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El Salvador: Aumentan delitos de violencia en escuelas, según confirmó la ministra de Educación

Por: www.elsalvador.com

Los estudiantes, incluidos niños, están en grave riesgo de ser víctimas de violaciones y otros delitos dentro de su mismo centro escolar.

Un incremento de delitos graves dentro de los centros escolares y sus alrededores se han registrado en los últimos tres meses a nivel nacional, según confirmó la ministra de Educación, Carla de Varela.

Aunque no dio una cifra exacta ni los centros escolares en los que se ha dado, dijo que han tenido casos de violaciones, amenazas, extorsiones y homicidios.

“Nos hemos dado cuenta que la comunidad educativa es víctima de muchas situaciones de violencia, amenazas e inseguridad (y) no es posible que nuestros alumnos y docentes vivan en esta situación de inseguridad”, expresó la ministra.

La funcionaria aseguró que ella, de forma personal, atendió varios casos de violaciones a niños pequeños, los cuales se han dado dentro del mismo centro educativo. A parte, en lo que lleva de fungir en el cargo, han registrado tres homicidios de estudiantes.

En el caso de los delitos de violencia sexual, tampoco dio detalles si los agresores son estudiantes o docentes; sin embargo, ya están en manos de la Fiscalía General de la República (FGR). De esos casos ya existen personas detenidas.

Respecto a los homicidios “los tres han sido en el marco de riñas entre pandillas”, lo que significa que se han dado en centros escolares que se encuentran en zonas de riesgo social.

Otra de las preocupaciones del Ministerio de Educación, dijo la titular, son los casos de suicidio que se han dado de estudiantes, los cuales tienen una diversidad de causas y esperan atenderlos con planes y programas destinados a la seguridad de los alumnos.

Con todos los casos de delitos de violencia que han registrado en los distintos centros escolares a nivel nacional, la cartera de Estado ya está trabajando con la Policía Nacional Civil (PNC), en los que requieren de su intervención, así como otras instituciones que le están dando apoyo especializado a los alumnos y maestros.

Aplicación contra la violencia

El Ministerio de Educación también dio a conocer una nueva herramienta con la que dispondrán los directores y maestro de los centros escolares del país, para atender y denunciar violaciones, extorsiones, homicidios, bullying, robo y hurto en escuelas, expresiones de violencia física y verbal, entre otros.

La aplicación, que se encuentra en la página de la institución, se denomina Sistema de Alerta de Violencia en Educación (Salve). La oficina de recepción estará en las oficinas centrales del Ministerio de Educación.

“Ellos (directores y maestros) de forma inmediata van a poder reportar cualquier anormalidad y amenaza en su centro educativo y alrededores”, aseguró de Varela.

Esta nueva herramienta estará articulada con las recién creadas consejerías escolares, las cuales prestarán el servicio de consejería psicológica, jurídica. La aplicación Salve también se va a articular con la Policía Nacional Civil, quien tendrá un delegado policial.

Cuando se dé un caso en que la PNC tenga que intervenir, se tendrá al delegado policial en la consejería escolar. Este tipo de instancia serán 14, una por departamento.

*Fuente: https://www.elsalvador.com/eldiariodehoy/aumentan-delitos-de-violencia-en-escuelas-segun-educacion/635649/2019/

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Leyes secundarias: 10 puntos problemáticos

Por: Hugo Aboites
La propuesta de leyes secundarias tiene problemas de fondo, como por ejemplo:

1.Devolver al Estado la conducción de la educación se traduce en un desmedido fortalecimiento centralismo gubernamental. Significa cerrar espacios que existen en las entidades, poner en manos de la burocracia prácticamente todo, incluyendo la definición del procedimiento y la decisión de quién será admitido o promovido al servicio (Ley Sistema de Carrera para las Maestras y Maestros, 14). Aunque se contempla la participación del sindicato, sólo puede opinar. (49, IV).

2. Esa ley no integra abiertamente el transitorio 16 del tercero constitucional que establece el 123 como marco de protección de los trabajadores de la educación (118). Y no es casual que entonces la carrera que se supone es de las maestras y maestros más bien sirva para que se amplíen sustancialmente los campos de intervención de las autoridades y se limiten los derechos de los profesores. La ley enumera más de 70 nuevos ámbitos de participación y decisión para autoridades (artículos 15-23) más los 15 destinados a la contratación de nuevos maestros (49) y otros más a las promociones (54). En contraste en la carrera los derechos del maestro son pocos y no lo liberan del papel subordinado que le asignan las leyes (ver 108).

3. Se da prioridad a la contratación de egresadas/os de normales, pero con requisitos que dificultan el acceso: movilidad, cursos extracurriculares, experiencia adicional u otro idioma (LSCM, 49).

4. Se plantea establecer programas de estímulos e incentivos (Carrera Magisterial) que fomentan la diferenciación entre maestros, el interés particular y monetario y el poco aprecio por el trabajo y defensa colectivos (LSCM, artículos 8, VI y 54).

5. Avalancha evaluatoria. Como dichos incentivos se otorgarán a la maestra/o “valorando su contribución… en el aprendizaje de los niños” (LSCM, 8, VI) se vuelve necesaria la evaluación de los niños y niñas, cerca de 15 millones –como en la prueba Enlace– a lo que se agregaría la evaluación diagnóstica a todos los maestros que sería para todos, como la evaluación universal que no pudo imponer Calderón. El Centro para la Mejora Continua de la Educación se convierte, como el INEE, en el gran sujeto y excluyente evaluador (ver Ley del Sistema para la Mejora Continua de la Educación, 6, 17-19).

