícula, tuvo hijos separados por nivel de grado, y se fue todo el camino hasta la secundaria. Muchos estudiantes estaban usando equipos de tableta de mano.

Colbert quiere asociarse con otras organizaciones no lucrativas e incluso empresas privadas. Han abierto en lugares como Zambia y Vietnam, y están mirando el Reino Unido y los EE.UU.

«Es como la historia de Cenicienta», dice ella. «Se empieza con los más pobres entre los pobres, y luego, al final usted dice, ‘Oh, Dios mío, esto es de vanguardia pedagogía!’Todo el mundo está hablando de ello! «

Fuente: http://www.npr.org/sections/ed/2016/06/09/474976731/the-one-room-schoolhouse-thats-a-model-for-the-world

Imagen: 

http://media.npr.org/assets/img/2016/04/20/cd7a9856-toned_slide-3e9bd93b2d0ce0fdc0eab612beff114f6456b483-s1300-c85.jpg

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Entrevista a Sami Nair: La alfabetización de las familias, sobre todo de las madres, es esencial

Francia/01 junio 2016/Autor:Pau Rodríguez /Fuente: El Diario

¿Cuál es el impacto de la globalización en el sistema educativo?.Esta es la pregunta que debía responder Sami Naïr en una charla en la Universidad de Girona la semana pasada. Lo mismo estaba previsto para esta entrevista. Pero los recientes atentados de París lo han sacudido todo: también, como no podía ser de otra manera, las preguntas a este catedrático de ciencia política, filósofo, sociólogo y experto en movimientos migratorios. Sin buscar las causas concretas que han empujado a algunos jóvenes a cometer estas atrocidades, con Naïr intentamos averiguar el por qué de la exclusión social profunda que sufren las periferias francesas, el papel que juega el laicismo en las escuelas de un país que se cuestiona continuamente su identidad –»el Dios de la escuela es la razón», proclama Naïr– o como la globalización está minando lo común –donde se encuentra el sistema escolar– en beneficio del interés privado.

Se cumplen 10 años del estallido de violencia en las banlieues de París. Pero el problema viene de lejos. La haine, rodada en 1995, ya dejaba constancia de la exclusión profunda en la que viven miles de jóvenes. ¿Qué ha pasado durante tanto tiempo en las periferias francesas?

 Ante todo, hay que dejar claro que los atentados no tienen nada que ver con las banlieues. En Francia hay muchas  banlieues, sobre todo en ciudades industriales . Son barrios de exclusión y marginación, donde viven cinco o seis millones de personas. Es una catástrofe a nivel de vivienda, sanidad e integración laboral. Y es una situación económica y social que depende del fracaso de las políticas económicas del Estado. Además, en las banlieues  hay poblaciones determinadas, sobre todo provenientes de países excolonizados, como Argelia, Marruecos, Túnez u otros subsaharianos.

¿Qué entiende por exclusión?

Además de lo que le decía, las familias ya no juegan el papel tradicional de vector de la transmisión de valores. Se encuentran en situación de estallido. Son problemáticas, los vínculos están desapareciendo… Esto es lo que hace que una parte muy pequeña de los jóvenes, viéndose sin futuro, se conviertan en presas de la estrategia de movimientos integristas a escala regional, sobre todo de Oriente Medio. Se trata de un problema social global.

¿Por qué se ha llegado a este extremo de marginación en Francia?

Al igual que en España, Italia, Grecia: 25 años de políticas económicas dictadas por la comisión de Bruselas han reducido drásticamente los gastos de los estados, porque lo que interesa es el Pacto de Estabilidad. Han tansformado la función de los estados de creación de equilibrio social con políticas públicas.

Ante una problemática tan global, con unas familias descapacitades por su función, ¿qué papel juega el sistema educativo?

Depende de las políticas del Estado. Un sistema educativo sin recursos está condenado al fracaso.  Es así de sencillo. Basta sacar recursos a escuelas y universidades para que todo vaya mal. La respuesta de los que quieren recortar es: ‘Lo hacemos porque la gente no trabaja y hay privatizar’. Un sistema educativo privado significa que los que tienen dinero pueden acceder a la educación y los que no, son carne de banlieu. El sistema francés, sin embargo, sigue siendo muy competitivo en general, para la vieja tradición republicana y por el esfuerzo de los maestros. Pero cuando se ahoga el sistema no se le puede pedir tener éxito.

De hecho, le pedimos mucho al sistema educativo como compensador de unas desigualdades que provienen de la pobreza de las familias y de un urbanismo que las arrincona.

Todo junto. Las familias no transmiten la cultura como antes. Por razones sociológicas, son círculos familiares de sectores muy poco cultos. La televisión, las redes sociales… todo ello hace que la capacidad de transmitir unilineal de las familias haya estallado.

En esta Europa mestiza sobre la que usted escribe, y que ya es una realidad, ¿qué valores de convivencia puede transmitir una maestra que tiene un 90% de alumnos de orígenes en una docena de países diferentes? ¿Cuál es la identidad común que hay que reforzar?

Primero: no se debe hacer hincapié en las diferencias. En la escuela no hay diferencias de origen, se quedan en la puerta. El color de piel, la religión… No existen. En la escuela lo importante es el saber: los alumnos pasarán, pero el saber se queda. La ideología de la diferencia no debe entrar en la escuela, que es territorio de lo común. El bien común. Segundo: se ha de transmitir la cultura del país de acogida, en su caso la catalana. Conocer la historia, transmitir el pasado… Yo en Francia me identifiqué con los filósofos del siglo XVIII. Y tercero: hemos de inculcar los valores que nos permiten vivir conjuntamente. El valor de la razón, el de la crítica, el de la igualdad, la libertad y la solidaridad. Este es un núcleo de valores comunes, que integran en su interior todos lo demás, y los tenemos que transmitir de manera sistemática. Y en la escuela, con el valor de la razón por encima de todos.  El Dios de la escuela es la razón.

¿Qué papel juega en todo esto, precisamente en Francia, el laicismo? Una parte de la derecha ha hecho campaña por la retirada de los menús ‘halal’ en los centros amparándose en el laicismo . ¿ Le parece correcto?

El problema es de fondo. Los musulmanes y los judíos dicen que comen ‘halal’ y ‘kosher’, respectivamente. Pero es que en algunas cantinas el viernes no se come carne, sino pescado. ¿Por qué unos sí y otros no? Detrás de esto está el debate sobre el laicismo. Los franceses hicieron una guerra social para conseguirlo. La religión es un asunto privado, no público. Pero en ningún caso se trata de una guerra contra las religiones: la laicidad es una ideología de la emancipación, no de la dominación. Es la Ilustración. Pero las iglesias, mezquitas y sinagogas nunca han renunciado a ganar espacio público. Su sueño es volver a ser el centro de la educación.

