Francia vive este martes su segunda huelga nacional contra la reforma de las pensiones del Gobierno de Emmanuel Macron. Los sindicatos esperan una movilización al menos equivalente a la del día 19, a la que acudieron más de dos millones de manifestantes, según sus cálculos, para hacer torcer el brazo al Ejecutivo en su proyecto estrella.
Las autoridades han desplegado hasta 11.000 agentes por todo el país ante el temor de que pequeños grupos de radicales violentos puedan generar disturbios.
Se han convocado unas 250 concentraciones y marchas desde las diez de la mañana, según ha informado el secretario general de la CGT, Philippe Martinez. «Si la Primera Ministra no ha escuchado el mensaje, hoy se lo diremos más alto, más fuerte y más numeroso», ha dicho.
Paros del transporte
La huelga está siendo muy concurrida en el sector de los transportes, con un tráfico en el metro y los trenes de cercanías RER «muy perturbado» en la región parisina. La situación es aún más difícil para los trenes regionales e interurbanos. Y solo circularán, de media, un tercio de los trenes de alta velocidad (TGV).
En las líneas ferroviarias internacionales habrá un tráfico casi normal en los Eurostar a Londres y en los Thalys a Bélgica, Países Bajos y Alemania, pero se han cancelado en cambio los dos trenes por sentido del corredor París-Barcelona.
En cuanto al tráfico aéreo, los aros de controladores aéreos han obligado a cancelar un 20% de los vuelos con salida o destino en el aeropuerto parisino de Orly.
Pero la movilización afecta a diversos sectores profesionales. En Nîmes, se bloquearon las entradas a la prisión y se imposibilitó la extracción de presos, según una fuente sindical.
Los estudiantes también se manifestaron en algunas ciudades, y los sindicatos de profesores han previsto un 50% de huelgas entre los docentes, desde preescolar hasta bachillerato.
La CGT ha anunciado huelgas del 75 al 100% en las refinerías y depósitos de TotalEnergies.
A las seis de la tarde está prevista una reunión de los sindicatos en la sede de Fuerza Obrera (FO) para decidir los próximos pasos del movimiento, y probablemente anunciar al menos una nueva jornada de movilización.
Contra la subida de la edad de jubilación
Los sindicatos pretenden con esta jornada de movilizaciones obligar al Gobierno francés a retirar su reforma, que prevé retrasar la edad mínima de jubilación de 62 a 64 años y adelantar a 2027 el alargamiento a 43 años (42 actualmente) del periodo de cotización necesario para cobrar una pensión completa.
Saben que tienen de su lado a la opinión pública, ya que todos los sondeos de opinión muestran una oposición muy mayoritaria de los franceses al proyecto (un 61 % según un sondeo que publica hoy el diario económico Les Echos).
A pesar de la presión, la primera ministra, Élisabeth Borne, dejó claro el pasado domingo en una entrevista que las dos medidas estrella de la reforma «no son negociables».
El texto comenzó a estudiarse este lunes en comisión en la Asamblea Nacional, donde los partidos de izquierda y la ultraderecha se oponen, aunque el bloque gubernamental espera recibir el necesario apoyo de los conservadores para sacarlo adelante.
Fuente: https://es.euronews.com/2023/01/31/protestas-y-paros-del-transporte-en-la-huelga-nacional-en-francia-contra-la-reforma-de-las