6. La evaluación parte de la sospecha y en este caso, como en el sexenio pasado, de que no hay suficiente compromiso y trabajo de los maestros. Y por eso se le cargan las responsabilidades. La maestra/o asume ante el Estado y la sociedad la responsabilidad del aprendizaje de los alumnos y, además, es responsable del proceso de enseñanza aprendizaje, promotor, coordinador, facilitador, investigador y agente directo del proceso educativo. Todo. (LSCM, 7, XIII).

7. Obliga a maestros a retomar las finalidades de la educación de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos. Es-pecíficamente el desarrollo socio-emocional y pensamiento crítico, como insumos para ma-yor productividad laboral (OECD, 20-30, Creativity and critical thinking y Resumen Ejecutivo México, 2017, OECD Habilidades socioemocionales). (Ley General de Educación, 18).

8. Se refuerza la presencia de organizaciones civiles-empresariales a través de donativos (Ley General de Educación, 108) y a nivel escuela, municipio, estado y país como integrantes de los Consejos de Participación. Éstos podrán opinar sobre asuntos pedagógicos, conocer los resultados de las evaluaciones, dar seguimiento a las actividades escolares. En suma, supervisar. (LGE, 133 ss).

9. El Centro para la Mejora Continua de la Educación (Ley de Mejora, 17-19) es un INEE recargado con más facultades y amorfo, que excluye la participación formal y orgánica de los actores fundamentales de la educación. A su vez, supervisado por un comité de funcionarios de SHCP, SEP, estados y otros (LMCE, 7-9)

10. No da cabida a proyectos de educación regional que ya funcionan en entidades del país. Estos no son una opinión más de las que prevé la ley (LGE, 23). Tampoco contempla la evaluación a cargo de los colectivos de maestros que ya aceptaba la Ley del Servicio Profesional Docente (15-17) de Peña Nieto!

Es una concepción de la educación ajena a lo que debería ser un ejercicio de democracia, respeto de derechos, participación intensa y decisiva de actores, creadora de conocimiento amplio y emancipador, independiente del poder político y económico, y nacional por ser construida a partir de sus regiones y comunidades. Esta propuesta de algunos diputados de Morena-SEP, está muy lejos de la idea de educación que nace de la larga historia de luchas estudiantiles y magisteriales. De aprobarse dará paso a tantos abusos autoritarios que despertará fuerzas que apenas ayer comprobaron su capacidad de resistencia. La que ya hoy asoma en los relámpagos de Guerrero, Michoacán, Baja California, Chiapas.

A Luis Javier Garrido

*Fuente: https://www.jornada.com.mx/2019/08/31/opinion/020a1pol

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Sudáfrica: Una clase para frenar la epidemia de agresiones sexuales a menores

África/Sudáfrica/29 Agosto 2019/El país

Sudáfrica asiste conmocionada al incremento de la violencia sexual, que afecta como mínimo al 35% de los estudiantes. Un programa escolar trata de atajar la estructura social sobre la que se sustenta

Los alumnos del último curso de secundaria de la escuela Rauwane Sepeng, ubicada en uno de los escasos descansos orográficos que concede el corredor del platino, en el noroeste de Sudáfrica, están calculando la fricción entre dos cubos de cuatro y ocho kilogramos dibujados en la pizarra. Al poco de tocar el timbre, Lydia Ganda deja sus cosas sobre la mesa del profesor. Ella no viene a hablar de física. Ni siquiera de algo que vaya a computar para la media académica. Va a hablar de sexo.

«Antes de iniciar cualquier relación sexual necesitamos consentimiento. Tenemos que preguntar. La respuesta solo puede ser  o No. No hay proceso más correcto que el de preguntar, esperar la respuesta y respetarla», escribe para empezar en la pizarra, donde antes estaban los cubos y las fórmulas matemáticas.

—¿Y si no dice nada, si se queda en silencio? Hay que darle tiempo, se responde Lydia a sí misma.

—A lo mejor quiere decir que sí, interviene un chico sentado en medio de la clase. Es el primero que se aviene a hablar. Su compañera de atrás le da una colleja al escuchar su respuesta. Los demás ríen.

Exacto. El silencio no es consentimiento. Ningún silencio es aceptable. Solo un sí es aceptable, repite Lydia.

Hay más alumnos que quieren participar.

—Muchos chicos piensan que si nos invitan a salir a cenar fuera quiere decir que les tenemos que dar algo a cambio.

¿Acaso no es así?, bromea, o quizá no tanto, otro de los chicos. Es alto y muy delgado. Parece mayor que los demás. Varias alumnas a su alrededor le increpan, tampoco demasiado en serio.

—¿Cómo va a ser así?

—Lo que dices, —vuelve a contestar la trabajadora comunitaria del programa de educación sexual puesto en marcha por Médicos sin Fronteras en Rustenburg—, no deja de ser una coerción, aunque sea psicológica. Porque la coerción no es solo física, la que deja moretones, si también moral, la que no se ve.

—¿Y si yo solo quiero hacer hasta un punto? ¿O si de pronto aparece alguien?

Un sí es solo sí hasta aquí y hoy. No es un permiso para hacer lo que queramos cuando queramos. Tenemos que preguntar a nuestra pareja lo que quiere hacer en cada momento, porque igual solo quiere ir de la mano; o al centro comercial por si aparecen sus padres; o puede que quiera cierta intimidad sexual. Lo importante es que preguntéis y respetéis lo que quiera la otra persona, insiste Lydia. Está hablando para chicos de entre 16 y 18 años.