Habrá quien le dirá que, si hacemos del sistema educativo un espacio únicamente de lo común, estamos negando las diferencias. ¿ La escuela no debería poder celebrar también la diversidad?

Las diferencias no se deben negar, pero son un asunto privado. Poner énfasis en la diferencia desemboca en la petición de diferencias de derechos. Y si tienes derechos diferentes, me puedes pedir no venir a clase el sábado, por ejemplo. No. En Canadá llegaron a aceptar que musulmanes tuvieran dos o tres mujeres en nombre del derecho a la diferencia. Podemos discutir filosóficamente al respecto, pero los cinco valores de los que hablábamos antes deben ser el núcleo duro de la educación, porque representan lo mejor de la civilización hoy.

¿Qué más puede hacer la escuela para revertir las bolsas de exclusión?

Muchísimo. Puede poner en marcha una política de recuperación escolar. La gente excluida del sistema debe ser recuperada. Es absolutamente necesario. Se debe abrir la escuela a los que la han dejado. Y la escuela –sé que es difícil, pero hay buenas experiencias– tiene que hacer un trabajo hacia las familias. Sensibilizar a los padres y las madres. La alfabetización de familias, sobre todo de las madres, es esencial.

Aquí hay escuelas que hacen venir las familias a hacer los deberes con sus  hijos Son experiencias cruciales. Y la mayoría de quienes participan son mujeres.

Las mujeres son el vector más importante de la modernización cultural. Se debe hacer un trabajo de recuperación y de ayuda a las madres en los espacios en los que viven los inmigrantes. Que los maestros tengan un espacio horario consagrado a los espacios de vida de la gente, en las casas de cultura. Es la reconstrucción del tejido social. Pero para ello se necesitan dos cosas: recursos y confianza en los maestros.

¿Cómo afecta a todo esto la globalización? Estos espacios que comenta, el tiempo para el debate, para el intercambio, para hablar de valores, quedan relegados ante un sistema que se rige cada vez más por los resultados.

Es curioso que lo que se globaliza es la competencia mercantil y no el saber.

¿Por qué?

Porque se privatiza el vínculo social, todos los espacios de la vida común. E sta es la lógica de la globalización: destrozar el bien común por el interés privado. Ante esto debemos defender los espacios de producción de los bienes comunes, como el saber. En la transmisión del saber no tiene que entrar la competencia. La UE introduce competencia en nombre de la construcción del gran mercado. Miremos el Plan Bononya: ¡ha sido un fracaso! Ha destrozado la capacidad de creación cultural de casi todos los países que tenían un buen sistema. Si no separamos la educación del mercado, esta desaparecerá y tendremos un sistema como el de EEUU. Anti bien común. No lo podemos aceptar. Se están creando desigualdades como nunca habían existido aquí en Europa.  Tenemos que luchar contra ello.

Usted dirá cómo.

De entrada, no podemos decir que no a Europa. Es un proceso histórico. Pero se necesitan reglas.  En primer lugar, hay que arreglar la situación del sistema monetario internacional, que es causa de competencia desleal a escala planetaria. Y en segundo lugar, hay que estabilizar la situación geopolítica mundial, y el gran foco a escala planetaria es ahora mismo el Mediterráneo. Allí están todas las contradicciones: identitarias, migratorias, ecológicas, económicas, militares. La comunidad internacional debe proponer a esta región un Plan Marshall para que se pueda desarrollar económicamente.

Fuente:

http://www.eldiario.es/catalunya/alfabetizacion-familias-madres-esencial_0_456705307.html

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Película : El estudiante.

“El Estudiante”, una película que nos recuerda que somos siempre alumnos en la vida.

¿Y qué lecciones de la vida podría aprender y enseñar un alumno universitario de 70 años?

A sus 70 años y ya retirado, Don Chano —Chano, a secas, para los amigos— decide seguir sus sueños y regresar a la universidad. Así empieza El Estudiante, una hermosa película mexicana que combina ternura, humor, profundidad y drama para ofrecer una mirada a los valores perennes de la vida, en especial a lo que significa el amor auténtico.

Las diferencias entre las generaciones a veces parecen insalvables y hoy, particularmente, se teme y se olvida a los de edad más avanzada.

Para adentrarnos en el hilo conductor de la película quizás tengamos que recordar la figura de El Quijote, a quien en esta historia se hace constante referencia. Chano aparece como un moderno “caballero de la triste figura”, un personaje que ante sus compañeros de estudios —con cincuenta años menos— aparece como fuera de lugar, con valores de una época ya pasada.El recorrido de un casi anciano Chano por la universidad significará, tanto para él como para sus jóvenes amigos, descubrir aquello esencial que une generaciones y, al mismo tiempo, nos recordará que todos somos estudiantes en esta vida.

“Pensamos que amar nos legitima a tener, y nos olvidamos que el amor es ceder. Darse”. Don Chano.

Lo miran con compasión ante la locura de regresar, a su edad, a la universidad, así como por su supuesta incapacidad para “entender” a los jóvenes de hoy. Chano, sin embargo, les enseñará que lo que vale la pena entender puede ser comprendido a cualquier edad, por un corazón que va a lo esencial.

Les enseñará también que a veces la más sana cordura tiene la apariencia de locura, sobre todo en un mundo anestesiado y absorto, por la búsqueda de placeres que nunca son capaces de darle savia a la vida. Con sus palabras, pero más aún con su ejemplo, transmitirá los valores con los que ha regido su vida, que permanecen siempre actuales, precisamente porque brotan de lo más auténtico de la existencia.

El Quijote es un clásico de la literatura mundial, y la palabra “clásico” viene a la mente joven quizás con el matiz de anticuado o desfasado. Lo clásico, como muestra la película, nada tiene que ver sin embargo con una mirada arcaica y ruinosa, sino más bien con lo permanente, con lo más profundo, con las experiencias más auténticas de nuestra humanidad.

“El pudor —nos dice el protagonista— es la elegancia de la belleza”. El auténtico amor sabe respetar y esperar, y sabe trascender las apariencias e inmediateces precisamente porque apunta a lo más valioso. “Somos centinelas de su belleza y no explotadores de sus placeres —les explicará a sus jóvenes compañeros hablándoles de las mujeres—. Hay que cuidarlas, quererlas, respetarlas, y créanme, salimos ganando. Y créanme, por favor recuerden al Quijote, el amor antojadizo solo busca placeres no busca cualidades. Las cualidades permanecen, mientras que las hermosuras perecen”.Entre ellas, El Estudiante destaca la experiencia del amor. Encontramos acá una de las grandes lecciones que nos da la película, y quizás una de las más contraculturales para nuestro tiempo. El amor entre un hombre y una mujer se nos muestra como lleno de respeto, pureza y nobleza.

