Entre las escuelas atacadas en las últimas semanas en la región del suroeste de Camerún hay también una escuela católica. Los días 8 y 11 de febrero, grupos armados incendiaron dos escuelas, respectivamente la escuela primaria pública de Molyko, en Buea, y el colegio católico Reina del Rosario, en Mamfe. Estos dos incidentes son los últimos de una serie de ataques contra estudiantes, personal educativo y locales escolares, que han privado a más de 700.000 estudiantes de su derecho a una educación adecuada y segura en las regiones del noroeste y suroeste.
Las regiones anglófonas del noroeste y suroeste de Camerún llevan cinco años de conflicto para separarse del resto del país, de mayoría francófona, y formar una nueva nación llamada Ambazonia. Las dos regiones pertenecen a la provincia eclesiástica de Bamenda, cuyos obispos, en un comunicado emitido la semana pasada, constataron “con profundo dolor y pesar el deterioro de la situación sociopolítica que se está produciendo desde hace tiempo en las regiones del Noroeste y del Suroeste”.
Los obispos expresaron su “solidaridad con los que sufren, los oprimidos, los desplazados y los refugiados” y afirmaron que seguirían “condenando los métodos violentos para resolver las disputas, porque la violencia suele conducir a un mayor sufrimiento y los que toman la espada perecerán por la espada”. Los obispos dijeron que comparten “los dolores y las angustias, las alegrías y las esperanzas de su pueblo” e invocaron a “Nuestra Señora de Lourdes, para que interceda por todos nuestros hermanos enfermos y por todos nosotros en la búsqueda de una justicia y una paz duraderas”.
Al menos 4.000 personas han muerto en el conflicto y más de un millón se han visto obligadas a huir de sus hogares, según estimaciones de la ONU. Entre los desplazados, el 54% son mujeres y los niños constituyen el 60% del total de la población desplazada, mientras que los ancianos representan el 10% del total.
Fuente: http://www.fides.org/es/news/71691-AFRICA_CAMERUN_Estudiantes_y_escuelas_en_la_mirilla_en_las_regiones_separatistas_anglofonas