¿Y si ella piensa que voy muy despacio?, pregunta un chico.

—Lo que tienes es que pedir permiso para pasar a la siguiente fase.

—¿Y si acordamos algo por WhatsApp, pero luego me arrepiento?

Las preguntas fluyen una detrás de otra. Les interesa más que la clase de física

—Siempre vas a tener la posibilidad de echarte para atrás. O de decir sí a la intimidad sexual, pero no a la penetración.

—Pero si decimos que no, después nos van a hacer sentir culpables. O, por ejemplo, si vamos a casa de un chico entiende que vamos a tener sexo.

—Pero no tenéis que hacerlo. Siempre, en cualquier circunstancia tenéis derecho a parar. Si una chica dice “para” —habla ahora para los chicos de la clase— tenéis que parar.

—Y de esto, de sexo, ¿habláis con vuestros padres?

La clase se vuelve a alterar. En el grupito de chicas que ocupa los pupitres junto a la puerta se atropellan unas a otras al hablar. «Con los míos no, cada vez que se menciona algo relacionado con el sexo se vuelven locos». «La mía —dice otra— si se entera empieza a tirar cosas. Amenaza con la zapatilla».

Mientras termina de reír, la primera de las jóvenes, la más menuda de todas, vuelve a tomar la palabra: «Lo importante es que no vamos a ser como nuestros padres. Ellos entienden el sexo de otra manera, pero nosotras cuando seamos adultas vamos a hacerlo de otra forma. Vamos a ser madres más abiertas».

Lydia, que lleva desde 2015 recorriendo una veintena de escuelas de esta región minera de Sudáfrica, no esconde una sonrisa de satisfacción. Una sonrisa que es una pequeña victoria.

«Pase lo que pase, chicas, no os debéis sentir jamás culpables. Acudid al médico o a nosotros para prevenir cualquier enfermedad. Porque sabéis las consecuencias de tener conductas sexuales de riesgo, ¿verdad? No solo que podéis contraer una enfermedad sexual o VIH, sino que también os podéis quedar embarazadas. ¿Sabéis lo que eso supone? Eso también va por vosotros, chicos».

Sus palabras las animan a no tener miedo a informarse en una sociedad en la que estos temas continúan siendo tabú, pero en la que los jóvenes quieren saber y hablar. En un informe realizado por Unicef en 2017, los investigadores concluyeron, por ejemplo, que el 84% de los jóvenes encuestados quería obtener información sobre obtener salud sexual mediante sus teléfonos móviles, si era gratis. No obstante, expresaron dudas sobre si preferirían comunicarse directamente con un profesional por mensaje de texto o llamada de voz. Algunos estaban a favor del anonimato de hablar con un extraño.

Violencia sexual contra menores

En octubre de 2017, la sociedad sudafricana asistía consternada al escándalo por los supuestos abusos sexuales cometidos por un guardia de seguridad en una escuela primaria de Soweto, el histórico barrio al oeste de Johannesburgo. Hasta 87 estudiantes denunciaron haber sido agredidas, incluidas varias violaciones. Un año después, el acusado fue absuelto después de que la Corte Suprema de South Gauteng calificase de burda la cadena de errores cometidos durante la investigación policial.

“Se está produciendo un ataque a gran escala contra la infancia en Sudáfrica. Hay un gran problema en el sistema educativo, familias rotas, niños que crecen huérfanos a consecuencia de la epidemia del VIH y que no reciben la educación que necesitan porque sus padres tampoco la tuvieron… Pero también existe un problema con una policía mal pagada, profesionales sanitarios sin la preparación adecuada y un sistema judicial colapsado. Al final, los niños, que son los más vulnerables, son los que sufren las consecuencias”, resume Christina Rollin, una de las mayores expertas de un país en plena emergencia contra la violencia sexual a menores.

Un estudio publicado por The Lancet alerta de que uno de cada tres estudiantes sudafricanos ha sufrido algún tipo de agresión sexual en su vida y el propio Gobierno reconoció en el Parlamento que hasta el 9,1% de las violaciones denunciadas en el país —ya de por sí con una de las tasas más elevadas del mundo, 70,5 por cada 100.000 habitantes— correspondían a niños de nueve años o menos. Casi siempre, hasta en un 80% de los casos, los responsables son personas cercanas.

Lydia, que lleva desde 2015 recorriendo una veintena de escuelas de esta región minera de Sudáfrica, no esconde una sonrisa de satisfacción. Una sonrisa que es una pequeña victoria.

«Pase lo que pase, chicas, no os debéis sentir jamás culpables. Acudid al médico o a nosotros para prevenir cualquier enfermedad. Porque sabéis las consecuencias de tener conductas sexuales de riesgo, ¿verdad? No solo que podéis contraer una enfermedad sexual o VIH, sino que también os podéis quedar embarazadas. ¿Sabéis lo que eso supone? Eso también va por vosotros, chicos».

Sus palabras las animan a no tener miedo a informarse en una sociedad en la que estos temas continúan siendo tabú, pero en la que los jóvenes quieren saber y hablar. En un informe realizado por Unicef en 2017, los investigadores concluyeron, por ejemplo, que el 84% de los jóvenes encuestados quería obtener información sobre obtener salud sexual mediante sus teléfonos móviles, si era gratis. No obstante, expresaron dudas sobre si preferirían comunicarse directamente con un profesional por mensaje de texto o llamada de voz. Algunos estaban a favor del anonimato de hablar con un extraño.