Esa mirada del amor no se busca en primer lugar a sí mismo, ni está llena de afanes egoístas. Es, como dirá Chano, “hacer lo que tengamos que hacer para ser dignos del ser amado”. La mirada se alza hacia el otro, muy lejos de cualquier egocentrismo.

Las grandes obras, como El Quijote, “están llenas de sabiduría de vida, pero para encontrarla hay que hacerla nuestra y para entenderla, hay que compartirla. Decirla, no solo leerla; explicarla, no solo escribirla”, dirá el protagonista, invitando a sus jóvenes amigos a vivir con autenticidad, a ser libres, a gozar de verdad la vida, no como lo hace el mundo, sino con nobleza, con fidelidad, lealtad y, sobre todo, con amor. Las palabras de Chano irán calando hondo en sus compañeros, que van descubriendo que la madurez en la vida exige una mirada más amplia y, sobre todo, entrega.

“Pensamos —nos dice el sabio estudiante— que amar es tener derechos, pero la ironía del amor es que se funda en renuncias. Pensamos que amar nos legitima a tener, y nos olvidamos que el amor es ceder. Darse”.

Chano lo expresará de varias maneras en la hermosa relación con su esposa, donde la fidelidad madurada a lo largo de los años manifiesta un amor siempre joven y cada vez más bello y atractivo. El testimonio de su matrimonio será también aliciente para que quienes los rodean vayan aprendiendo a exprimirle lo más auténtico a la existencia, lo queno se aprende en ningún libro ni enseña ninguna universidad.

“Dar vida es la entrega que más vale la pena vivir, y sufrir”, nos dirá Chano, que también es frágil y debe aprender una última lección, que no es otra que experimentar la profunda relación entre el amor y el sufrimiento. Serán entonces sus jóvenes amigos quienes salgan a su encuentro para sostenerlo y ayudarlo en uno de los momentos más difíciles de su vida. Un momento que, como reconoce en profunda oración ante el Señor, “no estaba en el libreto”.

Hay gran elocuencia en El Estudiante, cuando nos recuerda que somos eternos alumnos, y cuando nos señala que más aprendemos cuando más damos. No hay mejor maestro que el estudiante —más aún del que sabe que hay aspectos de la vida que nunca seremos capaces de dominar— ni mejor estudiante que quien da testimonio con su vida de lo aprendido.

En los momentos finales de la película, al recibir en medio del dolor el apoyo de sus jóvenes compañeros, así como el esperanzador signo de su aprecio y cariño, percibimos en Don Chano —Chano para los amigos— el ciclo completo de la vida.

No solo porque él parece haber recorrido todas las etapas —faltando solo la última y definitiva que no será sino prolongación de lo que ha sembrado— sino también porque en esa profunda unidad que vemos entre los niños, jóvenes, adultos y ancianos de esta película, vislumbramos que las personas no somos individuos aislados, sino llamados a darnos unos a otros con infinito respeto y amor, viviendo así una comunión con nuestros semejantes y, finalmente, con el Señor de la Vida.

https://youtu.be/W2BITU9BTFg

Fuente:

http://catholic-link.com/2014/09/24/el-estudiante-una-pelicula-que-nos-recuerda-que-somos-siempre-alumnos-en-la-vida/

Imagen: 

https://encrypted-tbn0.gstatic.com/images?q=tbn:ANd9GcS6mQMvtA-sZ69O3w6Rbf7Y338Vqcul9pGZP7wn3NqUB27Sywh-YQ

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Ciudadanía, formación en valores y educación

Omar Hurtado Rayugsen

Instituto Pedagógico de Caracas / UPEL

Centro Internacional Miranda / MPPEUCT

A manera de introito:

Permítannos iniciar nuestra comparecencia ante tan augusto auditorio, agradeciéndoles a los organizadores por el honor, que creemos inmerecido, de invitarnos para que leamos la conferencia inaugural de estos III Congreso Regional de Investigación, (UPEL – Región Capital), y III Congreso Anual de Investigación, (UPEL – IPC). Queremos expresar, públicamente, un agradecimiento muy especial a la doctora Miren de Tejada Lagonell, y al equipo que brillantemente la ha acompañado en esta ardua tarea; quienes con un sostenido esfuerzo, digno de mejor causa, no han cejado hasta vernos instalados frente al podio en esta mañana. A ustedes que, se han resignado a escucharnos, muchas gracias por su paciencia. Esperamos que nuestras sencillas ideas sirvan de justificación al esfuerzo que todos han realizado.

Con vuestra anuencia transcribiremos un mensaje que colocamos en las redes el pasado 26 de febrero: “[ayer], como a las 20 horas, nos dejó el Maestro Luis Antonio Bigott, (Delta Amacuro, 1935). Insigne educador, autor de obras imprescindibles para comprender la evolución del pensamiento nuestro americano, como: El educador neocolonizado, (1978); Nicaragua: proyecto de educación popular,(1986); Educación para transformar, (1991); Investigación alternativa y Educación Popular en América Latina, (1992); Historia del bolero cubano, (1993); Una política nacional universitaria, (1993); Ciencia, Educación y Positivismo en el siglo XIX, (1995); y, Redes Socio culturales, Investigación y Participación Comunitaria, (2013); entre otras. Con el doctor Bigott nos unió, como a muchos comunes relacionados, una amistad entrañable y hacia él guardamos, como sus innumerables alumnos, una admiración sin límites. Hombre de origen humilde, como la inmensa mayoría de los venezolanos; indoblegable luchador a  favor de las mayorías excluidas, igual que sus compañeros de ideales; individuo de irrenunciables principios, como sus coetáneos soñadores; maestro de centenares de alumnos, en las aulas abiertas de la vida; y ser comprometido, de raigal manera, con el proceso de cambios que se ha echado a andar en el continente de la esperanza y que ninguna añagaza detendrá”.

Confiando en vuestra comprensión, queremos dedicar esta oración a la Memoria de tan insigne educador, quien –en sus años mozos- también fue estudiante del Instituto Pedagógico Nacional.

Para la ocasión que nos reúne hilvanamos unas palabras que, variando las orientaciones de quienes nos incluyeron en la programación, hemos intitulado:

CIUDADANÍA Y FORMACIÓN CON VALORES:

¿QUÉ NOS ESTÁ PASANDO?

“El futuro nos pide decisiones críticas y globales

 de cara a los conflictos mundiales

que aumentan el número

 de excluidos y necesitados”

Francisco, ONU (25 / 09 / 2015) [1]

Hemos querido utilizar esta afirmación de su Santidad, extraída del discurso que pronunció ante la Septuagésima Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas; y que fue celebradopor todo el mundo, aunque no nos atrevemos a decir, a unos doscientos días de su lectura, que esté siendo aplicado en la misma proporcionalidad; para ilustrar la complejidad de la solicitud que, agradeciéndola porque noshonra, nos han hecho.