Violencia sexual contra menores

En octubre de 2017, la sociedad sudafricana asistía consternada al escándalo por los supuestos abusos sexuales cometidos por un guardia de seguridad en una escuela primaria de Soweto, el histórico barrio al oeste de Johannesburgo. Hasta 87 estudiantes denunciaron haber sido agredidas, incluidas varias violaciones. Un año después, el acusado fue absuelto después de que la Corte Suprema de South Gauteng calificase de burda la cadena de errores cometidos durante la investigación policial.

“Se está produciendo un ataque a gran escala contra la infancia en Sudáfrica. Hay un gran problema en el sistema educativo, familias rotas, niños que crecen huérfanos a consecuencia de la epidemia del VIH y que no reciben la educación que necesitan porque sus padres tampoco la tuvieron… Pero también existe un problema con una policía mal pagada, profesionales sanitarios sin la preparación adecuada y un sistema judicial colapsado. Al final, los niños, que son los más vulnerables, son los que sufren las consecuencias”, resume Christina Rollin, una de las mayores expertas de un país en plena emergencia contra la violencia sexual a menores.

Un estudio publicado por The Lancet alerta de que uno de cada tres estudiantes sudafricanos ha sufrido algún tipo de agresión sexual en su vida y el propio Gobierno reconoció en el Parlamento que hasta el 9,1% de las violaciones denunciadas en el país —ya de por sí con una de las tasas más elevadas del mundo, 70,5 por cada 100.000 habitantes— correspondían a niños de nueve años o menos. Casi siempre, hasta en un 80% de los casos, los responsables son personas cercanas.

“En nuestras charlas tenemos que explicarles lo que es normal y lo que no lo es porque muchos menores crecen en entornos sexualizados en los que algunas acciones están implícitas. Crecen viendo a sus tíos u otros familiares tocándolas y pasando sus manos por su cuerpo”, señala Lydia. “Esto”, añade Rollin, “hace que normalicen la situación y los casos de abusos prolongados se alarguen en el tiempo. ¿Quién va a ir a preguntar a otra casa cómo se lavan los dientes si en la tuya siempre se ha hecho así?”.

Esta normalización es lo que más preocupa a los expertos como Christina Rollin. “Cuando la sociedad asume que cada caso”, como la agresión a una joven en un restaurante la capital o la de un niña huérfana de 14 años en la escuela secundaria de Aha-Thuto el pasado junio, “es solo otro caso. Otra violación más”. Es ahí donde anidan las estructuras que sustentan la violencia sexual.

La primera, la de los propios menores, también chicos. “Hay una reacción física en el hombre que hace que, aunque sea agredido, su cuerpo reaccione, lo que provoca que muchos cuestionen su identidad sexual y se culpen a sí mismos por haber disfrutado”. Asumen los abusos como un marco aceptable de comportamiento y lo transmiten al formar su propia familia: “Padres que son padres sin haber aprendido a serlo, sin haber recibido ejemplos adecuados y que vuelcan en sus hijos sus propios problemas (…) Madres, continúa Rollin, que se niegan a creer que esa violencia esté ocurriendo en su casa”.

La segunda, la del propio Estado que esconde el problema para no tener que enfrentarse a su propio espejo. Teniendo en cuenta que apenas uno de cada nueve casos son denunciadosextrapolaciones de investigadores de la Universidad de Ciudad del Cabo elevan la cifra de abusos por encima del 35% del alumnado.

“Muchas mujeres prefieren no denunciar por temor a quedarse sin fuentes de ingresos para ellos y para sus hijos; y por miedo a ser discriminadas por otras mujeres de la comunidad. No debería ser así, las mujeres deberíamos ayudarnos unas a otras, pero la realidad es que todavía son señaladas si denuncian”, apunta Jennifer, la consultora psicológica del centro de salud de Rustenburg. “Que si no vestía de forma adecuada, que si en realidad fue ella la que tentó al hombre”, traduce Lydia.

La tercera estructura, la judicial, también alimenta impunidad. Entre un 40% y un 60% de los casos denunciados son retirados antes de llegar a la Corte y cuando lo hacen suele haber pasado tanto tiempo que se han perdido testigos, pruebas o la propia vida de las víctimas. “Muchas mujeres viven con miedo mientras se instruye el caso porque las amenazan o las agreden de nuevo”, confirma Jennifer.

La justicia va con retraso y al Gobierno no le molesta. Un estudio de Médicos Sin Fronteras (MSF) —que colaboró con la logística para este reportaje— reveló que el 20% de los centros de atención a víctimas de violencia sexual, incluidos los famosos Thuthuzela Care Centers, carecían de medios para realizar pruebas clínicas forenses. “Y un centro incapaz de realizar esos exámenes y de cumplimentar los formularios necesarios”, señalan los investigadores, “obstaculiza la capacidad de los supervivientes para denunciar su caso”.

Al tiempo, cada vez hay menos enfermeras especializadas, tentadas por sueldos más altos en el golfo Pérsico; y muchos médicos evitan involucrarse, en ocasiones por miedo a los perpetradores, en otras por simple hastío en casos de violencia sexual. “Emiten informes diciendo que no habido agresión para no tener que testificar”, asegura Rollin, quien ha participado en más de 300 juicios. Por su clínica Sexual Assault Clinic, a las afueras de Johannesburgo, pasan al mes una docena de casos de víctimas de violencia sexual. “El propio sistema judicial acaba por revictimizarlas al hacerles revivir el trauma hasta cuatro años después de haber ocurrido”.