Comenzaremos por decir, guardando el mayor respeto por quienes piensen lo contrario, que nos parece poco conveniente hablar de “educación en valores” y nos inclinamos por referirnos a la “educación con valores”. La primera fórmula la vemos como si estuviésemos señalando una especie de elementos que fuesen extraños a nuestro comportamiento. La segunda la entendemos como algo que asumimos de una forma mucho más cercana a nuestro quehacer. La graficamos con el aserto de quienes nos precedieron en el tránsito vital y nos educaron con “la pedagogía del ejemplo”. Concretemos, los valores, más que transmitirlos, debemos vivirlos; y preguntémonos, por ejemplo: ¿Existirá alguna manera más eficiente de formar en el amor a la naturaleza que compartiendo con nuestros estudiantes desde el respeto a las formas animadas, sean estas vegetales o animales?

El segundo alinderamiento que expresaremos, en el campo de las definiciones clave, es que entendemos al ejercicio docente como una actividad plena de optimismo. No nos alineamos con quienes, llamándola crítica social y exagerando nuestra inclinación a hablar más de lo que fue, que del porvenir, dedican la mayor parte de su quehacer pedagógico  a exaltar el tiempo pasado con  figuras como: “nunca se había visto”, “pedagógico el del tiempo ido, aquél en el yo estudié” y/o “estamos en la época de lo último”. Un conocido opositor de esta teoría los identifica como: “los quelloran más que camión de cochinos en curva”.

Por el contrario, para nosotros, la posibilidad de ser educadores nos ubica frente al material más retador con el que profesional alguno puede trabajar: los jóvenes de cualquier edad. Maruja Taborda, nuestra Maestra, nos enseña que: “alumno es alumno, así tenga ochenta años”, de lo que colegimos que siempre tenemos algo que enseñar y mucho más que aprender. Fijemos un ejemplo. ¿Cuántos de nosotros, al llegar a un ambiente, que –a cualquier escala- siempre será educativo, no nos encontramos con alguien que –independientemente de las décadas transcurridas desde el último contacto sostenido con él o ella- nos dice: “¿Qué toma?, ¿Qué está comiendo?, ¿Qué hace?, ¿Cómo se conserva?, porque, usted está igualito”, y nosotros le creemos. ¿Cuántos otros profesionales pueden presumir de tanta nobleza en el trato? Ese, o esa,joven, más allá del formol vital en que nos hayamos conservado, lo que nos está diciendo es: “Maestro, lo recuerdo”, “lo admiro” y, ¿por qué no?, “lo quiero y me gustaría ser como usted”. ¿Cuántos profesionales, repetimos, están en capacidad de vanagloriarse de tanto optimismo existencial?

La tercera definición la relacionaremos con:¿dónde?, ¿cómo?, ¿por qué?, ¿para qué?, y ¿cuándo?, vamos a hablar de valores. Aunque parezca una situación baladí, consideramos que saber dónde estamos  estableciendo nuestra definición, no es poca cosa.  En efecto, no tenemos ninguna duda en cuanto a que los valores que se mueven en una sociedad de las calificadas como avanzadas, digamos: Estados Unidos de América, Gran Bretaña o Francia; no tienen el mismo cariz que los que utilizamos en las llamadas naciones emergentes; por ejemplo India, China o Suráfrica; ni se valoran igualmente en la menos favorecidas; verbigracia Nigeria, Nepal o Haití.

La espacialidad propuesta nos lleva, ineludiblemente, a rememorar a Luis Britto García, cuando nos indica que las palabras no son neutras y que la objetividad, desde los años iniciáticos de Albert Einstein, es más ubicable en el campo de la ciencia ficción. Si admitimos lo anterior, será menos difícil que aceptemos que ello es mucho más obligante para las ciencias sociales, y que adquiere una condición “sine que non”, si aspiramos hablar de valores. Lo anterior es conocido por todos nosotros, quien les habla, entre tantas definiciones, ha sumido  la educación como: “la iniciativa más hermosa que puedan emprender los grupos humanos, la que tiene las más profundas raíces históricas y la que proyecta los más sólidos vínculos económico –sociales”.

La clasificación silueteada incide en los modos que les asignemos al sistema de valores. No es igual hacerlo en una nación donde la mayor preocupación sea la de cómo sobrevivir, a una en la que las que las angustias se orienten hacia como ascender socialmente, y menos aúna otra en la que los esfuerzos se orienten en función del qué hacer para mantener el estatus. Evidentemente, la clasificación de los valores, no será –nunca- igual a las razones que mueven a los ciudadanos de un país en el queestén garantizados los niveles de vida de calidad, que en otro en el que se carezca de lo más elemental para subsistir.

No añadiremos nada nuevo si le pedimos pensar en la enorme diferencia cualitativa que guardan los sistemas de valores defendidos por el gran capital y sus asociados, con los de aquellos seres cuyos territorios han sido expoliados por siglos, mientras ellos han sido condenados, por obra y gracia de la civilización, al papel de esclavizados y explotados. Como no nos gustaría que alguien pensara que nos estamos desviando del tema asignado; citaremos a la Organización de las Naciones Unidas que, en su último informe anual, señala que en el mundo persisten 168 millones de niños en condición deesclavos, de los cuales 13 millones están ubicados en América Latina y el Caribe. ¿Alguien podrá hablarles a estos infantes de bondad, compasión y caridad? [2]

Han pasado casi 17 décadas desde el momento en que un Manifiesto, [3]; muy manoseado, pero no sabemos si igualmente leído; nos alertaba acerca de la pérdida de vigencia de las fronteras políticas, por obsoletas, y su sustitución por las económicas, porque éstas son mucho más dinámicas. A nuestra manera de ver, eso es lo que está pasando con la construcción de los sistemas de valores. Observamos como la vieja manera de estructurarlos, consolidarlos, difundirlos, reelaborarlos y defenderlos está perdiendo terreno frente a los nuevos estilos; a todas luces, más atractivos y –evidentemente- mucho más lucrativos.

Hemos de tener muy presente la ubicación en el presente histórico que nos corresponde; es decir saber que lo estamos haciendo en el siglo XXI, es clave para entendernos. La irrupción en el tercer milenio ha traído una serie de paradojas superiores para la humanidad. Verbigracia; por un lado nos estamos adentrando en la era en la que los límites, bien sea entre los países o entre las dimensionalidades del conocimiento, se desdibujan progresivamente en mayor medida, al tiempo que tomamos conciencia de nuestra mayor indefensión frente a las imponderables; en otro frente, avanzamos hacia la era de la mayor producción de conocimiento, mientras grandes masas yacen en la más absoluta agrafía; asimismo, también nos adentramos en la era de la creciente velocidad de las comunicaciones, mientras ignoramos al vecino más cercano. ¿Será así como queremos conversar de la necesidad de compartir y de la solidaridad?

Pese a todo ello, para nosotros, lo más importante  de esta caracterización es que,  en esta centuria, que ya se está haciendo vieja, lo que más nos preocupa –como educadores- es la hiperconcentración de los mecanismos de poder económico y político. La revista Forbes, que anualmente publica su ranking de las mayores fortunas, tituló una de sus más recientes portadas pregonando: “El 1 % aparece aquí, el resto nos lee”, [4]. Se estima que el mayor reto a resolver, en el mileno que nos arropa,es el drama de ¿cómo harán los que más tienen, que cada día son menos, para solucionar las acuciantes carencias de quienes menos tienen, que cada día son más?, [5]. De forma que aquellos a quienes algunos llaman los hombres más ricos del mundo; y que nosotros, mucho más prudentes, identificamos como los que tienen más dinero, están enfrentados a un crucial disyuntiva: o atienden a los reclamos de las mayorías desasistidas o se atienen a una posible implosión social; cuyas consecuencias –por los momentos- parecen incalculables. Aquellos que lo duden solo tienen que detenerse a observar el terrible drama vivido por los que apenas ayer, (en la  post-  guerra), llamábamos inmigrantes, y hoy –entre bombas lacrimógenas, balas y perros amaestrados- calificamos  de refugiados, [6].  ¿A estos millares de excluidos podremos hablarles de tolerancia, piedad, comprensión, respeto a la diversidad y gratitud?

Ello encierra un enorme reto para los pedagogos, que trataremos de ilustrar con un conocido chiste. En una escuela multi étnica el Maestro propone un tema: ¿Cuál es su opinión sobre los derechos del resto del mundo a superar la escasez de alimentos? Tal problema hizo que los estudiantes reaccionaran de manera diversa. El nativo del país teocrático preguntó: ¿Qué es opinión?, el proveniente de una nación regida por una dictadura,  exclamó: ¿Qué es derecho?, el estadounidense, se interrogó: ¿Qué es el resto de mundo?, el alemán inquirió: ¿Qué es escasez? ,y el africano, a su vez, cuestionó: ¿Qué es alimento? La respuesta ante esta tremenda responsabilidad nos la enseña a despejar Luis Antonio Bigott, al decirnos: “un buen educador[debe] serauténtico,… humilde con los humildes y soberbio con los poderosos… [y soñar] con que algún día podamos construir una nación donde por fin… cada niño, cada niña, hombre o mujer tengan un pan del tamaño de su hambre, [7].

Como lectores de la realidad circundante coincidimos con quienes caracterizan los tiempos que corren como los de la mayor incertidumbre que la humanidad haya conocido. Ciertamente, si revisamos la sucesión de presentes que ha signado la evolución cubierta por la especie humana; encontraremos que, ante cada problema mayúsculo que hayamos enfrentado, siempre supimos encontrarla solución. De manera que, aunque a estas alturas nos parezcan insuficientes, hemos visto desfilar al Sentido Mágico – misterioso, la Fe, la Razón, el Ilustracionismo, la Libertad, y la Cuestión social; términos que Hernández Sánchez Barba llama las palabras clave de cada era, [8]. Nuestro tiempo como que no ha encontrado la que le corresponde; a pesar que buena parte de las gestiones que nos ocupan aparecen dominadas por el replanteamiento de la dicotomía exclusión –inclusión. Que, ciertamente, no es la manera más expedita para que nos explanemos sobre la amistad, la generosidad y la corresponsabilidad.

Un ligero paneo a través de los movimientos más representativos puede ilustrarnos al respecto.  La última década del pasado siglo y las que van del presente han visto surgir significativas iniciativas en, prácticamente, todos los países del orbe. La vieja Europa vio como algo natural la aparición del terremoto que, iniciándose con el Mani pulite,(manos limpias), italiano, desembocó en el Indignaosespañol; que antes, voceando “Comprometeos”,  había arrasado con la sede de los Tory en la bucólica Londres, y hasta la tierra de los zares se encontró con el “Rusia unida”, que arrastró con los restos del socialismo real.En momentos más cercanos nos encontramos con la “Primavera árabe” que sacudió los cimientos del hasta entonces imperturbable mundo del espacio político nor africano; y con “Ocupa Wall Street”, que llegó a actuar en más de 2.600 centros urbanos y significó una crisis de proporciones inauditas en el mayor polo económico, por lo menos deoccidente. En espacios más inmediatos hemos presenciado “la Salida”, y, en el gigante del sur, la “Operación Lava Jato”, (Auto lavado), cuyos definitivos desenlaces aún desconocemos, [9].

No nos costará mucho, con solo seguirlos por los medios de comunicación, constatar que los vocablos más usados en todos estos movimientos son: democracia, libertad, igualdad, honestidad, ética, probidad, credibilidad, responsabilidad y verticalidad; entre tantos otros. Aquí es donde, creemos encontrar una veta inacabable para lo que hemos denominado educar con valores. Sin que ello signifique que nos erigiremos en jueces de ninguna de las posiciones enunciadas. No pretendemos hacerlo, ni siquiera con aquellas siempre hemos adversado.

A propósito; circunscribiéndonos a la nociónde que el tiempo no se comporta como una línea abstracta continua, sino que funciona como una espiral compleja, en la que cada hito expresa –sintetizándolos- los relictus que los antecedieron y sugiere los enclaves que vendrán, como Hegel, [10], nos lo está enseñando desde el siglo XVIII, y nuestro Maestro Ramón Tovar, [11], desde los años sesenta de la centuria pasada, ha propalado en los ambientes de este cuasi octogenario centro de formación docente; mencionaremos que, mientras nos encontramos reunidos aquí, en la Plaza de la República, en la Ciudad Luz, nuevamente están chocando las fuerzas del orden con las masas identificadas con el movimiento “Nuit Debout”, (Noche en pie), quienes constituyen la representación actual de los indignados, y que;  apoyándose en el coraje, que representa un valor;  están protestando, contra el desconocimiento que, el gobierno socialista, pretende hacer del valor del Respeto al bien común, a través de la nueva reforma laboral, [12].

Para nosotros, docentes de aula en Geohistoria, lo que le confiere validez a cualquier posición es su coherencia en el espacio y en el tiempo. Permanentemente estamos reivindicando el aserto con el que León Davídovich Bronstein, (Trotsky), [13], define al revolucionario, cuando nos dice: “El revolucionario se distingue por la plena coherencia que guarda, siempre, entre lo que piensa, lo que dice y lo que hace; sobre la base de un sólido compromisos social”. Nosotros extrapolamos esa definición para el educador; quien está obligado a ser coherente y guardar fidelidad a su compromiso de transformación social. No dudamos en reafirmar que la educación guarda en si los más preocupantes gérmenes del conservatismo, pero que -al mismo tiempo- incuba los más esperanzadores signos de cambio; y que, en esta contrastación, el obrero más efectivo es el Maestro.