Tesultado de esta estructura social de abusos normalizados e impunidad judicial es, en palabras de Rollin, una “generación de jóvenes enfadados” que reproducen los modelos de comportamiento en los que son criados. De ahí que en clase de decimosegundo grado haya chicos que entiendan que tienen derecho a tener sexo con una chica solo por invitarla a cenar.

Abusos, enfermedades y embarazos no deseados

Afuera del despacho de atención psicológica hay más sillas vacías que ocupadas. Un grupo de jóvenes trabajadoras del centro de salud aprovechan su descanso matutino para charlar. Ahora están debatiendo acaloradamente sobre el novio que le conviene a una de ellas: “Mi hermana me dice que no salga con un hombre que no tiene coche”.

La llegada de Helena (nombre ficticio para proteger su identidad) interrumpe la conversación. El examen médico no ha encontrado síntomas de agresión, pero sí una enfermedad de transmisión sexual. “Que no se haya detectado nada no quiere decir que no haya habido una agresión. Aquí las fronteras de la coerción son muy finas”, subraya Lydia una vez cerrada la puerta de la consulta. “Por eso vamos a hacer seguimiento de su caso. Va a tener reuniones periódicas con nuestro equipo de trabajadoras comunitarias y con la enfermera. Es con ella con quien suelen sincerarse. Empiezan a hablar y a contarles lo que ha sucedido. Es entonces cuando muchas veces se dan cuenta de que han sufrido una agresión sexual”.

Helena, alumna de la escuela Rauwane Sepeng, fue la única que, tras la charla en el colegio, se acercó a las trabajadoras comunitarias de MSF. Hay días que lo hacen pequeños grupos de jóvenes, casi siempre chicas, y otros en los que no acude nadie. Pero el programa sigue en marcha porque la violencia de género tiene un efecto social devastador: embarazos no deseados en menores, estrés postraumático, enfermedades de transmisión sexual. Hasta el 16% de las infecciones por VIH en mujeres podrían evitarse poniendo freno a la violencia de género. Incluso económicamente es un suicidio para el país, que pierde a causa de la misma entre el 0,9 y el 1,3% de su PIB.

En Rustenburg, uno de esos rincones de Sudáfrica donde impera la violencia como fórmula para la supervivencia, nadie espera que las agresiones sexuales vayan a ser cosa del pasado. No al menos hasta que los estudiantes de Rauwane Sepeng hayan educado a sus hijos en ese otro habitus de las relaciones que están aprendiendo. Mientras, Lydia Ganda tendrá que seguir yendo a sus clases a hablar de lo que es Sí y de lo que es No. Y a recordarle a Helena que tiene que tomar la pastilla que le recetó el médico todos los días. “Todos los días. Acuérdate de que es todos los días”.

Fuente: https://elpais.com/elpais/2019/08/12/planeta_futuro/1565622828_385287.html

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Venezuela: Gremios rechazan nuevas tablas salariales impuestas por el Ministerio de Educación Universitaria

Por: Mónica Salazar/cronica.uno

De estafa califica el personal administrativo, profesional y docentes universitarios las nuevas tablas salariales presentadas al sector, por parte del Ministerio de Educación Universitaria. En Sucre los representantes gremiales y sindicales advierten que estos «ajustes» solo provocará un mayor éxodo del personal universitario ante la imposibilidad de cubrir sus necesidades básicas.

Cumaná. «Hasta la fecha, el Ministerio de Educación Universitaria ha mantenido una política de desprecio para con el sector técnico y profesional de las universidades», indicó la economista Reina Gedeón, secretaria general del sindicato que agrupa al sector profesional de la Universidad de Oriente (Aspudo) al ser consultada sobre las nuevas tablas salariales para el sector universitario impuestas desde este mes.

«No hay una explicación técnica que soporte la diferencia de la interescala salarial que presenta el ministerio. En esas nuevas tablas, la interescala del sector técnico y profesional es menor al sector obrero y mucho más al sector docente», advirtió.

Gedeón reveló que en el caso del sector administrativo «se pretende bajar el aumento de 7 % logrado en primera y segunda discusión de la convención colectiva única (CCU), así como el 5,1 % en la tercera CCU a 4 %. Queda en evidencia la intención de hacer desaparecer cualquier estímulo para el profesionalismo necesario dentro de las instituciones universitarias«.

En el caso de los aspudistas, cuenta que desde 2013 se vulneran los derechos adquiridos en sus luchas reivindicativas.

«En 2013 el Gobierno hizo su primera jugada contra los aspudistas, al desconocer el sistema de carrera que gozaba de 35 años de vigencia sindical. Eso nos obligó a tomar acciones jurídicas para salvaguardar los derechos de los trabajadores».

La dirigente sindical subrayó: «Desde ese mismo momento denunciamos y alertamos que esta violación a nuestros derechos sería el principio del ataque no solo contra el sector administrativo, sino contra todos los trabajadores universitarios».

Aseguró que el cálculo de los ajustes salariales afectará a aproximadamente 700 aspudistas agremiados entre todos los cinco núcleos universitarios de la Universidad de Oriente.

Por lo tanto, afirmó que Aspudo se mantiene en resistencia y defensa de los derechos laborales, a pesar de la arremetida constante en detrimento del sector.