En función de lo anterior, pensamos que no basta con que escuchemos enunciar los postulados que consideramos básicos; además de la pronunciación tenemos derecho a analizar el comportamiento de los actores, frente a esos mismos postulados en el tiempo histórico. Isaac Rosa, el año 2005, nos dice: “…la retórica ha convertido en lugar común, descargándolas  de su real significado] a palabras como: represión, clandestinidad,régimen, comunista, célula, camarada [así como] las situaciones [que las generan”, [14]]. Años antes, en la década de los sesenta y desde las aulas provisionales del Pueblo, J, R. Guillent Pérez nos instruía: “Para hablar sobre el ser, es necesario que el que habla esté totalmente comprometido con aquello de lo que habla”, [15]. Más recientemente, en su poema “Las palabras”,el bardo que Paso de los Toros, Uruguay, regaló al mundo, nos advierte: “No me gaste las palabras / no cambie el significado / mire que lo que yo quiero / lo tengo bien claro. / No me ensucie las palabras / no les quite su sabor / y límpiese bien la boca / si dice revolución”, [16].

De los asertos anteriores podemos inferir que una de las condicionantes esenciales para educar con valores reside en la perseverancia, la paciencia y la fidelidad con los principios que pregonamos. Estamos conscientes en cuanto a que, en nuestra contemporaneidad, no resulta fácil tal conducta. Recordemos que comenzando la cuarta década del siglo pasado Marshall Mc Luhan nos alertó acerca de la globalización de la aldea que nos aloja, esta caracterización es hoy mucho más avasallante.Hemos de reconocer que la lentitud de respuesta en  las estructuras inherentes al proceso educativo nos hace mucho más vulnerables, frente a lo que los comunicadores denominan inmediatez. De esta colisión deducimos que nuestro sentido de responsabilidad resulta seriamente abollado. Pero el educador, estamos convencidos, tiene la capacidad para, apoyándose en las nuevas tecnologías, avanzar en el camino de la formación cierta.

La escuela, como un todo, tiene bastante tiempo que dejó de ser un entelequia abstrusa y poco convencional. Simón Rodríguez, en 1794, se quejaba de que –en las colonias- “pocos conocían de su utilidad”, [17],pero indudablemente en su época esta percepción ya había variado, y desde entonces empezamos a observar como los grandes emporios comenzaron a valorizarla como el instrumento ad hoc para el logro de sus fines. Prieto Figueroa, en 1943, nos dice que, frente a las iniciativas privadas, “El Estado interviene, por derecho propio, en [su] organización y [la] orienta, según su doctrina política”, [18]. En nuestro medio, desde avanzada la sexta década del veinte, los organismos multilaterales han avanzado las tesis intervencionistas en educación, como el medio de asegurarse sus propósitos. Los especialistas en el tema han demostrado que, cada vez que se anuncia una conflictividad social de ciertas proporciones en la región, aquellos entes adelantan una reforma curricular, [19]. Así hemos pasado por la taxonomía de los objetivos, la instauración de la educación básica y los ciclos diversificados, la enseñanza moderna, la transversalidad y la educación por competencias; entre otras.

No queremos que se entienda como descalificador nuestro lenguaje. Solo estamos llamando la atención acerca de algunos elementos que nos podrían explicar los obstáculos que, los docentes de aula e investigadores, encontramos para el pleno ejercicio de la docencia con valores. Detengámonos , como muestra, en el tan citado trabajo de Jacques Delors, La educación encierra un tesoro, [20]; que –dicho sea, de paso- es un excelente libro, en el mismo encontramos que, al hablarnos de la formación dual en Alemania, nos dice: “…con el inicio de la integración europea y la globalización las empresas requirieron nuevos profesionales y exigieron cambios radicales en la formación superior no universitaria en aspectos como: mayor integración entre la teoría y la práctica, participación de las empresas en [el diseño de] los currículos, menor tiempo de estudio y formación profesional para la demanda real”.

Casi un cuarto de siglo antes, Edgard Faure coordinó otro equipo multi nacional e inter disciplinario que nos entregó: Aprender a ser, en el que se nos informabaque: “… si [bien] la educación a menudo enseña virtudes como la solidaridad y la cooperación, también puede, con sus procedimientos, alimentar de forma bastante malsana el espíritu de la competición”, [21]. La revisión de los mencionados informes, hace que nos preguntemos, ¿será de esta manera como vamos a desarrollar la educación con sentido de pertenencia en confianza, humanismo y paz?

En oposición a esta prédica, en la que se contraponen los objetivos educativos con las prácticas propugnadas; recordaremos que en estos vetustos terrenos, tuvimos profesores, de diferente filiación política, quienes, pese a su diversa militancia, eran Maestros en todo el sentido de la acepción: puntuales, estudiosos, responsables, organizados, exigentes con ellos mismos, respetuosos y virtuosos. Lo que nos permite confirmar queestos educadores, aunque separados por sus respectivas ubicaciones partidistas, estaban unidos por el ejercicio ético de la docencia.

Ampliaremos algo que no cuesta entender. La UNESCO, siglas que quieren significar la Organización de las Naciones Unidas para la Ciencia, la Educación y la Cultura, desde sus más calificadas instancias, ha invertido más de los dos tercios de existencia en insistir en la urgencia de revisitar la categorización de la educación. Mencionaremos que el “Congreso Mundial de Educación”, que se desarrolló en Incheón, Corea del Sur, el 27 de junio del pasado año,ha sido uno de los más recientes desencuentros de este combate. Para nuestra prez, nos encontramos entre los más de doscientos académicos de todo el mundo que, concluidas las referidas deliberaciones, dirigimos una Carta a la Doctora Irina Bokova, Directora General del organismo, para denunciar la avasallante presencia de los representantes del Fondo Monetario Internacional, del Banco Mundial, del Banco Central Europeo y otros entes afines, quienes coparon las conferencias centrales y las mesas de trabajo, mientras, contrastantemente, era notoria la ausencia de delegados de los organismos educativos,[22].

Sea propicio el momento para informarles que también hemos dirigido sendas comunicaciones al Consejo Mundial de Educación Comparada y al IESALC, reclamando el uso del español como idioma universalmente aceptado para el funcionamiento de los citados organismos, que debe usarse igual que los que la visión eurocéntrica  tiene siglos imponiéndonos.  Igualmente hemos denunciado la manipulación en la definición de categorías fundamentales para la elaboración del Mapa de la Educación Superior para América Latina y el Caribe, (MESALC).

Este aspecto, no por citarlo casi al final es de menor importancia.Es bien sabido que tenemos décadas sufriendo el desvirtuamiento de los fines supremos de la educación. Para ubicarnos en lo que aspiramos decir, formularemos una interrogante: ¿Quées realmente lo que ha sucedido en esta parte del orbe?, ¿no hemos tenido proyecto de países por carecer de proyectos educativos, o ¿carecemos de proyectos educativos porque no tenemos proyectos de países? Para buscar las respuestas a estas interrogantes, tal vez hará falta que nos preparemos para los IV Congresos de Investigación; oportunidad en la –lógicamente- otros estudiosos avanzarán sus propuestas al respecto. Intentaremos sugerir algunos de los tópicos que debemos abordar, en la búsqueda de soluciones al enigma: ¿funcionan –realmente- las definiciones trasladadas automáticamente a la educación desde otras áreas?, ¿es válido hablar de calidad en educación?, ¿tiene pertinencia insistir en la calidad educativa total?, ¿es la educación un proceso gerencial?, ¿debe el educador ponderar –fundamentalmente- la vertientes alóctonas?, ¿qué hacer con las intervinientes locales?; y no sabemos cuántas más.

Con la intención de sugerir una hoja de ruta para las futuras deliberaciones de cónclaves como este,  en los que deben estar muy presentes las diferentes motivaciones que definen las múltiples finalidades que se le asignan a lo que se asume como el sistema deseable de Educaciónen Valores; visión frente a la marcamos terreno; los invitamos a que sigan –con toda la atención posible- el curso de las deliberaciones y  lean –detenidamente- los documentos emanados de los organismos multinacionales que fungen como ductores del proceso que nos ocupa, a escala global. El más reciente de estos es: Replantear la Educación. ¿Hacia un bien común mundial?, [23], entregado por la UNESCO a finales del 2015; en el que la propia Directora General, luego de ofrecerlo como la continuación de los trabajos de Delors y de Faure, sostiene que: “Los autores proponen que sean considerados bienes comunes tanto el conocimiento como la educación. Ello supone que la creación de conocimiento, así como su adquisición, validación y utilización sean comunes a todas las personas como parte de una empresa social colectiva”, (las cursivas aparecen en el texto original). Dejamos a vuestro albedrío las interpretaciones.

Como si fuera una conclusión:

Lejos de nosotros el haber querido formular un memorial de agravios contra la educación con valores. Por el contrario, estamos absolutamente convencidos del enorme potencial que este proceso contiene para arbitrar las respuestas a los mayores enigmas que enfrenta la especie. Lo que si nos ha consumido la exposición es el interés en delinear las grandes trabas que encontramos para su más consciente ejercicio.

De manera general nos hemos referido a los encontrados intereses que surgen de la estructuración política de los diferentes regímenes y países; a la contrastante priorización de acuerdo a la ubicación económico – social de los individuos; a la no vinculante articulación en función de la espacio – territorialidad con las súper estructuras políticas; y al mutante interés de los organismos –supuestamente- llamados a impulsar la validación de las categorías de análisis que nos permitan hablar; no de una instrucción acerca de nociones que parecieran ir por laacera de enfrente, sino de una  verdadera educación con valores, asumida desde nuestra cotidianidad.

Luego de cartografiar una especie de mapa desolador, queremos expresar, de manera inequívoca, nuestra fe en la Escuela, el Maestro y el joven educando. La Escuela la entendemos como un todo; que incluye el entorno, la comunidad, el ambiente y todos los elementos vinculantes con el proceso educativo. Así lo hemos aprendido de Aníbal Ponce, quien, desde la primera tercera parte de la anterior centuria, nos enseña que: “la educación es para la vida”, [24].

El Maestro, por su parte, es el más eficiente artesano, el que está en capacidad de moldear, apoyado en los mejores ejemplos, la delicada arcilla que la humanidad le confía, para la construcción de la sociedad justa que todos merecemos y necesitamos. Belén Sanjuán nos instruye al respecto, cuando afirma: “El papel del Maestro es formar al ciudadano del futuro, que ya empezó”, [25]. Claro, que ella se pivotea en el Maestro de América, cuando nos dice: ¿Queréis tener república?, ¡formad republicanos!, [26]. El joven, a su vez, está representado por todo aquel que entienda que el aprendizaje – enseñanza no se detiene nunca, sino que está en desarrollo constante, como proceso permanente lo tipifican quienes se identifican con ésta acepción, diferenciándose de los que creen –equivocadamente- que hay una etapa en la que ya todo se sabe.

Los jóvenes tienen, por su naturaleza y por su esencia, que ser inconformes, iconoclastas y contestatarios. ¡Pobre de la sociedad en la que los jóvenes no protesten! José Ingenieros, asevera, en Las Fuerzas Morales, “Joven es todo aquel que, con la conciencia limpia y los bolsillos vacíos, corre raudo hacia la construcción del mejor futuro”, [27]. En esta onda, una de las consignas que más no ha llamado la atención fueesgrimida por los estudiantes chilenos, quienes, reclamando comprensión a la sociedad post dictadura,para su derecho al estudio, voceaban: “Si no nos dejan soñar, no los dejaremos dormir”. Confesaremos que no hemos encontrado una mejor posibilidad de acoplamiento para elaborar la salud social, que es uno de los valores de más difícil consecución: mientras los viejos dormimos, los jóvenes sueñan, con el por…venir.

Aproximándonos a la conclusión de esta disertación, que nos ha resultado más extensa que lo deseable, proclamaremos nuestro optimismo; que entendemos como un valor supremo de la condición humana. Porque los valores, como los principios, que en definitiva son, se asumen críticamente y se defienden combativamente. Creemos en el optimismo vital. Ese que proclamó sir Bertrand Russell, cuando con 90 años, fue a dar con sus nobles huesos de par del reino,  a la cárcel de la culta Gran Bretaña, por haber presidido el Tribunal Internacional contra la Guerra de Vietnam y reafirmado su acendrado pacifismo, [28].

Reivindicamos el optimismo existencial que practicó Luis Beltrán Prieto Figueroa, cuando con 66 años rompió con el movimiento político al que había dedicado su vida y se identificó con las banderas del socialismo; optimismo que refrendó cuando,a los setenta y dos años, se dedicó a escribir poesía, de tan alto vuelo como la que leemos en Isla de Azul y Viento  y que le hiciera ocupar un asiento –como poeta- en la Academia Venezolana de la Lengua, [29]. Nos identificamos con el optimismo vivificante que diferencia a Don Francisco Tamayo; quien, con 62 años, supo dejar a un lado las miserias humanas que, basadas en el egoísmo que se contrapone con los valores de la honestidad y la empatía, lo separaron de la cátedra de Biogeografía que él había  creado en todas las universidades del país, se vino a su querido Pedagógico de Caracas; donde se imbricó, aúnmás, en la elaboración del Mapa Fitogeográfico de Venezuela; que hoy, a más de tres décadas de la partida del Maestro, representa un legado único en su tipo, [30].