«Ya la diáspora que arropa al sector universitario es consecuencia del maltrato y las terribles políticas discriminatorias emanadas del sector oficial, desde donde ha sido sistemático el ataque a las universidades», apuntó.

tablas salariales
Gremios universitarios advierten que nuevas tablas salariales ocasionarán más deserciones.Foto: Mónica Salazar.
En situación de mendicidad

Entre tanto para la comunidad universitaria del Instituto Universitario Territorial Clodosbaldo Russián, antiguo Instituto Tecnológico de Cumaná (IUT-Cumaná), este instructivo que pretende aplicar la cartera ministerial solo intensificaría el estado de mendicidad en el que se encuentra el personal activo y jubilado universitario.

Tal afirmación corresponde al secretario general del Sindicato de Profesionales del IUT Cumaná, Siproiutcum, ingeniero Adón Díaz. «Esta precariedad en la que viven los trabajadores profesionales provocó el rechazo contundente a la escala intersalarial que pretenden imponer tras la salida del ex ministro Hubert Roa».

Díaz responsabilizó de esta estafa al sector universitario al ex ministro y a “’los pseudos” dirigentes gremiales y federativos de la FTUV, Orlando Zambrano, Carlos López, Telémaco Figueroa y Luis Brito.

«En la tozudez de sus acciones estos personeros afectos al oficialismo solo buscan quebrantar al personal universitario en sus justos reclamos reivindicativos», subrayó.

Insistió en señalar que estas nuevas tablas salariales «son una flagrante violación a los derechos contractuales contemplados en la Constitución así como para la labor docente».

Asimismo, advirtió que «desde 2012 le fueron conculcados los beneficios de las normas de homologación, un derecho adquirido que no podía ser arrasado por el ministerio».

En el rechazo público que hace el sector de docentes activos y jubilados del IUT Cumaná sostienen: «Este desgobierno ha traicionado el salario y la dignidad de los docentes que hoy día se encuentra en situación de mendicidad, dada la merma significativa del poder adquisitivo de sus sueldos».

Para ellos esto ha sido un «madrugonazo que atropella” a los profesionales universitarios justo cuando entran en el periodo vacacional. “Unas vacaciones que se han venido prolongando dado el cierre técnico que presenta el IUT ante la migración de casi 50 % de su profesorado y una deserción estudiantil que llega a 70 %».

Sin embargo, asegura que no abandonarán la lucha y seguirán elevando su voz «porque la academia no se doblega».

Ajustes de distorsión 

Para la Federación Nacional de Sindicatos de Profesionales y Técnicos de las Universidades Venezolana este anuncio por parte del Ministerio de Educación Universitaria ha sido otro zarpazo a los derechos y dignidad de los trabajadores universitarios.

En comunicado público esta Federación, que agrupa los sindicatos de Aspudo (UDO), Siproluz (LUZ), Apufat (UCV), Siptotupel (UPEL), Siprusir (Simón Rodríguez) y Siptula (ULA), califica de «ultrasecretas» las reuniones en las cuales «deciden traicionar las luchas reivindicativas que viene dando el sector universitario. Desconocen la participación de federaciones legítimas y representativas de la mayoría de las universidades que luchan por la mejora y cumplimiento de los compromisos contractuales de los trabajadores».

En este manifiesto público sostiene que la decisión unilateral del Ministerio de Educación Universitaria «desconoce la aplicación de porcentajes interescalas alcanzados en las luchas sindicales».

Esta pretensión del despacho ministerial busca eliminar los derechos laborales fundamentales adquiridos, progresivos e imprescriptible de la convención colectiva única del sector universitario que debe garantizar a los trabajadores los beneficios socioeconómicos y un salario digno como lo establece la Constitución”, expone el manifiesto.

El presidente de esta federación, abogado Dionis Dávila, afirmó: «Ese ajuste de distorsión en las tablas desmejora la interescala del sector administrativo y profesional de una manera que se afecta en más de tres puntos porcentuales directos de disminución. Este acuerdo queda con una interescala de 9 % y 7 % en obreros; 4 % en administrativos y 18 % y 13 % en profesores”.

*Fuente:http://cronica.uno/gremios-rechazan-nuevas-tablas-salariales-impuestas-por-el-ministerio-de-educacion-universitaria/

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Entrevista a Sonia Guajajara: “No es posible la dignidad sin tierra”

Entrevista/22 Agosto 2019/Autora: María Pitarch/El país

La activista en defensa del Amazonas destaca en su visita a España que la lucha ambiental y la indígena “no pueden separarse”

Sonia Guajajara (Maranhão, 1974) es uno de los rostros visibles de la lucha mundial por el medio ambiente y líder de la resistencia pacífica a los planes que el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, tiene en la Amazonia y que ponen en peligro la vida de los pueblos que habitan este pulmón verde. Es la primera mujer indígena que ha optado a la vicepresidenta del Ejecutivo brasileño (en la lista encabezada por Guilherme Boulos, del izquierdista Partido Socialismo y Libertad) y el motor que ha estado tras el último campamento Tierra Libre celebrado en abril, que reúne cada año a los 800.000 indígenas de 225 tribus que habitan casi el 14% del territorio de Brasil. Un encuentro que clamó, esta vez, contra el decreto que transfiere al Ministerio de Agricultura la demarcación de tierras, competencia hasta la fecha de la Fundación Nacional del Indio.

Formada en Letras, Enfermería y Educación Especial en la Universidad Estatal de Maranhão, Guajajara llega a Benicàssim (Castellón) tras la primera manifestación de mujeres indígenas que han recorrido Brasilia para alzar su voz contra las políticas del ultraderechista Bolsonaro. Lo hace para participar en el debate Tierra y Dignidad del Foro Social del festival internacional Rototom Sunsplash, que acoge la localidad castellonense hasta hoy.

Pregunta. Su ponencia en Rototom Sunsplash lleva por título Tierra y Dignidad. ¿No hay dignidad sin tierra?

Respuesta. No es posible la dignidad sin tierra. La tierra es determinante. Para que sea posible otra política educativa, cultural y social es necesaria esa garantía de acceso a la tierra.

P. ¿Cómo se está manifestando la presión ambiental, social y cultural del ejecutivo Bolsonaro sobre la población indígena?

R. El primer impacto de la política Bolsonaro fue extinguir el Ministerio de Derechos Humanos y de Cultura, y colocar al frente de Medio Ambiente a una persona totalmente favorable a los agronegocios. Fue entonces, desde enero, cuando los pueblos indígenas empezamos a movilizarnos. Lo llamamos el enero rojo, por el genocidio de los pueblos indígenas, por la resistencia. La lucha ambiental y la indígena no pueden separarse. Es una lucha única. Estamos trabajando con parlamentarios para frenar esas medidas que están acabando con las leyes ambientales.

P. ¿Cuál es la principal amenaza para la Amazonia en este momento?

R. La deforestación, los incendios forestales y los macroproyectos autorizados por el Gobierno que abren paso a los grandes cultivos, a las explotaciones a gran escala, como las de soja, caña de azúcar o eucalipto, junto a la explotación minera.

P. ¿Qué es la Amazonia para los pueblos indígenas?

R. Vida (sonríe).

P. Tiene voz en el Consejo General de Derechos Humanos de la ONU y ha llevado sus denuncias a las Conferencias Mundiales por el Clima y al Parlamento Europeo. ¿Su batalla va más allá del plano medioambiental?

R. Reivindico el respeto a los derechos sociales, ambientales y a las culturas. Precisamente, nuestra cultura es la garante de esta relación con el medio ambiente, con la madre naturaleza. Es lo que garantiza la ciudadanía plena de los pueblos indígenas.

P. ¿Cómo es el Brasil de Bolsonaro?

R. Ningún Gobierno ha visto como prioritarios los derechos de los pueblos indígenas, pero con Bolsonaro la situación se agrava mucho más. Tiene intereses en negocios propios que alientan la destrucción del medio ambiente. Es un momento muy grave. Si esto se prolonga durante mucho tiempo no solo Brasil se verá perjudicado sino todo el planeta, porque si se destruye la Amazonia todos los pueblos se verán afectados. No es solo luchar por la Amazonia, es hacerlo contra el fascismo. Es una responsabilidad de todas las personas.

P. Está recién llegada de la protesta de activistas ambientales en Brasil. Más de 2.500 mujeres unidas bajo el lema Nuestro territorio, nuestro cuerpo, nuestro espíritu. ¿Qué ha supuesto?

R. Hemos logrado un fortalecimiento de la lucha de las mujeres, un empoderamiento. Dar visibilidad a esta conciencia política y ecológica. Todas ellas han reaccionado de manera muy fuerte y directa ante esta política genocida del Gobierno Bolsonaro.

P. Berta Cáceres. Olivia Arévalo. Son dos de las activistas que han pagado con su vida su compromiso en defensa de la tierra. ¿Se siente amenazada? ¿Teme por su seguridad?

R. Todas las personas que hoy hacemos esta lucha en defensa de la Madre Tierra estamos en peligro. Sobre todo, si esta voz tiene fuerza en todo el mundo, estamos en el punto de mira. Se pone el ojo en quienes lideran este movimiento. Pero no he tenido una amenaza directa. Los propios discursos del Gobierno ponen a la sociedad en nuestra contra. Incitan a la violencia. Es como si la sociedad tuviera el respaldo del Gobierno para practicar actos de violencia contra todas las personas que estamos en esta causa.

P. Mujer e indígena. ¿Qué pluses aporta este binomio a su defensa por la Tierra?

R. Las mujeres del mundo entero están protagonizando muchos frentes de lucha. Las mujeres indígenas nos sentimos en el compromiso de unir a todas las del resto del mundo.

P. ¿Qué le inspira el ecofeminismo?

R. (Sonríe). Es luchar en defensa de la vida. Del agua, de los bosques y de todos los bienes comunes que están amenazados. La mujer tiene mucha más sensibilidad y capacidad de darse cuenta de que es una batalla urgente.

P. ¿Quedan muchos prejuicios por derribar sobre los pueblos indígenas?

R. La gente nos ve como salvajes. Somos personas que luchamos, que plantamos cara a los conflictos y que tenemos una relación de respeto hacia el medio ambiente muy diferente. Necesitamos que nuestros derechos sean garantizados. También nuestro modo de vida, tanto por parte de las sociedades como de los Gobiernos.

P. En este festival ha trasladado historias del Amazonas a los más pequeños en una sesión de cuentacuentos. ¿Hay futuro para el planeta?

R. Es necesario invertir en educación, en la formación de la infancia para que crezca con otro pensamiento, para crear esa conciencia ecológica y política y entender que con este modelo actual basado en la destrucción esto se acaba.

Fuente e imagen: https://elpais.com/sociedad/2019/08/20/actualidad/1566321378_818654.html

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China promete medidas severas contra alteración de orden escolar

Asia/China/22 Agosto 2019/Spanish.xinhua

Las autoridades chinas prometieron tomar severas medidas contra los actos que alteren el orden escolar, y solucionar las disputas por accidentes escolares conforme a la ley, de acuerdo con una directriz publicada hoy.