Rememoraremos que en esta oportunidad; se está cumpliendo el 481º aniversario de la ocasión en la que Tomás Moro, el autor de Utopía, se negara a aceptar que el todo poderoso rey de Inglaterra fuese el Jefe de la iglesia, sin temerle al presidio, ni a la decapitación que sufriría un años más tarde; queremos ratificar nuestra plena identificación con el más optimista ejercicio de la docencia, porque estamos absolutamente convencidos que en la medida en que logremos ejercer nuestro apostolado,apuntalándonos en las mejores reservas que identifican la condición humana, habremos superado las grandes contradicciones que nos separan de la educación con valores. Y agradeceremos a Laura Guevara, una joven cantautora venezolana a la que nunca hemos visto pero si leído, quien nos dio la clave para concluir estas palabras; cuando nos dice:”… mi preocupación no es únicamente musical, es integral…hablo desde mi verdad, desde lo que conozco……en casa he estado expuesta al arte y a la vida, de ahí viene mi vena…Tengo la bendición de mi amigos… [les recomiendo que] confíen en ustedes mismos, crean en sus intuiciones, en lo que piensan y sueñen…Pero también cuiden… [que] lo que hagan tiene que estar bien hecho”, [31].

Cerrando podemos preguntarnos: ¿Cuántas enseñanzas nos deja la lección de Tomás Moro? Igualmente, interroguémonos, ¿estaremos en capacidad de asumir el reto que, desde sus frescos 28 años, nos lanza Laura? Nuestras respuestas retratarán la disposición que, realmente, tenemos para asumir la Educación con valores. Para concluir, diremos que, si alguien nos llegara a increpar acerca del título de esta intervención, preguntándonos: ¿En definitiva, qué está pasando en la Formación con Valores?; lo único que le responderíamos, apoyándonos en el epígrafe que abre estas líneas, sería: Lo que, en verdad, necesitamos para impulsarla  es  ¡una mejor Escuelay más Maestros que sientan el orgullo de vivir su Magisterio con optimismo!

¡¡¡Muchas gracias por vuestra amabilidad, que también es un valor!!!

Notas:

[1]https://www.youtube.com/wacht?v=MRonfPxF-08

[2]www.unicef.org/spanish/protection/index_childlabour.html

[3] www.bsst.org.ve/documentos/…/manifiesto_del_partido_comunista.pdf

[4] https://www.oxfam.org/…/bp210-economy-one-percent-bax-haven-18011_es_0.pdf.

[5] Lapierre, Dominique (2010]. La ciudad de la Alegría. Barcelona. Editorial Planeta.

[6] www.univision.com/noticias/…/crisis-en-europa-refugiados-o-inmigrantes

[7] Bigott, Luis Antonio, (2011, 16, 11). La formación de los educadores investigadores es un proceso de reflexión. Participación en el Foro: Concepción de la Maestra y el Maestro Investigador. Caracas. Centro Internacional Miranda.

[8] Hernández Sánchez Barba, Mario, (2011). Alianza Atlántica: Crisis de Occidente. (Relaciones Europa –  Estados Unidos). Madrid. Editorial Universidad Francisco de Vitoria.

[9] Naím, Moisés, (2016). Repensando el mundo. 111 sorpresas del siglo XXI. Caracas. La Hoja del Norte.

[10] Hegel, George W. Friedrich, (1989). Lecciones sobre Filosofía de la Historia Universal. Madrid. Alianza Editorial.

[11] Tovar, Ramón, (2015). El Enfoque Geohistórico. Caracas. Reimpresión facsimilar del Ministerio del Poder Popular para la Educación.

[12] www.lemonde.fr/…/ou-va-la-nuit-debout-4902009_…

[13] Bronstein, León Davídovich (Trotsky), (2006). Mi vida. Madrid. Editorial Debate.

[14] Rosa, Isaac, (2005), El vano ayer. Barcelona. Editorial Seix Barral

[15] Guillent Pérez, J. R., (1964). Lecciones de Introducción a la Filosofía. Caracas. Editores Reuniones de Profesores.

[16] Benedetti, Mario, (2002. Antología Poética. Madrid. Editorial Alfaguara.

[17] Rodríguez, Simón, (1794). “Reflexiones sobre los Defectos que vician la Escuela de Primeras Letras de Caracas y medio de lograr su reforma por un nuevo establecimiento”, en Rafael Fernández Heres, (1995), Pensamiento Educativo en Venezuela. Siglos XVI al XX. Ediciones de la Universidad Nacional Abierta.

[18] Prieto Figueroa, Luis Beltrán, (2006). El Estado Docente. Caracas. Fundación Biblioteca Ayacucho.

[19] Bonilla – Molina, Luis y otros, (2014). Informe Mundial de la calidad Educativa.En este debate: ¿de qué se está hablando? Caracas. Red Global / Glocal por la Calidad de la Educación.

[20] Delors, Jacques, (1966). La Educación encierra un Tesoro. Madrid. Editorial Santillana.

[21] Faure, Edgard et al, (1973). Aprender a ser. Madrid. Alianza Universidad.

[22] Torres, Carlos Alberto y otros, (2015, junio), Carta dirigida a la Directora General de la Unesco, Caracas [y veintitrés ciudades más].

[23] unesdoc.unesco.org/images/0023/00236/23697s.pdf

[24] Ponce, Aníbal, (1975). Educación y Lucha de Clases. Buenos Aires. Editorial Claridad.

[25] Bracho Arcila, América, (Compiladora), (2013). Belén Sanjuán: Testimonio de una Maestra. Caracas. Ediciones del Ministerio del Poder Popular para la Educación.

[26] Rodríguez, Simón, (1990).  Sociedades Americanas. Caracas. Monte Ávila Editores.

[27] Ingenieros, José, (1965). Las Fuerzas Morales. Buenos Aires. Editorial Losada.

[28] Russell, Bertrand, (2010). Caminos de Libertad: Socialismo, Anarquismo y Comunismo.Madrid. Editorial Tecnos.

[29]Ledezma, Minelia de, (2012). “Luis Beltrán Prieto: Maestro, Político y Poeta”, en Homenaje a Luis Barrera Linares. Edición del Instituto Venezolano de Investigaciones Lingüística y Literarias Andrés Bello.

[30] Hurtado Rayugsen, Omar, (2005). Francisco Tamayo: Estudio de su vida y aproximación a la vigencia de su obra. Caracas. Ediciones del Rectorado de la Universidad Pedagógica Experimental Libertador.

[31] Díaz, Estefanía, “Laura Guevara: ‘Más que un concierto, será una manifestación onírica’ “[Quinto Día, Caracas, 2016, 8 al 15 de abril].

 

 

 

 

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