Tales actos incluyen atacar a personas, dañar de forma intencionada propiedades públicas, colocar pancartas en los campus, bloquear puertas de escuelas y acosar a funcionarios escolares, según la directriz emitida por cinco departamentos, incluyendo el Ministerio de Educación, el Tribunal Popular Supremo y el Ministerio de Seguridad Pública.

Estos actos podrían ser realizados por familiares de los estudiantes en disputas por accidentes relacionados con la escuela, con frecuencia para forzar a las escuelas a pagar compensaciones.

«Los actos que alteran el orden escolar han sometido a una indebida presión a las escuelas, las cuales podrían de ahí en adelante abstenerse de la educación física normal, las actividades extracurriculares y la evaluación de los estudiantes», dijo Deng Chuanhuai, director del Departamento de Políticas y Reglamentos del Ministerio de Educación.

Esto ha afectado la calidad de la educación y el entorno educativo y se debe resolver con mayores esfuerzos, añadió.

Fuente: http://spanish.xinhuanet.com/2019-08/21/c_138324410.htm

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Perú se prepara para la marcha ‘Ni una Menos’ con la mayor cifra histórica de feminicidios

América del Sur/ Perú/ 18.08.2019/ Fuente: /www.publico.es.

La marcha ‘Ni Una Menos’, la mayor manifestación contra la violencia de género en el país, se celebrará este sábado en Perú, con el lastre de haber alcanzado la mayor cifra histórica de feminicidios en los primeros siete meses del año.

Perú celebrará este sábado la marcha Ni Una Menos, la mayor manifestación contra la violencia de género en el país, con el lastre de haber alcanzado la mayor cifra histórica de feminicidios en los primeros siete meses del año.

El Ministerio de la Mujer de Perú contabiliza cien feminicidios cometidos en lo que va de año en el país, una cifra que, según señaló a Efe la abogada Lisbeth Guillén, representante de la ONG feminista Manuela Ramos, «desbarata, lamentablemente, la meta que tenía el Plan de Acción Conjunta de lograr reducir los feminicidios este año a menos de 100 casos«.

Para Guillén, la amplia diferencia entre la realidad y el objetivo, revela que los esfuerzos desde el Estado, no están siendo suficientes y que «se requiere de otro tipo de acciones, con medios de comunicación, sociedad, para revertir la violencia extrema de los feminicidios».

Según la estadística que recoge el Ministerio de la Mujer desde el 2009, año en que se instauran las primeras políticas públicas para prevenir la violencia de género en Perú, de enero a julio de este año hubo un 21,9% más de feminicidios que en 2018 y un 40,8% más que en 2017.

Una coyuntura que, pese a los avances logrados desde agosto de 2016 cuando se realizó la primera y multitudinaria marcha Ni Una Menos en el céntrico parque Campo de Marte, enfrenta al país con el drama de su machismo estructural, que en 2018 se cobró la vida de 149 mujeres.

Las posibles causas: «el mayor empoderamiento de las mujeres, un ejercicio de autonomía y libertad»

Para la abogada, no existe una sola explicación al aumento de la cifra, aunque señaló entre ellas a «el mayor empoderamiento de las mujeres, un ejercicio de autonomía y libertad al que el patriarcado responde con violencia extrema». Por ello, precisó que ahora se hace más urgente «concretar la igualdad de género en las políticas educativas, para que se eduque con respeto a las diferencias y con derechos».

Los colectivos han realizado avances importantes

Enorme tarea por la que luchan desde diversos ámbitos los movimientos y colectivos feministas que en los últimos años también han alcanzado avances e hitos importantes, «aún en un contexto donde sectores conservadores rechazan la igualdad de género en políticas públicas de Educación».

Entre estos hitos importantes, Guillén resaltó que ahora existe un poco más de «conciencia de rechazo a la violencia en la ciudadanía y un poco más de solidaridad».

Además de otros logros relevantes alcanzados este 2019, como el de la abogada y activista Arlette Contreras, quien tras cerca de cuatro años de lucha en el Poder Judicial consiguió que su agresor y expareja Adriano Pozo fuera condenado por tentativa de feminicidio, aunque no por tentativa de violación sexual.

El caso de Contreras «es muy importante porque genera el mensaje de que no podemos dejar pasar estas situaciones de agresión»

Precisamente el caso de Contreras se convirtió en el símbolo de la primera marcha Ni Una Menos Perú, llevada a cabo en agosto de 2016, ante la indignación de que en julio de 2016 la Corte Superior de Justicia de Ayacucho sentenció a Pozo a un año de prisión suspendida por el delito de lesiones leves. «Consideramos que es un hecho muy importante porque genera hacia la ciudadanía el mensaje de que no podemos dejar pasar estas situaciones de agresión», apuntó la abogada.

Otros logro obtenido este año para Guillén ha sido el de la aprobación en el Congreso del dictamen de paridad y alternancia planteado por el Ejecutivo, el mismo que fue impulsado por los movimientos feministas con el apoyo de congresistas aliadas.

«En la próxima elección se aplicará que como mínimo esté conformada por el 40% de mujeres, en las siguientes elecciones por un mínimo de 45% y luego en un 50%», apuntó Guillén.

A este recuento de avances se suman los gestos y proyectos dados desde el Gobierno de Martín Vizcarra, como el Gabinete paritario conformado en marzo pasado, así como el anuncio de un programa inicial de atención a niños y niñas cuyas madres fueron víctimas de los feminicidio para garantizar su derecho a la educación.

Fuente de la noticia: https://www.publico.es/internacional/violencia-machsista-peru-prepara-marcha-mayor-cifra-historica-feminicidios.html

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